INFORME
El camino trabado para el reuso de las botellas PET E Johanna Nores Llave
La única planta del país con tecnología para reciclar botellas PET, propiedad de San Miguel Industrias (SMI), se encuentra paralizada desde enero del 2012, fecha en la que se dio inicio a sus operaciones. Sucede que la existencia de normas de hace 15 años atrás prohíben el reuso de plástico al considerarlo nocivo si está al contacto con alimentos y bebidas. Lo cierto es que se trata de una las iniciativas más responsables de la industria para mitigar la contaminación ambiental.
nero del 2012. Con gran expectativa, San Miguel Industrias (SMI) daba inicio a las operaciones de una nueva planta capaz de hacer una industria más responsable con el ambiente: se trataba de explotar una tecnología que permite el reuso de las botellas de plástico (PET) para reinsertarlas al proceso productivo de los alimentos y bebidas gaseosas. Fue con este acontecimiento que el Perú se convertía en el segundo país de la región –después de Brasil- en adquirir un equipo de primer nivel y por el cual se invirtió US$ 15 millones. Lo paradójico de todo esto fue que los frutos de la nueva tecnología no serían vistos mientras persista el Decreto Supremo (D.S.) N° 007-98-SA, del Reglamento sobre
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INFORME Vigilancia y Control Sanitario de Alimentos y Bebidas. ¿La razón? Dos artículos de dicha norma aluden a la inocuidad del producto y a la prohibición del uso de plástico reciclado en contacto con alimentos y bebidas. Durante los años 2007 y 2008, la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa), órgano técnico del Ministerio de Salud, creó un proyecto para actualizar el citado reglamento, tras sus 10 años de vigencia por aquel entonces. En el 2012, la propuesta de la entidad responsable parecía ir hacia la solución ambiental pues un artículo establecía la aprobación del uso de plástico reciclado para el contacto con alimentos y bebidas. El entrampamiento legal “Se determinó entonces que si se modificaba cierta cantidad de normas en el reglamento, este tenía que ser nuevamente publicado para la observaciones y comentarios de las instancias involucradas en el tema, tanto nacionales como internacionales. Es todo un circuito que empieza por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR), sigue por la CAN, por el Ministerio de la Producción y termina con el MEF”, explicó el jefe de Unidad de Reciclado de SMI, Vitorio Gotuzzo. Agregó que si una de las entidades tiene un comentario sobre el reglamento, el mismo tiene que pasar por el viso de la oficina de la asesoría jurídica de Digesa. A casi tres años de haberse publicado la resolución, el tema sigue siendo discutido y sin ninguna luz para su asentimiento final. Industria Peruana intentó conversar con algún funcionario de este organismo sobre el por qué de la dilatación, pero ninguno contestó a nuestro llamado. En tanto, SMI se ha visto en la necesidad de prescindir del 50% de sus trabajadores pues su planta de reciclaje permanece paralizada, perdiendo desde que se inauguró
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Pensamos que una contribución como esta (la planta reciclaje) sería bien recibida por todos lados. No hay forma de que la gente no se enamore del proyecto y no avance… Son tres años de demora, pese a que las autoridades han expresado su interés para sacar adelante el tema. (2012) hasta el momento un total de US$ 24 millones aproximadamente (US$ 8 por año). Pero sobre todo “el Perú se priva de contar con una tecnología de primera para mitigar la contaminación originada por el plástico”, sostuvo el vicepresidente Comercial y de Operaciones de SMI, Sven Brodersen. Vale decir que por cada tonelada (TM) de plástico PET reciclado se evita la emisión de CO2 al medio ambiente (contra la producción de plástico PET virgen) y por cada dos toneladas de plástico PET se ahorra
una TM de petróleo. Además, de operar la planta de SMI, 38,000 TM de botellas post consumo serían retiradas del medio ambiente y se evitaría que el polvillo de la molienda de las botellas PET termine en el mar. ¿Cuál es la solución? “Pensamos que una contribución como esta (la planta de reciclaje) sería bien recibida por todos lados. No hay forma de que la gente no se enamore del proyecto y no avance… Son tres años de demora, pese a que las autoridades han expresado su interés para sacar adelante el tema”, comentó Brodersen. En ese sentido, Gotuzzo Barco sugirió que la única manera de modificar el cuestionado decreto es mediante otro decreto. “Que se extraiga solo el artículo del reciclado y se haga un D.S. independiente, que puede ir refrendado por el MEF, el Ministerio de Salud o el mismo Presidente de la Nación… Si nos quedamos como hasta ahora no sabemos cuándo va a salir (la norma)”, añadió el vicepresidente Comercial de SMI. De una opinión similar es la Asociación de la Industria de Bebidas y Refrescos Sin Alcohol (Abresa). Su vicepresidente y también directivo de Lindley, Agustín Valencia Dongo,
INFORME indicó que lo más eficiente sería la generación de un dispositivo específico que pueda ser emitido por una regulación independiente para que avance. Abresa es representante de las empresas más importantes del sector, siendo uno de sus asociados la compañía Coca Cola, que dada su condición de franquicia internacional posee políticas globales que exigen a sus embotelladoras usar resina reciclada (RPET) certificada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés). “Por ejemplo todas las botellas de Coca Cola a nivel mundial deberán contar con un porcentaje de material reciclado en su composición para el 2020”, citó el Comité de Plásticos de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI). Recordó también que parte del interés de SMI por incorporar una tecnología de reciclaje fue a raíz de las exigencias de sus clientes, entre ellos, la multinacional. El comité agregó que hoy en día todos los países de la región ya cuentan con RPET, menos el Perú. Efectivamente, el uso de material reciclado en la fabricación de botellas para bebidas está permitido en Estados Unidos, Europa, Mercosur, Chile, Colombia, Ecuador, Costa Rica; así como en otros países de Centroamérica. Lo irónico es que muchos de los países latinoamericanos han tenido como precedente la experiencia peruana. Beneficios por múltiples usos Las botellas de plástico pueden ser reusadas indefinidamente en la industria de bebidas y gaseosas sin ningún tipo de riesgo para la salud de la población. Según el Comité de Plásticos de la SNI, San Miguel Industrias ha elaborado estos productos con un comportamiento igual, e inclusive superior, al de las botellas con material 100% virgen. Como adelantamos, los beneficios
La planta de San Miguel Industrias se encuentra paralizada desde el 2012.
de emplear RPET obedecen principalmente a un tema ecológico. Sin embargo, las ventajas también son apreciables a nivel social y económico. Dicho comité aseguró que la planta de SMI al 100% de utilización sustituye importaciones (balanza comercial) por un valor aproximado de US$ 41 millones al año. Asimismo, da lugar a la formalización de la cadena de acopio (pago IGV), que aumentaría la recaudación nacional en más de US$ 4 millones al año. El riesgo es que esto podría anularse si SMI- que tiene el 80% del
mercado nacional- decide mover su planta a otro país (Colombia), como así lo dejaron entrever los directivos de la empresa en caso no prospere la aprobación del artículo 46. Esta industria genera cientos de empleos directos y 3,000 indirectos registrados y, en su aspecto social, Sven Brodersen destaca la formalización de los recicladores (ingreso a planillas, derecho a seguro social, etcétera). Como vemos, se trata de un proyecto favorable para el Perú en todo sentido, pero ¿qué se está esperando? n
Una industria que le dice sí al reciclaje de plástico PET
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esde hace alguno años, Abresa está promoviendo una cultura de reciclaje a través del programa Reciclar para Ayudar, el cual destina los fondos recaudados por venta de material PET para la recuperación de niños con quemaduras de la Asociación Aniquem. El 2013 se recolectaron casi 100 toneladas de plástico PET. n
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