Revista Hermanas de la cruz nº 20 by Ignacio Lara Corona

Sumario

SANTA ÁNGELA DE LA CRUZ Página

1. Editorial - Santa Ángela de la Cruz. Aniversario de su nacimiento, 1846-1917. “Su Vida es un Don” ................................................... 4 2. Perﬁl Espiritual de Santa Ángela - Solidaria desde la austeridad personal ............................................................ 7 3. Para dar razón de nuestra fe Comentarios al Catecismo de la Iglesia Católica con Santa Ángela de la Cruz - La caída del hombre y la promesa de salvación ...............................10 4. Me gusta contarte cosas... - ¡Fátima y Salud! ............................................................................................................................. 14 - Centenario de las Apariciones de la Virgen en Fátima ...............18 5. Hablamos de ella - Inauguración de una capilla dedicada a Santa Ángela .............22 - Bendición de un Monumento a Santa Ángela en Cádiz ...............24

Sumario

SANTA MARÍA DE LA PURÍSIMA Página

1. Testimonios - Santidad y vida consagrada ......................................................................................27 - Cuestión de detalles ..............................................................................................................32 - “Las Niñas de Madre María de la Purísima” .................................................35 - “Tu vida fue, Hermana María de la Purísima contemplación y servicio…” ...........................................................................................39 2. “Sus devotos agradecen su Canonización” - Bendición de la Capilla Santa María de la Purísima. Monte Quemado Santiago del Estero .............................................................43 - Montellano, 18 y 31 de octubre de 2016 ...................................................46 CAUSA DE CANONIZACIÓN DE JOSÉ TORRES PADILLA - Semblanza del siervo de Dios ................................................................................... 48 - Gracias recibidas .......................................................................................................................51

SANTA ÁNGELA DE LA CRUZ ANIVERSARIO DE SU NACIMIENTO 1846-1917

“Su Vida es un Don” Exclamación gozosa que brota de todos los corazones al celebrar un nuevo aniversario del nacimiento de Ángela de la Cruz. Un Don de vida abundante que Dios regaló al mundo y a la Iglesia en la persona de una humilde sevillana. El 30 de enero de 1846 en el número 5 de la Plaza de Santa Lucía nace Santa Ángela, en una familia numerosa. Sentimos dentro de nosotras una inmensa gratitud por la familia de Ángela de la Cruz. Familia sencilla y humilde, pero que supo darle a sus hijos el calor de un amor entrañable. Supo su familia cultivar la tierra de su corazón de niña, adolescente, joven, y sembrar la semilla de valores humanos y cristianos. De esta siembra florecerá en ella la capacidad de tener un corazón abierto a las necesidades de los demás y ojos capaces de mirar a su alrededor y encontrar caminos nuevos de amor, de justicia y de paz, para todos los que le rodeaban. 4

EDITORIAL

Aniversario de su nacimiento, 1846-1917. “Su Vida es un Don” Su padre y su madre fueron sus primeros maestros. En un ambiente bueno, con padres de gran entereza, firmes en sus decisiones e ideas… Este ambiente íntimo mitad dulzura y mitad firmeza, es el que crea en Santa Ángela valores humanos sólidos que la prepararán para su compromiso cristianos, para llegar a ser lo que fue. Hoy, mirando nuestro entorno vemos reflejado lo que los jóvenes necesitan: un hogar donde reine el amor, la paz, la caridad, la verdad, donde los padres sean a la vez testigos y maestros. ¡Sus padres lo fueron y tuvieron un gran papel en su vida, ellos la educaron para ser santa! La devoción de Santa Ángela goza de gran popularidad. Sus consejos prudentes y su sonrisa sirvieron de consuelo a tantas personas que acudían a ella. Hablar de Santa Ángela significa desvelar un mundo interior que nos impresiona. Después de una lectura detallada y prolongada de sus escritos y después de analizar detenidamente su espiritualidad, estamos convencidas de su gran espíritu. Fue verdaderamente ejemplar en virtudes y en obras. EL conocimiento de esta gran santa puede hacer mucho bien a todos los fieles. Su correspondencia y fidelidad a la gracia de Dios se observa a lo largo de toda su vida. Alcanzó un grado de santidad muy grande, propia de un alma entregadísima para hacer siempre la voluntad de Dios. Era una mujer 5

EDITORIAL

Aniversario de su nacimiento, 1846-1917. “Su Vida es un Don” de una pieza, lanzada a la aventura de fundar una congregación, con una vida de oración intensa. Con un espíritu de caridad, abnegación, sacrificio y amor a los pobres. Ella solo buscaba,

¡LA VOLUNTAD DE DIOS!

“Que hermosa es la palabra “voluntad de Dios”; y no sólo la palabra sino ésta acompañada de obras. Que no nos separemos ni con el pensamiento ni con la mente; que en los acontecimientos de la vida, por duros y penosos para la naturaleza, el espíritu esté muy firme siempre alabando y bendiciendo a Dios que así nos visita y nos prueba su amor.”1

Epistolario de Sor Ángela de la Cruz. (1889-1891) Roma 1996

PERFIL ESPIRITUAL DE SANTA ÁNGELA (V)

Solidaria desde la austeridad personal

Posiblemente nuestra querida Santa Ángela no conocería la palabra “solidaridad”. Tal vez, si la oyó alguna vez, no la usaría frecuentemente: era poco usada en su tiempo, además de tener una pronunciación un poco endiablada. Pero, con toda seguridad, si no usó mucho la palabra, sí que hizo suya hasta constituir una nota de su perfil espiritual la realidad de la solidaridad. Por una razón sencilla y profunda al mismo tiempo: Santa Ángela hizo un serio y progresivo proceso de identificación con Cristo y Cristo crucificado. Pues bien, Cristo ha sido la persona que se ha solidarizado con los seres humanos de tal forma y hasta tal punto que se hizo Él mismo Hombre, asumiendo además la condición de ‘esclavo’. El Apóstol Pablo tiene en la Carta a los Filipenses (2,5-8) una estremecedora página describiendo el insondable misterio de solidaridad del Verbo de Dios con el hombre: una página -hay que reconocerlo sencillamente pero con cierta pena-, sobre la que los cristianos pasamos con no poca superficialidad o inconsciencia. Hela aquí: 7

PERFIL ESPIRITUAL DE SANTA ÁNGELA (V)

Solidaria desde la austeridad personal

“Cristo, a pesar de su condición divina, no se aferró a su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, haciéndose uno de tantos. Así, presentándose como un hombre cualquiera, se abajó, obedeciendo hasta la muerte y una muerte de cruz”. De esta fuente cristológica bebió Santa Ángela su sorprendente actitud de solidaridad. En sus actitudes solidarias, en efecto, no hizo más que imitar al Maestro. Jesús fue radicalmente “solidario” desde el “vaciamiento total y absoluto” (kénosis) de sí mismo realizado en el momento de la Encarnación. Misteriosa pero realmente se despojó de su condición divina para asumir solidariamente la condición humana “con todas sus consecuencias” menos “una”: el pecado. Un aspecto importante de la solidaridad de la que tanto se habla en nuestros días es, ‘desde dónde se hace’ y ‘cómo se hace’. También en esto Santa Ángela es modelo y estímulo para todos sus devotos y admiradores. Porque hay que reconocer que en nuestro mundo existen numerosas instituciones, grupos y organizaciones preocupadas solidariamente por los demás. Muchas de esas Instituciones, siempre beneméritas, son estrictamente laicas, es decir, sin ninguna preocupación de tipo religioso. Tienen el valor humano de la solidaridad, pero les falta, en general, la dimensión trascendente puesta de manifiesto por Cristo. Por eso, la primera forma de “solidaridad”, entendida y vivida por Santa Ángela, consistió en su identificación con Cristo, expresada en su asombroso “no ser, no querer ser, pisotear el yo y borrarlo del todo si posible fuera”. Ahí estaba poniendo el fundamento de su inmensa capacidad de solidaridad con los pobres, los sencillos, los desfavorecidos, los irrelevantes, los que no cuentan en la sociedad, a los que quiso servir ella personalmente y quiso que sus hijas y seguidoras prosiguiesen haciéndolo en la historia de la sociedad y de la Iglesia. 8

PERFIL ESPIRITUAL DE SANTA ÁNGELA (V)

Solidaria desde la austeridad personal En el “total y absoluto olvido de sí misma”, dio el primer paso de su solidaridad. Santa Ángela no dio de lo que tenía, sino por una admirable paradoja, fue solidaria desde el total vacío que hizo en sí misma. No fue la suya una solidaridad simplemente afectiva o sociológica, procedente de su buen corazón: en Santa Ángela encontramos “comportamientos solidarios”, procedentes de la esencia y del núcleo mismo de la solidaridad “cristiana”. La actitud solidaria de Santa Ángela como la de sus seguidoras procede de su profunda identificación con Cristo. Ponen en íntima conexión su experiencia humana con las misteriosas palabras de Cristo cuando se identifica con el que “tiene hambre, sed, está desnudo, enfermo, es forastero…” En el corazón de estas Hermanas resuenan siempre las palabras de Cristo: “lo que hicisteis con uno de estos hermanos míos más pequeños, conmigo lo habéis hecho”. Arraigada y bien cimentada esta primera y fundamental forma de solidaridad, resulta lógico dar un segundo paso en el sentido de una solidaridad testimonial: la de vivir pobremente, la de vivir ‘como los pobres’, vivir ‘con los pobres’, no solamente para estar a su mismo nivel, sino también de forma particular para enseñarles la dignidad del ser humano incluso en situación de pobreza. Esta dimensión educativa tuvo una gran relevancia en la mente y en el corazón de Santa Ángela. El “darse solidariamente a los demás” al estilo de Santa Ángela, tiene que ser siempre expresión de una verdadera interioridad espiritual vivida por todas aquellas personas que sienta en su corazón el deseo de servir solidariamente a los demás. Antonio Mª Calero, SDB 9

LA CAÍDA DEL HOMBRE Y LA PROMESA DE SALVACIÓN «El pecado, esa es la mayor humillación, confusión y vergüenza»1.

En el inicio de la historia del hombre hay una palabra y una realidad dramática: es el pecado. El drama del pecado es «el mayor mal que les puede pasar»2. Son incontables las experiencias del mal en nuestras vidas: guerras, hambre, frío, enfermedades. Hay males de los que no se puede culpar a Dios, son hijos de nuestro egoísmo y desidia; pero hay males y sufrimientos que nos hacen mirar al cielo, no los vemos compatibles con un Dios bueno y providente. ¿De donde viene el mal? Buscaba el origen del mal –nos relata San Agustín- y no encontraba solución. De aquella búsqueda provino su conversión, «porque “el misterio de la iniquidad” sólo se esclarece a la luz del “Misterio de la piedad”»3. La mirada del creyente debe posarse sobre Aquel que venció la muerte. «Dios creó al hombre a su imagen y lo estableció en su amistad»4. Conocido por todos es el amor con el que Dios creó al hombre y a la mujer, reconocido que todo lo puso a su servicio y constatado que vivían en felicidad plena y perpetua. ¿Qué quebró esta situación? Sucumbir a la tentación, «el árbol del conocimiento del bien y del mal evoca simbólicamente el límite infranqueable que el hombre en cuanto criatura debe reconocer libremente y respetar con confianza»5. El hombre rompe la confianza 1 2 3 4 5

Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 131. Sor Ángela de la Cruz. Carta a la Comunidad de Utrera, 6-11-1904. Catecismo de la Iglesia Católica n. 385. Ibíd., n. 396. Ibíd., n. 396.

PARA DAR RAZÓN DE NUESTRA FE

La caída del hombre y la promesa de salvación en su Creador. En palabras de santa Ángela de la Cruz, nuestros padres vivieron el pecado como «la mayor humillación confusión y vergüenza, la humillación de las humillaciones; reconocerse el alma culpable ante su Dios de haberle ofendido. Ese conocimiento es la mayor humillación»6. Desobedecen, rompen la amistad con Dios y se prefieren a sí mismos en lugar de al Señor. El hombre elige, seducido por el diablo, un destino catastrófico: «A causa del hombre, la creación es sometida “a la servidumbre de la corrupción”. Por fin, la consecuencia explícitamente anunciada para el caso de desobediencia, se realizará: el hombre “volverá al polvo del que fue formado”. La muerte hace su entrada en la historia de la humanidad»7. Desde el primer pecado cometido por nuestros padres, éste inunda el mundo. Madre Angelita nos advierte del riesgo de la soberbia, del amor desordenado, de caer en las redes del enemigo de la naturaleza humana que sigue engañando con el mismo argumento «seréis como Dios»8: «Ya ven hasta donde nos llevan las obras del amor propio: queremos subir, y bajamos hasta el abismo del pecado; queremos ser y nos degradamos dejándonos llevar de nuestras pasiones. Aprendamos esta lección y empecemos a luchar contra los engaños del amor propio y a obrar con el amor puro de Dios, que es el que nos exalta, engrandece y enriquece de dones celestiales»9. Hemos sido contagiados, no somos culpables del pecado original, no lo hemos cometido pero sí lo hemos contraído. La inclinación al

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Hermana Mª del Salvador. Bosquejo biográfico de Sor Ángela de la Cruz. BAC. Madrid, 2012. P. 576. Catecismo de la Iglesia Católica n. 400. Gn 3, 4. Santa Ángela de la Cruz. Un programa espiritual para cada año. Roma, 1987. P.363.

PARA DAR RAZÓN DE NUESTRA FE

La caída del hombre y la promesa de salvación mal tiene su origen en el pecado de Adán, por ello, la Iglesia concede el Bautismo incluso a los niños que no han cometido un pecado personal. ¿Qué perdieron nuestros padres, para sí y para nosotros, con su pecado? La pérdida más importante fue la amistad con Dios, la gracia con la que fueron creados. Dijeron no a Dios y se unieron a los ángeles caídos que pronunciaron la famosa expresión “non serviam”, no serviré. Pero también perdieron otros dones, los dones preternaturales: La inmortalidad. Dios les había prometido librarse de la muerte y llegar a la gloria sin pasar por ese “trago”. Sor Ángela aprovecha la realidad de la muerte para ser fiel al Redentor: «renunciar al consuelo que siente mi alma con la muerte, no pidiéndola ni deseándola, sólo teniéndola presente para ser fiel a Dios y no verme separada de El por toda la eternidad»10. La impasibilidad. Dolor y sufrimiento son realidades cotidianas en la vida de la humanidad. El carisma propio de las Hermanas de la Cruz es llevar a los más pobres a Dios, a los que más sufren: «No solo nos esforcemos en caminar nosotras hacia la celestial patria, sino que allá empujemos también a otras almas, mirando en todo la mayor gloria de Dios»11. La integridad. Es el equilibrio entre cuerpo y espíritu, entre la razón y los instintos, las pasiones del hombre estaban sometidas a su alma y ésta a Dios. Se rompió el equilibrio entre el hombre y la mujer, entre el bien propio y el ajeno. El hombre hubiera sido dueño de sí mismo y hubiera orientado su vida con facilidad hacia el bien común entendiéndolo como su bien personal. El hombre no fue abandonado por Dios. El amor de Dios es más grande que el pecado, Dios busca al hombre y promete que combatirá, que lo rescatará 10 11

Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 464. Hermana Mª del Salvador. Bosquejo biográfico de Sor Ángela de la Cruz. BAC. Madrid, 2012. P. 681.

PARA DAR RAZÓN DE NUESTRA FE

La caída del hombre y la promesa de salvación del poder de la muerte. Desde el primer instante resuena en el paraíso la búsqueda de Dios: «¿Dónde estás?»12 y la promesa de salvación: «Pongo hostilidad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y su descendencia; ésta te aplastará la cabeza cuando tú la hieras en el talón»13. Es el anuncio, de modo misterioso, de la victoria sobre el mal y el levantamiento de su caída que se producirá con una mujer que dará a luz al Salvador, la Santísima Virgen María, porque «en lo espiritual todo tiene remedio. Y ¿dónde encontraré yo el mío? –se pregunta Madre– En la humildad y sólo en la humildad»14. La vida del hombre, tras el pecado original, se convierte en un combate contra las fuerzas del mal, que lo experimenta en carne propia san Pablo cuando exclama: «Pues no hago lo bueno que deseo, sino que obro lo malo que no deseo»15. Dios permite que de los males se saquen bienes mayores, por ello, decimos con fe: «¡Oh feliz culpa que mereció tal y tan grande Redentor!»16. La caída del hombre y la promesa de salvación tiene su cumplimiento en la cruz donde Jesucristo nos alcanza la salvación, así es cómo Sor Ángela comprende la misión del Mesías: «nuestro Dios viene al mundo para pagar lo que el hombre debía y para enseñar; y cuando consuma el sacrificio y muere cubierto de ignominia por parte de sus enemigos, ve cumplida su misión y exclama: “Consumatum est” (Todo está cumplido). Y de esta suerte empieza a nacer su gloria y su doctrina, la que han seguido tantos santos porque han sido sabios sobre lo natural»17. Ignacio Guillén Montoto, Pbro. Párroco de San Bartolomé Apóstol Aguadulce (Sevilla)

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Gn 3, 9. Gn 3, 15. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 530. Rom 7, 19. S.Th., 3, q.1, a.3, ad 3: en el Pregón Pascual «Exultet» se recogen textos de Santo Tomás de esta cita. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 409.

¡FÁTIMA Y SALUD! Hoy, pensando ya en el mes de mayo, que es el mes dedicado especialmente a la Santísima Virgen quiero avisarte de un acontecimiento muy importante: ¿a que tú has cantado más de una vez aquello de “El 13 de mayo la Virgen María bajó de los cielos a Cova de Iria?, pues esto te quiero resaltar, que la Virgen se apareció el 13 de mayo del año 1917 y ¿sabes qué pasa? Pues que en el 2017 celebramos 100 años de aquel día en el que la Virgen vino a visitarnos, porque nos visitó a todos, aunque se dejó ver por los ojos limpios e inocentes de tres niños. Las apariciones a los pastorcitos: Lucía, Jacinta y Francisco se repitieron durante cinco meses los días 13, de mayo a octubre. No te voy a contar la historia porque creo que la sabe todo el mundo, sólo te diré que siendo Cardenales de la Santa Iglesia visitaron aquel lugar los que luego fueron Papas: Juan XXIII, Juan Pablo I y Benedicto XVI; y siendo Papas: Pablo VI y Juan Pablo II, que lo hizo en tres ocasiones. Creo que esto nos habla de la importancia de esta Maternal visita de la Virgen a sus hijos. Quiero avisarte de este acontecimiento con tiempo para que te prepares bien; CENTENARIO que nos tiene que ayudar a acercarnos a nuestra Madre con confianza de hijos y haciéndole el homenaje de nuestro cariño cumpliendo lo que Ella pidió: que rezáramos el Rosario, pidiendo por los pecadores, por la Iglesia y por la paz del mundo. Y como no olvido que tengo que contarte algo relacionado con Sor Ángela pues, quiero decirte que hay una Virgencita, que es muy entrañable para nosotros y que está muy relacionada con nuestra querida Santa Ángela de la Cruz. Se queda uno “embobao” mirando tan linda imagen, es chiquita pero con un encanto que no se puede “aguantá”. ¿Sabes de qué Virgencita te estoy 14

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¡Fátima y Salud! hablando?, pues si vas al convento de las Hermanas de la Cruz seguro que te lo imaginas. Es la Virgen de la Salud que preside el retablito (porque es pequeño) que está en la capilla donde Madre “duerme” con nosotros para siempre, porque Dios nos ha concedido esta gracia que nunca le agradeceremos lo suficiente. La historia de esta imagen es muy bonita, a lo mejor la conoces por la vida de Santa Ángela de la Cruz, mira te cuento: esta Virgen estaba en la antigua Parroquia de Santa Lucía, de Sevilla, muy cerquita de la casa en la que vivía Angelita Guerrero y su familia. Tú sabes que en las Parroquias toda colaboración es poca porque, el pobre párroco se ve agobiado con tantas necesidades a las que hay que atender: sacramentos, visitas a enfermos, bolsa de Cáritas, grupos, liturgia, etc. Y entonces busca personas piadosas y buenas que le puedan atender también la ornamentación y el cuidado de los distintos altares. En un altar lateral de la Parroquia se encontraba la Virgen de la Salud, pero con la gracia para nosotros de que este altar, por petición del Sr. Párroco, lo cuidaba la mamá de la familia Guerrero González, que se llamaba Josefa, y casi siempre se hacía acompañar de su hija Ángela que disfrutaba muchísimo poniendo todo su esmero en limpiar, arreglar y adornar el altar de su Virgencita a la que tenía especial devoción y cariño. Es una Virgen pequeña, pero preciosa, un encanto, vamos. Seguramente las ropas con que la adornan ahora las Hermanas (un ajuar que ellas mismas le han confeccionado), son mucho más bonitas y apropiadas que las que tendría entonces, porque hay Hermanas que con una aguja y un dedal entre sus dedos hacen maravillas, desde luego que el arte que tienen para hacerle sayas y mantos con telas preciosas, encajes y adornos es insuperable”. Yo me imagino a aquella niña subida en el altar, por aquello de que pesaría poquito y, ayudada por su madre, limpiando el polvo, colocándole las flores o para colocarle bien la corona o la ropita que madre e hija habían preparado, planchado y, a lo mejor, cosido para su Virgen; seguro que algún besito 15

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¡Fátima y Salud! que otro recibiría la imagen a la que habían tomado tanto cariño. Hoy dirían los cofrades que eran las “camareras” de la Virgen. Ya, con Sor Ángela en el convento, las Hermanas descubrieron el gran deseo que siempre había tenido ella de poder recuperar la imagen de la Virgen de la Salud. Por una parte con sus oraciones y por otra con las influencias que tenía el Padre Torres, hicieron que su preciosa Virgencita llegara por fin a su casa, una casa pobre pero muy rica en amor y devoción. La alegría de las Hermanas y sobre todo de Sor Ángela fue enorme pues la consideraba la verdadera Madre de la Compañía. Te voy a contar otra cosa muy curiosa: había una Hermana que se llamaba Ana que estaba siempre muy pendiente de los deseos, observaciones y palabras de Madre Ángela y ella intuía que quisiera tener a la Virgen no con el Niño en sus brazos, sino con una cruz en una mano y una corona de espinas en la otra y, ni corta ni perezosa, un día que había salido Sor Ángela a atender a unos enfermos, esta inquieta Hermanita que debía de ser muy buena, muy simpática y un poco impulsiva, puso el Niño Jesús en un silloncito y le colocó a la Virgen la cruz y la corona que ella se había apañado para tener preparadas. Seguro que pensaría que su atrevimiento le costaría una regañina cuando la viera Madre pero, cuál fue su sorpresa, que cuando llegó a casa y mirando a su Virgencita, le brillaron los ojos y vio cómo se emocionaba pensando que el camino del amor es el camino de la penitencia y el Calvario de Jesús. Madre quedó complacida y las demás Hermanas, principalmente Hermana Ana también que pensaría: ¡Ojú, me la he jugado pero menos mal que todo ha resultado bien! Y ella muy feliz viendo a Madre muy contenta. Desde aquel día esta Virgencita que desde niña Ángela tanto quiso, se presenta así y mirándola piensa uno: Es que Jesús sufrió y su Madre también y nosotros sufrimos, pero nuestra buena Madre se agarra fuerte al dolor para traernos el consuelo y la salud y la paz y el perdón y la bondad y la alegría. Se llama “SALUD”, ¡qué bonito nombre para una Madre que sufre con las penas de sus hijos porque, te digo una cosa, las madres sufren más con las penas de sus hijos que con las suyas propias, ¿a que sí? 16

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¡Fátima y Salud! ¡Qué corazón había puesto Dios en Sor Ángela! Cómo todos eran considerados por ella como hijos de Dios y, por tanto se sentía hermana entre hermanos, cualquier noticia de pena o padecimiento ajeno, le llegaba al alma. Sor Ángela no sólo rezaba por los enfermos y pobrecitos sino que se arremangaba, se ponía su mandil y, tanto ella como sus hijas, estaban en contacto diario con las gentes que, sin tener recursos, sufrían por su enfermedad y falta de medios económicos. Te voy a contar una cosa: en una ocasión se propagó por Sevilla una epidemia de viruela, sobre todo entre los más pobres, y se daba el caso de que hasta los mismos familiares huían de los enfermos por temor al contagio y aquí me tienes a las Hermanas atendiéndolos; les lavaban la ropa, limpiaban la casa, curaban sus pupitas con toda delicadeza y las trataban conforme a la medicina de aquellos tiempos que no era muy avanzada que digamos, les preparaban la comida y atendían a los hijos pequeños que, a veces lloraban sentados en los rincones de la casa. Todo esto llegaba al corazón de Madre Angelita pero también llegaba al corazón de su Virgen de la Salud porque en sus manos se ponían todos los problemas y peligros que pudieran encontrar las Hermanas en sus obras de amor al prójimo. La Compañía de las Hermanas de la Cruz derrochaba amor en su interés por atender a los necesitados de ayuda material pero, hay algo muy importante, y es que todo lo hacían queriendo imitar la entrega de Jesús en la Cruz, por amor a Dios. Pero, el pensamiento de Sor Ángela siempre estuvo en “curar” las heridas del alma. ¡Cuántos bautizos, cuantas bodas, cuantas primeras comuniones, cuanto perdón entre familiares peleados! dejaron tras de sí las visitas que las Hermanas hacían a los domicilios de la gente pobre y, a veces, despreciada de la sociedad. Nunca olvidarán las Hermanas las palabras pronunciadas por Sor Ángela el primer día que se reunió en aquella “habitación-convento” con sus Hijas: “Si os parece, nuestra verdadera y única superiora será siempre la Santísima Virgen”, y como tales venerada y querida en todas sus casas. Luis Cornello Espina, sdb

CENTENARIO DE LAS APARICIONES DE LA VIRGEN EN FÁTIMA Los Corazones de Jesús y María están atentos a la voz de vuestras súplicas1 «¿Qué quieres, hija mía? Nada temas, estoy contigo»2. En este año se cumple el centenario de las apariciones de la Virgen María en Fátima, donde vino a traer al mundo un mensaje centrado en la oración, la penitencia y el amor al Papa. Las apariciones de la Santísima Virgen fueron precedidas por las del Ángel que fueron preparando a Jacinta, Francisco y Lucía al mensaje que la “Señora” quería transmitirles. Las familias de los pastorcitos inculcaron la devoción a la Virgen a estos niños. Todos unidos rezaban el rosario después de cuidar a las ovejas. Algunas veces para poder ir a jugar, según nos refiere Lucía en sus Memorias3, lo hacían de un modo más abreviado. Resguardados por la leve lluvia en una cueva los niños contemplan la primera aparición: «¡No temáis! Soy el Ángel de la Paz. Rezad conmigo»4. Todas las apariciones, sean del Ángel o de la Virgen, van unidas a la insistencia de la oración. «Los Corazones de Jesús y María están atentos a la voz de vuestras súplicas»5. La maravilla de la oración se revela en que Cristo va al encuentro de todo ser humano, es el primero en buscarnos y el que nos pide de beber, como en el encuentro con la samaritana. Jesús tiene sed, su petición llega desde las profundidades de Dios que nos desea, que está atento a nuestras súplicas. La oración es el encuentro de la sed de Dios y de la sed del hombre, sólo Dios es capaz de saciar los anhelos más profundos del hombre. Dios tiene sed de que el hombre tenga sed de Él6, ésta es la maravilla que experimenta el hombre en la oración: «donde nos conocemos y conocemos a Dios, y en estos dos conocimientos está la base de la santidad. ¡Qué transformaciones produce en las almas la oración bien hecha! De pecadores, hace santos; de tibios, fervorosos; de soberbios, humildes...»7. 1 2 3 4 5 6 7

Memorias de la hermana Lucía I. Secretariado dos Pastorinhos. Fátima, 2004. P. 79. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 588. Memorias de la hermana Lucía I. Secretariado dos Pastorinhos. Fátima, 2004. Ibíd., P. 77. Ibíd., P. 79. Cfr. Catecismo n. 2560. Sor Ángela de la Cruz. Cartas circulares de Sor Ángela de la Cruz. 1882-1931. Roma, 1989. P. 150.

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Centenario de las Apariciones de la Virgen en Fátima Tres niños escogidos por la Divina Providencia para ser portadores de un mensaje de paz, en plena Primera Guerra Mundial, que sólo puede obtenerse con la oración y con la conversión (del latín, arrepentimiento, penitencia). Es la insistencia de la “Señora”: «Rezad el rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra»8. Un mensaje de salvación, es el que van acogiendo los pastores, pues no quiere otra cosa la Madre de Dios sino reunir a todos sus hijos en torno a Jesucristo y su única y verdadera Iglesia: «porque muchas almas van al infierno por no tener quien se sacrifique y rece por ellas»9. Santa Ángela tiene muy presente en sus propósitos de Ejercicios a las almas sufrientes, especialmente las de los más alejados de Dios, es decir los que habitualmente viven en pecado mortal, y a las benditas almas que pueblan el purgatorio y no gozan aún de la visión “cara a cara” de Dios: «Ofrecer la comunión por la perfección de todas las hermanas y conversión de los pecadores y de mis hermanos; y en sufragio de las almas del purgatorio»10. Además, teniendo muy presente la comunión de los santos, por la cual todo el que se eleva en la Iglesia, eleva a los demás, nos dice: «Pediré por las almas del purgatorio, la conversión de los pecadores y el adelanto en la virtud de todos y de algunos en particular, y nada más; y lo que sea para mayor gloria de Dios»11. Las apariciones del Ángel comenzaron en el año 1916 y terminaron con la primera de la Virgen en mayo de 1917. Los días trece de seis meses consecutivos tuvieron el inmenso privilegio de encontrarse con la Madre de Dios. Una experiencia de gracia que los ha enamorado de Jesús, hasta 8 9 10 11

Memorias de la hermana Lucía I. Secretariado dos Pastorinhos. Fátima, 2004. P. 175. Ibíd., P. 179. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 479. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 464.

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Centenario de las Apariciones de la Virgen en Fátima el punto de que Jacinta exclamaba: «Me gusta mucho decirle a Jesús que lo amo. Cuando se lo digo muchas veces, parece que tengo un fuego en el pecho, pero no me quema»12. Y Francisco decía: «Lo que más me ha gustado de todo, fue ver a Nuestro Señor en aquella luz que Nuestra Madre puso en nuestro pecho. Quiero muchísimo a Dios»13. La Virgen les ayudó a abrir el corazón con incansable generosidad para con los pobres y les infundió una enorme sed de sacrificio por la conversión de los pecadores que son los más pobres de los pobres por vivir alejados del Señor. Según nos dice el Catecismo14, la función de las revelaciones privadas es la de «ayudar a vivir más plenamente (la fe) en una cierta época de la historia». La revelación de Dios, el darse a conocer a los hombres, se inició en el Antiguo Testamento y culminó con la predicación evangélica de Jesucristo. De ahí que el corazón de toda la Biblia sea el Evangelio, es decir, la vida y doctrina de Nuestro Señor. Aquí es donde se encuadra la importancia de la llamada de la Santísima Virgen al rezo del Santo Rosario, que como el Papa nos recuerda es la: «síntesis de todo el Evangelio»15. De ahí que meditar los principales misterios de la vida de Cristo a través de los ojos de su Bendita Madre en esta oración mariana sea un modo privilegiado de “comulgar” con la Palabra de Dios. «El Rosario promueve este ideal, ofreciendo el ‘secreto’ para abrirse más fácilmente a un conocimiento profundo y comprometido de Cristo. Podríamos llamarlo el camino de María. Es el camino del ejemplo de la Virgen de Nazaret, mujer de fe, de silencio y de escucha»16. Tres niños se rindieron a la fuerza interior que los había invadido en las apariciones del Ángel y de la Madre del cielo y comenzaron el camino de María, dejándose atraer por los misterios de Cristo. El rezo del Rosario les permitió poner los ojos y el corazón en Jesús recorriendo junto a María los misterios de la vida del Salvador: de la Encarnación a la Cruz y a la Resurrección. De este modo, como dice el Papa17, aprendieron a santificar en compañía de la Virgen todos 12 13 14 15 16 17

Memorias de la hermana Lucía I. Secretariado dos Pastorinhos. Fátima, 2004. P. 56. Ibíd., P. 42. Catecismo n. 67. Pablo VI, Marialis Cultus, n. 42. Juan Pablo II, Rosarium Virginis Mariae, n. 24. cf. León XIII, Octobri mense.

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Centenario de las Apariciones de la Virgen en Fátima los momentos de la existencia: la vida cotidiana, sencilla y oculta como la de cualquier persona (gozosos), los sufrimientos grandes y pequeños (dolorosos) y las alegrías que deben traernos a la memoria y al corazón la felicidad eterna del cielo (gloriosos). Sin olvidar en el rezo del Rosario a los más alejados de Dios, como la Virgen pidió que se rezará al final de cada decena: «¡Oh Jesús mío, perdónanos, líbranos del fuego del infierno, lleva todas las almas al cielo, principalmente las más necesitadas!»18. Con el rezo diario del Santo Rosario, la presencia de María Santísima está asegurada en nuestra vida, como Ella misma le dijo a una de las videntes, Sor Lucía: «No tengas miedo, mi Inmaculado Corazón será tu refugio y tu camino seguro para llegar a Dios»19. Así es la íntima experiencia que los santos han vivido, una auténtica devoción a la Virgen que no consiste, meramente, en la recitación de una serie de oraciones a la Inmaculada sino en una vida de comunión con Ella en la que su presencia llena el alma. Madre Angelita expresa de este modo lo que vivía: «¡Madre mía, Madre mía muy amada! Estoy afligida, tengo angustias, y llamo llena de confianza a las puertas de tu maternal corazón. Madre, Madre mía, ¿no me oyes, Madre querida? Responde, Madre mía, y que esta tu pobre hija oiga tu dulce voz . ¿Qué quieres, hija mía? Nada temas, estoy contigo, ¿no me ves? Acércate a mí, que voy a estrecharte entre mis brazos»20. Esta vida de unión con la Madre de Dios conduce al alma que pone su corazón en solo Dios a gozar de la paz verdadera, la más profunda, la paz espiritual, que «es un tesoro escondido a los del mundo, y descubierto a los hijos de Dios que son fieles a la inspiración»21. Siendo el principal medio «olvidarnos de nosotras mismas por una perfecta abnegación, y poner nuestro corazón en Dios y sólo en Dios»22. Ignacio Guillén, Pbro. 18 19 20 21 22

Memorias de la hermana Lucía I. Secretariado dos Pastorinhos. Fátima, 2004. P. 178. Ibíd., P. 143. Sor Ángela de la Cruz. Escritos Íntimos. BAC. Madrid, 2006. P. 588. Sor Ángela de la Cruz. Un tesoro en vasija de barro. Sevilla, 2011. P. 497. Ibíd., P. 505.

INAUGURACIÓN DE UNA CAPILLA DEDICADA A SANTA ÁNGELA En Quimilí pueblo de la Provincia de Santiago del Estero, Diócesis de Añatuya, en la R. Argentina, el día 5 de Noviembre del 2016, fue inaugurada y consagrada por Mons. José Melitón Chaves, Obispo de esta diócesis; una Capilla dedicada a Santa Ángela de la Cruz, en el Barrio de este nombre. Barrio que fue inaugurado en el año de la Canonización de Santa Ángela, 2003. Los vecinos quisieron ponerle a la calles del Barrio nombres alusivos a la Santa. Calles: Sevilla, Mayo, Madrid, España, Hermanas de la Cruz… Le faltaba al Barrio el lugar sagrado, y una señora gran devota de la Santa, donó al Obispado, un extenso terreno que tenía junto a estas viviendas, para la edificación de la Capilla. En el 2007, la Madre General, Reyes de M.ª, aprovechando la visita que hizo a Argentina, puso ella la primera piedra para la edificación del templo. El lugar quedó señalado con una cruz de madera grande, que se ve a la entrada del mismo. Los vecinos del Barrio de Santa Ángela formamos una Co22

HABLAMOS DE ELLA

Inauguración de una capilla dedicada a Santa Ángela misión para trabajar y conseguir los fondos que se necesitaban para la construcción. Haciendo rifas, vendiendo comida y dulces que los vecinos elaborábamos, vendiendo ropa usada y pidiendo donaciones, algunas nos llegaron de España. Después de nueve años se consiguió tener el Templo para celebrar la Santa Misa, dar catequesis y recibir los sacramentos de Bautismo, Primeras Comuniones y Confirmación. Aunque aún le faltan muchos detalles para su terminación. Una cosa necesaria es que el campanario tenga su campana, y a esto no les llega el presupuesto, pues todavía tienen deudas pendientes y sin saber de dónde les puede llegar alguna ayuda. La Santa Misa solo se la pueden celebrar los domingos, pero todas las tarde se abre la capilla de 19 a 20 h., para hacer hacen oración y visitas al Santísimo; y van gente de los alrededores, sobre todo pobres y enfermos. Santa Ángela es para nuestro Barrio como una Luz que quita la oscuridad de la vida. Su devoción se va extendiendo cada día más. Nos encomendamos a ella con gran confianza. Dios hace continuos milagros y favores por su intercesión. Cosa que alienta la confianza y despierta la devoción hacia nuestra querida Santa Ángela. A ella le pedimos que guarde a este Barrio, que lleva su nombre y que a todos los que aquí vivimos nos guíe por el buen camino. ¡Santa Ángela de la Cruz, queremos imitar tus virtudes! Danos un corazón tan grande y tan lleno de amor como el tuyo, que supo repartir por doquier, raudales de misericordia.

BENDICIÓN DE UN MONUMENTO A SANTA ÁNGELA EN CÁDIZ El pasado 2 de agosto se llevó a cabo la inauguración y bendición del monumento a santa Ángela situado en la Plaza de Viudas en Cádiz. Todo comenzó a mediados del año 2008, cuando se constituyó una comisión con objeto de realizar una serie de actividades, para resaltar la encomiable labor que desempeñan las Hermanas de la Compañía de la Cruz, con sus obras de caridad en nuestra ciudad y, que desde su llegada a Cádiz un 14 de Septiembre de 1984, consiguieron ganarse el corazón de muchísimos gaditanos y, en especial, de los devotos de santa Ángela de la Cruz. En un primer contacto hablamos con el Sr. D. José Macías, que desempeñaba entonces la Concejalía del Mayor del Excmo. Ayuntamiento de Cádiz, quien siempre estuvo atento a nuestras peticiones. Más tarde mantuvimos una conversación con la Excma. Sra. Dña. Teófila Martínez Saiz, por aquél entonces Alcaldesa de nuestra ciudad, quien nos manifestó su buena disposición e interés, destacando la ilusión que nos mostró a contribuir con el desarrollo de los actos. Desde el principio se comprometió, sin dudarlo ni un momento, en ofrecer a la ciudad de Cádiz ese regalo tan anhelado por todos los devotos de santa Ángela y los gaditanos en general como era el monumento de Madre. Precisamente fue el día 14 de septiembre cuando se aprobó la realización de la escultura y cuyo costo asumió el propio Ayuntamiento para ser colocada en alguna de las calles adyacentes al convento, obra realizada por el escultor D. Manuel Ramos Corona. Durante el año en que estuvimos conmemorando dicha efeméride, se organizaron los siguientes actos: una Misa de Apertura presidida por el Obispo de Cádiz, una visita a la Patrona de Cádiz la Virgen del Rosario y una Vigilia de Oración en la festividad de la Inmaculada. Por otra parte se organizaron dos conferencias, una impartida por el Ilmo. y Rvdmo. Don Antonio Dorado (Obispo de Cádiz cuando la llegada de las Hermanas de la Cruz a Cádiz) bajo el lema “Llegada a Cádiz de las Hermanas de la Cruz” y otra por D.ª Pilar Macarro Sancho bajo el lema “María Nuestra Salud”. Así mismo se celebraron dos Rosarios de la Aurora, una Procesión-traslado con la imagen de Santa Ángela a la Parroquia de San Antonio y finalmente un Triduo de Acción de Gracias. Además de estos actos, el día 17 de Enero de 2009, se organizó una excursión a la Casa Madre de las Hermanas de la Cruz en Sevilla, llegando a completar dos autobuses. Una especial emoción nos embargó a todos los que estuvimos allí, cuando de repente 24

HABLAMOS DE ELLA

Bendición de un Monumento a Santa Ángela en Cádiz nos sorprendió el continuo repicar de las campanas por un grupo nutrido de Hermanas, que expresaban su entusiasmo al tirar de la cuerda de la campana. Al preguntarles qué estaba pasando, nos contestaron llenas de alegría, que habían recibido la noticia desde Roma del nombramiento de Venerable a Madre María de la Purísima. Así nuestra sorpresa se convirtió también en alegría, compartiendo con ellas su felicidad y regocijo. Como colofón a todos estos actos programados y como decíamos al principio de este artículo, el día 2 de Agosto de 2016 y tras 5 años de demora, como consecuencia de la remodelación de la plaza donde se ha ubicado el Monumento, la ciudad de Cádiz saldó la deuda que tenía pendiente con las hermanas de la Cruz. Coincidiendo con la fiesta de la Virgen de los Ángeles y día en que Santa Ángela fundó su compañía, tuvimos una misa conmemorativa a las siete de la tarde en la capilla de las Hermanas en la calle Zaragoza, que fue concelebrada por diez sacerdotes. Tras la eucaristía, nos dirigimos en procesión a la plaza de Viudas, para la bendición del Monumento. La comitiva, que era muy numerosa, iba encabezada por tres acólitos portando la Cruz Parroquial y dos ciriales; a continuación iban las ancianas de la residencia de las Hermanas en Cádiz, los devotos, representantes de las Hermandades y Cofradías, seguidos por los representantes políticos, sacerdotes y acólitos con el “Sin Pecado”. Se llegó a la plaza, donde un gran número de personas esperaban la llegada de la comitiva, y se procedió a la bendición del monumento que corrió a cargo del Párroco de San Juan Bautista de Chiclana, Rvdo. Padre José Manuel Daza. El acto fue muy emotivo quedando todos los presentes con la alegría y la satisfacción de que por fin en Cádiz, tengamos el privilegio de tener a Madre ubicada en una de sus plazas, cerca de la Residencia de las Hermanas de la Cruz. Una vez terminada la bendición, regresamos al convento en solemne procesión, con las calles engalanadas y numeroso público en las aceras, balcones y ventanas a lo largo de todo el recorrido. A la llegada había preparado un aperitivo donde culminamos una entrañable y alegre jornada. Por último, queremos expresar nuestro agradecimiento a todas las personas que participaron en todos los actos que se organizaron (Obispos, Sacerdotes, Hermandades y Cofradías, Empresas y Colegios Oficiales y Grupos Políticos que apoyaron su instalación). Queremos hacer una mención especial en nuestro agradecimiento a las ancianas de la Residencia de Cádiz, que contribuyeron muy generosas en el coste de azulejo-mosaico que fue instalado en la calle, justo encima de la puerta de entrada a la capilla. Cádiz, Agosto 2016 25

SANTA MARÍA DE LA PURÍSIMA DE LA CRUZ

SANTIDAD Y VIDA CONSAGRADA 1.- ¿Qué piden Dios y la humanidad a los consagrados? Me paro brevemente sobre la primera frase de la Carta a los Consagrados del Papa Francisco: “Espero que cada forma de vida consagrada se pregunte lo que Dios y la humanidad de hoy les piden”.1 Después el Papa enumera ejemplos concretos de retos a los que hoy en día los consagrados deben contestar. Como religioso y como Obispo también me siento responsable y llamado a dar respuesta a la pregunta del Papa: “¿Qué piden Dios y la humanidad de hoy a los consagrados?” A mi entender, una contestación clara a esta pregunta puede constituir la resolución concreta a los distintos y problemáticos desafíos de hoy en día. Las comunidades de consagrados se han transformado en comunidades internacionales o, mejor dicho, en intercontinentales y como las ciudades y las naciones son multiétnicas y multiculturales, así también los monasterios y las casas religiosas reflejan esta realidad. Se trata de un hecho que no nos debe asustar ni mucho menos alarmar. La Divina Providencia propone hoy este desafío: la acogida, como oportunidad de crecimiento y maduración.

Monasterio de la Encarnación, Ávila. 1

1.- Pongo en común dos de mis experiencias. Hace unos meses he visitado en Ávila los Monasterios de la Encarnación y de San José, estaban llenos de monjas provenientes de varias naciones. ¿Qué es lo que buscan estas jóvenes que llegan a estos cenáculos te-

Papa Francisco, Carta Apostólica para todos los consagrados (21 de Noviembre 2014), nº 5.

TESTIMONIOS

Santidad y vida consagrada resianos, famosos en todo el mundo de Dios? Buscan autenticidad y radicalidad de vida monástica, basada en la oración y en el sacrificio. Desean vivir en los lugares santificados por su Santa Madre Teresa, sentir el perfume de sus virtudes, oír sus pasos, percibir el eco de sus palabras, en una palabra, desean “verla” en medio de ellas. En un monasterio he podido contemplar una imagen de la Santa hasta de tamaño natural, sentada en la silla de la priora. Allí Teresa se le ve como presencia viva que alienta, sostiene y forma a sus hijas espirituales. Hoy los jóvenes buscan la radicalidad evangélica. 2.- Mi segunda experiencia la hice también en tierra española, tierra bendecida por el Señor y por eso combatida por el enemigo de Dios. Con motivo de la Beatificación de Sor María de la Purísima en Sevilla, en septiembre de 2010, visité la Casa-Madre de la Compañía de las Hermanas de la Cruz. Presencié un espectáculo insólito. En la hermosa Capilla estaban reunidas más de un centenar de monjas, sentadas en el suelo en actitud de oración. Me impresionó lo numerosas que eran y su alegría a pesar de lo dura que es su vida (duermen en duras tarimas).

Iglesia del Convento de Santa Ángela de la Cruz en Sevilla.

La ceremonia de Beatificación se celebró el 18 de septiembre en el Estadio Olímpico de Sevilla, bajo la dulce mirada de la Macarena, excepcionalmente trasladada en procesión desde su templo hacia el Estadio. Después de la lectura de la Carta Papal, las cincuenta mil personas presentes irrumpieron 28

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Santidad y vida consagrada en un aplauso gozoso, ininterrumpido y larguísimo. Todas las autoridades civiles y militares presentes, quería manifestar la gratitud de los ciudadanos por la obra diaria, discreta pero concreta de las Hermanas de la Cruz a favor de los pobres, de los enfermos y de las familias en dificultad. A mi parecer, la ovación que duró más de un cuarto de hora, expresaba todo el sentido y la importancia de la presencia y obra de las Hermanas hacia los marginados de la ciudad. Aunque sea verdad que hoy en día existe el apoyo de las instituciones civiles para las personas con problemas, no se puede negar que a las personas o a las familias necesitadas y solas, les hace falta una presencia continua, incondicional y gratuita de caridad como signo de la caridad de Dios hacia sus hijos con dificultad. Vuelvo entonces a la pregunta del principio: ¿Qué piden Dios y la humanidad a los consagrados? Dios espera radicalidad y fidelidad a su consagración y la humanidad espera también de autenticidad en su testimonio evangélico. La actuación concreta en la historia de esta radicalidad y autenticidad depende de las distintas situaciones y variados carismas espirituales de personas y comunidades. 2. Los consagrados, testigos de la presencia transformadora de Dios. ¿Qué quiere decir entonces, radicalidad y autenticidad, palabras quizás deterioradas por el uso pero que son insustituibles para nuestro argumento? Hoy también Dios quiere armonía entre consagración y misión. La vida consagrada es una existencia escondida en Dios, toda centrada en el único bien que es Él. Ésta obedece al pie de la letra al primer mandamiento: “Yo soy el Señor tu Dios, no tendrás otro Dios fuera de mí”. Para los consagrados su única aventura es el amor de Dios. Por eso el Papa Benedicto XVI los llama testigos de la presencia transformadora de Dios.2 En un mundo lejano y olvidado de Dios, los consagrados están llamados a hacer visible la presencia de Dios en la historia. Se trata de convivir con Dios, de dejarse abrazar por su amor, de dejarnos transformar por Él. Los

Homilía del 24 de Abril de 2005.

TESTIMONIOS

Santidad y vida consagrada laicos ven a los consagrados como personas totalmente pertenecientes a Dios. Por eso entre otras cosas es significativo el hábito que ellos llevan, símbolo de pertenencia exclusiva al Señor, al Evangelio y a la Iglesia. 3. No anteponer nada al amor de Cristo. Se trata de una exhortación de la Regla Benedictina (IV, 21). La vida consagrada es una vida en Cristo, una vida de pasión total por Cristo y por su Reino. El consagrado es todo de Jesús para poder ser para todos el mismo Jesús. La vida consagrada realiza una exigencia del alma por la cual se le da la absoluta primacía a Cristo, es una imitación de Cristo, de sus sentimientos de caridad, de generosidad, de perdón. El consagrado es un “alter Cristus”. Para poder llevar a cabo esta imitación, se requieren tres elementos: 1. Escucha de la palabra de Dios que se hace alimento cotidiano para vivir y discernir la voluntad divina; 2. Los consagrados vienen transformados así, en modelos de vida apostólica; 3. Formados por Cristo y su palabra, son misioneros del Evangelio para toda la humanidad. 4. Una vida sobreabundante. Quien ama da sin medida, no es mezquino y no teme ser generoso. La vida consagrada se asemeja al gesto de la madre que da el alimento al hijo y continúa sustentándolo con su amor, aunque sea mayor. Como una madre no se cansa nunca de dar amor a su hijo así la vida consagrada vive de la sobreabundancia del amor divino. La Congregación de las Causas de los Santos está ocupándose del Proceso de seis Religiosas de Bérgamo, “Hijas de los Pobres”, fallecidas en 1995 en el Hospital de Kikwit en la República Democrática del Congo, afectada por la enfermedad del ébola. Fue un gesto de sacrificio y de coraje ante una epidemia devastadora que no se podía contrarrestar. Las Hermanas habían contraído la enfermedad en los pasillos del Hospital y no querían abandonar a los pobres enfermos afectados por el virus. Para ellas no había amor más grande que dar la vida a favor suyo. Las monjitas poseían una competencia de enfermería muy elevada, sin embargo, su competencia más 30

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Santidad y vida consagrada grande era la capacidad de transformar un Hospital en un lugar de caridad, siendo tal su caridad que se sobreponía a la enfermedad. La historia de estas misioneras constituye un ejemplo fiel de la esencia de la vida consagrada que es una vida “despilfarrada”, entregada sobreabundantemente por amor a Dios y por el bien del prójimo. No se trata del despilfarro por droga u otro vicio, sino de un despilfarro por sobreabundancia de amor, igual que el gesto de la mujer que lavó los pies a Jesús con óleo de suave fragancia. 5. La humanidad espera de los consagrados “un algo más”. Según la feliz expresión de un Obispo, la vida consagrada debe seguir siendo en la Iglesia y en el mundo “un algo más”, no relativo sino esencial.3 La vida consagrada, sostenida por un amor sobreabundante, pobre y humilde, orante y mendigo, obediente y misionero, por una parte, es consciente de estar muy por debajo de la respuesta sobreabundante con que debería corresponder a tanto amor de Dios y por otra parte sabe lo fecundo que es su amor y lo necesario que es para la Iglesia.4 Con la profesión religiosa los consagrados deciden pertenecer más y más, a Dios, dedicarse de lleno a sus hermanos y hermanas de comunidad y a todo rostro humano que habita en nuestra tierra. Los consagrados son hombres y mujeres del “lleno”, del don perfecto, son testigos de la exageración de la caridad. Por eso, la respuesta a la pregunta inicial se queda siempre la misma: radicalidad y fidelidad. Las consagradas fallecidas por el ébola permanecieron fieles a su promesa de radicalidad evangélica. En su vida de entrega brotó su sacrificio de caridad total hacia los contagiados por el virus y por eso hicieron visible y creíble en la historia la sobreabundante caridad de Dios. Cardenal Angelo Amato, SDB 3

MAURO MARIA FORTINO, Mujeres y hombres del “lleno”. Mensaje de la vida consagrada, Conferencia Episcopal Sarda, Alghero 2014-2016. PIER GIORDANO CABRA, El Pontificado de Benedicto XVI y la vida consagrada, Como lámparas encendidas. La vida consagrada según Papa Benedicto XVI, Centro USMI 2013, p. 2

CUESTIÓN DE DETALLES

María Isabel con la edad de cinco años.

Santa María de la Purísima de niña era alegre y dulce de carácter. Divertida y a veces traviesa, su inteligencia le permitía sacar muy buenas notas sin excesivo esfuerzo. Destacaba en matemáticas y se le daba bien el baloncesto. El trato frecuente con dos de sus tías que eran religiosas irlandesas y el ambiente de piedad que vivía en su casa, fomentaron en ella su preferencia por lo espiritual. Dedicaba parte de su tiempo libre a visitar enfermos, ancianos y familias con pocos o ningún recurso. Esto lo hacía casi siempre por encargo de su madre, Margarita Romero, quien estuvo siempre muy volcada con las personas necesitadas.

Fueron precisamente ellos, los pobres, los que llevaron a María Isabel hasta Sor Ángela. Dos hermanas limosneras del convento de la calle Rey Francisco de Madrid llegaron providencialmente un día a su casa. Vestidas con el hábito franciscano y “pobres con los pobres”, le hablaron de la fundadora, la zapaterita de Sevilla y poco a poco fue conociendo la joven María Isabel el espíritu que el Señor inspiró a Sor Ángela y en él encontró la horma de su zapato. Hermana María Sofía, la que fuera durante más de cuarenta años Vicaria General de La Compañía de la Cruz y quien vivió más tiempo junto a Madre María de la Purísima, no dudaba al señalar que el amor a los pobres inclinó a ésta a hacerse Hermana de la Cruz y la propia Santa en sus cartas recuerda constantemente la gran misión que tienen con ellos las Hermanas de la Cruz: “Nuestra misión es con los pobres; tenemos que convencernos de que hemos de salvarlos a través de nuestro sacrificio, nuestra abnegación, y nuestra vida humilde y escondida en Dios; no de otra manera, ni por grandes discursos y obras aparatosas que sólo producen ruido”. Y con los pobres, las Hermanas se abrazan a la Cruz, cruz de humildad y pobreza. En la pobreza está, en palabras de Santa María de la Purísima, la verdadera riqueza: 32

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Cuestión de detalles “Hemos de fomentarnos el amor a la pobreza, convencidas de que en ella está la verdadera riqueza, ya que si nos quita materia nos da espíritu y, por lo tanto, nos enriquece sobremanera”. No era Margarita Romero, persona que gustara de adornos ni de vestidos llamativos. Desde su viudedad, que tuvo lugar a los dos años de ingresar María IsaHermana de la Cruz atendiendo a una anciana bel en la Compañía de la Cruz, en su domicilio. siempre vistió colores oscuros. Tenía un broche de forma redonda que siempre llevaba con un abrigo negro; tan poca importancia le daba a aquel adorno que el broche “vivía” en la solapa y si ella llevaba puesto el abrigo, también llevaba el broche. Cuenta una Hermana de la Cruz que, estando la Hermana María de la Purísima destinada en Lopera, todavía de velo blanco, fueron a visitarla su madre y una de sus hermanas. Ya había escrito a su familia María Isabel varias veces y les había dicho que era muy feliz en el convento y que, aunque su tarea en ese momento era con niñas, estaba contenta porque muchas eran niñas pobres. Hacía frío y la madre de la entonces Hermana María de la Purísima, llevaba puesto el abrigo negro y naturalmente, el broche. María Isabel se acercó a ella y en voz baja le pidió que se lo quitara por respeto a las familias de aquellas niñas. Esa delicadeza con los demás y en especial con los más desfavorecidos eran reflejo de la espiritualidad sencilla y elegante de la santa, siempre sin desviarse del carisma de Sor Ángela “pobre con los pobres para acercarlos a Cristo”. A las Hermanas les insistía mucho en esto: “Con respecto a los enfermos y necesitados, generalmente nos sacrificamos con generosidad, pero nos falta ese punto que MADRE tanto nos decía: considerarlos como a nuestros señores”. 33

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Cuestión de detalles El Cardenal Fray Carlos Amigo Vallejo que tuvo ocasión de tratar a la Santa en varias ocasiones, dijo con motivo de la canonización de ésta, que él la definiría como “la elegancia de la virtud”. También añadió: “le tenía un gran cariño a los pobres. Se distinguió mucho por eso y por su gran labor en su propia congregación. Recogió lo mejor del espíritu de Santa Ángela pero actualizándolo”. El P. Teodoro León presenta Uno de los momentos de la terapia ocupacional en una de las residencias de ancianas la santidad de Madre María que tiene el Instituto de Hermanas de la Cruz. de la Purísima como actual y alcanzable invitando a todos a seguir su ejemplo. Los testimonios de las personas que conocieron a Santa María de la Purísima están repletos de pequeños detalles, como este del abrigo; gestos sin importancia aparente que conforman una santidad cercana. Olga Salvat. Madrid. Diciembre de 2016

“LAS NIÑAS DE MADRE MARÍA DE LA PURÍSIMA” En Estepa, rondando los finales de la década de los cincuenta, junto con las Escuelas Estatales de la calle Saladillo y la calle Cardenal Spínola, la Parroquial de niñas en la Plaza del Carmen y el Colegio de niños de los Padres Franciscanos, existía el colegio de las niñas de las Hermanas de la Cruz. En este colegio donde solo existían tres aulas: la de las niñas mayores, la de las medianas y la de las pequeñas, se impartían las asignaturas formativas de aquella época: geografía e historia, lengua, matemáticas, formación del espíritu nacional y religión. También tenían asignaturas complementarias: naturales, trabajos manuales, prácticas taller y formación para el hogar junto con materias instrumentales: lectura, escritura, dibujo y cálculo. Todas estas asignaturas eran acompañadas y aderezadas con los inherentes hábitos de: deberes, conducta, puntualidad y aseo. En este colegio se iniciaban y terminaban las clases con un rezo, y a las doce de la mañana se rezaba el Ángelus a la Virgen María. La Mesa de la Hermana maestra, estaba sobre una tarima de madera delante de los pupitres de las alumnas, pupitres cuyos tinteros se rellenaban por dos alumnas (cada semana dos diferentes) de tinta para realizar la caligrafía. Se explicaban las distintas materias y en las pizarras se ponían las tareas. El recreo era de media hora y en él había que jugar y moverse, nada de hacer grupitos de charlas que excluyeran a las demás. En este colegio, también había clases por la tarde, y se iniciaban con el rezo del Rosario, se realizaban dibujos y manualidades, se hacían labores de bordados y vainicas y se repasaban las tablas de multiplicar. También tuvieron cabida las mujeres que por circunstancias de su vida, no pudieron asistir al colegio de niñas, dándoles una oportunidad formativa y siendo el inicio de lo que ahora conocemos como las Clases de Adultos. 35

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“Las Niñas de Madre María de la Purísima” Los días extraordinarios en nuestro calendario litúrgico, Navidad, Cuaresma… o en los días del mes de Mayo, el Domund, nacimiento de Sor Ángela, hoy Santa Ángela, se impartían clases especiales, se aprendían canciones y se contaban historias para que esos días no pasasen desapercibidos. En este colegio, muchas niñas tuvieron la suerte de conocer y vivir con una santa: La Madre María de la Purísima de La Cruz. Esta mujer religiosa, cuya biografía no relataremos en este artículo, pues se puede conocer de ella en cualquier página web donde insertemos su nombre, fue maestra en este colegio. Y esa faceta de su vida religiosa es, la que hoy, antiguas alumnas de ella quieren transmitir, sin dejar de lado que esta mujer santa se entregó a todos los que la necesitaban: los pobres y enfermos ocupaban un lugar privilegiado en su corazón. Sus alumnas, las que hoy escriben este artículo solo pueden hablar de ella maravillas, de su dulzura en el trato con todas las niñas, de esa inclinación tan especial por las que más necesitaban cariño, como aquellas niñas que a una edad tan temprana ya habían perdido su madre terrenal. Su consuelo para ellas era decirles que en el cielo está la Virgen que es nuestra madre y también la mamá de Dios, como enseñaba esa bonita canción. Destacar de ella su sonrisa, e incluso cuando tenía que reñir, porque no le quedaba más remedio, su regaño era dulce, constructivo. Pese a su altura se hacía pequeña ante los demás, intensamente humilde y austera:

“de lo poco, poco” Hacía las cosas de la vida cotidiana de forma extraordinaria, con amabilidad, paciencia y entusiasmo. Siempre pregonaba por su boca el vivir en presencia de Dios, poder comunicarnos con Él mediante la oración, la reflexión y la meditación. “Nos enseñó a vivir diariamente el Evangelio de Cristo con una paciencia y humildad que emanaba como fuente inagotable de su ser. Nos mostró la caridad cristiana, no desprendiéndonos de lo que nos sobra, sino dándoselo a los demás sin pedir nada a cambio, sacrificando nuestro tiempo y humildes pertenencias para ofrecerlas al prójimo. Y sobre todo nos infundió un inmenso amor por la Virgen, enseñando jaculatorias para todas las advocaciones marianas “La Virgen nunca dejará de estar a vuestro lado en los momento de dolor pero os acompañará siempre en vuestras alegrías”. 36

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“Las Niñas de Madre María de la Purísima”

Compartió muchos años con las alumnas, dándose a los demás y a ellas. “Ella cambió nuestras vidas, fuimos caminando en nuestra niñez cogidas de su santa mano, con sus sabios consejos, avivando nuestra fe y estamos seguras de que con nosotras, nunca fue tiempo perdido. Esculpió nuestras personalidades, en clase éramos sus alumnas y fuera de ella era nuestra amiga y guía espiritual, una madre que nos formó e informó”. Han pasado los años y cada una de estas alumnas ha guiado su vida por el camino que la Providencia les tiene destinado, pero les dicen a su maestra, a Santa Madre María de la Purísima, desde el recuerdo: “Tú nos fuiste abriendo los ojos advirtiéndonos de la dureza del destino, haciéndonos fuertes ante las adversidades participándonos que la madurez abriría otras puertas y que con la responsabilidad, la sencillez, la caridad cristiana y el amor llegaríamos al corazón del Señor. Has sido el pilar donde nos hemos apoyado siempre y la fuente donde abrevar en las sequedades espirituales.” En los últimos días de su vida, cuando la cruz de la enfermedad se le hizo sentir de una forma más dolorosa sólo se le oyó decir momentos antes de su muerte: ¡Qué alegría cuando me dijeron vamos a la casa del Señor! Constante en ella fue la unión con el Señor, identificándose con su Voluntad, hasta el 31 de octubre de 1998 que murió a los 72 años de edad. 37

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“Las Niñas de Madre María de la Purísima” “El testimonio más fuerte, lo vivimos cuando fuimos llamadas para visitarla en la Casa Madre en Sevilla cuando estaba en el umbral de su muerte. Nos regaló unas palabras muy bellas, auténtico testamento y tesoro espiritual para nosotras. Nos pidió que le cantásemos el “Bendita sea Tu Pureza”, fue una despida, la última de su vida para nosotras. Ella lloró, la única vez que la vimos llorar”. Sus alumnas fueron testigos presenciales de su beatificación en la mañana del sábado 18 de septiembre de 2010, y muchas de estas alumnas también peregrinaron a Roma para asistir en la Plaza de San Pedro a su canonización el 18 de octubre del pasado año 2015. Nunca ha sido extraño ni sorpresivo el hecho de que llegase a ser santa, porque era especial, era «una santa de lo cotidiano», pero lo que nunca esperaron sus alumnas es el poder presenciarlo, y es que esta religiosa es la segunda santa en la Iglesia Católica con el proceso de canonización más rápido, (el primero fue San Juan Pablo II). “Pero seguimos manifestando a los cuatro vientos que seguimos viendo sus manos. ¡Qué poder el de sus manos! Su contacto, su ternura sin medida. Su afecto sincero era acoger la fragilidad del que sufre, tratarlo con ternura. Su terapia la cercanía ante el sufrimiento ajeno”.

“Tus manos hacían cosas admirables, tus manos hacían y hacen y harán milagros. Gracias Santa Madre María de La Purísima, quien te escuche con el corazón encontrará armonía, silencio y gestos cuando besemos las reliquias de tus manos”. “Es nuestro testimonio. Gracias por todo lo recibido de ti y puesto a los pies de Él y de Ella”. (Artículo realizado con los testimonios y vivencias de las antiguas alumnas de Santa María de la Purísima, así como del mensaje de amor que le dedicaron con su escrito de fecha 22 de octubre de 2004, fiesta de Santa María Salomé y que firmaron así: Tus niñas: Carmen Pradas, M.ª Loli Castillo, Mari Llamas, Carmen Chía, Carmen Álvarez, Nani Castillo, Pili Cáceres, Nati Manzano, Pili Ramos, Carmen Machuca, M.ª Aurora Reina, Victoria Alfaro, Pili Jiménez y Lola Atero). 38

“TU VIDA FUE, HERMANA MARÍA DE LA PURÍSIMA CONTEMPLACIÓN Y SERVICIO…” Hoy me vuelvo a sentar en Burgos, con un Otoño agradable, por tener todavía unas temperaturas, no demasiado bajas, para trasladarme a mi querida Sevilla, esa gran Ciudad por la que han ido pasando tantas y tantas Culturas, dejando cada una de ellas, lo más rico, variado y distinto, que a la magnífica Ciudad del Guadalquivir, la han ido enriqueciendo a lo largo de los Siglos, de los Años, y de todos los Tiempos… Porque… ¿qué español no ha ido a Sevilla, aprovechando un “Puente largo, como a todos nosotros nos gusta…? Por eso cuando coges el tren en la Estación de “Atocha” en Madrid, y te montas en el “AVE”, dirección Sevilla, ya te vas encontrando con la alegría de los Sevillanos, y si además tienes la ¡Suerte…! de que alguno de ellos se “siente a tu lado…”, ya sabes que el viaje se te va a hacer más corto, aunque recorras los mismos kilómetros, porque la simpatía, la alegría, la expresividad, y la amistad que te ¡brindan…! los “andaluces” y de un modo muy especial los Sevillanos… te hace sentirte feliz y contenta, y por tanto, encontrarte muy bien…! Por eso yo que he vivido 12 años en el Colegio del “CUCO”, nombre ¡precioso!, con el que se le conoce en toda la Provincia de Cádiz, he podido conocer también, a muchas personas del “Puerto de Santamaría, de Sanlúcar de Barrameda, y como no, de mi querida Sevilla… Y fue allí, en Jerez de la Frontera, donde conocí, a las Hermanas de la Cruz, a los tres o cuatro meses de haber llegado a ese Rincón de nuestra “España Blanca”, y donde alguna monja de Jesús-María, me decía un día en el Colegio Mayor de Granada, donde todas nosotras estudiábamos la Carrera: ¿Sabes lo que te digo Gloria? Mira qué bonito, en JEREZ de la Frontera, se paró el reloj, y se vive muy bien. Sí muy bien. Y además en Jerez, coges un “CERCANÍAS”, actualmente “tren de media distancia”, y en una hora escasa, llegas a Sevilla. No tienes que aparcar el coche, que es otra complicación. Coges el autobús urbano, o el Tranvía recuperado, 39

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“Tu vida fue, Hermana María de la Purísima contemplación y servicio…” y en unos pocos minutos, te encuentras en la “famosa Calle Sierpes” o en la Plaza de la Encarnación”, centro de la Capital de “HISPALIS”, y desde allí, en menos de cinco minutos, te encuentras la estatua de “SOR ÁNGELA DE LA CRUZ”, siempre con flores, y alguna persona rezando. Flores que se las llevan los sevillanos, y de una manera muy especial, los “Obreros” y los más pobres y olvidados de la tierra, que eran los que más querían a Sor Ángela de la Cruz. Y en menos de cinco minutos, como mucho, por una acera muy estrecha llegas al ZAGUÁN, de las Hermanas de la Cruz, siempre con personas mayores, jóvenes, y de mediana edad; tocas la campana, y aparece una Hermana, que te sonríe y te recibe con alegría. La primera vez, que yo fui a la las Hermanas de la Cruz, de Sevilla, fue para hablar con HERMANA MARÍA DE LA PURÍSIMA. Por un asunto muy concreto, que quizá podría llamar con un nombre tan bonito y tan verdadero, como por ejemplo “HISTORIA DE TIERRAS Y SEMILLAS”. Porque mi PROVINCIAL de entonces, no veía muy clara la vocación de una antigua alumna de nuestro Colegio del “CUCO” donde yo estaba viviendo y dando clases en el Colegio, y ¿no sería posible, me dijo, “Una experiencia en las HERMANAS DE LA CRUZ”? Yo lo veía muy difícil, y por eso decidí pedir una “VISITA CON LA MADRE GENERAL DE LAS HERMANAS DE LA CRUZ, llamada por todo SU INSTITUTO con ese nombre tan bonito y lleno de sentido, como es: “MADRE”. Yo a “MADRE”, la había visto, en la “inauguración de la residencia de ancianas, a los tres o cuatro meses de haber llegado a JEREZ, y al verme con la máquina de fotos en la mano, me dijo “sonriente”: “FOTOS A LAS HERMANAS, NO. NO SE PREOCUPE, LO SÉ”. Y desde entonces, efectivamente, fotos a las Hermanas NO. Pero fotos para las Hermanas SÍ. Y así lo he seguido haciendo y lo seguiré haciendo, siempre que una de las Hermana de la Cruz me lo pida, porque me parece que tener en este Siglo XXI, tan lleno de problemas, de injusticias, y desastres ecológicos y humanos, unas buenísimas amigas, como son todas y cada una de las HERMANAS DE LA CRUZ, sin excepción ninguna, es para mí, motivo de una verdadera ¡fiesta, y una gran alegría! ¿Y que deciros, una vez más de HERMANA MARÍA DE LA PURISIMA? Porque son tantas y tantas cosas las que se pueden contar de una persona, ya Beatificada y Canonizada en Roma, el día 18 de Octubre del 2015, que 40

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“Tu vida fue, Hermana María de la Purísima contemplación y servicio…” voy a empezar con unas frases, que pueden “Enmarcar muy bien, la vida de una SANTA, que fue durante 22 años MADRE GENERAL DE SU INSTITUTO. • “YA VEÍS… UN ESCRIBA ES COMO UNA “MADRE DE FAMILIA”, QUE VA SACANDO DEL FONDO DE “SU CORAZÓN”, lo NUEVO, y los ANTIGUO (Mt, 13, 14-52).

• Lo Nuevo, porque DIOS quiere seguir creando VIDA, Ilusión, y Novedad en el día a día, y… • Lo Antiguo, porque lo mismo que el vino tiene “Solera” y no lo guardamos en una botella cualquiera, como lo hacemos con el agua, que metemos en la nevera para que esté fría y la sacamos a la hora de comer… • El vino lo embotellamos en un frasco de cristal bonito, con etiqueta “lacrada” y fechada…” porque es un vino de gran valor. De Hermana María de la Purísima puedo empezar diciendo, algo tan cierto, tan de “Su estilo de Vida” y tan verdadero, como estas frases: • “Seamos amigos de Dios, como hijos “muy queridos, o como esta otra. • En la que un “tal LEVÍ, recaudador de Impuestos, en el Siglo primero del Mediterráneo Antiguo en el que “Jesús de Nazaret”, predicaba como era, EL REINO DE DIOS, nos cuenta que… • En una cena inolvidable, en la que también estaba invitado JESÚS de Nazaret, con muchos de nosotros, que éramos “lo peorcito” de todo Jerusalén, nos decía que… • “La oveja perdida…” era la mejor de todo el rebaño, y por eso el PASTOR, que la quería tanto, de madrugada, la oyó “balar”, en lo más hondo del barranco, y no dudó en bajar con rapidez, ponérsela, sobre sus hombros, y lleno de ¡ALEGRÍA!, llamó a sus vecinos y les dijo: • “¡¡FELICITADME!! porque he encontrado la oveja, que se me había perdido”. - Pero las cosas de DIOS, no son así, nos hubiera dicho, también hoy “HERMANA MARÍA DE LA PURÍSIMA”. Porque para DIOS, nadie necesita estar cargado de méritos para ser querido, ya que el AMOR DE DIOS, es como el de una “MADRE” QUE PREFIERE: - Al pequeño, hasta que crezca… - Al enfermo, hasta que se cure…y - Al que está de viaje, hasta que vuelva a casa. (Dolores A.) 41

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“Tu vida fue, Hermana María de la Purísima contemplación y servicio…” Por eso, HERMANA MARÍA DE LA PURÍSIMA, cuidaba mucho la formación de las “Postulantes y Novicias. Esas jóvenes, que “daban el paso” de entrar en el Noviciado de las Hermanas de la Cruz, y que cada día recibían una buena formación, humana, religiosa y espiritual, que toda joven, tiene que ir aprendiendo, para empezar a ser una buena HERMANA DE LA CRUZ, y que desde el primer día, sepa la importancia que tiene el saber vivir… “ENFRENTE Y MUY CERCA DE LA CRUZ DE CRISTO”, como quería SOR ÁNGELA DE LA CRUZ, y así, ir aprendiendo, poco a poco, de las Hermanas ya con Votos temporales y perpetuos, cómo se tiene que ir “promocionando” a las personas más pobres, de todos los siglos, de todos los años, y de todos los días. Porque, Dios no quiere las grandes diferencias sociales que se han ido creando en nuestro mundo “Globalizado” y que Hermana María de la Purísima, con esa fidelidad tan “exquisita, al Carisma del Instituto”, lo fue conservando, y además, lo supo ir adaptando, como quería la Iglesia, al terminar el “CONCILIO VATICANO II” sabiendo conservar sin duda ninguna lo Antiguo y siempre necesario, para que el Carisma del Instituto, se siga conservando “Fresco, vivo, y al mismo tiempo actualizado”, pero sin quitarle ¡NADA! de la Riqueza “CARISMÁTICA” de “SOR ÁNGELA DE LA CRUZ”, y que, con tanto “Mimo” y exquisito, muy exquisito cuidado, Hermana María de la Purísima, lo supo seguir conservando” y por eso, Las Hermanas de la Cruz, siguen caminando HOY, por las calles de pueblos grandes y pequeños, y por los extrarradios de las grandes Ciudades. • Sonriendo, si se encuentran en la calle a personas muy conocidas. • Respetando a las Hermanas, “su estilo de vida”. • Que es en este Siglo XXI, “PRESENCIA VIVA DE DIOS”. • De ese DIOS, que las HERMANAS DE LA CRUZ. Sin casi darse cuenta, siguen sembrando, cada día, Magníficas “Semillas de AMOR, ALEGRÍA, PAZ y PERDÓN”. Y por eso en los Barrios alejados de muchas Ciudades, se van encendiendo unas “LUCES” que a muchas personas les hablan de DIOS. Y en las Plazas y calles de las Ciudades, se va oyendo una “serena y magnífica Música, que las personas que la escuchan, se hacen la misma pregunta: “Este Concierto, tan afinado, que tanto no gusta ¿LO ENSAYARÁN LAS HERMANAS DE LA CRUZ EN LA ORQUESTA DE DIOS?” Gloria Neve, R.J.M. Día 3 Diciembre 2016 42

BENDICIÓN DE LA CAPILLA SANTA MARÍA DE LA PURÍSIMA Monte Quemado Santiago del Estero El pasado 2 de setiembre el Obispo de Añatuya, Monseñor José Melitón Chaves bendijo en Monte Quemado la Capilla dedicada a Santa María de la Purísima. En la ciudad de Monte Quemado, en el Barrio El Canal, uno de los más pobres y periféricos, se construyó en el tiempo de tres meses una capillita pequeña, como para albergar a 200 personas, dado que hasta entonces no tenían lugar para celebrar la Eucaristía, ni las catequesis, sólo la sombra de algún árbol o el salón donde la Municipalidad guarda sus herramientas de trabajo. Fue una iniciativa de la gente del Barrio acompañados por el Párroco, que estuvo presente el año pasado en la ceremonia de canonización en Roma, que conoció y habló varias veces con Santa María de la Purísima, que no ahorró ningún esfuerzo para llevar a cabo este deseo; y que según él es un orgullo para nuestro pueblo rendirle este homenaje a la primera santa reconocida por la Iglesia que pasó por Monte Quemado, y cuya presencia hacen vida sus hijas, las Hermanas de la Cruz. Todos colaboraron en la construcción de la capilla: Un bienhechor donó el terreno y en abril pusieron manos a la obra: la Municipalidad (o 43

“SUS DEVOTOS AGRADECEN SU CANONIZACIÓN”

Bendición de la Capilla Santa María de la Purísima. Monte Quemado Santiago del Estero Ayuntamiento) envió los obreros para limpiar de malezas el lugar, las familias también ayudaron a limpiar, y hasta el Padre Mario con los catequistas y los niños. También hubo que hacer rifas, venta de comidas, ropa usada, y cuantos recursos fue posible para reunir el dinero para los materiales y la mano de obra. Alguien donó los bancos, uno más las ventanas, el altar y el ambón fabricados con madera de quebracho, la instalación eléctrica, todo fue llegando poco a poco. Un maestro de escuela pintó el cartel de entrada, “Capilla Santa María de la Purísima”, que el día de la fiesta apareció adornado con flores. La familia más cercana (a pesar de ser evangélicos) cedió provisoriamente la instalación eléctrica desde su casa, hasta que pudo llegar la red eléctrica del pueblo. Pronto van a empezar a construir los salones de catequesis con la ayuda que ofreció un sacerdote alemán. En el frente del altar quedó un cuadro grande de Santa María de la Purísima, el de la Virgen de Guadalupe como subtitular, y en el centro la Cruz del Señor de Mailín, una de las devociones más populares de Santiago del Estero. Y el día 2 vino el Obispo con la bendición de Dios; concelebró la Santa Misa con los tres sacerdotes del pueblo. A pesar de la lluvia y el frío intenso de 4º (no común en esta fecha que normalmente suele pasar de 40º) la capilla se llenó y muchos quedaron fuera soportando el temporal. Para el día de Santa María de la Purísima hubo un triduo solemne y fiesta grande precedida por una misión realizada por un grupo de jóvenes 44

“SUS DEVOTOS AGRADECEN SU CANONIZACIÓN”

Bendición de la Capilla Santa María de la Purísima. Monte Quemado Santiago del Estero de Buenos Aires, que venían trayendo el Sagrario y algunos vasos sagrados; La procesión en su día con cuatro jinetes a caballo que enarbolaban banderas con la estampa de Madre, los niños, guitarras, bombos, cantos; al pasar por las casas esperaban con banderas, y estandartes, pequeños altares improvisados, los enfermos y sus familias pidiendo la bendición. Todo era alegría por las calles de tierra, nadie se quedó atrás. El himno “Siguiendo a Cristo sin mirar atrás…” se escuchó cantar con aplausos y saltos de alegría de los niños. Por las calles las banderas vaticana y argentina ondeaban dando colorido al lugar verde y marrón, color de árboles y tierra. A partir de entonces la pequeña comunidad va creciendo y cada vez son más los adultos que vienen a pedir el Bautismo, la oración por los difuntos, los niños para la primera comunión. Esperamos que la presencia de Santa María de la Purísima siga siendo fuente de gracias y bendición para esta periferia del norte de Santiago del Estero, y el amor y la esperanza fluyan cada vez más por las calles y las casas de este barrio. Un oasis en el inhóspito monte, impenetrable chaco santiagueño. 45

MONTELLANO, 18 Y 31 DE OCTUBRE DE 2016 El día 18 de octubre, con motivo del primer aniversario de la Canonización de Madre María de la Purísima de la Cruz, celebramos la Santa Misa en la capilla de las Hermanas de la Cruz de Montellano. La Eucaristía fue presidida por D. Florencio, antiguo párroco que vino desde su nuevo destino (Jaén) debido al gran acontecimiento que celebrábamos aquí en Montellano. El día 31 de octubre, aniversario de su muerte, todos sus devotos, de nuevo celebramos la Santa Misa en la casa de Las Hermanas de la Cruz. La Capilla estaba adornada con abundancia de flores y la imagen de Madre María de la Purísima, con tanto esmero allí presidiendo que parecía estábamos en un pedacito de cielo. Con cuanto amor y ternura estaba todo preparado, la imagen, las flores, todo el conjunto daba a la capilla un aspecto casi “divino”… no podía ser de otra forma tratándose de estas Hermanas que todo lo hacen con tanta devoción y amor. Allí nos encontramos personas que estuvimos en Roma en su Canonización, comentando lo rápido que había pasado el tiempo y lo natural que veíamos todo, ya teníamos a nuestra Santa dentro de nosotras como si hiciese más tiempo. 46

“SUS DEVOTOS AGRADECEN SU CANONIZACIÓN”

Montellano, 18 y 31 de octubre de 2016 Desde la ceremonia de Canonización y el recorrido del Papa por la Plaza de San Pedro nos dejó a todos cautivados por ese amor de las Hermanas y personas que estaban allí. Lloramos con alegría y con ilusión de lo vivido allí en Roma, donde lo sencillo era grande y la humildad era grandiosa. Fue un acontecimiento imposible de olvidar, por tanto, de nuevo desde esta preciosa Capilla de las Hermanas de la Cruz, hemos vuelto a sentir cerca, entre Santa Ángela y Santa María de la Purísima, a Dios… gracias por ese entusiasmo que ponen Las Hermanas en todo lo que acontece y para recordar con grandeza a estas dos Santas y para que siempre nos guíen en nuestras vidas y sean nuestro ejemplo a seguir. Gracias Hermanas por esa belleza que hay en vuestras Santas, esa pureza y esa grandeza de corazón que nos transmiten y nos hacen un poco mejores. Teresa Seijo

CAUSA DE CANONIZACIÓN DE José Torres Padilla Sacerdote Diocesano, Director Espiritual de Santa Ángela de la Cruz y Cofundador del Instituto de las Hermanas de la Cruz DON JOSÉ TORRES PADILLA

ORACIÓN Para obtener la glorificación en la tierra del Siervo de Dios, José Torres Padilla Te damos gracias Señor y Padre nuestro, porque has querido darnos en el sacerdote José Torres Padilla un modelo de pastor bueno y fiel, entregado al servicio de la Iglesia y al bien de los más pobres y necesitados; glorifica en tu Iglesia a este siervo tuyo que gastó su vida por tu gloria y por la salvación de las almas. Haz que el ejemplo de su vida virtuosa suscite en muchas almas deseos de santidad y, por su intercesión, concédeme la gracia que ahora te pido. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. Padrenuestro, Avemaría y Gloria (Con licencia eclesiástica para uso privado)

SEMBLANZA DEL SIERVO DE DIOS

Gran Apóstol Continuación... Nada restaron las ocupaciones de su canonjía a las obras de celo sacerdotal que desde mucho antes venían siendo objeto de su labor cotidiana. La dirección espiritual de religiosas en varios conventos de la ciudad, algunos de ellos bien distantes del centro, como el de San Clemente; la enseñanza diaria en el Seminario; sus frecuentes sermones y pláticas, de carácter moral unos, de índole catequista otros, pero todos ellos de gran fondo de doctrina y de verdadera unción apostólica; la visita de enfermos; el estudio de asuntos graves para cuya resolución era consultado su parecer, incluso por el Prelado, en cuyo ánimo pesaba mucho el consejo del Padre Torres; a todo alcanzaba su actividad, y a pesar de tantas tareas que hubiera rendido al más fuerte, aquel hombre de constitución nada robusta, aún tenía tiempo para pasar horas enteras arrodillado ante el Sagrario o en el retiro y soledad de su aposento, entregado al estudio y a santas meditaciones. 48

CAUSA DE CANONIZACIÓN DE JOSÉ TORRES PADILLA

Semblanza del siervo de Dios Uno de los mayores méritos del Padre Torres fue la dirección de almas en el confesionario, labor de toda su vida sacerdotal; fue confesor de muchas comunidades religiosas y director de almas santas, entre las que descuellan: Sor Ángela de la Cruz, Sor Bárbara de Santo Domingo, Sor María Florencia Trinidad del Santísimo Sacramento o, más generalmente nombrada Madre Sacramento, y otras muchas. Solía repetir: Todo se aprende en la oración y mortificación. En esta escueta sentencia cifraba lo mejor de su saber el joven sacerdote a quien acudían ya eclesiásticos y seglares como a un libro siempre abierto, espejo de la humana y divina sabiduría. Acudían a su confesionario muchas almas sedientas de perfección, buscando en su sabiduría y santidad un guía espiritual. Innumerables son las almas que el Padre Torres lanzó a la perfección, tanto en el claustro como en el mundo. Dirigió e impulsó a Santa Ángela en la fundación del Instituto de Hermanas de la Cruz. Los grandes méritos y eminentes virtudes sacerdotales del Siervo de Dios Torres Padilla tiene erigido monumento de imperecedera memoria en el instituto de las Hermanas de la Cruz, obra excelente de caridad, que todos aman y admiran, y que desde su fundación lleva gravado con caracteres indelebles el nombre de aquel venerable sacerdote. Y mientras viva el instituto de las Hermanas de la Cruz, alentará en sus hijas el espíritu del insigne sacerdote que con admirable celo y prudencia, supo dirigir y encaminar a feliz realización el pensamiento que el Cielo inspiró a una humilde hija del pueblo: Angelita Guerrero González, para dar mucha gloria a Dios, enjugar muchas lágrimas y llevar la paz a muchos hogares. Hacia el año 1862 conoció a Angelita Guerrero, que por entonces tenía 16 años. En los trece años que siguieron hasta la fundación del Instituto de Hermanas de la Cruz, el Padre Torres dirigió, preparó y dispuso su alma, haciéndola apta para que por su medio se realizasen los designios de Dios. Después de varias vicisitudes en la vida de su dirigida como el intento de ser lega en un convento de Clausura y rechazo por parte de estas por su constitución débil; más tarde ingresa en las Hijas de la Caridad y tiene que salir por falta de salud. Después de estas dificultades que tuvo que afrontar, la joven Ángela no se rindió, sabía que Dios quería algo más y en la oración fue descubriendo los planes del Altísimo. Manifestó al Padre Torres lo que creía inspiración Divina; y el sabio director, sólo después de haberlo consultado con Dios en la oración continua, y tras de repetidas pruebas inspiradas por la más alta prudencia, adquirió 49

CAUSA DE CANONIZACIÓN DE JOSÉ TORRES PADILLA

Semblanza del siervo de Dios el profundo convencimiento de que se trataba de una obra de Dios, para cuya realización era llamado a cooperar de modo eficacísimo. De todos es sabido que esta inspiración no hubiera podido prosperar sin una dirección acertada, y el hombre elegido por Dios para darle vida y hacerlo fecundo en el seno de la Iglesia fue el sacerdote Torres Padilla. Mandó a su dirigida pusiese por escrito sus observaciones y sus pensamientos relativos a la fundación, y los hizo objeto del más detenido estudio, anotando y analizando todos ellos con sumo esmero, pesándolo en la balanza de la más exquisita discreción, ya corrigiendo, ya perfeccionando, atento siempre a dejar determinado con la debida claridad y precisión el verdadero carácter del Instituto. Le quedaban pocos años de vida al Padre Torres, y Dios que no se deja ganar en generosidad, le dio el impulso necesario para que diera el visto bueno a las inspiraciones de su dirigida. El 2 de agosto de 1875 en el Monasterio de Santa Paula de Sevilla, muy de mañana, se reunió el Padre Torres con Angelita y tres compañeras más para celebrar la Eucaristía y dar comienzo a la fundación del Instituto. Después de recibir las fuerzas necesarias de Jesús Eucaristía y el aliento de las palabras del Padre Torres, se dirigieron a lo que sería su nuevo convento, una habitación de la calle San Luís nº 13. El Siervo de Dios, se dirigió al Excmo. Sr. Cardenal de la Lastra y Cuesta, Arzobispo de esta Diócesis, suplicándole se dignara aprobar y bendecir la naciente Compañía de Hermanas de la Cruz, que bajo su protección y dirección se había fundado. El Excmo. Cardenal, en fecha 2 de febrero de 1876 envió su aprobación y bendición para las Hermanas. Esto fue de gran alegría para ellas y consuelo para el Siervo de Dios. El Instituto iba creciendo, teniendo que cambiar varias veces de casa por no caber en ellas el número de Hermanas. El Siervo de Dios se dirigió al Sumo Pontífice dándole cuenta del Instituto y pidiéndole la autorización para tener Oratorio en la casa de las Hermanas de la Cruz, y celebrar el Santo Sacrificio de la Misa, con privilegio de conservar el Santísimo Sacramento. También solicitó la autorización del Gobernador Civil. Cuidó de que la Compañía de Hermanas de la Cruz tuviera desde el principio solidez y seguridad en su manera de actuar. Cuando las Hermanas comenzaron sus apostolados, algunos al ver una vida tan sacrificada y de tanta entrega y generosidad, decían: “están locas”, 50

CAUSA DE CANONIZACIÓN DE JOSÉ TORRES PADILLA

Semblanza del siervo de Dios mas cuando se enteraban que las dirigía el ya tenido por virtuoso y sabio D. José Torres Padilla, rectificaban su opinión. Un día se le acercó al Siervo de Dios un compañero sacerdote y le dijo: -¿no ve Vd. Que esas Hermanas con tanto trabajo con los pobres y con tantas penitencias no van a poder? - a lo que él con sumo agrado respondió: -quítele Vd. algo a las Hermanas de la Cruz y todo serán menos Hermanas de la Cruz. El Siervo de Dios estaba convencidísimo de que la obra de la Compañía era toda exclusivamente de Dios, que la joven Ángela y él, no eran más que meros instrumentos de que Dios se había valido para esta obra tan grata a sus divinos ojos, y que estaba llamada a contrarrestar a la sociedad moderna con su vida de penitencia. continuará...

GRACIAS RECIBIDAS Estimadas Hermanas: Me dirijo a ustedes para comunicarles que este pasado verano mi hermana se presentó a unas pruebas muy difíciles para ella, ya que obtenía el B-2 de inglés. Cierto es que estuvo preparándose, prácticamente a contrarreloj, pues se encuentra en paro y la desesperación le lleva ya a estudiar lo “indecible” para mejorar. Encomendé su éxito al Señor por medio de Padre José Torres Padilla y he de decir que cuando terminé de rezar la oración de la estampita, sonó el Teléfono desde Huelva, justo en ese momento, era mi hermana, había terminado su examen. Meses después nos han dado el resultado y es de aprobado. Así que estamos felicísimos y muy agradecido a Dios y al Padre José Torres Padillas. Con afecto, Esther. Córdoba. Mi hija de 18 años estaba pendiente de ser admitida en la carrera de enfermería de la universidad de Cádiz, pero tenía bastantes alumnos por delante de ella; un domingo acudí a la parroquia de S. Antonio de Cádiz para ver el horario de las Misas y al salir encontré un boletín informativo sobre la causa de canonización de Don José Torres Padilla, en el había una oración para obtener su glorificación y le pedí que por su intercesión mi hija obtuviese la plaza deseada, a los nueve días mi hija consiguió entrar en la carrera y en el sitio que ella quería. Doy las gracias al Padre José Torres Padilla pidiendo su pronta glorificación. Una devota. Si recibe algún favor comuníquelo a una de estas direcciones: PROCESO DE CANONIZACIÓN DEL PADRE JOSÉ TORRES C/ Santa Ángela de la Cruz, 4 - 41003 Sevilla padretorres.proceso@gmail.com