Una frontera es un límite, una barrera divisoria, pero al mismo tiempo es una puerta que comunica y ofrece la posibilidad de conocer y vivir lo que está al otro lado. No son sólo muros infranqueables sino fronteras porosas, oportunidades para el intercambio de ideas y valores.
¿Cómo asumir esta propuesta de vivir las fronteras cuando en la vida real la violencia amenaza y acorrala? En la literatura están las respuestas. Medellín reflexionará del 12 al 21 de septiembre sobre este tema que es de todos y no solo de quienes viven en los barrios afectados por la violencia que marcó líneas de miedo. Será una movilización masiva a través de la literatura y de los autores invitados a la Fiesta del Libro y la Cultura.
Nos preparamos para un certamen que cualificará a nuestros niños y jóvenes lectores, a personas inquitas por un libro, por un encuentro con autores, por participar de una charla en la que sin duda se tocarán temas cercanos a muchos de nuestros visitantes y ciudadanos.