AwA 78 by AwA ETSII

AwA REVISTA CULTURAL

Nº 78 AÑO XI DICIEMBRE 2013

IMÁGENES DE JAUJA 2

La continuación ya está aquí.

ETIMOLOGÍA DE UN ADIÓS Creo que con esto he cubierto todo el rango de cosas que me podían pasar en la revista

@AwA_ETSII awaetsii.wordpress.com

CHT

Etimología de un adiós POR

EL OLVIDADO

Hoy a 22 de Noviembre llevo una pequeña herida de un corte de trabajar. Espero presentar mi proyecto en Marzo y salir de que me hice la semana pasada al repartir AWAs. Creo que con aquí. esto he cubierto todo el rango de cosas que me podían pasar en la revista: he reído, he estado al borde de las lágrimas, he Joder, esto parece un panfleto vendiendo AWA. Pero no, yo perdido el tiempo, he gritado, me he enfadado y me he ilu- soy más de echar la bronca. Recuerdo hablar con una comsionado. He sido la persona que pañera sobre que me parece que ha tirado de AWA y la persona Creo que con esto he cubierto todo el hay mucha gente en la Escuela de la que ha habido que tirar. He que no se emociona, que solo rango de cosas que me podían pasar en quiere salir de fiesta, acabar la sido quien ha propuesto cambios y quien se ha resistido a los camla revista: he reído, he estado al borde carrera y ganar dinero. En un bios. He utilizado AWA como un momento decidí dejar de conside las lágrimas, he perdido el tiempo, he derarlos Personas con P mayúsmétodo de ligar y he follado encima de algún número. gritado, me he enfadado y me he ilusio- cula. Es mi consejo para todos los que entran es este lugar alejado nado. de la mano de Dios (o demasiado cerca, ejem), DISFRUTAD de la Escuela, participad de su vida Gracias a AWA he conocido a gente muy interesante como y disfrutad de estos cinco, cuatro u ocho años que os quedan. mis mentores o aquellos que quedarán aquí. No voy a negar que AWA me ha quitado tiempo de estudios y, a veces, energías, pero no lo cambiaría por nada. Empecé colaborando con AWA hace 4 años, tras una ruptura, y al año siguiente decidí entrar con todo. Por aquel entonces éramos pocos y no se podía contar con todos y ahora somos más del doble de los que éramos y estamos con muchas ganas 2 AWA Nº 78

Como despedida diré que me gusta la expresión farewell porque (y aquí entran mis cábalas etimológicas) incluye tanto “que te vaya bien” como “haz las cosas bien” que me parecen muy apropiadas para una despedida. Pero soy como el Capitán Garfio y hago mi discurso de despedida por si no puedo escribirlo en otro momento, pero posiblemente aún se pueda leer algo más de El Olvidado.

¿Ya? Os daré algo más de tiempo. Ahora seguro que sí.

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POR RASHIONALISM

Bueno, pues en ese, en mi caso, este, universo la gente nace con un, a falta de mejor palabra, reloj puesto. Nadie sabe qué ventaja evolutiva puede suponer, salvo que nos da la hora. Los hay que dicen que se carga con el movimiento, pero que jamás perderá precisión hasta el final del todo. Es un mecanismo increíble y fascinantemente complejo, al igual que bello. Cada una de las siete manecillas marca una división de tiempo distinta. Los niños sanos pueden perder incontables minutos viendo cómo giran las cuatro manecillas más rápidas, bailando entre sí, reflejando la luz en todas direcciones. Es un espectáculo bellísimo y, para aquellos que lo entendemos, aterrador, puesto que nos recuerda el inevitable paso del tiempo. Incontables poetas han intentado describir la belleza de tener algo que nos recuerda que solo hay una vida y que, al tiempo (hehe), nos hace hacernos una idea de cuánto nos queda por delante, cómo no debiéramos hacer estupideces que hagan que se paren antes de tiempo. Yo no soy un poeta. Tampoco quiero serlo. He leído muchas biografías de poetas. Las vidas de esos eternos románticos no son envidiables, aunque la mía tampoco lo es. Comparto habitación con una rata y

vivo encima de un conocido laboratorio de sustancias psicotrópicas. Pero bueno, no quiero hablar o escribir de mi apartamento. Lo maravilloso de estos relojes es que uno se puede preparar para la muerte de un ser querido, siempre y cuando nos den permiso para mirar su reloj, puesto que, como es obvio, hacerlo sin permiso es una tremenda falta de respeto. También nos da la oportunidad de poner nuestros asuntos en orden antes de emprender el gran viaje. Son muy útiles a la par que deprimentes. Son, también, únicos para cada persona. Los hay similares, pero nunca idénticos. El mío parece estar hecho de acero, con una esfera negra. Sobrio, apropiado para galas y eventos de alta sociedad, si jamás me invitasen a ellos, no desencajaría. Tampoco llama demasiado la atención en mi vida diaria. Mi vecino (el del laboratorio) tiene uno de colores chillones con una esfera ridículamente grande. De niño era el payaso de la clase y muy popular. Con el paso del tiempo ha seguido siendo un payaso, pero cada vez menos popular con la gente. Su reloj es un aviso, pero es alguien agradable si te acostumbras a su forma de ser. Lo único que nadie sabe es cómo se le puede dar cuerda a uno de estos aparatos. Tampoco se puede regalar tiempo a gente que lo necesite. Sería maravilloso poder comprar tiempo, aunque no sé si sería bueno. Alguien encontraría una manera de hacernos inmortales y habría increíbles problemas de población. La vida terminaría siendo como “La fuga de Logan”, pero con relojes en lugar de pilotitos. Esta reflexión es deprimente para ambos, para el lector y para mí. ¿Qué esperabais? ¿Un final feliz? Estoy hablando de un apéndice que nos dice cuándo moriremos. Mi aguja de las horas paró hace algo más de dos días. Solo espero que el que lo lea disfrute este pequeño relato a otro mundo no muy distinto al suyo. Adiós.

Pero eso es, para mí, irrelefante, como un elefante muy pequeñito. Muy muy requetepequeñín. Yo quiero que imaginéis un universo similar al vuestro, habitado por criaturas, si queréis, como vosotros (no quiero empezar a referirme a apéndices que puede que poseáis o no).

R e l o j e s

Todo, dado suficiente tiempo y espacio, puede suceder. Absolutamente todo. Sí, desde sociedades tecnológicamente avanzadas de amebas, hasta sociedades donde todos sus miembros conozcan el sentido de la desesperante rutina a la que llamamos vida… En algunos universos eso ha pasado, pasará o está pasando.

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Z T I L B 4 AWA Nº 78

A VECES SE ME OLVIDA por

A veces se me olvida tu cara y que en los recuerdos de la gente se puede ser inmortal. Escapo de -vuelvo a- mí buscando la oscuridad en las palabras, la fatalidad, la supremacía del tiempo en tus lunares y pierdo el límite de tu cuerpo, niego tus rasgos, se evade la piel, mi retrato se borra lentamente de las hojas que el otoño ha dejado. No existe tu alma. Olvido la inmersión casi como las caricias -y cómo me agarras las muñecas contra la pared-. Y no recuerdo la última vez que di las gracias después de pedir que me follaran, ni las veces que intenté portarme bien. Ayer mi vida crecía de y por lo ilícito, y ojalá recordase -sensorialmente, en la piel, en el pecho- las noches

de inconsciencia, cuando cada cuerpo era el universo -perecedero- del momento y jugar no tenía consecuencias. Amo el amor pero no lo soporto. Pero ojalá no. Hay días en que no recuerdo el corazón, pero ya me ha dicho el doctor que el problema está en la cabeza. En la mente. Que hay que follárselas -si consigues entrar, como en todo- como si mañana la mente fuese otra mente, y los labios siguiesen gimiendo. A veces mi miedo esconde el miedo a caer en él, a brindar con la cobardía de la soledad, y abandono a su suerte la gracia de mi suerte. Olvido tus logros más rápido que mis fracasos -y olvido las veces que nos corríamos a la vez-. Y la fe. Pero hoy en la apatía rehuyo el olor de la memoria, las luces en tu espalda, los campos que nos vieron renacer y nos arrebataron los ojos para ver con claridad. Y lo único que encuentro, es mi nombre grabado en el casco de un barco a la deriva, y mi yo -el otro- colgado del mástil. •

B L I T Z LA GENTE ES UNA PUTA MIERDA por

Después de vivir una niñez acomodada y una adolescencia marcada por el acné, lo único que puedo afirmar concienzudamente en esta mi depresiva juventud es que la gente es basura. Todos el mundo es simpático, pero al final, todas las tías son igual de zorras y todos los tíos igual de suaves, yo el primero. Con este panorama tan esperanzador por delante, dedico el tiem-

NAUTA

po que me sobra entre tortuosas lecturas de los temas de Ciencia de Materiales a apuntar en un cuadernillo tipos de personas, cualidades y aspectos de la vida en general de los cuales no te puedes fiar un pelo a primera vista. A mí, que soy un tipo suave del copón, me gusta llamarlo “Guía fundamental del prejuicioso universal”. Uno de los mayores retrocesos de la vida moderna con respecto a

• Las tías con medias transparentes. Sabemos que escondéis algún tipo de trauma infantil. Es el peor disfraz para ocultar que os claváis chinchetas en las palmas de las manos por placer. •Los chalecos. El inventor del chaleco tuvo que ser la persona más aburrida del planeta. Que alguien me explique para qué cojones quieres abrigarte dejándote los brazos fríos. Seguro que los inventó un ingeniero de organización o algo así. •Coldplay. A las únicas personas que puedo excusar de escuchar esta mierda infinita de grupo son a las embarazadas y a los amantes del sexo anal. •Ingeniería del Medio Ambiente... ¿Necesita explicación? •Las personas que aun habiendo sitios libres en el autobús prefieren quedarse de pie. Esto es pura lógica Aristotélica. Si no te sientas eres un triste y morirás joven.

civilizaciones pasadas es esta eticucha actual que quiere eliminar los prejuicios. Si estos son sanos, son una fuente inagotable de diversión. Sin más dilación os cito algunos de estos pequeños detalles fundamentales que hacen la vida un poco más mierdera y simpática de ver al mismo tiempo:

•Los violines eléctricos. La única forma de sacar provecho a este instrumento sería que lo tocasen los de Coldplay, así serían más fáciles de odiar. •Las personas que tienen fotos en las que salen ellos sacando una foto Chiquis, no. •Paulo Coelho. Si tienes 13 años y juegas con WordArt, este tipo es tu hombre. Si no, tienes un problema. •Las ‘fashion bloggers’. Ni aunque estés buena tienes excusa para fardar de este truño. Estas individuas suelen incluir en su CV prominentes cualidades como DJ, diseñadora o experta en redes sociales. •La fanta de naranja. Si bebe fanta de naranja no te fíes, probablemente te espía mientras te duchas. •Las tías que se pintan los ojos con una raya azul. Suelen abundar en los bajos de la Nuit y se dice que no muerden, pero yo no me lo creo.

La lista continúa y se actualiza cada día. No os dejéis engañar por las letras de Pablo Alborán. Para echarle un poco de sal al asunto hay que quitarle un poco de trascendencia a la vida y aprender a odiar de manera sana. •

colaboración de

Herencias

lía decir que los consejos no valían nada si no sentía un escalofrío al escucharlos, y que todos hablan con las mismas palabras pero con distintas letras. Estaba convencida de que algún otoño las hojas no iban a caer y el viento se perdería entre la bruma despistado. El color anaranjado le fascinaba, y el marrón le evocaba a un tiempo en el que no supo escapar del miedo a no ser libre. Se autocompadecía para enseñar su lado más amargo, creyendo que así llegaría a manos de una solución que se le antojaba inmediata. Su sonrisa escondía las lágrimas que contenía durante el día y que derramaba a la noche. Su impaciencia por encontrarse consigo le condenó a no encontrarse con nadie. •

Nació del más recóndito suspiro. Y no obtuvo más réplica que la del hombre que le decía lo que ella quería escuchar. Intentaba corregir aquellos actos de bondad prematura, condimentados con la poca paciencia de algunos bien avenidos, que dicen disfrutar de las desdichas ajenas. Decía ser feliz pero callaba. El deseo de gritar lo instigaban pensamientos que, en cuestión de segundos, vagaban por su rostro y se ceñían a su cabeza. Minutos después olvidaba su voz y cerraba la boca con descaro. A su alrededor la oían pero no la escuchaban. Cerraba los ojos para no pensar. No quería perderse en el camino

ni encontrarse con él. Era negro el vacío que atemorizaba sus sentidos, y blanca la plenitud de sus deseos. Era una copa repleta de poesía y de llanto, que llenaba de tarde en tarde para evitar que la gota más imprescindible manchara el mantel. Porque no podía permitirse derrochar ni uno solo de los trenes que un día pasaron por allí. Y con orgullo presumía de aprovechar hasta el más pequeño de los placeres, que se convertiría en la más grande de las desgracias. Su piel delataba su angustia, y recorría su cuerpo un latido frágil, sostenido por la irrelevancia de su locura. Una locura que daba un paso tras otro sin preguntarse el por qué de su estado inerte. Locura de amor y desengaño, y de la vida misma. No sabía enfrentar los cálidos recuerdos de los que la querían. So-

ESTANDO CON ELLA

R E A D colaboración de

Whatsername

Me dijeron, hace años, que la luna escondía un poema de amor en su cara oculta: decían que fue el Sol, enamorado de las estrellas, quien lo había escrito allí para que todas lo leyeran por siempre, durante el resto de la eternidad. Me dijeron, además, que nunca le pidiera un deseo a una estrella fugaz: nuestros sueños se agarran a su cola de plata, y son tantos y tantos sueños, que ella, cansada, termina por frenarse y muere sin alcanzar su utópica meta infinita. Me dijeron, también, que en los corazones de piedra se podían sembrar flores.

Flores de confianza. De amor. Pero los corazones de piedra esconden fantasmas fríos bajo sus sábanas pétreas, y las flores mueren congeladas, silenciosas.

Me dijeron que quien ama a un corazón de piedra lo hace para siempre, pero yo... Yo ya no le quiero. •

Flores de pasión, y de lujuria.

Un día hablé con uno de ellos, y me explicó que los corazones de piedra no sabían nada sobre las flores, pero sabían mucho de música. Me dijo que le gustaba mi voz, que mis palabras le hacían latir canciones, y yo hablé y hablé para él. Y cierto es que escribió pentagramas. Cientos y cientos de ellos, pero todos juntos no eran más que un triste réquiem compuesto por mil sombras, y la certeza de que nunca seríamos más de lo que ya éramos ahora. Su corazón de piedra no era más que un enorme castillo amurallado, gobernado por reyes de papel que no entendían de nada: ni de flores, ni de música, ni de mí. Así que perdí a mi amado corazón de piedra una noche en la que la tinta del poema escondido tras la luna se diluyó y se derramó sobre el foso de la fortaleza. Aquella noche una estrella fugaz llegó al infinito y volvió.

LAS GRIETAS DEL CORAZÓN DE PIEDRA

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Imágenes deJauja (2) colaboración de

FRINGERGüEBER

-¿Con qué nombre se quiere registrar en la pensión, señor Gris? -Argirio, Argirio Gris. -Perfecto- dijo la señora cerrando el libro de huéspedes- le acompañaré a su habitación. Tras decir esto la señora hizo algo impropio para su avanzada edad y saltó por encima del mostrador, después dirigió al señor Gris por un pasillo estrecho y sucio que desembocaba en una pequeña puerta de madera, la cual daba paso a su habitación. - Bien, aquí es- indicó la señora abriendo la puerta para que Argirio pudiese entrar- siento que no haya ninguna cama, tendrá usted que dormir en el suelo… Si no es mucha molestia, claro… -Pe… Pero si ahí hay una cama- tartamudeó el señor Gris. -Sí… Pero la usamos como armario. -¿Y el armario? -Ahí duerme Fermín, comparte habitación con usted. Argirio abrió lentamente la puerta del armario y efectivamente dentro había un hombre de unos cincuenta años, algo gordo y medio calvo, en posición fetal. Fermín al ver a su nuevo compañero sólo soltó un “ñe”. El señor Gris se enfadó por las condiciones de la habitación que acababa de pagar - ¡En ningún momento se me informó de nada de esto! ¡Esto es una falta de respeto! Pero su voz se apagó cuando comenzó a gritar la señora, el ligero enrojecimiento de su piel por la ira desapareció y volvió a su color normal, de una cierta tonalidad grisácea, su timidez había vuelto a ser exageradamente marcada y la señora continuaba gritando: - ¡Por la miseria que paga creía que conseguiría algo mejor! ¡No le quedan muchas más opciones por la zona! ¡Es o esto o nada! Y si no le gusta, ¡lárguese! La señora desapareció tras un portazo, Fermín sólo añadió “ñe”. El señor Gris dejó su maleta en el suelo y salió a comprar una revista, mientras caminaba buscando algún quiosco pensaba en qué compraría, había perdido el libro que estaba leyendo y quería algo para leer en los ratos muertos hasta encontrar otro libro que le gustase. Días antes habían hablado en el telediario de una nueva revista sobre crímenes que lo enfocaba desde un punto de vista algo técnico pero de manera que podía seguir siendo atractivo para gente que jamás había leído nada del tema. En la cabeza del señor Gris se mezclaban las palabras curioso e interesante. Por fin llegó a un quiosco cuyas paredes exteriores estaban decoradas con viejos carteles de conciertos atrasados, Argirio se acercó y se dirigió a la quiosquera. -Perdone, tiene una revista… Emmm… No sé cómo se llama… Estoy buscando una revista de crímenes… -¡¿De crímenes?!- se sobresaltó la quiosquera- ¡¿Y para qué quiere eso?! 6 AWA Nº 78

El señor Gris estaba avergonzado, bajó la cabeza y su timidez se hizo patente una vez más, intentaba excusarse pero de su boca solamente salía un hilo de voz. La quiosquera le vio aspecto de persona extraña y no dudó en pedir auxilio, aquel tipo raro podía ser un loco peligroso, un vicioso o algo por el estilo. - ¡Salga de mi quiosco! ¡Psicópata!- Argirio empezó a correr de vuelta a su habitación de donde no tenía que haber salido¡Policía! ¡Policía!- seguía gritando la quiosquera. Al llegar a la habitación el señor Gris quiso tumbarse sobre la cama y mirar al techo, pero recordó que la cama tenía uso de armario y no de cama, así que se tumbó en el suelo, cerró los ojos y comenzó a pensar hasta que se quedó dormido. Le despertaron destellos rojos y azules, acompañados por una sirena y una voz amplificada por un megáfono, la policía había rodeado el edificio. Argirio miró por la ventana, estaba confuso y nervioso. La señora entró en la habitación hecha una furia, gritaba “¡Nunca tenía que haberle dejado entrar!”, “¡Ya me parecía usted un tipo raro!”, “¡Me va a matar a disgustos!” y cosas por el estilo, cuando se cansó de gritar se marchó con un portazo. La policía intentaba convencer a Argirio de que se entregase sin oponer resistencia, el señor Gris estaba sentado, apoyado en la pared con las manos en la cabeza sin saber qué hacer, él no había hecho nada, no tenía por qué entregarse, pero si no se entregaba… Lo lógico sería entregarse pero a saber qué mentiras habría contado la quisoquera; además de que era cierto que parecía un tipo extraño… Y la policía seguía insistiendo. -Salga con las manos en alto. -No- dijo Argirio desesperado. -Venga con nosotros o no saldrá bien parado de ésta. -No, yo sólo acompaño a la gente que me agrada y ustedes han venido de malas maneras, así que no. -¿Qué tengo que hacer para que salga?- preguntó el policía del megáfono que comenzaba a perder la compostura. -Pídamelo por favor. -Venga con nosotros, por favor- dijo el policía alargando el “por favor”. -No. -¡Pero si he hecho lo que me ha dicho! -No, no ha sido sincero… Usted no me quiere bien, esa quiosquera se ha hecho una mala impresión de mí y ahora todos están predispuestos a considerarme un loco peligroso… No salgo. El policía soltó una palabrota por el megáfono, las madres que estaban cerca de la zona intentaron tapar los oídos de sus hijos. Argirio se lanzó hacia el armario, lo abrió e imploró a Fermín - Fermín, sé que casi no nos conocemos pero tienes que salir ahí y decirles que no soy peligroso… Fermín… Bueno, si no quieres al menos dime qué debo hacer… Fermín, ¡dime algo! -Ñe. •

Criptoliteratura POR

Waterhouse & Catbug

Tras el último reto, que algunos rompieron, esta vez hay un relatillo estúpido encriptado. OJO, las letras en cursiva son un mensaje encriptado por su cuenta que se desencripta al final del relato. A ver si alguien averigua cómo se encriptó. Gavin estaba nervioso. Acababa de entrar un mensaje para desencriptar y aún no tenían la clave. Eran, clarísimamente, los últimos días de la guerra. Como mucho, quedaba un mes. Los alemanes seguían usando ENIGMA, sin embargo. Sus mensajes eran cada vez menos relevantes. En realidad, ya no tenía sentido que los leyesen, la guerra estaba ganada.

A pesar de ello, Gavin seguía descifrando todo lo que entraba. Era, en su opinión, de vital importancia. Él no creía lo que decían sus colegas. Los alemanes aún podían hacer algo para alargar la guerra. Miró el mensaje: NTOYS STRDY PPQOF DOHMR FYJRG IJTRT. Tenía que ser algo importante. Los alemanes lo habían mandado por un canal de alto secreto. Tras días trabajando duramente en descifrarlo, llegó a la conclusión, de que no habían usado ENIGMA. Lo rompió mediante un análisis estadístico y horas y horas de trabajo. La conclusión fue decepcionante: Brits are stoopid. Signed the Führer.

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UNA LLAMADA A LA ACCIÓN por PIJOAPARTE

Nos conocimos ayer, tú me invitaste a beber, yo te invité a no sé qué, tú dijiste qué bien. Y te hablé de poesía por ver qué decías, que si es tontería, que sí, que no... Así empieza la canción del Sr Chinarro Una llamada a la acción y funciona perfectamente como oportuna banda sonora para este texto. Supongamos, porque toda esta ficción no es otra cosa que suponer, que tenía una compañera, una compañera de tarde, que después podría convertirse en compañera de noche que, incluso antes, podríamos considerar compañera sentimental aunque eso siempre suene a crimen-pasional, es decir, a ya-son-treinta-y-dos-mujeres-las-que-este-añohan-perdido-la-vida-a-manos-de-sus-parejas. Hay una tendencia al alza consistente en sorprender al compañero, proponer planes poco comunes. Se busca tanto la originalidad que ya no recuerdo qué hace la otra gente, ésa a la que uno intenta no parecerse o parecerse poco o, simplemente, diferenciarse de ellos. Es cierto que para combatir esta tendencia, que ha existido siempre, ha aparecido lo que comúnmente se conoce como planesdeparejitas que abarca actividades tan apetecibles como un fin de semana en un balneario de Groupon, una cena romántica (no sé qué implicaciones tiene aquí el adjetivo romántica) seguida de un par de gintonics, una noche sorpresa con muchos pétalos encima de la cama, etc. Supongo que los patrocina Meetic. Aquella tarde yo era de los de sorprender. Lo importante para ser originales no es la originalidad, por si alguien ha tenido la osadía de razonar en estos términos. Lo importante es hacer como que sí, que no; en definitiva, como que sí: que sé muy bien a dónde voy, a donde te llevo, cómo voy a disfrutar y cuán bien lo vas a pasar y como que no: que no acostumbro a venir aquí con nadie, que tanto atrevimiento me da cierta vergüenza, que quizá no estés tan acostumbrada a hacer planes tan locos. Desde luego, no soy experto en estos fangos pero aquí hemos venido a jugar, ¿puedo enviar un saludo a mis padres que me estarán leyendo? Tras comer en un restaurante, rodeando el plandeparejitas 8 AWA Nº 78

pero sin caer en él, y quedar un rato, un rato largo, sentados a la intemperie como si nuestros vínculos emocionales calentarán más que este puto frío de diciembre que se clava en cada poro y deja sabor a óxido decidimos andar. Ocurre que hay eventos a los que quiero ir pero no tanto como para ir, no tanto como para reservarme el tiempo y realizar el esfuerzo de desplazarme para acudir. Sin embargo, resulta que estábamos bastante cerca de una presentación literaria a la que me interesaba ir. No lo propuse directamente, casi sin querer, hice por que recorriéramos Andrés Mellado. Me gusta, me gusta esa calle porque huele a castañas en el recuerdo, tiene tiendas de todo tipo, de toda la vida, tiendas que no sé cómo pueden seguir vivas pero la realidad es que sobreviven. También tiene pijos de provincias, flequillos de Pijade, la Sala Berlanga, que ha vuelto para quedarse, librerías (tres) y una luz a Madrid antiguo que recuerda a esos exteriores de la serie Cuéntame. Mi objetivo era engañar. Generar la motivación suficiente en los dos para tragarnos una presentación literaria, y eso sólo se consigue engañando. No es que me gusten las presentaciones literarias, ni que sea un habitual (no había acudido nunca antes) pero me hace ilusión publicar en AwA y suele haber dos opciones para aquel que siente que no tiene nada que decir: tener talento o contar su vida como si molara. Y yo talento no tengo. Bueno, no nos engañemos, tampoco sé hacer como que mola mi vida. Uno lo que quiere es divertirse (estoy hablando de libertinaje) y la poesía es un arma para engatusar a raritas (Celaya decía que era un arma cargada de futuro, es decir, lo mismo), mucho más un medio que un fin en sí mismo. Presentaba su tercer libro un poeta de la generación de los 80, un poeta bastante desconocido que me gusta bastante. El incentivo definitivo para toda esta trama era la presencia de un importante narrador de los setenta que hacía de maestro de ceremonias. Un tipo lúcido al que admiro. El primer libro del poeta tiene nombre de asignatura, La educación física, y compone poemitas donde los versos son tuiteables muy fácilmente de dos en dos (Amé tu cuerpo enfermo / pensando ya

en el siguiente.) pero si juntas dos versos con los dos siguientes (Mi vida es la única historia de superación / que he comprendido) eso ya no tiene sentido, carecen de unidad semántica. Es decir, es poesía fácil porque no se entiende pero parece que sí. Y los versos son suficientemente prosaicos como para parecer profundos, hasta en Twitter. El segundo libro tiene un prólogo devastador donde cuenta que pasó una noche de hotel con su madre en Cariño (que wikipedia dice que es un pueblo de Galicia) a los trece años. Esa noche su madre le dice que allí fue concebido. A los veintisiete años, edad a la que sus padres se separaron, vuelve a Cariño y el hotel ya no existe. Mi vida quedó demasiado atrapada, demasiado resumida, entre los dos viajes. El libro transita los mismos caminos, pero en vez de hablar de amor y juventud habla del amor de sus padres, del cual él es fruto, un amor que no existió. El fantasma del amor. Porque todas las historias del amor son historias de fantasmas, pero ése es otro tema, ése es otro libro.

mentario interesante que nos regaló (hablo de él como una puta groupie) fue acerca del pudor al escribir. El pudor como obstáculo de la intimidad y catalizador de lo doméstico. Definió la ausencia de pudor como un requisito necesario para desarrollar ese tipo de literatura íntima. Quizá eso sea lo que me lleva a escribir esto, que no es del todo real, pero, sin duda, hay mucho pudor borrando lo que escribo.

Del resto no hay mucho más. Hubo un tiempo en que pensé que mi compañera se estaba aburriendo, aunque después ella diría lo contrario. El poeta terminó leyendo diez o quince poemas de su libro de forma que entraban ganas de no comprar el libro, que nos había contado el final. Reconozco que me lo pasaba mejor mirando al gran público que prestando atención a esos poemas declamados con ínfulas por la criatura padre. La gente cerraba los ojos, eran rostros muy similares a los que se dejaban ver en misa durante la consagración. Otra opción consistía en ponerse a buscar frenéticamente El asunto es que ya íbamos terminando la calle Andrés Mecada poema en el libro, como si sólo al leerlo mientras él lo rellado cuando le comenté mi citaba ese poema pudiera guarproposición indecente. No le darse, almacenarse, en definitipareció mal, de hecho, puede Conocer al poeta fue duro, grotesco. Real- va, volverse a leer. La ronda de que le sonara bien. Ahora vie- mente era un tipo repugnante, grande, preguntas fue monopolizada por ne la realidad de una presentaun señor mayor que, en lugar de ción de un libro de poesía por seboso, con una risa estentórea (...) Me en- hacer una pregunta, se sacó un parte de un autor que no es de frentaba a mi propia decepción: asumir que par de folios escritos hasta los la ciudad, que no tiene amigos y nos dio su propia vauna voz poética tan potente provenía de un márgenes en la ciudad y que no mueve loración acerca de sus múltiples al círculo de cercanos de su cuerpo tan desagradable. (insistió en este hecho) lecturas círculo cercano de relaciones. del libro. El resto nos mirábamos La presentación era en una licon incredulidad mientras el brería y no había más de quince personas. La mayoría, si no poeta le sonreía (también hacía ruidos extraños al sonreír). todos, amigos. Éramos los más jóvenes y, posiblemente, los únicos desconocidos. Al final, lo reconozco, compré el libro para mi compañera, que parecía bastante interesada en releer los poemas (ella Conocer al poeta fue duro, grotesco. En un primer momentambién cerraba los ojos y ponía cara de profundidad para to, valoré como innecesario todo aquello: realmente era un escucharlos) y fuimos a que nos lo firmara. Hablamos con él, tipo repugnante, grande, seboso, con una risa estentórea que me inventé un par de anécdotas respecto a sus libros anterioaparecía imprevisiblemente, una respiración que era casi res que le hicieron gracia -se rió bastante fuerte- y nos escriun ronquido, su pelo pertenecía a la familia de las hamburbió una dedicatoria centrada en su escritura, en el proceso de guesas del McDonalds y un largo etcétera que no hacen sino la misma, que tardamos bastante tiempo en descifrar y en la evidenciar que aquello era mucho más que duro, aquello era que en su última frase dice “y eso lo cambia todo” aunque yo jodido de pelotas. Porque imaginad, por un lado estaba mi creo que pone “y eso lo calma todo”. Después, nos fuimos y a compañera, que nada sabía del poeta, ni de poetas, y que se la salida escuché al famoso narrador preguntar con desdén y imaginaba a un tipo con pinta de poeta (que los hay) y no a humor que quién coño era aquel viejito. Si alguien le conocía. aquel homo sapiens sapiens y, por otro lado, me enfrentaba yo mismo a mi propia decepción: asumir que una voz poética Y todo esto qué. Volvamos a la canción. Le hablé de poesía, totan potente podía provenir de un cuerpo tan desagradable. talmente. Ella me había invitado a no sé qué. Me dijo qué bien, y todo eso. Que sí, que no. Habrá que hacer el amor. Eso lo dice Pero tomamos asiento. La ceremonia comenzó con cierto rela canción, no yo. Pero fue entonces cuando todo este rollo, traso. Primero, se dirigió el editor al público, por llamar de alcuando toda esta tarde extraña, bañada de una sombra exguna forma a los cuatro gatos que asistiamos al evento. De su traña, quizá porque llegó la noche, extraña, como de vida que intervención, retuve lo mucho que se vanagloriaba de ser un no nos pertenece, dejó de tener sentido, o aquel sentido vano lector de poesía y de haber conocido al poeta hace ya varios y pretencioso para tener otro sentido. El sentido de entender años, más joven incluso de lo que era ahora. Después, le llegó que todo aquello no importaba, que no hay poesía en toda la el turno al famoso narrador de los 70. Muy certero, desarropoesía que se recite en eventos burgueses en librerías-café. lló varias ideas a colación del libro que se presentaba. Por un Los versos de calado, los de mayor potencia son aquellos que lado, se preguntaba por qué debería importarnos la vida del pronunciaría mi compañera algo después, en un lugar dopoeta ya que era un libro autobiográfico donde claramente méstico, en el inicio de un acto íntimo: tú y yo vamos a estar el escritor se abría en canal y nos invitaba a mirar sus protodo el tiempo follando o qué. Que vale, no suena muy lírico pias tripas. Distinguió entre lo doméstico y lo íntimo. Lo dopero probemos a darle al intro de vez en cuando, es decir, a méstico es aquello de lo que se abusa, del anecdotario que al poetizar la existencia, como-si-nada: lector le viene a dar igual mientras que lo íntimo es mucho Tú y yo más revelador, nace desde más adentro e interesa porque en vamos a estar esa desnudez encontramos nosotros nuestra propia desnu todo el tiempo dez, es algo tan personal que es personal para los ojos del que follando lee, del que mira. Citó como ejemplo de esta forma de hacer o qué. literatura a Francisco Umbral, a su Mortal y rosa. Otro coAquello sí que era una llamada a la acción... Nº 78 AWA 9

Por tener a alguien Que te piense

L’abraçada Arrib a casa, m’assec a la butaca, abatuda. Em sent dèbil, potser sola, potser buida, dèbil. Abandon el meu pes a la butaca, em deix abraçar dins la seva immensitat. M’agradaria estar encara dins la gran abraçada, càlida, dels batecs del teu cos.

Has dejado de ser Y lo que eres Es un cuerpo Que se folla a otro cuerpo A una boca Que se esconde en unas piernas Que araña y eterniza Lo divino

Cleh

ETSIIANOS 2.0 COLABORACIÓN DE

CUBO

Hola etsianos, últimamente no hay número de AwA que no tenga algún artículo amargándonos la vida con visiones pesimistas, sueños rotos o romances frustrados y por todo esto me he decidido a escribir aquí por primera vez. Sí, coño, ya lo sabemos, la vida no es un camino de rosas. Sufrimos, lloramos,

nos sentimos impotentes. Pasan los días y nada pasa mas que el tiempo y eso, nos sucede muy a menudo y más en la ETSII donde hay días que dan ganas de entrar en clase con un lanzallamas y mandar todo a tomar por culo. Pensamos que hemos ‘tocado fondo’. Pero, ¿realmente estamos tan mal?

Pienso que no. Que estás leyendo esto, joder, que estamos vivos! La vida es caótica, trágica, bella, sí, pero es lo más valioso que tenemos y mientras estemos aquí, disfrutémosla al máximo porque siempre hay una maldita razón para levantarse de la cama cada mañana.

De los lectores: Please Please Please – Shout Out Louds (¡Gracias @saracr92!) Illumination Theory – Dream Theater (¡Gracias @JL_Ricon!) De la redacción:

Unicorn Wizard – NSP (Ninja Sex Party) Through the Dark – One Direction Superslow – Trevor and The Joneses Chocolate – The 1975 Radioactive – Imagine Dragons Zeit Ist Geld – Irie Revoltes Brindo – Devendra Banhart Babel – Mumford & Sons

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@AwA_ETSII

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10 AWA Nº 78

AuGe gredupm@gmail.com @AUGEUPM

Mediante la cooperación de todos sus miembros, esta nueva asociación intercentros aglutina los recursos de cada una de las revistas de las diferentes Escuelas. Caminos, Industriales, Minas y Telecomunicaciones, con la colaboración de Arquitectura, pretenden seguir adelante con sus proyectos en esta época difícil en la que las ayudas a la cultura casi han desaparecido. La búsqueda de colaboración con empresas del sector e interesadas en la universidad para poder ofrecer revistas de calidad en todos los centros sin que ninguna pierda su identidad es nuestra prioridad. Realizar eventos a nivel Politécnica, como un Concurso Literario. Lo haremos, y sin que te cueste nada. Apoyar la creación de plataformas de expresión en todas las Escuelas que no la tienen mediante una Revista Común agradable a la vista, al olfato y al tacto, porque somos capaces EL EQUIPO A(UGE) de comprender el Álgebra Hace casi 20 años nacieron cuatro de las mejores revistas de Booleana. la Universidad Politécnica de Madrid de manera espontáY todo esto de manera casi nea y sin relación entre sus miembros. Algunas fueron eninmediata, porque contamos cerradas en los sótanos, a otras las recluyeron en apartadas con experiencia y difusión habitaciones con vistas a la Moncloa, otras fueron olvidadas en las redes sociales, porque por un delito que no habían cometido, pero no tardarían en nos sigues. Infórmate para fugarse de las prisiones en las que se encontraban recluidas. poder llegarle a todos los que Hoy, publicando todavía las inquietudes de los estudiantes son como tú. de la UPM, sobreviven como soldados de fortuna. Ahora esHay vida ahí fuera. tán unidas y quieren expandirse. Si tiene usted algún problema y se las encuentra quizás pueda contratarles... El Equipo A(UGE UPM). Nos encanta que los planos salgan bien.

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NO PARADISE EN CONCIERTO

Concierto de No Paradise Viernes 20 de Diciembre a las 21h30 La Cocina Rockbar (C/ Alberto Alcocer, 48. Metro Colombia) 5€ contactando con Álex al 692 345 668, o en la puerta. Punk rock canalla. ¡Y comparten escenario con Hawk, no te los pierdas!