Archai

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Archaid (origen)

Itziar Monroy Acevedo


¿CUÁL ES TU NOMBRE?

Me miré una vez en tus ojos, desde entonces no encuentro mi razón, quizá esté escondida tras tu iris, tal vez huyó de mi como lo hizo la locura misma, dejándome por primera vez en una intercesión. Me gusta cuando hablamos y esquivas mi mirada, porque eso me garantiza plantarme en la comisura de tus párpados. El tiempo corre y las palabras fluyen, tu voz en acústica, trasciende de mi oído a lo más profundo de mi memoria, para hacer especular a mi corazón. Sé que dijiste tu nombre, sé que el mío tu boca pronunció, pero yo sólo puedo recordar el placentero tono de tu voz.

PROMETÍ ESCRIBIRTE UN VERSO

Prometí escribirte un verso; uno más, aunque los otros desconozcas; tantas cosas podría decirte y sólo acierto a sonreír mientras busco palabras idóneas. 1


El octavo signo del zodiaco te define, aunque en tu naturaleza parece no haber límites. Quien no te conoce, suele recriminar tu ambivalencia. Más tus ojos hablan de honestidad, tus manos de perseverancia y de caricias platónicas guardadas. Tu corazón es reservado, por eso esquivas la mirada hasta que la intuición de dicta que puedes avanzar y hacer de un buen cariño el refugio de tus labios. Excéntrica y sublime combinación, de pasión, planeta y agua, que potencializa tus deseos y convierte cualquier océano en fluido entre tus manos. Sí te perturba el ajetreo mundanal y se roba por instantes la dulce sonrisa de tus labios, no hay mejor decisión que refugiarte en el hogar y cobijarte de buenos recuerdos de antaño. Aquella noche te dije “eres extraño”, quise decirte “me desconciertas con tu actitud vacilante y tus ojos huraños”.

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INSPIRACIÓN

Preguntas qué mi inspira para escribir un verso. Me provocan tantas cosas, como el recuerdo de tus labios, que me figuro gajos de tangerina. Tu piel de arena del Mar de Cortés. Tus manos grandes, de dedos cuadrados, haciendo trazos que hablan en secreto de tu temple. Tus ojos que evaden a los míos y en los que me gustaría mirarme algún día. Las cosas que son y las que no pueden ser; las palabras que se mueren condenadas en el silencio. Las razones que no llegan y el valor que se escapa por algún agujero de mis ambiciones. Las emociones que me invaden cada vez que te hallo, en persona o en mis recuerdos. Más otras tantas cosas que pueden inspirar un verso.

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QUÉ SUERTE

… que llegaste oportuno a mi vida, trayendo contigo montones de palabras y arsenales de versos. … que inspiras a mi voluntad, para llenar hojas en blanco que hace tiempo esperaban por estrofas. … que cada vez que sonríes, iluminas las calles oscuras de mi personalidad. … que no sé mucho de ti, y aun así has cambiado algunos paradigmas. … que mi suerte, me llevó a ti.

DEIDADES

Mientras los diez dioses de la lluvia arrebatan pedazos del cielo a los treinta dioses de los truenos, mi ser se adentra en el mundo de la fenomenología, buscando rastros de la verdad. Más no hay ojos que puedan ver con certeza la realidad que se esconde tras nuestros recelos y vergüenzas. Invoco a… Afrodita a … Ishtar a … Rambha a … Shaktí a … Xochipilli… 4


cualquiera de los treinta dioses del amor, ni Eros se manifiesta. Sólo busco una respuesta a las mil preguntas que tengo hoy a las cosas que Qadesh o Venus sabrían bien como resolver. Y de pronto veo que cada cual tiene siempre su cada quién. Suplico entonces a Cupido, dispare su flecha y sepamos de una vez la verdad.

TUS PALABRAS

Irrumpen tus palabras en medio de la noche, navegan en ellas mis emociones cual si fueran mar; como olas me acarician el alma dejando sonrisas en mi boca. Tus palabras son agua fría para aliviar mi locura, son oscuridad y luz son razón y deseo. Tus palabras son mi alimento la tumba de mi soledad.

AFINIDAD O DIVERGENCIA

El oráculo predice que somos hierro magnético en mutua atracción 5


excitante y apasionada. Ambos compartirnos la misma forma plena de enamorarnos. La atracción es bilateral, corazones prudentes e indomables que se corresponden en celulares cápsulas de aire. Tú das un paso y retrocedo dos, yo doy un paso y te evaporas en palabras impasibles que emanan del arcoíris de tu boca. Humedecemos nuestras significaciones en voluntad y autocontrol, para enjugar después las ganas de un beso, en un lienzo que nos quite el exceso de discreción. Y cuando estoy a un paso de tu piel, la neblina impenetrable de tu arcano mayor resbala un trozo de hielo por mi espalda cambiando el rumbo de mi intención Como mago inventas una sonrisa y engendras esa mirada que me trasporta sin remedio.

PACIENCIA

Los astros me piden paciencia, cómo puede un río de torrente no desbordarse de su cuenca cuando las lluvias alimentan su caudal. 6


Paciencia es una palabra, que antes no había incluido en mi vocabulario, ni para el discurso ni para la retórica. Paciencia es quitarle la belleza a las cosas, es querer mirar por el ojo de una aguja el universo. Paciencia es una actitud que no me toma ni la tomo de la mano, es el equilibrio que he perdido desde aquél día en que descubrí tus ojos pardos. Paciencia es reconocer que aún sigues estático, que no hay indicios en tus actos de objeción u aprobación. Paciencia es expirar lentamente, es la agonía del corazón… es el alma suspendida en un letargo.

PRESAGIO

Sentí tus manos tibias enmarcando mi rostro, me embriagué de tu aliento y me bebí tu esencia en un beso. 7


Deslizaste tus manos, haciendo caracolas en mi piel provocando sensaciones locas en todo mi cuerpo. Busqué tus ojos ámbar y me encontré en ellos, tan incrustada en tu iris que casi me dio miedo. La Luna, amiga de siempre, irradiaba luz tenue sobre cada colina, en cada caricia que provocaba el deseo. Un rayo de luz encontró un escape por un pliegue de la cortina e interrumpió mi sueño.

EMBUSTES

Dicen las palabras perniciosas, las lenguas mefíticas las personas sin vida que entre tú y yo, hay ya un nosotros. Las murmuraciones van llenando los pasillos, cambiando a cada instante nuestra historia, todo se ha vuelto un enredo. ¿Qué sabe la gente ociosa?, ¿O es que nosotros algo desconocemos? Se dice que hacemos cosas, 8


mentiras todas, falsedades que inspiran pero que no toman forma. Habladurías que podríamos hacer realidad para que tenga sentido su vida o para saber de qué nos perdemos. Quizá poniéndole empeño nos convenza el cuento y seamos nosotros quienes ahora hablemos.

CIENTOS DE BESOS

Y si hoy cuando despierte, después de haber llenado mi noche de tu recuerdo; después de colmar mi mañana de pensarte; engancho mi valor a las palabras y voy en busca de ti. Si hoy le cierro la puerta a la vacilación, derribo las murallas de mis miedos, dejo en el resquicio lo que no soy para pararme frente a ti y pedirte un beso… ¿Un beso?... ¡Qué conformista!, ¡no!, quiero ciento de ellos. 9


QUIERO CONOCERTE

Quiero saber de ti lo evidente y lo desconocido, Quiero escuchar tus palabras pero sobre todo tus silencios. Pretendo estar contigo en tiempo de serenidad y júbilo pero enraizarme cuando los demonios te ganen la guerra. Reconocer cuando tu piel se erice ante los hechos y quedarme en ella cuando nada te conmueva. Deseo habitar en tus pupilas cuando estén dilatadas y constreñirme en el efecto fotomotor de la luz que abrume tu retina. Aspiro a quedarme en la palma de tu mano sintiendo su tibieza, pero edificarme en tu dorso cuando el invierno apremia. Quiero conocerte más allá de sueños y promesas, en mismo instante en que el tictac desconoce los horarios. Conocerte completamente totalmente libre de fronteras. 10


CASTAÑOS

Los granos de café arábigo, con aroma de chocolate, miel y caramelo… La arena fina y dorada del Mar de Cristal, bañada por sus aguas tranquilas… Las dunas eólicas del Desierto Marroquí, construidas suavemente por los vientos… El ámbar virgen de marrón claro… Nada es tan sublime como los destellos caleidoscópicos de tus ojos castaños.

CHOCOLATE

Quiero beberme el chocolate de tus ojos, remendarme en tu iris, morar en los pliegues de tus labios, dejar mi piel olvidada en las yemas de tus dedos, respirar de tus palpitaciones, pasearme alguna noche por tus sueños, cobrarte mis noches de vigilia… quisiera tantas cosas, pero al tenerte cerca apenas respiro… sólo tiemblo. 11


IRÉ AL ENCUENTRO

No esperaré por ti la vida entera, no miraré más lunas sin ti, no dejaré pasar el tiempo sin escuchar una respuesta. Me niego a vivir en el dobladillo de tu trémulo silencio, no quiero hacer la danza eterna del cortejo. No esperaré… uno de estos días iré al encuentro.

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Índice

1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14.

¿CUÁL ES TU NOMBRE? PROMETÍ ESCRIBIRTE UN VERSO INSPIRACIÓN QUÉ SUERTE DEIDADES AFINIDAD O DIVERGENCIA PACIENCIA PRESAGIO EMBUSTES CIENTOS DE BESOS QUIERO CONOCETE CASTAÑOS CHOCOLATE IRÉ AL ENCUENTRO

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