100 politicas para potenciar el desarrollo

Page 336

deberían acceder a la capacidad de autonormarse1. Es decir que hoy solo un tercio de los municipios ejerce su autonomía municipal. Tienen el derecho y, en gran medida, lo desaprovechan. Existe una serie de desafíos que limita la autonomía real de los municipios. La descentralización de funciones, que generó un mayor protagonismo de los gobiernos locales en las políticas públicas, no fue acompañada de la transferencia de recursos económicos, financieros y humanos para desempeñarlas con éxito. Por eso, muchos municipios, aun siendo formalmente autónomos, se convirtieron en gestores de la escasez: dependen fuertemente de las transferencias de recursos y programas de los niveles superiores de gobierno y tienen una mínima capacidad de inversión pública. En este sentido, la capacidad tributaria de gran parte de los gobiernos locales está limitada por las leyes de coparticipación provinciales y otras normas del derecho provincial, y también por incompetencias propias de la administración tributaria local, como la falta de sistemas que permitan la actualización catastral o gestionar eficazmente el seguimiento de cobranzas por contribuyente y para luchar contra la morosidad y la evasión. El resultado es un escenario de baja correspondencia fiscal: la porción de recursos municipales propios por sobre el total de los recursos gastados raramente supera el 30%. Además, el gasto público municipal como ratio del gasto público consolidado (tomando en cuenta también los gastos de los niveles superiores de gobierno) apenas asciende al 8%. Esto condiciona la decisión de gastar y limita la fijación de prioridades del gasto a nivel local. El presupuesto municipal depende en gran medida de las transferencias de recursos de los niveles superiores de gobierno, que generalmente tienen un gasto específico asignado y pocas veces se adaptan a las necesidades locales. Por otro lado, la descentralización de funciones se encontró con equipos técnicos que en muchos casos no tienen las herramientas de gestión necesarias para desarrollarlas en forma eficiente y eficaz. Por eso, además de una transferencia de recursos acorde con las funciones descentralizadas, es necesaria una mayor apuesta por la formación y capacitación técnica de los líderes locales y sus equipos. Además, se suma el reclamo por el reconocimiento de nuevos municipios. En la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, más de 60 localidades piden escindirse del partido al que 1. Las Constituciones provinciales que ya reconocen autonomía a sus municipios lo hacen sobre aquellos que tienen un mínimo de habitantes que imprimen complejidad económica, política y social a su gobierno. La provincia más exigente es la de San Juan, que estipula un mínimo de 30.000 habitantes y sobre este modelo se hace el cálculo conservador. La provincia que menos exige es la de Santa Cruz, solo 1.000 habitantes, pero ninguno de sus 14 municipios que cumplen con esta regla han dictado su Carta Orgánica.

[ 335 ] CAP. 16 MUNICIPIOS AUTÓNOMOS, MODERNOS Y CON ACCESO A RECURSOS PARA FOMENTAR EL DESARROLLO LOCAL


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.