Tabla 9 – Origen-destino de los arrendatarios en los movimientos residenciales de los últimos cinco años. 1999-2000
2000-2001
Mismo barrio
Otro barrio de la localidad
Otra localidad
Otro municipio
Mismo barrio
Otro barrio de la localidad
Otra localidad
Otro municipio
Mismo barrio
0,648
0,002
0,000
0,002
0,666
0,000
0,004
0,000
Otro barrio de la localidad
0,008
0,122
0,000
0,000
0,0233
0,101
0,000
0,000
Otra localidad
0,010
0,000
0,108
0,000
0,0233
0,002
0,085
0,000
Otro municipio
0,004
0,000
0,002
0,094
0,0136
0,000
0,002
0,080
Total
2001-2002
2002-2003
Mismo barrio
Otro barrio de la localidad
Otra localidad
Otro municipio
Mismo barrio
Otro barrio de la localidad
Otra localidad
Otro municipio
Mismo barrio
0,726
0,004
0,000
0,000
0,782
0,000
0,000
0,000
Otro barrio de la localidad
0,017
0,084
0,002
0,000
0,032
0,051
0,002
0,000
Otra localidad
0,031
0,004
0,052
0,000
0,027
0,002
0,038
0,000
Otro municipio
0,011
0,002
0,004
0,023
0,023
0,002
0,004
0,038
Mismo barrio
Otro barrio de la localidad
Otra localidad
Otro municipio
Mismo barrio
0,864
0,000
0,000
0,000
Otro barrio de la localidad
0,055
0,000
0,000
0,000
Otra localidad
0,043
0,000
0,000
0,000
Otro municipio
0,038
0,000
0,000
0,000
Total
2003-2004 Total
324
Por último, la intensidad de los flujos presenta al-
vienen de otra localidad: 26%, si bien allí se encuentra la
gunas particularidades. En el barrio más reciente, Unir, se
menor proporción de arrendatarios que hace cinco años
encontró la mayor proporción de arrendatarios que pro-
ya habitaban el barrio –38%–, la proporción de quienes
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