Revista Ingeniería y construcción -1924 - Octubre

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tentadores no influye en ninguna forma sobre la marcha normal de la máquina o el funcionamiento del vibrador mecánico, y toda la instalación se ha realizado sin más modificación en la máquina que la perforación y roscado de pequeños agujeros para sujetar los angulares. La máquina funciona con modelos-de 406 x 280 X 51 milímetros. Cada una de ellas lleva dos calentadores de 3,20 milímetros de largo, 57 milímetros de ancho y 6,3 milímetros de grueso. Su capacidad total es de 300 vatios a 110 voltios. El calentador se une a la toma ele corriente por meclio de un flexible y un enchufe ordinario. Creemos inútil insistir sobre la sencillez, conveniencia y limpieza ele este método de caldeo de modelos metálicos. El coste de la operación varía según las circunstancias, tales como tamaño de los modelos, número' de moldes fabricados por hora y el precio de la energía; pero

WORLD POWER

el coste de la operación es una cosa muy pequeña si se le compara con las ventajas del método. Como resultado de las experiencias actuales, de las que tenemos datos concretos, podemos asegurar .que el caldeo eléctrico de los modelos es realmente más barato" que los métodos empleados anteriormente. Por último , creemos interesante hacer notar que también se tropieza con dificultades, debidas a la adherencia del material a las estampas y a los émbolos de las pren sas, en la fabricación de ladrillos refractarlos y algunos -productos cerámicos. El remedio de esta dificultad, cuyo origen es análogo al de la adherencia de la arena a los moldes metálicos, consiste en la aplicación del calor. Hasta hace poco se ha .utilizado vapor para la aplicación del calor; pero recientemente, y con buen éxito, se ha acudido a los calentadores eléctricos en una forma análoga a la que hemos expuesto para los talleres cié fundición.

CONFERENCE

Primera reunión en Londres de la Conferencia Internacional de Energía Por

CARLOS

E.

MONTAÑÉS,

Del 28 de jimio último al 12 de julio se celebró en Londres la primera Conferencia Internacional de Energía, tratándose en ella de todo, cuanto a «producción» y «distribución de energía» concierne,, y lógicamente, dada su importancia, el tema quedó condensado a la «producción» y «distribución de energía eléctrica», tratándose, dentro y alrededor de ese campo, de toda clase de perfeccionamientos y nuevas concepciones y aplicaciones de ellas a motores hidráulicos, de vapor, de combustión interna, explosión, viento, etc.; de'sus respectivos rendimientos y de su práctica sanción, en la producción y en el uso de energía eléctrica en sus diversas aplica' ciones. La Conferencia fué organizada por el editor ele World Powe.r (antes Beama), D. N. Dunlop, que merece todos los plácemes, y pueeíe estar satisfecho del resultado de su intensísima labor organizadora. Con asistencia del príncipe de Gales inauguráronse las sesiones en el «Conference Hall» de la Exposición de Wembley y en su Palacio de la Ingeniería. Asistieron a ella la representación ele más ele cuarenta naciones. Casi la totalidad de las grandes figuras de la ciencia e industria eléctrica" del mundo desfilaron por el estrado durante la intensa y nutrida labor de discusión de temas presentados a la asamblea. Es innegable que esa Conferencia debía tener y tuvo una importancia fundamental, para deducir de ella la absoluta necesidad en que se hallan todos los pueblos del mundo entero de activar, proteger e incrementar cuanto sea posible la «producción» y la «distribución» de la energía eléctrica, base hoy de la economía de todas las naciones. La crisis actual, derivación del conflicto armado, causante de una gran peturbáción y desequilibrio de las corrientes comerciales, y de una disminución, dentro del campo de la producción, del factor «hombre» (unos 15 millones menos, en la plenitud de sus facultades y energías), obliga a "substituir,, a reemplazar esa energía

Ingeniero

Industrial

Humana perdida para la gran máquina industrial, que hallándose en pleno funcionamiento y satisfaciendo las necesidades que su producción cubría fué parada, y requiere hoy, energía eléctrica, que es la de más rápida, más económica y fácil aplicación a las zonas que por una causa u otra se hallan con producción debilitada o insuficiente. ¿Es que alguien duda de ello todavía en nuestra patria? Y digo «en nuestra patria» porque ha quedado demostrado que-en lugar alguno de este mundo ha dejado de «reconocerse» la necesidad de atacar con todo vigor ese problema, constituyendo casi una carrera desenfrenada la ele las diversas naciones que, comprendiendo la importancia de llegar antes a poseer un sistema de producción y distribución nacional de energía, activan la solución práctica de ese asunto, ya que quien antes lo posea se colocará a la cabeza de los países productores', y por ende en situación de preponderancia sobre los demás. Y n o se diga que es cuestión de «política», de matiz tal o cual, no; es cuestión de comprensión, de instinto de gobernante el que impele a las naciones por ese camino. Véanse las .múltiples manifestaciones de esa labor en los trabajos presentados al Congreso en cuestión; citaremos algunos solamente: de Guy E. Tripp, sobre electrificación de América del Norte; de Constantino D. Bousila, sobre la política de energía en Rumania; de Axell Wallen, sobre/electrificación de Suecia; de N. A. K o p y lov, "sobre las disponibilidades hidroeléctricas de Rusia; de Richard Hofbauer, sobre la ampliación de los grandes saltos de Styria; y otros muchísimos más (que serán publicados en dos graneles tomos dentro de breve tiempo), y cuya tendencia es la de electrificar sus respectivos países al más alto grado a fin "de satisfacer con ello las necesidades de la humanidad, elevando, incrementando la producción, y por ende la potencia y bienestar de cada país.

450 FUNDACLÓN JUANELO . TURRIANO


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