Revista Ingeniería y construcción -1924 - Octubre

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Art. 52. Para calcular el número ele bujías necesarias se empleará la fórmula aproximada B =

m2

X

lux

x

0,4.

Así, para alumbrar una oficina ele 9 metros por 5 metros se necesitarán [1] B = 45 m2 X 35 X 0,4 = 630 bujías. Art. 53. Para los cálculos de consumo se asignarán los siguientes: Vatios

Por bujía de lámpara de filamento metálico — •— llamada «medio vatio» — — de carbón

1,2 0,6 3,5

Art. 54. Para la duración de ios alumbrados puede utilizarse la siguiente tabla: Horas al año

De puesta — — —

233 436 703 1.040 1.414 1.779 2.144 4.296

de sol — — —

a 6 tarde a 7 noche a 8 — a 9 — a 10 a 11 — a 12 a salida de sol

Art. 55. Los globos se limpiarán dos veces por semana, cuidando de que los cables de suspensión estén siempre engrasados, para prevenir los efectos de la oxidación. Las armaduras se limpiarán y engrasarán dos veces al mes y se pintarán una vez al año, y los reflectores dos veces. Art. 56. Las armaduras se mantendrán siempre junto a las poleas de suspensión, no tolerándose por ningún motivo que estén más bajas, costumbre viciosa que no conduce nacía más que a deteriorarlas en cuanto se levanta un poco de viento. Art. 57. Dos horas antes de encender el alumbrado se probarán todas las series de lámparas, para tener suficiente tiempo de remediar cualquier avería que hubiese ocurrido. DÍNAMOS

Y

ELECTROMOTORES.

Art. 58. Diariamente se limpiará el colector de las máquinas eléctricas con trapos secos o con papel de lija muj r fino (no papel esmeril), quitando con un. fuelle o brocha de pintor el polvillo metálico. Se limpiarán los bornes de contacto de manera que siempre haya buena comunicación. El engrasar ligeramente el colector con aceite o vaselina es, en general, práctica poco recomendable. El colector y órganos de la dínamo deben limpiarse siempre con trapos que no sean de lana ni de algodón. Art. 59. Los colectores deben tener siempre la superficie lisa; cuando el colector ha perdido la forma cilindrica y tiene una superficie irregular o áspera y saliente en la mica de aislamiento, se reparará con el pulimentador (sector labrado en un bloque de madera, y cuyo arco, teniendo el mismo radio que el colector, abraza una porción de éste, coincidiendo exactamente con su superficie). Con el pulimentador se sujetará bien una tira de tela esmeril,- teniendo cuidado de que la superficie de frote sea rígida; es decir, que entre el esme.444

ril y la madera del pulimentador n o haya nada elástico, para que aquél sirva de molde. Si fuera necesario raspar la mica entre dos delgas, se utilizará un raspador hecho con cuchilla de hoja de sierra de 0,5 milímetros de grueso por 20 milímetros de largo, y para no rayar las delgas ni dejar rebabas en los bordes se guiará el rascado con, una regla. Si hubiera que tornear el colector, no se le dará may o r velocidad periférica que la de 15 a 20 metros por minuto (v. p == diámetro en metros por 3,14 por número de vueltas por minuto). El buril será puntiagudo y se sacarán virutas muy delgadas para no desgarrar la mica. Después de torneado se pulimentará con esmeril. Art. 60. Los cojinetes estarán siempre bien lubricados, para lo cual se tendrán los depósitos llenos. Si no se tiene esta precaución, los anillos de engrase baten la superficie del aceite, que sale en forma de espuma a lo largo del eje. El aceite debe verterse despacio y con cuidado, para evitar que se derrame fuera y humedezca los aislantes y enrollamientos. Art. 61. Cuando por la suciedad y el polvo empieza el aceite a espesarse, se vaciarán los depósitos c o m pletamente, limpiándolos bien con petróleo y poniendo aceite nuevo. Art. 62. Antes de colocar los carbones hay que limpiar los portacarbones y los pernos y muelles de éstos, lavándolos con alcohol o bencina. Los muelles de presión se pondrán con cuidado y despacio, para no desportillar los bordes de los carbones. Art. 63. La presión de las escobillas no ha de ser ni demasiado fuerte, para no desgastar el colector, ni demasiado débil, para que no se produzcan chispas. Para evitar el desgaste irregular del colector se variarán las escobillas de vez en cuando, colocando siempre éstas opuestas de tal manera que la superficie del colector quede toda utilizada y se desgaste con uniformidad. Se tendrá especial cuidado en recambiar a tiempo las escobillas, para evitar que frote el portaescobillas sobre el colector. Cuando se coloquen escobillas nuevas para dar forma conveniente a la superficie de contacto se pasará entre dicha superficie y la del colector una tira de papel de vidrio adaptada al colector y con la cara granulada, vuelta hacia la escobilla, en la dirección en que gira la máquina. Cuando ésta gira en los dos sentidos, se dará a la lija un movimiento de vaivén, limpiando uego el polvo. Art. 64. Se revisarán con frecuencia las conexiones de los conductores con las máquinas y con el cuadro, cuidando de que las tuercas y tornillos estén siempre bien ajustados y practicando cuantas soldaduras sean precisas. Los reóstatos se limpiarán todas las semanas con bencina, cuidando siempre de que las espiras no tengan suciedad. Art. 65. Cuando tenga que quitarse el inducido de una máquina, se evitará con el mayor cuidado que se ejerzan presiones o choques cobre el devanado, y en ningún, caso se dejará descansar el inducido sobre este último. Arb. 66. El electricista se asegurará ele vez en cuando con la mano de que los soportes no experimentan aumento de temperatura, de que el collar de las escobillas no ha cambiado de posición, de que las escobillas no chispean y de que el engrase se verifica con regularidad; en una palabra, vigilará atentamente los m o tores o dínamos para remediar sin pérdida de tiempo cualquier irregularidad que se presente. Se designará un día cada semana para efectuar una limpieza general de las máquinas, además de la diaria que se ha indicado más arriba.


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