Bienvenidos hermanos de San Luis Potosí

Por: Reyna Domínguez / Fotografía: Yunuén Vázquez

El estado de San Luis Potosí es un lugar de una riqueza excepcional, ya sea natural, gastronómica o cultural, se divide en tres regiones geográficas: la Huasteca, que es la parte que colinda con Tamaulipas y Veracruz, se caracteriza por ser la más fértil del estado; al oriente se encuentra la Región Media que también se considera una región fértil y el Altiplano, que se ubica al norte de la entidad y, en contraste con las otras dos regiones, se caracteriza por la escasez de lluvia y de corrientes de agua.

Con lugares como Ciudad Valles, Xilitla, Matehuala, Real de Catorce, Río Verde y por supuesto, la capital, San Luis Potosí, entre otros, no podía ser la excepción y como en muchos estados de la república, la comunidad mexicana de ascendencia libanesa tiene una destacada presencia. Desde el Porfiriato, el estado tuvo la presencia de diversas comunidades que establecieron alianzas para el desarrollo, con inversionistas y trabajadores.

De acuerdo con ciertos registros en la entidad, algunos de los primeros inmigrantes en entrar al país y establecerse en San Luis Potosí fueron Abraham Hatem, quien llegó en el año de 1894; en 1896 llegó Carmen Dip Manad y un año después Pedro Pechir Mansha, además de Antonio Basilio Nesme Makulf, quien llegó en 1899. La ruta de asentamiento de los migrantes libaneses en el estado coincide con las líneas ferroviarias, pues eran punto de desarrollo al transportar personas y mercancías, aunque con el tiempo se trasladaron a la capital del estado.

Y pues como la comunidad mexicana de ascendencia libanesa trabaja en equipo sin importar de qué estado se trate, en el mes de agosto recibimos a nuestros hermanos de San Luis Potosí, entre quienes se encontraban Alejandro y Fernando Abud, Anuar Zarur, Raúl Bolaños, y muchos más para hablar de proyectos, trabajo conjunto, estrechar nuestros lazos y conocernos un poco más, mientras compartimos una deliciosa comida.