La voz del pámpano Henry Padilla Londoño
Quiero escribir versos a ti Señor, quiero alabarte con mi canto, levantar el vuelo entre alabanzas, dejar que tu espíritu me inunde, y mirarte solo a ti. Eres la libertad del que estaba preso, eres la luz del que estaba en tinieblas. Me llevas de la mano, me muestras el cielo, me llevas en la cruz, me levantas en tu nueva vida. Quiero llevar mi alabanza al Rey, alzar mis manos al que vive. Valiente, llevaste mi pecado, cuando yo no te amaba y lejos estaba de ti. Contare a los pueblos de tu Gloria, de tu gran misericordia, oirán los niños y los que escuchan tu voz y se alegraran.
Quiero morir por completo en la cruz, dejar todo lo que fui ahí. Quiero vivir en la nueva vida, pensar tus pensamientos, hablar tus palabras. Levántense todos los que aman al Señor, clamen con júbilo al Rey Santo. El Señor edifica su templo, en medio de los tiempos. La misericordia y la verdad se encontraron, el amor y la humildad se besaron, en tu escogido, en Cristo el Señor. Se escucha la voz del Señor en medio de sus Santos: levantad vuestras manos, y mirad a mí. Henry Padilla Londoño