RESISTENCIA

Page 16

Es sabido que la política es la expresión concentrada de la economía y que la guerra es la continuación de la política por otros medios, y como aquí los temas económicos, políticos y de la guerra en Colombia fueron tratados con amplitud en las dos versiones del juicio, aquí se ha hecho un juicio político, de cabo a rabo, así el gobierno haya tratado de evitarlo y ocultarlo. Ese carácter político del juicio me complace porque confirma la condición política de las FARC, derivadas de las causas y objetivos de su lucha revolucionaria, plasmados en conferencias y de los plenos del estado mayor central, documentos presentados por la fiscalía y de los que se habló y discutió. Igual, estoy satisfecho porque a pesar de todo el esfuerzo que realizó el gobierno en los dos juicios, los jurados me consideraron no culpable del quinto cargo que se me imputaba: el de suministrar ayuda a una organización terrorista, como erróneamente califica a las FARC el departamento de Estado. Aprovecho esta tribuna para reiterar con toda claridad y absoluta firmeza, en nombre de las FARC y del mío, la condena al terrorismo independientemente del origen que tenga. No olvido que el Terrorismo de Estado, que en Colombia ha sido y es aún práctica común, fue el factor determinante para mi ingreso a las FARC, desde donde lo he denunciado y condenado. Por principio, por convicciones ideológicas, el terrorismo no tiene cabida en mi mente ni en mi corazón como práctica política. Tengo claro, al igual que las FARC, que ninguna fuerza política que aspire al poder con el respaldo popular puede cumplir su objetivo con la práctica del terrorismo ya que este socava y destruye todo apoyo. De igual forma, las FARC y yo en particular, nos oponemos y rechazamos la extradición de colombianos para ser juzgados en otros países. Esa es una práctica neocolonial que lesiona la soberanía de nuestro país y que ha llegado al extremo de utilizarse como arma política contra las FARC. Además, es un error pretender chantajear con la extradición a hombres y mujeres que luchan por ideales, como son los casos de Sonia y mío. Por el cargo de conspiración no abriga mi ser sentimiento de culpa alguno. Mi tarea estaba enmarcada dentro del conflicto del país. En Colombia hay una guerra y como consecuencia de ella hay prisioneros de lado y lado, y este es un problema real, concreto, que reclama una solución. Además era una orden y una tarea política emanadas de determinaciones superiores, como se aprecia al leerse el comunicado del 27 de abril de 2003, suscrito por el Secretariado. Y, si se quiere, fue un intento de un primer paso de una acción humanitaria en beneficio de todos los prisioneros de ambas partes.

16 RESISTENCIA


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.