Representacion ruta mitologica

Page 1

Obra de teatro realizada por el alumnado de 6º del CEIP López Ferreiro, de Santiago de Compostela, a partir de los datos e información obtenidos del proyecto "Unha rota mitolóxica: outra guía para coñecer Santiago de Compostela".

La magia de la ciudad de Compostela.

Curso 2016-17.


(Aparece sentado el Apóstol Santiago, mirando fijamente hacia el infinito. Peregrinos con mochilas van pasando a su lado, haciendo fotos y algunos, incluso, besándolo). GUARDIÁN DE LA CATEDRAL.- Venga , por favor, vayan saliendo, es hora de cerrar la Catedral. APÓSTOL.- (Se va levantado poco a poco) ¡Ufff...! Pasa gente y gente...Y más gente. Me dicen que han hecho mi Camino...Pero yo, hace años, muchos años, que estoy aquí sentado, que no hago ningún Camino... ¡De verdad que no lo entiendo! Esta noche cogeré mi caballo blanco y saldré por Compostela. Yo, Santiago, el Hijo del Trueno, iré a ver a mis amigos de los que hace tanto que no sé nada. Así que ya es hora de que comience mi propio Camino. (Oscuridad. Mientras, coge una escoba con cabeza de caballo, también blanca.Va apareciendo proyectada la fachada de Platerías). APÓSTOL.- Hay varias puertas, pero saldré por esta que es la que mejor conozco porque es la que más años me lleva acompañando... SAGITARIO, PISCIS, LEO.- (A un tiempo) Buenas noches, Hijo del Trueno... APÓSTOL.- Pero cómo, me conocéis? Quiénes sois vosotros? SAGITARIO.- Yo soy Sagitario, un centauro, y por tanto mitad caballo y mitad hombre. Yo protejo tu Catedral cn mis flechas. PISCIS.- Yo soy una sirena. Llámame Piscis, "porfa ". Ya ves que tengo dos peces sobre mi pecho. Y con mi hermoso canto, también protejo tu Catedral. LEO.- Pues yo soy Leo, así que no debes preocuparte porque soy un león y soy el signo más poderoso y fuerte del zodíaco. APÓSTOL.- ¿Y estáis aquí siempre? SAGITARIO, PISCIS, LEO (a un tiempo).- Estamos día y noche, debemos proteger tu Catedral. APÓSTOL.- ¡Ah, ya entiendo! Pero tengo poco tiempo y mucho camino por recorrer. Quizás coja uno de estos caballos que parecen más jóvenes que el mío. Aunque...¡Pobres! Estarán cansados de echar agua. HIPOCAMPOS.- ¿Caballos? ¿Cómo puedes llamarnos caballos? Nosotros somos los hipocampos. APÓSTOL.- ¿Y cuál es vuestra misión?


HIPOCAMPOS.- Nosotros rescatamos a las personas que caen al agua tal y como nos enseñaron los humanoides que nos domesticaron como las sirenas, los elfos de mar y los tritones. Por eso también se nos conoce como los salvavidas del mar. APÓSTOL.- De acuerdo, amigos. Mi peregrinaje debe seguir por la ciudad, pero por tierra, así que no podréis ayudarme. (Proyección Árbol de la ciencia; aparecen varios estudiantes muy alegres poniéndose de espaldas y señalando diferentes ramas del Árbol)) ESTUDIANTE 1.- Yo, a medicina. ESTUDIANTE 2.- Pues yo a Física. ESTUDIANTE 3.- A ver a mí. Me ha tocado Matemáticas. ESTUDIANTE 4.- Y a mí Artes. APÓSTOL.- Sí, en mi época la gente joven también decidía así lo que quería ser. ..A suertes. Nunca lo tuvimos muy claro. ¡Ah! ¡Tiempos aquellos! ¡Pero qué veo!¡Qué plaza tan majestuosa! ¡Ah, sí, allí enfrente dicen que curan a la gente que viene a visitarme desde lejos! SIRENAS.- (Todas juntas)¡Eso era antes! (Una sola) Ahora nosotras velamos por los huéspedes que quieren venir a nuestro hotel. APÓSTOL.- (Con desconfianza) ¿Vosotras, las sirenas? SIRENAS.- Síïííí... (Con voz maligna y falsa).Nosotras que sabemos cantar tan bien, que tenemos un corazón enorme y que con nuestros poderes protectores evitamos que los individuos malvados entren en nuestra morada... APÓSTOL.- ¡Pero qué ven mis ojos! Cupido, ¿tú también por aquí? ¡Pretendes encontrar a Psique, seguro! CUPIDO.- Sí, aunque como por aquí pasa mucha gente, me dedico a lanzar flechas: unas son las de amor y otras las de la discordia. ¡Y no veas las que organizo! APÓSTOL.- Y tú, Prometeo...No me digas que aún sigues castigado... PROMETEO.- No, no. Hércules escuchó mis súplicas y me liberó matando al águila. Tengo representado el fuego para no olvidarme de lo que hice, pero ahora vivo feliz entre estos seres. GORGONAS (aparecen sorpresivamente).- Nosotras cuidamos de todos ellos, porque evitamos que entren los malos espíritus en este edificio.


APÓSTOL.- ¿Y cómo os llamáis? GORGONAS.- (Una por una) . Nos llamamos: Medusa, Euríale y Esteno. APÓSTOL.- Os parecéis mucho esas figuras que están arriba. GÁRGOLAS.- Sí, porque somos de la familia. Pero tenemos otra función. APÓSTOL.- Y esa función, ¿cuál es? GÁRGOLAS.- (Una por una) Recoger el agua que baja de los tejados y así proteger la fachada de los edificios. Y cuando no llueve, decoramos la parte alta de los edificios. ¿Verdad que quedamos " guai"? Y además, al sobresalir tanto, los espíritus malignos no se atreven a entrar (voz tenebrosa) Desde aquí podemos divisar toda la ciudad. Fíjate, incluso vemos las esfinges y las medusas. APÓSTOL.- Me encantaría conocerlas. ¿Están próximas? GÁRGOLAS.- Tienes que cabalgar un poco, pero las encontrarás. Sigue por esa cuesta hacia el Oeste. APÓSTOL.- ¡Es verdad, aquí estáis! ¡Qué hermosas sois! MEDUSAS.- ¡Ja, ja, ja...! Se ve que no nos conoces...No te fíes porque cuando alguien nos mira fijamente a los ojos, lo convertimos en piedra. ESFINGE.- Sí, mírame a mí que me ha convertido en piedra hace muchos año y no sé si podré regresar a mi tierra, a Egipto. APÓSTOL.- Estáis un poco alejadas, pero me gusta este sitio. Hay árboles por aquí que son iguales a los que me encontré cuando vine a Galicia en vida, hace ya de eso cientos y cientos de años...En fin, ahora estoy un poco perdido. MEDUSAS.-Pues entonces sigue hacia el Sur y vete hasta la Plaza do Toural. Allí está Atlas cargando con su bola del mundo. A lo mejor, él te ayuda a regresar a tu tierra...Jí, jí, jí, jí... APÓSTOL.- Gracias...A lo mejor... (Fondo musical y hace que cabalga). ATLAS.- Hijo del Trueno, ¿qué haces tú por aquí? APÓSTOL.- Oh, Atlas, me han dicho que puedes indicarme cómo regresar a mi hogar... ATLAS.- ¡Ay si supieras mi historia! Sí, tengo una bola, pero está convertida en piedra y estoy obligado a cargar con ella sobre mis espaldas. Perseo, el hijo de Zeus, vino a mi reino; me pidió hospitalidad pero se la negué porque la profecía decía que uno de los hijos de Zeus me


robaría las riquezas. Entonces Perseo sacó la cabeza de medusa y en esto que ves me ha convertido. Lo siento, pero creo que no te seré de gran ayuda. APÓSTOL.-Está bien. Seguiré dando vueltas...Vaya, por aquí está la iglesia de mi madre, María Salomé. ¡No puedo creerlo! Paris, ¿eres tú? ¿El origen de la guerra de la Troya? PARIS.- Pues sí, soy yo, el hijo de Príamo y de Arcadia. Pero no temas, desde que enamoré a Helena, ya no organizo guerras. Prefiero estar con mis acompañantes. APÓSTOL.- ¿Y quién te acompaña?¡Qué mujer tan hermosa! LUCRECIA.- ¡Y que historia tan triste tengo! Me llamo Lucrecia. Yo no soy griega, soy romana, hija de Espurio Lucrecio Tricipitino. Me casaron con Colatino, pero nunca fui feliz. De hecho, sufrí humillaciones físicas que me llevaron al suicidio. Con mi muerte, se acabó la Monarquía romana y se instauró la República. APÓSTOL.- Los griegos, los romanos..., por todo Santiago están representados. ¿Y qué está haciendo esa mujer colocando coronas de laurel? MINERVA.- No soy una mujer, soy una diosa: llamadme Minerva. APÓSTOL.- Perdón, efectivamente sois una diosa; no me había fijado en vuestro vestuario. MINERVA.- Sí, porque llevo un casco sobre mi cabeza, una pica en una mano, un escudo en la otra y una égida sobre mi pecho. ¡Así defiendo el saber! Y a los estudiantes les entrego mi sabiduría. Por eso estoy en la Universidad. APÓSTOL.- Demasiada sabiduría para mí que no soy más que el hijo de un pescador de Palestina. Me estoy cansando un poco. Hace mucho que no salgo y mis piernas se resienten (se sienta y se va iluminando cada vez más la escena. Un grupo de canteros va apare cantando "O galo cando canta..."). APÓSTOL.- ¿Hacia dónde vais si todavía es muy temprano? CANTEROS.- Tenemos que ir a trabajar al convento de Santa Clara. Si no, perderemos la apuesta que acabamos de hacer en la taberna, porque han osado decir que nuestra estupenda fachada tiene demasiados adornos y se va a caer. Y para demostrar que aguanta, vamos a poner en lo alto un barril de vino, tallado en piedra. APÓSTOL.- ¿Podría acompañaros? CANTEROS.- Vale, si sabes picar la piedra... APÓSTOL.- Pues venga, vamos. (Aparece barril de Santa Clara proyectado). Por cierto, ¿ qué edificio es ese que se ve ahí abajo?


CANTEROS.- ¿Cuál? ¿Ese largo y blanco? Es un edificio del S.XXI. Se llama colegio. APÓSTOL.- ¿Y quién vive en él? CANTEROS.- Pues, allí casi viven niñas y niños y también alguna gente que los vigila y que procura darles alguna enseñanza. Hay varios edificios así en la ciudad, pero a ese le llaman López Ferreiro, como aquel canónigo que quiso estudiarte tanto. APÓSTOL.- Quisiera ir allí...¡Conocerlos! CANTEROS.- ¡Pero si ya estás con ellos! APÓSTOL.- ¿De veras?¿Son estas caras que me miran? Bueno, quizás todo haya sido un sueño...O una leyenda...Tendré que regresar, y tendré que dejaros porque (dirigiéndose a l público) ...Es necesario que vosotros hagáis vuestro camino. Y en ese camino, no os olvidéis de conocer, de preguntar, de visitar, de ayudar al que lo necesita... ¡Solo de la oscuridad de la noche podrá amanecer el conocimiento! Me vuelvo, para que otros peregrinos comprendan que su viaje hasta aquí sólo ha sido una etapa de su vida... ¡Buen camino! (Va amaneciendo y con su caballo se va alejando hacia la Catedral, mientras se oyen sonidos de campanas)



Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.