Pa verdades el tiempo by Ricardo Izaguirre

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Segunda Edición: OCTUBRE 2004

ACUSES DE RECIBO DE LA PRIMERA EDICIÓN "…Realmente lo felicito por el esfuerzo de publicar esta interesante novela cuya lectura disfruté mucho…" Lic. Rodrigo Carazo Odio ************ "… con trazo firme y altivo, valido de un estilo ameno y sabroso, que cautiva la atención del lector, y con la venia de los costarricenses honrados que aún quedan para salvar a la patria de los temibles embates de la corrupción, ha hecho usted su entrada en el campo de la novela crítica social costarricense. "Pa verdades… el tiempo" debería ser de obligada y pronta lectura en las aulas de todos los colegios de Costa Rica…" Oscar Chacón Jinesta ************ "… "Pa' verdades … el tiempo", me pareció la mejor, por cuanto se encamina hacia lo histórico - político - didáctico. Siento que en ella, las nuevas generaciones y aún las viejas, vemos plasmados nuestros propios pensamientos en cuanto a lo que ha sido y lo que es la situación del trabajador del campo; en cuanto a las manipulaciones de la política interna y de la externa. Otro valor que encierra esta narración es, precisamente, la forma de relatar, tan nuestra, tan cotidiana. Quienes amamos el campo y su gente, sabemos que así transcurre la vida campesina…" Licda. Teresita Marroquín Díaz ( Jurado del Concurso del Ateneo de Costa Rica 1997-1998). ************* "… Su libro refleja el espíritu crítico de un pueblo inteligente que no es indiferente a los problemas políticos, sociales y económicos que nos atañen día a día. Sus personajes están arraigados a cada uno de nosotros y de una u otra manera muchas veces hemos pensado o vivido situaciones como las que Usted magistral y entretenidamente plasma en su creación literaria…" Lic. Juan José Nassar Güell

INTRODUCCIÓN Una segunda edición de esta novela fue sugerida desde el nacimiento de la primera, sin embargo, el proceso de adaptación de aquella con los acontecimientos de la patria, demandaban que pasara algún tiempo para otear en el horizonte si se daría un golpe de timón en la conducción de la política socieconómica de la nación y si las instrucciones de los organismos financieros internacionales pesaban más que el sentido social de nuestros conductores. Muchas cosas han pasado y desgraciadamente no ha habido un gran cambio, nuestro pueblo sigue empobreciéndose cada vez más y las medidas cosméticas que toman los gobiernos de turno no son sino eso, medidas paliativas a un enfermo grave. No quiero ser pesimista sobre el futuro del país, pero en la segunda parte y adición de esta obra, sugiero algunas pinceladas para corregir algunas cosas que si se hacen, podrían eventualmente salvarnos del despeñadero en que han caído otras naciones, en apariencia más solventes moral y económicamente que nosotros. El futuro de la nación, entendido ello como el territorio y sus habitantes, lo veo en la casta del ser costarricense. Es desde nuestro interior de donde saldrá la posibilidad de corregir el rumbo, pero, se necesitan los líderes carismáticos que impulsen esa fuerza interior que ciertamente tenemos, mas no explotamos por acomodaticios al estatus y al entregar la conducción de nuestros destinos a los políticos de oficio, quienes no siempre son los más apropiados moral e intelectualmente para hacerlo. Pa’Verdades el Tiempo es eso, es pasión, es amor por la patria, es crítica sociopolítica, es el vómito literario de este ciudadano que sabe que estamos mal, pero no desahuciados y que será con la ayuda y participación activa de nosotros mismos que lograremos levantar a ese enfermo, sino el futuro para las nuevas generaciones será muy oscuro

EL AUTOR 2004.-

A todos y cada uno de los que se interesaron en la culminaci贸n de esta obra. A mi familia y a los seres que amo. Muy especialmente a los asociados de los bancos comunales y a los verdaderos dirigentes comunales, para quienes deseo la mejor y m谩s digna Patria. RUBEN SOLANO JIMENEZ ABRIL 2004

JUSTINO RAFAEL ... Hombre de esos, muy hombre, amigo de los amigos y del trabajo, tico de nacimiento y luchador universal, forjador de ilusiones y de la Patria nueva. De su vida, la mayor parte, la verdad no recuerda cuánto tiempo, la ha pasado como peón en la finca de don Félix, la que abarca quinientas o más hectáreas de lo que llaman El Bajo del Alumbre. Trabaja desde pequeño arriando los bueyes, llevando almuerzos, metiéndole bagazo seco a la hornilla del trapiche, peón de toda ocupación y encargado del trapiche. Todas las etapas; ha hecho carrera. Como parte del pago en especie por su trabajo, tiene derecho a vivir con su familia en un rancho que él mismo ha construido en "la finca de abajo” y ello gracias a que su padre, hoy muerto, "se había matado”, laborando para aquella familia en algo que seguro nunca les pertenecería y de lo cual jamás obtendrían sus frutos. Bajo de estatura, piel amestizada, manos grandes y callosas, pelo ensortijado y quemado por el sol y una mirada vivaz, muy vivaz, que sólo tienen los que siempre han estado en la lucha. Sus piernas algo corvas y sus pies acusan los muchos años de faena descalzo. Ahora usa botas de hule, pero una vez que termina la tarea del día, se las quita, " pa' que se venteen los pieces ", dice. Distinguido desde chiquillo por ser hablantín y "muy reclamón", decía don Félix “...y no deja pasar oportunidad para decir verdades a quien tenga que decírselas”. Este es Justino Rafael ... Flor por su parte, es la fiel representante de la mujer del campo. Callada, humilde y muy dispuesta a apoyar en su marido tanto en las tareas agrícolas, como en todas las del hogar. No se cuestionaba muchas cosas de la vida o por lo menos no las exteriorizaba; lo que Justino decía, estaba bien. De por sí ella había trabajado desde pequeña y jalar un balde de agua de la quebrada o una carga de leña desde la zocola, no le asustaba. Desde los cinco años ya estaba incorporada a las tareas del hogar y el hecho de que se jalara torta con Justino, había alivianado la carga de su propia familia. Fue a los catorce años cuando descubrió con asombro, miedo y rencor, que su novio le había embarazado. Ella era una chiquilla y Justino andaba por los dieciocho. - Es que era muy guapo y muy galano - se decía. La convidaba con "sobado"," espumas" y " melcocha" del trapiche del patrón y con eso la conquistó. Así, ambos dieron rienda suelta a sus amoríos, allá en el potrero de don Félix, en el sitio donde pastaban las vacas del gasto. No se imaginaban que aquellas locuras de juventud, traerían como recompensa el nacimiento de Justino Alberto, quien murió a los cinco meses de edad por un gastro. Al año de juntados y a los tres meses de la muerte del niño, el patrón aceptó que construyeran un rancho en la finca de abajo, la que no era sino la extensión de la gran cantidad de tierra que había acumulado la familia de don Félix a lo largo de varias generaciones. Mientras tanto, vivieron arrimados en la troja de la familia de Justino, quienes vivían desde hacia muchísimos años en la finca. Parte de esa finca habla sido de sus abuelos, pero se la vendieron en una "cochinada" al padre de don Félix, quien les permitió quedarse a vivir allí y les dio trabajo.

- Mire Justino - dijo Carlos el papá de Flor. - Usté ha estado traveseando con mi hija y siendo que ya es un mamulón y que ya puede echase una obligación encima, lo mejor que puede hacer es juntase con ella, así me quita a mi ese problema, porque yo mantengo a mis hijos hasta onde pueda, pero pa'nietos, ya no me da la tela Carlos era al igual que el papá de Justino, un hombre que siempre había trabajado en la finca de aquella familia y a brincos y a saltos y con la ayuda de los hijos, ya peones también, se la habían jugado para sacarle algún provecho a su azarosa vida. Alquilaban un terrenillo de la misma finca y las cosechas de frijoles y maíz, se las vendían a los propietarios, que las sacaban hasta la ciudad. Si sembraban caña, esta iba a parar al trapiche de don Félix y salía transformada en dulce o en "marqueta", que vendían a la Fábrica de Licores. Tres hijas, las mayores, ya se habían casado. Solo le quedaban los varones , que eran dos y trabajaban con él. Flor era la cumiche y al igual que sus hermanas, se había" jalado torta". No era cosa del otro mundo, pero había que honrar la afrenta con la" juntada" por lo menos, si es que no había matrimonio que era más honesto. En menos que canta un gallo, Justino Rafael estaba juntado con Flor y el embarazo, producto de sus correrías, ya despuntaba en su casi infantil vientre. En la troja de la familia de Justino nació aquel desnutrido varón, a quien llamaron Justino Alberto. Su bautizo sería para cuando hubiera algo de plata, para así invitar al diputado, hijo de don Félix, a ser su padrino. Para ellos sería un gran honor, además de que era la tradición, desde que aquel joven se hizo abogado y puso una oficina allá por los alrededores de la Corte en San José.

DIOS, COMPAÑERO…AMIGO El niño moriría a los cinco meses de edad en medio de vómitos y diarrea, y de la desesperación de sus padres que poco o nada pudieron hacer para salvar a su primer fruto. Pensaron desde el primer momento que la enfermedad y la posterior muerte del niño, era el castigo de Dios por no respetarse, pero se consolaban a la vez en que de por sí estaban jóvenes y que muchos hijos vendrían posteriormente. -¿Sabes Flor ? Esto es la voluntá, de Dios. Seguro que en el cielo hacen falta angelitos y por eso se han llevado a Justinito. No llores más , que con eso no lo vas a resucitar y de por sí no teníamos plata pa' llevalo al centro a que lo viera un doctor, menos pa' las medicinas. ¿ De ónde íbamos a coger ? Flor le escuchaba, como quien oye llover y aferrada al cadáver de su hijo se cuestionaba que quizás si ella hubiera sido más madura, al niño no le hubiera pasado eso. Temía que Justino pensara que ella era

una descuidada y ya no la quisiera más. El a manera de consuelo le tomaba su larga cabellera y le palmoteaba la cabeza, mientras que le decía -" el señor nos los da y el señor nos los quita“ Así le habían enseñado. Todo era por la voluntad de Dios. Mientras construía con cuatro tablas, el ataúd del niño, Justino conversó con Dios y le retó con todo respeto, como le había escuchado al cura en una de las pocas veces que en su vida había ido a misa y le dijo: - Señor Dios, si esta es tu voluntá, bienvenida sea, pero de ahora en adelante, yo me voy a proponer a que tu voluntad y la mía se unan pa' hacer de nuestras vidas algo de provecho - Y continuó, mientras dos lágrimas muy pesadas corrían por sus curtidas mejillas. - Yo sé que vos tenés mucho que hacer por todo el mundo, por eso y antes de poneme a lamentar sobre el cadáver de mi hijo, te prometo que de ahora en adelante no escucharás de mí más lamentos y por el contrario, todas las mañanas y todas las noches, daré gracias por los favores concedidos, con mi esfuerzo y con la mucha o poquita ayuda que podás dame. Si no podés ayudame, no importa, pero la mejor forma de glorificate, será con mi propio esfuerzo, con mis manos, con mi cuerpo. Así con trabajo, cada vez me pareceré más a vos, jamás me lamentaré de mí suerte y por el contrario, me propondré a ser más cada día y eso sí, si mi proyecto falla, espero no me juzgués tan duro, que al fin y al cabo soy un pobre campesino sin educación, el cual sólo tiene su cuerpo y el poquito conocimiento que me has dado pa' enfrentame a la vida. Amén.Dicho lo anterior, terminó de clavar el ataúd y se armó de valor para arrancar al niño de las manos de Flor. Deberían velarlo y a pesar de que no era bautizado, las ceremonias de la vela y el entierro serían como mandaba la iglesia, con toda la solemnidad y el respeto. Toda la noche se veló al "angelito". Por la mañana y gracias al préstamo de una carreta, su cuerpo fue llevado hasta el cementerio de la finca-pueblo y la mayoría de las trescientas personas que conformaban la comunidad asistió. De todos los bajos y altos vino gente, la verdad es que una muerte y un entierro eran novedad, era una de las posibilidades que tenían aquellos pobladores de encontrarse y conversar sobre las diferentes facetas de sus vidas. Iglesia no había. Para tan poca gente no valía la pena desplazar a un cura a esa comunidad. Si alguien quería escuchar misa o recibir los servicios de la misma, debía desplazarse hasta el pueblo, cabecera del distrito, ubicado a unos diez kilómetros de aquel bajo, donde cada quince días se oficiaba. En el novenario solo participan los más cercanos vecinos, pero al noveno día, la efervescencia crecía y de todos lugares enviaban gallinas, pollos, huevos, tamales asados, pan casero y cuanto cosa se les ocurriera para ayudar al festín con el cual se daba asistencia a los rezadores. Estofado, sopa de gallina con fideos, un picadillo de papaya verde, muchas tortillas y aguadulce en cantidades comerciales, lo complementaban. Todo el día se rezaba y todo el día se comía. Así era y el novenario de Justinito no iba a ser la excepción. A los dos años de la muerte de Justino Alberto y de haber hecho el trato con el Señor , la familia parecía que se iba a incrementar, Flor acusaba un incipiente embarazo y la ilusión de los jóvenes-pareja, se intensificaba conforme pasaban los meses. Al final, Lola la partera, le ayudó a Flor a traer al mundo a una hermosa niña, para el "tiempo de los elotes". - Su destino estará marcado por la abundancia - decía orgulloso Justino , - Porque un niño nacido en temporada de cosecha, significa ni más ni menos que nunca le faltará -

Flor a pesar de su corta edad, ya estaba más fogueada en el arte de ser madre y nunca, en los siguientes dos años, dejó de darle la teta. - Eso - se decía - la mantendrá sanita y le hará crecer con todas las defensas - Así fue. Flor del Carmen, así le habían llamado, parecida a su madre, pero con los mismos ojos de Justino; sería una gran mujer y crecería al amparo del amor que se profesaban sus padres.

¿ COMUNISTA ? - Mire Justino, yo no es que sea muy religioso que digamos, Pero ustedes llevan esa "güila" pá' arriba, no son casados y ni siquiera la han bautizado y eso a mí me da mala espina. ¿ No será que vos sos comunista ? Le increpó un día don Félix. - Si es por falta de plata, yo te puedo hacer un préstamo y el día que venga el cura a San Fermín se casan ustedes y de una vez hacemos el bautizo de la chiquita. Así casaditos todo es más normal y la niña estará dentro de la iglesia, que la verdá yo nunca he entendido pa' qué sirve, pero diay, así se acostumbra Y continuó: -Mi hijo que está en la Asamblea, con mucho gusto se la podría llevar a bautizar, pero sólo si ustedes están casados, porque como vos sabes, él debe proteger su imagen. Bueno eso dice, a pesar de que el muy bandido ya se ha casao tres veces. Usté tiene la palabra, nada más digo pa' cuando quiere que háganos la torta y la hacemos bien grande - Don Félix, yo mucho le agradezco su interés, pero usté debe saber que con lo que yo me gano trabajando de sol a sol en su finca, apenas me alcanza pa' mantenenos y medio ila pasando y la pasaría más mal, si usté no me hubiera alquilao el terrenillo onde tengo la milpa y el frijolar, pero usté no es tonto y sabe que eso da apenas pa' medio comer y pagale el alquiler. Así que dejémonos de vainas y de hipocresías. El Señor sabe que a pesar de que no soy casado, todas mis actuaciones van encaminadas a sostener a mi familia y a engrandecelo a El con mi trabajo. A mi chiquita tal vez sí me gustaría bautizala, pero la verdá es que más me gustaría que me la llevara a bautizar usté, que si sabe lo que es jodese por la vida y por sacale provecho a la tierra, no su hijo, con el perdón suyo, que la ha llevado siempre suave y que como usté dice, se ha casado ya tres veces, tiene güilas por todo lado y vive de la política, que es la profesión más sucia, a mi humilde entender. No se enoje conmigo, pero esa es la puritica verdá - Jueputa Justino, usté si es rajao pa' hablar, yo creo que de verdá vos sos medio comunista, pero ya en el fondo, como que tenés razón y bueno, de nosotros nunca se ha dicho nada. Cuando usté quiera yo le llevo la güila a bautizar y si no quieren casase, pos allá ustedes Montó en su yegua y de camino se quitó el sombrero, rascóse la cabeza y dio rienda suelta a sus pensamientos... - Pos sí, la verdá es que la educación y la diputación de Felicillo, me han costao un ojo de la cara y yo no he visto los frutos de eso, ni este pueblo. En cambio a él cada día lo veo más ostentoso y con mejores clientes en su oficina, de esos que se ganan en la política. Ya es poco lo que viene acá y según me han dicho, las fiestas que se arma en la ciudá son de antología. A sus amigos de aquí los ha olvidao y cuando lo llegan a buscar a la Asamblea les manda a decir con la secretaria de la secretaria, que no los puede atender

y les da cita, pa' nunca. Tiene razón este Justino. ¿ Pero de onde se habrá enterao? Si es que era un secreto de nosotros. Pueblo pequeño, infierno grande - se consoló. Justino, después de la conversación con don Félix, siguió inmerso en la reparación de la cerca, pero sintió miedo de que lo que le había dicho a aquel buen hombre, a quien veía como el padre que hacía muchos años no tenía, le pudiera causar problemas. - Bueno pero la verdá es que si decir las cosas como debían ser, si el ser sincero y hablar claro, llevaba consigo el que lo marcaran de comunista - él no sabía ni que era eso, - pues bien, él era comunista De por sí, de peón a comunista, no debería haber diferencia alguna - Pensó en voz alta. Eso creía, como creía en Dios y según había oído, los comunistas no creen en El.

REPRESENTANTE COMUNAL El amanecer de aquel sábado, algo traía entre manos, porque un desasosiego carcomía las entrañas de Justino, desde que vio un rótulo en la pulpería por medio del cual se convocaba a los mayores de quince años, para integrarse en asamblea general constitutiva de la Asociación de Desarrollo Comunal de San Fermín, a quien territorialmente pertenecían ellos. La acción gubernamental siempre se había concentrado en el poblado cabecera del distrito y nunca se habían acordado de los habitantes del Bajo del Alumbre, quienes debían sacar su producción en carreta o a lomo de bestia, sino el propio. Recordaba él de como murió su hijo por falta de atención médica y de como su hija, cuando había requerido de las vacunas, él tenía que llevarla hasta la ciudad, para que con "miles ruegos" se las pusieran, porque ni al seguro social estaban afiliados. Ellos eran unos olvidados de los gobiernos de turno, a pesar de que tenían un político que había salido de sus entrañas. Pues bien, la oportunidad que se presentaba ahora con una organización de base y la posibilidad de ir a hablar de los problemas que ellos enfrentaban en el Bajo, no podía dejarla pasar. Muy temprano se levantó y después de sacar la jornada sabatina, que era más suave que la habitual, se bañó en la quebrada y en el baño que había construido con cañas de bambú, en un trabajo de ingeniería hidráulica que envidiaría el mejor.Ensilló a La Pinta y con el que Dios me lo acompañe de Flor y el beso de su hija, se dirigió al encuentro con su futuro. De camino se encontró con varios vecinos más que estaban conversados de antemano y juntos emprendieron la cabalgata. Los dirigentes de San Fermín les habían tomado en cuenta al convocarlos a ellos y los seis que iban, representarían los intereses del Bajo. Tendrían que escucharles y a lo mejor estarían altos funcionarios del gobierno y podrían decirles cara a cara que siempre les habían engañado, sobre todo en las campañas políticas, cuando se atrevían a llegar hasta sus ranchos a pedirles el voto, eso cuando no era don Félix el que los convencía sobre las bondades del candidato de turno, por solicitud de su hijo. La verdad es que siempre habían votado por el candidato del patrón. Justino solo había votado en una oportunidad y no quiso decir por quien había emitido su voto. De ahí que muchos le tenían color de "camarada", como le llamaban en la ciudad a los que simpatizaban con los partidos de izquierda. Ya don Félix se lo habla dicho.

- Mirá Justino, vos sos el más entrador en estas cuestiones, sos el que más paja hablás en la pulpería sobre nuestra situación y la verdá, pa' que te alistés, es que hemos decidido que en la reunión, seas vos el que hable en representación de todos. Nosotros te elegimos porque vos tenés más palabrería como pa' date a entender, ahora que si te da miedo, yo te meto la cuchara - le dijo Mamulón, aquel a quien todos temían porque era muy bueno para los golpes y tan fuerte como una yunta de bueyes maizoles. - Es que la puritica verdá, nosotros no sabemos como hablar en público y vos no te da miedo nada, al cabo ¿ qué tenemos que perder ? – Justino le oyó sin decir nada, algo murmuró que no entendieron los otros , quizás por el ruido que hacían las bestias en el ascenso por aquel camino empedrado y polvoriento, pero en la primera parada que hicieron y ya en el alto, mientras se refrescaban las gargantas con el aguadulce con limón, que todos llevaban en las jícaras, sorpresivamente les dijo : - Miren güevones, a nosotros siempre nos han dado atolillo con el dedo, siempre hemos trabajado por jornales de hambre, los hijos se nos mueren por falta de atención médica y porque los hijueputas del Ministerio de Salú, les da miedo entrar hasta el Bajo, pa' repartir las pastillas contra los bichos. No estamos asegurados y el día de mañana nos pica una terciopelo o nos enfermamos por algo o ya de viejos no podemos trabajar, no podremos disfrutar de una pensión, moriremos como nuestros padres y agradeciéndole al patrón por permitir que nuestros restos reposen en el cementerio de la finca. Nunca recibimos aguinaldo y si nos alquila un terreno pa' sembrar algo propio, debemos hacer de tripas, chorizo, pa' que las plagas no se caguen en el trabajo. Meditó profundamente lo que a continuación iba a decirles y siguió: - Existen en la ciudá un montón de instituciones que dicen que jueron hechas pa' ayudar a la gente como nosotros, pero a ustedes les consta que nunca hemos sido favorecidos con su trabajo, ¿ saben porqué ? porque la mayoría de sus empleados son de escritorio y nunca han sabido lo que es jodese en el surco y estoy seguro de que no saben ni onde queda El Bajo del Alumbre- Tranquilo Justino, no es pa' tanto - ripostó el mayor de todos los que iban, a quien apodaban "Sapa", por chiquitillo y gordo. - No se trata de ir a peliar con todo el mundo, vamos a ir a participar en esa reunión a la que nos han invitao por primera vez en la historia y si vamos a ir tan bravos, pues a lo mejor no nos vuelven a invitar - ¡ Ay Sapa !, le dijo Justino - Saben que es lo que nos pasa y seguro estoy les pasa a la mayoría de los campesinos de este país, es que estamos muy acostumbraos a que otros tomen las decisiones por nosotros, sin siquiera consultanos y damos por bueno todo lo que aquellos hacen. Ya va siendo hora de que los que nos jodemos trabajando sin descanso, tomemos la palabra en cada oportunidá que se nos presente y le digamos a los políticos y a los empleados del gobierno lo que pensamos. La verdá es que por nosotros están ahí y se ganan los sueldos que se ganan, ¿ o no ? - Aparte de eso, no es que nos estén invitando, es su obligación la de convocar a todos los vecinos mayores de quince años, pa' que asistan a la Asamblea, así que vamos con todo el derecho de participar. Ustedes parecen nuevos De ahí en adelante, hubo un silencio total, cada cual sumido en sus pensamientos y quizás meditando en que este cabrón de Justino a lo mejor la iba a cagar.

Pero diay, ya estaban montados en la burra y lo mejor era amansarla. Al llegar a San Fermín , pensaron que iban a encontrar un gran alboroto, pero pronto se desengañaron. En el salón de la escuela y sus alrededores, si acaso habían unas cien personas y eso que las habían ido a sacar a sus casas, a la plaza de fútbol y a las pulperías y cantinas, que era lo que más había en ese pueblo. Amarraron las bestias cerca de un pastizal, se sacudieron el polvo, otra enjuagada de garganta y se dispusieron a entrar. En la puerta del recinto unas señoritas del pueblo les recibían, les colocaban un gafete de asambleísta y les tomaban los datos personales. - Justino Rafael - dijo aquel - Justino Rafael qué - le preguntó la joven. - Justino Rafael Mora Porras, de los Mora del Bajo del Alumbre - contestó. Justino Rafael Mora Porras, vecino del Bajo del Alumbre, distrito San Fermín, Cantón San Miguel, Provincia de San José; ocupación : Peón agrícola, estado civil, unión libre. Eso era él, para bien o para mal. Su padre se llamó igual y su madre, María, de los Porras de San Fermín. Algo inseguros ingresaron al recinto donde se llevaría a cabo la Asamblea y entre todo el barullo, podían escuchar que la elección de la Junta directiva de la Organización ya estaba " montada " , es decir que de antemano se sabía quienes iban a ser los directores. - Mirá Justino, ahí está don Félix - Díjole Sapa. - Que viejo más cabrón, dijo que no iba a venir, porque a según él no tenía, tiempo pa' estas vagabunderías, seguro que fue pa' agüevanos y que no viniéramos - contestó Justino. Pero que importa que ahí esté, nosotros tenemos el mismo derecho que él pa’ estar aquí y vamos a ver de qué color es el camaleón, de una vez por todas-¡ Hola don Félix ! ¿ Cómo le va ? Y ese milagro usté por aquí. ¿ Sacó el chancecito? preguntole Angel, otro de los acompañantes. -Pos sí, yo creo que era bueno que viniera, me decidí a última hora, pero que dicha que ustedes pudieron venir también. Bueno, pero Justino, ¿Qué me le pasa que no habla, es que acaso me le comieron la lengua los ratones o es que a como ladra allá en El Bajo, aquí en el Alto no se escucha ? Dijo a manera de sorna el patrón. - Mire don Félix, con todo el respeto que usté se merece, la pura y santa verdá es que yo le había dicho a usté que viniéramos a esta vaina, pero usté me dijo que no tenía tiempo, ahora veo con admiración que sí sacó el rato pa' venir a vagabundear o ¿es que anda de vina pa' oir que se dice y endespués ir a contáselo a su hijo, el diputado de los ricos y a quien por cierto, no veo. ¿ 0 es que acaso esta reunión de vecinos es muy poca cosa pa' él, siendo este el pueblo de donde salió y gracias a la trabajada que se dió usté y todos nosotros ? - Puta Justino calmate, si somos de los mismos ¿ porqué tenés que enojate? Si lo que te dije fue una broma de vecinos. ¿Yo no sé qué te pasa? Pero últimamente te veo muy agitao, a mí me late que le estás buscando tres patas al gato y cuidadito, porque le podés encontrar las cuatro. No jodás hombre, participemos en esta carajada y dejémonos de vainas, si yo a vos te veo como a un hijo - contestó muy airado don Félix.

- Está bien don Félix, tiene usté mucha razón, la verdá es que venimos aquí a otra cosa y no a sacanos los chuicas sucios. Perdóneme usté y con permiso, voy a ime a sentar allá delante Cada vez más convencido de que en su persona algo estaba cambiando, sentose en las primeras bancas y sumido en sus pensamientos no notó que junto a sí se sentó el encargado del gobierno, para vigilar que la reunión se llevara a cabo dentro de los cánones de la Ley sobre el Desarrollo Comunal. De un momento a otro y cuando la Asamblea ya estaba muy avanzada y se disponían a elegir a los directores, de previo autonombrados y al solicitar su vecino de banca que "si alguien más tenía que decir algo", Justino con todo respeto levantó su mano izquierda y cerrando los dedos en un acto instintivo, dijo: - ¿ Puedo hablar? - Claro que sí, para eso estamos aquí, ustedes son los que mandan y hoy se han reunido para nombrar su gobierno comunal, si es que cabe el término. Todos tienen derecho de expresar sus opiniones. Adelante amigo - Dijo el empleado de gobierno. - Mi nombre es Justino Rafael Mora Porras, como algunos ya saben y he venido junto con otros vecinos, desde el Bajo del Alumbre, pa' traer nuestras inquietudes y pa' que sean tomadas en cuenta por los directivos de la organización que hoy está naciendoInició aquel polvoriento campesino, cuando fue interrumpido por algún participante pasado de tragos y quien a grandes e ininteligibles voces le trató de callar, dado el interés que tenía de que continuara la elección, que era lo que todos querían, para así seguir en lo que cada quien había suspendido para venir a la asamblea. - Sí señor, voy a ser muy breve, pero repito, que la voz de los del Bajo del Alumbre quede presente en esta reunión porque, ¿ cuándo se nos presentará otra oportunidad ? - Tiene razón don Justino - dijo el empleado de DINADECO y agregó : - Le voy a pedir a las personas que tienen prisa, que por favor dejemos hablar a este señor, porque está en todo su derecho, caso contrario la Asamblea podría verse afectada de nulidad y todos perderíamos nuestro tiempo - Siga don Justino - le alentó - Muchas gracias señor - Les decía que una oportunidá como esta, es la primera vez que se nos presenta y que es importante que los señores que hoy resulten electos, no se olviden de que los vecinos del Bajo del Alumbre somos parte de esta comunidá y que como tales, tenemos derecho a que se nos tome en cuenta en las obras y servicios que tienen planeado hacer y prestar Se aclaró la garganta y siguió, a pesar de que un sudor frío recorría todo su cuerpo y la verdad es que tenía razón de ser así, nunca había hablado ante gente reunida. Era su estreno como ciudadano en el pleno ejercicio de sus derechos. - Todos los que estamos aquí reunidos, siempre hemos escuchao con la jeta abierta las promesas de los políticos, agitamos banderas y gritamos como tontos, pero cuando no cumplen lo que ofrecen, mascullamos en silencio los engaños a que cada cuatro años nos someten, cuando también deberíamos

gritales en la cara y donde juera, su irresponsable actitud pa' con el pueblo que los elige Un aplauso casi imperceptible se escuchó en el salón y ello dio más ánimo a Justino para continuar. - Hoy se está constituyendo, como dice el señor que está a la par mía, una organización de base. Me pregunto yo, ¿ de base pa' qué ? ¿ Si es pa' hacer las cosas que por obligación el gobierno debe hacer o si es pa' ayudar al gobierno en las tareas por ley encomendadas ? Si es pa' lo segundo, que cuenten con este pueblo, pero si es pa' politiquiar ya va siendo hora de que se desengañen los señores del gobierno, cualquiera que sea el partido político en el poder, porque debo decíles y de una manera muy personal, que este pueblo ya no come cuento y que aunque se ofenda don Félix, mi patrón, aquí presente, tenemos en la Asamblea Legislativa a un diputado que salió de aquí y que al igual que todos, una vez que alcanzó el poder, se olvidó de nuestras necesidades y congojas y va a venir cada cuatro años con nuevos y variados engaños Esta vez el aplauso fue más evidente y más de un " Viva Justino" salió de aquellas incrédulas gargantas, que no podían dar crédito a lo que estaban oyendo. Que un campesino de aquellos arrabales estuviera expresándose así. Don Félix por su parte, se sostenía la quijada y pensaba : - ¿ En verdad éste es Justino, el que conocí cagao y que ahora me maneja el trapiche ? ¿ De onde saca tanta cosa este muchacho que si acaso sabe leer y escribir ? Ese es vecino mío y yo vine con él - le decía Mamulón a los asambleístas que estaban al lado, visiblemente emocionado y felicitándose por haber venido a presenciar aquello. Pensaba, que cuando fueran de vuelta al Bajo nadie les creería el escándalo que se armó Justino, pero que a lo mejor había sido una buena elección la que habían hecho al nombrarlo como su representante. -Pa' concluir - dijo Justino - Tengo que deciles a los señores que hoy van a salir electos, que la misión que tienen es muy importante, porque van a servir de estandartes de éstas comunidades ante las autoridades del gobierno y está en ustedes el que nos tomen en serio o no, en que se nos escuche o nos sigan dando atolillo con el dedo. Que si bien es cierto no podemos seguir esperando todo del gobierno y que nosotros debemos ayudar con nuestro granito de arena, lo menos que podemos exigiles es que descuenten sus salarios, que todos ayudamos a pagar. Es todo y muchas gracias por escuchameUn aplauso estridente se escuchó y el grito de ¡ Justino, Justino ! , sonó con más insistencia. Había logrado despertar del letargo a aquella cantidad de gente y les había concientizado de sus derechos. La fe hacía milagros. Hasta el borrachito que intentó callarle al principio, estaba boquiabierto y levantaba su mano. El también quería expresar su opinión. ************* - No habiendo más intervenciones, procederemos a nombrar la Junta Directiva y Fiscal, quienes quieran proponer candidatos que lo hagan en éste momento. - ¡ Justino Mora, Justino Mora ! - gritaban algunos que quedaron visiblemente impresionados por las palabras de aquel. - Don Justino, ¿ acepta usted la nominación para integrar la Junta Directiva ?

De haber aceptado, hubiera podido quebrar la línea de previo trazada, pero , muy consciente de la responsabilidad que aquello le acarrearía y por la lejanía de su pueblo con la cabecera del distrito, Justino declinó amablemente tal honor, no sin antes expresar : - Miren señores, lo que hoy he dicho acá, es lo que cualquiera de ustedes dice frecuentemente, pero que no se atreven a decir en público. Yo ya me atreví, los señores que desde antes habían dispuesto lo de la elección, seguramente tienen más capacidá, que yo y ellos transmitirán al gobierno lo que ustedes y yo pensamos. Yo desgraciadamente vivo muy largo de San Fermín, pero sí, desde ya, me comprometo a trabajar en mi pueblo en todo lo que disponga la Junta Directiva y a apoyales en todos sus planes, siempre y cuando sean honestos y sin engaños. En todo caso, muchas gracias Realizaron a elección de Junta Directiva y al final hubo una fiesta con comidas tradicionales, para agasajar al funcionario del Gobierno, que había supervisado la Asamblea. Entre gallos de picadillo y pedazos de pollo, Justino terminó de pasar el día con sus amigos y vecinos y otros más que se acercaron a palmotearle la espalda, en señal de aprobación por la valentía demostrada y por lo claro que había sido al manifestar lo que pensaba, que al fin y al cabo, era cierto, era lo que pensaba la mayoría. - Mirá Justino - le dijo Sapa - Cuando vos ibas a hablar, yo ya me estaba imaginando que ibas a meter las patas, pero cuando oí como te aplaudían, me sentí tan orgulloso de ser tu amigo y de que juéramos venido, la verdá es que eso que dijistes es cierto, siempre lo he pensao, pero diay, como es uno, nunca dice lo que siente, por miedo a que se burlen. Como uno es un polo, naide le presta atención y mirá, vos sos muy joven, antes era pior. Los patrones le decían a uno, casi a punta de pistola , por quien tenía que votar y si uno no hacía caso o bien se daban cuenta que había votao por el contrario, lo echaban con todo y carajillos de la finca y tenía que ise a vivir a una ronda de calle con los pocos chunches que tuviera. No te digo que muchas veces engañábamos a los patrones, pero que era así, era - Así es Sapa - Le dijo sonriendo Justino. - Es que no podemos seguir callados ante tanta injusticia, vos has visto como viven nuestros hijos y las penurias que pasan, no tienen derecho a la seguridad social y si uno se enferma, no comen, porque no hay incapacidades de la Caja, ya que no estamos aseguraos. Los pocos que aprenden en el Bajo, a leer y escribir, lo hacen gracias a la buena voluntá de Marta, la hija de Angel y eso porque fue portera en la escuela del centro y algo aprendió de ver a las maestras dando clases. Tal vez si el director no le hubiera echao el caballo, aprende más. Pero diay, ¿ qué le vamos hacer ? Por lo menos los chiquillos aprenden algo de ella -Así es Dijo Angel, que había escuchado el diálogo de los dos sin intervenir -Pero una cosa si es cierta en todo lo que dijo Justino y yo lo acuerpo, nosotros siempre hemos apechugado nuestras tristezas y penurias y ni siquiera a nuestros vecinos se las contamos, como que nos da vergüenza compartirlas. Tontos que somos, si comprendiéramos que en la unión está la fuerza y que si todos juntos buscamos la solución a nuestros problemas, saldremos adelante. La verdá es que a los patrones les interesa que estemos desunidos, porque así les es más fácil manejanos, pero yo creo y como dijo Justino, que de ora en adelante nos convertiremos en auxiliares de la organización esa y les apoyaremos para solucionar las cosas que anden mal. Lo juro por Dios -

- ¡ Qué bien, qué bien, Angel ! Algo les ha pasao hoy a ustedes - dijo a manera de mofa Justino y prosiguió : - La pura y santa verdá es que se siente uno tan bien y como renovao, de poder participar en una cosa de éstas y como si fuera poco, por lo menos en ustedes ha entrado la luz del entendimiento. Yo sé que de ahora en adelante ya no nos joderán más y que abiertamente podremos, por lo menos, reclamar nuestros derechos y que si en la finca de don Félix , habemos como cien juemialmas peones, lo menos que él puede hacer es aseguranos y paganos el salario mínimo -¿Estás borracho Justino ? - le interpeló Mamulón - Si le llegamos a don Félix con esas ideas, es capaz de que nos echa con todo y güilas y ora si ¿ onde vamos a ir a metenos ? - ¿ Ves lo que te digo Angel ? Si es que éste cabrón de Mamulón es bien cerrao y no rueda porque las orejas no lo dejan. A según él vamos a ir a hacele una revoluta al patrón. No hombre, entendeme, hay medios pa' que la justicia social se cumpla, al menos en nuestros casos y uno de ellos es mediante la organización que acabamos de constituir. Les expondremos en una reunión de Junta Directiva nuestras inquietudes y de como no tenemos seguro social y ellos como responsables, les dirán de nuestras necesidades a los de la Caja y así, no seremos unos cuantos los que iremos al seguro, pa' reclamar sino que será la voz de toda una comunidá - Suave, suave, pos la verdá Justino, es que yo tampoco había entendido - terció Sapa , pero así como vos lo hablás me suena bien. Pos diay, claro, ¿ Cómo no se me había ocurrido ? La verdá es que éste güevoncito de Justino es bien despabilao- ¿ Cómo si no ? Si toda la vida me he criado pasando necesidades y de ellas es que se alimenta uno y diay; pa' eso es el radio también, pa' poner atención a lo que ahí se habla o ¿ es qué ustedes sólo rancheras oyen ? Aparte de eso, bastante atención le puse a, ¿ se acuerdan de Camilo, el hijo de don Rafel ?, que se fue a trabajar a San José de obrero que llaman y nos contaba en el trapiche, horas enteras, de como era la cosa en las fábricas y de como se la jugaban para luchar por los derechos. Veánlo, ha ido varias veces a Rusia, a Cuba y hasta a un lugar que se llama Libia, que queda donde el diablo dejó la chaqueta. A propósito ¿ qué se haría ? Hace tiempasalales que no viene al Bajo. - Yo le pregunté a don Rafa el otro día y me dijo que estaba con los sandinistas en Nicaragua, que se había vuelto muy raro y que solo hablaba. de pan, justicia y libertad pa' nuestros hijos y que la verdá es que él no lo entendía. Que no ha vuelto a saber nada de él. Dijo Mamulón - Pues bueno, si está en esa guerra, es porque es muy güevón, ninguno de nosotros se atrevería a hacelo ¿saben porqué ?, porque somos un montón de mamitas que nos conformamos con poco y porque nunca hemos padecido las desgracias que padecen los nicas - Concluyó Justino. - Hombre tiene razón Justino - dijo Angel y continuó - Ora que Marta está en la casa, yo converso mucho con ella y como que algo se le pegó, de veras de las maestras, pos la verdá es que tiene más palabrería pa' enredalo a uno y ella me dice que salvo que aquí tenemos un gobierno que dizque nosotros elegimos, la situación del pueblo aquí es igualitica a la de los nicas , pero que con el cuento de que esta es "La Suiza Centroamericana ", siempre nos enverduran y nosotros nos quedamos callaos, porque diay, así siempre ha sido. Dice también, que nos han vendido la historia de que lo que pasa en febrero cada cuatro años, es el mejor ejemplo de democracia pa'l mundo y que no debemos perder eso, ni reclamar, porque va y se dan cuenta en los otros países de que esto es una mampara. Que ya nadie engaña a nadie, porque el pueblo como nosotros, ya se está dando cuenta de que eso siempre ha sido de esa manera y que además, dice ella, a los gringos de Estados Unidos, les interesa que eso sea así, porque como dijo Pepe, este es un pueblo domesticao. Volvió a ver a los otros para controlar si le estaban poniendo atención y continuó:

- Dice m'hija también , que los ricos de éste país no tienen la plata trabajando aquí y la tienen guardada en bancos de otros países y que aquí se mantienen y sostienen sus empresas a puro préstamo con los bancos y que cuando un pobrete como nosotros va a pedir plata prestada se la niegan, porque... espérense a ver como dijo... , ah si, que es que no somos sujetos de crédito. Yo la verdá no le entendí esa vaina, pero me da la espinita de que seguro tiene razón. ¿ Con qué va a responder un pelao como uno en un banco ? En cambio un rico, sólo con el nombre y los amigos que siempre tienen en la Juntas de los bancos, se lleva la plata que quiera - No seas bárbaro Angel, ahora sí que sacaste la bola del estadio - le dijo Mamulón golpeándole la espalda con sus "manazas", lo que casi le desmonta de la yegua. - Yo voy a tener que ir a conversar con Marta a ver si se me pega algo, por que la verdá es que yo sí soy ignorante y, no creas, eso que vos hablas a veces lo medio piensa uno, pero la verdá es que me dá miedo decilo. Hombre, pos si es que está a la vista, es más, vean lo que pasa con Justino, que porque dice las cosas como son, ya le encaramaron el apodo de "Camarada", ora uno, que no tiene con qué defendese, es capaz de que sale con una vaina de esas y lo mandan a encerrar al asilo de locos. Los otros acompañantes rieron de la salida de " Mamulón" y uno de ellos, Miguelillo, que se había mantenido al margen de la conversación, murmuró algo que los otros no oyeron . ¿ Qué dijiste Miguelillo ? le interrogó Sapa- No nada, es que oyéndolos hablar a ustedes, uno como que va entrando en razón, yo la verdá es que soy muy joven y decidí acompañalos a esa reunión pa' ver chiquillas en el pueblo, pero de todo lo que ustedes han dicho y de lo que dijo Justino en el salón de la escuela, saco en claro una cosa y es lo que me da miedo Hizo un silencio de segundos, como tratando de atar los cabos de lo que iba a decir, cuando fue interrumpido. - ¿ Pero, qué es lo que te da miedo Miguelillo ? - le dijeron todos al unísono. - Bueno diay del futuro de uno, del futuro de la familia. Yo con lo que gano, apenas vivo en la casa de mis tatas, pero el día que a don Félix se le ocurra echamos, ¿ onde nos vamos a ir a meter ? Pónganse el caso de que él se muera, el que hereda todo es el hijueputa de Felicillo y a ese no le va a interesar venir a metese a la finca pa' jodese con el trabajo que hace su papá. A lo mejor termina vendiéndola y bueno... ¿Qué haríamos nosotros ? Diay y ¿ si la abandona ? No volvemos a recibir la plata de los jornales, aún cuando nos deje viviendo en ella. Porque trabajala, ¿ de onde vamos a agarrar ?. Es que ustedes saben como es ese carajo de sangrón, nunca le ha importado nada de aquí y no es amigo de nadie, por lo menos de la gente del Bajo. Le hace la masa aguada a uno cuando lo ve, pero a mi parecer le hace más gracia ver a un perro que a uno, que lo ha conocido de toda la vida. ¿ Ah, qué me dicen de eso ? Eso es lo que me da a mí miedo ¿ A ustedes no ? - Hombre pos sí y lo pior es que don Félix ya está roco y con la operación que le hicieron el año pasao se las vio feas. ¿ Ustedes saben que yo no había pensao en eso ? ¿Cómo cuántos años tiene don Félix ? - Se cuestionó preocupado Sapa. - Se acuerdan que hace como tres años, hizo una fiesta pa' celebrar los setenta años, que vinieron un montón de juemiputicas de San José acompañando a Felicillo, entre ellos unas chiquillas, que lo volvían a ver a uno como si tuviera garrapatas. Eso quiere decir que ya anda por los setenta y tres - dijo Justino.

- Puta ¿ setenta y tres ? Si ya está viejo y la verdá, es que yo le he visto desmejoradillo y ya no tan valiente pa'l trabajo, sobre todo después de la operación esa. Es más cada mes va a San José pa' que lo vean los médicos, seguro es que siguió padeciendo. ¿ Qué era lo que tenía ? - Mamulón, vos no te acordás que habían dicho que era un cáncer y que con la operación se lo hablan parao ? - Respondiole Angel - Hombre, pos si - Bueno, bueno, dejémonos de vainas, de ora en adelante deberíamos pensar en nuestro futuro, independientemente de que don Félix siga o no a cargo de la finca. No puede ser que nos coja por sorpresa alguna desgracia y tengamos que irnos a vivir a una orilla de calle, porque no fuimos capaces de planear las cosas bien. Pongámonos vivos nada más y aguárdense un momento que voy a echame una miada, hace rato vengo aguantando - Concluyó Justino. El resto del viaje fue en silencio, cada quien acordándose de lo que habían hablado y ¿ por qué no ? ideando la mejor manera de hacer más promisorias sus vidas. Se despidieron en la pulpería y cada quien y ya casi a las diez de la noche, se dirigió a su casa, donde sus familiares esperaban ansiosos las galletas, los confites y melcochas y alguna que otra cosa que se podía conseguir en San Fermín, aparte del sinnúmero de preguntas que les harían sobre la actividad a la que habían ido .

COMANDANTE CAMILO... - ¿ Diay cómo te fue, mi amor ? - dijo Flor acomodándose el vestido viejo que le servía de bata de levantarse. - ¿ Traes hambre ? ¿ Te alisto algo ? Estaba pensando en vos, como era tan tarde... - Bien vieras que bien, ahí estaba don Félix. ¿ Te acordás que nos dijo que no iba a ir , porque él no tenía tiempo pa' esas vagabunderías ? Bueno pos fijate que ahí estaba. ¡Viejo güevón...! No mamita, no traigo hambre, nos atendieron muy bien, había de todo y nos pegamos una almorzada, que ni te cuento. Regalame un jarro de aguadulce nada más, pa' matar la sé. - ¿ Y Flor del Carmen ? ¿ Dormidita ? - Sí, hace horas que se durmió , preguntando que ¿ dónde está papá ? ¿ Qué porqué no viene ? Yo le dije que cuando usté viniera le iba a dar un besote y que mañana, comería de las melcochas que le traería de San Fermín. Estuvo muy inquietilla. Es que le haces falta, bueno... a mí también me hizo mucha falta. Es que como nunca nos separamos, sólo cuando usté se va a trabajar... - Ya, ya, aquí estoy, tranquila mamita. Ahí en la alforja traje un pedazo de carne y unas cosillas pa' mañana. Sacalas y adobás la carne, pa' que no se ponga mala. Yo creo que lo mejor es cocinala. Bueno no

sé, ve a ver que haces con eso - ¡ Justino ! ¿ Pero, qué es este vestido ? Ay pa' que se jue a molestar ¡ Qué lindura! Con la falta que me hacía un vestido de salir. Que Dios me le depare mucho más, mañana me lo pongo pa' ir onde mamá - Ahí le traje unas cosillas a Florcita también, yo creo que le quedan, sino, me dijeron que las cambian, siempre y cuando no vayan sucias o arrugadas nada ?

- Uh , claro que sí le quedan, si ella está muy grande, ¡ Ay pero qué gasto ! ¿ Pa' usté no se compró

-¡ Qué va mamita ! ya pa' tanto no daba la platilla que tenía ahorrada. Ahí en otra, de por sí yo no necesito - No necesito, no necesito. Si hasta parece retrato, sólo ese pantalón tiene de salir. - Ay ya Flor, en otra me toca a mí ¿ está bien ? - Así dice siempre, pero bueno, no le insisto más Ya acostados y cuando casi eran las doce de la noche, Flor le comunicó a Justino, el secreto que hacía varios días tenía guardado. No había encontrado el mejor momento para decírselo y con la algarabía de la reunión a la que iría su marido, mejor había optado por mantenerlo unos días más entre pecho y espalda. Ahora todo había pasado y Justino se encontraba como reconfortado consigo mismo. Era el momento de decírselo. - Justinooo - Mm, ¿ Qué fue Flor ? -¿ Le digo o no le digo ? - ¿ Decime qué ? - Es que yo no sé ¿ cómo lo va a tomar usté ? Yo sé que apenas la pasamos y lo que usté se gana y lo que le deja el pedacillo que le alquila a don Félix, si acaso dá pa' mantenenos y al paso que van las cosas, cada día se pone pior la situación. ¡ Pero... es que no sé cómo decíselo ...! - ¿ Pero decime qué ? ¡ Ay Flor, son más de las doce ! ¿ Qué diablos es ? - Es que... Es que... estoy embarazada - expulsó Flor, con más miedo que ilusión y temiendo quién sabe qué de Félix, porque la verdad es que apenas sí la pasaban con Florcita y ya una criatura más, pues a lo mejor ya no iban a poder. - ¿ Qué, qué Flor ? ¡ Dios mío, pero qué mujer la mía ! ¿ Por qué no me lo dijo antes ? Y yo que estaba pensando que usté no me iba a trer más crías. Que's que a lo mejor se le había secao la mata. Muchacha por Dios, no sabes lo feliz que me haces. No ves que onde comen tres, comen cuatro y si la criatura nace avenía, pos diay aunque sea a pura tortilla la mantenemos. No ve usté a Florcita, cada día está más linda. Oritica sí que mi felicidad es total. Yo sé que algo va a cambiar en nuestras vidas y ahora sí sé que va a ser algo bueno. Gracias Dios mío por tanta bondá y gracias mi amor por tan buena noticia. La cogió a besos y enjuagó las lágrimas de Flor, con sus callosas manos, al tiempo que le decía:

- Ya, ya mamita, si esa es una buena noticia, no hay por qué llorar. ¿ Pa' cuándo nacerá ? Hay que ir alistándole algo. No nos vaya a agarrar como con Florcita, sin nada. Bueno, bueno, ahora mejor nos dormimos, mañana hay que contarle a todo el mundo. Ya ves, a Florcita le hacía falta compañía, pa' que juegue. Ya es una mamulona . ¡ Ay Señor, qué mujer la mía !. Dicho esto se volvió para el rincón y abrazado a su mujer, cayó rendido. Jornada agotadora, pero con grandes frutos. La verdad es que enero traía cosas buenas. Después del incidente en la asamblea, la relación con don Félix no sufrió alteraciones, el trabajo en el trapiche y el propio en el terreno arrendado, consumía el tiempo y las ilusiones de Justino. Ya el patrón lo conocía muy bien y no iba a ser que por su manera de ser y pensar, cambiara su trato. Al fin y al cabo, peones como él y los otros que mantenía ocupados en las tareas de la finca, no se conseguían "a la vuelta de la esquina" . Honrados y trabajadores a carta cabal. Un veintinueve de junio nació el segundo de "la camada ", un varón, y de acuerdo a la usanza y por nacer en una fecha tan especial, fue llamado Pedro Justino, su bautizo, al igual que el de Flor del Carmen, se llevaría a cabo más adelante. Era de verse el orgullo de aquel padre al mostrar a sus amigos y vecinos a su nuevo "cachorro" y desde ya se hacía ilusiones con lo que le iba a ayudar cuando fuera más hombrecito. Así era la cosa en su pueblo y la verdad es que en todos, porque si bien es cierto una mujer hacia felices a los padres, más feliz hacía al hombre, el nacimiento de un varón , porque conforme iba creciendo, se iba incorporando a las tareas de la tierra. Sin embargo, con un miembro más en la familia, una preocupación mayor desvelaba a Justino, era natural. Como lo habían comentado anteriormente Flor y él, apenas tenían para medio pasarla y si bien es cierto, pues por lo menos la comida y la leche tenían asegurada, el motivo mayor de su desvelo, eran las pocas posibilidades de educación que tenían aquellos hijos de pueblo. Como bien sabía, la única escuela estaba a diez kilómetros de distancia y el Ministerio de Educación no había querido abrir una escuela en El Bajo, por cuanto y según ellos, para una población de unos cuarenta niños, no valía la pena destacar un maestro y más aún construir un aula en una finca privada, aparte de que acababan de remodelar la Escuela de San Fermín a un gran costo y le habían asignado dos maestros más. 0 sea que para El Bajo era un sueño, que algún día se construyera una escuela que era lo que Justino consideraba correcto. - Bueno - pensaba - Florcita tiene ahora cuatro años y cuando le toque ir a la escuela, pos a lo mejor ya se han decidido y en cuanto a Pedro, quizás ya no estarían ahí -Mientras tanto, ahí que vayan creciendo, con la ayuda de Dios y con lo poquito que nosotros podamos dales. Pero definitivamente, yo creo que nosotros no vamos a hacer huesos viejos aquí. Tal vez si me fuera pa' la ciudá y consiguiera un trabajo de peón en alguna construcción o en alguna fábrica... Pero, ¿ onde viviríamos ? Ahí si está fregada la cosa, si dicen que las casas en San José valen un cachimbal de plata y que a los dueños no les gusta alquilar a los que tenemos chiquitos. Desgraciaos, como si ellos jueran nacio grandes En esas estaba y mientras sudaba "la gota gorda" entre el frijolar, cuando por la cerca que divide el potrero le silbó Sapa, para llamar su atención. -¡ Justino, Justino ! ¿ Ya te diste cuenta de lo que pasó?- No ¿ qué fue ? - Que ora en la mañana vinieron unos señores de la Cruz Roja a avisale a don Rafel. que a Camilo se lo habían matao allá por el Río San Juan y que el cuerpo estaba en la morgue, en San José y salió como alma que lleva el diablo pa' allá -

- N'hombre no jodás.¡ Qué desgracia pa' ese pobre hombre ! Si es que esos nicas no se contentan como están, cuando no es dinga es mandinga. Primero botaron a Somoza y ora otros quieren botar a los que están y vea, pagan justos por pecadores. Ahora le tocó a Camilo - Comandante Camilo - corrigió Sapa ¿ Cómo es eso ?, barajámelo más despacio - Pos diay, que como él tenía varios años de peliar allá y como fue de los que entró a Managua con los sandinistas, parece que tenía un alto puesto en el Ministerio de Defensa, como que era muy amigo de los Ortega, los jefes de esa vaina - Ya ves y eso que salió de este Bajo. No te digo Sapa, si es que uno es un tonto por remontase aquí. La verdá es que esta perdiendo el tiempo, cuando podría hacer algo de provecho por la gente de uno. Bueno, ¿ Qué le vamos a hacer ? Que Dios lo tenga en su santo seno. ¿ Cuándo lo traen ? - Pos a lo mejor hoy mismo, si parece que hace días estaba en la morgue y hasta hoy lograron localizar a don Rafa - Pucha, bueno. Voy a tratar de desyerbar este pedacillo y me voy pa' la casa, cualquier cosa me avisas. ¿ Flor no sabe, verdá ? - Que yo sepa , no. Si es que me enteré ahoritica que pasé por la pulpería y Toño me contó lo de los señores de la Cruz Roja y de como andaban preguntando por don Rafel - Está bien. Seguro que lo van a velar y a enterrar aquí, así que ahí nos vemos más tarde Concluidas sus funciones periodísticas, Sapa se dirigió hacia su casa y Justino continuó en las labores que lo habían mantenido ocupado toda la tarde. Había amanecido en la molienda y si acaso había dormido tres horas, pero si no le ponía atención y cariño al frijolar ahora, se le pasaría el tiempo. Un hormigueo extraño le carcomía las entrañas, el saber que él había conocido y se había criado con Camilo y de como aquel se había preparado tanto en las artes de la guerra, hasta alcanzar el grado de comandante, la verdad es que lo ponía a pensar. - Yo sabía que él era un obrero en una de las fábricas de San José, también me acuerdo que don Rafa y él mismo, me contaron que se había ido a preparar en cuestiones de sindicatos a un montón de países y eso que como yo, ni el sexto había sacao. Pero que fuera comandante, comandante, no lo sabía. Aunque haya muerto, ya no era uno del montón, logró surgir. Eso me enseña que cuando uno quiere, puede y que está en uno coger las oportunidades que se le presenten, con la ayuda de Dios, claro. Lo que es la vida y yo jodiéndome aquí con éstos calorones, pa' sacar un poquillo de frijoles, si es que tengo suerte, pa' tener la comida asegurada y vender algo pa' las otras cosas. No le digo En esas estaba, cuando entre las ramas secas de lo que fue la milpa, vió venir a Flor, con Florcita de la mano y Pedro en cargado en un brazo. Colgando del otro, una “alforjita" de mecate, con una botella de aguadulce y algo más para acompañar la bebida. Era la costumbre, cuando Justino estaba en " el pedacillo " que le alquilaba a don Félix. A eso de las dos de la tarde, Flor le llevaba café o aguadulce y uno o dos gallos de frijoles con torta de huevo. A veces un pedazo de biscocho o tamal de elote, cuando era cosecha. Ahí mismo y con las manos "curtidas" por la tierra, Justino se tomaba aquello y conversaban sobre los adelantos del trabajo. - Diay mujer, me le cogió tarde hoy - dijo Justino mirando al sol.

- Ya son casi las tres - Ay muchacho, cuidao se muere si no se toma la bebida a las dos en punto - ¿ Cómo están mis chiquitos, que hace rato no los veo ? Flor, es que me parece, pero yo veo a Pedrito muy delgao - ¡ Oh Justino !, no ves que's que ya le está saliendo un diente y la diarrea y lo que les da siempre con la echada de dientes, los pone así. Ya vas a ver que cuando termine de echalos se compone y vuelve a coger juerza. Dejame eso a mí. ¿ No te acordás que así se puso Florcita ? - Bueno, bueno, no me regañés. ¿ Supiste la noticia ? - Sí, de camino me encontré a Juan Sapa y me contó y me dijo que vos me contarías todo lo demás - Cabrón ese, no se puede guardar una. No, que bueno que, según él y lo que le contó Toño, a Camilo lo mataron allá en Nicaragua y que era todo un Comandante de los sandinistas, que había llegado muy alto y que trabajaba en el Ministerio de la Defensa. Ora más tarde, cuando lo velen averiguamos más. Yo casi me iba. No he dormido nada y ahora nos toca la trasnochada de la vela. Mejor me voy a echar un sueñito, pa' que la desvelada no me revuelque. Aguardate, que yo me llevo a Pedrito y a los chunches. Vamos pa'la casa, de por sí hay que asease Los dos kilómetros que los separaban del rancho, los caminaron en silencio, sólo interrumpido por los brincos de Florcita, que ya estaba hecha una "mamulona", según el decir de Justino. Eran una familia muy feliz, entre sus penurias y necesidades, por lo menos no les faltaba el alimento diario y el techo, el que a pesar de constituirse de sólo dos piezas, una cocina-comedor y un cuarto, por lo menos les guarecía de las inclemencias del tiempo. A los veinte metros y en el "puro bajo", a la orilla de la quebrada que nacía en el alto del cerro, Justino había acondicionado el lavadero y el baño y a un costado de la casa, estaba el "excusado de hueco". En un galerón vecino, se almacenaban los aperos de labranza y la cosecha de maíz y frijoles. Hasta una vaca " para el gasto " tenían. Sin embargo, el sueño de Justino era el de tener un terreno propio, donde si " me mato trabajando, sé que es en algo propio, pa' que le quede algún día a los chiquillos " El féretro que contenía los restos de Camilo, fue llegando casi a las nueve de la noche y ya cuando gran cantidad de vecinos se habían reunido en la casa de sus padres y en los alrededores de ésta. Se hacían los más variados comentarios y el tema daría para conversar toda la noche. En la cocina, varias mujeres, en cuenta las hermanas del fallecido, se encargaban de elaborar ollas y ollas de café y derretir dulce para espantar el sueño de los dolientes y de los vecinos. Cuando sonó una bocina allá en la curva de los Monge, una gente salió a la calle para ver la caravana que acompañaba al muerto y otros corrieron a colocar los bancos y las tablas que servirían de soporte al ataúd. En la pared norte de la sala comedor, lucía un altar primorosamente confeccionado por su madre y hermanas, el cual serviría de marco a la actividad que estaba por desarrollarse. En medio de la sábana blanca y las flores de todos los tipos y aromas, una imagen de la Virgen del Purgatorio, reinaba. Una vez llegado el cuerpo a la casa, de dos "jeeps" bajaron como diez hombres , todos con barba de varios días o meses quizás y vestidos con pantalón de mezclilla, zapatos de suela "tractor" tipo militar y cada quien con una boina negra y una pañoleta roja y negra al cuello. Eran excompañeros de Camilo. Eran sus hermanos de armas y de muchas cosas más. Eran quienes habían compartido con él, alegrías y tristezas y los recuerdos de su Bajo. Eran quienes le habían acompañado en sus últimos momentos de mortal. Por eso estaban ahí.

El ataúd venía cubierto con una bandera de los mismos colores que tenían las pañoletas que traían aquellos al cuello y una bandera más pequeña que traía impresas unas letras que decían " Brigada Simón Bolívar ", posiblemente el grupo al que pertenecía el Comandante. Los vecinos y familiares no salían de su asombro, era algo tan novedoso en un entierro, que por un momento se sintieron muy halagados de tener aquel muerto en el pueblo, nunca en sus vidas habían tenido una experiencia similar. La verdad es que, si bien era cierto que la muerte de algún vecino despertaba una euforia colectiva y era todo un acontecimiento, un muerto de tal envergadura, les ufanaba y se sentían muy dichosos de ser parte de aquello. Es que Camilo había nacido y se había criado en aquel Bajo y más de uno de los que estaban ahí había sido su compañero de juegos y travesuras y hasta sus "coscorrones" le habían dado, ¿ cómo no estar ahí ? Era el Comandante Camilo para sus compañeros, pero para el pueblo era Camilo el de don Rafael. Los diez muchachos, compañeros de armas de Camilo, se encargaron de descargar con todo respeto el ataúd y meterlo en la casa, bajo la guía de don Rafael. Los vecinos, sus amigos y los familiares, sólo se limitaron a ser espectadores de la maniobra, muy militar por cierto. Lo depositaron en el lugar convenido y con un grito al unísono de " ¡ Hasta la Victoria, Siempre ! ", lo descargaron . Después salieron y se ubicaron debajo de la enredadera que había a la entrada de la casa y unos se sentaron en la losa que había debajo de aquella. Otros se dedicaron a fumar o a conversar entre ellos. Solícitas, algunas de las muchachas del pueblo y las mismas hermanas de Camilo, salieron con sendos jarros de café y otras comidas que habían preparado para atender a la gente y los primeros que pasaron a la bebida fueron aquellos muchachos. Era la costumbre; las visitas se atendían primero. En ese momento se rompió el hielo. Otros vecinos más entradores, empezaron a meterles "conversona", sobre todo para averiguar sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Camilo. Entre ellos, Justino, quien inició el diálogo con ellos con un - Cómo ha llovido, ¿ verdá ? - Sí hombre - contestó uno de ellos y prosiguió, - Es que este invierno ha estado de madre y pareciera que nunca va a acabar - Vieran ustedes como es esto en la montaña - ¿ Tenían mucho tiempo de conocer a Camilo ustedes ? - Pues sí - contestó aquel, quien al parecer era el portavoz de los muchachos, aparte de que aparentaba tener mayor rango que los demás, porque sus compañeros le volvían a ver, antes de hacer o decir algo. - Sí, a Camilo yo lo conocía desde el setenta y siete. Era un elemento muy distinguido y muy, pero muy valiente, de esos que cuesta conseguir. Yo me precio de haber sido su compañero de armas y su amigo por siempre y ahora... - Hizo una pausa, como queriendo ordenar los pensamientos para dejarse decir : - Ahora nos lo han matado los hijueputas contras, perdonando la palabra, pero eso es lo que les cabe a esos desgraciados vendidos a los gringos - N'hombre, no se preocupe, si aquí hablamos así también, ni que juéramos señoritas de ciudá. Por lo que usté dice, nos damos cuenta que de verdá sí querían a Camilo y unos amigos de él, son amigos de nosotros, por siempre, de por vida, como dice usté. Pero cuéntenos si es que se puede saber ¿ cómo fue que murió ? -

- Yo venía con él - dijo uno de los más jóvenes del grupo. - Contales vos - le dijo el jefe. - Sí, yo andaba patrullando. Habíamos salido de San Juan y muy cerca de la frontera de ustedes un grupo de contras nos emboscó. Camilo andaba de jefe; aunque él no tenía que ir, siempre se ofrecía para misiones peligrosas de pronto un compañero que se llamaba Alcides, majó una mina y saltó por los aires hecho pedazos. Camilo dio la orden de retroceder y atrincherarnos detrás de unas "llamas del bosque " que habían, porque de seguro se vendría un ataque. En esas estábamos cuando una andanada de morterazos nos cayó justito donde estábamos. Supongo que apenas estaban en la siembra de las minas y los pescamos; de seguro nos vieron antes y nos estaban esperando. Caímos como conejos en la trampa. Camilo ordenó replegarnos más, para reagruparnos y él junto con Marcos, otro compañero, se quedaron a cubrir nuestra retirada. Cuando todo pasó, volvimos a donde los habíamos dejado y encontramos a Marcos muerto, y...- hizo una pausa, bebió un sorbo de café y continuó : - Camilo todavía se podía salvar, según nosotros. Pensamos que si nos devolvíamos con él por entre la montaña, se nos moriría, así que optamos por traerlo al lado de Costa Rica y se lo entregamos a la Guardia Civil de ustedes diciéndoles que era un costarricense, para que lo salvaran. Nos enteramos después que había muerto y bueno, por eso es que lo hemos venido a acompañar. El salvó nuestras vidas, al cubrir nuestra retirada, lo menos que podíamos hacer era entregárselo a su familia, ya que él entregó su vida por las nuestras Una lágrima se deslizó por su mejilla izquierda y quebrose su voz, para luego caer en un profundo silencio, silencio que fue respetado por los presentes. - Puta - dijo Justino profundamente emocionado. - Que carajo más valiente. No les digo, si es que uno encerrado en éstos arrabales no se da ni cuenta de como son las cosas y si no es por una desgracia de éstas, jamás llega a enterase de las penurias que éstos hombres pasan en la montaña. Tocale a Camilo ora, tan lejos de su pueblo... - Mire señor... ¿ Como se llama usted ? - Justino Rafael Mora Porras, pa' servile a usté -¡Puta , qué buen nombre ! Casi se llama como don Juanito. Bueno mire don Justino, para pelear por las reivindicaciones sociales, por mayor justicia y libertad, para ser personas dignas de soñar y hacer realidad esos sueños no hace falta que le vengan a jorobar la vida a uno a su casa, sino simplemente mentalizarse en el sentido de que el mal que aqueja a los hermanos nicaragüenses, es el mimo mal de ustedes . Para ponerle un ejemplo, seguro estoy de que ustedes no tienen tierras propias para trabajar y ganan jornales de hambre, apenas sí comen y eso que le roban al patrón guineos y yuca , para arrimarle a la comidilla, que de por sí es muy mala. Sus hijos jamás tendrán las mismas oportunidades que los hijos de su patrón y si se enferman, se mueren, porque la tal seguridad social, no es tan social ni mucho menos segura, para los pobres, por supuesto. Los ricos, si no pagan una clínica privada, le pagan a un médico amigo y rapidito le arman un "biombo" en cualquier hospital del Seguro Social y recibe mejor atención que cualquier otro ciudadano de pueblo. ¿ o no se han dado cuenta ustedes de que eso es así ? Camilo lo comprendió y por eso se unió a la Brigada Internacional Simón Bolívar, que fue la que él siempre defendió y con la cual defendió los intereses de los desposeídos de Nicaragua. Si Dios le hubiera dado vida, quizás su coraje y valentía, le hubieran llevado a defender los derechos de ustedes mismos, si fuera del caso. Así era él y así son muchos compañeros que se nos unen día a día - Hombre, pos así como usté habla, oritica sí que entiendo; yo pensaba y me preguntaba ¿ qué putas tiene que andar haciendo Camilo en la guerra de los nicas ? Pos la puritica verdá es que ahora si lo entiendo - dijo Justino avergonzado.

- Y eso no es nada. Lo que ustedes no se dan cuenta, porque la prensa no lo informa y han hecho de la desinformación el pan nuestro de cada día, es que los intereses gringos están puestos en que nuestros pueblos no se reconcilien, porque de nuestra propia desunión y desgracia ellos se nutren y así les resulta más fácil a las transnacionales, apropiarse de nuestras riquezas y lo que es peor aun, de nuestra soberanía Justino y los otros vecinos y amigos escuchaban perplejos lo que aquel amigo de Camilo les decía y no se percataban que detrás de ellos y bastante receloso, se encontraba don Félix, "rumiando" una rama de zacate y escuchando de larguito todo lo que en ese circulo se conversaba, claro está, sin intervenir. De por sí esas cantaletas las había escuchado muchas veces, cuando su hijo era universitario y venía de cuando en vez con ese montón de ideas raras de la universidad. El no le hacia caso a su discurso, sabía de antemano que apenas empezara a ganar en su profesión, el cuento de la tal justicia social se le pasaría. Así fue, pero lo que le preocupaba, quizás, es que este señor le estaba "lavando el coco" a ese montón de ignorantes y a lo mejor se lo creían y él, viejo y enfermo como estaba, no se los iba a soportar. - La verdá - pensaba , - la verdá es que una vez que este montón de comunistas se vayan, a lo mejor éstos tontos ni se vuelven a acordar de lo que les dijo, de por sí dudo que le estén entendiendo lo que habla . Justicia Social, reivindicaciones, compañeros, internacionalistas; como si eso se comiera. Vaya a que yo los eche de la finca, a ver donde se van a ir a meter con sus ideas. Montón de pailetas, que ni siquiera saben hablar. Bueno, hay uno que sí me preocupa, es este Justino, parece babiecas poniendo atención, de por sí poco le falta al condenado pa' parecese a uno de esos. Me preocupa, porque a como es y con esas habladas que le están metiendo, va y le da por jorobame con ese cuento. Tengo que ponerme muy vivo con este cabrón. En esas estaba cuando fue interrumpido por una hermana de Camilo y un jarro de café y un pedazo de tamal de elote, gesto que agradeció con un ademán, para no perderse nada de la conversación. - Bueno, pero señor, pero ¿ porqué dice que los gringos tienen interés en nosotros, si ellos son muy ricos ? , más bien nos vivimos pidiéndoles plata - le espetó Justino, ávido de conocer y aclarar muchas cosas que se le habían venido a la mente. Les voy a decir algo, si quieren me lo creen, sino no . Yo no sé de que color político son ustedes, pero si los ofendo ahí me perdonan. El gobierno de Costa Rica, que es mi país, porque yo también soy costarricense, por si no lo sabían, recibe actualmente casi un millón de dólares diarios, para que se hagan de la vista gorda y le permitan, a un gringo y a otros mercenarios más, que tienen fincas en la frontera norte, hacer aeropuertos clandestinos y se presten para que la contra meta armas al conflicto en Nicaragua. Además, para que se den cuenta de una vez por todas, de que clase de personas estamos hablando; a esos aeropuertos entran los aviones a dejar armas y ahí mismo levantan vuelo con drogas, para que otros hagan negocio en Estados Unidos, aparte del que de por sí hacen con los fondos que recogen, con el timo de que es para la contra nica. En ese mismo paquete le han entregado a Irán, gran cantidad de armas estratégicas y algún día, óiganlo ustedes, todo ese negocio se va a caer y los que han hecho negocio con las vidas de los nicas y otros, que defienden la soberanía de ese país, la van a pagar. Como ven, es un negocio redondo. Ellos ayudan a la contra, no porque deseen que en Nicaragua no haya un gobierno comunista, eso es lo que menos les importa, sino porque para algunos, de aquí y de allá, representa un gran negocio. Mientras tanto, hay alguien que pasa en una pura borrachera y de clínica en clínica de desintoxicación, porque no le interesa o no quiere interesarse por lo que aquí pasa. Sólo le interesa la fiesta que se arma con los dineros que día a día le hacen más rico. Los ojos de los que aquello escuchaban, se querían salir de sus órbitas. No podían creerlo. Ellos que siempre habían creído que los norteamericanos eran desprendidos con los países pobres y que incluso habían disfrutado en más de una oportunidad, de las bondades de la Alianza para el Progreso, ahora estaban escuchando aquello, una oscura historia en boca de un tico como ellos. Todo podía ser, que los "americanos" odiaran a los comunistas estaba bien, pero que se prestaran para

traficar drogas, era increíble, máxime si se contaba con el beneplácito de nuestras autoridades de gobierno. - Oiga señor, eso que usté está diciendo es muy espeso - Interrumpió don Félix, quien ya no pudo aguantar las ganas de "meter la cuchara". El es don Félix, nuestro patrón - se apresuró a decir Justino. -Mucho gusto señor, mi nombre es Tarcisio Ramírez y, si cree que lo que yo hablo es muy espeso, espere nomás a que pasen los años, porque para verdades el tiempo y la verdad siempre sale a relucir, más en este país tan pequeño. Lo que yo le estoy diciendo a sus peones, es muy cierto y no es para ganármelos, pero considero que la gente no debe estar tan desinformada, porque un pueblo desinformado, será víctima por siempre, del abuso, la corrupción y la impunidad y desgraciadamente la prensa siempre le ha hecho, con muy raras excepciones, el juego a ese país, para mantener a la población a oscuras, ayuna de la verdad. Aparte de eso, las agencias de prensa internacional, en su mayoría al servicio del gobierno norteamericano, son las que manipulan las noticias y, como ustedes comprenderán, no van a decir esto que les estoy contando. Por eso les digo, para verdades, el tiempo. Es más les voy a poner un ejemplo, dense cuenta del poder de la prensa norteamericana, que se encargó de botar un presidente en ese país. ¿ Se acuerdan ? Ahora aquí ¿ cuántas cosas no creen ustedes que pueden hacer ? - miró fijamente a don Félix, para ver si había captado su atención y prosiguió : - Aquí y en todos los países del tercer mundo, que llaman ellos, únicamente conocemos el lado de las cosas que ellos quieren que conozcamos y bueno; vean lo que le pasó a Carazo, que se puso a defender nuestra soberanía, mandó a la mierda a los señorones del Fondo Monetario Internacional y lo dejaron solo. Sus diputados y muchos traidores de su mismo partido le volvieron la espalda. Hasta ese carajillo, hijo del doctor, anduvo haciendo maniobras para volárselo del poder. Es más, casi se lo echan. No pudieron porque tenía dos o tres ministros bien güevones a su lado y un vicepresidente con una lealtad a toda prueba y muy identificados con su compañero y amigo. Díganme, a ver díganme ¿ quién se ha enterado de esas cosas ? La prensa sólo se limitó a publicar encuestas preelaboradas y la gente se las creyó. Ellos todo lo montan, más si están en contubernio con los gringos, los que al fin y al cabo son los que echan la plata, compran conciencias y países si es del caso Tantas cosas que desconocían y en una sola noche de vela, las estaban sabiendo. No tenían porque dudar de aquel hombre, si al fin y al cabo, ¿ qué interés podría tener en mentirles ? Lo que estaba diciendo, a pesar de que era increíble, tenía mucho de cierto y a pesar de que en más de una oportunidad se lo hubiesen cuestionado, de ahí no habían pasado . - Puede ser que mucho de lo que usté - está diciendo sea cierto, pero, ¿ usté cree que esta gente le está entendiendo, lo que está haciéndoles es embarrialándoles el cerebro, luego se va y a uno es al que le queda el problema. De por sí que poco les falta, ¿ verdá Justino ? - ¡ Ay don Félix !, usté sí que no entiende. Yo no me estoy metiendo con usté, ¿porqué me encarama ? - Diay, como vos siempre andás con esas cabronadas y te ha agarrao una reclamadera por todo, pos por eso me dirijo a vos- Suave, suave, recuerden que estamos en una vela y no nos vamos a poner a discutir aquí, dejen eso pa' otro día. ¡ Jesús, qué hombres ! - exclamó don Rafael. - Sí, la verdad es que no vale la pena hacer de esto una discusión, mantengámonos cuerdos y respetemos la memoria del compañero caido - dijo Tarcisio. Ahí acabó la escaramuza; cada quien se apartó. Unos fueron a la cocina a buscar un poco de café y

otros se quedaron comentando lo que acababan de oír, pero en voz baja. Camilo fue enterrado y al mediodía, todo había pasado. Cada quien se reincorporó a sus labores y sus compañeros de armas abandonaron el pueblo, como habían venido, sorpresivamente. Nadie volvería a saber de ellos. Si morían en el frente, nadie se enteraría, ni sus nombres recordarían. Quizás su mensaje en algo había calado en los corazones de aquellos hombres, la verdad es que habían despertado simpatía y admiración, porque casi todos eran costarricenses y el porqué estaban peleando una guerra que muchos creían hasta entonces muy lejana, había quedado claro. Eran "internacionalistas" Los problemas de aquellas gentes, ellos los habían "apechugado" también.

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TIEMPO DE COSECHA Con la llegada del invierno, un surco de esperanza se abría en aquellas tierras y en los corazones de aquellos campesinos. Los que cultivaban un pedazo alquilado a don Félix, hacían cábalas sobre lo buena que iba a estar este año la cosecha y de que quizás al final de año, podrían ahorrar unos cincos, máxime que el Consejo había prometido un buen precio por los frijoles y el maíz. Don Félix, había alquilado a Justino casi, una manzana de buena tierra y muy cerca de su rancho. Estaba decidido a toda costa, a evitar de que en la mente de aquel buen muchacho se le metieran ideas extrañas, que a según él, " no riman con el ser costarricense " y se decía que con más trabajo en lo propio y quizás ganando un poquito más, se aseguraría al mejor "trapichero" de la región. Es que Justino se encargaba desde encender la hornilla, moler y hasta chorrear el dulce y la "marqueta". Era muy aseado y muy cuidadoso de la calidad del producto que de ese trapiche salía. Es más, el dulce de Félix, tenía fama en los mercados nacionales y si era la "marqueta", la Fábrica de Licores se la recibía, casi que sin control de calidad. Ello, gracias a Justino. Pedro Justino, Florcita y su mamá, despedían a su padre y esposo todos los días entre cinco y seis de la mañana, cuando cogía sus aperos y se dirigía al "pedazo". Una jícara con agua "enfriada" en tinaja, un pedazo de dulce y una montaña de fe, le acompañaban. Previo a su salida, un desayuno generalmente compuesto por huevos picados, tortillas, agua dulce y un puño de frijoles, era devorado por aquel atleta de la tierra. Su competencia : Lograr en el menor tiempo posible, efectuar más tarea. -Es que en esto de trabajar la tierra y sacale el provecho, se corre contra el tiempo, contra las plagas y contra las inclemencias del tiempo, esfuerzo que no siempre es compensado por los que compran el fruto de nuestro trabajo. Siempre desean y lo obtienen, comprar las cosechas a precios de hambre, casi que ni pagan lo que se le ha metido y; la mano de obra siempre se la quedan debiendo a uno - Comentaba, siempre que podía y donde fuera. - Y más aún, de no ser por el Consejo, ahí sí que nos llevaría puta, porque tendría que vendele mi

cosecha al dueño de la tierra o a los intermediarios y como de todos es sabido, siempre quieren agarralo a uno por hambre, máxime si le han ido dando adelantos. Que diferente sería si uno tuviera un terrenillo propio, ahí todo cambiaría, porque hasta en un banco se podría sacar un préstamo, poniéndolo a responder. Pero diay, algo es algo. ¿ Qué le vamos a hacer ? Y con esa plegaria se doblaba parejo sobre la madre tierra, para implorar su clemencia y para que le compensara, con una buena cosecha su esfuerzo. La ilusión de una cosecha bien pagada por aquella institución rectora de la producción agrícola, le hacía tener más fe de tiempos mejores. No le importaba trabajar hasta las dos de la tarde en aquel terreno y después irse a doblar al trapiche hasta las horas de la madrugada, si era del caso, para sacar la tarea. Tenía por quien luchar, aquella hermosa familia que se iba criando " a brincos y a saltos ", como decía él. En ese trajín pasaron los días y los meses y la fe inquebrantable del luchador de la tierra, se hacía más fuerte. Su milpa era de las mejores de la finca y el frijolar que sembraría posteriormente, le iban a dejar para pagarle a don Félix y una buena ganancia. Otra vaca, ropa para los güilas y su mujer y tal vez algo para él. Ya vería. - Es que estando bien la mujer y los güilas, que son por los que uno se jode a mí no me importa que digan que ando como un retrato, siempre con la misma ropa. De por sí yo ni salgo y si acaso voy a San Fermín, que es una vez perdida, es a hacer un mandado de urgencia; como voy a caballo, mandaría que me mudara pa' eso. Así que con esa mudadilla de salir que tengo, me la juego. Lo que sí me gustaría es comprar otra vaca, porque la leche que nos sobre, Flor la puede vender a los vecinos que no tienen y diay, algo se gana y me mete el hombro. Las mujeres de por sí, son muy orrativas y son más comerciantes que uno. No les tiembla el pulso pa' cobrar, en cambio uno, a un vecino no haya como cobrale un puño de maíz o de frijoles. Por eso yo dejo a Flor pa' que se encargue de eso. La puritica verdá es que tiene razón Para la cosecha de maíz, todos los que podían participaban, Flor y Florcita se unían a Justino y en varios días de buen trabajo y dejando a Pedro a la sombra de un higuerón y con un toldo para que no lo picaran los "bichos", cogían el fruto del trabajo y lo cargaban en sacos de "gangoche", para transportarlos a lomo de bestia hasta la "troja", a esperar que los camiones del C.N.P. se los recibieran en la fecha preestablecida. Ahora seguirían los frijoles y el proyecto estaba en marcha. Una muy buena semilla, previamente garantizada, hacía augurar una muy abundante cosecha.La época de los elotes, era época de fiesta casera, los diferentes estados del maíz, servían para elaborar suculentos platillos, de la comida criolla; la herencia ancestral y el culto al maíz, salían a flote con la cosecha. Se comían desde tiernos, semitiernos, con los cuales se hacían las "cosposas", (especie de tortilla, no tan suave como la tradicional) que se acompañaban con natilla; el tamal de elote y un sinnúmero de deliciosas comidas, gracias al maravilloso grano. La mayor parte de el se desgranaba por las tardes y los fines de semana, cada quien con un canasto y a dedo o con una " tablilla" o un mismo "olote" duro, y así iban cayendo los granos al canasto y posteriormente al saco. Ahí de una vez se hacía el control de calidad; el de primera para entregar al Consejo y el otro, para el gasto o para vender a los vecinos. Era todo un acontecimiento y una ocupación extra para toda la familia, que se beneficiaba directamente de las bondades de la "perla vegetal". El desgrane servía para hacer tertulia familiar y si algún vecino andaba de visita, gustoso se incorporaba a la faena, sabedor de que a cierta hora , le llegaría un jarro de aguadulce o café, con uno o dos gallos de frijoles o una cosposa bañada en natilla y si quería más pues - adentro hay más - decía Flor. Así eran éstas gentes, lo poco que tenían lo compartían hasta donde alcanzara.

No se preocupaban, como en la ciudad, de poner servilletas, manteles o loza fina para atender a la visita, lo primordial era que quedara satisfecho, aunque se limpiara los bigotes con la manga de la camisa. Nadie se iba sin degustar aunque fuera "un gallito". Era tiempo de cosecha. El corredor de la casa, con dos bancas de madera sin pintar era la sala de estar, el "lobby" que llaman . Ahí entre helechos gigantes y las violetas que con especial cariño cultivaba Flor, las visitas pasaban horas enteras conversando sobre los diferentes tópicos de la vida cotidiana. No hacían falta los aires acondicionados, los equipos de sonido, mucho menos los televisores. Las vivencias de cada quien eran su mejor entretenimiento. La búsqueda conjunta de soluciones, era su padre nuestro y el avemaría, la subsistencia. Así se habían forjado y así morirían. La estrofa de nuestro himno nacional, “… en la lucha tenaz de fecunda labor…”, aquí sí se aplicaba, sin necesidad de cantarla. De por sí… ¿ Quién se lo sabía aquí ? Ellos eran el más vivo ejemplo de su cumplimiento.

¡ ADIOS DON FELIX ¡ En una tarde de esas y mientras Justino contaba y apilaba con placer el fruto de la cosecha, ya en sacos, vino a toda prisa y con jadeo que denotaba la carrera que se había pegado, Miguelillo y sin esperar a que aquel le preguntara del ¿ por qué de la carrera ? , le soltó : todo –

- Justino, Justino, vos no te das cuenta de nada en este hueco, tiene uno que venir a avisate de - ¿ Qué fue, qué es la cosa ? venís como alma que lleva el diablo y todavía me trapiás .

- Pos nada, que a don Félix se lo han llevao grave pa' San José, como que la enfermedá lo revolcó anoche y lo sacaron agonizando. No sabemos nada más, pero vieras que mal iba. Yo le ayudé a doña Rosa a montalo en el jeep y de ahí salieron soplados pa' la ciudá. Pobre viejo, ojalá le hagan algo y lo salven, yo la verdá es que lo dudo. A como iba, no creo que pase de hoy - A la gran hijueputa, eso si que es una torta, si se nos muere el viejo, ahí sí que nos lleva el diablo. ¿ Quién se va a hacer cargo de ésto ? Yo no creo que Felicillo se venga a meter a éstos arrabales y lo pior es que no tenía ni mandador. La verdá es que ¿ pa' qué lo ocupaba ? , si él se hacia cargo de todo. Pero diay, doña Rosa ahí sí que no va a poder Fue la primera gran preocupación de Justino y razones sobradas tenía. Efectivamente, don Félix murió a los dos días, el cáncer que le había sentenciado, reclamó a su víctima y se la llevó. La trasladó adonde van las almas trabajadoras y cumplidoras con su misión. Si reencarnaba, lo haría en frutos, porque la verdad es que mucho se había "jodido", poniendo a producir la bendita tierra de que Dios le había dotado y la verdad es que gracias a ello y a su bondad, aunque a veces

se pasara de necio, como decía, Justino, había forjado muchos amigos que sentían su partida física, entre ellos, el mismo Justino. - Puña, a pesar de que siempre andábamos en una pura peliadera, como perros y gatos, el viejo se portó conmigo como un tata, no dejó que no hizo pa' veme surgir. Si hasta me alquiló uno de los mejores terrenos pa' que yo duplicara la producción y siempre estaba encima mío pa' que no lo descuidara . " Que mire Justino, que ese es su futuro. Que vea que usté lleva hijos pa' arriba. Que sáquese esas ideas de la mente. Que con trabajo es que los pobres de éste país logran progresar ", siempre estaba en esas y si bien es cierto, yo más de una vez me le paré como gallito de pelea, el viejo siempre me perdonaba y al otro día me hablaba como si nada hubiera pasao. -¡Qué tirada, ora que se fue es cuando uno lo siente! Comentaba Justino con Flor y cuando se preparaban para ir a la vela. Si bien es cierto que el funeral era por el cuerpo de don Félix, el pueblo entero sentía que algo de ellos y de cada quien había muerto y pronto se darían cuenta y con tristeza, de que sus presentimientos y los de Justino, eran ciertos. El vehículo que trajo los restos de don Félix, era uno de esos de funeraria, detrás de este venía otro cargado de flores. No era para menos, siendo su hijo diputado y con las amistades que tenía, aquel sería el entierro más sonado de la historia contemporánea del Bajo del Alumbre. Opacaba en vistosidad al del " Comandante Camilo ". Los señores que venían desde San José, todos en traje entero y en sus propios carros, eran de todas las especies del género humano. Unos con cara de hipócrita, haciéndole la "masa aguada" al compañero diputado, otros, sus compañeros de partido, pues si bien no sentían la muerte de don Félix, sí acompañaban a Félix por solidaridad. Luego andaban otros, los amigotes de él y sus compañeros de bufete, quienes más pensaban en los clientes que les esperaban y en la plata que estaban dejando de ganar, por andar en ese sepelio. Sin embargo el acontecimiento despertaba en todas las gentes del Bajo, un sobresalto y una cierta congoja, al no poder estar en primera fila y al lado de su patrón, por cuanto los primeros puestos los tenían ocupados aquellos que habían venido de San José, a "robarse el show " Hubo una pequeña ceremonia al lado de la tumba familiar y un cura, también importado, se encargó de dar la despedida al alma de don Félix. Vela no hubo, esta se habla realizado la noche anterior en una funeraria de las de moda y aquella sencilla y rápida ceremonia, fue lo único que el pueblo; su pueblo, pudo disfrutar. Una angustia, una zozobra, un no sé qué, se apoderó de aquellas familias que habitaban y trabajaban en las fincas de don Félix. A pesar de que Felicillo no fue despectivo y agradeció amablemente, como todo un político, las muestras de pesar de cada uno de los vecinos, una actitud desinteresada de los bienes que heredaba de su padre, fue divisada por aquellos, es más, a la salida del cementerio y cuando el sepelio se había consumado, fue abordado por algunos vecinos, los que le interpelaron sobre ¿en qué condición quedaban ellos ? y; quizás por el momento que estaba pasando y por la agotadora jornada o porque había mucho amigo rodeándole, su respuesta ayudó a acrecentar esa angustia que todos sentían. - Don Félix, ahora que su papá no está entre nosotros, queremos ponenos a sus órdenes, no sabemos si usté se va a quedar unos días pa' ordenalo todo o bien si doña Rosa va a quedar a cargo, pero sí

queremos saber ¿ cuáles son sus instrucciones ?- Miren señores, este no es el momento para hablar de esas cosas, pero lo que si es cierto es que mamá no se va a quedar sin papá en este Bajo de los infiernos. Ella se va conmigo para San José y allá va a vivir. Ya veré, ya veré, que hago con estas fincas. Por lo pronto quédense ahí, apenas tenga tiempo vendré para planear que hago con ésto. Al buen entendedor con pocas palabras; lo que Felicillo acababa de decir, era ni más ni menos lo que todos habían presagiado. Al menos en el Bajo del Alumbre no hubo novenario oficial , la casa de don Félix continuaba cerrada, sin vida, sin alma. La casona desde la cual se divisaba todo el Bajo y más allá, había perdido aquello que la mantenía viva; el espíritu emprendedor y visionario de su morador. Allá, como a los quince o veintidós días, un viernes, se apareció el nuevo propietario, con uno de sus hijos mayores, de los del primer matrimonio y le dijo a Toño, el de la Pulpería, que a todo vecino que viera, le dijera que a las tres de la tarde habría una reunión en la entrada de la casa de su padre, aparte de eso, mandó a Miguelillo a caballo, para que avisara a todos los que pudiera. Poco a poco y como caminan las reses al matadero, presintiendo lo peor, se fueron arrimando al sitio ordenado. Sabían de antemano que aquel "sangrón ", no traería buenas noticias, pero en fin, era el dueño y había que hacerle caso en lo que se le ocurriera o bien, recoger los chunches e irse a rodar tierra. " La suerte estaba echada ".

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LOS TIEMPOS CAMBIAN Bajo aquel ardiente sol, de esos que " queman hasta los pensamientos ", el murmullo que hacían los ahí reunidos y sus familiares, crecía en intensidad. El "nuevo patrón" seguía sin aparecer por la puerta aquella, que fue la de todos y que nunca estuvo cerrada para nadie. Ahora sí lo estaba. Sólo Miguelillo entraba y salía cuantas veces quisiera, porque él era el asistente personal del "viejo" y al parecer seguía siéndolo del nuevo. - Don Félix, yo creo que ya están todos ahí, es que ya son las cuatro - le dijo Miguelillo. - Que esperen, ahora yo soy el que manda aquí y no voy a dejar este trago a medio palo. Bueno... la verdad es que voy a salir de esto de una vez por todas dijo levantándose del sillón que también había sido el de don Félix. Cuando salió por aquella puerta y se paró en el corredor, aún le acompañaba aquel vaso de whisky que estaba ingiriendo y que era el noveno o décimo que se tomaba aquel día y sin esperar mucho a que cesara el murmullo, levantó su mano derecha y les dijo : Miren señores, yo no sé ¿ cómo putas manejaba mi tata estas fincas ? pero en lo que respecta a mí, yo tengo mis propios métodos. Soy de la idea de que las cosas y las empresas deben de dejar ganancia y eso es lo que yo quiero de éstas fincas. ¡ Que me dejen ganancia ! , porque si no es así, mejor apago la luz y me voy. Tengo entendido y según me ha contado Míguelillo, que papá alquilaba varios pedazos a algunos vecinos, si esto es cierto quiero ver a más tardar mañana, los contratos de arrendamiento, porque como

decimos nosotros los abogados, papelitos hablan, no vaya a ser que el día de mañana, algún vivillo me meta una información posesoria y se me quede con un pedazo de la finca por descuido mío. Si no hay contratos, pues salados, todo lo que se produzca en esta finca, pertenece a los dueños, a menos que me demuestren lo contrario con documentos. Papelitos, mañana quiero verlos - balbuceó. Los tragos estaban haciendo su efecto y no medía que con su actitud estaba cometiendo una gran injusticia. Tampoco prestaba atención a varias manos levantadas, de vecinos que querían referirse a lo que estaba diciendo, entre ellos Justino. - Por otra parte - continuó - He hecho un estudio de la gente que está viviendo en estas fincas y me he enterado que para lo que dejan, aquí sobra gente. Yo no sé si es que mi tata era de muy buen corazón o es que era tonto, pero con la gente que hay aquí y sus familias, éstos terrenos deberían producir el doble. Así que no me malinterpreten si mañana les comunico a algunos que tienen que irse , para lo cual voy a ponerles un plazo de quince días. Ustedes tienen que comprender que los tiempos son otros y que es preferible que la finca deje algo, antes de venderla, en cuyo caso todos tendrían que irse de aquí. Por si no lo saben y creen que estoy fanfarroneando, sobre todos aquellos que tienen muchos años de vivir aquí, debo decirles que existe lo que en derecho se llama desahucio administrativo, que no es otra cosa que el derecho del finquero para desalojar, sólo con la guardia rural a los empleados que ya no quiere tener viviendo en su finca. No me obliguen a hacer eso porque seria muy doloroso para mí y mucho más para ustedes. De ahí que, a quienes mañana Miguelillo les entregue un escrito, tienen quince días para irse a otro lugar. Un rumor cada vez mayor, salía de aquella gente, todas sus ilusiones se estaban desvaneciendo, era verdad lo que habían pensado, mas no lo podían creer. ¿ Quienes serían los echados ? - Silencio por favor, déjenme terminar - Gritó aquel, quien retomó el hilo de la conversación. - En cuanto al trapiche, vamos a seguir trabajándolo, creo que... ¿ siempre ha estado a cargo de Justino, verdad ? Bueno, así se va a quedar por ahora , después ya veremos. Luego, a cada quien de los que se queden, voy a ir dándoles las instrucciones y posiblemente... no, posiblemente no, después, uno de éstos días va a venir un ingeniero amigo mío, quien se va a hacer cargo de todo. Vamos a ver si tecnificando esto, produce más, lo que como les dije al principio, es mí objetivo. Por ahora es todo La mano de Justino seguía levantada, sin embargo, Felicillo volvió la espalda y ni siquiera lo determinó. La reunión había terminado, todos quedaron boquiabiertos y lo que es peor, no les había, ni siquiera por cortesía, dado la oportunidad de intervenir en aquella reunión, la que muchos calificaron de " burro amarrado contra tigre suelto " Ahora, al igual que siempre había sido, comentarían lo que había pasado, se enojarían en contra de aquel desgraciado, pero de ahí no pasarían. Todos y cada uno, necesitaban vivir ahí, la mayoría había nacido y se había criado en esa finca La verdad es que, aunque lo esperaban, no se imaginaban que iba a ser como el nuevo patrón se las había pintado, aparte de eso, no sabían quienes eran los que se iban y tampoco se atreverían a ir donde él con algún reclamo, porque si no los tenía en la lista de desalojo, a lo mejor los incluiría. Un grupo se alojó momentáneamente en la Pulpería de Toño, para calmar la sed con un " sirope ", entre ellos Justino y ahí, surgieron los más variados comentarios. - Bueno mirá Justino, a como van las cosas, el único que tiene asegurada su estadía aquí sos vos, porque el hijueputa ese dijo que quedabas a cargo del trapiche - dijo Sapa, para iniciar la conversación.

-Claro, como no me voy a quedar, si es que estamos en plena entrega a la Fábrica y como ustedes saben eso es por contrato y no se puede dejar de cumplir porque hay multa. El hijueputa es vivo y no se la va a jugar. Pero... eso no es lo que me preocupa, la verdá que lo que sí me tiene emputado y que de no ser por mis hijos alguna tontera hago, es el cuento de los alquileres. El mejor que nadie sabe que don Félix nos alquilaba los terrenillos de boca y que ninguno de nosotros tiene papeles de eso, como el putas ese dice y que por lo tanto se va a quedar, de buenas a primeras con el fruto de nuestro trabajo. Pero, lo juro por Dios, que antes que eso suceda, le prendo fuego al frijolar, pa' que así no le quede nada a ese angurriento. ¡ Ay, si estuviera vivo don Félix ! , pa' que vea lo que está haciendo este hijueputa, con el perdón de doña Rosa La ira acumulada estaba a punto de aflorar; consideraban injusto desde todo punto de vista que aquel viniera a apoderarse de su trabajo, sabiendo de antemano que aquel era un contrato de palabra y entre hombres de campo, el cual valía más que cualquier "papelito" de los que él hacía mención. Definitivamente no podrían probarle que los pedazos que don Félix les había arrendado y en los cuales habían cifrado sus esperanzas no formaban parte de la producción de la finca y por lo tanto, estaban a punto de perder todo un año de trabajo. - Yo lo que creo - dijo Rafael levantando la mano para llamar la atención. - Yo lo que creo es, que debemos hacer un grupo, como una comisión e ir a hablarle a ese carajo, tal vez entre en razón antes de que cometa una tontera con algunos de nosotros o tal vez, yo no sé ¿qué se les ocurre a ustedes ? Tal vez como hacele un buen escándalo. Recuerden que él es diputado y ni a putas le va a servir, sobre todo en año electoral, que se le haga un desorden por asuntos con la finca y con los que trabajan pa' él. Yo he oído que por éstas épocas, los políticos andan con pies de plomo y tratan de aparentar pa' no perjudicar al partido en el que están. Diay, bien que mal nosotros somos un buen grupo de votantes y pues, la verdá, son votos que puede perder el partido. Digo yo, no sé, ¿ qué les parece ? A lo mejor todo lo que dijo fue por la borrachera que se andaba. Hagamos un grupo y vamos a hablale mañana sábado tempranito - Pos la verdá es que es buena idea, ¿ Qué pensás vos Justino ? - dijo “metiendo la cuchara " Toño, el pulpero. - Diay, pos claro que es buena idea, pero una cosa solo debemos tener clara , no nos hagamos ilusiones. Lo que nos dijo ese carajo ya lo tenía bien estudiao, yo no creo que se la haya ocurrido ahí mismo. Lo que sí más me parece es que si no nos da alguna solución, nos vayamos pa' la Asociación de San Fermín, de por sí hasta la fecha no los hemos jodido y ya va siendo hora de que se acuerden de lo que nos prometieron y; si fallamos con ellos, nos vamos pa' San José, al Partido, a poner la queja y si es del caso vamos a los periódicos y a la televisión o a la radio. Allá al mediodía hay programas en la radio donde uno puede ir a hablar de todas las cosas que le pasan, o si no ahí veremos, alguien tiene que oínos. No puede ser que venga así nomás y nos cambie todo, no importándole las injusticias que cometa. ¿ Es que no se han dado cuenta de que la mayoría de nosotros somos nacidos y criados aquí ? Mientras eso decía, un nudo en la garganta le impedía a la voz salir, la emoción, la ira y la indefensión hacían estragos en la serenidad de Justino. Tomó aire y continuó, ante la expectación de todos. - Puta, manda güevo que venga ahora y nos diga que nos vayamos y nosotros, como conejos asustados no le reclamemos y agarremos los chunches y ya... No señores , si a don Félix no le hicimos escándalos, fue porque el viejo al final entendía como era la vaina, pero a éste juemiputas, no tenemos porque aguantale. Hagamos la comisión de una vez por todas y vayamos a hablale, pero de una vez les digo; yo no estoy pa' aguantale nada, mucho menos que nos vaya a achucullar. A Justino Rafael Mora Porras, nadie lo humilla por más títulos y papelitos que tenga La " comisión " fue integrada por Mamulón, don Rafael, Angel y Justino. Toño el pulpero se

comprometió a acompañarlos como imparcial y la verdad, porque a él le interesaba. Su negocio estaba ubicado en un pedazo de la finca que por tolerancia, don Félix le había cedido y como un servicio a los vecinos. Con un " nos vemos mañana " se despidieron y cada uno se dirigió hacia su casa. A las diez era la cita, a las diez de la mañana de ese sábado decidirían sus destinos en esa finca y el destino de sus familias. A lo mejor alguno de ellos estaba en la lista fatídica. Mañana lo sabrían. ¿ Habría mañana para gentes como esas ? - Papi, papi, que ahí hay unos señores empleados suyos que quieren hablar con usted - le dijo el joven hijo al patrón, quien con la barba de dos días y una "goma" de todos los diablos, trataba de captar música de su gusto en la radio. Un vaso de whisky le acompañaba por desayuno y un mal genio, producto de sus desarreglos personales le agobiaba. - ¿ Qué, qué ? Hablame más duro que no te oigo - Que unos señores empleados suyos quieren hablarle - ¿ Qué putas quieren ? Ya les dije todo lo que tenía que decirles o , es que quieren que desde ya les eche - Deciles que estoy durmiendo o algo así. Que no quiero atender a nadie, que más tarde Míguelillo les va a ir a notificar lo que les dije... Puta jodedera - Pero Papi, ¿ cómo les voy a decir eso ? si saben que usted está aquí. A mí no me gusta mentir. ¿ Porqué no sale usted y se los dice ? - Diciendo lo anterior el joven corrió para su cuarto. Tal vez, no quería involucrarse en las injusticias de su padre. - Puta hijo el mío, lo traigo para que algo aprenda y me sale igual que la madre; pendejo. Voy a ver qué es lo que quieren esos hijueputas, en fin y de por sí nada estoy haciendo y no ponen buena música en la radio Engulló de un sorbo el trago que tenla sobre la mesa, se acomodó el pelo y se dispuso a salir a enfrentar a aquellas gentes que ansiosas le esperaban en el corredor, con la fe de que por lo menos les escuchase. Abrió violentamente la puerta y sin darse un respiro les enfrentó. - ¿ Qué putas quieren ? ¿ No se han dado cuenta de que estoy ocupado ? Parecen tonticos que no entienden .Ni siquiera les invitó a pasar, la verdad es que los tiempos habían cambiado, doña Rosa los hubiera pasado adelante y les habría ofrecido algo de la deliciosa repostería que siempre tenía en aquellas canastas, que hoy estaban vacías en la mesa de la cocina, pero éste, su hijo, no había aprendido nada de sus progenitores. El éxito que había tenido y gracias a ellos, se le había subido a la cabeza y no lo dejaba pensar. Estaba ciego. - Un momento Félix, cierto es que somos peones de esta finca y que por desgracia no tenemos otro lugar donde ir a metenos, porque si no ya hubiéramos dejao un plumero, pero venimos en santa paz pa' hablar con usté y hacelo recapacitar, pa' que entienda que el mal que aqueja a unos pocos, es el mal de todos aquí. Usté se crió con nosotros y muchos fuimos sus amigos cuando éramos chiquitillos. Yo, la verdá, no sé, qué le ha hecho cambiar tanto. Cierto es que somos un montón de ignorantes, pero no por eso usté

nos va a humillar. No crea que porque tiene ese título que tiene y porque es diputado, gracias a muchos de nosotros, usté va a convertinos en sus esclavos y que le vanos a agachar la cabeza. No señor. Si está pensando así, está muy equivocado - Contraatacó Justino. - Y es más - agregó. - Decidimos hacer esta comisión pa' venir a hablale porque a la mayoría se le ocurrió, pero yo se los dije, usté está tan enfermo de poder que seguro no nos va a prestar atención y, ¿ ven ustedes que yo tenía razón ? Si es que con personas así no se puede razonar La tez de aquel hombre pasó en segundos, de roja a morada y después tomó un tono verde. No podía creer que aquellos " patas rajadas " estuvieran enfrentándole así, aunque ya tenía referencias, por su padre, de como era Justino de " revienta cinchas ", pero jamás esperó que le increpara de esa forma. - Un momentito señores... Ustedes vienen hasta mi casa a tratar de regañarme y eso no se lo pemití ni a mi padre; de veras ustedes piensan que yo soy el mismo que conocieron y ya va siendo hora que aprendan, si es que se van a quedar viviendo aquí, que yo y sólo yo, soy el que manda y el que no quiera acatar mis órdenes que coja sus chunches y se largue. De por sí peones como ustedes hay a montones y, aquí sobra más de uno. Por otra parte, si es cierto que ustedes vienen en representación del pueblo , ¿por qué sólo Justino habla ? Vamos, hablen ustedes también o, ¿ es que el camarada los tiene aleccionados y ustedes hacen sólo lo que él dice ?- No, mire don Félix - dijo Mamulón - Cuando nosotros vamos a hablar con alguien y así era con su papá, siempre nos ponemos de acuerdo sobre lo que vamos a conversar y después nombramos a Justino pa' que nos represente y en todo lo que él diga, nosotros lo apoyamos. La verdá es que como él es más abierto y claro pa' hablar, creemos que lo mejor pa' nosotros es que él le diga a usté, las cosas de su persona que nos molestan y que si no juera porque uno tiene familia, a lo mejor hasta una torta se jala. De por sí, no sabemos si mañana vamos a estar aquí. Además de eso, no nos parece que usté venga de la noche a la mañana a tratar de cambiar muchas cosas que siempre fueron buenas pa' su papá y bien que mal, ahí nos llevábamos. No entendemos de ¿ onde saca usté que aquí sobra gente ? si más bien pa' la cosecha se contrata gente de San Fermín. Está bien que traiga un ingeniero pa' que se haga cargo de esto, eso es cosa suya, pero explíquenos ¿ cómo va a venir un hombre, por más profesional que sea, a tomar las riendas de una finca como esta, si ni siquiera la conoce ? Eso su papá nunca lo hubiera permitido, porque es botar la plata. Bueno, pero en fin allá usté, de por sí ora es suya... - Lo que yo haga con mí finca, ni a ustedes ni a nadie les interesa, pero bien, ya veo, aquí hay un grupito de rebeldes que me parece no me van a servir para nada, más bien me van a malear a la otra gente. Ahora si sé, por donde debo empezar; si eso es lo que quieren, allá ustedes. Salados porque a ninguno de ustedes quería botar, decía mi tata que eran buenos y parejos para el trabajo, pero diay, así con esas ideas, a mí no me sirven. Lo que les pase de ahora en adelante, es culpa de ustedes mismos. ¡ Cabrones ! - ¿ Puedo decirle algo más ? - Preguntó Justino - Diga, diga, que una tontera más es cuchillo para su propio pescuezo -

No señor, no se trata de eso, pero ya que nos va a echar, quiero que sepa que

esto no se va a quedar así, vamos a ir a San José y le vamos a hacer un escándalo en el Partido y si es del caso, vamos a ir a la prensa. ¿O es que usté se está creyendo que nos vamos a quedar cruzados de brazos ? Pues con nosotros se jodió y recuerde que estamos en año electoral y vamos a ver si a su partido le sirve que en plenas elecciones un diputado suyo, ande en estas vainas - Mirá Justino, no me amenacés, la verdad es que ya me estás llenando la cachimba de tierra y lo mejor es que circulen por donde vinieron, sino quieren que el mismo lunes los mande a sacar con la policía de mis tierras - ¡ Ay señor ! Usté es abogao y parece tonto, ¿ usté cree que es así de fácil sacanos? Se le olvida acaso que estamos en un país de derecho y que en esta finca nunca nos han pagao seguro social, banco popular y las otras garantías establecidas constitucionalmente y que además de eso, cuando a uno lo echan de cualquier trabajo, deben pagale las prestaciones. Intente nada más echanos, a cualquiera que sea de este Bajo y va a ver el escándalo que le armamos, no sólo aquí sino en San José Dijo ante la mirada atónita de todos, don Rafael. La verdad es que algo le había quedado del mensaje de Camilo, su hijo y ahora "contra la pared" lo estaba recordando. Cuando aquel hombre se vio acorralado no atinó más que a decir : - Vayan pa' la mierda todos. El lunes les voy a demostrar quien manda aquí Y dicho lo anterior , dio media vuelta y dando un portazo, dejó a sus empleados en el corredor, quienes no sabían si correr hacia la puerta , meterse a la casa y lincharlo o bien, ir a contar a los demás vecinos de los resultados del encuentro. Optaron por lo segundo. - Puta Justino, ora sí que la hicimos buena - dijo Toño - No que va, si de por sí con personas así no se puede razonar. Ya vieron ustedes como nos trató. Ora lo mejor es organizanos y ver como estamos de platilla, porque a según lo que él haga, mejor nos vamos directamente pa' San José y le armamos allá el escándalo. ¿ Qué dicen ? - Juega el gallo, contá conmigo - Dijo don Rafael - ¡ Y con nosotros !- dijeron al unísono todos. La lucha estaba por empezar y sólo Dios sabría en ¿ qué iba a parar aquello ? Pero de lo que sí estaban seguros todos, era de que aquel desdichado no se saldría con la suya. Por lo menos le harían una buena bronca y todo el mundo en San José se enteraría de la clase de persona que era aquel político. Felicillo salió del Bajo ese misa día, sin embargo, no notificó a los vecinos que iba a despedir, de su decisión, es más, nadie se dio cuenta de, en que momento abandonó el pueblo. Una incertidumbre mayor se apoderó de los pobladores y ese sábado tampoco hubo paga. Era la tercera semana que ocurría. Se habían organizado de tal manera que, los que tenían en sus "trojas" almacenado maíz y frijoles, suplieran en calidad de préstamo, cantidades necesarias para el sostenimiento de las familias. Era una emergencia y sólo Dios sabría si se honrarían esas deudas de producto, pero, lo que más interesaba por el

momento era el sostenimiento de las familias. La fuerza del movimiento que habían iniciado los vecinos no se quebraría fácilmente; en una reunión realizada en la pulpería de Toño nombraron la comisión que iría a San José, planearon la estrategia a seguir y se comprometieron con Toño, para que éste surtiera a los vecinos más necesitados de los víveres que necesitaran, con la promesa incondicional de pago, una vez cobrada las cosechas de los arrendatarios de la finca. La solidaridad demostrada era increíble y se estaba , en esos momentos, rompiendo con la tradición del " ser costarricense ". Reclamarían por sus derechos y, aun más, los que más recursos tenían, colaborarían con los vecinos que vivían sólo del jornal, para que los hijos de aquellos no carecieran de lo indispensable. La comisión, obviamente encabezada por Justino, quedó formada por don Rafael, Angel y Mamulón y en ellos estaban puestas las esperanzas de toda la comunidad. Un presupuesto, el cual incluiría el costo de los pasajes, comida y dormida, era lo que ahora debían elaborar.****************

ESTRATEGAS RURALES - Miren señores, antes de cometer alguna tontera, a mí me parece que lo primero que debemos hacer es ir a hablar con ese hombre a la Asamblea, tal vez allá se sienta más comprometio y eche abajo, ya que no le serviría ponese a gritanos delante de medio mundo, menos en la Asamblea, no sé, digo yo... expresó Angel, sobándose la barba. - Suave, suave. Primero y antes de ponenos a planiar ¿ qué vamos hacer ? , veamos ¿ con cuánta plata contamos ? Recuerden que a lo mejor tenemos que quedanos por lo menos una noche en un hotel y, lo que cuestan, más la comida y otros gastos como pases, estamos hablando de alguillo de dinero le frenó Mamulón. -¡ No !, Un momentito, recuerdo que cuando Camilo estaba en esa vaina de los sindicatos, vino una vez a casa acompañado de varios amigos de él, como que eran de una confederación de trabajadores o algo así y el jefe de eso, muy noble por cierto, se me ofreció pa' lo que yo necesitara y hasta me invitó a su casa, por si algún día yo iba por San José. Yo en la casa tengo el teléfono y su dirección, que orita no me acuerdo como se llama, pero por ahí lo tengo apuntao. Seguro estoy que él se debe acordar de mí, si hasta durmieron varios días en casa. Como que se andaban escondiendo de la policía por un asunto de grupos guerrilleros o algo así y que andaban persiguiéndolos, porque diz que pertenecían a un grupo que se llamaba como la familia o el cenap, la verdá es que no me acuerdo, que grupo era el que ellos mentaban. Yo nunca les había contao a ustedes, pero ahora que Camilo murió, ya no hay peligro y de por sí, no hubo nada contra ellos, porque endespués se fueron pa' San José y siguieron en las mismas. - meditó un poco para sí mismo y exclamó para terminar: Oh Camilo, en las cosas que me metía. Pero diay, ahora tal vez nos puedan ayudar sus amigos. Así que ¿ qué les parece si el lunes llamamos a ese señor y lo vamos a buscar ? - ¡ Claro, ahí está ! Quien quita y hasta dormida nos den y, ¿ por qué no ? hasta nos

puedan

ayudar. Bueno, pero por si acaso, veamos a ver como cuánto podemos reunir

entre todos - dijo Justino.

Toño que había estado atento a lo que aquellos hablaban, inmediatamente se dirigió a la caja de cartón, que le servía de "caja registradora " y tomando dos mil colones, los puso en el mostrador. - Yo pongo eso, por si de algo les sirve y con que pongan ustedes mil cada uno, que yo se los puedo prestar, por si andan muy chingos; ya salen a flote con el viaje, por aquello que tengan que pagar hotel y comida. ¿ Está bien ? - ¡ Demasiado bien Toño !, Con eso nos alcanza y hasta nos sobra Contestaron todos. Quedaron en que el domingo afinarían los detalles de su viaje y que el lunes en el bus de seis de la mañana, partirían para San José, no sin antes y desde San Miguel, llamar al señor de la confederación, para ver si se acordaba de don Rafael y si era así, informarle del motivo de su viaje y solicitarle una cita. Seguros estaban de que él les ayudaría, máxime que había sido entrañable amigo de Camilo. De camino a su casa, Justino se encontró con un pick-up, en cuyo interior viajaban varias personas de San Fermín y en el cajón otros más con mástiles de caña de bambú y una gran cantidad de banderas del partido de Felicillo, quienes al ver a Justino detuvieron el vehículo, con la esperanza de que fuera un eventual partidario y ponerle la bandera en su casa. En la cabina y "al mando de la expedición" de signos externos, viajaba el regidor Morales, quien amparado a su investidura, inició la conversación: - ¡ Hola amigo ! Yo como que lo conozco a usté ¿ verdá ? - Pos claro que me conocés, si cada cuatro años te apareces por este Bajo a hacer lo mismo y después no se te ve ni el humo, porque lo que es de nosotros ni te acordás. A propósito ¿ en qué puedo serviles ? - Pos diay, como vos decías, en lo mismo. Pero hay una cosa que usté tiene que saber al respecto de eso que me dijo y es que yo sí me he acordao del Alumbre, sino dígame , ¿ gracias a quien se arregló el camino de San Fermín hasta aquí ? ¿ Ah ? ¿Sabe, qués lo que pasa ? Que el trabajo de uno no se ve y la gente cree que uno está en la Municipalidad pintao y que no hace nada, pero mi amigo, ahí hay que trabajar. Aparte de eso, no hay presupuesto y si la Asamblea aprueba alguna partida específica, cuando se logra que Hacienda la gire, ya la plata no vale nada y los costos de las obras a que va dirigida, se han elevado una barbaridá. No, si hay muchas cosas que ustedes no saben y después andan diciendo que uno no hace nada - Bueno Morales, no se enoje, tranquilo, a lo mejor ¿ quien sabe ? usté es uno de los poquitos que trabaja, hacen algo y desempeñan el cargo con dignidá y honradez, pero no hay que enojase con la gente cuando le preguntan a uno y si le piden cuentas de si está haciendo o hecho algo desde el puesto a que fue electo. Es más debería ser obligatorio pa' todos ustedes el informar a todo el pueblo, sobre si están cumpliendo con sus obligaciones y mas aún, denunciar a los que no hacen nada o están choriceando, pa' que el pueblo los señale con el dedo y nunca vuelva a votar por ellos. ¿ No le parece ? - Está bien, está bien, yo no me estoy enojando, la pura verdá es que en estas elecciones debemos estar todos los partidarios hermaniticos, pa' poder sacar la tarea. ¿Qué me dice, nos devolvemos pa' ponele la banderita ? - Ahí sí que no mi amigo, esta vez no la pegó conmigo y creo, que con más de uno en este Bajo. La puritica verdá es que estamos muy resfriados con los políticos; yo no sé si algunas personas le han

conversado del problema que tenemos con Felicillo y de lo que vanos a tener que hacer, pero por si no se lo han dicho, yo le puedo contar como anda la vaina - Suave, suave, que ya ese cuento me lo han echao. ¿ Pero dígame, de verdá así está la cosa ? - Pos sí señor, así está la cosa y como queremos ser parejos; en este Bajo no vamos a votar por ningún candidato de los partidos de siempre, porque vea usté de lo que son capaces. Así que guardese esas banderitas pa' los tontos de siempre, que a nosotros ya no nos engañan más. Nuestro dedo pulgar es muy decente pa' ir a ponéselo a la papeleta de un hijueputa, que después ni se acuerda de nosotros, ni de sus promesas y por el contrario, tratan hasta onde no pueden más, de sacar su tajada a costa de nosotros. Vaya y digales a los de su partido y ojalá que se enteren los del otro, que en el Bajo del Alumbre hemos despertado y que no gasten pólvora en nosotros, que de por sí, ya no comemos cuento. Buenas tardes Dicho lo anterior, Justino dio media vuelta y continuó el camino a su casa, donde le esperaba ansiosa su familia. Muchas cosas debía de hablar con Flor y debía disponer de lo necesario para que no le faltara el alimento a sus hijos en los próximos días en que presumiblemente se ausentaría. No era ese el mejor momento para estar dándole explicaciones a un aprendiz de político, como aquel regidor, que hacía únicamente eso, pegar banderas y convencer tontos.

¿ QUIEN ESCUCHA A LOS DE ABAJO ? - ¡ Ay Justino ! , yo ya me estaba preguntando ¿ qué onde estaba usté ? Si es que se pierde por horas y horas y no aparece y usté no sabe el miedo que me da de que algo le vaya a pasar, más metiéndose con ese hombre, que debe tener muchos amigos en la polecía y bien sabe usté que son capaces de cualquier cosa. Recuerde cuanta gente ha desaparecio y no se ha vuelto a saber nada de ellos. Los agarran y los encierran en una cárcel o a lo mejor los matan y; parte sin novedá. Usté bien sabe de lo que son capaces. Cuídese por favor, no lo haga por mí, hágalo por los güilas - Ya, ya, mi amor, no ves que por lo menos aquí en El Bajo estamos seguros. Eso que ha pasao ha sido en otros lugares, aquí no va a pasar; ¿no ve que aquí todos nos conocemos ? Estate tranquila, ahora es el pior momento pa' tener miedo, recordá que lo que se viene es bien grande y está en juego nuestra vida aquí y sí nos acalambramos, perdemos. ¿ Está bien ? - Bueno, yo se lo decía por eso que ha pasao en las compañías bananeras y en otros lugares, ¿ por qué no puede pasar aquí ? Vea lo que le pasó a ese muchacho estudiante de derecho, que un viejo de la corte lo mató y parte sin novedá, porque ni en la cárcel está, no se ha dao cuenta usté que aquí valen mucho las influencias y las amistades que uno tenga, imagínese que hago yo sola con dos chiquitos a la cola. Es cierto que hay que peliar por lo que uno considera justo, pero también hay que saber asegurar el maíz del año, pa' no quedase en el desamparo. Diay, al fin y al cabo, uno depende de su marido pa' todo - Un beso en la frente de su amada y un abrazo fuerte con caricia en la espalda, contribuyó a desaparecer, al menos momentáneamente, los temores de aquella mujer. Ambos tenían razón, sobre todo tomando en cuenta los antecedentes de personas desaparecidas, por oponerse a políticos o parientes de ellos, lo que era una constante en centroamérica y ya se había, según se decía, presentado en nuestro País. Ellos no estaban exentos de aquello, máxime cuando se trataba de “enlodar” la figura de un " prominente político”, ahora fortalecido por el aporte de capital que recibiría gracias a la muerte de su padre. - ¿ Va a comer algo ? Usté casi que ni come por andar en esas -

- Sí, sí, regalame un gallillo de algo. La verdá es que tengo buena hambre Con un "güíla" en cada regazo, se dispuso, bajo la atenta mirada de su esposa, a " devorar” aquella sopa de gallina, acompañada de tortillas, calentadas y recalentadas por la espera de su comensal y entre cucharada y cucharada, le hacía, a grandes rasgos, comentarios a Flor de todo lo que había sucedido durante el día y de lo que habían planeado, para llevar a cabo el próximo lunes. Le contó del amigo de Camilo y de la Confederación y de lo que había aportado Toño para el viaje y de como iniciarían esa batalla para recuperar la dignidad de todos. Contole también lo del regidor Morales y de como lo había tratado al encontrárselo camino a la casa. En fin, al terminar el plato de sopa, Flor estaba enterada de todo lo que había acontecido aquel día y de como su esposo y otros más se disponían a irse para San José, a enfrentar lo que viniera. Comprendía ella, que nada que dijese, haría cambiar de parecer a su marido y que debería resignarse a su distanciamiento por el tiempo que aquello durara, pero, acostumbrada a como estaba, a sortear la peripecias que la había puesto la vida, no desestimularía a su hombre, por el contrario, comprendiendo que estaba en juego la estabilidad de toda la familia y la de sus amigos, familiares y vecinos, estaba dispuesta a aportar su cuota de sacrificio. Pensó que lo mejor era irse para donde sus familiares, mientras Justino se iba para la ciudad, así estaría más acompañada. - Bueno, mire mamita, yo seguro me estoy yendo pa' la ciudá el lunes a primera hora, le voy a dejar alguito de plata por cualquier emergencia y; cualquier cosa, se me va pa' onde su familia. La verdá es que yo me iría más tranquilo si usté se queda onde ellos. Así están acompañados, ¿ verdá ? - Si, de por sí yo había pensao eso. Pero oiga Justino, cuídese, no vaya a hacer ninguna tontera, vea que la ciudá está llena de un montón de cochinadas y pa' unos hombres como ustedes, no acostumbraos a andar por ahí, es muy peligrosa. No vayan a salir de noche, vea que se lo digo, recuerde lo que le pasó a Alfredo, el de doña María, que se fue a entregar un maíz allá por el mercao y lo asaltaron y no le dejaron ni la plata de los pases. Cuidaditico me le va a pasar algo. ¿ Sí mi amor, me promete que se va a cuidar? - ¡ Ay que mujer ! Pos claro mi vida; si lo que vamos a estar es de un día pa' otro y a lo mejor hasta dormida y comida nos dan en la mentada confederación, estate tranquila, yo sé cuidame y sé de lo que le puede pasar en la ciudá a personas como nosotros. Por eso vamos a andar ojo al cristo ... En esos comentarios se pasaron el resto del día y al amanecer domingo, Flor insistió: - ¿ Por qué tiene que ser usté el que se ofrezca pa' todo ? Parece que los demás que viven aquí jueran tonticos, siempre es usté el que tiene que andar dando la cara por ellos - Mirá Flor - Le dijo Justino algo molesto. Quizás en una de las pocas veces que le levantaba la voz, pero lo estaba haciendo obligado por los temores de su mujer y ese era el mejor momento para calmarla de una vez por todas. Consideraba que era una lucha de todos, era cierto, pero que si él se había distinguido como una especie de líder, pues debería demostrarlo a la " hora buena” . - Mejor te vas calmando. Como en todo, siempre hay unas personas que llevan la voz cantante; nada hacemos con inos todo el pueblo hasta San José y hacer una pelota sin resultados, mejor vamos esta comisión, que nos sale más barato y quizás podamos ser escuchados con atención, ya que representamos la voz de todo un pueblo. Por otra parte mamita, usté tiene que entender de una vez por todas, que yo no voy a permitir que ese sangrón se salga con la suya y muy mal haría con quedame aquí, mientras otros se van a joder la chaqueta por nosotros. Ya va siendo hora de que entendás, que esta lucha que voy a empezar a dar no es por mi, sino que es por todos ustedes y que si nos va mal, vamos a tener que inos a una orilla de calle, porque nos

vamos a quedar sin siquiera onde vivir. ¡ Entendé Flor, por María Santísima ! - Está bien, está bien, pero no me grités. Vos no te imaginas el miedo que me da... - No te estoy gritando. Te hablo fuerte pa' que entendás y te dejes de tantos miedos. Perdoname, pero las cosas son así, no nos podemos quedar de brazos cruzados, mientras Felicillo hace de las suyas. ¿ Está bien ? - Ta bien - contestole Flor mientras corría sollozando hacia el corredor. Hasta allá llegó a buscarla Justino y atrayéndola hacia sí, le besó la cabellera y secó sus lágrimas con sus manos, al tiempo que le decía de la manera más tierna posible, que todo se solucionaría, que tuviera paciencia, que Dios no los olvidaría y estaría con ellos en todo el viaje. Que algún día los buenos tenían que ganar y que no podía ser que los malos, se salieran siempre con la suya. Al ser las seis de la de aquel lunes, ya estaban en San Fermín , habían salido de madrugada y a pie, por cuanto no podían llevar las bestias, ya que no tendrían donde dejarlas. El autobús saldría a eso de las seis y treinta de la mañana y los dejaría en San Miguel, ahí tomarían otro autobús hacia San José. Las bendiciones y los bezos de sus familias les acompañaban y en el fondo del corazón un cúmulo de ilusiones y el ánimo de estar actuando de buena fe y en defensa de sus derechos, les daba fortaleza para continuar adelante. Jamás habían ido a la ciudad para una cuestión de estas, salvo las muy planeadas visitas a los hospitales generales, para recibir atención médica o para visitas a algún vecino o familiar, o bien; para efectuar la venta de algún producto, salvo ello, la urbe era totalmente desconocida para ellos. - Don Rafel, ¿ por qué no vamos y llamamos a su amigo, el de la confederación, pa' así estar más seguros y saber ¿ onde queda esa vaina ? Dijo Mamulón - Hombre, pos sí, vamos a aquel teléfono público que esta frente a la iglesia y llamamos Dicho y hecho, ya en San Miguel y mientras se alistaban a partir rumbo a San José, aquellos hombres se dispusieron a iniciar los primeros contactos de su gestión. - Esperate a ver onde traiba el número. ¡ Aja ! , aquí está en este papel, fijate vos Justino que tenés buena vista cual es, es que yo ya ni veo, menos esa letra tan chiquitilla, ¡ qué desgracia llegar uno a viejo ! - Traé pa' ver, humm, es el ..., dame y te marco mejor - Qué pasó , no contestan ? - Buenos días, Confederación de... para servirle; - Un momentito por favor, tomá ya contestaron, pregunta por tu amigo - Aló ¿ con quién hablo ? ¿ es la Confederación de ... ? - Sí, dígame ¿ qué desea ? - ¿ Está el señor don Manuel ... ? - No aún no ha llegado, viene llegando como a las nueve de la mañana.

- ¿ Quiere dejar algún mensaje ? - Si, hágame el favor de decile que lo llamó Rafael, el papá de Camilo y que más tarde voy a ir a buscalo pa' conversar con él sobre un asuntillo, que si me puede recebir y usté me hace el favor y me da la dirección d'esa oficina pa' poder llegar Aún y cuando no habló con el dirigente, por lo menos ya contaban con la dirección y la esperanza de que al llegar lo encontrarían y así muy dispuestos a continuar el viaje, abordaron el autobús que les conduciría hasta la ciudad. Todo, a su criterio, marchaba bien hasta el momento. A eso de las diez de la mañana, la ciudad se dibujó a los ojos de aquellos hombres y un desasosiego se apoderó de todos. Lo que estaban haciendo, hace menos de un año no lo hubieran imaginado, pero así era la vida. Debían hacer dejación de sus intereses y afectos, para desplazarse hasta la urbe y; neófitos como eran en éstos asuntos, disponerse a buscar la colaboración necesaria a efecto de iniciar la lucha. Ya no podían echarse atrás . El primer paso estaba dado, ahora sólo restaba contar con la colaboración de don Manuel y empezar la siguiente fase del plan. ****************** - Buenos días , ¿ don Manuel está ? - Si, ¿ quién lo busca ? - Dígale por favor que es Rafel, el papá de Camilo, el que llamó temprano - ¡ Ah sí ! don Rafael, yo le di su mensaje y me dijo que apenas usted viniera , le avisara. Espere un momentito que ya se lo llamo - ¡ Hombre, compañero Rafael ! Aunque usted no dijo su apellido, me supuse que era usted, el papa del Comandante Camilo. Viera que alegría me da tener noticias suyas, pero pasen por favor, no se queden ahí, que esta es su casa. Adelante compañeros, por favor y me cuentan que les trae por aquí Instalados en una especie de salón de sesiones y previas las presentaciones del caso, le contaron a don Manuel el motivo de su visita. Este les escuchó atento y a cada momento movía la cabeza, en señal de preocupación. El ya estaba acostumbrado a este tipo de luchas y el caso de éstos campesinos no era novedoso para él y para la Confederación de la cual era su Secretario General. La lucha de "los sin tierra" por gozar del mínimo y sacar el sustento para ellos y sus familias, era ya un mal enquistado en las entrañas de este País. La salvaje explotación, generación tras generación; de los que mucho tienen, a costa de los que tienen que nacer, crecer y morir, siendo peones, era una de las razones fundamentales de la existencia de aquella organización. Por lo tanto, no era novedoso lo que podría sugerirles, ni tampoco le asustaba, que el dueño de aquellas fincas fuera un diputado del partido de gobierno. Con mucha atención terminó de oír a aquellos, quienes intervenían sin ningún orden y como tratando de descargar un pesado fardo de angustias, en aquel hombre que apenas estaban conociendo, pero que les había dado la confianza necesaria para hacerlo. Consideraban que si esta persona tan acostumbrada a estar en éstas luchas no les podía ayudar, pues la verdad sea dicha nadie podría hacerlo, porque por ellos mismos, iba a ser muy difícil. Ni siquiera conocían dónde quedaba la Asamblea, mucho menos el Partido. Esos temores acompañaban a la mayoría y ; gracias a Dios que a don Rafael se le había ocurrido lo de la Confederación, porque de no ser así y una vez en la ciudad, no hubieran sabido para donde coger.

- Todo lo que ustedes me han comunicado es muy serio y eso que yo estoy acostumbrado a andar en éstas lides; es el caso más serio de amenaza de desalojo de campesinos que yo me acuerde en los últimos tiempos, porque como ustedes me cuentan y yo sé, la mayoría de ustedes se han criado en esas fincas y han criado a sus familias. Es decir, son vecinos del Bajo del Alumbre de toda la vida y a pesar de que no son propietarios y siempre han sido peones; en el caso de los que arrendaban, hay muchas posibilidades de lograr ganarle la partida a Félix. Es falso que los contratos verbales de arrendamiento no sirven, de ahí que el contrato que tienen Justino y los otros, vale aquí y en la China, lo único que tienen que presentar, son testigos de esos acuerdos con el papá de Félix. Por ese lado estamos salvados, pero en lo que respecta a los otros peones, que son la mayoría, la cosa se podría poner difícil, si ese señor decide desalojarlos una vez pagadas sus prestaciones legales. Pero ya analizaremos eso con los abogados de la confederación. Por ahora, lo mejor es irnos a almorzar. Vamos, acompáñenme que los voy a invitar con mucho gustoUna mirada de esperanza se cruzaron aquellos cuatro y no era por el almuerzo gratis que estaban a punto de disfrutar. El sacrificio de Camilo , quizás no había sido en vano; había forjado entrañables amistades que ahora, podían ayudar a su padre y a otros como él, a salir del despeñadero. En una sodita cercana de las oficinas aquellas, todos disfrutaron de un " casado " y entre bocado y bocado, salían diversas ideas y comentarios, las cuales eran analizadas con mucha sapiencia por don Manuel, quien presto les externaba sus opiniones al respecto. - Mire don Manuel - intervino Justino - Demos por un caso, que nosotros nos hacemos los gatos bravos en las fincas y no dejamos que entre Félix a ellas, ¿ qué puede pasar ? - Mirá Justino, eso por ahora, no es lo más recomendable, pensemos más positivamente y esperemos a ver que dice uno de nuestros abogados, que nos va a estar esperando ahora que lleguemos. Por ahora, lo que a mí se me ocurre y para empezar, es que la confederación debe coger el caso de ustedes y pelearle en todos los frentes al propietario y si es del caso, buscar que el I.D.A. expropie parte de esas fincas y se les entregue debidamente parceladas a los campesinos que están ahí asentados. Me parece más justo y una mejor salida; pero para ello debemos dar una buena batalla , tanto legal como política. Ustedes no se preocupen que para eso estamos, ya vinieron a nosotros y eso significa que el asunto sale de sus manos y pasa a las nuestras. Recuerden que estamos en año electoral y al partido de gobierno no le sirve, ni a putas, que éste problema se le convierta en algo grande. Pero tranquilos, déjennos eso a nosotros. Ahora hablamos con el abogado y a ver qué nos dice. Ah, una cosa que es importante, a ninguno le han pagado las prestaciones ¿ verdad ? - No, que va, a ninguno, sólo se limitó a decinos eso, que a algunos les iba a llegar una especie de carta, pa' que desalojaran y después se fue y no supimos nada más. - Excelente, hay que decirle a los demás que no se dejen engañar, que ahora más que nunca deben estar unidos y atendiendo los comunicados que les haremos llegar, tanto yo, como mis compañeros que les van a ir a visitar a la mayor brevedad posible.A todas sus palabras, los cuatro asentían, asentían con la confianza que les da el saberse comprendidos, sobre todo por una persona como aquella, tan acostumbrada a librar ese tipo de batallas y porque, aquello confirmaba que no estaban equivocados al efectuar el viaje hasta la ciudad, para buscar la ayuda y posible solución a su conflicto. - A propósito don Rafael, viera que pena me dio con usted al no poder ir al entierro de Camilo, pero

fíjese que no estaba en el país y ya cuando me avisaron, era tarde. Pero, usted sabe lo que yo le apreciaba y de ahora en adelante y si algo puedo hacer por usted y compañeros, será en honor a mi amistad con su hijo. Fuimos como hermanos - Sí, eso lo sé y no sabe cuanto le agradezco que tenga buenos pensamientos para mi hijo, la verdá es que él compartió más momentos de su vida adulta con ustedes y en las vainas en que andaba, que con nosotros, pero bueno, así es el mundo. Yo ya asimilé que los hijos uno los cría, pero sin saber en qué van a parar, ni mucho menos onde. - Por lo menos no me paró en delincuente... y; ya ve, gracias a eso, usté nos va a ayudar, que eso es mucho y la verdá, se lo voy a agradecer mientras viva y no sólo yo, sino toda mi gente - Para eso estamos don Rafael, cuente con ello La media cuadra que les separaba de las oficinas de la Confederación, sirvió para terminar de digerir el alimento y cada quien, sumido en sus pensamientos se regocijaba de la buena dicha que habían tenido al encontrarse con un hombre como aquel. La verdad, pensaban, todavía había gente en quien confiar y " la ciudad no se los comería”, como se dejaron decir algunos pesimistas del pueblo. - Quiubo Otto, ¿ Cómo te fue en aquel asunto ? - Vieras que bien, ya casi está a punto - Mirá, éstos compañeros son campesinos del Bajo del Alumbre, de San Miguel y éste señor...- dijo abrazando a Rafael, - éste señor es ni más ni menos que el papá del Comandante Camilo, ¿ qué te parece ? - ¡ Mucho gusto señores ! Estoy para servirles, yo fui muy amigo de Camilo, y bastantes batallas dimos juntos. Era un señor y un militante muy disciplinado... Después de poner en autos al abogado y pedir su consejo legal, éste meditó profundamente antes de externar su opinión. Como había dicho don Manuel, este tipo de casos era " el pan nuestro de cada día” y la verdad, tenía más cosas a favor que en contra, como para lograr su solución, acorde con las pretensiones de sus "clientes”. El hecho de ser tierras de un diputado, el estar en "año electoral" y el contar algunos con contrato verbal de arrendamiento, hacían del conflicto algo negociable. - ¿ Cuánto hace que murió el papá de Félix ? - Preguntó el abogado y agregó : - Porque si no dejó testamento, mientras se lleva a cabo el juicio sucesorio, él no puede disponer de las cosas así nomás, aparte de eso, estando la mamá viva, la heredera principal sería ella, si no dejó testamento, repito. Así que como ven, el diputadito de mierda éste, no las tiene todas consigo. Más aún, una vez que se dé cuenta, de que ustedes han acudido a nosotros, se andará con pies de plomo, porque ya varios asuntos le hemos ganado a éste gobierno y han sido más difíciles que éste. Así las cosas, lo primero que necesito y eso ustedes me lo van a tener que hacer, es un censo de los habitantes de esas fincas, con sus respectivas familias, años de residir ahí y tiempo de laborar para el mismo patrón, salarios que les paga, quienes son los arrendatarios y; cualquier otro detalle que ustedes consideren de interés. Esto me lo tienen que tener listo antes de las elecciones, ojalá en los primeros días de enero. ¿ Está bien ?. Yo les voy a ir a visitar el próximo fin de semana. - ¡ Ah ! otra cosa, aparte de eso que les dije, va a ser necesario que alguno de ustedes sea el contacto entre la comunidad y nosotros, alguien a quien podamos contactar fácilmente,

para que se encargue de instruir a los demás compañeros de las fincas. Estamos en diciembre, casi es veinticuatro y hay que apurarse, sobre todo porque la Asamblea Legislativa, esos vagos, decretan receso de fin y principio de año. El tanate hay que hacérselo en éstos días , para agriarle la fiesta a éste cabrón. ¿Quien de ustedes se ofrece? - Díay pues yo, si nadie quiere; yo me ofrezco a ser su contacto - dijo Justino levantando su mano izquierda y cerrando el puño. -¡Excelente ! ¿ Cual es tu nombre completo ? - Justino Rafael Mora Porras, pa' servile - Bien Justino, usted se va a encargar de mantener informada a toda su gente y es a usted a quien vamos a ir a buscar cada vez que vayamos al Alumbre, además, va a tener que venir de vez en cuando a San José, para recibir algún tipo de instrucción, sobre todo en lo que respecta a luchas campesinas y algo de legislación relacionada con éste asunto. Usted no se preocupe que los temas son desarrollados de la forma más sencilla, para que no tengan problemas para prepararse y así usted pueda instruir a los demás compañeros. Al rato se nos convierte usted, en un líder campesino, de los que estamos urgidos. ¿ 0. K. ? - Está bien licenciao, pero me preocupa una cosa. Usté bien debe saber que nosotros no tenemos recursos pa' estar viniendo a San José a cada rato y si tengo que venir más a menudo, diay de seguro no voy a poder, menos ora que no estamos recibiendo sueldo del patrón - No se preocupe por eso, compañero, que todos los gastos corren por cuenta de la Confederación - Ora sí nos entendimos, usté me dice cuándo y onde - ¡ Eso !, Esta es la gente que a mí me gusta - Otra cosa y que usté no nos ha dicho y... pos la verdá a mí me preocupa, costar esto ? -

¿Cuánto nos va a

- ¡ Por favor ! , mire compañero, este tipo de batallas las damos a cada rato y si cobráramos por ellas, pues a lo mejor seríamos millonarios. Muchos obreros, campesinos e intelectuales, contribuyen generosamente con ésta confederación, precisamente para que se forme un fondo, con el cual nos permitimos ayudar a personas como ustedes, que son miles y miles a lo largo y ancho del País. Así que, por favor, por eso no se preocupen. Todas esas personas solidarias, se encargarán de costear su lucha por la dignidad y el respeto que nos merecen quienes trabajan la tierra, para sus amos explotadores y sin esperanza de contar con su parcela Tengan paciencia, la lucha apenas empieza. Ya Justino les irá instruyendo poco a poco de cada uno de los pasos que iremos dando. Lo primero y para que estén tranquilos, es que le vamos a comunicar a Félix, que el caso de ustedes lo estamos manejando nosotros. Ya con eso, va a pensar un poco más cualquier acción futura. - Bien compañeros, ¿ qué les parece ? ¿ Están ahora más tranquilos - Expresó don Manuel, con una larga y sincera sonrisa. - Bueno pos sí, yo creo que fue lo mejor que podíamos haber hecho y gracias a que se me encendió el bombillo y me acordé de la amistá que tenía Camilo con usté, sino ¿ Qué juéramos hecho ? ¡ Válgame Dios

!- Para eso estamos, para ayudarnos en las buenas y en las malas. Ah, otra cosa, ya son casi las seis. ¿ ustedes no van a irse para el pueblo ahora ? - Pos no don Manuel, pensamos ir a buscar un hotelito o una pensión baratica pa' pasar la noche y salir bien temprano pa'l Bajo - ¡ Qué hotel, ni que ocho cuartos ! Ustedes se quedan aquí esta noche. Aquí hay varias cuartos, baño y todo lo que necesiten. ¡ Cómo van a ir a gastar ! No señores, se me quedan aquí, que la Confederaci6n cubre su estadía. Ahora, vamos a comer para que se acuesten bien llenitos Con mirada incrédula, se volvieron a ver unos a otros, no sabían si echarse a llorar o reír, estaban recobrando la fe en la gente de la ciudad y los mitos se estaban cayendo, por el peso de la bondad de aquellos hombres de la Confederación. Si todo marchaba bien, lograrían su objetivo y en menos de un día. Algo increíble, si apenas hacía dos días estaban desesperados y sin saber ¿ dónde acudir? Cerca, muy cerca, había una iglesia y después de la cena fueron los cuatro a dar gracias al Creador, por los favores concedidos, no era para menos. Ellos habían empezado la lucha, no se habían " agachado” ante la adversidad y Dios les estaba premiando su esfuerzo. Lo menos que podían hacer era agradecerle . En el pueblo no tendrían oportunidad de entrar en un lugar de alabanza. Cerca de ahí había una iglesia y hacia ella se dirigieron. Los recuerdos de la familia allá en el Bajo, les acompañaron en el resto de la noche, hasta que apesadumbrados por el cansancio de la agotadora jornada, cada quien cayó en profundo y reparador sueño. A la mañana siguiente, deberían emprender el retorno al pueblo y las buenas noticias que llevarían, de seguro agradarían a todos. *************

DIGNIDAD... DIVINO TESORO Una cosa era cierta, les había ido muy bien y gracias a la idea de ponerse en contacto con la Confederación, mas sin embargo reinaba en Justino un sinsabor y una cierta desconfianza, hacia quienes le hacían las cosas tan fáciles, sobre todo a él, acostumbrado como estaba, a labrarse su propio destino. La verdad, pensaba, las cosas regaladas no tenían el mismo sabor que las que se conseguían con el esfuerzo propio o comunal. El regreso al Bajo se vio acompañado de toda clase de comentarios, sobre los pros y contras de su gestión y sobre lo que se avecinaba. El País estaba en efervescencia político-electoral y como siempre, como había sido la constante en los últimos tiempos, Liberación Nacional se enfrentaría a una oposición ya no tan dividida como había sido la costumbre o conveniencia, ello gracias a la tarea de Carazo, que tras muchas luchas logró la consolidación del nuevo Partido Unidad, de un corte socialcristiano, el cual no ocultaba su fragilidad, dado el cúmulo de fuerzas, pensamientos y ambicionesque lo integraban y con el cual ganó las elecciones en mil novecientos setenta y ocho.

Lo que pasó después, de todos es sabido, él fue traicionado por aquellos que le " pelaron el diente” y porque no claudicó en su lucha por la dignidad nacional y por el respeto a la soberanía. Al final, los "liberales" se apoderaron del Partido y él se aisló por su propio gusto de la vida política. No consideró decente, seguir dando luchas a la par de un grupo de mercenarios de la política. El no era de esos. - Sabés una cosa Justino, vos sabes que a mí me gustaba más la otra bandera de la Unidá, la celeste aquella, con la que don Rodrigo ganó las elecciones, ¡ qué lástima que la cambiaran por esas ! Aquella me parecía como más pura , como más limpia, no sé... - comentó Angel al observar desde el autobús la sinfonía multicolor de los techos de la ciudad, embanderados. - Pos sí, tenés razón. Es que aquellas ¿ eran celestes y blanco, verdá ? y por supuesto se veían más puras, que esas otras. Aparte d'eso, según he oído, la gestión de don Rodrigo no fue tan mala como nos la pintan, sino que por el contrario, fue de amplia defensa de la dignidad nacional y de nuestra soberanía. Además, recuerden lo que nos contó el comandante aquel, que vino al entierro de Camilo; Carazo se opuso a los designios de la administración Reagan, por lo del atún y la pesca ilegal y defendió como nadie, nuestra riqueza marítima y no sólo eso, no se acuerdan cuando echó con to'y valijas a los del Fondo, enfrentándose en esa entonces con los ricachones de éste país, que siempre le han hecho el juego a los gringos y se lo hicieron a Somoza, porque eran sus socios y amigos Los pasajeros del bus, suspendieron su modorra y prestaron atención a lo que aquel decía y con gestos de aprobación le instaron para que continuara. - A mí no se me olvida de la ayuda que le prestó nuestro gobierno a los sandinistas y por sobre todo, en defensa de nuestra propia Patria y eso nunca se lo perdonarán aquellos que jueron partícipes de más de un negocio oscuro o no, con los gringos o con Somoza. Recuérdense de aquel viejo, el del corbatín, ¿ Cómo era que se llamaba ? ¡ Ah sí ! Barahona; que andaba haciendo un grupo de ex presidentes, pa' que tomaran el poder una vez que don Rodrigo se juera pa' la calle, porque ya daban por un hecho que se iría. Al final , la venada les salió careta y eso que contaron con la ayuda de la prensa d'éste país que no se cansó de atacalo y de declaralo incapaz. ¿ Se recuerdan ? Claro, por eso es que una vez que el Macho dejó la presidencia, le cambiaron el color a la bandera, como si eso juera todo. Lo que tenían que habese cambiado era de güevos, que a don Rodrigo le sobraban - Callate Justino, que nos van a bajar de la cazadora - le suplicó Rafael - No que va, si la mayoría de la gente que aquí va, sabe de eso, lo que pasa es que pocas veces se comenta, pa' no ir en contra de lo que piensa y dice la prensa y más bien tratan de echale tierra, como si nada hubiera pasao. Eso es muy de nosotros, que nunca hablamos y creemos todo lo que nos dicen en la prensa, como si juera la santa verdá, pero como todos sabemos, pa' verdades el tiempo y entre cielo y tierra, no hay nada oculto...El camino de San Fermín, de lastre que se levanta con el viento diciembrino y pinta de cano al viajante, serpentea por entre las montañas del sur de País, a pesar de que es corto, se hace eterno por su mal estado y porque el bus en el que viajan, es ya un modelo de colección. Nunca nadie se ha preocupado por exigirle al "empresario" que renueve aquella vieja "cazadora", que hace aquel trayecto dos veces al día y eso cuando está en buenas condiciones, porque cuando no, simplemente suspende el servicio, sin embargo, el precio que cobra es casi igual que el que se cobra de San Miguel a San José. Así está establecido por el ministerio del ramo, según el cuadro de tarifas, acorde con las pretensiones de los empresarios que se emite una o dos veces al año y eso que también, algunas veces se les subsidia.

Nunca se toma en cuenta las pretensiones del usuario y se exige la renovación de la "flotilla", antes de asignar el incremento y las revisiones a que son sometidos los autobuses, como todos sabemos, son "choriceadas", mediante el pago de la consabida propina a los responsables de efectuarlas. Eso el pueblo lo sabe y lo " apechuga”, algún día, quizás se lo reclamará a los empresarios y gobernantes. Unas cuantas bolsas de delicias de San José y una que otra cosilla comprada a la carrera en los alrededores del Mercado Central, eran los tesoros que cada quien transportaba en bolsas de papel, conocidas como de "manigueta" o en un saco de manta nueva, que posteriormente serviría para hacer sábanas o fundas. La ilusión de volver a sus familias, hacia del viaje de San Fermín hasta el Bajo, una travesía turística, ya que a pie, podían admirar a su antojo las diferentes tonalidades de verde que se dibujaban a la vera del camino y en las montañas que cercaban a su pueblo, pueblo en el que habían pasado sus existencias pobremente pero dignos; remendados pero limpios. Ahora, alguien quería que aquello no siguiera transcurriendo así y para ello se habían atrevido a ir hasta la ciudad. Eran los abanderados de la dignidad de los campesinos que habitaban el Bajo del Alumbre.- ¡ Papi, papito, Juustino ! - ¡ Flor, Florcita, Pedrito, qué alegría me da velos ! Me parece que hace un montón de tiempo que no los veo. ¿ Cómo se han portado mis chiquitos ? Y a vos Flor, ¿ como te jue solita ? - Ay bien Justino, lo único es que nos hiciste mucha falta, no sabés cuanto y... eso que jue un sólo día. Yo no sabía que venías hoy, si no le juera alistao algo rico - ¡ Ay muchacha ! , cualquier cosa que me des, aunque sea un poco de frijoles con leche agria y tortillas En un santiamén estaba en la mesa un plato de arroz, frijoles, leche, huevos picados y una canasta de tortillas, lo que aquel engulló con voraz apetito y mientras le contaba a su esposa de lo bien, a su entender, que les había resultado todo. Lo que sí le dejó boquiabierta, fue cuando le dijo los de los viajes a la ciudad de vez en cuando, para capacitarse, según lo que le había solicitado Otto el abogado, ya que no era de la idea de estar en constantes separaciones. La realidad es que siempre y desde que se conocieron, habían sido el uno para el otro y sentía terror de que en esos " ires y venires” le fuera a pasar algo a esa linda relación de pareja que habían cultivado, hasta la fecha. Ni los problemas que habían enfrentado, ni las necesidades que habían pasado, habían hecho mella en esa perfecta unión de hecho. - ¡ Ay Justino ! Vuelvo yo con las mismas pa' que me regañe usté, pero ¿ porqué tiene que ser usté el que siempre está metido en todo ? ¿ Qué's que los otros pailetas no tienen lengua pa' decir las cosas ? Ya se los dije ayer a mis hermanillos, que sólo usté es el que siempre tiene que andar sacando la cara por todos... - No, no te voy a regañar, tenés mucha razón mi vida; pero, tenés que entender que y como te lo dije el otro día, que siempre debe haber en todo movimiento un líder y usté bien sabe que yo siempre he servido pa' eso y; si puedo aprender algunas cosas que me puedan servir pa'l futuro, ¿ porqué no voy a ir a capacitame ? Decime mujer, ¿Por qué no ? A ver decime. Usté bien sabe las ganas que siempre he tenido de aprender un poco más, de saber más de la vida, de la política, conocer más de éste país y de sus problemas, que son los de nosotros. Recordá todo lo que aprendimos de los amigos de Camilo aquella vez que vinieron, tantas cosas que uno ignora. Bueno, pues ésta es mi oportunidad de saber un poco más y fijate que no nos van a cobrar nada por lo del pleito con Felicillo y nos dieron alimentación y dormida gratis.

¿ Cómo decime, cómo voy a ser tan mal agradecido pa' deciles que no voy a lo de la capacitación esa, si hasta los pases me van a dar ? ¿ Ah ? A todo aquello que Justino le decía, Flor asentía. En el fondo le daba la razón, ella se sentía orgullosa de él, más sin embargo el terror que le daba, de que le fuera a pasar algo o se viera metido en algún problema legal, le hacia exteriorizar sus pensamientos. Era su Justino y lo apoyaría en todo momento, al fin y al cabo, hombre tan responsable y sin vicios como aquel, no había otro en el pueblo. Lo amaba. - Está bien Justino, está bien, usté sabe lo que hace y si es pa'l bien de todos nosotros, pos que Dios me lo acompañe y... ya dejo de fregalo con mis tonteras - Así me gusta, que me entendás, no ves que yo todo lo hago por ustedes, pa' que'l día de mañana puedan andar con la frente bien en alto y no sumisos ante un patrón y con el temor de que los eche. Bueno, ora veamos ¿ qué traje por aquí... Tomó el saco de manta y dos bolsas que venían muy bien amarradas, por lo que los güilas no pudieron abrirlas y empezó a repartir a cada quien lo que les había traído. Los dulces, por supuesto, fueron lo que más gracia hizo a los chiquitillos y un paquete de peinetas de varios colores y estilos, hizo maravillas con el carácter de Flor, amén de otras cosillas por ahí, que logró comprar a la carrera y las cuales guardó con celo, para que escaparan a las miradas de los niños, previo un guiño de ojos a Flor. Del saco salió pan, salchichón, harina y un sinnúmero de artículos que en el Bajo se hacia difícil conseguir y que Toño, muy de cuando en vez ofrecía. Alguna ropa complementó la sorpresa de la llegada. Los siguientes días fueron de mucha efervescencia en El Bajo, por cuanto debían cumplir con la tarea encomendada por la Confederación, de efectuar el censo y los demás datos requeridos. El pueblo entero estaba exaltado, los niños, las mujeres y los hombres tenían bastante que comentar, la gestión de sus vecinos y amigos la veían con muy buenos ojos, aún los pesimistas, que decían que la ciudad se comería a aquellos "polos" y; con la visita el siguiente fin de semana de tres miembros de la organización, creció la expectación. Se reunieron con Justino y otros que se arrimaron al ver el jeep llegar hasta la pulpería y les informaron de las gestiones preliminares que habían efectuado. Comentaron que ya Félix sabía de la participación de ellos en la búsqueda de soluciones al conflicto y según les comunicaron, había tenido un arranque de histeria, amenazándolos con meterlos a la cárcel por usurpadores. Que otros diputados le habían calmado, haciéndole ver que lo mejor era dialogar y de verdad, buscar un arreglo, porque la cosa se le podía poner fea y quien quita, hasta las fincas perder. Que estaban en plena campaña política y que al partido no le servía un escándalo de esos y que sólo así, había accedido a hablar con ellos. Que aparte de eso, una de las ofertas que el candidato andaba haciendo en plaza pública, en cuenta en San Miguel, era la de dotar de parcelas al mayor número de campesinos que no las tuvieran, para que éste País se enrrumbara al siglo veintiuno, en paz y armonía y que era mejor tender puentes de entendimiento que barreras al diálogo y que si él hacía algo alocado y el candidato se enteraba, podría perjudicarle. Siendo informado de sus gestiones, la tarea de Justino sería la de comunicarle a todos los habitantes del Bajo, que no se dejaran impresionar por Félix , si acaso llegaba por ahí, cosa que dudaban, pero por si acaso; que ellos creían que iba a llegar a ofrecer el pago de prestaciones o alguna solución alternativa al conflicto, pero que no le aceptaran nada, si antes no lo aprobaban ellos. Que por otra parte, tuvieran mucho cuidado con provocaciones y otras manifestaciones que él o cualquiera otro pudiera llegar a hacerles. Que ni siquiera discutieran con él. ***

- Mirá Flor, la Navidad éste año sí que va a estar un poco pobre, pero diay, ¿ qué le vamos a hacer ? Por dicha que con la platilla de los últimos frijoles, compré aquella ropa y los cuatro juguetillos pa' los güilas, sino el Niño no les hubiera traído nada. Aparte d'eso, en la Confederación como que oí que estaban haciendo una lista pa' regálanos juguetes a los que tenemos güilas. Ya eso es algo y ahí salimos del paso; por lo menos pa' que sientan que'l Niño vino. Pobrecitos, es su ilusión. Ahí con la ropilla vos y yo nos la jugamos y pa' los tamales, no nos faltará; ya el negro está bien gordo y nada más dale el golpe de gracia en la pura frente - Vea Justino, los estrenos, los juguetes bonitos y la buena comida, no me importan, lo que sí me importa es usté, que se sienta bien, que sienta que lo que está haciendo está bien hecho y que si algún día logramos tener nuestro pedacito propio, será el lugar más lindo y mejor trabajao de todo el Bajo , porque va a ser regao con gotitas de simiente y semillas de amor y de ilusión. Será un lugar donde las plantas darán flores de sonrisas y los pájaros tomarán su néctar y esparcirán por todo el mundo, lo que será la nueva vida... - ¡ Ay carajo ! Si hasta se m'hizo pueta la mujer. ¡ Qué lindo eso que dijo mi amor ! y; sabés una cosa, ese es mi sueño. Sueño con un lugar onde los chiquillos puedan correr libremente, sabiéndose en su tierra y que el día de mañana, ni usté ni ellos tengan que agachar la cabeza ante la presencia de un patrón, porque serán igualmente dignos de pisar ésta tierra, que Dios nos ha dado pa' que nos jodamos y pa' que al final podamos obtener de ella sus frutos, tierra bendita esta. .-.

¡ YA ESTE PUEBLO NO COME CUENTO ! Pasaron las semanas y vinieron las elecciones, del Bajo del Alumbre muy poca gente fue a San Fermín a votar, si acaso, " contados con la mano”, como dijo Justino, fueron unos cuantos votantes, la demás gente, que siempre había apoyado al partido de Félix y por el cariño hacia su padre, prefirió quedarse en sus casas o en los alrededores de la pulpería de Toño, observando como algunos personeros en vehículos de los partidos mayoritarios y con listas en mano, trataban de convencerles para que fueran a depositar su voto. El pueblo entero dio un no rotundo a una manipulación más y hay quienes dicen que quienes fueron a "votar", todos de la familia de Miguelillo, lo hicieron por miedo a que Félix se enterara y echara a su hijo, del cuido de la casona de sus padres y alrededores, pero que habían ido a San Fermín a ver los toros de cerca y no habían votado. Bueno, eso dijeron. 0 sea, cosa curiosa; un pueblo entero, con casi cien votantes inscritos, había decidido ponerle " un hasta aquí”, a las promesas falsas de cada cuatro años y por el contrario, se aprestaba a dar una lucha por la reivindicación de sus derechos. Los discursos gastados y demagógicos no les habían convencido. Justino, Flor y los " güilas”, eran de los que estaban en la pulpería viendo los infructuosos esfuerzos de los guías y fiscales de los partidos, para granjearse el voto de los insurrectos, pero nada de lo que aquellos dijeran , les haría cambiar de parecer. - No es que uno está contra el sistema, la verdá es que en pocos países en el mundo se pueden dar este lujo, de hacer elecciones libres cada cuatro años , pero es importante y esto va pa' ustedes juemialmas dijo Justino dirigiéndose a un grupo de jóvenes que hacían bromas encima de los sacos de frijol y maíz del negocio. - Pongan atención... es cierto que somos privilegiados, pero es bueno que nos demos cuenta de una vez por todas que ésta gente de los partidos mayoritarios, le ofrecen a uno el oro y el moro y al final, cuando

lo tienen ensartado, ni se acuerdan de sus promesas. Es por eso, que me gusta que se les haga el dedo una teta, pitándole a uno pa' que se encarame en los carros y no ven, hasta sanguches y frescos ofrecen pa' que uno vaya y caiga de maje otra vez. Gracias a Dios que aquí la gente está bien despierta y que lo que Félix ha querio hacenos nos ha abierto los ojos y vean, ¿ cuándo nos imaginamos que no íbamos a ir a votar ? Pos, hoy es el día de dignidá en El Bajo del Alumbre y lo que aquí está pasando, se va a saber en San José, ya lo verán y eso nos va a ayudar, pa' que entiendan del porqué estamos protestando. - Diay Justino, pero si no vanos a votar, más bien no estamos perdiendo la oportunidá de poner en el poder a otros, que tal vez sí tengan mejores ideas - dijo uno de aquellos . - Sí, es cierto, pero hay una cosa que hay que entender y es que los dos partidos mayoritarios no tienen nada que ofrecer. Su discurso es el mismo y sus dirigentes se joden el coco inventando con qué lo engañan a uno cada cuatro años y cuidado y si no, que en muchos pueblos podría estar pasando lo mismo que aquí - Pos sí, tenés razón, pero juera estado bonito habese montado en un chunche d'esos pa'ir a pasiar a San Fermín - Vieras que eso lo hace mucha gente, por eso es que las campañas políticas son tan caras y eso que las pagamos nosotros, no crean que es de la bolsa de los partidos que sale ese platal, no que va; lo que llaman la deuda política por adelantao es eso, que a cada partido le dan un dineral de acuerdo con los votos que logre sacar en la elección anterior y es así como se financian, con plata de todos nosotros. Hay gente, les decía, que por ejemplo son de Puntarenas y se vienen a vivir y a trabajar a este Bajo y no hacen el traslado electoral, que llaman, sino que se esperan hasta el día de las elecciones pa' que'l partido, cualquiera que sea, los mande al pueblo de onde son a votar y eso, como ustedes saben cuesta mucho. Por otra parte y pa' que vayamos aprendiendo todos, de lo que me están enseñando en la escuela de capacitación, onde voy los fines de semana, es que ninguno de los señores que se meten a candidatos, pone un cinco pa' la campaña política, lo que hacen es una inversión, o sea que prestan plata y a cambio d'eso reciben lo que se llaman bonos de deuda política y una vez que'l gobierno les paga a los partidos, de acuerdo con el número de votos, ellos recobran aquella plata que pusieron y con intereses. 0 sea, que aparte de que tienen la posibilidá de resultar electos en algún cargo, ganan intereses por la plata que prestan o que consiguen a nombre del partido que representan. ¿ No les parece que es una alcagüetería ? Nosotros pagamos todo eso, hasta la gasolina de esos chunches en los que vos querés ir a pasiar a San Fermín, babiecas... - Juepucha Justino, no sabía eso y ¿ vos sabes ?, yo creía que sólo los ricos podían ser candidatos a algo, como Felicillo aquí y que un limpio como nosotros jamás podría hacése diputado o presidente, pero así como vos la estás pintando, me doy cuenta que cualquiera con padrinos de los altos, puede llegar hasta presidente si es del caso. Sólo tiene que conseguise un poco de plata prestada, de por sí, después se la devuelven y con intereses, como vos decís - Así es, la historia de nuestro país, está llena de gente así, gente que consiguió el apoyo de algunos ricachones y otros no tanto, pero que administran platas medias raras y se trepan como diputados en la Asamblea o hasta presidente como vos decís, claro, únicamente pa' representar los intereses de aquellos que lo llevaron hasta allá. Si los defrauda, hasta ahí se la prestó Dios, porque lo desconocen y naide se vuelve a acordar de ellos. Otra cosa, hay gente muy valiosa en los pueblos y a quienes ponen de candidatos a diputados, pero los ponen casi de últimos en las listas, así los votantes los ven y votan por aquella papeleta, creyendo que están votando por aquel hijo de Dios, lo que menos saben es que su nombre aparece ahí, por puro relleno, porque nunca va a salir electo. Es el señuelo pa' que nosotros los tontos votemos por aquella papeleta. Todos esos trucos nos hacen, sino ¿ cómo creen ustedes que siempre son los mismos desgraciados

los que se reparten los puestos, con rarísimas excepciones ? ¿ Ah ? ¿ No se han dado cuenta ? Si hasta aburren, siempre son los mismos, sino están de diputados, están de presidentes o de ministros o en las instituciones autónomas o de embajadores o diplomáticos en último caso o de lo que caiga y así son sus familiares, pero siempre se agarran de una buena teta - Diay Justino y ¿ los que se meten en los bancos ? - Ah, eso es otra cosa, no contaba con los que se meten en los bancos como directivos, ahí si que se sacan la lotería porque según me cuentan en la confederación, con cada préstamo o sobregiro que ayudan a conseguir o a autorizar, pellizcan sus buenas comisiones - Mirá lo que es la vida y yo que me preguntaba que ¿ qué tenía que hacer más de un ganadero o agricultor, dueño de fábricas y más de uno, en las Juntas directivas de bancos, si tal vez no sabían nada de esas cosas ?, pero ora como vos lo estás pintando, ya veo por onde anda la procesión. Claro , es un negocio más y muy productivo, porque no arriesgan nada de sus platas - dijo Toño. - Pos claro hombre, mirá si eso ha sido siempre el botín de guerra de más de uno y eso desde que se nacionalizó la banca en éste país; fijate que, dice uno de los profesores que me dan las charlas, que las juntas directivas fueron planeadas pa' que cuatro integrantes jueran del partido en el poder y los otros tres del mayor partido de oposición, pa' hacer un total de siete, esto con el afán de que los negocios quedaran siempre bien repartidos y naide reclamara y que ello jue aprobado por ley de la Asamblea. ¿ Cómo lo ves ? - Jueputa Justino, eso quiere decir que siempre son ellos los que van a manejar el crédito y lo van a dejar a uno sin posibilidá de conseguir alguna platilla, porque diay, hay que ser amigo de ellos pa' logralo, bueno, así lo entiendo, entonces, siempre van a ser los mismos los que se llevan todo el crédito. Con razón nunca tienen plata pa' prestar, si se la llevan todos los políticos y sus amigos y de seguro nunca pagan - Pos claro, por eso es que esos puestos se los pelean, vos no ves a ningún empresario o terrateniente, que ponga su propia plata a trabajar, siempre lo hacen con la plata de los bancos y si les va mal, pos es a los bancos a quien les va mal, porque es con la plata de nosotros que trabajan, porque el Banco Central que es el banco madre, por decilo de alguna forma, siempre está dispuesto a sacalos de apuros cuando presentan problemas de liquidez, que llaman y ha habido más de un banco, d'esos que llaman estatales, que ha estado a punto de quebrar, pero como son del Estado, el Banco Central los salva. No ves que hay más de un vivillo que sólo pedile y pediles préstamos y no los pagan, con el cuento de que las cosechas están malas o que la lluvia o el viento se le cagó en todo o que los precios del ganao o el café están muy malos en el exterior y con ese montón de inventos, nunca pagan sus cuentas o bien consiguen que se las readecuen, les bajen los intereses o hasta se las perdonen; la cosa es que sus platas, las que verdaderamente son de ellos, ni siquiera las tienen en el país, las tienen en bancos más seguros de otros lados; por eso es que uno los ve en los bancos todo el tiempo y no es que están guardando plata, por el contrario están sacando la plata que podría servinos a vos o a mí, pa' trabajar más holgadamente o pa' comprar un pedacillo y ponelo a trabajar como Dios manda. Por eso es que los ricos en éste país cada vez son menos y los pobres aumentamos. Los que trabajamos honradamente y sin patas que nos ayuden, si nos va mal, nos lleva el diablo y naide nos dice ¿ qué haces ahí ?, en cambio ellos no hayan que inventar pa' que les reconozcan las pérdidas, si no ve esa ley que se recetaron en el ochenta y tres que se llama de contingencias agrícolas, acordate de mí , que eso se va a prestar pa' un montón de cochinadas - ¡ Ah bárbaros ! con razón de pelean como perros los puestos en política y uno que creiba que era pa' servir al pueblo- No Jacinto, la cosa es como te la estoy contando, por eso es que éste pueblo no levanta cabeza, si es que hay un montón de sinvergüenzas que han hecho de la política su forma de buen vivir y si no están aquí, mañana están allá, pero siempre caen parados o bien se esperan cuatro añitos pa' volver a mamar la

teta y oiganme, ¡ qué tetas las que agarran !, si hasta se asombra uno de lo que pueden ganar en cuatro años. El que menos piensa uno, está metido en el chorizo que llaman - En esas conversaciones y " dimes que te diretes” les dieron las seis en la pulpería y en el momento en que en el televisor que Toño ponía a disposición de la clientela, el presidente del Tribunal Supremo de Elecciones declaraba cerrada la recepción de votos. Del Bajo del Alumbre fueron contados con la mano, como dijo Justino, los que fueron a San Fermín . No hubo banderas, salvo algunas que los encargados de signos externos del partido de Félix, le pegaron en los árboles de los alrededores de la casa, en síntesis, no hubo participación. La jornada sirvió para acentuar aun más el espíritu combativo de la comunidad y para ilustrarse, gracias a las enseñanzas de Justino, de algunas cosas que nuestro pueblo no maneja y si algunas las ha conocido, las ha olvidado. " Nuestro pueblo tiene flaca memoria”. Eso dicen. Los días pasaron, el partido en el gobierno había ganado las elecciones y por ende Felicillo " volvería a caer parado" y la lucha se pondría un tanto difícil , porque se especulaba que el exdiputado a partir del primero de mayo, iría a otro puesto de importancia y ya, con más o igual poder, podría dificultarles las gestiones emprendidas. Los amigos de la confederación le habían manifestado a Justino que les dijera a los demás, que la llevaran suave y que no se asustaran, que esperaran hasta mayo para ver que hacía el propietario, que por lo pronto harían contactos con el posible presidente ejecutivo del I.D.A., para ver la posibilidad de expropiar las fincas o parte de ellas, ojalá con el acuerdo de Félix y así, dotar a todos del sueño de sus vidas: una parcela propia en donde labrar sus anhelos y esperanzas, un terreno en el que darían rienda suelta a su ímpetu de luchadores universales por la existencia. Pero, había que esperar. Su caso, a su criterio, estaba siendo muy bien llevado por Otto, confiaban plenamente en él y en lo que representaba. La capacitación que recibía Justino los fines de semana, le estaba abriendo los ojos a una serie de cosas de la política , la cultura y la historia patria, que totalmente desconocía. Comentaban los instructores de la confederación, que alumno tan brillante y claro para expresarse y comprender, hacía tiempo no tenían, captaba todo a la perfección y su capacidad analítica y crítica, le hacían sobresalir por sobre los demás obreros y campesinos que estaban recibiendo instrucción. Pasaban los meses y el cambio en su personalidad era notable, mejoraba hasta su expresión y a veces discutía con los instructores, por cuestiones de punto de vista de la real situación del campesinado en Costa Rica. A no dudarlo, éste Justino Rafael Mora Porras, poseía todas las características de líder, del cual estaban ayunos en el agro costarricense y desde ya se hacían planes para capacitarlo aún más y convertirlo en adalid de las luchas campesinas a lo largo y ancho del territorio nacional. Pero, no contaban con que su intención era la de capacitarse, está bien, pero capacitarse para hacer de su comunidad y por ende de su familia, gente no sumisa y por el contrario muy luchadora, pero respetuosa del ordenamiento.

Se capacitaba para dar batallas en el campo de la legalidad y jamás en cualquier otro, como en algún momento se lo habían insinuado. Creía firmemente en el diálogo y en la capacidad del costarricense para

ponerse de acuerdo. " Las cosas habladas son entendidas”, decía y no por lograr que siempre se le diera la razón, debería tomar otra actitud. Era un hombre bondadoso que se hacía respetar y respetaba a sus adversarios, jamás nunca insultar, si antes no lo era él, jamás irse a las vías de hecho, antes de agotar las de derecho. Esa fue la fisonomía que adoptó y perfeccionó en los cursos y siendo de una personalidad tan definida, no hubo manera de convencerlo para que se dedicara a lo que la organización quería. Su primer objetivo, el básico, era obtener una solución satisfactoria a sus pretensiones en El Bajo del Alumbre, una vez cumplido eso, podría hablar de otras cosas. El sacrificio de dejar a su familia durante tantos fines de se mana, no debería ser en vano y jamás, claudicaría en sus pretensiones.

LA MANO DE DIOS... Félix, de diputado pasó a director bancario, aparte de eso continuó ligado en alguna forma a la fracción legislativa de su partido en la Asamblea, como asesor y con ello continuó su carrera política. No perdió vigencia, aunque y según se comentaba, pretendía algo más. El Bajo del Alumbre continuó su lucha, por intermedio de la Confederación y sus habitantes continuaron cultivando la tierra, como si fuera propia. No había amo, no había mandador, pues bien y como se dice, " cuando el gato no está, los ratones hacen fiesta " . Aparentemente, el único contacto que tenía Félix era con Miguelillo, que muy frecuentemente viajaba a la ciudad, pero en los meses previos a la elección y posteriormente a ella, no se volvió a asomar por el Bajo, hasta que allá por setiembre y cuando la cosecha de jocotes estaba en su apogeo y las lluvias en lo mejor, algo cambió la historia. El trapiche estaba paralizado y "la tarea" no se volvió a sacar, los bueyes engordaban en el potrero y muy bien cuidados por Justino, la finca a no dudar lo, siguió trabajándose como si estuviera el " viejo Félix " vivo, sólo que sus frutos los tomaban los pobladores para autoabastecerse, gracias a la semilla y a los otros insumos proporcionados por la Confederación. De alguna forma debían hacer aquellos para mantenerse, mientras se le buscaba solución al diferendo, porque ya no contaban con el sueldo semanal que ganaban con el anterior patrón. La producción de maíz y frijoles era colocada rápidamente en el mercado y con ello podían sobrevivir la época mala. A las fincas se les dio mantenimiento y nunca fueron descuidadas, ¿ cómo si no ? si de ahí dependían todos. Algún ganado que aún se mantenía fue cambiado de " repastos " y se puede decir que las propiedades estaban mejor que antes y hasta lucían más hermosas y verdes, dado el cariño que le ponían sus ocupantes. Una mañana estando Justino en el corredor de la casa y ocupado en aquellas tareas que efectuaba comúnmente para aliviarle la tarea a Flor, observó que por el camino que conduce al alto, una figura harto conocida trataba de llamarle la atención y le hacía señas en plena disposición de saludarle. Era Félix, quien acompañado de Miguelillo, se dirigía hacia su casa y; la verdad sea dicha, una alegría inmensa inundó su ser, es que no le resentía nada y por el contrario, un desasosiego le carcomía desde hacía varios meses las entrañas, por eso, le saludó en la misma forma que aquel lo hacía, levantando su mano y agitándola en señal de bienvenida. El era el legítimo dueño de las fincas y a Justino no le parecía que el asunto estuviera durando tanto, en su conciencia estaba claro que el dueño debía recibir los frutos de las tierras que habían sido de su padre, siempre y cuando, claro está, les respetara a ellos como residentes y arrendatarios de algunas parcelas. Las cosas, tal vez, si se hablaban y en pleno uso de razón, podrían arreglarse.

Ellos habían acudido a la Confederación por la obstinada negativa de Félix en aquel momento, pero pensaba que quizás el tiempo le podía hacer madurar y pensar las cosas con mayor serenidad. Nada se perdería, por ende, si le saludaba y ¿ por qué no ?, conversaba con él, al fin y al cabo, si hasta se habían criado juntos y los rincones de aquellas fincas no tenían secretos para ellos, cuando los habían recorrido en múltiples ocasiones. Comprendía que aquel estaba y pertenecía a otro status, pero eso no le quitaba que siguiera siendo el mismo "Felicillo" que había conocido. - ¡ Diay Justino ! ¿ Cómo estás ? - Diay pos aquí como usté me ve, tirándole a desgranar este puñillo e' maíz, pa' que Flor me haga unas cosposas y a usté ¿ cómo le ha ido ? - Ahí un poco enredadillo, vos sabes que cuando uno se mete en esto de la política, le consume todo el tiempo, a tal punto que casi no me da chance para venir aquí, pero me puse a pensar que debía sacar el rato y bueno, pues de paso venir a saludarlos. -¿Se toma una aguadulce con limón ? - Pues claro hombre, no ves que esa caminadilla, ¿ será por falta de costumbre ?, pero me trae con la lengua afuera - ¡ Flor, vení un momento por favor ! - Sí Justino, ¡ Ah, hola don Félix ! ¿ Cómo está usté ? - Muy bien gracias, Flor - Mamita, haceme el favor y nos traes unos jarros de aguadulce y si querés te llevás éste maíz que está listo, tal vez ellos quieran comese unas cosposas con natilla - Mirá Justino, aparte de saludarte y ver como estaba tu familia, que veo están muy bien y cada día más grandes, yo, la verdad es que... ¿ cómo te lo digo ? La verdad es que quisiera disculparme con todos ustedes. La última vez que fueron a hablar conmigo yo los traté demasiado mal, pero tienen que entender me que era por las circunstancias, yo no sé si te acordás, pero es que me tenía una borrachera de todos los diablos y uno en ese estado, no piensa lo que dice, es más, no conecta la lengua al cerebro y termina metiendo las patas y; bueno, sólo los ríos no se devuelven y por eso estoy aquí. Quiero que todos me perdonen y si es posible, me permitan hablarles. Me dice Miguelillo que vos sos el coordinador de los vecinos y que es con vos que tengo que hablar y; por eso estoy aquí ... - Con ello inició su conversación al tiempo que sentábase en el mismo "escaño" en que estaba Justino. En ese momento salió Flor y dotó a cada quien de un jarro de aguadulce con limón y dos " cosposas” rebosantes de natilla casera, lo que aceptaron con un gesto de gusto y aprobación. - Pues bien Justino, te decía que a veces es mejor hablar las cosas como gente civilizada y no irse a las vías de hecho, la pura verdad es que nos conocemos de toda la vida y pensándolo bien y hablando con mamá, ella me ha insistido para que hable con ustedes, aparte de eso, yo quería desde hace tiempo hacerlo, pero por ésta vaina de la política no había tenido tiempo... -

- ¡ Ves Félix ! , que diferente es hablar así y no como aquel día, donde sólo fue usté el que habló y ni siquiera nos determinó, a pesar de que queríamos aclarale muchas cosas; si aquel día hubiéramos hablao, ¡ qué diferente seria todo ahora !, pero diay, como vos decís, nunca es tarde, cuando la dicha es buena. Lo importante de esta visita, es que te has quitado aquella corona de vanidá que tenías y con humildá, has vuelto a ser el mismo. No te niego, que estuvimos y estamos algo resentíos, pero como todo, ahí va pasando y no creas, yo ya me preguntaba que ¿ cuándo ibas a venir ? - La confianza, hasta en el trato, había vuelto; se había roto el hielo. - Bueno mirá Justino, vamos al punto que nos interesa. Mamá ha quedado como heredera de todo lo de papá, pero me ha nombrado a mí apoderado y la idea mía es retomar el control de estas fincas y poner a producir el trapiche, que me dice Miguelillo ha estado parado. Sé que el ganado y todo lo demás, ustedes lo han cuidado muy bien y eso me llena de satisfacción, por cuanto seguro estaba de que ustedes son personas muy honradas y esforzadas y no iban a dejar que esto se cayera. Lo mejor es que nos pongamos de acuerdo. Una mirada inquisidora acompañaba a Justino, quien se solazaba internamente de lo que estaba viviendo en ese momento, todo el trabajo y el sacrificio que aquel momento le había tomado, con el sólo hecho de recobrar al amigo, al vecino, al compañero de infancia, estaba compensado. - ¿ Me estás poniendo atención, Justino ? - Sí, sí, seguí hombre - Aparte de eso, he tenido varias reuniones con Manuel y Otto, los carajos de la Confederación, quienes están manejando sus reclamos y; vos sabes que me extraña, pero ellos habían quedado de venir hoy, para conversar todos juntos aquí, bueno, yo me adelanté para conversar primero con vos, a lo mejor ya me andan buscando. Me pregunto, si tal vez llegáramos a un acuerdo, podríamos seguir trabajando las fincas como antes, por lo menos en lo que no entre en el arreglo, pero mi interés es desarrollar una serie de proyectos agroindustriales, de los cuales quiero que ustedes sean parte importante, porque la verdad ¿ en quién más podría confiar ?, si ustedes han cuidado esto como propio - ¡ Jueputa Félix ! , imagínate cuanto tiempo nos hubiéramos ganao, si hubiéramos hablao d'esto antes - ¿ Quieren más aguadulce o cosposas ? - interrumpió Flor, mientras recogía los jarros y platos . - No gracias, tal vez más tarde contestaron todos - Bueno Justino ¿ qué me decís ? - Diay, que eso es otra cosa. Pero decime, todo lo que habías dicho de que una gente se iba y que los menos se quedaban, ¿ en qué queda ? - Ahora y eso vos lo sabes, no estoy en posición de exigir nada. A todos les estamos debiendo los salarios de casi un año y bueno, sobre eso podríamos y vamos a llegar a un acuerdo, ahora Manuel te va a contar, pero además, ya eso vos lo sabés muy bien, porque me enteré, de que te has estado capacitando como dirigente, los contratos verbales de arrendamiento están plenamente vigentes y ante eso, o me compro un mal pleito o llego a un buen arreglo. Prefiero lo segundo, siempre y cuando nos convenga o mejor aún, nos convenga a todos. Además, según lo que me ha comentado Otto, la idea de ellos es que el IDA expropie un pedazo de las finca, para parcelarla, cosa sobre la cual tengo mis dudas, porque la mayoría y eso vos lo sabes muy bien, no tienen el mismo empuje tuyo y terminarán vendiendo, mal vendido el pedacito que les toque y tal vez a alguien que no es ni de aquí. Aparte de ello, el gobierno no está en

capacidad de brindar mucha asistencia a los parceleros, ya que la situación está, un poco fea y eso será así hasta que se aprueben en la Asamblea los programas de ajuste estructural y pueda entrar algo de plata del Banco Mundial o del Fondo Monetario Internacional. La pura verdad es que nos tienen agarrados de los güevos. Están con unas exigencias y te lo digo, a pesar de que yo soy militante del partido de gobierno, no me parecen muchas cosas que se están haciendo. Al " hombre" lo que le está interesando es promocionarse en el exterior, con el cuento de la paz y está descuidando la paz interna. El problema que ustedes están enfrentando conmigo, es pequeño en comparación a los problemas que se están presentando en otros lugares. No tenés una idea - Diay Félix, si eso se veía venir, no ves que Costa Rica ha perdido importancia estratégica pa' los gringos. Después del montón de plata que nos echaron en la administración pasada, por el asunto de Nicaragua, ahora a ellos lo que les interesa es ponenos de rodillas y asfíxianos económicamente. Ya el cuento de que nos regalaban o prestaban a grandes plazos y con períodos de gracia pasó, ora es la política del burro amarrao contra el tigre suelto y si no nos despabilamos, se quedan hasta con nuestra soberanía. Vea que cuando el gobierno de don Rodrigo estaban molestos con lo del atún y lo de la detención de barcos por pescar ilegalmente, quisieron presiónanos pa' que renunciáramos a nuestra plataforma continental y a lo de las doscientas millas marítimas, pero como el gobierno creó el Parque Nacional de la Isla del Coco y extendió nuestra frontera marítima hasta donde llega la de Ecuador, se pusieron como todos los diablos y se molestaron porque nos estábamos atravesando entre sus intereses comerciales y, pa' que vea como es la cosa, ese que es el presidente de ellos ahora , en aquel tiempo era gobernador de California y seguro era amigo y hasta socio, ¿ qué sabe uno ? de más de una d'esas compañías pesqueras . Por eso, en la administración pasada, aquí se les abrieron de piernas, pa' tratar de congraciase nuevamente con ellos, como si el gobierno de la unidá nunca juera existió. No, si hay cosas que aquí uno no se entera y por eso es que hay que salir a capacitase, pa' que no le metan diez con güeco ...- Puta Justino, pero vos te has despabilado más que uno en esas cosas. ¡ Ah bárbaros en la Confederación ! voy a decirles que me metan en esos cursos, a ver si yo agarro el hilo de todo eso que me estás contando - dijo a carcajadas Félix, quien en sus adentros y como buen político sabía que era cierto, lo que aquel campesino y en sus palabras decía. - Mirá Miguelillo, ¿ por qué no vas al alto a ver si la gente de la Confederación llegó y me andan buscando ? , a lo mejor no saben que estoy aquí y les da por devolverse pa' San José, entonces sí que es torta, porque van a pensar que los dejé plantados. No, tal vez no, de seguro van a ver el carro y van a pensar que ando por ahí . Es que ellos no sabían que me les iba a adelantar para hablar con Justino. ¡ Andá hombre ! Una vez que Miguelillo se fue a cumplir con lo encomendado por su patrón, Félix se quitó el sombrero que andaba y venteándolo para refrescarse, suspiró profundamente y aliviado. Esta reunión, aunque pareciera mentira y dado que un hombre de su talante seguro estaba muy acostumbrado a lidiar con problemas mayores, le tenía desvelado. ¿ Cómo si no ? Si con quienes iba a tratar eran con las gentes que habían sido su familia en su infancia y que por los vericuetos que da el destino, había querido olvidar, por enredarse en el mundo falso de la ciudad y la política. Lo que no comentaba y obviamente no quería hacerlo, es que su cabezonada en éste asunto le había costado una regañada del candidato en esa entonces y del presidente ahora, por cuanto le cobraban que, ¿ cómo era posible que éste pueblo, su pueblo, se hubiera negado a cualquier tipo de participación en la campaña política ? Ello le había traido como consecuencia un relegue en sus aspiraciones a un puesto de mayor importancia en la nomenclatura gubernamental y si bien es cierto, había logrado un puesto en una directiva bancaria, esa no era su aspiración. Había trabajado para algo más. Lo anterior, le había hecho recapacitar y reconciliarse consigo mismo, antes de poner abajo en sus

pretensiones e ínfulas, para con las propiedades heredadas y si bien el acercamiento aquel le estaba costando parte de su orgullo y vanidad, se sentía aliviado de dar el primer paso, aparte de las ya varias reuniones a las que había accedido con personeros de la confederación. Sin embargo, aquella conversación con Justino, le había llenado de gozo y paz interior, comprendía que lo que había tratado de hacer, era borrar parte de su historia, a la que no podría renunciar con sólo quererlo, porque quien renuncia a sus raíces y se olvida de ellas, no merece el respeto ni el respaldo de sus semejantes, menos el de Dios. Eso lo había asimilado ya. El golpe había sido duro y las enseñanzas, le servirían para enriquecer su acervo cultural y profundizar más en el respeto al ser humano, independientemente de su condición y estado. Entendió que nadie escogía ser pobre, sino que eran decisiones del Ser Supremo y quienes pretendieran ignorar aquello, tarde o temprano recibían la compensación, porque como nuestros campesinos dicen, Dios tarda pero nunca olvida y de él se había acordado muy tempranamente y en la parte en que más le dolía, su orgullo y vanidad. Se decía a los cuatro vientos, que el candidato lo tenía en lista para un cargo ministerial y no fue así... - ¡ Mirá ! como que allá viene Miguelillo con Manuel y Otto y no alcanzo a distinguir quien es el otro que les acompaña, ¿ vos lo conoces ? - No, es que así con el sol de frente está difícil, pero parece..., no la verdá es que no alcanzo a distinguilo - Bueno, antes de que lleguen, ¿ cuento con vos en lo que tengo pensado ? o sea para decírtelo de otra forma y para que nos entendamos, si me ayudás, yo te ayudo para que le saques más provecho al terrenillo que tenés alquilado o al que llegues a tener en el futuro y; obviamente, yo quiero que te quedés siempre a cargo del trapiche, como antes , ¿ qué te parece ? - Mirá Félix, de pareceme, me parece muy bien, pero como vos sabés, esto lo está manejando la Confederación y además de eso, yo soy el representante de los demás vecinos y de lo que hablemos con ellos, yo tengo que tomales el parecer a todos. Creo que mejor nos esperamos a ver que es lo que traen Manuel y Otto y después tomamos una decisión. ¿ Está bien ? - O.K. - dijo Félix con una sonrisa maliciosa, sabiendo de antemano, que no todo se lo había dicho a Justino. Algo le había insinuado, pero lo mejor se lo guardaba y serían los recién llegados los que hablarían al respecto, de acuerdo a lo convenido en San José. - Buenas, ¿ cómo les ha ido ?, veo que ya están de amiguitos, otra vez Saludó Manuel, extendiendo la mano a efecto de sellar el saludo. Se saludaron todos y cayeron rendidos en las bancas del corredor, Justino presto , jaló otra más, la que estaba en el lado de las violetas, para que así se sentaran todos, frente a frente y corrió donde Flor, para que alistara viandas para los recién llegados y para los otros también. - Félix, Justino, éste señor es funcionario del I.D.A. y de acuerdo con lo conversado con vos Félix, él ha sido nombrado por la Presidencia Ejecutiva para hacer los estudios preliminares, a menos que se llegue a un acuerdo, como te lo habíamos propuesto ... - Perdoná que te atraviese la mula, Manuel - interrumpió Félix - Es que mamá está de acuerdo y eso es lo que quería decirles hoy -

- ¡ Excelente ! pero para poner a Justino y a los demás en antecedentes del asunto, como todos sabemos, la idea inicial, antes de que los propietarios aceptaran algún acuerdo, era la de conseguir que el I.D.A. expropiara trescientas hectáreas, a efecto de repartirlas entre los cabeza de familia, pero si se llega a la solución planteada en la última reunión, que veo con alegría. que sí se llegó, se desistiría de eso y por el contrario, la Confederación se retiraría de éste asunto, dándolo por terminado. Claro, ahora está el asunto en que los habitantes del Alumbre estén de acuerdo en la solución negociada. Nosotros los acompañamos hasta el último momento, si se ponen de acuerdo con Félix, bueno pues, asunto concluido. Otto les va a plantear los otros detalles, que le propusimos a Félix como apoderado y si él acepta, el funcionario del I.D.A. aquí presente, quedaría como firmante y testigo de honor. Lo que acordemos ahora, va a quedar supeditado a que los vecinos lo ratifiquen en asamblea, recordemos que Justino únicamente es el portavoz-coordinador de la Confederación y por ende el finiquito debe ser aprobado por la mayoría de los vecinos - Dichosamente - inició Otto, - los propietarios han accedido y con un gran desprendimiento de su parte, a conversar con nosotros, eso tenemos que agradecérselos, porque lo usual es que ni siquiera nos reciban y los asuntos hay que ir a ventilarlos a los tribunales. Bueno, lo que le hemos planteado a Félix y me corrigen si me equivoco y que han aceptado inmediatamente y para poner fin a éste diferendo, es algo con lo que no contábamos, tomando en cuenta que son tierras muy valiosas, es lo siguiente ... De un oficio algo arrugado y que traía en un portafolios, Otto agudizó la vista y se dispuso a leer . - Dice así : Los propietarios están dispuestos a vender al I.D.A. doscientas hectáreas, a convenir, a efecto de que mediante una cooperativa autogestionaria, los habitantes del Bajo del Alumbre las pongan a trabajar. Asimismo los propietarios cederían a la cooperativa, el área correspondiente para que allí se instalen las obras comunales, como una eventual iglesia, escuela, un centro comunal y una cancha de fútbol y tratarán hasta donde sea posible de dotarles de los servicios básicos, como agua y electrificación, ello de acuerdo con los planes y programas que tengan las instituciones responsables... Cada frase Justino la escuchaba en comunión óptica con Miguelillo, ambos se decían con sus miradas, que lo que habían iniciado, tendría una feliz terminación y que al fin, podrían mirar al mundo con bondad y saberse hacedores de su futuro. - Bueno, sigo. Que los propietarios están dispuestos a comprar la producción de caña, al precio de mercado. También estarían dispuestos a aportar algún tipo de ayuda inicial y mientras la cooperativa sea solvente para contraer créditos, a efecto de que pongan a producir las tierras de inmediato. Por otra parte, los habitantes del... - En eso interrumpió Flor - Perdonen, pero ¿ se toman un cafecito con cosposas ? Todos accedieron inmediatamente. - Ya les estoy alistando el almuerzo - ¡ Ay Flor ! ¿ Para qué se molesta ?, díjole Félix - Ninguna molestia don Félix, pa' nosotros es un orgullo que ustedes vengan a nuestra casa , para ponese de acuerdo en asunto tan delicadillo y otra cosa no puedo hacer yo, que atendelos como se merecen, de por sí, ya es l'hora y una sopa de gallina no les caería mal... ¡ Qué rico ! - dijo Otto - Con lo sabroso que cocina Flor, no ven que yo añoro las venidas aquí, sólo por pegarme esas comidas que se pega uno aquí. Bueno pero sigamos, mientras nos mandamos éstas cosposas, ¡ qué natilla, sean bárbaros !, si hasta los dedos se chupa uno. Bueno pues les decía, tanto

desprendimiento tiene algún costo para los vecinos y es que los propietarios aparte de querer asegurarse la materia prima para la " tarea" y cumplir los compromisos con la Fábrica de Licores y los otros clientes del dulce, desean que los empleados de antes, ahora propietarios en ciernes, le perdonen la deuda salarial del último año, que es bastante considerable, tomando en cuenta que ustedes han estado sacándole provecho a la finca. Por otra parte ofrecen contratarles como peones en temporada de cosecha o siembra, ahí sí con sueldo y que mientras el I.D.A. efectúa la expropiación y pago correspondiente, a lo que no se opondrán, siempre y cuando sea el monto mínimo, los vecinos seguirán como hasta la fecha. No es muy legal, sobre todo lo de los salarios caídos, pero del mismo cuero salen las correas, ahí ustedes la han ido pasando poco más o menos y no creo que hayan contraído muchas deudas, las que podrán pagar una vez que sean propietarios y con la primeras cosechas. ¿ Qué te parece Justino? Todos volvieron la vista hacia el líder, ansiosos de escuchar su parecer. Si bien es cierto había sido informado de las conversaciones y de los "estira y encoges” que se daban en ellas, no contaba con que ya se hubiera llegado a un arreglo tan, pero tan conveniente, a su parecer, para todos. No podía creer que después de tanta añoranza, un pedazo de aquella tierra bendita, pudiera llegar a ser suya y de su familia. De acuerdo con la oferta, cuatro hectáreas tocarían a cada familia, más , mucho más, de lo que necesitó para enterrar a su hijo y a su padre. Es que era mucho más de lo que don Félix, padre, le había concedido en arrendamiento. El sólo pensarse dueño de cuatro hectáreas, le " ponía los pelos de punta” y el cúmulo de sueños que se agolpaban en su mente desde hacía varios años , hacían presión por aflorar y ponerse en orden de prioridades. De todo esto había sacado la experiencia de saber que no estaba sólo y que muchas personas como él, habitaban en ésta tierra latinoamericana. Había aprendido que si bien es cierto la solución de los conflictos se daba, no era esperándolo todo del Supremo Hacedor que se lograba, sino que por el contrario y de acuerdo con su promesa, sólo con un poco de sacrificio personal y familiar se podía conseguir la mejora del ser imperfecto que había creado Dios. Pasó por su mente, de la importancia de la unión comunal y de la participación activa de todo el conglomerado en la solución de los problemas; reafirmó el principio de que la unión hace la fuerza y de que nuestro pueblo, si se lo propone, puede progresar con dignidad y labrarse un futuro mejor para todos. Aprendió que no se debe esperar todo del " Papá Estado” y que por el contrario, sólo con la presión y la oferta espontánea de coadyuvar en su gestión , es que éste pueblo bendito podía lograr su superación. Pero bien, al parecer, todo se estaba solucionando y recordó aquel momento en "la casona", cuando de no haber sido por su familia, otra actitud hubiera tomado, contra aquel que hoy nuevamente venía como amigo. Recobró en parte, la fe en el ser humano, ahora sólo restaba, poner de acuerdo a los demás vecinos e instruirlos en la importancia del trabajo en cooperativa, a lo que nuestro pueblo no está acostumbrado. En fin, era su tarea y para ello se había preparado y se prepararía más, de ser necesario. Miró a todos al rostro, a cada quien le obsequió el brillo de su mirada pura, tomó el último sorbo de café que quedaba en aquel " jarro de losa " con rosas rojas que era su preferido y se dispuso a expresar la opinión solicitada. Todos esperaban con ansias lo que Justino dijese, al cabo, era su obra la que estaba a punto de develarse. - Miren señores - suspiró profundamente, como para ordenar las ideas y ponerse de acuerdo entre la emoción que le embargaba y la responsabilidad que asumía. - Cuando fuimos a San José hace ya varios meses y logramos contactarnos con don Manuel y todo lo que él representa, yo en lo personal había perdido la fe en el ser humano, me decía que si una persona que

había sido su amigo de infancia, le trataba ahora a uno así, ¿ qué se podía esperar de la gente de la ciudá , que ni siquiera le conocía a uno ?. Pos bien, gracias Dios, todo lo que ha pasado me ha servido pa' madurar un poco más, aprender un poco de cosas que no sabía y de las que uno está a oscuras aquí y de paso ha servido pa' que Félix entienda que sus raíces, sus amigos, le gente que de antes lo conoció, nunca lo ha olvidado y por lo tanto él no debe, olvidase de ellos. En fin a todos nos ha servido la experiencia. No pretendíamos tanto, sólo que se nos reconocieran los derechos y poder vivir aquí como hasta la fecha, en paz como habían vivido nuestros padres. Ahí continuaríamos trabajando y hasta que Tatica se acordara de uno. Claro, uno siempre ha estado con la espinilla, de tener algo propio y por eso es que le alquilábamos pedacillos a don Félix, pa' sentinos dueños y a ver si el día de mañana se nos hacía y llegábamos a cumplir el sueño que, ustedes saben, no sólo nosotros tenemos, sino un gran porcentaje de la población de éste País y de la gran Latinoamérica... - De verdad que éste hombre aprendió más de lo que le enseñamos - interrumpió Manuel - Lo mismo pensaba yo - dijo Félix - si hasta casi me pongo a llorar, bien me lo decía mi tata, que aquí el elemento de cuidado era Justino y que era al que había que tratar con pies de plomo, ahora con toda la instrucción que le dieron ustedes, está muy, pero muy afilado. Si nos descuidamos, ahorita lo tenemos en la Asamblea... Todos rieron y aplaudieron a Justino para que continuara. - Bueno, bueno, déjense de chanzas y permitamen terminar. Una cosa que es importante y que es bueno que la hablemos, que a como lo pintan ustedes, todo parece muy bonito, pero lo que sigue es conciliar los intereses de toda la gente, que se pongan de acuerdo y que todos acepten lo que se les está proponiendo, que por lo menos para mí está sobrado de bueno, pero diay, uno no sabe que pensarán los demás. Así que, lo que sigue ora es reunir a la comunidá y explicales los alcances del finiquito, como dice Otto, porque la vaina es que más de uno estaba endeudadillo y esperaban que se les arreglara algo de los sueldos, pero en fin, la verdá es que no debemos quejanos. Esa reunión se puede hacer en éstos días, si podemos reunilos el próximo sábado, ahí en las afueras de la casa de don Félix, ¿ qué les parece ? - ¡ A mí me parece muy bien ! - contestó alborazado Félix - A nosotros, ni que decir, pues también Un apretón de manos selló aquel pacto y se comprometieron a verse el próximo sábado, para lo comentado. Dicho lo anterior, Flor les invitó a que pasaran al interior de su casa, a efecto de que degustaran lo que con tanto esmero había estado preparando, eso sí les indicó, como buena ama de casa, que jalaran las bancas donde habían estado sentados, con el afán de que rodearan la mesa instalada en la cocina, con piso de tierra tan limpio que parecía encerado. Un aroma a " culantro de coyote” inundaba la estancia. La olla en el fogón dejaba escapar a borbollones lo que pronto devorarían los comensales. La mesa de madera inmaculada, limpiada con ceniza y después con " limón mandarina” , lo que le daba un aspecto de madera nueva. Una a una fue sacando las raciones de sopa de gallina y un plato de arroz con “achiote” complementaba el festín, con las insustituibles tortillas hechas al instante por las laboriosas manos de la mujer. Un pichel de aguadulce con limón y varios jarros, lucían como única bebida en aquella mesa y para "

bajar” lo que se comerían. El que quería y quizo repitió, la olla alcanzaba para ellos y más. Justino, como era su costumbre, se sentó con un "güila" en cada rodilla y entre cucharada y cucharada, hacía los más diversos comentarios sobre el futuro de ellos como habitantes, con todos sus derechos, del Bajo del Alumbre. Hasta soñaba en voz alta con la cancha de fútbol y Pedrito pateando la bola en ella. Los demás suspiraban con alegría, al ver cumplidos los anhelos con los que sueñan todos los costarricenses, "tener un pedacito de tierra donde caer muerto” y que gracias a ese deseo intrínseco en el ser costarricense, estaban a punto de que al menos en el Bajo del Alumbre, cada familia tuviera ese pedazo de tierra y lo que era mejor, de común acuerdo entre las partes. - Saben una cosa - dijo Otto, para congraciarse con los anfitriones - No he probado una mejor sopa de gallina en mi vida, no ven que yuca más bien reventadita, si hasta da lástima comérsela de esponjada que está y ésta gallina, ¿ qué me dicen ?, estaba bien gorda la bandida, no ven que caldo, ¡ no sean bárbaros ! ¿ Cómo no voy a repetir ? - ¡ Ay don Otto !. usté sí que's avenio, así si da gusto atender a alguien. Todo lo que le doy le gusta - ¿ Cómo si no ? ¿ Acaso en San José uno se puede dar éstos gustos ? - Cuando yo era carajillo y andaba con todos éstos condenados por estos Bajos, siempre había alguna casa donde me apretaba y cuando llegaba donde mamá, siempre me regañaba, porque ya no llevaba hambre. Me decía ¿ que porqué yo tenía que andarles quitando la comida a ellos, si sólo Dios sabía cómo la pasaban ? y que va, vieran ustedes que nunca les faltaba; por lo menos los frijolitos y el maíz tenían siempre asegurados y eso, con los huevos que les ponen las gallinas, que nunca les faltan, era más que suficiente. Me acuerdo aquellos huevos cocinados en hoja de plátano que hacia tu mamá, Justino. Te acordás, nos sabían a gloria después de estar todo el día metidos en la poza. ¡ Ah tiempos ! No pensaba uno en nada. La verdad es que en la ciudad uno sí que se hace complicado y se le olvidan los buenos ratos que pasa uno con una comida sencilla como ésta y además, tan nutritiva. Qué montón de cochinadas se come uno, puros preservantes y sabores artificiales. ¿ No les parece ? - Pues claro - ¿ Alguien quiere café ? - Diay todos, para irnos completos para San José - contestaron - Ustedes saben ésta sopa después de una fiesta de esas bien brava, jueputa, sí que le saca la goma a uno en dos patadas - Comentó Otto. - No hay nada mejor para componerse después de una fiesta, que una buena sopa, es cierto - acotó Félix, para continuar : - Gracias a Dios, en las últimas veinticuatro horas, no he tomado nada que contenga alcohol, pero es cierto, cuando amanecía muy golpeado, después de una fiesta, no había nada mejor que una sustancia. A veces me levantaba y salía como loco a buscarla, me iba a un restaurante me echaba unas birras y un sopón y hombre nuevo. ¡ Qué tiempos !, no quisiera ni acordarme - ¿ Qué, estás en el programa ? - le dijo Manuel - A Dios gracias, sí, ya llevo muchas veinticuatro horas; como tres meses, poquito después de que

salí de la Asamblea, es que vieras como se bebe guaro ahí, si no es una cosa, es otra, pero siempre hay algo por que celebrar y ahí es donde se va uno en todas... - Pero vos te lo echabas mucho antes de eso - díjole Justino - Uh, ni que decirte a vos, que me conocés de toda la vida, aquí no tanto, si acaso de vez en cuando, cuando había alguna actividad en casa, pero una vez que me fui para San José, ahí empezó todo. Que los amigos, que las amigas, que las fiestas de la U, que celebrar un examen bueno o malo, que esto que lo otro, la cosa es que siempre andaba alzado o por lo menos de goma. Bueno, vean los matrimonios que perdí, buenas mujeres, buenos hijos. Tanto que les hice sufrir. No vayamos muy largo, a ustedes, como los traté. No les digo, si éste vicio te consume y cuando te das cuenta estás tocando fondo y en el círculo en que uno se desenvuelve lo toleran, pero uno se da cuenta que ya no lo quieren invitar y si lo hacen es por compromiso, porque a uno se la va la mano en el trago y terminan marginándote de ciertas cosas. Gracias a Dios pude comprender que estaba pasándome de la raya, rectifiqué a tiempo y bueno, en esas estoy. No crean que a veces no me dan ganas, pero gracias al Programa y a mi ser superior, me contengo. No quiero hacerle más daño a las personas que quiero, ni a mi mismo, aparte de eso, mamá ahora está a mi cargo y no quiero que sufra los últimos años de su vida, como sufrió antes, a pesar de que poco me veía. También mis hijos van para arriba y el día de mañana no quiero perderlos porque estaba más preocupado cuidando una botella - Puta, que testimonio más cabrón estás dando Félix, te lo digo porque yo llevo ya diez años en el Programa y me pasaba lo mismo que a vos, pero diay, gracias a mi ser supremo y al cumplimiento de los doce pasos, puedo decir que lucho con más fuerza contra mi enfermedad y... también, tengo veinticuatro horas, de que no pruebo nada que contenga alcohol - apoyole Manuel. - Vos no tomas, ¿ verdad Justino ? - No, a Dios gracias y espero nunca probalo, yo he visto lo que es capaz de hacele a un hombre o a una mujer, porque esa enfermedá, como ustedes dicen, ataca a todos por igual, no respeta color , tamaño, sexo , ni condición social, los destruye y los deja en tal estado que les cuesta levantar cabeza. Por dicha que en este Bajo, hay una gran ventaja y es que desde que Toño dejó de tomar, quitó la venta de licor y si alguno quiere echase unos tragos, tiene que ir hasta San Fermín y diay, como que no vale la pena y así como que a alguien le dé por sacar guaro aquí, al menos que me dé cuenta, yo que he estao a cargo del trapiche, naide lo ha intentao. Bueno la verdá es que cuesta ver a alguien borracho aquí, sólo aquel viejillo Serafín, el que vivió al lado atrás de tu casa, ¿ te acordás Félix ?, que lo había traído el finao de tu papá, pa' que le llevara la contabilidá y que se juntó con aquella chola del otro lado del río. Ese viejillo sí que era jumas, todo el tiempo pasaba como el corazón de Jesús de doña Angela, a una pura llamita, pero de ahí, no recuerdo a nadie con esa enfermedá. Algunos se tomarán unos traguillos en una vela , fiesta o entierro, pero como que no les gusta, la verdá es esa, gracias a Dios, porque si no, ¿ ónde iríamos a parar ? Pobres y borrachos, bueno, ahí sí que le caería caca al agua - Bue...aquí es buscando la salida, antes que nos coja la noche - dijo Manuel - Sí, sí, vámonos todos, ya esta gente tiene que descansar y a Justino le toca una buena tarea; la gente debe estar como loca por saber a ¿ qué llegamos ? concluyó Félix. Al ser las tres de la tarde, tomaron el camino hacia el alto y allá cada quien montó en su vehículo y partió hacia la ciudad. Mejor solución no podían haber ideado para el problema que les había ocupado en los últimos meses, ahora sólo faltaba escuchar la posición de la comunidad, la que presumían sería de aceptación. De convencerlos se encargaría Justino y en él confiaban. Un aire de paz interior invadió la casa de los Mora Jiménez, como que las penurias que habían pasado y el desvelo de ambos por la lucha que habían emprendido, estaba a punto de parir sus frutos y si

Dios no disponía otra cosa y tomaba descuidados a aquellos moradores del Bajo, al menos su problema primigenio, estaba resuelto. Todos se quedarían en el Bajo del Alumbre, donde habían nacido, se habían criado y quizás, morirían. No irían por San Fermín los visitantes, cuando la casa de Flor y Justino fue prácticamente invadida por decenas de curiosos vecinos quienes al ver a Félix bajar, seguido de los otros ardían en deseos por saber de lo que en aquella casa pasaba. La "bola" se había corrido y hasta las últimas casas había llegado la noticia de lo que en la morada de Justino se estaba gestando. Eran varios meses de incertidumbre y algunos hasta habían perdido la fe, por lo tanto y que de un momento a otro Félix se apareciera y seguido por los señores de la Confederación, no dejaba de ser sospechoso y por ello, apenas habían partido, "se dejaron caer", como hormigas en una tapa de dulce. Como el corredor no daba abasto para albergarlos a todos, se ubicaron en el " zacatal" , frente a la casa del líder y ahí urgieron a Justino para que les contara, lo que se había acordado en aquella reunión, la que de por sí olfateaban como definitiva, para los problemas, pesadillas y miedos que enfrentaban. No era para menos, meses de zozobra y angustia, muchas cuentas pendientes, sobre todo con Toño y un cúmulo de sueños, forjados al amparo de una hermosa perspectiva, habían hecho de aquellos hombres y mujeres, "asaltantes del pedacillo de Justino", en busca de las nuevas. Nuevas que quizás cambiaran sus vidas y les harían mirar al mundo como propietarios y gestores de su propio destino. Justino, no sabía si decirles todo de una vez o bien empezar por contarles desde el principio de todo lo actuado hasta el momento, porque había algunos de los que ahí estaban, que si bien era cierto, eran vecinos del Bajo del Alumbre, no le habían dado seguimiento al asunto. Simplemente se habían enterado por intermedio de otros vecinos de las gestiones de " la comisión” y no le habían dado importancia a las luchas que aquellos habían emprendido en pro de ese mañana mejor, por el contrario se habían dedicado a socavar las tareas que aquellos habían llevado a cabo. Algo muy característico de nuestro pueblo, el cual nombra una comisión, junta directiva o hasta un mismo gobierno y después se desentienden de las gestiones que aquellos hacen como si no tuvieran responsabilidad en la conducción de sus asuntos y por el contrario, como ahora ocurría con los pobladores del Alumbre, creían que aquellos debían ser los artífices en la solución de sus problemas, sin siquiera levantar un dedo para colaborar en su gestión. Como recordaremos, la comisión se había nombrado y había encaminado las primeras acciones y por último, Justino había sido el enlace, de conformidad con el acuerdo. De ahí en adelante muy pocos se acercaron a él, para consultarle como iba el asunto o bien para ofrecerse a colaborar. Pretendían como siempre, que la solución a sus problemas viniera por obra y gracia... de lo cual no tenían culpa, ya que ésta característica de nuestro ser, no es sino el producto de una manipulación generacional del dirigente político de éste País y ¿ por qué no ? del dirigente latinoamericano. Un pueblo acostumbrado que todo le venga del Estado o de otros, pierde su independencia a pedazos y cuando se da cuenta, no es ciudadano, no es hombre,... es una marioneta. Justino sentóse al lado de Angel y Juan "sapa", dos compañeros en las buenas y en las malas y con la calma que había aprendido muy bien en las charlas y cursos en la confederación, se dispuso a informar a los vecinos de las gestiones y del resultado en ciernes de éstas. Las cosas se habían adelantado y mucho mejor para él, por cuanto no tendría que ir de casa en casa contándole a cada quien. Era este el momento propicio. - ¿ Diay, cómo les va ? ¡ Qué dicha que se dejaron venir, porque hay muy buenas noticias pa' todos ! Bueno, al menos eso creo yo. No sé como lo irán a tomar ustedes, pero antes de dáselas, quiero deciles lo siguiente : -

La expectación creció, a pesar de que muchos casi que adivinaban lo que Justino les iba a decir; sin embargo, no se imaginaban hasta donde hablan llegado los acuerdos entre Félix y la Confederación, que bien sabían, les había estado llevando el asunto. - ¿ Es cierto que hay platilla pa' todos ? - dijo Mamulón, - Que va, eso es lo que menos hay, pero sí les aseguro que lo que va a haber es trabajo, pero antes de entrar en detalles, les decía que quiero explícales algunas cosillas, que es bueno que todos sepan, pa' que nunca se les vaya a olvidar Al decir lo anterior, todos se volvieron a ver, como preguntándose que ¿ qué se traería éste cabrón ? - Bueno, la cosa es que cuando nos juimos los de la comisión a San José, lo hicimos con mucho gusto y llevando el nombre de cada uno de ustedes en nuestros corazones, no era sólo por nosotros que íbamos a buscar ayuda, sino que éramos por decílo de alguna forma, como los abanderados de la dignidá de los habitantes de aquí. Gracias a Rafel y a su contacto con la confederación, pudimos lograr un buen arreglo en poco tiempo , porque diotra forma hubiéramos tenío que padecer un montón de tiempo de zozobra y quien sabe cuantas necesidades más. Porque el asunto no era tan fácil. - Bueno pero Justino, decíles a lo que se llegó, ¿ no ves que todos están cortando clavos con el culo ? y vos no les decís lo del acuerdo. ¡ No seas tan ingrato ! - Mirá, Miguelillo, esperate y no seas tan malcriado, yo lo sé y vos también lo sabés, porque vos no sos ningún maje, que la mayoría de los que están aquí, están sobrados de ganas de conocer de los resultados de la reunión, pero es importante que me escuchen, porque la cosa no es muy fácil. Un silencio imperturbable reinaba en el ambiente, sólo interrumpido por el ruido del viento, al entremezclarse entre los árboles de madero negro y llama del bosque, que había en la cerca de Justino y el murmullo inicial se había transformado en atenta escucha. - Lo usual en nuestro pueblo y nosotros no hemos sido la excepción, es que nos ponemos incomodillos con quienes hemos nombrado pa' que nos representen y ayuden a resolver nuestros problemas y esto pasa hasta con los gobiernos que ponemos cada cuatro años. Esperanos que los demás hagan todo por nosotros y nunca nos ofrecemos pa' colaborar en las tareas, después como pasa hoy, queremos los resultados y casi que los exigimos, pero en éste caso y quiero que entiendan, porque nos va a servir pa'l futuro, que ora sí que las tareas vamos a tener que prorratealas entre todos, sino el proyecto de lo que les voy a proponer y de lo que se acordó se va' ir al carajo Todos se preguntaban de ¿ cual proyecto estaba hablando ? y ni por la mente les pasaba, que era el de la cooperativa autogestionaria, que harían con las doscientas hectáreas, que habían convenido los propietarios ceder al I.D.A., para que se desarrollara en el Bajo del Alumbre. De hecho el proyecto se denominaba para efectos estatales," Proyecto El Alumbre”, claro está previa indemnización. Estaban acostumbrados o a ser peones o bien a trabajar los pedazos arrendados por don Félix, a su manera y con la ayuda de Dios, jamás en cooperativa, donde se supone que el mal que aqueja a uno es el de todos y que la ganancia de uno, pues en cierto modo es la de todos, ya que sería la cooperativa la que respondería por la producción del total de los futuros propietarios, cincuenta para ser exactos y sería la que daría la cara por las deudas que se contrajesen. En pocas y sencillas palabras, Justino les explicó de que se trataba el convenio a que habían llegado y del porque debía de constituirse una cooperativa autogestionaria, donde el fondo creado para tal efecto les cubriría los primeros pasos del largo camino que tendrían que recorrer.

Por otra parte, les indicó que a pesar de que se nombrara un consejo de administración de la cooperativa, todos desde ese momento, además de socios, deberían constituirse en vigilantes de la organización, porque si no el proyecto fracasaría y volverían a ser peones y no dueños de su futuro. Les llamó la atención del modelo organizativo del cual serían miembros y les explicó de que manera funcionaba y cual era la responsabilidad que se asumía al constituirlo. Les contó que a través de ella, todos serían sujetos de crédito, lo que siempre habían soñado y que el progreso del "Bajo", estaba " a la vuelta de la esquina” y que estaba en ellos hacer ese viraje de mentalidad en sus vidas, porque sino, otra oportunidad como esa jamás se les presentaría. A lo que si se indispusieron fue al no reconocimiento de salarios caídos, cosa que Justino les justificó, diciéndoles que una cosa por otra, que los propietarios no se habían opuesto, pero con esa condición, que les condonaran las deudas, ya que de por sí no habían cogido ningún fruto de la finca en los últimos doce meses y por el contrario, eran los pobladores del Bajo los que se habían beneficiado de ella. Al final terminaron aceptando. - Una cosa sí necesito que me aclarés, Justino - díjole el papá de Flor. - ¿ Cual cosa don Carlos ? - Las cuatro hectáreas que supuestamente le tocarían a cada uno, van a ser de la cooperativa o van a ser tituladas a cada quién ? - Buena pregunta y se la voy a contestar; al efectuarse la segregación del terreno, a cada socio de la cooperativa, le van a tocar cuatro hectáreas, pero éstas se van a constituir en el patrimonio y garantía de cada quien, pa' que la organización pueda operar y constituirse en sujeta de crédito y así se le abran las puertas del financiamiento, porque diay, con algo hay que responder, naide le va a prestar plata a usté, sino pone a responder algo. ¿ Me entiende ? - Sí, ora si - Pos bien ¿ alguien más que quiera preguntar algo ? - Sí, yo - dijo otro vecino - A ver ¿ qué será ? - ¿ Es obligatorio que uno pertenezca a la cooperativa o puede uno coger el pedacillo y trabajalo por aparte ?, lo digo porque diay, si le va mal a uno, pos es a uno y no a todos los demás - Mire Juan, yo creo que usté tal vez no ha entendio. El estar afiliaos a la cooperativa, condición importante pa' llegar al arreglo, no significa que cada quien no va a trabajar su terreno a como mejor le convenga, lo que vamos a tener estando afiliaos a la cooperativa es un montón de posibilidades pa' trabajar más holgaos. Cada quien va a producir lo que quiera y trabajará como quiera. De acuerdo a su trabajo así ganará, pero las obligaciones pa' con la cooperativa, deberá cancélalas y hasta el monto de sus deudas, las propias, no las de los otros. Por ejemplo, si usté saca a la organización equis suma de plata, usté está obligado a pagar esa cuenta, porque sino es la organización y al final de cuentas todos los asociados los que pierden Hizo una pausa para ordenar ideas y prosiguió : - Habrá momentos en que por el interés que se cobre por los préstamos o los insumos que se vendan a crédito, a la cooperativa le queden ganancias,

entonces, esas entradas se repartirán como dividendos, que llaman, cosa que entiendo se hace cada año. En fin, solo ventajas nos podría dar, el estar afiliaos, eso sí, conservando cada quien la propiedad del terrenillo - ¡ Ah, pos ora si entiendo ! Pos es muy bueno eso, es que yo creiba que los terrenos eran de la cooperativa y que uno trabajaba en ellos y de lo que se sacara en total, se repartía entre todos. Así como lo pintás, es una cosa muy buena - ¿ Alguien más tiene algo que decir, otra pregunta o algo?- Bueno, entonces el sábado entre doce y una, nos vamos a reunir en los alrededores de la casa del finao don Félix, van a venir Felicillo y los amigos de la confederación, quienes les van a contar a ustedes por boca de ellos de todo esto y pa' ver si están de acuerdo. Recuerden eso sí, que todo no se va a dar de la noche a la mañana, porque primero tienen que expropiar, pagale a los dueños, hacer las segregaciones y nosotros mientras tanto, vamos constituyendo la cooperativa, que pa' eso vamos a tener ayuda del INFOCOOP. Así que tenemos que trabajar duro y; ora sí, todos, no sea que como siempre seamos unos pocos los que nos echemos al hombro la tarea, no señores, esto es tarea de cada uno de nosotros, porque sino, fracasamos y entonces si que nos lleva el pisuicas. ¿ Estamos de acuerdo ? - Estamos de acuerdo, juega el gallo - contestó la mayoría. El día convenido y al ser las diez de la mañana, llegaron a la casa de Justino y Flor, los dos miembros de la Confederación, un funcionario del Instituto Nacional de Fomento Cooperativo y el empleado del Instituto de Desarrollo Agrario, que había venido anteriormente. Justino estaba en el frijolar, robándole al tiempo tarea útil y por lo tanto, Flor se hizo cargo de la atención a los visitantes. Mientras mandaba a Florcita a llamar a su esposo, sirvió a cada quien un jarro de aguadulce , unas tortillas con flor de itabo revuelta con huevo y “cosposas” con natilla, las que comieron con sobrado apetito. Ella estaba preparada para recibirlos, porque a pesar de que la reunión era arriba, sabía de antemano que ellos bajarían hasta su casa, para saborear lo que con mucho cariño les preparaba y no disimulaba su orgullo al saberse anfitriona de tan importantes personajes, a su entender. Bueno, su actitud era típica de nuestro campesino; así se había criado ella y así lo entendía, " al visitante hay que convidalo con lo poquito que uno tiene, más si es avenio, ya que mañana Dios le repara a uno más” Así era la filosofía de la vida de éstas gentes, copia al carbón del resto del campesinado costarricense, quienes acostumbrados a vivir con el mínimo, cuando les sobra, lo comparten con los demás, ya que para ellos es un honor recibir visitas en casa, sobre todo si son personas de la ciudad, a quienes ponen atención , " para aprender de ellos”, dice Justino. - ¡ Diay señores, se adelantaron ustedes !, y yo que esperaba velos más tarde, por eso estaba trabajando un ratillo en el frijolar. ¡ Mucho gusto ! Justino Rafael Mora, pa' servile... - dijo dirigiéndose al visitante que no conocía. - Flor echale éstas yucas a la sopa; es que venía ahí por la socola y arranqué una mata, vieran ustedes como está de buena y es de la amarilla- Mirá Justino, éste señor es don Pedro del Infocoop y él es el que les va a asesorar en la vaina de la cooperativa, me lo traje para que hable con vos antes y se pongan de acuerdo en las tareas que les toca

emprender - Está bien don Manuel, toda la ayuda que nos puedan dar, es bienvenida, sobre todo ora que estamos a punto de hacer de nuestras vidas, algo de provecho propio y no ajeno. ¿ Me imagino don Pedro, que don Manuel le ha contao a usté de las desgracias que hemos pasao y de lo que ellos nos han ayudao ? - Pues viera que si, bastante me han informado, pero también me han contado que han llegado a una buena solución y del acuerdo de constitución de la cooperativa, que cuando esté funcionando van a ver ustedes de la enorme ventaja que eso significa. No se imaginan lo útil que es para una comunidad como la de ustedes. ¡ Ya lo verán ! - Espero en Dios y pa' beneficio de todos - Ya lo van a ver, tengan paciencia - Bueno, ¿ qué les parece si echamos a andar, ya la gente debe estar reunida en el alto y a lo mejor Félix no va a encontrar que decirles ? - Cierto Otto, vámonos pues, ¡ gracias Flor ! - Con mucho gusto, don Manuel. Recuerden que ésta es su casa y siempre que vengan o cuando tengan gusto, por lo menos una aguadulce y un gallito de algo se comen aquí, que pa' eso estamos, ustedes saben que no tenemos con que pagales - Gracias Flor y no dude de que así será, ahí les estaremos visitando Justino se "medio" lavó la cara y las manos y a como andaba , así se fue, de por sí todos sabían que él no era muy amigo de las galas, menos cuando andaba por El Bajo y la verdad, era un asunto de trabajo el que le ocupaba ahora, no había necesidad de "mudarse", a pesar de los ruegos de Flor y los cuchicheos que se escuchaban en la cocina. - ¡ Ay Justino, usté si que me hace quedar mal ! , por lo menos se hubiera cambiao la ropa, unque no se bañe - Muchacha, si onde voy es al altillo, más al rato cuando vuelva me baño, de por sí pa' la sudada que me voy a pegar con ese trepón - Allá usté La reunión se llevó a cabo de acuerdo con lo previsto, como la mayoría estaba informada del finiquito, lo que siguió después de ella, fue el ponerse de acuerdo sobre la constitución de la cooperativa, en la que por supuesto Justino presidiría el Consejo de Administración. Se lo había ganado. Félix por su parte, no cabía de gozo, había recobrado la amistad de sus amigos de infancia y al fin había comprendido de la importancia de no olvidarse de sus raíces. En tan pocos días había madurado como político, como hombre y más que todo, como ser humano. La lección que había aprendido de aquellos campesinos, jamás la olvidaría; en donde la solidaridad y el apego a su terruño, les había hecho pelear hasta las últimas consecuencias, para lograr el reconocimiento de su dignidad como personas. Les quedarían después de la segregación , como trecientas hectáreas de muy buenos terrenos, los

que con la ayuda de todo aquel pueblo ¿ y por qué no ?, de la Cooperativa , sacaría adelante, ya que por voluntad propia había solicitado que se le aceptara como un socio más de la organización. Terminados los actos, invitó a los miembros de la Confederación y a los funcionarios públicos, así como a los vecinos que estuvieron al frente de las negociaciones representando al Bajo, para que pasaran a su casa, otros más, completaron el séquito, quienes saborearon hasta casi caer la noche una serie de platillos tradicionales que habían preparado en la casa de Miguelillo y que subrepticiamente habían metido por la puerta de atrás, mientras se llevaba a cabo la reunión. No hubo licor en aquella celebración, razón de sobra para celebrar aún más el finiquito. Se estaba quebrando una vieja costumbre " dizque muy arraigada en nuestro pueblo”, que las celebraciones sin guaro, no lo eran. Algo había pasado en El Bajo del Alumbre, las señales de un bello despertar se vislumbraban en el horizonte para aquellas gentes y sus familias y se demostraba fehacientemente que la solución de los problemas se puede dar mediante el diálogo. Cincuenta familias pasarían a ser propietarias de su destino, de su futuro... El fantasma del desalojo se estaba alejando y; de ahora en adelante, sería con su propio esfuerzo y el apoyo de la organización, que labrarían lo que sería la nueva vida. A no dudarlo, una vida entera de sacrificios al servicio de un patrón, estaba rindiendo sus frutos, claro es, gracias a la ayuda de un ente estatal y del desprendimiento de una familia, que había comprendido que era mejor tener un vecino amigo, que una partida de peones enemigos. Sus caras acusaban una felicidad inmensa, cuando ya entrada la noche se despidieron y quedaron de coordinar lo de la constitución de la cooperativa; para ello se reunirían con los promotores del INFOCOOP, en los próximos días, en vista de que la misma debería constituirse en tiempo récord y así se los habían prometido. Lo de la expropiación y adjudicación estaba muy encaminado y había muy buena disposición de las autoridades del IDA y lo que era más importante, había presupuesto para pagarle a los propietarios, ya que el gobierno tenía destinada una partida para soluciones de este tipo y en esta región, aparte de la buena disposición de los propietarios. Al parecer, las cosas no podían cuadrarse mejor, el alba iluminaría a cincuenta familias, en el Bajo del Alumbre las que se convertirían en propietarias del pedazo "en que caer muertos", después de varias generaciones de añoranzas. Pasaron los días y los ingenieros y topógrafos hacían lo suyo, a efecto de dar cumplimiento a lo acordado y por lo menos, cada quien sabía de antemano que pedazo de tierra le tocaría. ¿ Qué seguía ahora ? Abrir las entrañas de esta tierra bendita, sembrar la simiente y sacar sus frutos, ahora como propietarios. " Si a uno le va mal, pos es a uno y no a todos los demás..."

UNA COOPERATIVA Y UNA COMUNIDAD MODELO Días, meses, años, la comunidad del Bajo del Alumbre, se convirtió en timbre de orgullo para las comunidades vecinas, el modelo autogestionario aplicado y la comunión de ideales de los asociados, en cuenta " Felicillo” que bastante ayudó en su capitalización, rindió sus frutos. Sus productos eran comercializados a muy buen precio y hasta se expendían en las Ferias del Agricultor de la cabecera del cantón y algunas veces iban a parar hasta San José; la cooperativa les representaba para lograr un mejor trato a los pequeños agricultores. El trapiche se había industrializado y Justino siguió a cargo del mismo, sin desatender el cuido de su terreno. Comprendieron los pobladores del Alumbre, que en la unión de ideales estaba su fuerza y gracias a la Cooperativa, podían ser escuchados en todos los niveles de la Administración. Es más, se daban el lujo de contratar en temporada de cosecha, mano de obra vecina, ya que en la atención de las fincas propias y en las del anterior patrón, no alcanzaban todas las manos del pueblo. A todas luces se notaba el progreso comunal y los de más empuje, fueron levantando con ayuda crediticia y hasta bonos de vivienda, casas más decentes y de conformidad con las fantasías que habían hilvanado en sus años de miseria. La tertulia y la búsqueda conjunta de soluciones, siempre se siguió realizando en la Pulpería de Toño y debe destacarse que de ahí salió más de un plan conjunto sobre los temas a tratar y resolver en el seno de la cooperativa y no solo de la organización sino que a nivel comunal. Ahí se ideó el tipo de comunidad que deseaban todos para sus hijos, nietos y vecinos y con las ideas de Justino y otros miembros más del pueblo, daban rienda suelta a sus ímpetus creativos, en pro de la consecución de sus objetivos. En el área destinada para servicios comunales, se levantaba una escuela unidocente, la cual entraría a funcionar en el próximo curso lectivo, de acuerdo con las promesas gubernamentales, un sueño muy acariciado por los pobladores y por su parte, Toño, había reconstruido su antigua pulpería y en lugar de ella, se levantaba un edificio de dos plantas, debidamente surtido con los artículos indispensables y más de un producto o insumo agrícola, de los que ni siquiera, años atrás soñaba con expender. -¿ Vos sabés Justino ? que cuando empezamos todo esto de la cooperativa y de la segregación de tierras, yo estaba seguro que nos iba a llevar el diablo, porque nosotros, diay ¿ cómo te lo digo ? nosotros no estábamos preparaos pa' metenos en una empresa así, si es que nunca habíamos tenio nada y de un momento a otro nos convertimos en dueños, vos no sabes lo que conversamos aquí muchos, en cuenta yo, es que teníamos miedo, la verdá es esa y es hija de Dios, pero diay, pa' verdades el tiempo, ya ves como nos ha ido saliendo todo, si ahora más bien lo que da es miedo, pero de los adelantos que hemos tenio y de todo lo demás que nos falta. No ves, si hasta escuela vamos a tener, si Dios quiere. -Así es Toño, y vos ¿ qué crees ? Si yo también tuve miedo, tuve miedo cuando fuimos a San José a buscar ayuda, tuve miedo de dejar a mi familia, tuve miedo de enfrentame fatalmente a Felicillo, tuve miedo de perder mi derecho a permanecer en este pueblo, donde nací, en fin, las noches se me hacían interminables, esperando que naciera el nuevo día y seguir en la lucha. Lo que pasa, mi amigo, es que no podía demostrarlo ni a mí mujer, porque como vos sabés, todas las vidas de ustedes estaban puestas en mis manos y no podía ser de otra forma, debía jalar parejo, unque a veces sabía que el gobierno podía fallanos y como muchas veces hace, danos atolillo con el dedo, vos sabes que ha pasao muchas veces, la gente confía en un funcionario y éste le hace ver a uno que está haciendo todo lo posible y cuando uno se va de su oficina, ni se vuelve a acordar de su caso. ¡ Ay Toño !, no sabés cuantas veces lloré en las madrugadas, por la impotencia que tiene uno y porque muchas veces, la gente de la Confederación me decían que Felicillo no quería ni velos y que hablaran

con sus abogados, que de por si nos iba a echar a todos y yo pensaba que estaba en su derecho. Pero bueno, ora ya no pienso en eso, más bien hay otras cosas en las que uno piensa, la cosa es no estar quieto ni tranquilo, sueño con ver la escuela funcionando, conque un bus entre hasta por lo menos el alto y nos pueda conectar con la ciudá, sueño con que en otros sitios se produzca el milagro de El Alumbre y que cada quien posea su pedacillo de terreno, donde rasguñarle la panza a la tierra y que de ella brote su fruto pa' alimentar sus familias, sueño con una Patria de más propietarios que peones y sueño con el derecho a la educación pa' todos nuestros hijos, pero una educación de primera, no de segunda, ni de tercera, como es ora. En fin la verdá Toño, uno no se cansa de soñar...El plan no había fallado, no se aró en el desierto. Se le había demostrado al País, que cuando nuestro pueblo quiere y se le dan las oportunidades mínimas, se puede lograr de él grandes cosas, la Comunidad del Alumbre se convertía así en ejemplo para otras comunidades de lucha constante para forjar un futuro mejor. El Estado lo que había dado era la tierra, la asesoría para la constitución del modelo organizativo y lo demás había corrido a cuenta de ellos, tal es así que con recursos propios, habían construido la escuela y habían reparado varios kilómetros de calles y ello, sin pagar mano de obra. La escuela se llamaría Félix..., como el papá de "Felicillo", aquel hombre se lo había ganado, él fue el que inició la idea de la emancipación de los pobladores, mediante el arrendamiento para trabajo propio y así aquellos tuvieran la oportunidad de forjarse un destino más digno y no podía ser de otra forma, que aquellos le agradecieran. Le pondrían su nombre, al primer edificio público del Bajo del Alumbre. La representación de la cooperativa seguía en manos de Justino y dada su astucia para meterse en todos los organismos estatales y ser escuchado, la misma, era una de las "chineadas" del sector cooperativo. Los cursos que había llevado en la ciudad y en la cabecera del cantón con referencia al campo en que se desenvolvía, ya tapizaban en certificados de asistencia o aprovechamiento, parte de la sala de su casa, ahora constituida por tres cuartos, sala-comedor y cocina, con "excusao adentro", como decía Justino. Las traídas de agua de la quebrada eran cosa del pasado, ya que uno de los primeros logros de la cooperativa, fue el de la conexión de la cañería pública que venía de San Fermín y que de por sí la institución responsable venía extendiendo hasta el Bajo del Alumbre. Un enorme tanque de captación se levantaba cerca de la Pulpería de Toño y de ahí partía el "tubo madre", para casi todas las casas. En fin, las penurias del pasado, casi que eran eso, pasado, aunque no estaban olvidadas del todo, habían comprendido, que con el esfuerzo conjunto, podrían salir del status donde se les había ubicado por generaciones. Flor y los niños, los que por cierto cada vez más grandes, no se despegaban de Justino, tanto en las faenas agrícolas, como en las de representación organizacional y sumamente orgullosa, no se cansaba de comentar con amigos y familiares, sobre el vuelco que habían dado sus vidas. Confesaba abiertamente sus temores de cuando Justino se iba a la ciudad, para lo de la capacitación y de lo tonta que había sido por sentirlos, pero se consolaba diciéndose que "la pura verdá, yo tenía razón, un hombre tan puro como Justino, podía fácilmente perderse o ser engañao ¿ Qué sabe uno ?, porque diay Justino es valiente aquí en el Bajo, pero en la ciudá, la cosa es diferente, ahí no hay seguridá pa' las personas de ahí, menos pa' nosotros” Bueno, pero todo aquello había pasado y ella estaba segura de que su hombre cada día era más listo, máxime con tanto cartón que pegaba con tan poco disimulado orgullo en la pared de la sala.

¡ BIENVENIDA EDUCACION ! Los preparativos del pueblo apuntaban a que la celebración sería en grande, ¿cuánto habían añorado este momento ? , si de solo pensarlo, a muchos les daba grima, habían sido muchos los años que habían invertido en solicitudes, ruegos y ofertas, para que lo que estaba a punto de ocurrir en El Alumbre, se diera. La inauguración de la Escuela Unidocente El Alumbre "Félix..." se estaría realizando. Diversas personalidades de la política local, regional y nacional, se estarían dando cita en el pueblo, ¿ cómo si no ?, si de lo que se nutren todos ellos es de éstas pequeñas o grandes ocasiones, para llevar agua a sus molinos. Vale que El Alumbre estaba "vacunado" contra éstos bichos y así se los habían hecho saber en las elecciones pasadas, pero bueno, "al mal tiempo, buena cara” y si de ser corteses por ahora, con aquellas personas se trataba, ellos lo serían. Al fin y al cabo, su buena plata se habían gastado en la construcción del inmueble, el que junto con el mobiliario, eran aporte comunal. En lo único que había ayudado la municipalidad era en la conexión de los servicios básicos. Como en toda actividad de este tipo, habían invitados de primera y de segunda, de primera sería el ministro de educación, quien al entender de Justino, había confirmado su asistencia al delegado presidencial, cosa que no se había podido corroborar con Félix, ya que se encontraba fuera del país, en un asunto del banco. De segunda eran los regidores, el delegado presidencial de la zona, los síndicos, supervisores de educación y más de un "bombeta" de esos que se cuelan en cuanta actividad hay en los pueblos, para comer y beber bien y de paso, convencer a más de uno para que les apoyen en la próxima convención o elección. En fin, especies de especies, de todos los géneros habidos y por haber, quienes a cual más, “trataban de sacar su tajada” . Con decirles que hasta los choferes de éstos y de los otros, se daban aires de grandeza y volvían a ver las muchachas del pueblo, como si ellos fueran el personaje a quienes conducían; ofrecían recomendaciones y hasta empleos en los ministerios o de guardia civil a los hombres. En fin, todo eso lo tenía que aguantar el pueblo, el día de la inauguración de la escuela. Las familias por su parte, desde temprano se habían dedicado a preparar lo que sería el almuerzo para las distinguidas personalidades y esperaban con ansias que aquellas viandas fueran del agrado de ellos y de quienes se habían acercado al pueblo, para compartir la nueva y la bienvenida a la educación formal. Las mujeres mayores eran las jefas del acto gastronómico y las más jóvenes, ojo avisor, no se perdían detalle de los preparativos, porque algún día les tocaría a ellas atender a visitantes de esa magnitud. Aquella ocasión nunca la habían tenido y quizás, pasaría mucho tiempo para que se repitiera, de ahí que todos lucían sus mejores galas y por si acaso, cantidades comerciales de colonias, aguas floridas y de cuanto aroma pudieron echarse, se habían impregnado. El Alumbre estaba vestido de gala, la Escuela lucía esplendorosa y hasta una bandera de Costa Rica hincaba sus anillos a una rama de bambú, puesta a última hora para que sirviera, de asta a la enseña patria y le ayudara a " pavonearse” a los cuatro vientos, como señal de una escuela más al servicio de la educación del pueblo. En El Alumbre era bienvenida la educación. Mucho antes de que los invitados especiales llegaran a la comunidad, algunos funcionarios de menor rango se arrimaron a los patios de la escuela y preguntaron por los líderes locales ya que querían coordinar, según su decir, todo lo relacionado con los discursos y el corte de la cinta que lucía el portón de acceso. 0 sea, querían mandar la fiesta. Ordenaron que primero hablara un dirigente comunal, luego el supervisor de la zona, el diputado que vendría y posteriormente el ministro, que había confirmado su asistencia. Con lo que no contaban, ni siguiera ellos como adelantados, era que el Presidente, se había "guindado" en la excursión, "haciendo un campo en la apretada agenda" , por cuanto estaba muy interesado en el milagroso modelo de esta comunidad. En fin, viniera quien viniera, seria bien atendido, para eso se habían preparado ...

Un vehículo rural, pero de lujo y varios más similares, advirtió a los lugareños y no, congregados en la explanada, que visitas importantes habían llegado, la sorpresa, el Presidente, no contaban con él. Justino sintió que un hormigueo carcomía sus entrañas, nunca había hablado ante un presidente y debería elegir muy bien sus palabras para no herir susceptibilidades. Había aprendido en las diferentes charlas, que se podía tocar las sensibilidad de las personas o herirles, decirles las cosas que no estaban bien o lo que nos parecía, pero escogiendo muy bien las palabras y no dejar de sonreír. " Lo cortés no quita lo valiente”, le decía Manuel el de la Confederación a cada rato y bueno, al señor Presidente, él le diría algunas cosas que no le parecían, pero también le agradecería otras, como la expropiación de las doscientas hectáreas y la ayuda prestada para iniciar el trabajo de la cooperativa. Saludos iban y venían, los dirigentes comunales fueron presentados por los edecanes y otros adelantados, sudaban a chorros por lo imprevista de la visita del Presidente, pero en fin, acostumbrados a jugar con éstos trances, rápidamente acomodaron el orden de precedencia, para efectos de los discursos y llamaron la atención para empezar con la actividad, cuanto antes. El cuento: "es que el señor... debe atender otras actividades e hizo la deferencia de estar aquí, a pesar de que no estaba en su agenda, por ello no lo debemos atrasar..." - Mejor que no hable nadie de la comunidad, así no atrasamos al hombre - ¡ Estás loco vos ! , ésta gente se ha matao por tener esto bonito y si no habla alguien de aquí, se arma una de los diablos. ¿ 0 es que no te acordás que de aquí nadie votó la vez pasada ? Hay que darles pelota, Dios guarde - Está bien, pero... allá vos, si el hombre se agüeva, te echo la culpa, andá anunciate quien es el que va a hablar, esperate, esperate pa' ver quien es, ¿ quien era ? ¡ah sí ! Es Justino Rafael Mora Porras - ¡ Señoras y señores, jóvenes y niños ! Vamos a iniciar el acto de inauguración de la Escuela del Bajo del Alumbre, que ha sido bautizada, con el nombre de don Félix..., hoy con la presencia del señor Presidente de la República, quien ha hecho un gran sacrificio de tiempo, para estar hoy con todos ustedes. Tiene la palabra el señor Justino Rafael Mora Porras, dirigente comunal y persona muy querida en éste lugar Un aplauso, proveniente de los asistentes no se hizo esperar, era una ocasión muy especial y quien más sino Justino el que inaugurara la lista de oradores de la actividad. -Señor Presidente de la República, señor Ministro de Educación, señores Diputados que hoy nos acompañan y demás autoridades públicas, señor cura de San Miguel, amigas, amigos, jóvenes y niños de éste pueblo... - Se aclaró la garganta y se dispuso a manifestar su mensaje, discurso que había preparado mentalmente desde hacía varios días, tratando de que el mismo fuera claro, conciso y no hiriente, tal y como se lo habían aconsejado. - Perdonemen si no se expresar muy bien lo que siento, pero deben comprender que con costos, medio se leer y escribir y no es por culpa mía, nací y me crié en éste Bajo y como ustedes pueden haber visto y los que son de aquí saben, la escuela más cercana está a diez kilómetros de distancia. Así que, ¿ cómo se imaginan ustedes que uno va a poder hablar bonito ante tanta gente importante, que por primera vez hoy nos visita ? La vida de los habitantes del Bajo del Alumbre se ha desarrollado apegada a la tierra y es gracias a ella que podemos comer y hoy por hoy, la mayoría somos propietarios, dándole un ejemplo a otros pueblos de que cuando se quiere se puede. No crean ustedes que todo nos ha sido regalado, pasamos muchos meses de angustia y esperando el desalojo y vean... hoy estamos inagurando la escuela. Por eso ¡ bienvenida educación !, hace tiempo te esperábamos. - Volvió sus ojos hasta donde estaba Flor y continuó:

- Mis hijos y los suyos, podrán por primera vez, conocer de la verdadera educación y es bueno y justo que en éste momento, le rindamos un testimonio de agradecimiento a Marta, la de don Angel, porque ella, sin ser maestra, se ha ocupao de enseñale algo a los chiquillos, que han tenio ganas de aprender. Pa' ella les pido por favor, un aplauso Un estruendoso aplauso, dedicado a la maestra no formal que había tenido hasta ese momento El Bajo, se escuchó. Esta con mucha humildad se levantó de donde estaba y alzó sus manos. El Presidente rompió el protocolo y dándole un fuerte abrazo, le agradeció y conmovió a los asistentes. - Yo sé que estas señales de aprecio que le damos a Marta, se convertirán el día de mañana en un recuerdo imborrable, porque ella no tenía por qué hacelo, pero se ha sacrificao horas extras, pa' que los chiquillos y más de uno de nosotros, aprendiera por lo menos a medio escribir...- Don Justino, don Justino, que no haga muy largo el discurso, porque el presidente tiene que irse para otra actividad - Le susurró uno de los "asistentes” - Está bien, pero les decía, hace muchos, pero muchos años, esperábamos la escuela y siempre nos decían que no había presupuesto, pero cuando uno ve que pasa lo que pasó con los fondos de la comisión de emergencia, que llaman y que la plata se la llevan unos bandidos y parte sin novedá, es cuando se le pone la carne'e gallina, porque pienso que esa plata podía ver servio, pa' construir muchas escuelitas como ésta, que ha sido construida gracias a la ayuda de los propios vecinos, que han colaborao con materiales y mano de obra. La verdá es que es el orgullo de los vecinos, de que la escuela abra hoy sus puertas, pa' recibir éste montón de güilas tan deseosos de aprender, tantas pero tantas cosas que uno innora - Miró fijamente al Presidente y como comunicándose únicamente con él, le espetó: - Señor Presidente, yo sé que usté es una persona de buenos sentimientos y hasta con reconocimientos internacionales, por sus esfuerzos por la paz, pero ¿ no cree usté que quien sólo se ocupa de atender los asuntos de los vecinos y los otros, descuida sus asuntos ? Yo no soy quien pa'decile a usté estas cosas, pero recuerde que cuando el gato no está, los ratones hacen fiesta y un presidente que se preocupe más por la paz social de otros, descuida el campo de la justicia social en su país y por ende, descuida su vida personal también; pa' verdades el tiempo y ojalá que lo que yo le digo ora, no me salga mañana, pero usté podría cargar sobre su conciencia reproches no solo de allegaos, sino de un país entero, que confían en que usté se recuerde de sus promesas y cumpla con ellas, como un buen hombre y ser humano. No se lo quito, es muy bueno lo que usté ha hecho pa' trer paz a otros países, pero no debería descuidar a nuestro país, porque poco a poco vamos a ir perdiendo la nuestra; perdóneme si soy igualao, pero es que hace tiempo quería decile eso y gracias a Dios, hasta ora se m'hizo. Pa' terminar, quiero agradécele que se haya dignao a venir a visítanos y sepa q'este pueblo siempre lo va a recebir bien, pero por favor, no queremos oír promesas falsas, porque usté hoy se va de aquí y tal vez ni se acuerda de que existimos, pero nuestra lucha continua. Ora con educación pa' nuestros hijos se va a hacer más fácil la cosa, ya va a ver que sí, esa es una promesa que le hago a nombre del Bajo del Alumbre. ¡ Muchas gracias ! Todos se miraban perplejos, el Presidente acababa de ser galardonado con un alto premio a nivel internacional, por sus esfuerzos por dotar de paz a ésta región del mundo y; en un pueblito muy distante de donde se tomaron los acuerdos para premiarlo, un campesino le hablaba de tú a tú y sin ningún " tapujo”, sobre cosas muy "espinosas" y por las que quizás en otro país hubieran significado la desaparición de aquel hombre. Un handicap a favor de éste país pero que muy pocas veces es explotado; la posibilidad del pueblo de reclamar abiertamente a sus gobernantes, sobre las cosas

que no les parecen de su actuar. Hoy Justino, había hecho uso de ese derecho y para nadie era un secreto de que él era capaz de ello, pero , sin embargo, no se imaginaban que fuera a ocurrir. Hoy fue su día de desquite con las altas autoridades, diciéndoles lo que la mayoría comentaba y que callaba, por conformismo sumisión o "palanganeo", mal muy enquistado en las raíces mismas de su idiosincrasia. Los siguientes discursos, fueron de desmentido y combate al de Justino, lisonjas iban y venían, exhaltando la figura del presidente y tratando de abochornar al líder comunal. Cuando le tocó el turno al Presidente, se levantó de su silla y antes de dirigirse al podium se acercó a Justino y algo le manifestó al oído, al tiempo que le tomaba por ambos hombros y se los palmoteaba. Nadie pudo oír lo que aquel le dijo a Justino, ni lo que éste le contestó y ansiaban saberlo. El campesino calló y se dispuso a escuchar el discurso. - Señoras, señores, niños y jóvenes, no estaba en mi programa venir a visitar éste bello lugar, pero cuando alguien me contó que aquí la propia comunidad había construido la escuela y que lo único que el gobierno tenía que aportar era el maestro, me dije, éstos son los pueblos que hay que estimular y por eso voy a ir a visitarlo, de sorpresa, porque quería enterarme in situ de los logros, que sé son muchos lo que ustedes han tenido. Yo se que van muy bien encaminados y; ... - volvió a ver a toda la concurrencia y dijo: - y; mientras entre ustedes se cuente con líderes como Justino, el Bajo del Alumbre será próspero y feliz. Nosotros los políticos, a quienes en determinado momento de nuestras vidas, ustedes nos hacen el honor de nombrarnos depositarios de su representación , debemos mirar más allá de donde nace el sol y mucho más allá de donde se acuesta, porque el mal que aqueja a nuestros hermanos centroamericanos, sino le ponemos coto, tarde o temprano nos pasará la factura a nosotros. No estamos solos en la inmensidad del planeta y no podemos sustraernos a sus problemas de ahí que el poquito esfuerzo que aportemos para tender puentes de diálogo, donde hay barrancos de intolerancia, redundará en beneficios para toda la humanidad, en la que obviamente está inmersa Costa Rica. Los tribunales de justicia, en los que confío plenamente, tienen en sus manos todo lo relacionado con los fondos de la Comisión Nacional de Emergencia, sustraídos por unos sinvergüenzas y que como dijo Justino, hubieran servido para solventar muchas necesidades. Hasta ahí llegamos nosotros, serán los entes jurisdiccionales los que en definitiva digan quienes son los culpables, pero estén seguros ustedes de ello, que, quien cometa un acto abominable de esos y si lo hace en mí administración, no me temblará el pulso para enviarlo al ministerio público, porque en verdad, es asqueroso comprobar, como algunos se sirven de sus cargos para halar aguas a sus molinos...El aplauso no se hizo esperar, su discurso, el que había preparado para la ocasión, que hablaba de las bondades de le educación y otros temas gastados, había quedado en la silla donde estaba sentado. Justino había logrado que él se comprometiera con el pueblo , a sancionar a los corruptos e inescrupulosos y como sabía que era un hombre de palabra, que no había necesitado de "muletas" para estar en la Presidencia, daba por un hecho que cumpliría su promesa. Que se cuidaran aquellos que usaban los puestos de confianza para favorecer a sus socios, familiares o amigos, porque al fin, un mandatario se había comprometido, hastiado por tanto usufructo de los bienes estatales y de las influencias que aquellos puestos acarreaban, a castigar a los ordeñadores del erario público. - Les decía que; aquellos malos funcionarios deberán responder de sus actos y si no lo hacen ante la justicia, en algún momento lo harán ante Dios, por ello y para no atrasarlos más, quiero decirles que con Justino hoy he hecho un compromiso, ese compromiso sólo él y yo lo sabremos, pero tarde o temprano, rendirá sus frutos, en pro de un país más digno. El desde su campo y yo desde el mío, lucharemos por hacer de éste país un lugar más decente, sin tanto delincuente de cuello blanco que aborda las instituciones para saquearlas en beneficio propio y el de sus amigos. Justino.... tenga usted seguridad de que en el resto

de mi periodo gubernamental, así serán las cosas, y si tengo que dar cuentas de mis actos en algún momento ante el pueblo que me eligió y ante Dios que guía mis pasos, ahí estaré. La opinión pública será la responsable de juzgarme, porque como dijo Justino: Pa' Verdades el tiempo y yo adiciono a eso que , bajo cielo y tierra , no hay nada oculto. Muchas gracias a todos y que disfruten su escuela, que bien merecida la tienen Posteriormente a su discurso, el Presidente se dirigió hasta la puerta de la escuela y acompañado de Justino y otros miembros de la comitiva, procedió a cortar la cinta, dándola por inaugurada. - Este pedacito de bandera, me la voy a llevar aquí, junto a mi pecho, para que no se me olvide nuestro trato. ¿ O.K. Justino ? - Como usté diga y que ojalá lo ilumine, pa' que las decisiones que tome de hoy en adelante, sean las más buenas pa' éste país Abrazos, fotos y palmoteos de espalda iban y venían. Haría unos pocos años, el Bajo del Alumbre ni siquiera aparecía en el mapa de éste país y hoy la historia era otra. Un pueblo estaba despertando del letargo, consciente del rol histórico que le tocaba desempeñar; abría las puertas a la educación y no sólo eso, sino que su adalid, se daba el lujo de manifestarle a la máxima autoridad del país, que sus actuaciones no eran todo lo convincentes para llevarlo a buen puerto y hasta había logrado obtener de aquel, un compromiso secreto, el que todos ardían en deseos de conocer, para corregir el rumbo de la nave. A no dudarlo, El Bajo del Alumbre estaba dando una campanada de aviso a las actuales autoridades y a las demás comunidades del país, en el que anunciaban que la solución de sus problemas no debían esperarla del gobierno, sino que debería partir de sus propias entrañas y que una vez manifestadas sus intenciones, todos volverían sus ojos a ellos. No cabía duda de que su proyecto había tenido éxito hasta el momento. Habían conseguido mucho más de lo que se plantearon como reto. Cuando la comitiva oficial abandonó el pueblo y sólo quedaron algunas autoridades de menor rango y del tipo local, todos se volcaron hacia donde estaba Justino, para interrogarlo y manifestarle su apoyo y asombro, por su valentía. - ¡ Qué bárbaro Justino, usté sí que se rajó con el Presidente, yo daba por un hecho que se iba a levantar y nos iba a dejar plantaos ! , pero mire usté, más bien terminó de amigo suyo . -Pos claro hombre,¿ ustedes no se dan cuenta de que a ellos no les sirve echase a una comunidad encima, menos a un babiecas como yo ?, que no tiene pelos en la lengua pa' deciles lo que siente y la pura verdá, ¿ Cuántas veces les he dicho a ustedes, que nosotros tenemos el derecho de deciles a los políticos y a los gobernantes y funcionarios públicos, que ya no nos engañan, que el pueblo ya no come cuento ? ¿ Ah ? Pero ustedes no me hacen caso. -Diay Justino, pero como se te ocurre a vos que va uno a andar en esas, si por la tele está viendo como el gobierno hace esjuerzos pa' solucionar los problemas -¡ Por Dios ! Por tele, por tele, no ven que el gobierno no tiene que andar haciendo publicidad de las cosas que hace o que va a hacer, ¿ porqué ? Porque es su obligación, pa' eso los ponemos ahí, pa' que nos representen, pero no pa' que lo hagan todo por nosotros, no señores, es pa' coordinar las tareas que llevemos a cabo pa' buscale solución a nuestras desgracias y si nos pueden ayudar un poco, pos bueno, bienvenida sea esa ayuda, pero si no, la solución de nuestros problemas debe venir de nosotros mismos. Por eso es que con todo derecho, yo le dije al Presidente, lo que no me gustaba. Si esta escuela se juera construido sólo con fondos públicos, yo no pongo mi cara pa' echar un discurso, porque, ¿ qué gracia tiene ?, no jodan . No ven que es que la gente de aquí quiere que todo se lo hagan y cuando un pueblo como el de nosotros hace algo, más de uno saca la cara pa' felicítalo y echase las flores encima, como si jueran sido

ellos los que lo hicieron. Por eso es que el mérito de la construcción de la escuela, el arreglo de las calles y todo lo que hemos progresao, es de éste pueblo y de sus gentes, ustedes los políticos, lo que hacen es luchala pa' quedar electos, pero en después, si te vi ni me acuerdo. - Suave, suave Justino, no siempre eso es así -, a veces no hacemos mucho por falta de presupuesto... - Miren, la municipalidá de San Miguel ese es el cuento que se tiene, nunca tienen plata pa' nada, pero vean la fiesta que se hizo pa' la navidá, ¿Ah?, ¿ Qué me dicen de eso ? . Si no tuvieran plata, no hacen ese gasto. Pero no, llegan a servise con cuchara grande y los que beben guaro, ese día toman güisky o cualquier otra cosa cara, como si se jueran criado a punta d'eso. Es más vean lo que pasó hoy, más de uno preguntando que si no había traguito, que al hombre le gustaba echase uno por lo menos, pero que va, ya nosotros no caemos con ese timo, era pa' amarrásela ellos, que siempre andan como galgos de sedientos, pa' beber a costilla de las comunidades que's que dicen que ayudan. Aquí sí que se chuparon el dedo, porque a Dios gracias, nadie bebe guaro y por el contrario, estamos con la cabeza bien fría, pa' pensar en ¿ qué debemos hacer mañana, pa' progresar más ?Antes de continuar, miró la cara de atención de todos y al saberse comprendido, por lo menos en el fondo, continuó: - No que va, si a uno le ven cara'e tonto, pero lo que no tiene en estudio, lo tiene en colmillo, no ven que toda la vida hemos luchao pa' conseguir lo que tenemos ora y naide nos lo va a quitar, así tengamos que declaranos en guerra contra quien sea ...Todos estaban absortos, mas nadie osaba interrumpirle, porque en el fondo, de verdad, comprendían que aquel tenía sobrada razón. Los regidores y el síndico de San Fermín , asentían con la cabeza, pero no expresaban nada. Lo de la fiesta en la municipalidad, la verdad es que era cierto y a pesar de que los regidores de la oposición hicieron su alharaca, al final asistieron y hasta con invitados. Justino tenía razón y por lo pronto y para próximos eventos , deberían cuidarse las espaldas porque en pueblos pequeños todo se sabe. De por sí la fiesta habíase realizado con el presupuesto destinado para ello y no se había tocado un cinco de lo destinado para obras, que era muy poco y para los salarios que sí era mucho, porque la municipalidad de San Miguel no se salía del común denominador de lo que eran el resto de los concejos rurales, poca plata para obras, cero presupuesto para ayuda comunal, pero con una planilla rebosante, la que consumía con convenciones colectivas y laudos, la poca plata que entraba, por impuestos, tasas y partidas específicas, ya que de estas últimas nunca ha existido control de su efectivo gasto, para las que fueron destinadas. Así que era muy poco lo que podían hacer aquellos políticos de pueblo, para solventar las necesidades apremiantes de la comunidad, mucho menos las que como El Bajo del Alumbre, estaban algo alejadas de su epicentro. Así eran ellos y la verdad, no le iban a discutir a Justino, el que al parecer estaba muy bien informado. - Pero, bueno Justino, decinos ¿ qué te dijo el hombre ?, no nos dejés con el clavo - Diay no, eso si que no se va poder. Ya lo verán ustedes, denle tiempo, sino cumple, yo mismo me encargaré de hacécelo ver y en la cara, pero yo si creo que va a cumplir , porque estoy seguro de que es un hombre de palabra, es más ya verán ustedes la sorpresa que eso va a ser. La verdá es que como lo dijo en campaña, no necesitó de muletas pa' subise al trono de la presidencia y eso a muchos de su propio partido tiene disgustaos. Pero ya verán ustedes, llévenla suave, que yo no voy a revelar el secreto. Ustedes mismos se van a noticiar soliticos de lo que él me prometió Así, cada quien cogió para su casa y en la escuela solo quedó el eco de los discursos y el barullo que

se aproximaba y que en los próximo días inundaría sus instalaciones, de niños sedientos de instrucción. Las ventanas amables miraban hacia San Fermín unas y las otras, centraban su atención hacia El Bajo, vigilantes de que ningún niño se quedara en casa y que por el contrario, vinieran a ella para llenarse de sapiencia y le llenaran de caritas alegres, en sus primeros días de instrucción. El paso estaba dado, no iba a ser que por falta de escuela, lo alcanzado hasta la fecha, se viniera abajo. Entre más cultura ingresara por el boquete de la puerta, más ciudadanos firmes y disciplinados se formarían en ella, más ciudadanos críticos y conscientes de su realidad se incorporarían a las fuerzas productivas de esa comunidad y; de ser posible, más jóvenes ansiosos se dirigirían hasta el colegio técnico profesional de San Miguel, para continuar con esa gran ola de saber que se anunciaba en El Bajo. Al lado de la escuela, un pequeño apartamento, que sería ocupado por el maestro designado, el cual contaba con todas las comodidades, hasta "excusao adentro ", como decía Justino. - Vos sabes Flor, alguna vez pensé, que cuando Florcita tuviera edá de ir a la escuela, lo mejor era que nos juéramos pa' otro lugar, porque no quería que se criara siendo tan burra como nosotros, pero ya ves, ora hasta escuela tenenos ¿ Quién se lo iba a imaginar ?. Las necesidades que pasamos, las veces que los dejé solos, pero diay, todo tiene su precio, ora podemos decir que la vida es buena pa' nosotros y la verdá es que pa' todos los vecinos, porque diay, no he oído a uno que se queje, que le vaya mal, por lo menos tienen que comer y... - Ay Justino, ¿ cómo les va'ir mal ?, no ves que cada quien y a su manera, si hasta parecen gallinas cuidando a sus pollitos, todos tratan de conversar de sus problemas y raro en nosotros, con mucha sinceridá y así, poquito a poco, le vamos buscando la comba al palo y resolvemos los problemillas que se presentan. Si todos en éste país hicieran lo mismo, la verdá es que el gobierno se necesitaría solo pa' orientar las grandes cosas, pero las pequeñas, las internas, las arreglaríamos entre nosotros mismos - Así es Flor, ese, ese es el modelo de comunidá que quiero pa'este Bajo, un lugar onde ni siquiera haya que'ir a la alcaldía pa' denunciar a otros, sino que resolvamos los pleitos entre nosotros, bueno, hasta el momento así ha sido, o ¿ no te acordás del problemilla aquel con los linderos entre Chepe y Rafel ? Nos reunimos entre nosotros y asunto arreglao, cada quien dijo lo que tenía que decir y al final, hermaniticos otra vez. Es que es tan fácil arreglar las cosas. Decime ¿ cuando alguien de aquí ha ido a poner una denuncia por robo o cualquier otra cosa, ah, decime ? Nunca, porque sin que seamos comunistas, aquí todo es de todos, pero cada quien respeta el derecho ajeno. ¿ Qué raro ? Ora que lo pienso, vos sabes que es raro, pero como que la gente de aquí piensa igual y eso que somos pocos los que somos familia. Mira ora que lo pienso... esto está pa' estudialo un poco más. Puede ser, tal vez, por las congojas que hemos pasao y por las penurias que hemos enfrentao. Yo no había tenio tiempo pa' poneme a pensar en esas cosas, pero yo creo que sí vale la pena sacar un ratillo pa' eso. A lo mejor esta es una comunidá modelo, quien quita y pegamos el batazo - Sí mi amor, pero ora voy a poner un poco de agua pa' hacer café, me muero'e ganas, es que se me olvidó haber llevao un pichel arriba, pa' después del almuerzo, la verdá es que ¿ qué costaba ?. Bueno pero ya pasó. Ora a preparanos pa' recibir el maestro el lunes y acomodalo, pa' que se sienta a gusto. ¿ Qué ilusión con Florcita, verdá ? - Si, yo sueño con vela escribir y leer, vas a ver que naditica le va a costar, es que es tan inteligente la bandida y no vayamos muy largo, Pedrito no se le queda atrás, va por el mismo camino, unque le gusta estar pegao al televisor, pero cuando empiecen las clases, tenemos que que regular eso de las horas de ver, porque si no se atrasa. Recordá lo que dijeron el otro día, que la televisión puede formar, pero también deformar, si los chiquillos pasan mucho rato frente a ese chunche -

- Ah sí, en tiempo de clases, ese chunche mejor se apaga, porque si no van pasar pegaos a el y no se concentran Mientras untaba unas tortillas con abundante natilla, Flor pensaba en las mejores palabras para decirle a su marido lo complacida que estaba con su valentía y de como cada vez le admiraba más. - Justino, viera que me siento muy orgullosa por lo que usté le dijo al presidente y a los otros allá en el Alto, es que no me imaginaba que juera capaz, pero diay, sí que lo era. ¡ Ah bárbaro ! Yo por un momento pensé que ese señor se iba a enojar todo y se iba ir, pero cuando lo vi como medio pensativo, pensé que usté tenía razón y que él tenía que aguantase lo que usté le dijera, porque era cierto . - Siempre lo he dicho Flor, parecés nueva, pa' eso es la democracia, el día que no podamos decir lo que pensamos y creemos, ese día se terminó la paz y tendríamos que hacer la de los nicas, coger la montaña y pelear, por lo que creemos y en defensa de nuestros derechos ciudadanos.

TRATO JUSTO AL PEQUEÑO AGRICULTOR El problema que afectaba a las cooperativas, que como la del Alumbre, no podían capitalizar gran cosa y que sus deudas les consumían en intereses los aportes de capital de los socios, les llevó a replantear la estrategia y a pesar de que en el papel seguían subsistiendo, era muy poco lo que podían hacer por sus asociados, salvo que, mediante una alianza con el que les habían dicho, era el amo del cooperativismo del País y quien manejaba la capitalización de ellas, siempre y cuando los consejos de administración se plegaran a sus directrices y le perpetuaran en el poder de las más grandes confederaciones, lugar en donde y según le habían dicho a Justino, se hacía cualquier cosa por los amigos y muchas más por los enemigos. A pesar de que las tierras del Bajo del Alumbre producían con bonanza, ellos no habían querido ampararse al llamado Fondo de Contingencias Agrícolas, que para ellos no era otra cosa más, que una nueva manera de sacarle la plata al Estado, la que de por sí era de todos los costarricenses, para "resarcirse de pérdidas" que por diversos motivos tuvieran en el transcurso de su actividad y sabían de antemano que, quienes sacarían la mejor tajada de ese "fondo", serían los que siempre e históricamente se habían beneficiado de los fondos de los bancos estatales y ni siquiera pagarían sus porcentajes, al denominado "fondo". Por eso, no iban a ser ellos, los que habían combatido esas sinvergüenzadas, los que estarían dentro de el para "mamar la teta" del erario público, porque sabían de antemano que finalmente, serían los fondos públicos mediante condonaciones, subvenciones o declaratorias de emergencia, los que cargarían con el costo de sus negocios. Si querían ser una comunidad modelo, no serían ellos los que estarían dentro de ese programa, por ello la cooperativa del Alumbre, empezó a ser vista con malos ojos por parte de los líderes cooperativistas y el crédito oportuno, ya no lo fue tanto. La obstrucción se dio a todos los niveles y la producción de las pequeñas parcelas, ya no fue comprada como hasta entonces por el organismo rector de la producción y las esquivas de sacos de maíz y frijoles pegaban a los techos de las "trojas". No había un trato igualitario para todos los agricultores, ellos estaban aprendiendo la lección más amarga y de la manera más cruel, al ver perderse sus cosechas, para no caer en manos de los miserables intermediarios, quienes lucraban con la necesidad de las gentes, que como las del Bajo, eran lanzadas a ellos, para que por necesidad, entregaron el fruto bendito de sus tierras a cambio de mendrugos. Había que hacer algo, porque el modelo cooperativo, al menos en ésta comunidad, estaba a punto de fracasar y todo por no plegarse a los designios de "los de arriba", como se decía. Pasaron los meses y la posición de Justino se tambaleaba en el consejo de administración y ya se notaba un resquebrajamiento en la línea férrea que había mantenido la cooperativa desde su fundación. El pánico de algunos hacía que perdieran la identidad con el líder y hacía que pensaran que era una "cabezonada" de Justino al no querer acatar las disposiciones de la confederación de cooperativas y que ello solo desgracia traería al pueblo, porque estaban acudiendo a los intermediarios, quienes no les pagaban ni lo invertido para producir sus productos. El tal precio justo para el agricultor, se había quedado en eso, en un decir, al menos en el caso de ellos, amén de que toparon con que había grandes industriales que estaban manejando la producción y recomendaban al gobierno la asignación de cuotas de producción por región, a efecto de mantener la oferta baja, aún y cuando aumentara la demanda, a efecto de obtener mejores dividendos. Sin saber mucho de

economía Justino se dio cuenta de la jugada y a pesar de que así se lo hizo ver a los vecinos, en la siguiente asamblea de la cooperativa, fue invitado a ceder su puesto a otro de los socios. *************** - ¿ Cómo estás Félix ? -¡Puta Justino, qué alegría verte ! ¿ A qué debo el honor?- Pos diay, usté debe saber más o menos del asunto, pero me dije que tal vez era mejor venir a contáselo personalmente, pa' que me de un consejo de amigo, ya que yo por más que le doy vuelta al asunto, no le encuentro solución - Mirá Justino, yo te voy a ser sincero y quiero que tomes lo que te diga, como si te las estuviera diciendo un hermano, porque eso es lo que somos ¿ o no ? - Claro siempre hemos sido más que amigos y lo seguiremos siendo - Bueno, la cosa está así; te lo digo porque yo, al igual que vos en algún momento he sido líder y si no se está preparado para cuando nos toca el turno de relevo, nos afecta, como te está afectando a vos ahora el no resultar electo. Tenés que saber que cuando uno está montado, cree que lo que está haciendo es lo mejor y si hay resultados positivos de esa gestión, más se satisface la vanidad de uno, pero como en el caso tuyo, que llevabas varios años ahí, creías que lo que estabas haciendo era lo mejor, máxime cuando los otros no osaban corregirte el rumbo, porque o son hipócritas, lisonjeros o buenos para nada o bien, para no complicarse o pensar sobre otras alternativas, aceptaban lo bueno o malo que saliera de vos - Hombre pos sí, todo lo que estás diciendo como que tiene razón... perdón seguí - Te decía entonces, que en determinado momento el líder tiende a desgastarse y es cuando surgen problemas y quienes te habían apoyado o callado acerca de tus decisiones, buenas o malas, aquellos que aplaudían tus iniciativas, ya no van a ser tan efusivos y empiezan a cavar tu tumba, por debajo claro está, porque no se atreven a plantearte las cosas de frente...-Pucha, ora que lo decís, vos sabés que en algún momento lo sentí así, porque algunos no me daban la cara cuando nos reuníamos y eso desde el año pasao, pero diay, como es uno, no le di nada de importancia -¡ Ah, bueno ! es para que veas, desde hace tiempo ellos no estaban de acuerdo en tu forma de manejar los asuntos, por carbón de alguien o por iniciativa propia; la cosa es que no se atrevían a decírtelo, porque no tenían mejores ideas o bien por conformismo, pero lo que se dio en tu caso, ocurre muy a menudo y es natural, el líder se desgasta y si no se retroalimenta, con mucho mayor razón pasa de moda por decirlo de alguna forma y sus iniciativas a pesar de ser las más consecuentes con la marcha de la organización, así no parecen serlo para el resto de la Junta Directiva - Bueno, está bien, confieso que tal vez yo fui muy autoritario y creí sentirme capacitado para estar ahí, porque a según yo, si no era así, las cosas no marcharían bien, pero bueno, hasta ora me doy cuenta, que tal vez lo que yo estaba haciendo nu'era lo mejor...- dijo, casi como un susurro y comprendiendo que era cierto lo que Félix le decía y lo que él mismo estaba diciendo. - Ahí estás equivocado, lo que vos hiciste en su momento era lo que debía hacerse, pero el gran error tuyo fue haberte perpetuado en el poder y no haber formado otros líderes que siguieran tu línea de pensamiento y acción y ahora ese error, te está pasando la factura. Pero, bueno, tranquilo , el mundo no se

ha acabado, tenés mucho más en que pensar, una linda familia y un bonito terreno. Lo que tenés que hacer de ahora en adelante es ocuparte de ellos y de tu pedazo y demostrarles con ejemplos que vos tenías la razón y además de eso, mirar con ojos optimistas la buena marcha de la cooperativa. A lo mejor, quien quita, el día de mañana te piden a gritos que volvás a coger las riendas de ella o; a lo mejor funcionan mejor sin vos. Eso sólo el tiempo lo dirá. Por ahora, hacé las que hacemos los políticos, cuando no estamos mamando la teta grande, nos retiramos a los cuarteles de invierno, como se dice, y esperamos el momento oportuno para volver atacar - Mirá Félix, vieras que reconfortada me has dado, ya lo decía yo que con las únicas personas que podía hablar de esto era con vos o con Manuel, que no está, como que anda juera del país y por dicha, te encontré a vos, sino me viera devuelto hasta San Fermín todo agüevao. Es que en El Bajo, no quería hablar con nadie, quedé como receloso de todos, pero ora, la verdá es que tenés razón, voy a continuar aliao a la coope, porque hasta pensaba retirame y; como vos decís, voy a dedicame por entero a la familia, la puritica verdá, es que ellos me necesitan más que nunca, ora que están más grandes y de verdá, no es que esté chimao, bueno, al principio sí, pa' que te voy a engañar. Me voy a dedicar a ver los toros desde la barrera, a ver que resulta d'eso. Vieras como te agradezco el tiempo y los consejos que me diste y de verdá, me sentí, hablando con vos, como si juera con un hermano - ¡Ay Justino, si para eso estamos ! No te olvidés nunca que aquí en verdad tenés un hermano y tenés que tener presente siempre eso, porque, te he admirado y siempre te admiraré, si bien es cierto que en algún momento de nuestras vidas el espíritu del antagonismo se cruzó entre nosotros, también es cierto que aquella prueba a que nos sometió Dios, sirvió para reconocernos nuevamente y de ello sacar algo bueno. Que Dios te acompañe. ¡ Ah otra cosa Justino !,yo iba a ir allá la otra semana, pero ya que viniste, necesito que me ayudés, es que compré un motor para el trapiche y dentro de unos días van a ir a ponerlo, quiero que me le volés ojo a los carajos que van a ir a hacer ese trabajo, deciles que te expliquen como funciona y luego lo probás, para ver que tal trabaja. Yo creo, que con ese motor vamos a producir más y sin que te jodás tanto. Es de segunda, pero me dijeron que está con toda la pata - ¡ Ah qué bueno !, ora sí que vamos a aumentar la producción, vieras que buena se está dando la caña, es que esa variedá rinde que es una barbaridá y ora con motor, nadie nos va a rayar, vamos a llenar de dulce el mercao, esperate y verás...Un apretón de manos selló la despedida de aquellos entrañables amigos.

*************** ¡ Oh salidas las de Juan Sapa ! Fijate Justino, que propuso en la coope, que cogiéramos todos los sacos de frijoles y maíz que tenemos almacenaos y los lleváramos hasta San José y los quemáramos frente a la casa presidencial, como protesta por la no compra y por el engaño del consejo, que nos hizo sembrar ese montón de manzanas y ora no nos lo recibe. ¡ fijate ! Como si estuviéramos cargaos de plata - Pos la verdá, es que no es mala idea, así se dan cuenta en todo el país que las políticas agrícolas del gobierno no son las más buenas y que quienes manejan los programas de regionalización de la agricultura no son más que empresarios agrícolas o testaferros de aquellos, porque la pura verdá es que eso son. Las cámaras de industriales les dictan las reglas y ellos como son empleados o socios de ellas, hacen lo que les dicen, pero parece que nadie se da cuenta de eso y nosotros, somos los que pagamos los platos rotos, de los desaciertos de esas políticas. Achará, desperdiciar lo que uno se ha jodio en la tierra, sería como botar la plata. ¿ Y qué decidieron Miguelillo ? - No que diay, que vamos a escrebile una carta al Presidente y a los señores del consejo, pa' ver que nos resuelven y si fallamos, el señor de las cooperativas nos ofreció un crédito pa'que la cooperativa compre toda la producción y la almacene y una vez que se arregle eso o cuando haya carestía de maíz y frijoles, la saque al mercao y así hasta se puede ganar un poco e' plata. ¿ Cómo lo ves ? - Diay, ¿ qué querés que te diga ? Yo nunca estuve de acuerdo en ese tipo de negocios, porque son de mucho riesgo, es jugásela, pero si no hay de otra. Te juro que me da miedo, porque esos productos no son de guardar mucho tiempo si no se cuenta con silos y si los intermediarios nos siguen jodiendo pa' agarranos por hambre, a lo mejor a la cooperativa se la lleva el diablo - Diay muchacho, si se la lleva el diablo, es a la cooperativa y no a nosotros. - Tan tonto pa' hablar que sos Miguelillo, no ves que la cooperativa somos todos nosotros y ¿ dónde quedaría la palabra del pueblo, si la organización que tanto nos ha costao crear y mantener, la liquidan por deudas ? ¿ Ah , decime ? Si bien es cierto, los intermediarios y los industriales, aliaos con los funcionarios del gobierno nos tienen entre un zapato, también es cierto que somos nosotros los que tenemos que idear otras formas de vender nuestros productos. ¿ Qué te parece llevándolos a las ferias del agricultor o a las mismas calles y se los vendemos directamente al consumidor, unque se enojen los industriales y nos echen la polecía ? ¿ Ah ? - Ahí está, eso es lo que quería oír de vos, una buena idea, unque es de traba, pero diay, del ahogao el sombrero, como decía mi agüelo. No nos vamos a comer todo, alguien tiene que respondenos por las políticas equivocadas del gobierno Digo yo, es una idea, ustedes verán si la ponen en práctica, por el momento yo me la voy jugando con lo que me gano en el trapiche y a la gente que le entregamos dulce, ahí les meto maíz y frijoles, pero lo que son ustedes, si están fregaos. Es que te confieso, a mi me da miedo que caigamos en ese cuento de los créditos pa' las cooperativas, porque según me contaban el otro día en la confederación, te obligan a pedir más de lo que necesitás y luego se te va un montón de plata en comisiones, que llaman, que la pura verdá no se quienes se las llevan, pero ahí dicen, que hay un montón de vivillos, que hacen negocios con los créditos, bueno eso es lo que dicen y está en ustedes aceptarlo o no, la verdá es esa. Lo que yo no quisiera es que se los vayan a llevar entre las patas y después, parte sin novedá...- No si por eso te vine a preguntar a vos, si es que las buenas ideas son pa' ponelas en práctica y unque vos no estés en la directiva de la coope, pos la verdá, ora me doy cuenta, que unque jueras un necio, tus ideas eran buenas y estaban encaminadas a no perder nuestra libertá, cayendo en manos de los sinvergüenzas que siempre hacen negocio con nuestro sudor y el sacrificio de nuestras familias. No creas,

por eso vine a visitate - No y te agradezco Miguelillo, que me contés todo lo que ahí pasa, porque lo que soy yo prometí no meteme en nada, diay porque uno sabe cuando estorba y pa' ver como les va. Yo sinceramente creo y le pido a Dios que les vaya bien, ojalá piensen muy bien todo lo que hacen y que no pierdan de vista que son representantes de todos nosotros y que la cooperativa es del Bajo del Alumbre, un pueblo nacido al amparo de la lucha por la dignidá - Bueno Justino, no te quito más tiempo, voy a haceme un pedazo de sobao, pa' llevale a mis tatas. ¿ No tenés un poco'e canela pa' echale ? -Sí, ahí en aquella solera hay, cogé, sacá d'esta miel que está más buena, es que aquella está un poquillo ácida. Ora voy a revolvelas, pa' emparejalas. Hacéte dos o más, los que querrás llevar La constante se mantenía, el pequeño agricultor, si estaba afiliado a pequeñas organizaciones, era víctima de la voracidad de los industriales e intermediarios, que como decían en el pueblo, en contubernio con los rectores de la política agro-económica, pagaban a precios de hambre la sangre, el sudor, las lágrimas e ilusiones, de aquellos hombres y mujeres, que perdían sus cinturas por estar agachados al surco , rogando a Dios por una buena cosecha. Los créditos se los seguían repartiendo los "tagarotes" de siempre, quienes afiliados al famoso fondo de contingencias agrícolas no arriesgaban nada y por el contrario, sacaban jugoso provecho de sus invenciones, al amparo de los políticos de turno. Al parecer nadie estaba interesado en poner coto a tanta injusticia. La impunidad, " el chorizo", " la chiza", la propina, la comisión y muchas triquiñuelas más, se habían entronizado en éste País, pero al margen estaban siempre los que como Justino, pagaban con sus vidas, el pacto que habían hecho con Dios de producir honradamente y sin los incentivos de aquellos. Incentivos había para la industria, para el turismo con jugosas exoneraciones, condonaciones legislativas había para las grandes deudas y exoneraciones para los grandes piratas del fisco y del erario público. Habían certificados de abono tributario para los evasores y certificados de abono forestal, para los que ganaban solo plusvalía a la tierra, no así para los que la ponían a producir como los habitantes del Bajo del Alumbre y miles y miles más, perdidos en la geografía de este sacrificado y saqueado País. Lo extraño era que, a pesar de que el pueblo se daba cuenta de todo aquello, se sentía totalmente extraño de todas esas tropelías de quienes usufructuaban el poder político y económico. No existía ningún interés por decirles en la cara a aquellos, lo que estaban haciendo con éste País, una Nación saqueada y entregada hasta en su soberanía, para seguir amparando los privilegios de unos pocos en detrimento de la mayoría, que cada cuatro años era engañada con vanas y falsas promesas, bajo la cantaleta de "un país democrático y respetuoso de los derechos humanos ...” La legislación era y había sido modificada a criterio y gusto de los industriales de las riquezas forestales y las vastas costas a ambos océanos, con sus riquezas marítimas y escénicas ya tenían precio y dueños externos, al amparo de testaferros nacionales que se prestaban para que esas multinacionales del vicio, el juego y la prostitución sentaran raíces en ésta tierra con precio, donde todo lo tenía, hasta las conciencia de la gente que se decía amarla hasta la saciedad y según ellos, propiciaban regímenes más justos para los menos privilegiados o más vulnerables en sus campañas publicitarias bajo una cacareada perorata de justicia social, con la que pretendían engañar al pueblo una vez más. Siempre había sido así, aunque en la conciencia colectiva aflorara aquello de que "si la ensarto

pierdo y si no también", porque se peca por comisión o por omisión, de palabra o de hecho y esa conciencia colectiva, muy dormida , carecía de líderes carismáticos que la condujeran a buen puerto, para acabar de una vez por todas con la corrupción entronizada en todos los estratos, de un lado y del otro, en los partidos políticos y en las organizaciones de base. El pueblo sabía muy bien todo aquello, pero: ¿ Para dónde tomaban ? La publicidad, los medios de comunicación, los tontos útiles y una sarta de vagabundos y vividores de la política electoral, se encargaban de adormecer aquella conciencia, con las falsas promesas de que el que seguía sí iba a poner coto a tanta ignominia, a tanta mentira, al saqueo de las arcas públicas y al delito fiscal con amparo de autoridades políticas superiores. A la corrupción y al narco-negocio, en donde figurones de la política y la élite nacional, ya estaban inmersos, como grandes padrinos y zares de ese decadente, pero muy lucrativo negocio. A la vista saltaba que, por ejemplo, lo que había sido un centro para la enseñanza de las artes, hoy estaba convertido en un centro de prostitución internacional, a la sombra de los mismos “padrinos” que manejaban el juego y los vicios del país y todo al amparo de los " incentivos a la industria turística" Si el País habla caído tan bajo, ¿ cómo pretendían Justino y sus vecinos salir del “atolladero” en que estaban , trabajando decentemente y sin ofrecer propinas u obtener créditos, sin ofrecer comisiones ? Eso jamás lo lograrían. Los intereses de los políticos y sus segundones, se concentraban en hacerse del favor de aquellos “mecenas” de la economía nacional, a través de algunos que a su nombre, negociaban lo relativo a los paquetes de acciones y porcentajes de aquellas rentables actividades, que iban a parar o a bancos del exterior o a nombre de sociedades anónimas muy bien cubiertas. La mesa estaba servida, éste era un país sin ejército, con una conciencia adormecida y más interesado en el resultado de los partidos de fútbol del domingo, que en los oscuros negocios que algunos hacían al amparo de la sombra de la impunidad política y económica, a la sombra de la inmunidad que daba el saberse protegido por aquellas “autoridades políticas superiores” La utopía del modelo de comunidad organizada que había pretendido Justino establecer en El Alumbre, donde fueran independientes en sus decisiones, independientes en su economía e independientes en su pensamiento, había sucumbido por la notoria apatía y desorganización de los entes gubernamentales y sus tecnócratas, que no estaban dispuestos a perder su comodidad, por asegurar un futuro digno a las comunidades, que como el Bajo del Alumbre, había luchado sin descanso para asegurarle a sus hijos y nietos un futuro digno y feliz. La verdad es que para la mayoría de los funcionarios gubernamentales, los fijos y los de paso, las añoranzas de pueblos como El Alumbre, que soñaban con un mañana mejor, les tenía sin cuidado. Cualquier acción que tomaran sería aplacada con un poco de propaganda gubernamental, que resaltara los esfuerzos que el gobierno hacía, por cumplir cabalmente con sus ofrecimientos de campaña y con las expectativas de la comunidad y agregaría la muletilla : " no sabíamos que la cosa estaba tan mal” ello para echarle la culpa al anterior gobierno. Hablaría de los créditos blandos para la agricultura, sin decir para quienes iban destinados éstos créditos, hablaría de los gastos presupuestados en infraestructura vial, sin decir obviamente, hacía donde conducirían esas carreteras, hablaría de la contención del gasto público, sin decir que se contendría en salud, educación y alimentación; hablaría de los esfuerzos del fisco para contener el "contrabando hormiga", sin decir que el "contrabando elefante", aumentaba día con día, hablaría del combate a la miseria, sin especificar a quien o a quienes, le compraban los alimentos que con pomposa publicidad repartían. Hablarían en fin, para las gentes de la ciudad, sin dirigir su discurso a las gentes del área rural. En fin hablarían, publicitarían, "cacarearían", como si fuera su obligación publicitar. Ya lo decía el papa de Justino : " Quien da y publicita, su acción vuelve cuita cuchita y a Dios irrita" y que ciertas esas palabras y cuan descriptivas de la publicidad gubernamental. Nadie tiene derecho de publicitar lo que hace, si lo hace en virtud de un mandato o bien cumpliendo

con su deber, para eso les pagan, para que den soluciones a los problemas y no para que en los últimos dos años de su gestión, inflen lo poco que han hecho, con la intención de atrapar nuevamente al incauto pueblo. El pueblo poco a poco, así lo entendía, a pesar de los infructuosos esfuerzos que hacía la maquinaria gubernamental para dejarle llano el camino, al candidato oficial.

EL MISMO PERRO, PERO CON DISTINTO CUENTO

- ¡ Buenas tardes Justino ! ¿ Cómo está señora ? - Buenas tardes señores, ¿ en qué podemos serviles ? - Mirá Justino, como sabemos que vos no te andás con vainas, vamos a decirte sin rodeos en que andamos - Así me gusta, que hablemos sin tapujos y di'una vez al asunto Ya Justino y Flor sabían de que se trataba, las banderas que adornaban el vehículo que utilizaban aquellos para desplazarse, les acusaba como militantes del partido de oposición al gobierno actual y por cortesía, de acuerdo con lo que siempre habían hecho, les pondrían atención, pero no más. - Mirá Justino, resulta que como vos lo sabés, pertenecemos al otro partido y siendo que necesitamos líderes buenos y valientes, queremos proponerte que nos ayudés y cuando estemos en el gobierno, o sea cuando estemos arriba, no dudés que vamos a recordar este apoyo tuyo, en pro de la candidatura del hombre que va a salvar a éste país. Antes de que nos digás algo, dejame terminar, sabemos que estás muy quitao, pero diay, sólo los ríos no se devuelven y lo que vos decidás, se va a saber en todo el pueblo, cosa que nos ayudaría mucho pa' ganar el distrito. ¿ Qué te parece ? Un momento de reflexión bastó para que Justino analizara el sentido de la propuesta que le hacían aquellos dirigentes locales y sin darles tiempo a que insistieran en ella, les contestó : - Y ustedes ¿ qué dijeron ?, que vamos y le hablamos a éste babiecas y que echa por el suelo todos sus principios y se nos une en un engaño más. Pos vieran que no señores, hemos decidido al menos en mi familia, que vamos a apoyar únicamente a quien de verdá se comprometa por escrito a terminar con tanta cochinada y que desde ya, con la fracción de su partido en la Asamblea, empiece a dar muestras de que así será, presentando los proyectos pa' sanear de una vez por todas éste país. Antes no y, como sabemos ustedes y yo, que no va a ser así, entonces no los podré apoyar - Mirá Justino, créenos, no ves que el hombre es hijo de quien le dio al País las garantías sociales y vos sabés, hijo de tigre sale pintao... -¡ Ay por Dios ! ¿ Quién les ha dicho a ustedes que una segunda versión es igual o más buena que la original ? Eso es muy dificil y aparte de eso, las garantías sociales no sólo son obra del doctor, sino de la unión de varias fuerzas, entre ellas la iglesia y el partido comunista, que influyeron fuertemente en él, porque sino se caía y además, ya se les olvidó a ustedes que éste muchacho sólo se ha dedicado a la política y aparte de'so de su lealtá según dicen, hay mucha tela que cortar, porque lo que le hizo a Carazo cuando era su ministro de Relaciones, lo pone a uno a pensar. Salió huyendo a las primeras de tanteo y desconoció el gobierno del que formaba parte, ¿ o no ? ¿ Ah ?

Miren amigos, uno está desterrao aquí, pero de todo se da cuenta y pa' eso es esta cabecita, no solo pa' ponese el sombrero, sino pa' dale vuelta a las cosas y pensar en que quizás, ninguno de los que están de candidatos, ofrecen algo bueno y sincero. Hum, qué va, ya no nos meten diez con güeco. Yo no sé como es que ustedes todavía andan en esas, porque si acaso a lo que llegan algunos es a la municipalidá, pero de ahí no pasan. ¿No ven que los altos puestos ya están repartidos, por aquellos que se sirven de ustedes y de la plata que gastan pa' tratar de embarcanos y en después..., ni siquiera de los tontos de San Miguel se acuerdan. - ¡Oh éste Justino!, ¿ de donde sacás tanta cosa, pensalo no hay mejor candidato que éste o me vas a decir que'l otro es mejor?. No que va, si como éste no hay, es más, él ha madurado, antes era muy jovencillo, ahora ya está más fogueao, ¿ no te parece ? - Si claro , ora está más fogueao, es más vean como es que primero dijo que no iba a ser candidato, pero cuando la vio segura por los desmadres del otro gobierno, se le metió al otro candidato; ese que parecía buenillo y por lo menos más estudiao y lo jodió, sólo por el apellido. ¿ Ah ? ¿ Qué me dicen a eso ? Digamen si no es cierto, digamen si no se cree dueño del partido de ustedes, sólo porque es hijo del doctor. ¿ Qué es eso ? Aquí nadie tiene dueño, menos los partidos políticos que se supone pertenecen a todos, ¿ o es mentira ? - Bueno Justino, tranquilo, está dicho todo. No nos vas a ayudar, está bien, pero decinos, ¿ vas a ayudar a los otros ? - Menos, ¡ por Dios ! yo no confío en una persona que es desleal con los suyos y que se deja llevar por los vicios. Si en su vida privada es así, imagínesen como será con quienes no tenemos nada de parentela con él. No, cuenten con eso. No confío en ninguno de los dos, menos en éste otro -Bueno, nos vamos, mucho gusto de conocelos y ahí nos vemos, hasta luego - Hasta luego y que les vaya muy bien Cuando salieron del Bajo, después de hacer otras visitas, casi que con el mismo resultado que obtuvieron en la casa de Justino, los dirigentes, perdidas sus miradas en el infinito, se dedicaron a comentar de lo raro que era éste pueblo, parecía monolítico y aunque por diversas circunstancias, su líder ya no lo era tanto, las ideas de aquel habían calado hondo y de verdad, no aceptaban ningún cuento. En pocas palabras, no se dejaban engañar, ningún mensaje o discurso, les hacia desistir de su muy bien cimentada opinión. Era un pueblo hasta cierto punto, muy bien informado. Bueno, pero lo bueno era que la mayoría tampoco apoyaría al otro candidato. Es decir, El Alumbre ni sumaba, ni restaba. La verdad es que no entendían porque desde San José les habían dado la orden de visitarlos, si la pura verdad, no representaban gran cosa, a lo sumo trescientos votos. En fin, habían cumplido y tenían una panorámica de éste pueblo. Pueblo raro, extraño, diferente, porque en la mayoría de los pueblos de San Miguel, encontraban los dirigentes que necesitaban para repartir " el nuevo y esperanzador mensaje” , que ellos repartían. Aquí no habían " pegado”, se mantenía el criterio de las elecciones pasadas. Para los estudiosos del movimiento político electoral, quizá significaba un bonito reto. ¿ Qué pasaba en El Bajo del Alumbre, que la gente estaba tan "despierta" y no confiaba en promesas de políticos ? y: ¿ cómo hacer para destruir esa férrea oposición a creer en ellos ? ¿ Se podía dar en otros lugares ? Era muy peligroso, por cuanto de repetirse el fenómeno "Alumbre", la historia podría ser muy diferente en futuras elecciones.

PA' VERDADES EL TIEMPO Florcita por su parte, respondía con creces las expectativas que se habían hecho sus padres, era excelente estudiante y ya enseñaba a Pedrito las lecciones que aprendía con dedicación en la escuela. La verdad, como decía Justino," la familia iba creciendo y ahí la iban pasando”, sus vidas no eran tan malas después de todo. No ansiaban los lujos por los que en la capital se peleaban y hasta se destruían familias. El consumismo estaba ausente de éstas gentes y vivían de lo necesario para subsistir. Bien lo decía Justino : " ¿ Quién puede soñar con algo que no puede mantener?” " si lo que uno no necesita, le estorba...” Mientras no se careciera de lo básico, podían perfectamente pasarla. El salario por la administración del trapiche, permitíale a Justino satisfacer las necesidades primordiales y por las cuales debía utilizar dinero, amén de que a la par de la tarea de Félix, sacaba la suya, producción que era vendida rápidamente en el mercado. La mayoría de los otros alimentos ahí estaban. Los comerciales de la televisión no hacían mella en los hábitos consumistas de ellos, una gran ventaja, si de economizar se trataba, porque eran inmunes a ese tipo de nociva publicidad, que incitaba a producir más para ponerse los pantalones o los zapatos de marca tal o cual o a llamar al teléfono aquel para ordenar “comida express”. Realmente, para llevar una vida digna con una profunda unidad familiar, no se necesitaba todo aquello que anunciaban en la televisión, más bien les hacía corroborar que en El Alumbre llevaban una vida sana y en profunda comunión con las doctrinas de las sagradas escrituras aún y cuando para recibir las bondades de los que se hacían llamar representantes de Dios en la tierra debían trasladarse hasta San Fermín. Austeridad, lealtad, unidad familiar y entretención con las cosas más sencillas, los adelantos tecnológicos, los habitantes de éste pueblo los toleraban y los utilizaban pero con la conciencia plena de que no se debería depender únicamente de ellos. Así podíamos encontrar una cocina eléctrica, pero en la cocina seguía reinando el fogón, había televisores, pero el radio a baterías siempre estaba a mano para trasladarlo al corredor o a cualquiera otro sitio, hasta al trabajo iba a veces a llenar de música o noticias las tareas. Hubo elecciones y si bien es cierto del pueblo alguna gente fue a votar al distrito electoral del Bajo del Alumbre, de trescientos cuarenta votos posibles de conformidad con el padrón electoral que se ubicó en la escuela, solamente emitieron su voto, sesenta personas, casi solo jóvenes, quienes aún sin comprender el juego político electoral, se dejaban llevar por la publicidad y el "buen cuento" de las muchachas guías, que desde San Fermín vinieron a invitar al votante a " cumplir con el sagrado deber ciudadano”. Miembros de mesa importados, guías importadas y bullicio importado. El pueblo estuvo atento al proceso electoral, pero con sentido crítico, ya no se reunieron en la Pulpería de Toño sino que cada quien en su casa, se dedicó por primera vez a ver desde su televisor, los que tenían, de como vivían el proceso otras comunidades del país. Al final de la jornada, ganó las elecciones el partido de oposición, su mensaje que no era novedoso, había calado hondo en el electorado o por lo menos fue más creíble. Justicia social, garantías económicas, más empleo, crédito blando para los agricultores, vivienda, bonos escolares, familiares y en fin, " el oro y el moro”, la misma historia, pero con diferentes matices. El prestigio internacional que había ganado el anterior presidente no sirvió para que su partido tocara la conciencia del elector, ni para que su discurso fuera creíble. Solo el tiempo diría que el nuevo gobierno, a pesar de que hizo severos ajustes a la economía,

ajustes ordenados por los organismos internacionales y que obviamente iban en detrimento de las clases menos protegidas, aquellas que sí pagan sus impuestos sin posibilidad de evadirlos o apropiarse de ellos, tenía el mismo método del anterior : publicidad sobre bondades que sólo a ellos convencía. A la gente como Justino y los del Bajo no les convencían, más bien les hacía ver con tristeza, que ellos tenían razón, que se trataba de un engaño más, el que barnizaban con lo que los publicistas les vendieran como santa palabra para tener adormecida la conciencia popular. La cooperativa cada día estaba más al borde de la quiebra, las deudas acumuladas y la mala administración, la habían llevado al descalabro económico. Habían aceptado un crédito del banco cooperativo, crédito que algunos asociados, en cuenta Justino, habían rechazado porque lo consideraron lejos de sus posibilidades y habían puesto a responder la producción que mantenían en sus "trojas", al final, habían dispuesto de ella y no habían cancelado el crédito. El consejo de administración estaba en vísperas de enfrentar un juicio por estelionato porque no había plata para honrar la deuda, ni tampoco había producto para rematar y así cancelarla. La nueva administración prometía que sería muy dura para con los morosos, pero en el fondo, muy en el fondo y según se decía, " el señor de las cooperativas”, seguía manejando a su antojo todo lo relacionado con ese movimiento. Nadie osaba impedirlo, porque en todas las juntas directivas o consejos de administración tenía afines a él. Se decía que tenía el poder para condonar deudas y hasta otorgar nuevos créditos. Era omnipotente y ante él, " se agachaban los más pintados” . También se decía que, en sus gestiones había amasado grandes fortunas y que su coto de caza era intocable, por ende, la cooperativa autogestionaria de El Alumbre, no pagó sus deudas, ni tampoco fueron enjuiciados sus miembros. Fue disuelta. Una pequeña nota en el Diario Oficial así lo indicó. ¿ Y la plata ? ¿ De dónde provendría ese monto millonario, que no pagó ésta organización ? Hasta la pregunta era necia; quienes perdieron alicuotamente fueron todos los costarricenses, porque fueron millonarias las pérdidas que dejó el movimiento cooperativo en esos últimos años y lo que dejó de pagar ésta comunidad fue poca cosa con las pérdidas de otras grandes organizaciones. La gente del Alumbre se había salvado porque su crédito entró en un paquete de disoluciones por faltas a la ley respectiva, tenían que meterla para justificar el descalabro de otras y que llevó a que sus deudas fueran olvidadas. Nadie osó discutir esa condonación dictada desde lo más alto del movimiento. - ¡ Qué buen negocio hicimos ! , diay a mí me tocaron como doscientos mil libres, aparte de los frijoles que le vendí al almacén de San Miguel. Pucha a eso le llamo yo tener suerte. Yo ni sé porqué no nos cobraron, no te niego que estaba asustadillo porque al principio nos amenazaron hasta con metenos a la cárcel y vean, nada pasó... - No que va, sí pasó, pasó que ese día, el día que más de uno d'éste pueblo no honró sus deudas, perdimos un gran pedazo de dignidá, porque lo justo juera sido que de verdá los metieran a la cárcel por sinvergüenzas. Si ustedes pusieron a responder la cosecha por el préstamo, lo mínimo que tenían que hacer era entregala, pa' que la remataran y así pudiera el banco cooperativo recuperar lo que les había prestado. Pero no, muy felices todos ora se ríen del buen negocio que hicieron con esa plata que no era de ustedes, que era de todos los costarricenses, porque el gobierno tiene que pagarla y con intereses porque viene de préstamos internacionales, pero como todo es así aquí en éste país, ora nos pasan la factura por igual a todos. Espéresen, espéresen, que no tardan en trepar alguna cosa pa' sacar esa plata o ¿ es que ustedes creen que eso se queda así ? No sean tan tonticos, ¿ no ven que lo que hicieron fue la de los gatos, le echaron tierra a la cochinada, pa' tapar la suciedá que había y el montón de plata que algunos se habían ganado por comisiones, que ayudaron a hacer más ricos a algunos ?

¡ Oh gentes por Dios ! todavía no han aprendío - concluyó llevándose las manos a la cabeza y moviéndola, como para sacudirla. - Oí a éste cabrón, está chimao porque él no pescó nada d'esa plata, por tonto, porque bastante le dijimos que se apuntara, pero no, con el cuento de la dignidá se mordió la trompa pa'no pedir el préstamo y ora que salimos beneficiaos, lo que dice el juemialma es puritica enchilazón. Me tomara yo si ora se le presenta otra oportunidá y no la agarra. No me vengas con ese cuento, vos cada día te parecés más a los políticos, esos que no querés, decís una cosa y estás pensando otra. No jodas, en ésta vida no hay que ser tontos y si de pagar la cuenta entre todos los d'este país se trata, pos diay, ¿ qué le vamos a hacer ? Al fin y al cabo, siempre va a ser menos que si juéramos pagao cada uno lo suyo ¿ o no ? -Que Dios te perdone Toño, pero eso que decís es una gran mentira y vos lo sabes muy bien, cuando insistí en la Asamblea pa' que no se asumiera ese compromiso, porque los números que les hice nos demostraban que no podríamos pagala, a menos que se hiciera un chanchullo como al final se hizo. Allá vos y ustedes si piensan así de mí, pero por la vida de los que más quiero, yo jamás me juera prestado pa' hacer un negociazo d'esos, como le llaman ustedes y del que se ufanan tanto. Es más, andaría muy amargao y triste y hasta el final de mis días. Pero en fin, allá ustedes, sigan así y algún se van a acordar de mí. Esos favores tarde o temprano tienen que pagarlos y muy pronto aquellos, les van a pasar el cobro y es una cuenta de las que más duelen, es una cuenta moral, es una cuenta ética, es una cuenta con ustedes mismos y ante lo que más respetan en ésta vida. - ¿ Ustedes saben una cosa ? La verdá es que tiene razón Justino... - Ya va don Rafel a meter la cuchara a favor d'este cabrón como siempre y bien que puso la mano, cuando le chorreamos el poco e' tucanes - Esperate Beto, dejame terminar, no seas tan irrespetuoso. Yo la verdá es que sí me siento mal, si Camilo viviera jamás juera aceptao que yo me hiciera el gato bravo con esa plata, pero diay, como es uno, se va por lo que diga el resto y a veces es mal aconsejao. Es cierto, la platilla me sirvió de mucho, si hasta arreglé la casa, pero sí, me siento mal y tiene razón Justino, esa plata d'una u otra forma la vamos a tener que pagar. Bueno es más, yo sé que en San Femín ya andan hablando mal de nosotros y hasta nos dicen los puritanos amarra perros y otro montón de babosadas. Si uno lo siente cuando va allá, lo que pasa es que me hago el maje y como si no juera conmigo, pero que ya lo comentan, lo comentan. Pero diay ¿ qué le vamos a hacer ? Ya cometimos el pecao, ora lo que hay que hacer es pedile perdón a Dios, porque tal vez esa plata juera servio pa' dale a otras cooperativas más organizadas que nosotros y que tal vez si la jueran pagao. Todo se lo dejo a la voluntá del Señor... - Bueno ya ven, por lo menos don Rafel está arrepentio, pero lo que son ustedes jumialmas, ese gran negocio que dicen qu'isieron, les va acompañar toda la vida en sus conciencias, pero lo que soy yo y los otros tontos que no nos apuntamos, a según ustedes, vamos a dormir tranquilos, porque nuestras conciencias van a estar tranquilas - Pero mirá Justino, esperate pa' decite una cosa, vos siempre nos has dicho que los grandes, allá en San José, eso es lo que hacen, piden y piden y nunca pagan, pos diay, era bueno que a nosotros nos tocara un pedacito d'eso ¿ o es que no tenemos derecho ? - De tener derecho, derecho, sí lo tenemos; pero derecho a créditos oportunos pa' mejorar nuestra producción, créditos que debemos pagar, porque si todos pensamos así, pronto la banca d'este país va a estar en manos privadas y ahí sí que nos chupamos el dedo, porque esos son sin corazón y ahí no va a caber el pobrecito, ni el perdón de las deudas con la plata de todos, no señores, ya verán que eso muy

pronto se va a terminar, más pronto de lo que ustedes se imaginan y ahí si que la vamos a ver fea, porque o nos volvemos a convertir en peones o nos morimos de hambre, porque campo y crédito pa' los pequeños agricultores como nosotros, no va a haber, sólo van a caber las grandes explotaciones agroforestales y el pez grande se va a comer al chiquitillo. Así va a ser, se los adelanto. Nosotros con éstas cochinadas estamos matando la gallina de los güevos de oro y después no vamos a tener moral pa' pegar el grito al cielo, ni pa' reclamale a los políticos que con sus prácticas deshonestas están sepultando la banca nacionalizada, esa que se suponía al servicio de todos los costarricenses, pero que históricamente nos ha demostrao que no es así gracias a ellos. - Eso porque diay Justino, vos también nos has dicho que los bancos estatales usan los sobregiros que llaman y que los grandes se llevan el crédito que podríamos llevanos los pequeños agricultores y que los culpables son los directores bancarios que les aprueban todas esas chanchadas... - Sí, es cierto, pero quien coge lo poquito, coge lo mucho y ya verán ustedes como un día de éstos se va a desatar una de los diablos con los bancos, porque, por lo menos uno está a punto de quebrar, digo quebrar pa' usar un término que entendamos, porque quebrar, quebrar, nunca quiebran, ya que el Banco Central correría en su auxilio y con plata de todos, bueno a lo mejor hasta lo cierran, porque saldría más caro refinancialo y los culpables, yo me los corto de raíz si van a parar a la cárcel, a menos que la presión pública sea tanta que los mandan un ratillo a la cárcel pa' que piensen que no estaban liberaos de respondele a la justicia, unque en después vengan las presiones y el pobrecito, y las acomodadas de la ley pa' su beneficio, porque ustedes saben que las cárceles están llenas de gente pobre, porque como decía don Serafín, "la justicia es como las víboras, sólo muerde a pies descalzos" y los de esa clase, casi nunca van a parar a ella, porque tienen buenos abogados y plata pa' pagar fianzas y así mientras se enfrían las cosas, pueden comprar más di'una conciencia y hasta onde yo sepa, quien sabe que más, pa' no ir a la cárcel. Acuérdense de mi que eso va a pasar y bueno, nosotros vamos a tener algo de culpa en todo eso, porque como dice Beto, muy orondos pusimos la mano pa' coger plata que de antemano sabíamos que no podíamos pagar - Habría que velo, yo no creo que los grandes vayan a la cárcel por deudas, ni mucho menos si son amigos y hasta familiares o socios de los políticos, a lo más, es que van a agarrrar a alguno y lo van a coger de chivo espiatorio que llaman, pa' salvar a los tagarotes de siempre y a los que siguen mamando la tetota de los bancos -Yo tampoco lo creo Beto , pero , pero en algún momento van a tener que agarrar el toro por los cuernos y cáigase quien se caiga y unque por deudas naide va a la cárcel, si pueden ir quienes autoricen los chorizos que hacen, porque ellos se han ganao comisiones y muy jugosas por cierto y en fin, a lo mejor hasta con la plata de los bancos trabajan, sin necesidad de seguir los trámites que pa' conseguir un préstamo seguimos nosotros los que no tenemos patas de las de arriba. - ¿ Vos crees ? Eso sí que lo veo difícil, no porque no crea en lo que decís, pero es que esa gente se tapa siempre con la misma cobija y como todos sabemos, la mayoría, o son políticos o son familiares de ellos, unque no sean del mismo partido. En esas cosas siempre se ponen de acuerdo. Búsqueme un político o familiar de éstos que no se haya beneficiao de esas movidas, ¿ah?, búsquemelo. No que va, no hay. Han hecho de sus vidas una mancuerna con la banca nacionalizada, las leyes que les favorecen y siempre salen mojados de cualquier movida, porque como tienen gente en el gobierno, unque estén en el otro lado, siempre les llegan los vinasos de los mejores chorizos -Bueno, una cosa por otra. Por lo menos nos hemos acordao de cómo están las cosas en éste país y unque no queramos reconocelo, aceptamos que pecamos de sinvergüenzas y que en una u otra medida nos comparamos a los que estamos criticando, porque la comisión que se pagó por conseguir ese préstamo que la cooperativa no pagó, nos eliminó quién sabe por qué designios, la obligación de pagar. ¿ Ven ustedes que unque en pequeña escala, actuamos igual que los otros ? Estamos claros por lo menos en eso, en lo

que se refiere a la tal banca estatal, que se la va a llevar el diablo o que a lo mejor eso es lo que están tramando. Quien quita si eso es lo mejor porque ahí si todos vamos a tener que pagar lo que saquemos, los grandes y los chiquitillos, porque la banca privada sí que no aguanta carga. De por sí, me han contao que en otros países es un gusto cambiar un cheque por ejemplo, se lo cambian a uno sin mucho mate, en cambio aquí, parece que uno es un ladrón, sólo sospechas y revisiones, como si uno juera de los ladrones de cuello blanco que los han saqueo desde que se criaron y así en todo, porque pa' un préstamo son momentos y si hay una garantía buena en un banco privado se lo dan a uno , en cambio, en uno de esos que llaman estatales, le revisan hasta lo que uno se comió en la última semana santa, claro a uno, a los otros ni siquiera llenan solicitú. Quien quita y tal vez sea mejor. Eso nos obligaría a ser más responsables con nuestro crédito, sino, vean lo que hicimos nosotros, que hasta la garantía vendimos - Pos sí, tenés razón, algo quedó d'esta conversada, bien, yo me jalo, tengo que ir a poner a los terneros en el encierro, sino esos condenados coyotes se los jartan - Yo voy a ir a encender la hornilla, tengo que sacar una tarea pa' llevala mañana al mercao, a la una está aquí el carrillo e' Félix pa' sacala. Ni modo, voy a tener que tirale toda la noche...- Uno a uno, fueron abandonando el centro informal de reuniones, la Pulpería de Toño y cada quien, la verdad aunque no muy convencidos de que habían actuado mal, sí por lo menos muy conscientes de que sus actuaciones no se diferenciaban de las que con tanto ahínco habían criticado a otros. Una cosa si les quedaba clara, el país no se podía dar el lujo de seguir soportando la gran cantidad de vividores de la banca sin que algún día rindieran cuenta de sus actuaciones. Pasaron los meses, los años y...la vida, cada cual se ocupaba de lo suyo y si alguno había conseguido créditos, lo había hecho a título personal y con el respaldo de su finca. Por lo menos tenían con qué responder. Sus productos encontraban mercado a duras penas y al criterio de los intermediarios o de los industriales, como denominaban ahora a aquellos. Los descalabros financieros de los " fondos”, de la comisión de emergencias, los de la banca estatal, asomaban la punta del iceberg y el montón de cochinadas, tapadas muy convenientemente por tantos años, empezaron a expulsar su fétido olor y muy fuerte, tanto, que ya no se podían tapar más, a pesar de que trataron de echarles estañones de perfume con declaratorias de estados de emergencia, intervenciones y cambios de personal. Elefantes blancos como CODESA y otros creados por un Estado mal administrador, denotaban su quiebra financiera y el negocio que otros habían hecho a su amparo. - ¿ Vos sabés que Justino es medio brujo ? - ¿ Por qué Miguelillo ? - Diay, ¿ no me digás que nos has visto lo que está saliendo en la tele ?, que el tal fondo e' contingencias agrícolas se hundió y que los beneficiarios ni siquiera pagaban los depósitos sobre las cosechas que sacaban pa' tener derecho a que se les protegiera y que siempre pusieron la mano para recoger de el y saquealo y que amparados a declaratorias de emergencia a muchos les salvaron las tierras que de por sí no producían nada y que las tenían empeñadas en los bancos y aparte de eso les daban certificados de abono forestal que llaman. Y lo del juicio de los fondos de la comisión de emergencias, ¿ qué me decís ?. Qué's que dicen por ahí, que no están siendo juzgados todos los que deberían estar y que al final, sólo unos pocos son los que van a ser encarcelados, como siempre, que los segundones son los que cargan con las cruces de los grandotes. No te digo, si es que razón tiene aquel condenao, ¿ verdá que parece brujo ? Toditico nos lo ha

cantao y mirá que ha pasao igual. Ora lo que hay que ver es, ¿ qué pasa con los bancos, porque según decía un comentario de un señor de esos que salen en la tele, que la cosa allí sí está peluda, porque hay más de un embarrao. ¿ Qué irá a pasar con éste país ? ¡ Ah montón de sinvergüenzas ! Si es que los ve uno tan modocitos y si a jurar lo ponen a uno, hasta las manos mete a las brazas por ellos, pero ve vos la leche que dan... - No seas bárbaro Miguelillo, si hasta parecés lora embarrada e' caca, ¡ qué habladera te traes ! - Diay sí, no ves que el otro día me contaba Félix, muy en confianza, que él renunció a la junta directiva del banco onde estaba, primero porque no estaba en su gobierno, unque los de su partido le dijeron que se quedara unque juera contrario pa' que les metiera el hombro y mantener la mayoría y segundo porque las presiones que soportaba para aprobar créditos y sobregiros sin ningún respaldo, de un lado y del otro, lo hacían temer que en cualquier momento, se iba a ver metido en una buena torta y que por eso mejor se jue. Que a lo mejor en otro tiempo lo juera hecho, pero ora como es tan cristiano, le ponía los pelos de punta porque sabía que lo que estaban haciendo era muy deshonesto y nos perjudicaba a todos. Ya ves como cambian las gentes cuando quieren, pero que eso pasa, pasa y seguirá pasando. El me lo juró y nosotros que no le creíbamos a Justino y hasta hacíamos chanza de lo que nos decía - Sí así era..., pero dejame hablar, si hasta parecés tarabilla, tomá aire muchacho por Dios...- Es que estoy muy impresionado de todo lo que está pasando- ¿ Ves ?, es que no dejás hablar, tomate este sirope pa' que te refresqués y dejame hablar a mí, ¿ está bien ? - Sí, sí, perdón, perdón, hablá - Te decía que... ¡ ah esperate, ahí vienen Justino y don Rafel !, dejá que entren pa' que armemos una buena tertulia, andá y llamate a Mamulón y a Zapa, que están peloteando con los chiquillos en la plaza, es bueno que estén aquí, porque al fin y al cabo, ellos y nosotros comenzamos esto de danos cuenta de lo que pasa en éste país y si bien es cierto alguna vez nos apartamos de lo que pensábamos en una actitud muy acomodada, también es cierto que lo que está pasando es una muerte anunciada desde hace muchos años, pero... ¡ Diay señores ! ¿ Cómo les va?, estábamos por armar una buena converzona, d'esas que siempre nos echamos y le dije a Miguelillo que esperáramos a que ustedes llegaran y que se juera a llamar a Mamulón y a Zapa, pa' que le entremos a los comentarios de lo que está pasando, ¡ah bueno, aquí están !. Es que los mandé a llamar, par de vagos, pa' que conversemos un poco de algunas cosillas. ¿ Se toman un fresquito?- Diay sí - contestaron todos - Al momento estaban varios vasos de " casco ", repletos de sirope con agua y hielo, que calmarían la sed y aclararían gargantas de los contertulios. La conversación de éste día estaría buena, porque al igual que los otros sábados, cuando todos subían hasta la Pulpería de Toño, ellos le entrarían a los más variados comentarios sobre el acontecer local y nacional y tratarían de solucionar los problemillas que usualmente se presentaban, entre vecinos. Por algo el pueblo les llamaba " La Junta de Notables” , en broma, por los diversos aspectos que ahí se trataban y por los arreglos a que se llegaba. A veces, Tulio el maestro, se quedaba algún fin de semana y moderaba la conversación, al fin y al cabo, ya se había identificado plenamente con el pueblo y hasta “halaba” con la hija de un vecino, en cuya casa le preparaban la comida y le lavaban la ropa, a un precio muy cómodo y como cortesía por sus excelentes servicios. Había demostrado ser un muy buen educador, de esos de vocación y se había dispuesto, no solo recibir a los niños, para iniciarlos en todos los secretos de la geografía, las matemáticas, la

lengua y la escritura, sino que había hecho un campo dos veces por semana, para enseñar a los adultos, sin paga extra claro está y, eso se lo reconocían con profundo afecto y gratitud aquellos ciudadanos. Por ello, cuando él estaba presente, era uno más y sus opiniones eran respetadas y discutidas y no siempre le daban la razón. Ellos tenían una manera muy particular de ver las cosas y comprendían que tal vez por ser él de Heredia, quizás no les entendía, pero no, por el contrario, aunque no se inmiscuía mucho en sus tareas, les respetaba como una clase de personas muy valiosas y muy dispuestos a aprender y le agradaba sobremanera su actitud, bastante novedosa, por cierto, para solucionar alternativamente los conflictos que en esa comunidad se presentaban. Por ello, desde que llegó al Bajo, fue uno más y con toda propiedad expresaba sus opiniones, buenas o malas, pero las expresaba. Tenía el don de saber escuchar y respetar a los demás, sobre todo a los mayores y eso le convertía en ciudadano ejemplar y la verdad, es que todos deseaban que formalizara su relación con María y se quedara residiendo ahí con ellos. Pero bueno, la mesa estaba servida, la tertulia de éste día tenía un matiz muy especial, conformado sobre todo por el desagravio que sus compañeros querían darle a Justino desde hace días, porque en fin, la conversación se fue orientando por ahí. No es que el otro estuviera necesitándolo, pero moralmente estaban comprometidos con ello y si habían sido magnánimos en reconocer, cuando él se echó al pueblo encima para llevarlo por la buena senda; ahora no podían dejar de serlo para reconocer que estuvieron equivocados y reconocer que él tenía razón. Los últimos acontecimientos les habían demostrado que aquel no andaba en nada perdido y que de verdad, como decía: " Pa' verdades... el tiempo " - Mirá Justino, es que hace días queríamos tocar éste tema, pero diay, por las carreras en que siempre anda uno, no habíamos tenío la oportunidá de hablalo. Hoy sí que es un buen día pa' que nosotros, los que empezamos toda ésta vaina, te reconozcamos que tenías razón, la pura verdá es que ya nos víamos puesto de acuerdo y estábamos esperando el chance pa' decítelo. Vos no tenés idea de la vergüenza que hemos sentío, por todo lo que ha pasao y que bien nos lo arvertiste vos y además...- Suave, suave Toño, hemos hablao muchas veces y hemos encontrao la solución a más de una cosa, cuando yo ya no juí más presidente de la cooperativa, lo hice con el convencimiento pleno de que era lo mejor y de que tal vez ustedes tenían razón; que se necesitaba sangre nueva y seguro estaba, sinceramente, de que iban a salir avante. Pero Diay, no jué así, se metieron en las tortas en que se metieron y ora no es tiempo de lamentase, más bien en vez de pedime perdones a mí, pidaselon a ustedes mismos y preparesen a enfrentar, los retos que nos presenta el futuro, porque con eso de la regionalización de la agricultura y de las cuotas que nos imponen pa' que nosotros los que nos jodemos, no podamos sembrar lo que queramos y cuanto queramos, va a causar el día de mañana una de necesidades en el País, que ni les cuento. Olvídesen de pedime perdones y hablemos mejor de lo que vamos a hacer con esa ideas de los carajos del comité agrícola. ¿ Está bien ? - ¡ Ay !, ¿ qué hacemos con éste cabrón , mal amansao que ni perdones acepta ?, bueno, la cosa es que ya sabés, que reconocemos que vos tenías razón y que nos sentimos muy mal por todo lo pasao - terció Zapa, a lo cual todos asintieron. Las directrices del comité agrícola cantonal, iban en la dirección que los tecnócratas habían trazado; deberían diversificar la agricultura y sembrar productos de exportación, como plantas exóticas, flores, etc. y bajar la cantidad de sembradíos de frijoles y maíz, ya que los bancos no financiarían esos cultivos, todo de conformidad con los planes de ajuste estructural, que nos venían desde afuera. La disyuntiva estaba en que sin el financiamiento de los bancos, era poco lo que aquellos agricultores podían sembrar y ahora no contaban con la cooperativa. Justino sabía de antemano que a él, Félix lo financiaba, si era ese el caso, pero a los otros pequeños propietarios, les resultaría muy difícil salir avante. Aparte de lo anterior, más de uno ya estaba en deuda y en mora con los bancos y resultaría muy difícil que se les aprobara otro crédito, sin honrar por lo menos los intereses del anterior. Eran dueños de sus tierras, pero desde la metrópoli, se decía que,

aquellos debían sembrar, sino no los financiarían. Esa era la protección que tenían, lo que les resultaba denigrante, porque si sufrían como peones, más lo hacían ahora como propietarios. ¿Sembrarían flores, plantas exóticas o por el contrario, seguirían con lo que conocían ? - Entonces, los grandes juemialmas del ministerio, dicen que lo mejor es sembrar flores, matas de itabo y caña india, quesque están teniendo mucho pegue ajuera y que con dos manzanas sembradas, se hace uno de plata. Así que, deberíamos escoger qué sembramos, pero eso sí todos, porque si no nos lleva el diablo, mucho más a los que tienen préstamos. -Diay Justino, pero por qué no pedimos plata prestada, como dice el ministro de agricultura, pa' sembrar d'eso y de a callao sembramos lo de siempre . De por sí, la caña nos la compra Félix y diay, del mismo cuero salen las correas ¿ Ah, qué decís ? - No es mala idea Rafel, pero si se dan cuenta nos joden, porque nos sancionan y no nos ayudan con lo de la exportación, sería jugásela. Es que es lo que yo digo, el día de mañana en éste país no va a haber ni que comer, porque no se va a sembrar lo necesario, con el cuento que se han tragao de los importadores, de que son más baratos los frijoles de ajuera que los de aquí, pero de ónde se va a coger la plata pa' compralos . Es un puro negocio, porque comisiones van y vienen, pa' que se autoricen las importaciones , según me dijeron el otro día - ¿ Cómo es eso ? - preguntó Mamulón - Voy a tratar de explicalo lo más sencillo posible, pa' que me entiendan, pero Toño vendeme otro fresco grande de sirope, pa' aclarar la garganta. - Sí, sí, ya te lo sirvo, aguardate pa' lavar éstos vasos, pa' serviles a todos. ¿ Todos quieren? - ¡ Claro, si hasta la pregunta es necia! - contestaron. -El asunto está así, vienen desde hace tiempo y ustedes han sido testigos de que la mejor idea es la diversificación de la agricultura, pa' tratar de entrar a los mercaos de los grandes países, con el cuento de la globalización, con productos terminaos y no con materia prima, la cual siempre nos han pagao muy barata, pa' transformala y vendernola cara, por eso es que lo que llaman balanza comercial, siempre está a favor de ellos y nosotros, nuestros países, cada día se endeudan más y no hay posibilidades de salir avante Tomó un sorbo del refresco y continuó: - Pos bueno, los técnicos dicen que hay que hacer eso y si logramos entrar en esos mercaos y con esos productos, vamos a tener plata pa' importar los productos de primera necesidá, sin necesidá de sembralos aquí. ¡ Sólo ellos saben ! Por que no todo el tiempo aquellos nos van a comprar esos productos y buscarán la manera de compralos cada vez más baratos en otros países. Así, muchos se van a quedar con las siembras botadas y sin saber qué hacer. Acuerdesen de mí que esto es otro engaño más pa' desestimular la agricultura de por lo menos subsistencia y favorecer a otros países con quienes quieren congraciase los gringos y sus trasnacionales, que son nuestro primer mercao, desgraciadamente. Así que yo creo, que queda a criterio de cada quien lo que quiera sembrar, pero lo que soy yo, no voy a dejar de sembrar por lo menos un puño e' frijoles y otro de maíz, porque así aseguro la comida de mi familia y si puedo vender algo, unque sea de a escondida, pos lo vendo, sino se lo echo a los chanchos, pero lo que es a mí, de maje no me agarran. Ora que tal vez siembre un pedacillo de flor de itabo, de por sí, si no vendo las matas, por lo menos las flores me como, pero de lo otro nunca, mírenla...-

- ¿ Vos crees que eso sea así Justino ? Porque la verdá y como vos siempre decís, en la de menos se embarca uno y cree en los cuentos que le andan echando los del comité y endespués naide le tiende la mano y le dice ¿ qué haces ahí parao ? y hasta la tierra pierde. La puritica verdá es que mejor hacemos como decís vos, sembramos un pedacillo de flor de itabo y lo demás, como siempre, ahí a brincos y a saltos puede tal vez salvase uno y que los bancos se aguanten ¿ Y si les juera bien a otros y uno por miedoso se queda chupándose el dedo ? porque diay, a lo mejor puede ser bueno eso y como han hecho otros, hasta una empresa se montan pa' exportar y hasta les dan unas extras, según he oído...- Es cierto Miguelillo, puede que si uno se embarca le vaya bien y eso extra que te pueden dar, es un negocio aparte y se llama certificado de abono tributario, muchos exportadores ya están mamando de ellos, desde el año en que se crearon. Te lo dan, pero hay que tener patas de las de arriba, pa' que se lo den a uno. Pero hay otra cosa que yo quisiera que sepan y que entiendan, las modas en el extranjero, son flor de un día, ora les ha dao por las plantas exóticas que llaman, tal vez mañana las tiran a la basura y parte sin novedá, pero si ese negocio se cae, el de la comida nunca se va a caer, porque diay, le gente necesita comer todos los días, ¿ o no ? - Si es cierto, yo he oído que esas gentes hasta la ropa botan, de estación a estación...- Ya no tanto así, pero más o menos así son, entonces, pa' qué se va a embarcar uno . ¿ Ah ? Justino sabía que lo que dijera a sus compañeros y amigos, sería bien recibido y a lo mejor lo acatarían, pero le preocupaba por otra parte, equivocarse y privarlos de algo bueno para todos. Así que, lo mejor era dejarlos en total libertad, para que cada quien hiciera lo que quisiera y considerara más conveniente a sus intereses. Por su parte, él haría como lo había dicho, pero antes les advertiría de todo lo que éste asunto encerraba, según su criterio. - Otra cosa que es bueno que sepan, nosotros nos joderíamos sembrando lo que nos dicen, pero son otros los que se van a llevar la tajada más grande de nuestro esfuerzo; esos son los intermediarios, quienes tienen los contactos ajuera y que saben hacer lo de las exportaciones, así que no se crean que esto de las matas, es nada más agarrar el poco e' cañas y mandalas, ¡ no qué va !, lleva un montón de trabajo antes y sólo se llevan el mejor producto y al final, vamos a salir tablas, acuerdesen de mí. Ora bien, el que quiere metese, que se meta, diay a lo mejor les va bien, pero lo que soy yo, ¡machete estate en tu vaina ! Yo no creo en ranas con pelos, menos en esos güevones del comité. - No diay, hagamos como vos decís, sembremos pa' probar un pedazo y el resto lo trabajamos como siempre, eso sí digámole a la gente que lo piensen bien. ¿ Qué te parece ? - Está bien, juega el gallo, pero en después no quiero reclamos, recuerden que cada quien es dueño de su parcela y puede hacer con ella lo que quiera, porque de lo que les digo, sólo el tiempo me dará la razón - No, no, si vos sos medio brujo, casi todo lo que decís sale, por eso es mejor hacete caso y que no nos vaya a pasar lo de antes - Bueeno, estando todos de acuerdo, se levanta la sesión - dijo en son de broma Justino, para luego concluir con : - Dame una bolsa de galletas dulces, un kilo de manteca y... esperate pa' ver qué más me dijo Flor que le llevara . ¡ Ah sí ! Dos rollos de papel higiénico. Lo que's la vida, antes nos limpiábamos con olotes y

tusas, ora ve vos, con papel suavecito, pa' que el chunche no se irrite. No te digo, si hasta hemos cambiao las costumbres y nos hacemos cada vez más consumistas... Pero no, esto está bien, es más aseao usar éste papel. ¿Verdá? ¿ Cuánto te debo ? - ¿ Te lo apunto o me caimantes montes de una vez ? - No de una vez, ¿ no te debo nada verdá ? - Nada, estás limpiecitico conmigo - Ah bueno, mejor seguimos así, tomá pagate Cancelada su cuenta, partió Justino bajo la atenta mirada de sus amigos, quienes con poca disimulada admiración, se preciaban de ser eso, compañeros y amigos. Lo siguieron con la vista hasta que su sombrero de lona manchado por el sudor y uno que otro racimo de guineos o plátanos, se perdió en la vuelta que conduce al Bajo. A pesar de que entre todos discutían lo que era más conveniente, siempre la voz de Justino era la que llevaba el hilo de la conversación y sus consejos eran muy apreciados, por la llamada " Junta de Notables”, del Alumbre. Para algo se había ido a capacitar y era invitado a cada rato a cursos de refrescamiento o a recibir nuevos conocimientos. Era su líder y otros ya le acompañaban a esos cursos, porque él sin ningún egoísmo hacía que les invitaran. Le acompañaban varios vecinos, hombres y mujeres, quienes estaban adquiriendo los mismos conocimientos que él había adquirido en tanta charla, seminario y/o curso a los que había asistido. Si algo había distinguido a ese hombre, era su desprendimiento intelectual, siempre estaba atento para compartir con quien quisiera, sus apreciaciones y conocimientos y la verdad es que casi nunca estaba alejado de la realidad, como decían sus amigos y vecinos. Consideraba que entre más personas se capacitaran y se dieran cuenta de las cosas y como nos las trataban de desdibujar los políticos y los medios de información, estaba asegurado que en El Alumbre a nadie engañarían, porque estaba muy consciente de que los medios de comunicación siempre habían estado, con muy raras excepciones, al servicio de la clase oligárquica de éste país, lo cual no era inusual y por el contrario natural. Les inculcaba que pusieran mucha atención a eso y que ya nunca más les engañarían, les decía que ellos eran dueños de su propio destino y que por eso habían nacido libres, libres para hacer de sus vidas, vidas de provecho, siempre y cuando se respetara el derecho de los demás. Que la comunión de ideales solo a cosas buenas podía conducir y que nunca deberían esperar a que alguien hiciera las cosas por ellos mismos sin antes intentarlo. La situación del país era cada vez más angustiante, el gobierno atendía al pie de la letra las disposiciones de los organismos internacionales y como siempre, era la gran masa, la menos protegida y de menos acceso a los créditos y ayudas, la que sufría. Aumentos en los servicios básicos, aumentos en los impuestos y en los insumos entre otros, hacían la situación de los pequeños agricultores insostenible. La banca nacionalizada, de por sí saqueada por unos pocos, ya no podía proporcionar períodos de gracia y amenazaba a miles de pequeños propietarios con rematarles sus bienes, ante la falta de pago de sus operaciones. La crisis financiera afectaba a todos, el país ya no daba más. Los privilegios habían acabado con la incipiente economía y quienes habían usufructuado del poder político, terminaban de dar los golpes de gracia, para vender lo último que quedaba de la nación, su soberanía.

Los servicios estratégicos, codiciados por transnacionales, para amarrar monopolios latinoamericanos, ya algunos de ellos estaban solapadamente en manos de empresas de esas, disfrazadas por testaferros nacionales, como las telecomunicaciones, que ya hacían su negocio en el país, gracias a concesiones gratuitas conseguidas al amparo del funcionario inocente o muy generoso, pero con los bienes nacionales, mas no así con los suyos, que cada día crecían más en sus cuentas en el Caribe y otros lugares que existen en el planeta para esconder lo que no quiere uno que otros encuentren. A no dudarlo, la nueva clase de políticos, con muy rarísimas excepciones, estaban sacando su tajada sin importar el riesgo. Habían llegado tarde y no tenían tiempo de hacerlo paulatinamente, como había sido en otras épocas. Tomarían lo suyo y dejarían lo que quedaba de la nación para quien lo quisiera, en cuenta la zona marítimo terrestre y la soberanía espacial y la subterránea. No les importaba que el pueblo les señalara, ya la vergüenza y la dignidad eran palabras únicamente para diccionarios. El cinismo era el que predominaba, como pudo palparse en un juicio penal que se llevó a cabo en los tribunales, por injurias y calumnias a la persona de un político. El no sé, no me acuerdo, no preciso, se puso de moda, retratando de cuerpo entero a la idiosincrasia nacional. Falsos, traicioneros, rastreros y cínicos. Ya el pueblo no tenía en quien, ni en qué creer o al menos así parecía. Aquel político fue candidato y luego presidente. El pueblo había escogido, sabía de antemano lo que escogió y ahora no debía arrepentirse, porque era realmente lo que se merecía, tenían un gobierno acorde con su idiosincrasia. Un candidato que bailaba en las tarimas de plaza pública, dando el circo que el pueblo quería, en vez del discurso serio que demandaba la real situación del país, no era ni más ni menos que el presidente ideal, para un pueblo charlatán, amigo del no compromiso con su futuro, acostumbrado a que otros hicieran las cosas por el, no importando de donde viniera la ayuda y cuanta sumisión les acarreara. Así había sido siempre, era un problema genético, así fue su independencia de España, no la buscó, le vino y después no sabía que hacer con ella. Frases como: “esperemos a que aclaren los nublados del día”, nos retratan y nos han caracterizado por más de siglo y medio. Quien se diera cuenta del real significado de esas palabras, sabría de antemano quienes éramos los costarricenses y podrían proponer alternativas de gobierno, con las promesas de siempre, pero con más adorno, sabedores de que un pueblo vagabundo y charlatán, las creería sin cuestionamientos y esto, lo manejaban en las universidades norteamericanas. Ellos nos conocen mejor que nosotros mismos. Por eso el precandidato, luego el candidato y después presidente, se preparó allá, recibió la instrucción de ¿ cómo gobernar un país como éste ?. Ellos lo saben y aprobó el curso. Ellos escogieron al presidente. Hasta a llorar aprendió, para mejorar imagen y aumentar puntos en las encuestas. Los medios de comunicación, para eso eran importantes, varios viajes acompañando al presidente y; el contenido de las críticas, con raras excepciones, se entonaría de acuerdo con lo que se conversara en las desveladas del viaje. Así había sido siempre, empero, algo hacía presagiar que esta vez no ocurriría así. El costarricense tan acostumbrado a cambiar su criterio, como cambiarse de ropa interior, no le gustaba ser minoría pensante y crítica, sino mayoría marioneta y la preocupación de disentir, después de jugosos viajes desvelaba a más de uno. El tono debía moderarse y las encuestas modificarse, todo en aras de la recuperación del país y en lograr la confianza de los inversionistas internacionales, eso decían... Sobre todo esto aprendían las personas que acompañaban a Justino, a los cursos; los instructores, minoría pensante, trataban por todos los medios de que el mensaje calara hondo en las conciencias de las personas que lo recibían, para que éstas a su vez lo llevaran a sus familias, vecinos y pueblos. No podía ser que por falta de acceso a los medios de comunicación o por una mala información, el pueblo se mantuviera mal informado, ya no cabía la excusa de que por pensar diferente, se le acusara de comunista. “El Muro" había caído, el partido comunista de éste país estaba desmembrado y únicamente existían intentos muy aislados en el mapa político nacional, de personas sinceras. Sin embargo, arriesgaban a que se les acusara por asociación ilícita, por ello, debían acudir a las organizaciones de protección de los derechos humanos, para en sus instalaciones, brindar la capacitación a éstas gentes y a muchas otras más que provenían de toda la geografía nacional. La tarea era quijotesca y era casi que de hormiga, porque muchos de los participantes de los cursos venían una vez y después no volvían más, aún y cuando se les costeara su

estadía. La situación del país no estaba como para distraerse mucho tiempo de sus ocupaciones de peones, obreros o pequeños propietarios, para capacitarse sobre la amarga verdad, sin embargo los organizadores proseguían, sabedores como lo estaban del precepto bíblico de que la verdad los haría libres y de que ya era hora de que el pueblo conociera realmente quienes eran los que se hacían llamar “Salvadores de la Patria” y quienes eran los que se sustraían de sus ocupaciones, si es que alguna vez las habían tenido, para dedicarse con "cándido amor”, al servicio del pueblo. Justino cada vez se sentía más motivado por la calidad y cantidad de jóvenes que asistían a esas jornadas de reflexión y capacitación y no cabía de gozo cuando les escuchaba repartiendo el mensaje. Pensaba que si éste trabajo de células, se diera en todo el país, pronto, muy pronto, tendríamos no ya una minoría pensante, sino una mayoría protestante y que eso sólo cosas buenas podía traer. " ¡ Pa' verdades el tiempo !", se decía... *************** -Vos sabés una cosa Justino, yo no se que pensás vos, pero la verdá es que yo le he dado vueltas al asunto y me pongo a pensar que, ¿ qué vamos a hacer ora que Florcita saque el sexto ?, diay, porque yo quiero que vaya al colegio, que no sea una burra como es uno y que el día de mañana, por qué no , que vaya a la universidá y se convierta en alguien importante, una profesional y por ese mismo camino con Pedro Justino, la pura verdá es que siendo tan inteligentes, sería una injusticia que no se les aprovechara ese cerebro, ¿ uhm ? - Diay pos sí Flor, ¿ vos creibas que yo no vía pensao en eso ?, pos fijate que da la casualidá que ya me lo tenía bien maquiavelao, como dice Otto y lo que vamos a hacer, unque a vos no te parezca, porque a como sos de apegada y es que cuando sea l'hora, Florcita se vaya al centro a vivir onde doña Cecilia, la mamá de Juan, el que le maneja a Félix. Yo ya hablé con ella y me dijo que con mucho gusto le hace un campito, que de porsí ya todos se le jueron y que casi siempre se pasa sola y que la compañía de Florcita la reconfortaría y que se compromete a cuidala como una hija. Así, los viernes ella se viene pa' la casa a pasar el fin de semana y sale los domingos. ¿ Cómo la ves ? - Eso es lo que me da cólera con usté, que todo lo tiene pensao y si yo no le digo algo no me suelta prenda.Yo quebrándome la cabeza pa' ver como hacíamos - Le replicó la mujer con fingido enojo, pero con la satisfacción de que lo que la había tenido preocupada, ya estaba resuelto. Sin darle vuelta ni largas al asunto, ya estaba decidido, sus hijos tendrían la oportunidad que ellos no habían tenido, siempre y cuando así lo quisieran, porque estaba claro en ésta pareja que las decisiones que afectaran a todos, serían tomadas de común acuerdo, aunque les partiera el corazón ver partir de su seno a los hijos. Siempre y cuando fuera para aprender más, ellos se sentirían felices y orgullosos. El sacrificio se haría si querían incursionar en cualquier campo, estaban claros de que era el futuro de sus hijos y no el de ellos el que estaban construyendo, era su herencia, estudios y preparación para enfrentar de mejor manera los retos que demandara el nuevo milenio. Era la oportunidad de ser cada vez más dignos en ésta patria. Ellos no necesitarían de lo que ganaran con el fruto de sus estudios, se sentirían más que satisfechos, con que sus hijos fueran gentes de bien y respetuosos de sus semejantes y del ordenamiento jurídico. Florcita soñaba con ser médico y Pedro Justino decía que iba a ser abogado, después que quería ser chofer de carro de bomberos y en fin, aún no se decidía. Nadie les presionaba. Cada quien escogería lo que quisiera, de acuerdo a sus capacidades y vocación. Eran decisiones muy particulares. - Quien quita y de éste Bajo salga una buena doctora y un abogado...- le decía Justino a Flor cuando hacían planes y tejían sueños en el azul del cielo y junto a la enredadera cundida de guarias.

- Quien quita - le decía la otra, con sobrado orgullo, acompañado de un cosquilleo en el estómago. El descalabro financiero, de uno de los bancos del sistema bancario nacional, se había dado, Justino lo había dicho y cada vez más por eso, sus vecinos creían que él era una especie de profeta. Mas no era así, no era necesario serlo para saber que tal situación se iba a presentar, era ser solamente un poco observador para darse cuenta de que aquellas instituciones históricamente se habían prestado para ser saqueadas por los amigos de los amigos y parientes de los directivos y lo que estaba pasando ahora, era ni más ni menos que la punta del iceberg, de lo que era un mar de aguas putrefactas. Para eso se había prestado el mal llamado sistema bancario nacional, para que a su nombre y con su plata, se hicieran los más jugosos negocios, sin arriesgar nada del capital propio. Lo que pasaba ahora con este banco, es que el negocio en algún extremo falló y la historia trascendió; pero si el mismo hubiera sido brillante, como lo fueron quizás muchos otros, la plata del banco se hubiera repuesto y todo hubiera seguido normalmente. Así había sido y así sigue siendo. Algunos dicen que lo que debe haberse dado fue una incompatibilidad entre socios o que a alguien, como dice nuestro pueblo, " dejaron ciego”, en el negocio y decidió " cantar todo, echando al agua” a más de uno. El gobierno decidió hacer lo más fácil y sin pensar en el mal social que acarreaba a las familias de los empleados y pensando más en el impacto político electoral, cerró la más añeja de las instituciones bancarias del país y destapó la caja de pandora de la banca nacionalizada, agravando aún más sus pérdidas. Los responsables como siempre y en un golpe más que todo de imagen, estuvieron unos meses en prisión y después, bajo el pago de sendas fianzas, se encuentran excarcelados para defender desde afuera su tesis de lo que consideran fue un mal negocio del banco y cínicamente algunos sostienen que ellos no sabían lo que estaba pasando o lo que se estaba haciendo y se dedican a buscar chivos espiatorios de sus culpas por omisión o comisión. Aducen que ellos fueron muy bien formados y con unos principios cristianos a toda prueba y que los delincuentes de cuello blanco no existen. Al final y cuando el tiempo transcurra, serán muy pocos los llamados a responder, por lo que se va a considerar un giro normal operativo del banco. Una pérdida más a nivel de finanzas internacionales, ridícula, si se quiere , a nivel macro. Quienes perdemos de por sí somos los costarricenses, porque nos creemos dueños del sistema bancario nacional el que sin embargo cuando obtiene ganancias, quienes ganan son aquellos, que hoy por hoy disfrutan de las jugosas cuentas en donde todos sabemos y a nombre de ¿ quién sabe ?. Así como desapareció un banco, así desaparecieron los fondos de la comisión de emergencias, los del fondo de contingencias agrícolas, los de las fundaciones muy cargadas de partidas específicas, las millonarias partidas a nombre de supuestas organizaciones, las deudas de más de un " vivillo " agricultor, las de más de un industrial arrocero, las prendas de éstos últimos y en fin, sería interminable de enumerar lo que nos lleva a pensar que efectivamente a éste país se le podría llamar Costa Rica, porque rico ha sido, pero que gracias a la inteligencia de sus habitantes, solo en costa se ha quedado, pero ésta a nombre de corporaciones turísticas nacionales con amo extranjero, en donde muchos poseen grandes paquetes de acciones como comisión o agradecimientos a los favores concedidos durante sus gestiones. A pesar de todo, ciudadanos honestos aún piensan con ilusión en que sus hijos se capaciten, para que sean de provecho al país; ojalá tengan tiempo antes de que la misma educación se privatice, porque ahí sí que no tendrían esa oportunidad y por el contrario, deberían prepararse para ser buenos peones, operarios o " técnicos medios” y aprender a decir " yes master”, como bien han aprendido muchos desde hace décadas. ************** -No les digo, si es que en éste país el que menos puja caga una vaca; ya se tragaron un banco con todo y gente, vieron, llegaron los pobrecillos empleados a celebrar la independencia y de verdá que la

celebraron, no los dejaron ni entrar porque les cerraron el lugar de trabajo y los dejaron libres, pa' que se mueran de hambre con sus familias. A como está la cosa, quién los va a contratar, si los bancos privados, que en su mayoría están en manos de familias nicas, que sólo Dios sabe cómo harían sus riquezas en aquel país , están acostumbraos a sacar el máximo de provecho, con menos empleados, jamás les van a dar trabajo, máxime tan mal acostumbraos como estaban, con convenciones colectivas, laudos arbitrales y demás privilegios. ¡ Qué va !, la mayoría se va a quedar viendo pa'l ciprés, pobrecitos y así va a ser de ora en adelante, de todo lado van a empezar a echar gente, no ven que son órdenes de arriba. Con el cuento de un estado más pequeño, pero más eficiente, van a empezar a recortar personal, pa' que no haya quien atienda ciertos servicios y así en cualquier momento, mejor los privatizan, porque el Estado no va a poder atendelos o brindalos- dijo Justino al chofer del bus que lo traía de regreso a San Fermín y con quien siempre entablaba conversación en ese trayecto. - Puta, eso que decís, sí que es cierto, pero...¿ no crees que tal vez sea bueno que echen un poco e' vagos, de esos empleados públicos, d'esos que no hacen nada y se llevan esos sueldasos, que ayudame a decir...?- No Campos, estás equivocado, los que ganan esos sueldasos que decís, son muy pocos, la gran mayoría son gente como vos y yo, pero desde una ventanilla o un escritorio, son mal pagaos y tienen que vestise mejor que nosotros. Es más, yo te apuesto que vos vivís mejor que más de uno de ellos que están solo corbata. Son pura apariencia, pobrecitos. Lo que pasa es que solo aprendieron a hacer eso y si los echan se los lleva el diablo, porque no saben hacer otra cosa más que mamar de la teta del gobierno, salvo algunas excepciones. Se comen la platilla de las prestaciones o se compran cosas que no ocupan y en después se quedan sin el santo, ni la limosna -Diay sí, que salgan a la calle a sudase la chaqueta, como se la suda uno o te la sudás vos allá en El Bajo, ¿ ah ? -No me has entendío, entendeme, el Estado debe dentro de su función social crear plazas y mantener a cierto sector de la población, eso es parte de su ser, pero lo que está pasando ora, es que ya no puede dase ese lujo y está bien que despida a jóvenes que están empezando a hacese, pero a personas que tienen veinte o más años de trabajar pa'el, me parece que es un injusticia, porque les agrava el problema que de por sí tienen, al no poder mantener con lo que se ganan a sus familias, menos ora sin güeso y sin saber otra cosa que trabajar pa'l gobierno. Sólo Dios sabe que pueden hacer, diay de seguro se mueren de hambre...-Si vos lo decís, pos allá vos, pero yo si estoy de acuerdo con que echen gente, de por sí somos nosotros los que pagamos, con los impuestos y todo lo que nos sacan, sus sueldos...-Diay, yo no veo que nos vayan a bajar los impuestos, si más bien ve vos que los aumentaron y con el contubernio de los dos partidos, no ves , se ponen de acuerdo los dos hijos de aquellos y nos joden con un montón de proyectos que aprueban en un dos por tres en la Asamblea, pa' eso sí hay acuerdo, si hasta grandes amigos son y cuidadito y si no es cierto lo que dicen, que hasta socios son. ¡Qué va !, ya a naide engañan con esos cuentos de que se pelean, todos estamos sabiendo que por debajo se ponen de acuerdo pa' jodenos. Así que no creas en eso, la plata que se ahorran la gastan por otro lado o contratan más gente pero de la ellos, si pa' todo hay portillos y tienen que cumplir con los compromisos políticos dándole güeso a más de uno que les ayudó. Así ha sido siempre. Vos parecés nuevo Campitos. ¿ No me digás que con esos años todavía te engañan ?- No, no es que me engañen, pero diay, hay que creeles algo, porque si se pierde la fe, ¿ onde vamos a ir a parar ?-

- ¡ Oh Campos !, no ves que tiene razón Justino - dijo una señora, vecina de San Fermín, que venía sentada en uno de los asientos delanteros y continuó: - Yo quisiera velo cuando uno se levanta en la mañana y no tiene que dale a los chiquillos que van pa' la escuela y el colegio y a veces tienen que ise sin probar bocao, ¿ah? - No si yo se que la cosa está fea, pero lo que trato de deciles es que hay que tener fe en algo, que las cosas van a cambiar pa' bien de nosotros, porque si se pierde esa fe, diay, mejor encerrase en la casa pa' no dase cuenta de nada o hacer una guerra o una tontera así, pa' diuna vez por todas acabar con ese montón de vividores. ¿ Onde iremos a ir a parar ? - ¿ Onde vamos ir a parar ?, ya estamos aquí, ya paramos, si desmejoramos más, tendríamos que convertinos en asaltantes o chapulines, como llaman ora, pa' poder comer. Acotó la pasajera. - En eso tiene usté razón señora, por eso es bueno que cada vez que se pueda, se comente, se practique la tertulia con los vecinos o con las personas que se encuentre uno en la calle, la verdá es que nuestros problemas son los mismos y si los comentamos y tratamos de buscales soluciones, a lo mejor hasta la carga se hace más liviana, pero no hay que comentar por comentar, hay que tratar de buscar arreglos, porque nosotros los ticos somos muy daos a hablar paja y nunca llegamos a nada, somos puro plato e' babas, sobre todo cuando nos vienen a pedir que cumplamos nuestra palabra y actuemos pa' solucionar nuestros problemas y nos hacemos los majes, como que no es con nosotros y siempre tratamos de safale el lomo a las responsabilidades y a los compromisos, que nos echamos encima. Por eso es que los políticos de oficio y hasta los que no lo son, encuentran terreno fértil, pa' vivir de nosotros, con el cuento de que son nuestros representantes. Por la misma pereza de nosotros, otros asumen nuestra representación y terminan viviendo de eso y al final, nos tiran, porque pagamos las tortas de ellos. Si tan solo formáramos comités o grupos de estudio de los problemas, unque sólo jueran conversaciones informales, en donde la gente entienda cuáles son realmente nuestros problemas y como anda nuestra situación, otro gallo cantaría en éste país, porque los vividores de la política ya no nos engañarían. Vean, yo los invito a que vayan a El Alumbre y conversen con la gente pa' que vean que despiertos están, ahí sí que naide se deja engañar, por eso usté doña, inicie las charlas con sus vecinos y familiares y si usté quiere que yo vaya a alguna reunión nada más búsqueme y yo con mucho gusto voy a conversar con la gente que usté reuna. Diay a lo mejor se hace un bonito grupo de estudio y de el salen otros más y cuando nos damos cuenta, ya hay grupos hasta en San Miguel, quien quita... - ¿ Usté es el marido de Flor, verdá ? - Si, pa' servile, que ¿ usté la conoce a mi señora ? - Diay sí, ¿ no sabía usté que yo soy su madrina ? - ¡ Ah ! Vea usté, cuántas veces la he visto y no sabía que usté era la madrina de Flor, pos mucho gusto y cuando quiera dese una vuelta por casa, usté nunca va por El Bajo, verdá - Usté sabe que desde que salí de ahí, nunca volví, pero diay, en una que va y otra que viene, a lo mejor por allá les caigo, tengo unas ganas de ver a la mamá de Flor, esa es otra que casi nunca sale -De verdá, sale poco, ora está muy enfermilla, claro vaya por allá -Yo he oído mucho de usté, no crea, si en San Fermín todo se sabe y ya sabemos como son en El Bajo. Viera como me gustaría hacer eso que su alma dice, hacer charlas, conversaciones, tertulias que llaman, no ve que ora la gente casitico ni conversa con sus vecinos, se la pasan viendo televisión, pero no

crea es cuestión de hacer el intento, es una costumbre muy sana y que ayuda a resolver problemas. ¿Verdá? -Diay pos claro. Nosotros allá todo lo resolvemos así, conversando. A propósito Campos, ¿ cuándo vas a extender la ruta hasta El Bajo ?, no ves que esos diez kilómetros, si uno no deja bestia onde Pablo, tiene que hacéselos a pata y con éstos climas, no sea bárbaro, llega uno matao a la casa -Diay no sé Justino, es que eso hay que solicitáselo a la comisión técnica que llaman, allá en San José, y usté no sabe lo que cuesta que allí lo atiendan a uno y eso si no le sacan una propina primero, porque así son, ya nada se mueve en las oficinas de gobierno, si uno no entra en la movida y echa algo por debajo, bueno eso me dijeron el otro día unos carajos que están ahí ajuera de las oficinas, quesque coyotes que llaman-Eso es cierto, yo lo he vivido, pero eso es por culpa de nosotros mismos si en la primera ventanilla onde nos insinuen lo de una propina, le hacemos un escándalo al empleado, yo les cuento que eso no vuelve a pasar, pero no, preferimos y por hacer las cosas rápido y sin jodenos, echar la chiza y que el otro se ría de nosotros, por hacenos algo que tal vez no tomaba gran cosa de tiempo. Mientras sigamos así de deshonestos, éste país va a seguir tal y como está y cada vez va a estar pior. Porque ¿ saben una cosa?, no es el empleado el que peca de primero, es el público el que insinua lo de la propina, pa'orrase trabajo y filas -Si, tenés razón Justino, pero, ¿ quién va a cambiar eso?, ¿ Está muy feo el camino al Bajo? -No ¡ qué va ! si nosotros lo tenemos mejor que este y con nuestra plata y sudor, no te creas que es con plata de la municipalidá. Este chunche entra de lo más bien y hasta la Pulpería e' Toño. ¡ Uf, qué si entra ! -Bueno, no sé, dejame calcular cuánto cobraría más y si me resulta, porque a lo mejor no me conviene y salgo por dentro -Pensalo Campitos, yo sé que no te vas a arrepentir, por lo menos dos viajes a la semana, no sabes lo agradecíos que quedaríamos con vos. A lo mejor hasta sin permiso, nada más te metes y ya ¿ Quién se va a dar cuenta ? ¿ Ah ? - No , si eso es lo que estoy pensando, meteme sin permiso, pero bueno, dejemen calcular como salgo y ahí les aviso, tal vez por lo menos los fines de semana - Está bien, yo sé que no te vas a arrepentir, dejame aquí frente al Almacén de Pablo, pa' recoger la yegua, gracias por todo, ahí me avisás. Bueno doña. ¿ Cómo me dijo que se llamaba usté , pa' decile a Flor que la conocí ? - Carmen, pa' servile Justino y me saluda a todos por allá, ahí en la de menos les caigo - Igualmente, doña Carmen, mucho gusto y de veras, vaya por casa De regreso a su casa y montado sobre su bestia, Justino repasaba una a una, las cosas aprendidas en San José tocaba los sacos con las novedades que llevaban y se satisfacía plenamente, porque cada vez que conversaba con la gente, con el pueblo, lo encontraba más receptivo para entender de los problemas que nos aquejaban y más dispuesto a tomar acciones precisas para tratar de resolverlos. Pensaba que si tal actitud se estuviera asumiendo en todo el país, con la semilla que poco a poco iban sembrando los compañeros que recibían capacitación en el "centro", muy pronto, más pronto de lo que esperaban los políticos , el pueblo les pasaría la factura, porque ya no se dejaría engañar más con los "cantos de sirena" de cada cuatro años.

Comprendía plenamente que no se podía seguir como hasta ahora habían estado y que el pueblo, la gente como él, ya se daba plena cuenta de como eran las cosas, estaba adquiriendo conciencia de clase. Se puso como ejemplo a doña Carmen y lo que le dijo a Campos y a él. Ya lo que pasaba en El Alumbre era de todos conocido y cuidado y si no, hasta en San Miguel sabían de ellos. Bueno, al menos podía felicitarse de que todo esto lo hubieran iniciado en su Bajo y por qué no , si lograban que se extendiera a San Miguel y más allá, pues "la mesa estaba servida" para que quienes desde siempre se habían servido de ellos, pusieran las reglas del juego encima de ella y no ocultaran al pueblo ya más sus intenciones. Ya no les engañarían más ; eso pensaba... Hacía una semana había salido del Alumbre para recibir un curso de desarrollo rural integral, que comprendía el manejo de los problemas y la solución a los mismos, con el propio esfuerzo comunal y sin esperarlo del Estado. Otro certificado más le acompañaba, el que cubriría un espacio que quedaba en la pared de la sala de su casa, cada uno de ellos, hasta el más humilde, le llenaba de orgullo. Todos habían sido obtenidos con esfuerzo y sacrificio de él y su familia, pero estaba convencido plenamente de que valían la pena. Ahora todo parecía más claro para él y lo que seguía era que también estuviera bien claro para su pueblo. Tenía la consigna de que así fuera y esa era la directriz que desde San José le habían girado. Había que informar a la gente y hacer que entendieran en toda su magnitud su estado actual y ayudarles a buscar soluciones a esa problemática. Los bancos ya estaban a punto de rematar las propiedades de más de uno en El Bajo y a eso debería avocarse Justino, junto con los otros líderes. No podían permitir que amigos y vecinos, por las malas actuaciones de los gobiernos y de quienes habían tenido en sus manos la conducción de la política agrícola, perdieran lo que con tanto esfuerzo habían conseguido, pasando a convertirse en peones nuevamente. Algo había que hacer, tal vez no era tarde, pero según había oído, eran más de sesenta familias las que estaban en cobro judicial y arriesgaban a perderlo todo. Félix había prometido meterles el hombro y en la semana que venía, estarían sosteniendo una reunión con él y personeros del banco del que fue alguna vez directivo. Eso se lo había prometido a Justino en una visita que éste le hiciera a su bufete. En la Pulpería de Toño se encontró a Pedro Justino que andaba haciéndole unas compras a Flor, lo subió inmediatamente a la grupa de la bestia, al tiempo que le preguntaba sobre cómo habían estado y que si le había dado vuelta al frijolar. El chiquillo plenamente acostumbrado a las faenas agrícolas, rápidamente le informó sobre todo lo que habían hecho y agarrado de los hombros de su padre con una mano, con la otra palpaba lo que venía en los sacos nuevos de manta, tratando de adivinar las delicias que siempre les traía de la ciudad su padre. Por el tacto, cada una de ellas revelaba sus secretos y desde ya se soñaba saboreándolas. - Sabe una cosa tata, yo quisiera que cuando esté en vacaciones y en un viaje que usté haga a San José, unque sea de ida y vuelta, me lleve. Viera como me gustaría acompañalo- Diay claro que sí m'hijo, en el próximo viaje que haga le decimos a Flor que le aliste algo y me acompaña, de verdá que me gustaría que usté conociera la ciudá como la conozco yo ora, porque hay que ponese muy vivo. Vieras la primera vez que juí, no sea bárbaro, era puramente como ver un saco e' manjarete, solo tembladera. Es que la gente me hablaba cosas terribles de allá, pero al tiempo me di cuenta de que si uno no tiene cuidado, si tal vez sea peligrosa, pero no era pa' tanto. Claro, no te digo que hay que tener algún cuidado y no metese uno en lo que no le importa, pero por lo demás, ahí se la juega uno. Sí, yo lo voy a llevar conmigo, aguárdese y verá, ora hay que ver que dice su mamá, porque eso es lo que hay nervioso. ¡ Ah bárbara !,

El abrazo de ahora, fue con las dos manos, la euforia del chiquillo ahora con diez años, no se hizo esperar y de ahora en adelante, sólo con eso soñaría. Un viaje a la ciudad con su padre, ellos solos. Antes había ido, pero al hospital y sus alrededores, nunca más allá. Su realización plena, acompañado por la figura que idealizaba él como la persona que más sabía en éste mundo, su papá Justino... Y es que la verdad sea dicha, con sus hijos aquel hombre había establecido un nexo más que de padre, de amigo y sus hijos sin ningún temor se acercaban a él para plantearle sus inquietudes existenciales, sabedores de que siempre encontrarían el consejo u opinión acertada, consejos formados por la experiencia de una vida constante en el hacerse. Flor por su parte establecía además de la relación de amiga, una relación de preocupación por la formación de sus hijos y aunque sólo medio leía y escribía, la educación escolar de sus hijos le había brindado la oportunidad para empaparse de todo lo que aquellos aprendían en la escuela y se podía decir que andaba con el nivel equiparado al de sus hijos. Pero cuando se trataba de llamarles la atención con todo el rigor, "trapealos", como dice ella, lo hacía y de qué forma, sobre todo cuando Justino se ausentaba y quedaba a cargo de todo el manejo y administración de los bienes y familia. Más de una vez se le escapaban para la plaza o donde amigos sin permiso y esto la enojaba y con el consabido, "cuando venga su papá, hablamos", iniciaba el regaño. Después o la mayoría de las veces se le olvidaba. A no dudarlo, si no eran una familia modelo, por lo menos aplicaban lo que se usaba en El Bajo y que daba muy buenos resultados, el diálogo y así solucionaban los pequeños o grandes problemas que se presentaban en el seno familiar, aparte de que Justino y Flor eran personas relativamente jóvenes y fácilmente comprendían los cambios que se iban presentando en sus muchachos y hasta los aplaudían. Cada vez eran más independientes y sus gestos de orgullo cuando partían del Bajo hacia la escuela y esa sensación de saberse seguros de sus actuaciones, lo manifestaban en voz alta, para que Dios se diera cuenta cabal de que el proyecto al que se habían comprometido aquella noche en que murió su primer hijo lo estaban cumpliendo a cabalidad y que con la poquita o mucha ayuda que El les prestara, iban saliendo y ahora tenían muchísimo más que en aquel momento. En esas cavilaciones se fueron acercando a su casa y fueron recibidos con alborozo por Flor y Florcita. ¡ Los hombres de la casa habían llegado ! ... ************* - Justino, decime una cosa, es que ora que veo que los güilas van pa' la escuela, me recuerdo de cuando la inaguramos y de lo que el presidente le dijo a usté esa vez. ¿Qué jue lo que le dijo, que nunca usté ha querio decilo ? Viera como comentan arriba eso y diay, usté no ha querio soltar prenda. ¿ Por qué no me dice unque sea a mí ? - ¡ Ay Dios mío, pero que mujer más vina me juiste a reparar ! Muchacha por Dios. ¿ Pa' qué saber eso , si jue un secreto entre él y yo ?.- Diay porque entre marido y mujer no debe haber nada oculto y porque yo sí le cuento todo a usté, por qué usté no me va a contar eso a mí - Está bien, está bien, de por sí han pasao muchos años y como vos sos mi mujer y quesque entre nosotros no debe haber secretos, te lo voy a contar, pero ya sé, mañana se lo contás a tu mamá y endespués ella, que es como esplumar una gallina en un cerro, porque caen plumas a todo lado, no va a dejar a quien no se lo cuenta. Bueno, pero qué importa, de por sí ni ha cumplido, así que te lo voy a contar, resulta que...-

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Aquella mujer, cuando su marido se dispuso a contarle, dejó lo que estaba haciendo en el "moledero" y se sentó frente a él, dispuesta a enterarse del secreto que había tenido a todo El Bajo desvelado por años. ¿ Qué sería ? - cuando el Presidente vino aquella vez y yo le dije un montón de vainas, que yo quería esde hace tiempo decile a un presidente, te acordás que él se levantó y se me acercó y que me agarró de los hombros pa' decime algo - Sí, sí, eso yo lo sé, yo estaba ahí, pero contame lo que te dijo, no ves que tengo los oídos hechos agua. ¡ Qué hombre por Dios !- ¿ Sabés que jue lo que me dijo ? ¡ Ay Justino ! ¿ Pero qué te dijo ? Decímelo de una vez, por María Santísima -El presidente, cuando me agarró de los hombros me dijo; entre dientes pa' que naide lo oyera: Mire güevón, a lo mejor es cierto eso que decís, pero son metas que se pone uno en la vida. Acordate de mí, que después le van a venir a Costa Rica, unos gobiernos tan malos, que me van a echar de menos, porque van a venir a servise y no a servir y cuando eso pase, yo voy a venir a recordártelo a vos, por jetón y esbosalao pa' hablar. También me dijo que iba a venir uno que va a terminar de entregar éste país a las cómo jué qué dijo ¡ Ah sí !, a las multinacionales, eso dijo y que a pesar de la presión que él iba a hacer, ya naide nos iba a salvar porque ese hombre iba a formar un pequeño ejército, pero suficiente pa' mantener éste pueblo domesticao a raya y así asegúrale a los inversionistas sus platas. Bueno él me habló más bonito, yo te lo cuento con mis palabras. Ah, ¿ sabes que más me dijo ?, que eso era un compromiso de los partidos grandes, pero que sí me prometía, que desde onde pudiera, él iba a hacer toda la presión, posible y que con el prestigio que le daban esos premios que yo le estaba criticando, iba a ser escuchao. Eso es todo, no era gran cosa ¿ verdá ? En sus adentros Justino pensaba, que sí era la gran cosa, sabía muy bien que mucho de lo que aquel le había dicho estaba pasando y se disponía a pasar. Los aires que circulaban en el país, así lo indicaban, empero no era él el que iba a alarmar a su esposa, contándole calamidades que se avecinaban, suficiente tenían con las de sus vecinos y amigos. - No era la gran cosa, no era la gran cosa, pero vos crees que yo soy tontica, no ves que a juerza de andar con vos oyéndote cuando hablás, como lora embarrada, algo se me ha pegao, además, éste celebro que tengo es pa' pensar también ¡ Claro que es la gran cosa! Ese hombre te dijo una profecía y viendo las cosas como andan, hasta el más tonto se da cuenta de que tenía razón, sobre todo en éste gobierno y del próximo ni qué decite. Muchachitico por Dios, no ves lo del pacto , que se pusieron de acuerdo pa' freganos a todos, con el cuento de que era pa' salvanos. Ningún salvanos, era pa' salvase ellos y terminar , como vos decís, de saquear a Costa Rica. Ese hombre no es ningún tonto, vea lo estudiao que es por algo lo dirá, ora sí que nos llevó el pisuicas ...- Tranquila, tranquila, tal vez algo se arregle - dijo Justino resignado y muy orgulloso de su mujer, lo cual no disimulaba, enseñando aquella hilera de fuertes dientes, gracias al tratamiento prolongado con "leche de targuá", a que lo había sometido su madre en sus años de infancia. La noche estaba a punto de apoderarse del día y en los árboles vecinos, la sinfonía de pericos y aves de otras especies, soltaban al mundo del Bajo su canto lleno de esperanza de un mañana mejor, canto de naturaleza viva y no de desolación.

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En diferentes regiones del país, centenares o quizás miles de pequeños agricultores y algunos grandes, estaban perdiendo sus tierras. Las políticas desacertadas de producción les habían hecho sembrar productos que no habían encontrado el mercado que les habían prometido y los bancos estaban procediendo a rematar sus tierras, como una manera de compensar en algo las pérdidas que de por sí afrontaban con otros grandes finqueros, sobre todo de banano. Habían comprometido en gran medida sus carteras de crédito con productores independientes de esa fruta quienes, a raíz de los problemas que enfrentaban en el mercado internacional, les había llevado a poner sus empresas en administración por intervención judicial o a la quiebra financiera. Los bancos no les aportaban más capital del que les había dado y sus moras alcanzaban los centenares y miles de millones de colones. Obviamente para los pequeños agricultores no quedaba nada. Entre menos de veinte empresas de éstas, se habían llevado el ochenta por ciento del crédito disponible. ¿ Quienes o de quienes eran esas empresas ? De políticos o familiares de éstos o bien de amigos de ellos y lógicamente de los directores bancarios. Este país no escarmentaba, se estaba en proceso de liquidación, del fondo de contingencias agrícolas y de la eliminación de los certificados de abono tributario y otras granjerías, pero por políticas poco analizadas, se creaban efervescencias agrícolas, las cuales al no estar sustentadas en buenos estudios de mercadeo, llevaban a la quiebra a quienes se metieran, con muy raras excepciones, en esos programas. Por supuesto, quienes corrían con las pérdidas de esos pocos, éramos la totalidad de los costarricenses y cuando había ganancias, si es que las había, eran pocos los que las disfrutaban. Al final, los bancos se quedarían con tierras sin ningún valor y sin capital para operar. La rapiña una vez más funcionaba hasta que se inventara otra o bien, hasta que los bancos " nacionalizados” cerraran y dieran paso a la banca privada, por supuesto, en manos de capitales de otras latitudes, algunos con olor a drogas, sangre y miseria humana. De verdad, éste país no escarmentaba... - Diay Juan, ¿ de onde venís tan asoleao ? - De San Miguel hombre, no ves que me mandaron cita del banco, quesque pa' formalizar el arreglo aquel que víamos acordao, pero diay, no pude llegar a nada así como estoy de liquidao, es poco lo que puedo hacer y plata m'entra hasta que saquemos los frijoles y meta la caña al trapiche. Vieras el poconón de gente de aquí que me encontré allí en las mismas, eran más de las que se habían reunio, es que estaban zorritos y no decían nada. No sé qué vamos a hacer, ora sí que nos llevó el diablo- Diay Juan, unque tuvieran la plata pa' pagale al banco, se quedarían sin poder comprar semilla y sin con que comer, más con los intereses que les están cobrando, bueno, naide va a poder trabajar con ellos, así cualquiera se hunde - Claro hombre, no ves que el arreglo que nos están haciendo, sólo de intereses es más de lo que debía de plata, además los gastos de abogado y el papeleo que llaman, hacen un dineral imposible de pagar. ¿ De onde putas va coger uno pa' pagales ? - Miró fijamente a su amigo y compañero, como esperanzado en un milagro y resignado acotó : - Yo no sé sí mejor dejar que rematen la finquilla y jalame pa' otro lado, onde sea, unque sea de precarista, la verdá es que eso es lo que están haciendo con uno, empujándolo a eso. Lo pior es que la embarcada nos la dimos nosotros, por creeles a los juemiputas del comité agrícola el cuento de las matas exóticas que llamaban, ora ya naide las compra y nos quedamos con ese montón de monte ahí sembrao. Sólo limpiar el terreno cuesta un montón de plata, aparte de que esas matas son como de cal, queman toda

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la tierra. Tan bonitas tierras que teníamos y echalas a perder con ese poco e' monte. Tanto que nos lo dijiste y otra vez no te hicimos caso. Es que como a los Pérez de San Fermín les jué tan bien, de tontos creíbamos que a nosotros también nos iría así . ¡Qué embarcada ! Naide nos tiene de jetas, ora que no tenemos pa' onde coger, nos damos cuenta, pero diay, ya es tarde. Ultimadamente que se quede el banco con esa puta tierra, de por sí pa' lo que nos costó... - ¿ Cómo es eso de que de por sí pa' lo que nos costó ? No jodás Juan, ¿cómo te vas a dejar derrotar así de fácil, ah ? Ora mismo se me va y me busca a todos los que están metidos en ese tanate y que se vengan pa'onde Toño, pa' discutir qué hacemos, pero andate, no quiero vete esa cara más por aquí, hasta que no le avisés a todos. Deciles que nos vemos a las seis de la tarde, pa' que todos tengan tiempo de terminar el trabajo...- Está bien, pero pa' sete sincero, yo no creo que podamos hacer algo, si yo estoy agüevao , esperate a que veas la cara e' los demás, es que somos tamaño puño, no creas que somos diez ni quince. Te vas a asustar Justino. Ora voy a ir a avisales, pero no te aseguro que vengan, la verdá es que la mayoría te tienen vergüenza, porque bastante nos lo dijiste y no te hicimos caso. Así es uno de jupón Con la cabeza hundida en sus hombros, asemejándose más a su apodo, Juan “Sapa” partió a cumplir con la encomienda. De antemano se sentía derrotado, seguro estaba de que los demás vecinos, estaban igual o peor que él y no intentarían ninguna gestión más para tratar de salvar sus fincas. El banco les había dado el ultimatum desde hacía varios meses y lo que habían hecho la mayoría en los últimos días, era tratar de lograr más tiempo para evitar lo inevitable, el remate de cerca de cincuenta fincas del Bajo del Alumbre, que estaba previsto para el siguiente mes. Ya el aviso había sido publicado en el Boletín Judicial y el juzgado de San Miguel únicamente pararía esa gestión, si el acreedor lo ordenaba, dándose por satisfecho pecuniariamente, como les decían los del Departamento Legal. No había nada más que hacer, era una deuda vencida y los bancos, a éstos pequeños agricultores si les ejecutaban sus bienes. No eran ni don, ni doña sociedad anónima, eran simples costarricenses, a duras penas sujetos de crédito y gracias a las cuatro hectáreas que cada quien poseía, sólo por eso. Su nombre no representaba nada y por ende era mejor rematarlas y que alguna empresa de las grandes o de renombre se apropiara de ellas, para dedicarlas al gane de plusvalía. Sin mucha ceremonia y gracias a las políticas erradas de los diferentes gobiernos, cincuenta familias estaban a punto de perder el pedazo de sus ilusiones y amenazaban con engrosar las listas de precaristas sedientos de tierra, que ya de por sí pululaban en la geografía nacional. Su situación no era diferente al montón, a los miles de agricultores de otras zonas del país, que habían perdido la esperanza y la tierra y no les quedaba más que pelear por la de otros, la de aquellos que la mantenían inculta y ganando certificados de abono forestal, otra de las modalidades de burlar al fisco. Ellos serían cincuenta familias más. No habría marcha atrás. En el "centro" les habían señalado el camino y como para arreglar el problema que les habían causado por un mal consejo, emanado de las decisiones de los tecnócratas; unas tierras incultas en el norte del país estaban esperando ser tomadas. Lo mejor de todo es que eran estatales. Esto no lo sabia Justino, quien fiel a sus ideales y sin creer en los "cantos de sirena", había sembrado lo de siempre, porque como decía : " todos los días se come, mas no todos los días se adorna”. Las gestiones que hicieron en el banco para evitar los remates, fueron insuficientes, los cincuenta pequeños propietarios vieron esfumarse sus esfuerzos en un abrir y cerrar de ojos y más aún, quienes fueron por curiosidad al remate, pudieron verificar que las fincas suyas, de común acuerdo, fueron adjudicadas a una sola sociedad anónima, que inmediatamente hizo el depósito correspondiente.

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Así de la noche a la mañana, aquellas personas se habían convertido en extraños en sus propias tierras. Un nombre de fantasía había adquirido el fruto de sus esfuerzos y bueno, no les quedaría más que " echar a rodar tierra”, quizás adonde les recomendaban los del " centro”, lo que al parecer era más viable toda vez que veían muy difícil que los nuevos propietarios les contrataran como peones, por otra parte, un asunto de dignidad les impedía quedarse trabajando en las tierras que habían sido suyas. Una amargura acompañaba en los últimos tiempos a Justino, sus amigos, sus vecinos, las personas que admiraba y respetaba y muchos de los que se habían criado con él y que le habían acompañado en sus luchas, estaban a punto de partir del Alumbre, la idea de irse de precaristas a un lugar de la frontera norte, donde se les había asegurado había muy buena tierra y estaba abandonada y que era nada más meterse en ellas y empezar a sembrar, había calado hondo, por cuanto estaban ubicadas en los dos kilómetros fronterizos y que una vez asentados ahí solicitarían al IDA, la concesión. De hecho algunos de ellos habían hecho giras con miembros del "centro" y habían explorado el terreno, otros ya se habían asentado y habían dejado en El Alumbre a sus familias, para llevárselas cuando los nuevos dueños asumieran la propiedad de sus fincas. Las noticias que habían llegado al Alumbre eran de que efectivamente las tierras aquellas eran de primera, para sembrar frijoles y arroz y que se daba muy buen maíz y yuca y que la comida de la familia estaba asegurada, pero eso sí, había que trabajar bastante para hacer el abra y que con unos meses de buen trabajo, los frutos se verían. Informaban también que cada quien había cogido lo que necesitaba y habían marcado tierras para todos, que el único problema que se presentaba era con los nicas que utilizaban esas tierras como corredor para meterse a nuestro país a buscar trabajo, pero que por lo demás, con trabajo saldrían avante, acostumbrados a como estaban a trabajar duro. También informaban que el clima era igual de caliente que en su Bajo y que había bastante agua, tal vez más que en el Alumbre. La cuestión fue que antes de que los nuevos propietarios, que resultaron ser unos cubanos, vinieran a apropiarse del Bajo, ya casi todas las familias habían partido para la frontera, como llamaban al lugar y hasta sus casas habían desarmado, para no dejar nada en pie, de porsí, pensaban, " esos vienen a desarmarlo todo y mejor nos llevamos lo que pueda servirnos”, allá todo era útil, hasta " un cabo de alambre” En tres meses, el Bajo del Alumbre, aquel que tenía vida y sudaba esperanza, lucía desolado, sólo diez familias a lo sumo, habían quedado y luchaban para evitar que los nuevos propietarios se apoderaran también de sus pedazos. Esa al parecer, era la consigna de la compañía. Las siembras de frijoles, maíz y yuca, habían dado paso a unas grandes plantaciones de caña, ya que era esa la actividad a la que se dedicarían y; una gran estructura, se levantaba en el llano, donde una vez estuvo la parcela de Juan “Sapa”. Era un ingenio que se encargaría, según se decía, de producir azúcar para la exportación y la producción de alcohol, ya que rondaba en la Asamblea Legislativa el proyecto de la ruptura del monopolio estatal para la producción de ese producto. En cuenta una empresa propiedad de políticos había entrado en el negocio de los etiles. Entre las familias que quedaban, estaban en parte, las de Flor y la de Justino, por cuanto algunos habían ido a coger tierras a la frontera y también quedaba la de don Rafael, por supuesto Toño se había quedado y se aprestaba a transformar su negocio y adaptarlo los nuevos tiempos y a las exigencias de la nueva empresa, entre ellas, instalar una cantina y dos mesas de pool, ya que los peones que contrataban, en su mayoría nicas, así lo exigían. Debería hacerlo porque si no otro lo haría, de por sí, conseguir una patente para el expendio de licores, era uno de los trámites más sencillos en éste país, para ello, en el galerón que una vez sirvió para guardar cosechas de frijoles y maíz, instaló las dos mesas de juego y otras más con sillas, que hacían de salón y servían para que los nuevos habitantes del Bajo, se embriagaran. A no dudarlo, el pueblo se había transformado y a vuelta de un año habían tenido que cambiar sus costumbres y hacerse más desconfiados de sus vecinos, a efecto de no adquirir costumbres y cultura

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diferente, ya que aquellos no eran si se quiere, la gente más culta que venía a nuestro país. Obviamente no era su culpa. Eran personas acostumbradas a librar otro tipo de luchas y si en su camino se atravesaba la vida de un ser humano, pues bien, no lo pensaban dos veces para tomarla. Eran muchos años de lucha entre hermanos y eso les había endurecido y hasta si se quiere, les hacía incapaces de amar la vida. Sus existencias estaban hechas para la sobrevivencia y nada más. Lejos de sus hogares, si es que los tenían, lejos de sus familias, si es que les preocupaban, en un lugar que nunca se imaginaron conocer y tratados " a la patada”, por aquellos nuevos amos, que también habían huido de sus tierras y que inexplicablemente habían amasado fortunas considerables en países que no eran los suyos. Esos eran los vecinos de El Bajo del Alumbre, el futuro no era nada halagüeño, el panorama se tornaba oscuro y en el horizonte se dibujaba un camino a recorrer, para irse al encuentro con otro destino, no el que se hubieran imaginado. - Mirá Justino, hay una cosa que nosotros no hemos visto y que tal vez nos salve, diay quien quita un quite - ¿ Qué es Toño ? - Diay que esta gente ha botao todos los siembros de maíz, frijoles y todo lo habío y por haber y en esos campamentos onde tienen a los nicas, hay unas cocinas enormes; diay pa' atender a tanta gente, tienen que tener buena comedera, unque yo he visto que pasan unos camionsotes ahí pa'l Bajo, pero en algún momento se les va a bajar el orgullo de que no quisimos vendeles nuestras tierras y a lo mejor se deciden a compranos de lo que sembramos y en una que va y otra que viene, nos convertimos en proveedores de esa compañía. A ellos les sirve y a nosotros también, ¿ no te parece ? - Mm, no sé que decite, pero yo como que les tengo desconfianza, desde que llegaron aquí han querio como atravesanos el caballo y a cada rato me aparecen cercas reventadas y animales metios en mi pedazo, como que al propio lo hacen pa' agüevame y obligame a que les venda, yo no sé que decite, pero a lo mejor a vos si te vaya bien con eso que decís, pero lo que somos nosotros, ya la estamos viendo fea, aparte d'eso , los productos que están usando pa' fumigar, ya me quemaron tamaño pedazo del frijolar y a quién le voy a reclamar , si cada vez que cruzo el portón de la entrada me sale un mal encarao con un rifle y sólo preguntame que pa' onde voy, que qué es lo que quiero y eso no es nada, yo no sé si vos te diste cuenta, pero parece que Félix va a vendeles lo que le queda y si eso es cierto, ahí sí que lo mejor que podemos hacer es emigrar pa' onde se jueron aquellos, la verdá es que no es tan feo y ya hasta un caserío han levantao, te digo sinceramente, aquel día que fui a visítalos, hasta un pedazo dejé conversado, son como diez hectáreas, de lo más llanitas y con buena agua, nada más de levantar una casita y ponese a trabajar, por lo menos está uno ahí con los amigos y familiares. La puritica verdá es que yo nada más estoy esperando a que salgan los güilas de la escuela y si me decido, vendo el pedazo de aquí y me voy en el verano pa' dentro - ¿ Serías capaz de dejar esto botao, con lo que te has jodío ? - Diay pos sí, no ves que ya no hay tranquilidá, me da un miedo con la mujer y los güilas, porque diay, un carajo de esos que trabaja ahí ya borracho, les puede hacer un daño, vos no sabés con que miedo salgo ya de la casa, no te digo que entre ellos hay más gente decente que otra cosa, pero hay algunos que ni te cuento, no seas bárbaro. Vale que vienen por temporada, porque si juera todo el tiempo, ahí sí que sería fea la cosa. Pero por ora y mientras se van éstos, hay que tener cuidado...- Sí, en eso tenés razón, ahí yo los oigo hablando cuando se juman y de verdá a veces dan miedo, no ves que son gente acostumbrada a matar, toda la vida han estao en guerras, y echase a otro, lo ven natural, pobrecitos, yo la verdá es que les tengo lástima, largo de sus casas, de sus familias y trabajando en los oficios que aquí naide quiere hacer, todo pa' mandale plata a sus familias. Hay que ver como viven en

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esas pelotas, en esos galerones que les construyeron los cubanos pa' que duerman - ¿ Vos los has visto ? No seas bárbaro, casi pior que perros, como dos o tres escusaos pa' todos y si acaso dos baños y una pila pa' que laven la ropa. La comida que les dan, yo no se las daría ni a los chanchos, fijate que es como un atol de arroz y frijoles y un poco de cuadrados que les cocinan pa' que acompañen aquello. La verdá es que razón tienen pa' ser tan mal encaraos, es una vida desgraciada la que se dan...- ¿ Cómo cuantos son ? - Como trescientos, bueno eso me dijo uno de los capataces, aquel Villalobos que's de San Miguel. ¿ Te acordás ? - Ajá, ahí lo he visto en un carro de la compañía y el otro día me llevó hasta San Miguel. - Bueno, pues ese es uno de los capataces, así se llaman, pero más que todo son contratistas, él se encarga de buscar la mano de obra y vendésela a las empresas, así ellos no tienen ninguna relación laboral con esos empleados y quien se encarga de llevar más mano de obra y echar la que no sirve es él contratista. Este cobra por todos y les paga, bueno, al menos eso es lo que él me contó el otro día que vino a llevase una caja e' manteca...-Si, a mí me contó lo mismo ese día que me llevó, dice que es muy buen negocio y que lo aprendió cuando trabajó en la policía de migración, allá en Upala. Como entraban oleadas de nicas sin papeles, él los detenía, pero como había dueños de fincas que necesitaban peones, sobre todo pa'l tiempo de cosecha él se encargaba de supliles a esos finqueros la mano de obra que necesitaban y con eso se ganaba tamaño poco e' plata, tanto es así que en después y cuando lo echaron con el cambio de gobierno, se quedó viviendo de eso, lo que le ha dado más que cualquier otro. Ora se llama contratista y cuando le contaron que venía una compañía de cubanos pa'l Bajo, no lo pensó mucho y se vino a ofreceles la mano de obra y sus conocimientos de la zona. Inmediatamente lo contrataron y ahí está, echándose un montón de plata a la bolsa y sin hacer nada, porque los cubanos le pagan a él por toda la gente que tiene y él les paga a ellos un poco menos, quedándole una buena ganancia, así me lo contó y sin ningún remordimiento de conciencia- ¡ Ah bárbaro ! Ni vergüenza le da, es puramente un traficante de esclavos y más habrá como él , es que es un negociazo -

quién sabe cuántos

- Eso no es nada, fíjate que eso lo hacen, me dijo que él nunca lo ha hecho, que eso lo hacen hasta con mujeres, escojen a las más bonitas que entran sin documentos y se las endosan a los bares de putas que hay en la zona onde estén y por eso cobran y les siguen cobrando a ellas pa' no echalas del país - No puede ser, ¿ eso te contó ? - Diay sí, fijate - No tienen perdón de Dios, ¡ qué desgraciados ! No cabía duda, las conversaciones habían cambiado de tema, ya en la Pulpería de Toño, no se hablaba de problemas comunales, sino de los problemas que la nueva situación de la comunidad les traía. -.-

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- ¡ Justino, Justino ! , que ahí llegó Félix, con Villalobos y con el señor ese de la Compañía, que dicen que venían a buscalo pa' hablar con usté - Diay ¿ qué querrán ? y yo con este trabajo que tengo, ¿ por qué no se vinieron pa' acá, vos no les dijiste que estaba aquí ? - No, fijate que yo les dije que te iba a llamar, diay Félix como es, cuando lo vi jue en la cocina y ya que les hiciera aguadulce con limón pa' la sé y que te viniera a llamar y ahí los dejé sentaos en los escaños del corredor... - Bueno, vamos a ver ¿ qués la cosa ?, ya me lo imagino. Si es lo que vía pensao, ya se llegó l'hora, no va ver de otra que arrollar los chunches y jalar de aquí, acordate de mí mujer , que's eso. Te aseguro que Félix ya les vendió y vienen pa' que les entriegue el trapiche y lo demás de la finca. Bueno, que Dios nos acompañe Dicho lo anterior, abrazó a su mujer y se dispuso a recoger los aperos para marchar hacia la casa, donde le esperaban ansiosos los otros. El camino esta vez se hizo más largo, a pesar de que no estaba a más de quinientos metros de la casa, sus pies le pesaban inexplicablemente, como si no quisieran trasladar a su dueño a esa cita con el destino, cita que, a no dudarlo representaba ni más ni menos, una merma en sus ingresos, ya que si era lo que pensaba, ya no se ganaría lo de la operación y administración del trapiche y el cuido de la finca de Félix y obviamente, si el trapiche desaparecía, ya no tendría donde sacar el dulce propio y el de los vecinos, que era otra extra que se ganaba, por cuanto aquel dulce era vendido en San Miguel y hasta en San José. En fin, a su criterio, la suerte estaba echada. En la casa se divisaban las figuras de Félix, Villalobos y la del otro señor, quienes conversaban animadamente en el corredor y en espera del señor de la casa, para así tratar el importante asunto que les tenía ahí. - ¡ Buenas tardes señores !, ¿ cómo les va a todos y a qué debo el honor de su visita ? - Diay Justino ¿ cómo te ha ido ? - respondiole Félix - Ahí, ahí sobreviviendo, vos sabés Félix, como está todo. Mucho gusto señor... Justino Mora, pa' servile, diay Villa, ¿ todo bien ? - Diay ahí breteando duro también, a Dios gracias no nos falta el trabajillo - ¿ Más aguadulce ?, Flor, Flor, traeme por favor un jarro de aguadulce con limón, pa' refrescame también y; bueno , ¿ a qué debo el honor de su visita ? - Mirá Justino, como vos sabés, éste señor es representante de los nuevos dueños de la mayoría de tierras del Bajo y siendo que ellos necesitan cada vez más cantidad de terrenos para que les sea rentable la producción del ingenio que están montando, hemos decidido venderles, gracias Dios muy bien vendido y; como el trapiche está dentro de la negociación, pues he venido de una vez a notificarte que a partir de mañana, ellos entran en posesión de todo y que de seguro van a desmontarlo. Los arreglos entre vos y yo, por los años de servicio, te los voy a reconocer aparte, pero lo que quería que supieras es que, bueno, ya no vamos a volver a tener relación de trabajo, ahora la compañía que representa el señor Hernández, será la encargada de las cuatrocientas hectáreas que quedaban de nosotros aquí - Bueno, ya eso se veía venir, me alegra mucho que hayás conseguío un buen precio por la finca, porque lo que jueron los otros, salieron feos con lo del remate, pero diay, eso jue culpa de ellos y de naide más. Ora sí que la compañía de usté va a tener casi toda la tierra del Bajo, sólo quedamos unos poquitos-

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Antes de que Justino terminara, el señor Hernández le interrumpió cortésmente, a efecto de externar su criterio. - Disculpe don Justino, pero, efectivamente nosotros no tenemos la culpa de lo que pasó con sus vecinos, inclusive, dejamos como a usted le consta que se llevaran lo que necesitaran de sus parcelas, bueno, hasta casas enteras se llevaron y; a pesar de que nos dimos cuenta, no movimos un dedo, como una cortesía nuestra y para que tuvieran un punto de partida. A nosotros , por lo demás, no nos interesa nada de lo que esté sembrado, ni siquiera las casas, como usted ha podido ver, nos interesan únicamente los terrenos, para así sembrar la variedad de caña que queremos plantar aquí y que es de una muy buena rentabilidad. Ahora bien, si usted quiere, podemos negociar privadamente el trapiche, a lo mejor a usted le interese seguir operándolo, en fin, no sé... - Como gustame, me gustaría, pero diay, de onde voy a coger pa' pagáselo, si ora voy a quedar más pior. Otra cosa, ustedes los del ingenio van a ocupar toda la caña que saquen y hasta yo les podría vender el pedacillo que siembro, ¿ así que pa' qué voy a dejame ese trapiche ? y; ¿ le puedo preguntar algo medio serio ? ...- Claro hombre, pregunta nomás...- ¿ Cómo se enteraron ustedes de que las fincas de la gente de aquí se iban a rematar ?, digo, si se puede y si no es una indiscreción... - No, por qué va a ser una indiscreción, si los negocios nuestros son cristalinos y a cielo abierto, le digo que efectivamente nosotros tenemos contactos en las juntas directivas de los bancos, sobre todo en éste, en el cual debía la mayoría de la gente de aquí, pero de eso a que sea un chorizo, jamás, porque intervenimos en el remate, como pudo haber llegado cualquiera otro, usted sabe que eso se publica en el Boletín Judicial y tuvimos la gran suerte de que nadie más se presentó y nos las adjudicamos por la base. Así fue como nos hicimos de éste Bajo, el que por cierto era lo que estábamos buscando, por la calidad de la tierra - Ah, ya entiendo y muchas gracias por ser tan sincero. - Por otra parte don Justino - Llámeme Justino, por favor - Bien Justino, pero escuchá al señor Hernández, te lo pido como amigo, yo creo que te va a resultar beneficioso. Poné atención que quizás te convenga - ¿ A ver que será? Diay con oír nada se pierde - Pues bueno que nuestra Empresa, como usted puede haber visto, está construyendo un ingenio y todos los galerones que se necesitan, la verdad sea dicha, necesita todo pedazo de terreno que exista en éste Bajo y tal vez más allá para que la industria sea rentable y siendo que son pocos los vecinos que quedan, pues hemos decidido negociar directamente con ustedes los pedazos que tienen en El Alumbre. Le anticipo Justino que la mayoría de los amigos y vecinos suyos, como don Rafael, Toño y los familiares suyos y los de su esposa, han decidido vendernos, dados los buenos precios que estamos pagando por hectárea, así que, qué le parece si le hacemos una buena oferta por su pedazo y las mejoras que le ha hecho tomando en cuenta lo que tiene sembrado. -¡ A carajo !, ora sí que me toma usté desarmao, yo sabía que en algún momento esto podía pasar,

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pero no me imaginé que juera tan rápido. ¿ Así que los demás ya vendieron ? - Pues expresamente no, pero les ha parecido la oferta y casi que dijeron que sí, es más para que usted esté seguro, le voy a dar hasta el lunes para que lo piense y consulte a sus vecinos sobre lo que le he dicho y le voy a ser sincero, su parcela está exactamente ubicada en el camino que tenemos trazado para el ingenio y es por eso que nos interesa inmensamente, es más para que vea nuestra buena fe, si usted decide vendernos y mientras busca donde irse, le permitiremos quedarse en la casa, esto lo hacemos por la amistad que usted tiene con don Félix. A ver qué le parece? . -Bueno diay, como pareceme, me parece, pero cuál es el precio que ustedes pagarían por mi pedazo. - Vamos a ser justos con usted, su finquita es de las más llanas y mejor cuidadas del Bajo, aparte de eso, le voy a decir de antemano que el trapiche no nos interesa, así que si usted lo quiere, lo desmonta y se lo lleva, se lo regalamos como parte de la transacción, además por todo y pagándole las mejoras y tomando en cuenta el valor de su casa, le vamos a dar, aquí entre nos, siete millones de colones, ni un cinco más ni un cinco menos, pero eso sí tiene éstos tres días para que lo piense, porque en caso contrario, los ingenieros tendrían que idear otra ruta para la calle. ¿ Estamos ? - Déjeme pensalo, la suma me parece muy justa, jamás había pensao yo tener tanto dinero, pero como no había pensao irme tan rápido, voy a dale vuelta y a conversalo con mi familia, pues pa' mí lo que ellos piensen es muy importante y ahí le estoy avisando, no se preocupe. - ¡ Eso Justino !, yo sabía de antemano que si te pagaban lo justo, con vos no iba a haber problema, yo se lo dije a don José, pero diay, como vos sos tan encabronao y andando don Félix por aquí, mejor le dijimos que nos acompañara por cualquier cosa, de por sí ustedes son como hermanos - Es cierto Villalobos, Justino y yo somos como hermanos y por ello yo le sugerí a don José la suma que debería pagarle por su pedazo. Era lo que me parecía más justo, pues como se los conté, él fue uno de los que se jodió para dignificar la gente de éste Bajo y me pareció que era Io mejor. Ahora que no vamos a tener presencia en el pueblo, pues no quisiera irme de aquí sin dejar al amigo y hermano bien acomodado. Diay, con la platilla que le den por la parcela, la casa y las prestaciones que yo le voy a pagar, en cualquier lugar que compre se va a instalar con toda la pata y si se lleva el trapiche, a la vuelta de la esquina está en que se nos hace de plata, máxime con la capacidad de trabajo que tiene. ¿Estamos amigo ? - Estamos Félix, que Dios me acompañe, pero vieras como me duele salir de mi Bajo. - Ya te acostumbrarás, mañana vengo a que me regalés un gallito, porque aún me falta finiquitar algunos detalles con la compañía y de paso te voy a dar unos consejos que te van a servir. Mucho gusto de verte. ¡ Hasta mañana Flor!..- Bueno Félix, hasta luego don José, ahí le estoy avisando, bueno Villa, saludame a tu familia...No habían caminado tres pasos los visitantes, cuando la familia se reunió inmediatamente alrededor de la mesa del comedor. La mujer y los hijos se habían mantenido a la expectativa y escuchando a través de la pared lo que aquellos hablaban. La decisión que tomaran cambiaría por completo sus vidas y a no dudarlo, los acontecimientos indicaban que la estadía en El Bajo estaba llegando a su final. Diez hectáreas, "separadas" en la frontera norte, se constituían en la posibilidad de la nueva vida para aquella familia, sólo tenía que ir a conversar con Juan Sapa, que era el encargado, por el momento, de los terrenos y se las adjudicaría.

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Pero, con el dinero y el trapiche quizás no habría necesidad de ellas, podrían quizás, optar por otra alternativa y más cerca de los centros de población, donde sus hijos pudieran capacitarse. En fin, había que discutirlo en familia. -¡ Papá, papá ! ¿ Qué vamos a hacer? ¿ Es cierto que tenemos que inos de aquí ? Preguntó ávido de respuestas Pedro Justino. - Y ora qué hago con la matrícula en el colegio y ya hasta víamos hablao con la señora que m'iba a dar posada. - ¿ Qué hacemos Justino, empezamos a empacar chunches ? - Tranquilos, tranquilos, ya oyeron, porque por lo que veo estaban pegaos a la paré, si decidimos que sí vendemos, nos dan un tiempo pa' trasladanos y podemos quedanos viviendo en la casa, mientras yo veo que compro o si voy a la frontera a ver lo de la tierra y a que me construyan una casita. Plata habría y tal vez hasta nos presten un camión pa' trasladanos, como están tan urgios pa' construir el camino, diay se les puede sacar eso y más. No crean, el trapiche cuesta un dineral y yo creo que con eso nos levantamos onde sea que nos vayamos, porque dulce necesitan todos. En fin, todo esto hay que planealo muy bien, porque si nos quedamos con la plata, nos la vamos comiendo y en después nos quedamos con una mano atrás y otra delante. Sí, hay una cosa que no me gusta, porqué toda la gente, si ya había hecho trato con la compañía, está tan zorrita, hasta el ganso de Toño ¡ Qué cabrón!, hablé con él ayer y naditica me dijo, dejen que vaya a hablar con él. ¿Tu familia nada te había dicho? - Naditica Justino. ¡ Qué raro ! Tengo ganas de ir a preguntales, hace días de por sí que no hablo con ellos, parece mentira, quedamos menos en El Bajo y poco nos vemos, bueno es por miedo de dejar las casas solas, es que esa gente que anda ahí, a uno le da miedo, diay no sabe uno que clase de gente es. - Yo en la mañana me encontré a mi hermanillo Manuel y no me dijo nada, me güele feo, qué gente por Dios, se lo guardan como si yo los juera a regañar, buenos estamos pa' regañadas, si yo ya me cansé de luchala pa' esta gente, acordate con lo de los siembros y del por qué perdieron las parcelas los que están en la frontera. Voy a ir a hablar con Toño, oritica vengo ¿ Necesitas algo de la Pulpería ? -Sí, treme galletas, café y azúcar, es que Flor no toma con dulce de tapa, pa' nada le gusta, ah, ora que también yo no sé que vamos a hacer de almuerzo que viene Félix, tal vez si trés un atún pa' hacer una ensalada de papa, bueno ahí ve vos - ¿ Por qué no toma con dulce e' tapa, mi chiquita, ah ? - Culindinga que es - Contestó riéndose Pedro - Pedro, no le diga así a su hermana, si a ella no le gusta, ¿ qué le vamos a hacer ?, gustos son gustos y en fin, mientras haya con qué comprale el azúcar, pos ahí se lo traigo a mi chiquita, pierda cuidao y usté que no toma leche hervida, ¿ Qué me dice ? ¿ No es ser culindingo también ? - No, eso es tener buen gusto y la verdá es que me gusta la leche bien fría y que no sepa así, a hervida, por eso en lugar de hervila, mejor la meten así a la refri y ya... - ¡ Oh muchachos, por Dios ! Dicho lo anterior, procedió a salir hacia donde su amigo y confidente, para increparlo del ¿ por qué no le había contado del negocio ?

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Una mirada nostálgica a su pueblo, tanto arriba como abajo, le acompañó hasta el negocio, la verdad es que si alguien sentía la partida de éste Bajo, era él. Ciertamente, bastante se había ocupado de que todos tuvieran su pedazo y de asegurar el suyo y ahora, todo aquello quedaba en el pasado. No había un más allá la partida era inminente. - ¡ Qué cabrón sos vos Toño !, no me habías dicho nada del negocio, tan calladito que te lo tenías - No fregués vos, si hablé con ellos temprano y de aquí se jueron pa' onde vos, ¿Cómo querías que te avisara, con un zopilote mensajero ?, baboso más grande.-¡ Ah ! yo creíba que ya vías cerrao el trato, como me dijeron que vías aceptao - Diay pos sí, yo les acepté, pero todavía no hemos cerrao el trato, ni me han pagao, hasta mañana, seguro. Fijate que les vendí todo, hasta el negocio y diay, me pagan muy bien y la puritica verdá , ya estoy cansao de estar vendiendo guaro y chiniando borrachos. Ya no es lo mismo de antes, lo peor es que uno lleva güilas pa'rriba y viendo esos ejemplos; mejor me compro un pedacillo ajuera hago una casa y ahí me la juego. Con lo que me pagan, vivo de los intereses, así los güilas, como decís vos, tienen chance de estudiar. ¿ Qué te parece ? - Diay sí, está bien, tonto serías si no aceptabas, más si te pagan bien, espero que así sea, porque sólo este negocio y la construcción valen un cachimbal de plata - Sí, me van a pagar muy bien por todo, tengo entendio que lo va a manejar la compañía, así, lo que compren los empleados se lo rebajan del sueldo. ¡ Qué condenaos más vivos! le sacan el jugo a todo. Bueno pero contame de vos. ¿ Vas a vendeles o qué ?. Pa' onde te vas a ir, recordá lo del estudio de los güilas, tenés que pensar en todo eso, unque me imagino que ya lo pensastes...- Más o menos, lo estuvimos conversando, pero quería conversar con vos, pa' ver ¿cómo te jué ?. A los otros y a mi familia parece que también les compraron o les van a comprar, ora voy a ir a ver como anda la cosa por allá, son tan mensos, que es capaz que se los llevan entre las patas. - Pero decime: ¿ Les vas a aceptar ? - Diay, viendo como andan las cosas, ¿ qué me voy a quedar haciendo aquí solo, con gente que ni conozco ? La puritica verdá es que pa' estar guindando, mejor es caese, a lo mejor les acepto y me jalo. Ya de por sí tengo un pedazo hablao allá onde están todos y diay, ¿ no te lo había dicho, verdá ?, pero entre las cosas que me dan, aparte de la plata, está el trapiche y a lo mejor me paro con eso allá, siembro de caña el pedazo que Juan me tiene reservao y va de nuevo, a empezar a hacese. Yo creo que sí les voy a aceptar. Voy a ir a hablar con mi familia y que sea lo que Dios quiera. Hablamos mañana...- Bueno Justino, por qué vos no hacés lo mismo que yo, comprás en el centro o cerca, te ponés el trapiche y a lo mejor, quien quita, levantás el billete, pa' qué te vas a ir a atorrantear con tu familia allá. Te digo sinceramente, yo jamás me iría pa'llá, sabiendo onde es eso. No ves que lo que abunda ahí son las enfermedades, sería como desterrame sin necesidá y quitales a los güilas la posibilidá de que estudien y el día de mañana me vayan a echar en la cara, que por ir a buscar más plata los hice pasar esas necesidades. No, jamás, yo me quedo en San Miguel. Está bien aquellos putas que se jueron, pa' onde agarraban si no se iban pa' allá Pero nosotros, jamás de los jamaces; never, como dicen los nicas. Lo que Toño le había dicho, lo dejó meditabundo, él que siempre había considerado primordial la instrucción de sus hijos y hasta se llenaba de orgullo con solo pensar en la posibilidad de que se le convirtieran en profesionales, se ponía ante una disyuntiva: el bien común o el bienestar personal y patrimonial. La posibilidad de hacer crecer sus recursos materiales con las diez hectáreas que le tenían

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separadas en la frontera o bien, continuar con lo que había planeado, darle a sus hijos las posibilidades y facilidades de instrucción. Definitivamente era una decisión que tenían que tomar todos. Por ahora, se enteraría de los planes de sus familiares y los de la familia de Flor, luego se reuniría a la hora de la cena, con su esposa e hijos y juntos tomarían la mejor decisión. - Mirá Toño, antes de que se me olvide, dame dos atunes d'esos azules, unos dos kilos de papas y tres paquetes de tortillas ¿ Qué más me dijo Flor?, ¡ Ah ya se me olvidó , ahí que venga un güila! Visitó a su familia y encontró por respuesta lo que ya sabían, venderían y se irían para San Miguel, allá comprarían una casa con un pedazo grande de terreno y conseguirían trabajo en la construcción o como peones. Estaban seguros de que teniendo casa, para comer no faltaría, mucho menos para mantener a su madre. En iguales condiciones estaban los familiares de Flor, con quien se encontró Justino ahí. Mientras él iba donde Toño, Flor se había venido con los muchachos para donde su familia, a efecto de averiguar sobre sus planes. Definitivamente la decisión de todos era vender, máxime que la compañía quería todo El Bajo desalojado, con el afán de impulsar sus proyectos agroindustriales. Al parecer y según se decía, esta Empresa era subsidiaria de otra instalada en Guanacaste y dadas las características de la explotación, no les interesaba tener vecinos-residentes cerca. El Bajo del Alumbre estaba a punto de ser de ellos. Y es que así era y había sido, las grandes explotaciones agrícolas en éste país, no daban margen para que los pequeños agricultores subsistieran, amen de que no era rentable manejar en pequeña escala explotaciones agrícolas, si no se contaba con el aval estatal y el crédito oportuno de los bancos. A los bancos siempre les había interesado financiar a las grandes explotaciones, por cuanto los avalistas, además del Estado, eran sus amigos de siempre o los amigos de aquellos y así entre ellos se acomodaban las piezas para seguir por siempre ordeñando el crédito bancario. Así había sido siempre, ¿ para qué cambiar ? . El Bajo del Alumbre, estaba a punto de pasar a ser propiedad de una compañía de éstas, primero, gracias a la buena información del remate de las fincas y segundo porque la compra de las mismas, se había logrado financiar mediante una operación crediticia con el mismo banco. Así no había donde perder. ¡ Pobre banca nacionalizada, en tu memoria se hacían más ricos otros ! - Bueno, tal parece que todos nos vamos y como a mí me interesa que esta decisión la tomemos entre todos, ora vamos a hablar sobre qué es lo mejor que podemos hacer. Yo quiero Flor, que los güilas tengan voz y voto en esto, diay porque ellos se podrían ver afectados y no quiero que el día de mañana me vayan a sacar en cara algo y que a lo mejor vayan a tener razón. Ahí sí que me moriría de tristeza, yo que me he jodío tanto pa' que no pasen necesidades - Tranquilo Justino, tranquilo, ya va a ver que Dios nos va a iluminar pa' tomar la mejor decisión, pongámoselo en sus manos y va a ver usté que El nos escoge el mejor camino. Vieras como me gusta que te interese tomales el parecer a los chiquillos, porque ellos son importantes y la opinión de los niños siempre debe ser tomada en cuenta, diay sí, nosotros el día de mañana nos morimos y va y ellos quedan por ahí atorranteando, sin oficio ni beneficio En el camino a la casa, surgieron varias opiniones y alternativas, cada quien externó libremente las suyas, solo faltaba congeniarlas y buscar el consenso, en vista de que eran bastante disímiles.

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Justino sabía que al final le iban a dejar a él la última decisión y debería tomarla, en aras de que todos vieran cumplidas por lo menos en parte sus pretensiones, sin crear roces, que de por sí nunca habían existido en la familia. Flor propuso que se fueran para San Miguel y que compraran un pedazo de terreno en los alrededores, sembraran caña e instalaran el trapiche y que con eso la iban a pasar pobremente pero desahogados y lo que era más importante, sus hijos tendrían acceso a la educación, que era el deseo más importante de sus vidas. Florcita, apoyaba a su madre, máxime que tenía cifradas sus esperanzas en que ese año entraría al colegio, inclusive, ya estaba prematriculada. Pedro Justino, propuso que se fueran para la ciudad y que compraran una casa y que con lo que ganaran todos trabajando, se mantendrían y que ellos estudiarían de noche, para cumplir con sus sueños de ser profesionales. Justino soñaba y miraba más allá, pensaba en diez hectáreas que le aguardaban en la frontera, pero ¿ cómo haría para conciliar intereses tan dispares? Al parecer y de acuerdo a las opiniones de su familia, éstos no querían salir del pueblo, por lo menos querían estar cerca de sus familias y la verdad es que eso a él le parecía bien, toda vez que la ayuda que le proporcionaba a su madre, le sería muy difícil dársela si se iban más lejos. En fin, tomar la decisión iba a ser más difícil de como se lo había imaginado al principio. Le quedaba la posibilidad de que al día siguiente le visitaría el amigo Félix y con su consejo tomaría la decisión final. Dichosamente por lo menos en éstas gentes, una característica muy representativa del ser costarricense, no se había perdido, los hijos y los nietos anteponían sus decisiones a que la familia, la gran familia, siguiera unida y es que así había sido desde siempre. Los familiares de Flor y de Justino, se veían como una gran familia y los hijos de sus hijos se habían mancomunado de tal forma , máxime ahora que quedaba tan poca gente en el pueblo, que hacia indisoluble éste vínculo. Sabían que si partían para la frontera, esa unión se disolvería y que ya les sería muy difícil volverse a ver. Al día siguiente y una vez escuchada la opinión de Félix, tomarían la decisión. *************** - Diay Juan Sapa, ¿ qué diablos andás haciendo por aquí ? Nosotros te hacíamos refundio allá. No me digás que estás con mal de patria que llaman. Dijo el sorpredido Toño al ver al exvecino llegar por su negocio. - ¡ Toño amigo ! ¿ Cómo te ha ido ? -Diay pos que te digo, pos más o menos, me imagino que ya te habrán contao como andan las cosas por aquí...- ¡ No qué va !, si vengo llegando, ahí ajuera dejé el saco de los chunches, voy a ir onde Justino a ver si me da posada por esta noche y sobre todo pa' hablar con él, quiero que me aconseje-

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- Mirá mejor meté ese saco pa' dentro, porque las cosas ya no son como eran antes y si te descuidás te dejan viendo pa'l ciprés, pero contame hombre, qué pulga te picó por allá, si se puede saber. - ¡ Ay Toño, parece que estás en otro mundo ! ¿ No has oído las noticias ni has visto periódicos ? - No qué va , si con las noticias de aquí de sobra tiene uno pa' andar angustiao y viendo qué hace, ora te voy a contar, pero primero contame vos, que me tenés con los oídos hechos un puro agualotal, pero aguardase a ver qué hora es , anjá, mejor cierro esta carajada y nos vamos pa' onde Justino, no ves que a aquí no se puede hablar, con éste niquerio que entra y sale, como si jueran dueños de esto. Aguardate. ¡ Toñillo, treme los candados! - Ej, ¿ Quesque ya vas a cerrar, brother Toño ? - Ya lo dijo paisa, es que tengo que ir a hacer una vuelta con éste señor y como la noche está tan mala, mejor cierro ya pa' abrir mañana temprano. Le voy a sacar la cuenta ... Cerrado el establecimiento, tomaron el camino hacia El Bajo, donde seguros estaban hallarían a Justino. Una hermosa luna llena les acompañó en su desplazamiento y al fondo, el bullicio del campamento traía hasta sus oídos lo que no se acostumbrarían nunca a oír. Su Bajo efectivamente, había sido tomado por otra cultura y a la vista y al oído saltaba, que ya no era el mismo. Esto entristeció a Juan, que más se lamentó de la suerte que habían corrido, por haber salido de éste su terruño. - Mirá Toño. ¿Cómo es la vida aquí con éste escándalo ? - ¡ Ay Juan ! Vos no tenés una idea, gracias a Dios que ya le he vendido a la compañía, dueña de ese ingenio y a más tardar el otro mes estoy saliendo pa’l centro. Bueno esa es la idea, si no se nos ocurre alguna otra cosa, pero lo que soy yo, sí me voy de aquí, ya esto no es lo mismo. Pobrecita ésta gente, pero es que son otras costumbres. No creas, la mayoría son buena gente, pero hay algunos que parece que no le temen ni al diablo y eso es lo que más me da miedo y, a cuenta de qué va a estar uno arriesgando la vida y la de la familia. - ¿Qué, tan fea está la cosa Toño ? - Muchachitico por Dios, sin que te parezca exagerao, prefiero las compras con libreta y de a fiao de ustedes, a las compras d'esta gente, que compran más, pero joden, que no tenés idea. Diay, así deben ser sus costumbres o a lo mejor creen que como nosotros nunca hemos estao en guerras como ellos, quesque somos cobardes y tratan de todas formas de achucullanos. Por eso es que ya estoy ostinao y cuando la gente de la empresa esa, me ofreció comprar, ni lo pensé dos veces y les acepté la oferta que de por sí fue bastante buena. - ¡ Ay Toño ! Y yo que creiba que los desgraciaos éramos nosotros. - Ya ves, pero contame: ¿ Qué jue lo que pasó allá ? Si a según Justino ustedes estaban de lo más bien y hasta tierras buenas habían cogío. - Esperate a que lleguemos onde Justino, pa' no repetir la historia, sí te digo pa' que te des una idea, éste jueputa gobierno nos va a arruinar a todos corte parejo. A según nos han dicho se prestan pa' cualquier cochinada, pero esperate que ya vas a oír todo el cuento. ¡ Mirá, ahí está el patas rajadas de Justino ! ¡ Diay Justino ! Mi amigo del alma, ¿Hay campo en ésta casa pa' mí ?

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- ¡ Santísima Trinidá !, ¿ Es de éste o es del otro ? Pero gran juemialmas, ¿Qué diablos andás haciendo por aquí ? - Sentémonos pa' contales, no sea que se vayan a caer de culo por lo que les voy a contar. Les digo que esto es lo que nos han contao… ¡ Diay Flor ! ¿ Cómo te ha ido ? Saludos le mandó Berta. - Pero a ver Juan, contanos ¿ Qué está pasando, siempre me tenés el pedacillo guardao, verdá ? - Ja, no te digo, si eso es lo que pasa. De la noche a la mañana y por orden del gobierno, nos hemos quedao sin el santo ni la limosna o mejor dicho, con una mano atrás y otra adelante. - ¿ Cómo ? Le preguntaron al unísono -Diay sí, en resultas que un día anduvieron por onde nosotros unos cómo es qué se llaman… ¡ Ah sí !, unos topógrafos, mide que te mide y con ellos andaban unos chinos, unos nicas y otros del gobierno de aquí, endespués empezaron unos peones a desenterrar unos como bloques de piedra y a pasalos pa' otro lado, más hacia dentro. Bueno, eso no es nada, eso pasó y parte sin novedá. Muchachos, como al mes cual es nuestra sorpresa y eso acaba de pasar, oritica, en éstos días, nos va llegando una notificación, onde nos dicen que nosotros estamos viviendo del lado de Nicaragua y que tenemos que jalanos de ahí, porque sino los nicas nos van a volar bala, así como así, vean ustedes que barbaridá y que injusticia están cometiendo con nosotros. Estamos perdiendo todos los siembros y no solo eso que hasta nos amenazan, porque en éstos días han empezao a aparecese un montón de soldaos de allá y nos molestan a las mujeres y a los güilas, como atemorizándonos pa' que nos jalemos rápido. Vean ustedes y nosotros que creíbamos que estábamos en nuestra patria. Di'un momento a otro se aparecen conque no es así y ora sí que estamos más feos que una empanada e' caca, como decía Pompin el de Sergio, porque pa' onde vamos a coger. Bueno, ahí como que nos quieren dar una posibilidá de unas tierras en unos zuampales que compró el IDA a yo no se quien y en un montón de plata, uno de esos negocios que ahí se hacen, por el lado de los Chiles, ora sí en Costa Rica. Mamulón y otros más andan viendo onde es y por eso yo me vine pa' acá, primero pa' contale a ustedes y a arvetile a usté Justino, que ya no hay tierra allá y de segundo pa' que me aconsejés a ver qué hacemos - ¿ Qué's esa barbaridá ? Así como así, vienen miden y corren mojones y luego los echan a ustedes. ¿ Diay, pa' qué ? -Es lo que te digo Toño, si hasta parece que ustedes están aislaos y que no oyen noticias - De eso no he oído nada. ¿ Y vos Toño ? - Yo tampoco, es lo que le vengo diciendo a éste cabrón - Bueno, voy a contales lo que a mí me contaron, como les dije al principio. La historia es que unos chinos o una compañía d'ese país, va a construir un canal seco, yo no sé que's eso y parece que del lado de los nicas, por el lago, era muy angosto pa' éste lado y que necesitaban un pedazo d'éste país y que, eso dicen, dieron un adelanto de veinticinco millones de dólares, que es un cachimbal de plata, los que se repartieron como tres de aquí pa' ordenar la corrida de la frontera, con un cuento medio jalado del pelo de que eso era así porque el tratado de los límites así era, con eso se benefició a los nicas y así podrán construir el tal canal, lo que les dará mucha plata a ellos o a quienes lo administren -

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- ¿ Qué les he dicho yo desde hace tiempos ? Que a éste país lo último que le faltaba era que le vendieran la soberanía y vean, ya empezaron a entregala a vista y paciencia de todos nosotros, bueno, si es cierto eso que Juan nos está contando. En fin hay que investigar más. Mañana que hablo con Félix, voy a pregúntale como quien no quiere la cosa, a ver si sabe algo, ese siempre está sobre la jugada de todo, la tirada es que es muy reservao, todo se lo guarda. En fin le voy a preguntar. - Mirá Juan, ¿ y qué piensa la gente de allá, qué van a hacer ? -Imagínesen, a como nos juimos de aquí, que si no es por la confederación, nos juéramos muerto de hambre, hasta que salió la primera cosecha de maíz y frijoles y ora, de nuevo a pensar pa' onde nos vamos y ora sí que sin ayuda de naide, porque con los pleitos que se tienen en la confederación ya no se sabe quién manda y mucho menos quien podría ayudanos. No sé sinceramente. Si las tierras que nos ofrecen en los Chiles están feas, habrá que ise pa' llá, no hay di'otra. Que sea lo que Dios quiera. Qué manera más rara de perder uno la ilusión de la finquita y la trabajada que se le había dao. ¿Verdá? - Pos sí, pero diay si por lo menos les aseguran otro terreno, no todo se ha perdío, a trabajalo se ha dicho, de nosotros nunca se ha dicho nada Posteriormente, se dedicaron a contarle a Juan con lujo de detalles, sobre como andaban las cosas en su adorado Bajo, para que aquel se diera cuenta de una vez por todas, de que aquella tampoco era la opción y que aquellas tierras que otrora habían sido suyas, ya no eran las que habían dejado. Por el contrario, ya no les soportaba ahí, ni ellos, los que quedaban, le soportaban a ella. Es que la tierra no lo era todo, era el entorno, los vecinos con sus sueños, esperanzas y las oraciones al Supremo Hacedor, lo que hacían del Bajo, aquel portal de ilusiones. Terminado aquello, la sola tierra, no aseguraba que El Bajo del Alumbre, fuera aquel que habían dejado Juan Zapa y los otros vecinos y familiares. Juan atendía los comentarios de sus amigos y unas gruesas lágrimas de sal y tristeza bajaron por sus curtidas mejillas. En el fondo había abrigado la esperanza de que las cosas no estuvieran tan mal en El Bajo y venirse con su familia aunque fuera de peón de la compañía. Odiaba el lugar hacia donde habían trasladado sus ilusiones y más odiaba la actual situación que estaban pasando. Las palabras de sus amigos lo hacían volver a la realidad. Si en El Alumbre no había campo para los que tenían tierras, mucho menos lo habría para quienes como él, no tenían en éstos momentos " ni cama en que caer muertos”. No había de otra, volvería a la zona norte y la verdad, que fuera lo que Dios quisiera. ************* - ¡ Juemialma Félix, qué dicha que viniste !, hay tanto que quisiera preguntate, que dejame ordename, porque si no me voy a hacer un nudo en la lengua,- Tranquilo Justino que tengo toda la tarde pa' conversar con vos, ya terminé los asuntillos con la compañía y ya no me queda nada más por hacer hoy. Vengo a quedarme a almorzar, ¿ no importa ? - ¡ Ay don Félix ! ¿ Cómo va a importar ?, si ya de por sí sabíamos que usté venía, Justino me lo había dicho con tiempo y, ya casi está listo el almuerzo, si quieren ya...- No, no, todavía no Flor, gracias. Si tal vez un vaso de aguadulce con limón, ojalá bien fría. Bueno a ver Justino, ¿ cual es tu desasosiego ? - Bueno... - empezó Justino, como tratando de darle cuerpo a las inquietudes que en su mente se agolpaban por salir y de las cuales esperaría respuesta sincera de su amigo. Si bien es cierto hacia bastante tiempo no asistía a cursos, ni a charlas de la unión de campesinos, también era cierto que de una u otra

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forma, Justino trataba de estar informado del acontecer nacional, sobre todo en el campo que le interesaba, la política electoral y la problemática del campesinado y del pequeño productor, más sin embargo, informándose únicamente por lo que decía la prensa, se sentía muy mal informado, por ello, debía acudir a su amigo, a efecto de clarificar una serie de dudas, las cuales se habían acentuado con la conversación sostenida hasta altas horas de la noche con su huésped Juan "Zapa" y con Toño. - Mirá Félix, yo sé que vos no estás en ningún puesto político y que tal vez por ello no te enterarás de todas las cosas que pasan y de lo que te voy a preguntar, pero como... diay, vos juiste diputado y tenés amigos en el gobierno y en muchos lugares y, entre ustedes se pasan todos los cuentos, como una forma de seguirle la huella a los que disfrutan del poder, decirme una cosa: ¿ Es cierto lo que me contó Juan Zapa, que alguien corrió o mandó a correr, los mojones de la frontera con Nicaragua, a cambio de un cachimbal de plata, pa' que los nicas tengan campo de hacer un canal seco, que llaman y que por eso, la pobre gente que se había ido de aquí y muchos otros costarricenses más, andan ora rodando porque se quedaron de la noche al día sin sus parcelas, las que creían tener en suelo nacional y ora resultó que estaban del lado de los nicas. Y eso no es nada que hasta con armas los han amenazao pa' que desalojen rápido, porque los chinos que van a construir la obra los están precisando ? - ¡ No seas bárbaro Justino !, eso que estás diciendo es muy peligroso y hasta se podría ganar uno una querella, si lo anda diciendo por ahí, pero para serte sincero, yo también he oído esa historia y de muy buenas fuentes, que te digo, si hasta me han dicho los nombres de por lo menos tres personas que cogieron parte de esa plata que decís, por ese trabajito. Hay tantas cosas que nuestro pueblo no se da cuenta, con solo decirte que por ahí anda un japonés que ya tiene comprada más de una conciencia y de los dos partidos, esta metido en un montón de empresas, negocios y cosas, que bueno, tal vez algún día saldrá a la luz pública, pero para que sepas, hoy por hoy, se puede decir que es el hombre más rico de éste país, con tentáculos en un montón de cosas y gentes y lo más curioso de todo, es que vino como una persona pobre, que puso negocitos pequeños, apenas para vivir. Lo que pasa es que en este país si no se tienen pruebas para demostrar lo que se afirma, más vale callar, aunque se peque por omisión, eso lo tengo bien claro antes de que me lo digás. Eso mi amigo, hace que yo en lo personal, me mantenga muy alejado de mi partido, el que tanto amé y defendí; puta, sí que lo quise, casi que era como mi segunda casa, ahora lo veo con reservas, como un nido de escorpiones, cada quien anda con el aguijón levantado y a la ofensiva, buscando clavar al posible rival...Su mirada se clavó en el suelo, se sentía en él, el dolor que le causaba hablar así de su partido, pero hacía tiempo que venía comentándolo con sus más cercanos y no veía solución a sus denuncias, por el contrario, cada vez se sentía más aislado en la organización. Ya no era un " elemento disciplinado ". Sus pensamientos fueron interrumpidos por el comentario de Justino. - Con que vos me lo digás, pa' mi es suficiente, ya me imaginaba que en ese asunto de la frontera norte había algo bien hediondo, tiene razón Juan, así de la noche a la mañana, no se les va a ocurrir pensar que los mojones fronterizos estaban mal puestos. ¡Qué suciedad ! si son capaces de hacer eso con nuestro suelo, ¿ qué no harán con nosotros ? - concluyó apesadumbrado . - Bueno, ora contame otra cosa...- ¡ Señores el almuerzo está servio ! - Interrumpió Flor desde la cocina. - Bueno, vamos a almorzar y ahí vamos comentando tus inquietudes, me imagino que van a ser sobre la propuesta que te hizo la compañía - Sí, sí, vamos di'una vez - Pero Flor, ¿ qué son éstas delicias ? Efectivamente, una mesa decorada con una bandeja de trozos de pollo en salsa de tomate, una sopa

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con fideos, sacada de la sustancia del pollo, arroz con achiote, tortillas recién hechas, ensalada de papa con atún, una "tinaja" de fresco de limón, que hasta sudaba de fría y media docena de aguacates del "palo del trapiche", que son los más buenos y "enmantequillados", componían aquel banquete, que almorzarían la familia de Justino y su invitado. Mientras comían, una a una fueron evacuadas las dudas de Justino sobre la venta de la finca y sobre cual sería la mejor opción, concluyéndose que lo óptimo era lo que fuera más conveniente para toda la familia y en este caso, lo que era más viable era la compra de una finca pequeña en las cercanías de San Miguel o en el mismo San Fermín, así se mantendrían en su hábitat natural y los niños podrían viajar al colegio, si ese era el caso. Félix había estado durante toda la conversación con una sonrisa maliciosa y fue hasta el final, cuando degustaban un arroz con leche de postre, que les hizo la oferta. Una finca de tres manzanas que tenía entre San Fermín y San Miguel, compuesta por un terreno casi plano con algunos " columpios " , en el que podría instalar el trapiche que le cedería la compañía y le quedaría bastante terreno para sembrar e instalar la casa. Al parecer era una muy buena opción. - Diay Félix, esa oportunidá que me estás dando, ni siquiera me había pasao por aquí. Dijo Justino tocándose la sien. - Es para que veas, es de eso que quería hablarte, es un pedazo que nos va quedando sonto por ahí y la pura verdad Justino, yo para que diablos lo quiero, es muy pequeño y siendo que ya no nos queda nada por aquí, lo mejor es venderlo y que más contentos quedaríamos nosotros si alguien a quien queremos se lo deja, así podría venir de vez en cuando a saborear un gallo de Flor. ¿ Qué me decís ? - Más o menos sé cual es ese pedazo, tu tata hablaba de el siempre, como algo que tenía botao, como que le quedó por una platilla que no le pagaron y me había dicho que no hallaba que hacer con el, es más yo casi le digo que me lo vendiera, pero me puse a pensar que de onde voy a coger pa' pagale. Por cierto, un día que fuimos a dejar dulce a San José, me lo enseñó. Como que sabía que podía ser mío. ¿ Cómo cuánto costará ? - Mirá cabrón, para que veas que vos sos un hombre de suerte y que te sacaste la lotería con nosotros, te lo doy escriturado, eso sí vos pagás el traspaso, te lo doy en dos millones, más barato ni San Gil y eso para no regalártelo. ¿Ah? ¿ Qué me decís? Tenía razón Félix, ese precio era en verdad para no regalárselo, pero era comprensible si se tomaba en cuenta la fraterna amistad que unía a aquellos dos seres tan dispares socialmente, pero tan estrechamente ligados moral y éticamente. -¿ Qué dicen ustedes muchachos, qué te parece a vos Flor ? No había necesidad de preguntarles, sus ojos les delataban, atrás quedaba la zozobra de un eventual viaje a la zona norte del país, donde nada era seguro y en donde la violencia se campeaba en cada franja de ese territorio. Con esa propuesta estaba asegurada la permanencia en el terruño, eso sí, más cerca de la cabecera del cantón y con la posibilidad de seguir estudiando, sueño que acariciaban. - ¡ Ay Justino, ay mi amor ! ¿ pa' qué me pregunta ?, usté bien sabe el miedo que yo tenía de irme pa' la zona norte, si es que en los últimos días no he pegao el ojo, me paso las noches en vela pidiéndole a tatica Dios que le meta a usté en la cabeza que esa no es buena idea, sobre todo también, por lo que me han contao ellos, que allá a cada nada, entran hombres armaos que vienen del lado de Nicaragua y asaltan, violan a las mujeres y hasta matan a los campesinos como usté, ¿ cómo creiba que me sentía ? Además, nos íbamos a ir sin saber onde nos íbamos a meter y bueno, ya ve, vea lo que le pasó a esos pobres amigos de nosotros, ya los echaron de onde estaban y ahí andan rodando otra vez, como el judío errante, viendo onde van a ir a parar. No mi amor eso no es vida, bastante nos matamos en esta parcela, pa' ir criando a los

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güilas y si nos vamos a ir de aquí es pa' mejorar, nunca pa' ir a matanos otra vez, sobre todo a un lugar que no conocemos y onde abundan las enfermedades - Metió sus manos dentro de la bolsa del delantal como para darse ánimo y prosiguió: - En buena ora viene usté Félix, a ofrecenos esa ganga, porque diay, es una verdadera ganga, que bien dice cuanto quiere usté a Justino, ya si la dejamos ir, no creo que se nos presente otra oportunidá d'esas. Yo le diría sin pensalo mucho que sí, un sí bien grande y con el agradecimiento de toda ésta familia y de verdá, nuestra casa siempre será la suya, aquí usté siempre encontrará un gallito, unque sea de güevo - Güilas, ¿ qué piensan ustedes ? - Diay si papá, me parece que es una buena oportunidá, como dice mamá, sobre todo porque está cerca del centro y podré ir a estudiar al colegio, si hasta en bici podré ime...- respondiole Florcita. ¿ Y vos Pedrito ? - Yo estoy de acuerdo con lo que piensan todos, si es como dicen, que está cerca del centro, pos diay, vámonos pa'llá, ojalá mañana, porque aquí es muy aburrido vivir ya, con esa gente tan malcriada y tan rara que trabaja en el ingenio - Diay Félix, como que vamos a hacer el trato, si quiere vamos a ver esa terreno y apeniticas me paguen en la compañía, te pago. ¿ Qué decís ? - A ver Flor, apagate ese fogón y vámonos todos a ver lo que será su nueva morada. ¡Jale vamos! Yo ahora los vengo a dejar. En un santiamén subieron todos al doble tracción de Félix y se dirigieron hacia donde muy pronto sería su nueva tierra, de camino, los comentarios de como desarmarían la casa y el trapiche y de la ayuda que necesitarían para ese menester, fue el principal tema de conversación. Una vez llegados al sitio, pudieron constatar que éste estaba muy bien cercado con seis hilos de alambre; una indescriptible emoción embargó las entrañas de aquella familia, un portón rojo de hierro, muy bien cerrado con un candado “yale ", impedía el acceso. Una vez abierto por Félix y con gran costo, dada la oxidación que presentaba, todos entraron en tropel para tomar posesión de sus nuevos dominios. Algunos vecinos que por ahí pasaban les observaban y comentaban con susurros sobre aquellos nuevos personajes de la comunidad, dando por un hecho de que serían nuevos vecinos. Justino era ampliamente conocido, no obstante sus familiares, poco salían del Alumbre, por lo que no eran relacionados con él. Con su cuchillo y en la tierra, Justino escribió unas palabras y al fijarse todos lo que decían, asintieron al leer en el polvoriento suelo : " El Nuevo Alumbre ". Ya había sido bautizado su nuevo hogar. - ¿ Qué Justino, así le vas a poner a la finquita ? - Sí Félix, es lo menos que puedo hacer por la tierra que me vio nacer y que como vos has visto, ya la llaman con el nombre del ingenio. De ora en adelante, éste pedacito de tierra se llamará El Nuevo Alumbre pa' que nunca se nos olvide de onde venimos y de cuantas tristezas y alegrías acumulamos en aquellas tierras. Dijo al dejar escapar un profundo suspiro. - Está bien amigo, no necesitamos ver más, la tierra es buena, el terreno es plano y allá en aquella

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lomita, de donde estoy seguro se puede ver la mayor parte del Bajo, vamos a construir la casa, en aquel llanito va el trapiche, ahí junto a la quebrada. ¡Juepucha Félix, pero qué buena cerca se mandaron a poner ! - Sí, es cierto, eso es ganancia para vos, es que como esto estaba botado, desde el tiempo de papá, se decidió cercarla bien, para evitar tentaciones, ya ves, ahora te queda a vos bien cercada y es por los cuatro costados. mirá ahí está ese ranchillo, pienso que a lo mejor con una buena limpiada, hasta les sirve a ustedes mientras reconstruyen la casa La tierra efectivamente era buena, de la mejor calidad y como había estado en reposo durante varios años, estaba sedienta de la semilla que la pusiera a producir. A no dudarlo había caído en las mejores manos y segura estaba que de ella sacarían los mejores frutos, y estaba dispuesta a dárselos. Aquella familia le había caído bien desde que la vio y gozosa esperaría la oportunidad para demostrarles cuanto les amaba. Pudo ver que eran manos trabajadoras las que se estaban apoderando de ella y con la ayuda de Dios y del generoso invierno de estas tierras, pronto aquellos se sentirían satisfechos de haberla poseído. Orgullosa se jactaba, que después de tantos y tantos años de ocio, unas manos cariñosas rasgarían sus entrañas, para obtener de ella sus frutos y ella no castraría ese gusto, generosa se los daría, para eso estaba y había estado pendiente de contar con una gente así. Le contaba de la nueva a sus vecinas tierras, las de arriba y las de abajo y ¿ por qué no ? a las de al lado, las que lucían orgullosas milpas y frijolares todos los años y " le sacaban los ojos " con cada cosecha. Ahora ella podría, con la ayuda de aquellos, parir sus propios frutos, realizarse como madre tierra y sonreírle al mundo con bondad, " los árboles florecerían con flores de sonrisas y los pájaros tomarían su néctar y esparcirían al mundo lo que sería de ahora en adelante, la nueva vida..." , había dicho Flor, alguna vez. Pasaron los días, los meses y antes del verano y cuando los pericos inundaban como una marea verde y con su griterío los bajos y altos de San Fermín, Justino Rafael y su familia eran los flamantes dueños de la Finca El Nuevo Alumbre. La compañía, urgida como estaba por las tierras de ellos se había empeñado en que se trasladaran a la mayor brevedad y prontamente finiquitaron el negocio, le pagaron a Justino y obviamente, con tal de que se desmantelara la casa y el trapiche rápido, al servicio de los Mora se pusieron siete peones, más dos camiones grandes, con lo que en un santiamén, se reconstruyó la casa en las nuevas tierras. El trapiche quedó ubicado como a cincuenta metros de la casa y al lado pastaban dos bueyes que hacían yunta y que se habían constituido en el regalo de Félix a sus amigos, por si el motor llegaba a fallarles. El dos de febrero, día de la Candelaria, Flor arrancó los últimos "siembros" del jardín y en un camión cargado solo de plantas ornamentales, dijeron adiós a las tierras que por años les había acogido y ayudado a sobrevivir. El Bajo del Alumbre quedaba atrás. La Pulpería de Toño, había cambiado su rótulo por el de "Supermercado" y la pura verdad es que ya nada les unía a aquellas tierras, salvo los muertos que quedaban enterrados en el cementerio. Los demás familiares, con el dinero recibido por la venta de sus parcelas, habían alquilado casas y terrenos en San Fermín a la espera de una oportunidad para hacerse propietarios. Sabían de antemano que la oportunidad vendría pronto, máxime teniendo la plata, algo de lo que carecían la mayoría de nuestros pequeños agricultores, los que de por sí y en su mayoría, estaban a punto de entregar sus tierras a los acreedores.

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En el norte del país, los vecinos y amigos que habían sido desalojados de la frontera, habían ido a parar a unas parcelas suamposas por el lado de los Chiles, aptas en parte para la siembra de arroz y otras para frijoles, en fin, por lo menos, después del negocio que se decía habían hecho algunos, algo les había quedado a ellos, para no quedar en el total desamparo, aún y cuando la soberanía nacional hubiera sido una vez más pisoteada. La patria seguía siendo saqueada por quienes se habían elegido y nombrado para administrarla, sus amigos y familiares, concesiones generosas y desestabilización de la banca nacionalizada, con desfalcos y falsos rumores, hacían poco creíble su solidez y ya la banca privada se aprestaba a asestar los últimos golpe de gracia, para adueñarse del mercado financiero. Los entes creados para servir, con sentido social y solidario, sufrían los embates de los intereses de algunos, para que los rubros más productivos, fueren vendidos. No es que quisieran vender a las instituciones, sino que lo que les interesaba era dejar "a la libre" la explotación de servicios soberanos, para que, quienes con muy buen olfato habían invertido en esas tareas, " hicieran mesa gallega " El cinismo se había institucionalizado y los imputados o cuestionados, con el mayor de los descaros y para no dar fe de sus dolosas actuaciones o se declaraban inocentes y perseguidos o amenazaban, con querellas a quienes osaren mancillar sus nombres o solicitarles cuentas de sus actos. Así que, la prensa, el ciudadano común o quien quisiera inculpar o denunciar a algún cínico sinvergüenza de éstos, tenían que documentarse muy bien, para no sufrir la amenaza o la persecución. En todas las instituciones, daban cuenta los noticiarios y la prensa escrita, ahora sí un poco más comprometida con la ética y la moral, que se daban o habían dado negociaciones incompatibles y violaciones a la ley del enriquecimiento ilícito de los servidores públicos y se prestaban para el tráfico de influencias, contrataciones dudosas y desfalcos descarados, que alcanzaban los cientos de millones de colones. Lo único que estaba quedando era "el cascarón " Se comentaba en la calle que por unos cientos de miles de colones cualquiera podría hacerse de una concesión o permiso de explotación del servicio remunerado de personas en vehículos taxis, que por un diez o más por ciento del monto solicitado , se conseguía un crédito en un banco, sin mucho papeleo y garantía. También se hablaba de aquellas personas que sin ser funcionarios o servidores públicos, fácilmente Podían vivir del erario público, con el mote de "asesor"; en fin que, si en algún momento la Patria había sido saqueada y su soberanía vendida, las nuevas generaciones de "servidores" le estaban escurriendo las venas para terminar de desangrarla. Ese era el panorama que servía de marco a la Costa Rica actual y con el que esta familia se enfrentaba en la inauguración del Nuevo Alumbre. ¿ Valdría la pena hacer el sacrificio de trabajar, por ella ? Solo el tiempo les daría la respuesta. En el mes de marzo y estando Justino " doblado sobre el surco", sembrando estacas de caña, escuchó que le llamaban desde una finca vecina. - Justino, pss, oiga Justino, volveme a ver que necesito hablate. Deja eso hombre, dejalo un rato , que te vas a hacer santo de tanto trabajar...- Diay don Jeremías, casi que no lo oyía, es que con estos calorones, hasta los sentíos se le nublan a uno. ¿ Pa' qué soy bueno ? - Mirá hombre, hace días quería hablate de algo y es que como vos ves, yo ya estoy viejo y los muchachos casitico todos, aparte de la menorcilla, se han ido pa' San José, allá están de empliados en lo que Dios les ha reparao y la verdá es que han hecho su vida , pobremente, pero diay, sin estudios, qué querían . La puritica verdá es que ya naide quiere trabajar la tierra y prefieren trabajale a otros, pero en la ciudá, y como vos me contastes el otro día, quesque hay alguna gente tuya que están esperando un terrenito por estos lados, yo quería decite que diay porqué no me les decías que yo les vendo esto. Mirá son trece

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manzanas y en cuanto al precio ahí nos ponemos de acuerdo. De por sí lo que yo necesito dejame es un pedazo de solar a la orilla de la calle y el terrenillo onde está la casa, con una manzana lo hago. - Hombre pos sí don Jeremías y a cómo vendería la manzana - Se las doy regaladísima, por ser usté vecino y por tratase de su familia, se las dejaría a medio millón, en total serían seis millones, con los que pagaría tres que le debo al banco y lo otro, pos pa' comémelo con la vieja, idiay pa' eso me he jodio toda la vida. Eso sí, Justinito de mi alma, sólo a tu familia o la de tu señora. Yo no quiero otras gentes aquí, las que tal vez ni conozco y no sé que leche van a dar... - Diay pos no suena tan mal, don Jeremías, hasta yo le compraría unas cuatro manzanas, va voy volao pa' San Fermín a avisales a aquellos. Estese no más, voy a recoger los chunches y salgo pa' allá, como quien se quita una avispa del culo - Está bien, allí los espero pa' que hablemos Aquello fue algarabía y antes de que apuntara el veroliz, la familia de ambos, estaba toda reunida, cada una de ellas había comprado cuatro manzanas y por supuesto, Justino se había quedado con otro tanto, en lo que consideraron una excelente negociación. Al fin, nuevamente estaban todos reunidos y el Nuevo Alumbre se hacía más grande y más productivo, porque ahora sí que las tierras de don Jeremías entrarían en total producción. Por ahora sembrarían caña, frijoles y maíz, posteriormente, era su intención, sembrarían algunas hortalizas, pero para ello deberían hacer un estudio de mercadeo. Hasta se atrevía a pensar Justino que ahora sí podría funcionar el modelo cooperativo, que había soñado en algún momento, pero para ello se debería dar un tiempo y analizar la eficiencia de la producción de sus vecino-familiares. Lo más importante, en todo caso, era que la familia estaba unida y gustosamente se reunían en los solares comunes a comentar sus nuevas vidas. Era frecuente encontrar a los hombres en el trapiche, lugar que se había convertido en el centro social de la comuna y ahí, se tomaban los acuerdos sobre los diferentes tópicos del acontecer familiar. La verdad es que, pensaban, les había ido mejor con la entrada de la compañía al Bajo, porque habían vendido muy bien vendidas sus parcelas y habían tenido la suerte de encontrar éstos terrenos, inclusive más cerca de San Miguel. Por ahora y con la ayuda divina, se dedicarían a sacarle sus frutos. ************** - Juepucha Justino, la puritica verdá es que éste hombre, sí que no tiene pelos en la lengua pa' deciles a los que gobiernan, las cosas . ¿ No ves lo que dice ahí en la estra ?- ¿ Pa' ver Flor ? - Con gran interés leyó Justino lo que el expresidente decía, "...líderes en fin, entrampados en un caudillismo publicitario que es la negación del liderazgo... " y continuaba arremetiendo contra la clase política y gobernante : "... El origen de la mayor debilidad de nuestra Nación es el profundo desencanto que experimenta el pueblo costarricense...", para concluir con la azotaina, decía más adelante en el periódico:

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"... la frecuente corrupción de los partidos políticos democráticos sólo tiene remedio en el saneamiento de esas organizaciones o en su sustitución por otras que no pueden ser sino nuevos partidos... " - Juemialma, ora sí que les dijo cuatro cosas, ¿ ves lo que te vía dicho y que él me vía comentado aquella vez, que iba a estar vigilante de lo que hicieran éstos condenaos; pos ve vos que la verdá es que está cumpliendo y yo que ya no le creiba. Bueno, por lo menos tenemos una voz de respeto que les diga las cosas como son, ya que a nosotros, los de piso e' tierra no nos oyen y lo que es pior, ve vos como cada día se inventan nuevas formas de robar y con el mayor descaro, ya no les importa que la gente se de cuenta. La pura verdá es que quien reina es el cinismo - Diay Justino, ¿ pero cuánto se jodió usté yendo a charlas y a cursos pa' aprender ese montón de cosas que sabe y bueno, pa' qué nos sirven si ni siquiera se nos escucha ? Vea que ya no quedan partidos pequeños y de traba, como cuando estaban los comunistas. A esos sí que les tenían miedo, pero como decía aquel señor que vino el otro día, la mayoría de sus líderes terminaron entregándose a los partidos grandes, pa' tener cuota de poder; con el cuento de la reciclada. - Callate Flor, que las paredes tienen oídos, pero la verdá es que tenés razón, ya el pueblo no tiene voces que le representen, quienes se ofrecen a su nombre, llegan a la Asamblea y después se les olvidan sus promesas, bueno, algunos han salido alguillo respondones, como ese muchacho, el hijo del doctor aquel que anduvo por aquí y que también jue diputado. Ese muchacho si me parece que es valiente, pero lo que es su compañero de partido, le salió güero, si hasta sólo lo dejó y se le entregó al partido de gobierno, pa' lo del aumento del impuesto el ventas. Por culpa de él es que pagamos más impuesto, yo cada vez que me lo cobran me acuerdo de ese señor...Sí, es cierto, ese jue el que se unió al partido de gobierno pa' clavanos ese cinco por ciento más y olvídate que lo bajan. ¡ Qué Dios lo perdone !, pero gracias a él, cada día nos arruinamos más. ¿ A cambio de qué se entriegan esos hombres y venden sus conciencias... ? - ¡ Ay Florcita, pareces nueva ! Los partidos políticos y los gobiernos tienen gentes que se dedican a estudiar a sus oponentes y les conocen sus debilidades y virtudes y es a través de ese conocimiento que aprenden como entrales a sus enemigos, los convencen y una vez que les toman la medida, los convierten en títeres suyos y endespués hacen con ellos lo que les da la gana - ¡ Qué tristeza de hombres ! , por eso Justino de mi alma, te prefiero pobre, pero entero y digno, que seas de una sola pieza, como decía papá, que nunca naide tenga que hablar de vos a tus espaldas, ni decir que vos te vendiste o entregaste tu palabra de hombre, a cambio de un favor. Por eso mi amor, soy la mujer más feliz del mundo, tus luchas son las mías y si el día de decidís , como lo has pensao, cerrar el portón y dedicanos a vivir de lo que da la tierra nada más y no complicanos con lo que pasa ahí ajuera, entenderé tu decisión y lo acompañaré, porque la pura verdá, como dice usté, tanta cochinada asquea y éste País cada día está pior...- ¡ Ay mi amor !, no se trata d'eso, no es de encerranos que se trata, pero sí una cosa es importante, debemos estar preparaos pa' cosas más feas, desde hace días vienen con el cuento de la deuda interna y con el nos van a obligar a pagar más impuestos, entre otras cosas, yo no sé, pero me parece que éste pueblo ya no va a aguantar más carga y si la aguanta es porque de verdá está bien domesticao. Pero de verdá Flor, del encierro del que hablo, es del que no debemos gastar más de lo que necesitamos, tratar de vivir a lo máximo, de lo que saquemos del pedacillo y los cinquitos que haganos por la venta del dulce y las otras cosas, los ahorremos pa'las emergencias y pa'l estudio de los güilas. Eso es lo que nos queda, no hay di'otra Efectivamente, la Nación se desangraba por una deuda interna asfixiante y ya no producía ni lo

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necesario para atender el pago de sus intereses. La polémica estaba en el tapete y en diversos foros se discutía, sobre lo que más convenía para sanear la economía nacional. Aquella se había agigantado por la misma incapacidad de los gobernantes y por el desmedido gasto público, sobre todo en campañas de publicidad, favoritismos y demás mecanismos que se habían inventado a través de los años para ordeñar el erario público. La historia tenía que abrirnos algún día los ojos, para despertarnos del letargo a que nos habían sometido, para ubicarnos en la realidad y así poder comprender como, con la complacencia de los partidos políticos, gobernantes, funcionarios y servidores, algunos pudieron hacer los más increíbles negocios a la sombra de la impunidad y con el contubernio de algunos de ellos. Los tribunales ya estaban llenos de expedientes contra funcionarios y particulares que habían usufructuado los dineros nacionales y sólo restaba esperar, si ellos también, no estaban copados por esas fuerzas del mal, para que sus resoluciones fueran lo contundentes y severas que el pueblo esperaba. La verdad es que aún faltaba gente por requerir, había duda y solo el tiempo contestaría las inquietudes que se hacían. Justino había hecho del Nuevo Alumbre, lo que siempre había soñado, una cooperativa sin la asesoría ni el amparo del " señor de las cooperativas", una cooperativa de hecho, pero formada con la plena convicción de sus asociados, de que en su indisoluble fuerza moral, ética y espiritual, radicaría su indestructibilidad y que por lo tanto, lo que en su entorno pasaba, si bien es cierto les afectaba en algo, porque desgraciadamente eran ciudadanos inmersos en ésta tierra y obviamente no podían sustraerse de los " mecanismos de ajuste " que aplicaban las autoridades, también era cierto que estaban muy alerta, con lo que pasaba y comprendían gracias a las tertulias del trapiche, porqué y cual era el problema. El problema que ahora asfixiaba a la Nación, era una bola de nieve que se había convertido en alud, gracias a la ineficacia de las pasadas administraciones , que ante el cierre de las regalías norteamericanas, no habían sido capaces de reactivar la economía nacional, ni lograr que quienes tenían que pagar impuestos lo hicieran y por el contrario, lo único que habían reactivado eran las máquinas para confeccionar títulos de la deuda interna, los que nos tenían en coma. Esta era la Patria que estaban heredando a sus hijos y que habían recibido de los Mora y Cañas. Estaban abandonando a su suerte, a un territorio con todo y su gente, demostrando su incapacidad de estadistas y su gran capacidad y olfato para negociar con aquellos. La enseñanza había sido fructífera, los grandes capitales de un país, que fue desangrado con el cuento de una revolución, allá por principio de siglo, estaban volviendo sus ojos hacia éste País, gracias al coqueteo de políticos de diferentes colores. Ya en su país estaban muy "choteados" y al acercarse su derrota política, el mejor lugar para trasladar sus inversiones era la Patria de Justino El tiempo había sido el fiel testigo de lo que sucedía en un país llamado Costa Rica, que bien podría tener el nombre de cualquiera otro latinoamericano, porque la situación guardaba mucha similitud con lo que pasaba en otros, los que a diferencia de éste, sí juzgaban y sentenciaban a sus gobernantes corruptos. Aquí tristemente no . El viento diciembrino arrastraba por el camino polvoriento a San Miguel una hoja de periódico, donde en letras muy negras, como de luto, decía: " Medidas de apremio: Venta de la zona marítimo-terrestre, venta de telecomunicaciones, venta de bancos, venta de... " Que , ¿ qué hay del Alumbre ? El Alumbre es hoy una plantación de caña y de hombres.

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EL NUEVO ALUMBRE ( Adición de la II Edición) La escogencia de los gobernantes manejada por los medios de comunicación, hacía que los costarricenses participaran menos en los procesos, eran ingentes los esfuerzos que hacían los dirigentes para lograr cumplir las cuotas asignadas para llenar de fiscales las casi siete mil mesas que se ubicaban en todo el territorio nacional y calculadoramente en la Asamblea Legislativa no se aprobaban los reformas al Código Electoral para, entre otras cosas, autorizar la emisión del voto electrónico, pero sí se aprobaban leyes como la de Concesión de Obra Pública, a efecto de entregar la construcción, mantenimiento y explotación de las obras básicas a la empresa privada. Cada vez el pueblo costarricense era más espectador extraño en su país y cada vez más, el cinismo campeaba en la clase política gobernante, quienes se apropiaban de los ríos y de la construcción de plantas de generación eléctrica amparados a una ley que se los permitía y los que era más bochornoso, obligaba al Instituto Costarricense de Electricidad a comprarles la energía producida en sus plantas, negocio redondo, los bancos siempre al servicio de sus intereses, no dudaban en otorgar los préstamos para su construcción porque era un negocio seguro. Ministros, familiares de políticos, empresarios y hasta el máximo jerarca, entraban en el negocio salvándose de la ruina y salvando a sus quebradas empresas, gracias a su inventiva. A no dudarlo, ellos se recetaban la legislación a la medida de sus intereses y la de sus titiriteros. Las leyes sociales, creadas para la protección de las clases menos privilegiadas se prestaban para que los miembros y funcionarios de segunda, en apariencia solo ellos, le metieran mano a los recursos por ellas generados y con el silencio cómplice de las autoridades políticas superiores, se robaran lo destinado a los pobres, ¡qué gran pecado!, el más grave de todos, robarse el dinero para los programas de atención de los niños marginados y en riesgo social y de sus familias, eso no tendría perdón en ninguna parte del mundo, salvo en la patria de Justino, las viviendas dignas con las que soñaban muchos, irían a parar a los bolsillos de los segundones y de las cuentas de otros en el exterior, tanto así que con el mayor descaro abandonaban el país cuando se asomaba el brazo de la ley y se convertían en inalcanzables para el anquilosado sistema judicial nuestro. Los tratados de extradición lo eran para los nacionales de otros países pero no había reciprocidad para con los delincuentes nuestros. Fue así como desaparecieron los fondos de Asignaciones Familiares y salvo unos cuantos que no pudieron escaparse porque creían estar protegidos por la impunidad, los gargantúas gozan de esos capitales en ciudades de Norteamérica y Europa.

Unos años después... - Bueno Justino, ahora con los güilas más cerca del centro y con la bendita posibilidad de estudiar que tienen, la pura verdad es que ya ni les gusta estar en el Nuevo Alumbre, diay porque los muchachos son así, les gusta más lo del centro, se hacen de sus amigos y cada vez más se alejan de uno, digo yo, no sé, ve que solo vienen a dormir, porque las tareas y todo lo del colegio lo hacen en casa de compañeros, en eso que llaman centros - Así es la vida mujer, mientras están carajillos son de uno, los podemos manejar, pero conforme se van haciendo grandecillos, ¡qué va! se le salen del canasto y no hay manera de tenerlos a raya, pero bueno Flor, vale que es por estudio, ve vos que notas sacan y qué aplicados son, así no me molesta que

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ni se asomen en el día por aquí, de por sí en materias de colegio nosotros somos más atrasados que un tren de leña, pensemos más bien en más adelante, cuando salgan del colegio y se les ocurra que quieren ir a la universidad, ahí sí que hay que ponerle mente, porque si acaso vendrán los fines de semana y eso cuando mucho, porque ya les vendrán las estudiadas y van a preferir quedarse con compañeros, así que andá preparándote para cuando te quede el nido vacío, eso pasa, acordate de Felicillo - Respondía un reposado Justino, ambos sentados en la batea de revolver la miel y con la vista hacia la fila que desembocaba en el antiguo Alumbre. Una bandada de pericos hacía de las suyas en los árboles de uruca y llama del bosque y una multicolor sinfonía se levantaba al Creador de los árboles ya en producción de mango, naranja, jocote, limones y cuanto se pudiera uno imaginar y que servían de cerca a las diferentes parcelas en que se había dividido la finca comprada y que reunía a la parentela de la pareja. - A propósito de tren, mirá Justino eso de cerrar el ferrocarril si que fue una yegüada, diay no ves que se quedaron un montón de gentes sin trabajo y aunque les pagaron las prestaciones que llaman, eso se lo comen en una sentada y donde van a encontrar trabajo, si aquí no hay más trenes, ¡qué ideas! si es que dejaba pérdidas, era seguro porque era mal administrado ¿ no crees vos?- Fijate Flor que ahorita venía yo hablando de eso con doña Carmen tu madrina y con Campos el del bus, a raíz de esos trenes de turismo que están poniendo los fines de semana y les decía que eso, como todo, fue un negocio de alguien, me imagino que los dueños de las flotas de camiones de transporte y los socios de las empresas constructoras de carreteras son los que se frotan las manos y harán el gran negocio en el futuro, porque sin ferrocarril, toda la carga será transportada por carretera y estas con los inviernos que se dan y con lo mal construidas que están no soportarán el trajín y por supuesto deberán ser reparadas porque el país no puede quedarse sin ellas, así que ponete a pensar, negocio redondo. Así que Flor como te lo he dicho siempre y se lo digo a medio mundo, estos carajos tienen una garganta tan pero tan profunda que mientras vos crees que te están ayudando al construir o arreglarte un camino, la maquinita de hacer buenos negocios y plata de ellos anda por otro lado. Me pregunto, ¿quiénes serán los socios de esas empresas, no los que aparecen en el registro, sino los verdaderos? Saber la respuesta nos helaría la sangre m’hija. Acuérdate lo que nos contó Felicillo el otro día con lo del ferrocarril del sur, que un pariente de políticos estuvo en un negocio medio chueco y vendió parte de eso a unas gentes de Panamá, ¿Te acuerdas? Así que no nos asustemos si ese señor de ahora manda a cerrar el ferrocarril, algo debe andar por ahí y ya vas a ver que algún día les sale la jarana en la cara. Si es que son unos traga aldabas. -¡Ay Justino no te digo, no se lo roban a uno por no mantenerlo, así qué país va a salir adelante! - Diciendo esto Flor se metió las manos en la bolsa del delantal, como protegiendo algo y se fue a la cocina, unos elotes recién cosechados les esperaban para la cena. ************** Así discurría la vida en el Nuevo Alumbre, Justino y su familia no tenían apuros económicos, acostumbrados a vivir frugalmente y con tan buenas tierras, lo cosechado les permitía vivir decorosamente y vender parte de ello, bajo el mismo sistema, directamente al consumidor en la feria del agricultor que se llevaba a cabo los sábados en San Miguel. Justino no iba más allá, con ello era más que suficiente para los gastos y para ahorrar una parte de ello en un fondo que habían establecido para tratar, hasta donde les fuera posible, de brindarles una buena educación superior a sus hijos. Un sábado, mientras Justino y Pedro terminaban de vender los elotes, limones, naranjas, mandarinas y otros productos que habían llevado a “la feria” se sorprendieron cuando los encargados de asignar los campos para el sábado siguiente y que eran miembros del Comité Agrícola Cantonal, le asignaban espacios a una personas que no eran agricultores conocidos de San Miguel y que habían aparecido ese día, al parecer desde San José. Como siempre Justino no se pudo aguantar hacer un justo reclamo y así se los dijo.

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- Mirá José, hoy hemos aguantado a esas personas por cortesía y porque desde ayer se instalaron ahí, pero ya que les asignes campos para el otro sábado, manda güevo, porque nadie está sabiendo si de verdad son agricultores y para serte sincero, más me parecen intermediarios y si van a llenar la feria de esas gentes nos joden a los que somos del pueblo y nos jodemos la chaqueta produciendo para traer algo aquí. Demuéstrame que son agricultores y de qué lado vienen y solo así vamos a aguantar carga, sino vamos a reclamar hasta que se vayan, ya basta de que los intermediarios sean los que fijan precios y se llevan las ganancias de los agricultores y te lo digo porque ahí los vi comprándole a una gente los saldos a precios de hambre, para llevárselos para Zapote mañana y eso quiere decir que andan de feria en feria haciendo negocio, ¿ o nó? - ¡Qué raro usted Justino reclamando! No hay que ser egoístas, esto da para todos y nada sacas con estar de necio, estos señores son de San José y vienen recomendados por el diputado que es amigo del alcalde y vos sabés como es esto, todo es a puras patas, cálmate y deja que ellos hagan el negocito también, a lo mejor te compran a vos los saldillos y te salvás, porque no tenés que llevártelos para la casa y para que veas como soy yo, te voy a dar aquel campito que todo mundo se pelea y te lo mantengo tres sábados, vos sabés que es el mejor lugar para vender y al mediodía ya vas para la finca - Mire José, parece que usted no me conoce, ¿qué, es que ya no recuerda que desde que era síndico del distrito nos conocemos? , aceptarte esa explicación y decirte que sí, sería como meterme la lengua entre ya sabes donde y más delante de Pedro, ¿qué ejemplo le daría, si toda la vida he luchado contra esas cochinadas que me estás proponiendo? Por otra parte, con eso que usted me está diciendo, está reconociendo que sí son intermediarios y que seguro más adelante no van a ser solo ellos, sino que vendrán más que se dedicarán a comprarnos a los precios que sabemos para llevárselo todo para San José y al carajo el espíritu que motivó la creación de las ferias del agricultor, que era, seguro que no sabe usted o ya se le olvidó muy convenientemente, que era el darle la posibilidad a la gente de que comprara a buenos precios los productos frescos y para que el agricultor recibiera un trato justo por su producción. Pero seguro que usted no se acuerda de eso y yo voy a tratar de que lo recuerde, voy a ir a hablar con los otros agricultores, con los que son de verdad, ya vas a ver que no nos dejamos Diciendo lo anterior, encomendó a Pedro para que terminara de desarmar el puesto y se dispuso a emprender una nueva lucha por la justicia y la dignidad. Al parecer su vida siempre estaría inmersa en este tipo de situaciones, porque era una realidad, las ferias del agricultor se habían convertido en eso, en un negocio para los intermediarios que como zopilotes caían sobre las desgracias de los pequeños agricultores y a precios irrisorios se quedaban con el fruto de su esfuerzo, para hacer ellos el gran negocio en ferias más grandes y de gentes de clase media para arriba. ***************** ****************** - Mamulón, decime una cosa, cuando estaban ustedes en el norte y antes de que los desalojaran, verdad que se habían corrido los mojones de la frontera? Es que a veces como que se nos olvidan las cosas y yo creo que fue Sapa o vos los que me contaron que habían visto a gente del gobierno de aquí y al de Nicaragua haciendo este trabajito y que despuecito de eso ya empezaron a joderlos a ustedes los nicas porque estaban en tierras de ellos y ahora que veo ese diputado de San Carlos presentando ese proyecto para descongelar o sacar del Estado o lo que es lo mismo del dominio de todos los costarricenses esa franja de los dos kilómetros a lo largo de nuestras fronteras norte y sur, me parece sospechoso y atando cabos, caigo en que estos cabrones todo lo montan. Saber uno cuantas tierras tienen palabreadas ahí, porque ve vos que ese mismo señor ha sido acusado por usar recursos del MOPT para construir carreteras en fincas privadas de esa zona - Bueno seguro que fue Sapa que siempre estaba viniendo aquí donde vos, pero es cierto, cuando él se vino a decirte que ya no tenías posibilidá de tener una parcela en esa zona, yo me fui con otra gente al lado de Los Chiles pa’ ver lo suampos que nos ofrecían y bueno vos sabés el resto de la historia, nos hemos salvado de que nos echen de ahí también porque Dios es muy grande, aparte de que

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como no tenemos títulos de propiedad porque son concesiones, nadie nos da crédito, así que tenemos que trabajar esos pedacillos con las uñas y apenitas pa’ comer. Hay mucha gente que está vendiendo esos derechos, claro de a callao, porque no se pueden hacer traspasos, porque están ostinaos de luchala, yo seguro que también se lo vendo a una gente de esa zona y me vengo a trabajar aquí, aunque sea donde vos, diay si estás pagando peones de afuera, a mí que me conocés me das trabajo, ¿o no? -Por supuesto Mamulón, es más ahí está esa casilla a la par del trapiche, yo la había arreglado para vivir ahí mientras montaba esta, está de medio ver y diay, yo creo que ahí cabés con tu familia. - No sabés la alegría tan grande que me das, porque no creas, estaba pensando hacer las de Sapa y venime pa’ la ciudá, pero es que a mí si me da miedo, por los muchachos, que me vayan a coger un mal camino, ahora el lunes que me regrese le llevo la buena noticia a mi mujer, vas a ver lo contenta que se va a poner. ********

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La situación del pequeño agricultor, máxime tan ayuno de oportunidades para bien poner a producir la tierra, era la misma de hace unos años, cero incentivos, cero créditos, cero trato justo para sus cosechas y con las disposiciones de la Organización Mundial de Comercio y sus dueños, cada vez era más difícil que pudieran sobrevivir. Las grandes empresas importadoras preferían importar sus granos de mercados más baratos y en donde sus agricultores sí estaba subsidiados, que comprar la cosecha nacional, producida a sangre, sudor, lágrimas y privaciones. Ello era así a pesar de esfuerzos temporales de los gobiernos de turno de gravar con aranceles fuertes esas importaciones, los que se emitían cuando aquellos habían hecho las compras y solo servían para crear el espejismo de que el Estado protegía al agricultor nacional, porque de antemano se hacía la excepción de que las compras hechas con anterioridad previa presentación de documentos idóneos, estarían exentas y todos sabemos que los empresarios en eso son muy duchos y actúan siempre mancomunados y protegidos. Era la pelea del burro amarrado contra tigre suelto. La sociedad costarricense miraba como cada vez más el que consideraban su país, su tierra, era invadida por gentes ya no solo del norte, sino del sur y que las restricciones migratorias eran adoptadas únicamente cuando ya eran miles los ciudadanos de esos países que habían ingresado legal o ilegalmente y lo que era más triste, se daban cuenta de que había un acuerdo para que así fuera y tener mano de obra especializada y barata que desplazaba la suya, aparte de ello, apropiándose de la seguridad social a la que había contribuido por generaciones con la esperanza de que ella se convirtiera en su oportunidad de una salud y vejez más digna. Se estaban convirtiendo en arrimados en su propio país, ya que las camas de los hospitales eran ocupadas por un gran porcentaje de nacionales de esos países, quienes en muy raras oportunidades cotizaban para el sistema. El espíritu solidario y de asilo de la patria de Justino, le había llevado a cavar su propia tumba ya que en contubernio, las clases político-gobernantes y sus testaferros, presionaron para eliminar por inconstitucional el artículo 13 del Código de Trabajo que permitía solo un porcentaje de extranjeros en las empresas y ello le había abierto la posibilidad a los empresarios de contratar mano de obra más barata y con menos exigencias y garantías sociales. Los gobiernos se sucedían unos a otros y la tónica era la misma, los colores no representaban un cambio en la actitud de gobierno, no significaban un cambio en las políticas sociales, por el contrario, sus políticas eran dictadas desde afuera y no había vuelta de hoja, o se acataban las disposiciones de los organismos financieros internacionales o nos convertíamos en parias mundiales sin oportunidades de compra, venta o crédito, ello creaba cada vez más acentuado, un desconcierto en la sociedad civil. Venían nuevas elecciones y eran ingentes los esfuerzos de los partidos para que el abstencionismo, ese fantasma que les aterraba gracias a sus fracasos en el cumplimiento de sus promesas de campaña, no fuera mayor al de otras elecciones.

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- Papá ahora en la Universidad como que uno sí se siente grande, vieras que lindo el trato que le dan a uno en la U, qué dicha que escogí ir ahí porque la pura verdad es que es otra cosa a lo que me han contado que es en otros lados, es como te dijera, como más socialista... - ¡Al fin dijiste la palabra Florcita! Estaba esperando que la dijeras desde que me contaste que habías escogido ir a la UNA, yo nada te dije porque quería que te dieras cuenta por vos misma de la diferencia de la educación y de como la filosofía de Omar Dengo y la de sus creadores aún se mantiene viva en esa Universidad. Sí, es cierto, en uno de los cursos en que estuve yo me pude dar cuenta de la calidad y el compromiso de la mayoría de la gente que da clases ahí y no sabés lo contento que me puse cuando entraste en ella, ojalá que eso contribuya a crear de vos a una ciudadana comprometida con la defensa de la institucionalidad y de su Patria en general, bueno no tengo que decírtelo, yo se como piensas, pero te repito, ¡qué bueno que te gusta y qué bueno muchachitica por Dios que esa universidad aún no ha cambiado! Dijo un exaltado Justino - No, si fíjate que entre todas las cosas que nos dan, nos enseñan hasta primeros auxilios y un día de estos llegó un expositor a darnos una charla de como protegernos de los efectos de los gases lacrimógenos y de que están hechos y de los diferentes tipos que hay, por ahí apunté un remedio barato y cómodo para llevar a las manifestaciones, más tarde cuando venga se lo digo. - ¿ Será el de ácido acético o de vinagre de cocina? - Si papá, ese es uno, pero hay otro más cómodo y es más, un grupo de compañeros que llevan química se van a poner de acuerdo y van a fabricar uno que es muy barato y cómodo de llevar, ahí tengo los componentes, después te los doy, es muy fácil, si hasta con sal andrews se hace. Bueno ahora voy a ir al centro para ver a unos amigos, aquellos con los que hago las tertulias, es que les traigo un mensaje de unos compañeros de la U. Tenemos mucho que hacer y la otra semana hay manifestaciones. A propósito, dónde esta Pedro? - Como que lo oí que también iba para el centro, es que ahora en quinto ya no para en la casa, tiene tantos trabajos que hacer que apenas sale el pobre, pero bueno, vale que al igual que a vos, no le cuesta - Contestó su madre -¿A propósito Florcita, no vas comer algo antes de irte pa’l centro ? - ¡No qué va ! Se me hace muy tarde y tengo que venir volada a hacer unos trabajos, más tarde cuando vengo. ¿Qué hay rico ? - Le puedo hacer un bistec, hay sopa, macarrones y arroz y frijoles o un huevo, no sé, ahí usté verá, cuando viene se alista algo, porque seguro que voy a estar onde Marta para lo del ebais. - ¿Y qué, siempre van a ponerlo aquí ? -En esas estamos trabajando, pero es que cuesta tanto, vieras donde no hemos ido a hablar y a presionar para que lo instalen aquí, recogimos firmas y bueno, vos sabés la lucha que hay que dar aquí por conseguir los derechos, nos ha salvado que la empresa del Alumbre ha asegurado a casi todos los empleados y eso nos va a ayudar porque son bastantes y algunos ya se han traído a sus familias, ahí pasan en montones para dentro, pero ahí estamos en la lucha, es que era una ingratitud con esa gente, trabajan de sol a sol, quien sabe si con buenos sueldos y cuando se enfermaban los iban a tirar a emergencias de los hospitales para que los atendieran de caridad y después no pagaban los servicios y jamás decir que trabajaban para la compañía porque los echaban, bueno fíjate que a punta de mandar cartas a la caja y llamar por teléfono a los inspectores, vinieron, hicieron un estudio y los obligaron a meterse dentro de la ley, porque antes venían los inspectores y quien sabe que pasaba porque la cosa seguía igual, no fue hasta que fuimos aquel día a San José, que le pusieron atención a esa vaina. La cosa es que ahí estamos trabajando en lo de ese ebais, que diay nos va a servir a nosotros también. -A pues qué bueno, todo lo que sea adelanto para el pueblo es bueno.

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Tanto Justino como Flor miraban con sobrado orgullo a aquella hermosa muchacha de dieciocho años y que ya daba sus primeros pasos en la enseñanza universitaria, era un sacrificio económico y sentimental porque entre semana Florcita vivía en una residencia universitaria a la que había tenido acceso gracias a sus excelentes calificaciones en secundaria, se graduaría en unos años en ciencias forestales y su sueño era incorporarse a las fuerzas productivas del Nuevo Alumbre o de la patria, solo el tiempo lo diría. Los fines de semana se venía con el salveque de ropa sucia y a buscar a sus amigos y el cariño de sus padres y hermano. A no dudarlo, ella estaba impregnada del compromiso justicialista y socialista de sus padres y la experiencia recogida en el seno familiar, le servía para incorporase debidamente a la mejor universidad del país en cuanto a su sentido social. El año entrante Pedro le seguiría, su sueño era estudiar sociología o historia, siempre en las ciencias sociales, eran sus predilectas. Sus padres harían lo imposible para cumplir con sus sueños e ilusiones porque mantenían la fe en la patria nueva y de que todo tendría compostura, “algún día será de día, no es posible que los malos ganen siempre...” decía Justino El desamor que mostraban algunos, los mismos y sus testaferros, por esta tierra al pretender vender la soberanía y los servicios estratégicos al ponerlos al mejor postor, no era compartido por la mayoría de la ciudadanía la que calladamente seguía reuniéndose en las famosas tertulias impulsadas por lo menos en El Alumbre por Justino y amigos y ya llegaban noticias de que en el resto del país esa sana costumbre de reunirse a hablar sobre la problemática comunal y nacional se hacía cada vez más frecuente y como decía Otto, de la tertulia lo que sigue es la conspiración y bueno, por qué no ; si todo el pueblo era informado debidamente de los pasos del enemigo social y económico, para cumplir los objetivos de sus amos de convertirles en marionetas procesionarias a su servicio, transformando de paso a sus hijos e hijas en pasto de las desviaciones sexuales de quienes les manejaban o bien en peones baratos y drogados de sus sportbooks, sería un pueblo alerta, conocedor de la verdadera problemática y quizás con buena orientación y un liderazgo del que al momento se carecía, sería capaz de grandes transformaciones y de volver por los pasos de la república de paz y justicia socio-económica para todos, con la que soñaron Calderón, Mora, Sanabria y don Pepe, antes de que sus sueños se desvanecieran por la nueva clase de “yes man” y quienes les empujaban para ascender al poder y en representación de ya sabemos quienes, con la única excepción del gobierno de la dignidad entre 1978-1982. Ya sabía el pueblo gracias a las tertulias, que a la prensa había que escucharla , verla y leerla entre líneas y que a pesar de la veracidad que aparentaba tener cada noticia, siempre había un algo más que era el que había que comentar en las reuniones semanales y así, con la opinión general y sus contribuciones, hacían un resumen real de lo que se proponían con un proyecto de ley, una ley aprobada, un decreto ejecutivo o bien un programa que se impulsaba para “beneficio de las clases más vulnerables” como decían ellos. Se daban cuenta de que si les ofrecían algún incentivo, era porque detrás de este había un negocio millonario que estaban tapando con la oferta, sabían que los socios de las grandes empresas agroexportadoras eran las mismas figuras de gobierno o bien eran socios de estas o abogados de las mismas. Sabían que las grandes empresas de turismo al amparo de los beneficios de la ley de incentivos a la industria turística, habían surgido gracias a esas granjerías y al no tributo y que los únicos que efectivamente tributaban, eran las grandes mayorías, ellos succionaban el crédito y siempre alegaban pérdidas para no cancelar impuestos y si los pagaban, eran los mínimos. Todo eso se manejaba en las tertulias a nivel nacional, parte de otro tipo de instrucción que ya se proporcionaba y en la que estaban inmersos cientos de jóvenes que como Florcita impartían sus conocimientos en San Miguel y para sus amigos. En otros sitios, eran los jubilados los que se encargaban de comentar las noticias y contactar a los vecinos para que asistieran a las reuniones informativas y era notable la presencia de amas de casa que se sustraían un rato de sus múltiples tareas para charlar, opinar o bien proponer soluciones a los problemas pequeños o grandes de la comunidad y del país.

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DE LA TERTULIA A LA CONSPIRACIÓN - Es más te voy a decir una cosa Justino, ese señor que está de presidente, se va a ir sin pena ni gloria del poder, porque no es gran cosa lo que hizo, ve que desde el principio su idea fue privatizar y como el pueblo no lo dejó, hizo berrinche y se encerró y apostemos que nada más va a hacer, si es que se había comprometido con quien sabe quién para hacer eso que intentó hacer y como la venada le salió careta, de ahora en adelante lo que va a hacer es sostener la burra, buscar algunos negocillos para él y sus familiares y socios, como dicen por ahí, para cuando deje el poder y a lo mejor hasta se jala del país, como hizo el otro, que aceptó un puestecillo hasta sin sueldo en la ONU, pa’ irse pa’ Europa y dejar el mal recuerdo y a otros cuidando sus inversiones, como dijo aquel señor en el periódico el otro día. ¿De donde cogen pa’ vivir en Europa que es tan caro ? - Cierto Eric, pero cuidado vos vas a decir eso ahí en la comisaría donde trabajás, porque te cortan el rabo, ve que a pesar de que te entrenaste y el estado invirtió plata en tu preparación, un policía que piense así como vos no le sirve al sistema, si lo que quieren es máquinas de volar garrote y gases contra el pueblo y que no tengan ninguna relación sentimental con este, así son los expertos españoles y chilenos que los capacitan a ustedes ¿o nó ? -Pues sí, vieras que carajos más desamorizados, según nos contaron el otro día algunos compañeros que los han visto, salen en las noches a buscar lances ahí por el Parque Morazán y alrededores y hasta en carros del gobierno, pero con placa particular, de uso discrecional que llaman, y el entrenamiento se basa en eso, nos inculcan que en una manifestación, a quienes tenemos enfrente no son hermanos, parientes, vecinos ni ciudadanos, son enemigos del sistema que siempre busca la paz y armonía para todos y que esos que protestan son los culpables de que eso no se logre y que por lo tanto, debemos darles garrote y gases sin misericordia, son en pocas palabras, el enemigo. Claro, uno siempre busca no ser tan concho, pero antes de salir nos calientan la sangre con proclamas y de como no nos dejaremos y cuando vemos que a algún compañero, con razón o sin ella le zampan una pedrada nos hierve la sangre y de verdad que nos convertimos en bestias y entra más damos, más queremos dar, vieras qué raro se siente uno, después quedamos como atontados. Sin embargo no creas, la mayoría de la gente está desmoralizada, somos muy mal pagados y cuando hay emergencias, que ahora son a cada rato nos dejan cinco que llaman, o sea concentrados y pasan días de días y tenemos que salir mal dormidos, mal comidos y con la ropa interior de hasta cinco días de sucia, porque ni a la casa podemos ir a lavarnos o cambiarnos, es una desgracia, por eso cada vez que se puede, más de un compañero se pasa a la privada, donde pagan más y por jornadas menos duras. -Pero muchacho por Dios, cuántas veces te dijo tu mama que no te metieras en ese trabajo, pero vos de cabezón no hiciste caso y ahora andás llorando, si es sabido que a ustedes los preparan para cuidar los intereses de algunos, no de la mayoría, sino vean los barrios de gente acomodada, siempre tiene buena protección pública y privada, lo que son los barrios humildes, hasta que hierve la delincuencia y si te vi no me acuerdo - No creas, vos tenés mucha razón Marta, pero diay, ya está uno montado en la burra y no queda más que amansarla , es que vieran ustedes de las cosas que uno se entera ahí en ese güeso. Fíjense que la gente que se pasa a la privada una vez que terminan los entrenamientos no le paga nada al estado de lo que invirtió capacitándolo, porque ¿saben por qué ?, porque la mayoría de las empresas privadas de seguridad son de gente que está en el gobierno o ha estado en él, como funcionarios de alto rango,

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hasta ministros y entonces lo que hacen es que les dan de baja por violar el estatuto policial y parte sin novedad, inmediatamente pasan a trabajar para una empresa privada. Vieran ustedes el montón de gente que está en ellas, si hasta un pequeño ejército se podría formar y todos muy bien entrenados en uso de armas, control de motines, guerra antisubversiva, luchas urbanas, en fin en todo lo que se le ocurra a ustedes para mantener el estatus que llaman ellos. Yo apenas pueda me paso a una empresa privada de esas, es que se jode uno menos y hay más garantías. - Pero eso que nos contás, bueno, un paréntesis, hoy pensaba poner en el tapete el tema de la elección, pero eso que ha traído Eric hoy es bien serio y muy importante que lo comentemos porque diay, es una realidad nacional, los guardias civiles, vean ustedes, son hermanos, parientes o vecinos nuestros y a pesar de que les tocó una tarea nada bonita, siguen siéndolo y es una realidad que no podemos evadir. Gracias a Dios no tenemos ejército, bueno al menos con ese nombre en Costa Rica, porque ahí sí que sería serio para estas gentes y para nuestros jóvenes. Si bien es cierto cumplen una función de protección y de resguardo , en apariencia, de las vidas y haciendas en general, también es cierto que con el cuento de la profesionalización, los han preparado para agredir al pueblo y los que hoy detienen un delincuente y son aplaudidos por todos nosotros, mañana se convierten en una máquina de agresión para nuestros hijos en una manifestación o mitin, porque han sido preparados para ello, aparte de que con la moral baja, cansados, mal alimentados y vestidos y con períodos prologados sin ver a sus familias, pues es lógico que a la hora de reprimir a un grupo van a explotar todo su instinto agresivo. Escuchemos con atención a Eric y veamos de qué forma podemos hacer conciencia a través de él mismo el que bien podría convertirse en formador de sus compañeros. La propuesta es la siguiente : Justino sabía que ese tema era muy importante y es más, a través del Centro, trataría de que se pusiera en el temario a tratar en todas las tertulias controladas por este, que ya alcanzaban más de cinco mil en todo el país y por ello, lo que hoy se hablara en la tertulia del Nuevo Alumbre, sería grabado, copiado y enviado como tema a tratar, ya que la problemática de nuestra guardia civil era un secreto a voces y que por la necesidad que tenían aquellos hombres de un trabajo estable, preferían aguantar los vejámenes a que eran sometidos por elementos de otras nacionalidades con tal de recibir la capacitación que les permitiera pasar a un trabajo igualmente peligroso, pero más digno y en donde no tuviera como norte o premisa, la represión del pueblo. Así que de todo lo que se había hablado y de lo que se hablara, tomaría nota con precisión, máxime que Eric era un joven de la comunidad, graduado de bachiller en el colegio de San Miguel y en quien se podía confiar, porque desde siempre había estado integrado a las tertulias del Nuevo Alumbre, aparte de que su formación moral era a toda prueba. - Les decía que la propuesta es la siguiente, a ver qué les parece, de ahora en adelante cada vez que Eric esté libre y venga por acá, una parte de la tertulia va a ser para que comentemos como andan las cosas en la guardia civil, seguro estoy de que él abrirá muy bien los ojos y escuchará atentamente por que lado va el entrenamiento que les dan, porque por ahí va a ir el norte de la represión, aparte de eso, tratará de buscar amigos o compañeros en quien pueda confiar, para armar las tertulias a nivel de la policía, haciendo conciencia de que a las personas que les mandan reprimir, son sus hermanos, vecinos o ciudadanos y que el enemigo es otro. No le digo que no hagan caso a las órdenes porque los reprimidos podrían ser los pobres guardias, pero sí que estén conscientes de ello y que conversen sobre los problemas nacionales, a como lo hacemos aquí, yo creo que con uno se empieza y si Eric es una persona comprometida con la idea de la tertulia, pues en buena hora trabaja ahí, ya que nos servirá de enlace ante sus compañeros. De los documentos que tenemos por ahí, vamos a hacerles copia y se les van a dejar por ahí en las comisarías o unidades como les llaman ahora, no hay necesidad de entregarlas a mano, excepto cuando se sepa que se le entrega a alguien de confianza. Quizás vos Marta podrías hacerte un articulito sobre la problemática de la guardia civil en general, según lo que nos ha contado Eric y lo mandamos al Centro para la reproducción. Digo yo, para empezar, porque pienso que es importante que tengamos en cuenta que estos muchachos son parte nuestra y no los podemos ver como el enemigo, el enemigo es otro y todos sabemos cual es. ¿Qué les parece ? Y si hay en la policía otras personas que estén conscientes de lo que pasa hay que recomendarles que busquen otros compañeros

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en otras unidades y así cuando se den cuenta, estarán enlazados y bien informados, con otro tipo de temas que no necesariamente sean los policiales y represivos. Se le podría hasta dar capacitación en temas como por ejemplo, manejo del stress, antidepresivos y moral, aparte de los que manejamos aquí, así se les entra y cuando menos nos demos cuenta tendremos un contingente de buenas personas al servicio de los verdaderos intereses de la nación y no de unos pocos y de sus macabros intereses. - Puta que buena idea Justino la verdad es que sí, la guardia civil es parte nuestra, son vecinos, amigos, familiares y no debemos verlos como algo raro, así que en buena hora Eric está ahí y ya vas a ver que es cuestión de entrarles, a lo mejor están deseando que uno les converse y con toda confianza los ponga al tanto, ve vos los dos muchachos que vienen aquí a menudo, que buenas gentes que son y como tratan de ganáselo a uno y eso que aquí no hay maleantes, por dicha, pero diay siempre vienen en sus motos para ver si uno necesita algo, ahí en casa siempre se comen un gallito y se van tranquilos, son muy buenas personas, la verdad es esa, bueno a uno de ellos como que le gusta a Ana la de don Alberto, pero ese es otro cantar - Comentó Marco uno de los vecinos. ************

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Cuando se iniciaron las tertulias en El Nuevo Alumbre y en el trapiche de Justino, si acaso llegaban los familiares de Justino y Flor, posteriormente y dada la trascendencia de los temas que ahí se trataban y la vehemencia con que algunos defendían sus puntos de vista, poco a poco se fueron arrimando otros vecinos, algunos circunstancialmente porque iban a traer dulce o sobado o a tomar espumas al trapiche y se fueron interesando en los asuntos que ahí se hablaban, éstos invitaron a otros y había ocasiones de que se reunían hasta cincuenta personas a la tertulia del Nuevo Alumbre. A no dudarlo, la semilla estaba plantada, tal es así que Justino era constantemente invitado y llevado por el Centro ( lo que era la confederación antes) a otras tertulias para que las animara o bien diera inicio a ellas. Sin duda la idea de comentar la problemática nacional apagando el televisor, lo que no era nada novedoso, porque antes de 1960 los problemas se solucionaban así, hablando, transando, negociando, había calado hondo en el territorio nacional y se tenían noticias de tertulias que hacían propuestas muy serias a las autoridades de sus cantones y provincias y ya se vislumbraba un nuevo amanecer en un pueblo que había estado adormecido y mal informado muy convenientemente. En el intercambio de información previamente analizada y comprobada por personeros del Centro estaba la fuerza indisoluble de un pueblo que ya no más sería engañado, ya no más sería manipulado por los dueños de la información y ya no más sería comprado con falsas promesas. Se estaba formando un tipo de ciudadano más comprometido con su entorno, más presto a intervenir en defensa de los suyo que era lo de todos, se formaba un ciudadano más crítico de las personas a quienes nombraba para el manejo de la cosa pública y muy bien informado de los proyectos de ley que pudiera afectarle, para protestar vehementemente ante sus proponentes, quienes de por sí se cuidarían de ahora en adelante de sus actuaciones. Ahora sí la sociedad civil había recogido el guante y asumía el reto de salvar y reconstruir la Patria que otros habían usufructuado a través de los años. A no dudarlo, el velo que había nublado su visión había caído, muy despiertos y gracias a la buena información que recibían en las tertulias ya no se dejarían engañar más, las próximas elecciones serían cruciales para medir el efecto que había tenido una buena información en una sociedad que había estado ayuna de ella. Pa’ Verdades el Tiempo había dicho Justino un día y este era el momento para recoger esa cosecha. Vería si el tiempo y la reeducación habían logrado el milagro. En un salón del colegio de San Miguel, un grupo de unos veinte jóvenes ponían atención a una compañera y amiga quien les ilustraba sobre un tema que a todos interesaba. - Las mascarillas y los cobertores ofrecen poca protección contra los gases que lanza la policía, lo más conveniente sería usar las máscaras de gas de la policía, pero eso es imposible por lo costosas que son, así que los voy a ilustrar sobre cómo protegerse de los efectos del gas.

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Así Florcita compartía con sus amigos de la tertulia de jóvenes de San Miguel los conocimientos adquiridos en las conferencias a las que asistía, porque la juventud, al igual que el resto de la población se sentía comprometida con su nación y ya no los tomarían dormidos, se estaban comprometiendo aún más para la defensa de la dignidad y en esa lucha deberían saber como contrarrestar las tácticas de represión que podría usar el gobierno para desinflar las protestas que podrían darse si fallaban los medios convencionales para convencer a las autoridades de hacer un gobierno para las mayorías- … Les decía que es importante compañeros que estemos prevenidos porque no necesariamente debemos salir a las calles a protestar por todo, sin antes agotar los medios para lograr acuerdos que beneficien a la ciudadanía en general, como lo son el dialogo, las solicitudes a las diferentes instancias y el apoyo a otras iniciativas, como firmas, presión, etcétera, así que sin embargo, es bueno saber como contrarrestar por ejemplo los efectos de los gases. Importante es si se tienen y para que no le afecten a uno directamente, sobre todos los gases que se disparan directamente a la cara, usar unos anteojos de esos que se usan para natación o una mascarilla para ojos, aparte de eso se puede preparar un neutralizador muy fácil de hacer, este se hace con agua con un 5% de bicarbonato de sodio o bien con la mitad de antiácido, (Sal Andrews o Alka Seltzer, por ejemplo) en suspensión con agua. Otro método, aunque menos efectivo para prevenir los síntomas, es reunir varios pañuelos o trapos, empaparlos en vinagre corriente (ácido acético) y colocarlos dentro de una bolsa de plástico. Si les disparan una bomba lacrimógena, colóquese el pañuelo sobre la nariz y respire a través de el. No se preocupen por sus ojos, ya que con el lagrimeo elimina los residuos químicos. Algo muy importante, para los que los usan, no vayan a manifestaciones con lentes de contacto ya que estos prolongan el tiempo de acción de los gases y se aumenta el riesgo de daños en la cornea. ¡Ah, otra cosa! No se toquen los ojos ni la piel y en caso de exposición, manténganse tranquilos, respiren normalmente a través del pañuelo y traten de no tomar bocanadas de aire. Además, caminen contra viento y apenas puedan dense un baño con agua fría y sin restregarse. Ese líquido se puede llevar a las manifestaciones en botellitas plásticas, personales, porque es muy difícil en una manifestación ponerse a empapar trapos a todos los compañeros que necesiten del neutralizador, así que si cada cual lleva desde el inicio su propia botellita de esto, es mejor. Claro, les repito, no es aconsejable salir a protestar por todo, se debe ser muy cauto con eso. La protesta, la manifestación popular, únicamente debe darse cuando se han agotado todas las vías de diálogo o concertación, porque muy mal haríamos si indisciplinadamente nos lanzamos a la calle por todo lo que no nos guste, sin antes estudiarlo y agotar las vías conciliatorias. Estos consejos y otros que les voy más adelante a dar son para en el caso de que debamos marchar en protesta, porque se ha dado en el pasado de que la gente sale muy mal preparada y terminan en desbandada por el efecto de los gases y la tal protesta no dura ni diez minutos. Así que después les traigo más consejos. Ahora y para dejar de hablar solo de cosas feas tal vez Filiberto nos podría leer unos poemas que trae por ahí y que son creación de él, vean ustedes que hasta poetas tenemos aquí y vale la pena que los escuchemos con respeto y admiración, porque las manifestaciones artísticas nos acercan más al Creador. Escuchemos…-

- Gracias Flor, bueno, lo que les voy a leer es parte de un poemario que estoy haciendo a ver si

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algún día lo publico, pongan atención porque los hago con mucho sentimiento: Este lo he llamado Elucubrando…

Comparto y admiro la belleza y el inmenso poder creador del único y Supremo Hacedor me congratulo por ser parte de ello y testigo fiel y de comentarlo se me eriza la piel Toda esa mención al Creador para contarle al mundo que en el corazón hay felicidad y que con mucho fervor debo declarar que el mundo es único e indivisible y que es con amor que el mismo mantiene esa unidad que debemos cuidar; La frescura de una sonrisa amiga la paz de una mano cordial el placer que una buena charla abriga es panacea para el alma mortal; Un café aromático, puro e informal eleva al espíritu al plano extrasensorial y lo desprende de su uniforme carnal; ¡Feliz día mundo, feliz día todo! hoy las musas en la aurora invernal se revuelcan de gozo en el etéreo todo y anuncian de la tristeza el final; ¡Feliz día a ti musa cielo! ¡Feliz día a ti mujer que quiero! ¡Feliz siempre alma que anhelo! ¡Feliz día ninfa del bosque mundano! Hoy estoy alegre, hoy el mundo es flores, existen las musas y eso existencialmente es bueno, porque buena ha sido la creación desde sus albores ¡Salud creación, Salud mujer parte del paraíso - cielo - ¡Qué belleza! Dijeron todos al unísono y animaron a su poeta para que declamara otra de sus creaciones. -

Este otro es uno de mis preferidos, se llama Quisiera y dice así: Quisiera echar a rodar y caminar por los caminos de los godos allá por la milenaria Europa, quisiera que el sol se ocultara en sombras y en esa eterna noche amarte hasta el invierno de nuestras vidas, quisiera muchas cosas, entre ellas, despertar y encontrarte a mi lado y con el aliento del sueño aún, decirte que la vida vale la pena y aún más si la frescura de un amor le llena;

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Quisiera echar a rodar por los caminos de los zulúes en la agotada Africa, quisiera que el sol dejara de abrazarles y en esa eterna noche amarte hasta el ocaso de nuestras vidas, quisiera muchas cosas, entre ellas, que el hambre desapareciera de la tierra y que con amor todos tuvieran alimento, llevarles el mensaje de que la vida es bella y que con amor todo volverá a ser como antes; Quisiera echar a rodar por los caminos de los mongoles en las estepas asiáticas, quisiera que el sol dejara de deslumbrarles y en ese eterno eclipse amarte hasta la próxima primavera, quisiera muchas cosas, entre ellas que la humanidad se hiciera tolerante y que todos tomados de la mano y en un solo coro cantáramos al amor. Quisiera... Todos aplaudieron a Filiberto, realmente era emocionante poder encontrar un grupo de jóvenes de nuestra patria reunidos para tocar temas trascendentales de la vida nacional, recibir consejos importantes, hablar de nutrición, modas, el peligro de las drogas en el adolescente y hasta sacar el rato para escuchar las creaciones de jóvenes poetas. A no dudarlo, la patria de Justino se remozaba gracias a la conversación franca, serena y abierta. Cada cual exponía los temas de su interés y escuchaba con atención y respeto los de los demás. Estaban aprendiendo a escuchar, discutir, discernir y a manifestar sus pensamientos con toda confianza, más adelante no tendrían pena, ni impedimento alguno para manifestar sus posiciones ante autoridades, gobernantes, políticos u otras personas. Todos estaban mejorando en la forma de hablar, exponer y hasta escribir, gracias al aporte de las tertulias. Nuestro pueblo era muy inteligente, pero reservado, prefirió durante generaciones dejar hacer, dejar pasar, para que no se le tildara de mal costarricense, para que no se dijera que sus actuaciones no rimaban con el ser costarricense y para no sentirse ajeno a la “tacita de plata” o la “Suiza Centroamericana” como se le llamaba muy convenientemente a Costa Rica. Luego mientras disfrutaban un refrigerio, otros temas fueron tocados más informalmente y así al caer la noche, cada cual se dirigió a sus hogares con el sabor del deber cumplido para con ellos y la patria. Repartirían la semilla de los que habían aprendido en la tertulia de jóvenes entre sus compañeros de estudios y sus familiares. ************** - ¿Cómo te fue anoche m’ hija ? Ahí te oí cuando regresaste. ¿Quién te trajo ?-Si papi, llegué tardillo , eran como las diez, la salvada es que me trajo Filiberto en el carro de su papá, es que se ofreció y no hallé como decirle que no, bueno a varios nos tiró en la casa, no solo a mí, para que no piense que es un noviecillo. Vieras que buena gente es y que lindo que escribe. Podrían invitarlo un día aquí para que les lea unos poemas de los que ha hecho - Claro, ¿por qué no ? Siempre te he dicho que es bonito poder uno escuchar a los autores de propia voz leer o cantar sus creaciones, es más es un orgullo, quien sabe si el día de mañana se convierte en un Neruda o en un Debravo para hablar de alguien de aquí, en fin, vaya uno a saber y ustedes saben el orgullo que sería para uno decir que escuchó a Jorge Debravo leer a viva voz uno de sus poemas. ¡Ah ! Y por lo otro de que si pienso que si es un noviecillo, sépalo usted mi amor que le

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tengo una absoluta confianza y si el día de mañana usted se enyunta con alguien, sabré que es una decisión bien meditada y que usted es una muchacha muy madura para su edad y que sabrá cuidarse . De eso tengo seguridad A decir esto , Justino le estampó un beso en la frente a su hija y ésta le respondió con un abrazo que solo se da a las personas que realmente se quiere y admira. - Papá, no sabes cuanto te amo y admiro y si volviera a nacer, pediría a Dios que me depare a unos padres tan maravillosos como ustedes dos. - Gracias m’hija, ese amor es recíproco y bueno, tengo que alistar viaje para mañana, tengo que ir a la Asamblea para hablar con unos diputados y sus asesores sobre el proyecto aquel que impulsa el Centro de la ley de protección de los cerros de toda esta zona, es que si no el día de mañana les va a entrar las ganas de construir , como hicieron al otro lado y lo que dejan es un peladero y con el cuento de los condominios ecológicos que nadie les cree, destrozan toda la vegetación primaria para sembrar árboles ornamentales y zacate y aquí hay que cuidar los mantos acuíferos y las nacientes que dan agua a mucha gente, lo que a veces no les importa a los urbanizadores. Se acuerdan ustedes aquel decreto que emitieron para permitir la construcción al borde de los cerros y en zonas protegidas, bueno, eso es un ejemplo de lo que son capaces, se ponen de acuerdo con los grandes constructores, emiten el decreto a cambio de uno qué sabe, aquellos se apresuran y piden los permisos correspondientes amparados a esa normativa y cuando hay presión de los ambientalistas lo derogan, pero ya el daño está hecho, porque quienes consiguieron los permisos amparados a el, ya no se los pueden quitar. Así que mejor andemos adelante. Por ello es que impulsamos la creación del Parque. Y qué, nos vamos juntos, a qué hora salís vos, yo me voy muy temprano, porque tengo que regresarme mañana mismo - Diay a la hora que usted se vaya, así me paga el pase. Es que tengo clase a la una de la tarde.. - Bueno, así comentamos lo de la tertulia de jóvenes y cómo te va con eso, ¡ah! otra cosa, deberíamos pasar al banco para que saqués la tarjeta de débito, así te deposito cuando voy a San Miguel, pero vea que tiene que administrar bien los cinquitos. - ¡Ay papá! Ni que fuera una chiquilla que me voy a ir a gastar la plata en confites, si vieras como me rinde lo que me da y hasta le presto a compañeros de la residencia. - No si por eso digo, es mejor que tengas la tarjeta y así no tenés que andar plata en efectivo, cada vez que necesités algo pagas con ella o vas al cajero, ahí cerca de la U hay uno y en cualquier lado te la reciben, además es más seguro. Yo sé que vos administrás bien la platilla, pero me parece que es mejor. Vas a ver cuando pasemos lo rápido que es hacer el trámite. - Está bien papá. Voy a ir a la plaza a preguntarle a Pedro una cosa. ***************** - ¡Ay Flor! Estos muchachos son cada vez más independientes, ¿sería eso lo que queríamos? Y yo que los sigo viendo como chiquillos. - Así es la vida Justino, ellos no nos pertenecen, Dios nos los presta, como quien le presta a un escultor un pedazo de madera o barro, y es gracias a su talento que sale de eso una obra de arte, yo creo sin ser rajona, que nosotros hemos hecho un buen trabajo con nuestros hijos y que lo que hagan el día de mañana estará pintado con los colores que nosotros les hemos heredado. Por eso es que me siento tan, pero tan satisfecha de verlos crecer y ver como se integran de bien a los grupos comunales y

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a sus estudios. Ya vas ver el día de mañana como Florcita y Pedrito serán dignos representantes del Nuevo Alumbre en la nueva patria y de cómo los que siempre se han aprovechado de nosotros y de nuestras congojas, van a tener que andar con pies de plomo con estos muchachos y los de su generación, porque mientras sigan por ese camino y asistiendo a las tertulias a informarse de la realidad de este país y siempre que tengan claro el rumbo que deben darle ellos y nosotros en lo que podamos ayudarles, esta cosa sí tiene compostura, ya verás… - Espero que sí Flor, que no hayamos arado en el desierto y que las desveladas que nos hemos dado sirvan para algo, porque si no que triste sería verlos trabajando de peones o en esas empresas de apuestas o prostituyéndose para satisfacer a los corruptos amos de los vicios. Espero que los demás grupos del país, en los que hay unos muy buenos, estén plenamente conscientes de la realidad nacional y ahora que se acercan las elecciones, sepan muy bien valorar el poder que tiene este dedo y que si lo conectan con la testa y no con el hígado, mucho puede empezar a cambiar desde ahora. Mañana cuando hable con los diputados de esa Comisión Plena del asunto de aquí, voy a tocarles alguillo de esto, la verdad es que ellos deben legislar en pro de la protección de nuestros jóvenes. Ahí te cuento como me va. - Ya vas a ver que no, te lo digo con sentimiento y alma de mujer, uno sabe cuando se concibe y se va a parir algo bueno y esto por lo que nosotros y todos los demás a lo largo y ancho de esta noble patria hemos trabajado, es algo bueno y sé que saldrá de ello solo bienestar para las mayorías. Aparte de eso Justino, nos queda por lo menos a vos y a mí una gran ganancia, nuestros hijos, nuestra dignidad y hasta… me da risa decirlo, y hasta hemos aprendido a hablar como hablan los señores de la ciudad. Vos no sabés como yo admiraba a la mamá de Felicillo por lo lindo que hablaba y ve vos, a fuerza de poner uno atención y corregirse ya casi hablamos igual, bueno a veces las metemos pero diay, no se puede pedir todo de un solo tiro. - ¡Oh Flor, qué salidas tenés!, por eso es que a veces me río solo y parezco tonto, por esas salidas tuyas y no creas, vos tenés mucha razón, acordate como empezamos, con una mano adelante y otra atrás, te acordás cuando se nos murió aquel chiquito de gastro. ¡Qué pobrezas más grandes las de nosotros y qué impotencia por Dios, no teníamos ni para el entierro! Bueno ve ahora, a punta de trabajo nos sobra hasta para ayudar a otros, claro, no hay que esperar que el gobierno le de a uno todo, hay que ponerle, porque barco parado no gana bocado. El otro día le decía a Miguelillo ahí en la pulpería que si aquella vez no hubiéramos dado la lucha por la dignidad a lo mejor Felicillo nos hubiera echado a todos, andaríamos rodando de peones por ahí y tal vez Félix, nuestro amigo, estaría ahogado en vicios, pero ya ves, fue para bien y aquí estamos. Bueno Flor, amor con hambre no dura. ¿No me vas a dar de almorzar? - ¡Ay que hombre por Dios! Esperemos que regresen los chiquillos de la plaza, así comemos todos juntos y no me tengo que estar parando, por lo menos el domingo que almorcemos juntos, de por sí todavía le falta al picadillo secar un poquito. - ¿De qué hiciste picadillo? - De plátano con carne mechada, vas a ver que delicia y a los chiquillos les encanta también, con esa chilera que usted se hizo y estas tortillas, humm nos vamos a chupar los dedos. También hay sopa de ayer, si quiere le caliento pa' mientras. - Nó, me espero a que vengan, de por sí es temprano, voy a ver un rato el partido. ****************

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- Compañero diputado, mucho gusto de verlo, diay ¿qué tal de fin de semana ? - Igualmente hombre, vieras que breteada, si es que tres días no le alcanzan a nosotros los diputados rurales para visitar comunidades, hacer saques en partidos, bautizar güilas y comer en cuanto lugar nos invitan, aparte del trabajo corriente de reunirse con dirigentes comunales y hacer política, jueputa, la verdad es que deberíamos decretar un receso porque no damos abasto y todavía vienen ahorita unas gentes de San Fermín de San Miguel para hablar del proyecto del parque nacional para esa zona, ya casi deben llegar. A eso venía, es que viene junto a ellos un dirigente comunal que se llama Justino Mora y me gustaría que lo conocieras, no tiene usted una idea de lo bueno que es, pero participar en política nada, es uno de los impulsores en todo el país de lo que se llama la tertulia y trabaja con el Centro, esa o n g que se dedica a dar asistencia organizacional a las comunidades y con las cuales es difícil negociar por lo descobijadas que están. Fíjate que es un dirigente de veinte o más años y se tiene un colmillo que no es jugando, ahí lo he ido conociendo por lo del parque, ese proyecto que tiene alguna oposición de la compañía de inversiones, la de aquel amigo mutuo y no hallo como quitármelo de encima, porque la verdad es que el proyecto es bueno y busca proteger los mantos acuíferos de San Miguel los que son importantes para el abastecimiento de agua del futuro. El criterio de la SETENA en cuanto a las construcciones en esa zona fue negativo, pero diay, está de por medio lo otro, lo que vos y yo sabemos, el apoyo de los inversionistas para la campaña, así que por qué no me acompañás y a ver que sacamos de esto. - Faltaba más compañero, aunque estoy prensadillo por lo de la comisión de hacendarios, voy a estar un rato con vos, así conozco a ese señor y bueno a ver por qué lado se le puede entrar. Una persona así nos ayudaría a darle vuelta a la tortilla, la que a propósito, está bien fea, máxime con esa necedad de aquel güevón de ser presidente otra vez. - Vieras cómo te lo agradezco, es que con esa gente hay que saber negociar y vos sabés que yo soy muy encendido y me arranco rápido. - Ahora que a mí me parece que ese proyecto es bueno y nosotros deberíamos anteponer los intereses politiqueros, aunque sea por una vez y apoyarlo y ya que estamos en esa comisión plena, darle camino, no jodás, de por sí esos cabrones de la compañía le dan las contribuciones al candidato directamente y uno ni ve el color del cheque , así que por qué vamos a tener que guardarles consideración. - Pues sí, no dejás de tener razón, a mí me ayudaron en mi campaña, pero eso fue antes, ahora, si te vi no me acuerdo. Ellos saben que en política la cosa es así, de por sí le dan a los dos lados, por si las moscas, ya yo me los conozco, aparte de eso, el candidato nuestro no me gusta y yo creo que no me va a gustar, no lo bajo ni con aceite. Me da mala espina, bueno eso vos lo sabés. - Callate que las paredes tiene oídos y esos cabrones de todo se dan cuenta. Tené esto por seguro, nosotros como diputados rurales, casi nunca tenemos la oportunidad de estar en las movidas buenas, solo los peso completo entran en ellas y los que repiten y ya saben el trillo y reclaman su tajada, por eso yo estoy ahora aquí y ahora en mayo tengo que salir a pulsearla al magisterio porque pensionarme, todavía estoy tierno y volver a tener oportunidad de venir aquí a la Asamblea, a como está esto de dividido, jamás, así que papá cojamos lo que podamos ahora que más luego es tarde. - Bueno ya veremos, voy a ir a ver si ya llegaron esos señores de San Miguel y ya te caigo, te parece que hagamos la reunión aquí en tu oficina que es más grande, porque en la mía, no jodás, no quepo ni yo.

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- ¡Claro hombre, hagámosla aquí ! Mientras tanto voy a revisar este proyecto de los casinos, que se las trae, aquí hay mucho asunto de aquel de por medio y dependiendo del manejo que le demos podemos salir por la puerta grande. ¿Vos lo has estudiado bien ? - Si claro, acuérdate que yo fui con el grupo que fue a Las Vegas. - A sí, sí, sí, yo no fui porque andaba en China, claro que vos fuiste, ya recuerdo. Bueno pues luego hablamos de esto, es algo bueno. - O.K. ******************** - Mire Justino, yo a veces tengo mis reservas para venir a hablar con estos cabrones, pero diay, ya el proyecto está avanzado, es algo de bien para el país y tiene el visto bueno de los grupos ambientalistas y del MINAE y diay, yo creo que estos señores no deben darle largas al asunto, o lo aprueban o lo aprueban, aunque se les enojen los de la compañía esa. - Tranquilo Valverde, yo se lo que son, a lo largo de estos veinte años he tratado con una gran variedad de ellos y ya me lo se. Les conozco hasta sus debilidades y se como los compran. Gracias a Dios que no todos son así, los hay decentes y con ánimo de servir, pero es que los malos no los dejan y son la mayoría, son los puestos por los que gobiernan de verdad el país, ya sabés como es eso, bastante lo hemos hablado en la tertulia de los jueves en San Miguel, así que dejámelos a mí. - ¡Buenos días ! Venimos a ver a unos diputados de la comisión plena primera. - ¡Buenos días señores ! sí pasen adelante, permítanme sus cédulas y pasen por ahí. Anjá. Muy bien gracias, sigan directo y llegan a unas escaleras, ahí suben y cualquier persona les dice donde es. - ¡Gracias señor ! - Mirá ahí es la oficina del diputado, preguntemos... - ¡Buenos días amigos ! ¿Cómo les va ? Los estaba esperando, vámonos para la oficina de un compañero de la comisión que es más grande. ¿Sólo ustedes vinieron ? - ¡Buenos días señor diputado ! Muy bien gracias. Sí, con nosotros es más que suficiente para plantearle lo que nos preocupa y para que ustedes lo consideren a la hora de votar el proyecto. - Ah sí Justino, la verdad que en pelotas a veces no resulta, es mejor poquita gente y así se avanza más. Pero cuéntenme, ¿cómo van los preparativos para las fiestas de San Miguel ? - De eso tal vez Valverde le pueda contar más por estar en la municipalidad, yo no estoy en eso y la verdad es que esos turnos nada bueno le dejan al cantón, sólo desorden, vicios y desgracias. Y no es que sea mojigato, me gustan las fiestas, pero no esas que hacen ahora, en donde una compañía de licores compra los derechos de manejarlas y lo que hacen son ríos de cerveza y otras cosas y es muy triste ver a jovencitos borrachos y causando dolor a sus familias. ¿No le parece ? - Pues sí, pero son tradiciones y hay que mantenerlas. - Las tradiciones sí, pero no los vicios, porque estos sirven para mantener la memoria colectiva adormecida, convirtiendo por ende a las personas en autómatas fácilmente manejables por políticos y

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otros, que usted muy bien sabe quienes son. ¿Cierto señor ? - Diay , ¿qué te puedo decir ? por un lado tiene usted razón Justino, pero vuelvo a lo de las tradiciones, de por sí, siempre ha habido guaro en toda festividad y eso mi amigo, ni usted ni nadie lo va a hacer desaparecer. - Quien sabe, a lo mejor en algún momento la gente va a madurar, claro eso toma su tiempo, pero hay que hacer la lucha y esa es una de las cosas que trabajamos bastante en las tertulias en todo el país y viera usted qué buenos resultados hemos tenido. - Bueno ahí sí que me quitaría el sombrero. Bien pero vamos a lo que vinimos, esta es la oficina del compañero de comisión. Hola cielito, está el hombre ahí ? - Sí señor, los está esperando, pasen. ¿Les sirvo un cafecito, té o un refresco ? - Tal vez cafecito . Contestaron todos al unísono. El ambiente de la Asamblea no le era desconocido a Justino, en otras oportunidades se había acercado a ella para conocer de cerca proyectos importantes, sobre todo en el Archivo, donde ya le conocían y era muy bien atendido por los excelentes funcionarios de ese departamento de apoyo de las tareas legislativas. Otras veces había acudido directamente a las comisiones para palpar el ambiente que había por tal o cual asunto de interés para la colectividad. Sin embargo sabía de antemano, primero por las historias que Felix le había contado y luego por las que a través de su experiencia e instrucción guardaba en su memoria que en esa caja de pandora se subastaba y a veces entre cuatro paredes el destino de partes del país y que cuando se llevaban algunas cosas a las comisiones plenas o al plenario, de previo, habían sido manipuladas y ya aprobadas. Sabía que detrás de un proyecto que pretendía beneficiar al pueblo, había otro trasfondo que era el que les interesaba a la minoría de político diputados profesionales y a sus patrones, por ello le asqueaba el ambiente que allí se respiraba de falsas y corteses poses. Ellos no eran patrones, eran simples ciudadanos y si estaban circunstancialmente por ahí, era por velar por los más preciados intereses de su cantón y lo que era más importante, por el futuro del agua de una gran parte del área metropolitana, la cual se vería afectada si a aquella empresa le daban el permiso de construir las “urbanizaciones ecológicas” que rimbombantemente anunciaban a la entrada del cantón. Por dicha y gracias a la presión de las comunidades circundantes, la municipalidad no había otorgado el permiso de construcción aún y el estudio de impacto ambiental presentado al MINAE había sido resuelto desfavorablemente por la SETENA. Solo se esperaba la aprobación de la ley que crearía el parque y el asunto quedaría concluido, porque la compañía no podría tocar ni un solo árbol de aquella reserva por la que se frotaban las manos, a pesar de que ya había adquirido gran cantidad de fincas. La voracidad de estas empresas les llevaba a hacer hasta lo imposible para hacerse de tierras en la periferia de las ciudades, contando como siempre con la venia de funcionarios corruptos para que les otorgaran los permisos de construcción, sin importarles el daño ambiental que se ocasionaba y por lo cual, la naturaleza ya nos pasaba la factura. En San Miguel había sido la excepción, desde un inicio la ciudadanía se había opuesto y gracias a la presión y organización de las bases y a las diferentes organizaciones que operaban allí, la municipalidad les había negado los permisos hasta tanto no presentaran el estudio de impacto ambiental y ello a pesar de las ofertas de todo tipo que hubo. Por lo menos en esta comunidad esta empresa no se saldría, en apariencia, con la suya. - Hola señores, que dicha que vinieron, ya me había hablado el compañero de ustedes y de su interés por el proyecto del parque, díganme qué podemos hacer por ustedes, porque les voy a decir una

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cosa, es una lástima que esa empresa no pueda desarrollar ese proyecto ahí, ya que daría trabajo a un montón de gente de las comunidades vecinas, pero diay, si se oponen y nosotros aprobamos la creación de este parque, la cosa estaría jodida para ellos. ¿Cierto ? - Cierto señor, mucho gusto, mi nombre es Justino Mora y mi compañero es don Eric Valverde, él es regidor en San Miguel y la verdad es que lo que nos interesa es saber qué ambiente tiene el proyecto, si se va aprobar a según ustedes y para cuándo, porque no sabemos como va a resultar lo de la apelación al MINAE y si deciden ahí aprobarles el estudio de impacto ambiental, ahí si que agarran a la municipalidad desarmada, porque eso es lo que ha evitado que le compañía obtenga el permiso, ustedes saben que con esa ley de protección al ciudadano que salió aprobada, la municipalidad tendría un plazo para responder a una solicitud y si todo está en regla, no tendría otro camino que darles el permiso de construcción en esa zona. - Pues sí , vos sabés que Justino tiene razón, yo creo que ambiente para aprobarla lo hay, lo que no sabemos es si nos va a alcanzar el tiempo, por ahí tenemos la opinión de Acueductos y es favorable por lo de la protección de los mantos y nacientes, pero con esta carajada de la campaña política en la de menos decretan un receso y ahí que nos lleva puta, porque el MINAE tiene un plazo para resolver. Mirá para que esta gente se vaya tranquila e informe a sus comunidades, ¿Vos no crees que podríamos adelantar el conocimiento de esto para esta semana ? Así aprobado ya no habría quite, ya que el ejecutivo lo firma en dos bombazos, porque de por sí le interesa, ya que la compañía no es afín al gobierno, por lo de aquello. ¿Te acuerdas ? - Anjá, recuerdo. Pero bueno, hagamos el intento, la esperanza es lo último que se pierde. ¿Les parece señores ? - Por supuesto, eso es lo que queríamos oír, que ustedes se sintieran comprometidos con ayudarnos, no a nosotros, sino a todo el país, porque el agua es un asunto de todos , la verdad es esa. Contestó don Eric. - Para eso estamos señores y ojalá que todo salga bien con los demás compañeros a los que trataremos de convencer para poner en el orden del día ese proyecto y aprobarlo con la mayor brevedad, es más, para mí es más importante que el de los casinos que estamos estudiando. - Ah otra cosa señor diputado, quiero darle las gracias por la ayuda que le dio a mi hijo Eric para que entrara a la policía, usted no sabe cuanto él quería entrar a esa vaina y viera que ya está graduado y por el estatuto. Está muy contento y me pidió que le diera las gracias y que le dijera que en lo que pudiera servirle que contara con él. -¡Por Dios ! Fue un privilegio servirle y qué dicha que le dieron la chambita, la verdad es que es un trabajito sacrificado pero él está joven y lo aguanta. - A propósito, ahora que mencionó usted eso de los casinos, no importa si le doy una opinión, es que es un asunto que tratamos mucho en las tertulias, el de los jóvenes que trabajan en las cazadoras de apuestas por computadora, esos muchachos que ganan mucho y que se aficionan a las cosas finas por la cantidad de dinero que manejan electrónicamente, me da la impresión de que se identifican con los apostadores y se creen ellos, porque ahí andan cuando tiene ratillos libres, botando la plata. ¿No creen ustedes que le estamos haciendo un daño a la juventud al permitir que tales empresas funcionen ? Porque resulta que los muchachos al ganar las sumas que ganan, dejan botadas universidades y hasta sus hogares, para irse a vivir con compañeros en un modo de vida nada recomendable para ese sector de nuestra juventud. Aparte de eso, según nos han comentado jóvenes que se han salido de esos empleos, se da mucho consumo de cocaína y otros estimulantes para mantenerse despiertos en jornadas extenuantes. Sería bueno que ustedes, ya que están con ese proyecto de casinos y juegos, investigaran

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un poquito de lo que les he dicho, porque diay para qué les damos a nuestros hijos inglés y cómputo en escuelas y colegios, para que sirvan a estas empresas. Si es así mejor quedémonos con el mal español que hablamos y no aprendamos a navegar en internet, porque le hacemos un daño a las generaciones del futuro. Ahora otra cosa. ¿Ustedes creen que esos lugares donde ponen esas máquinas tragamonedas son un negocio para la empresa que las pone? No señores. ¿Me dan un ratito y les explico qué es lo que está pasando ahí? - ¡Por favor señor! Siga adelante que eso que usted está diciendo es muy importante. - Resulta que a veinticinco colones por palancazo o tiro, nadie se va a hacer rico, sin embargo para que ustedes se despabilen, esas empresas depositan en los bancos como producto de esas máquinas cientos de miles o millones de colones diarios, lo que no es cierto, ya que la gente no juega tanto como para generar esas cantidades que se depositan, si no me creen dense una vueltica por esos negocios y se darán cuenta de lo que les digo, ahí no entra nadie, así que señores míos. ¿De dónde viene esa plata que se deposita ? Seguro ya se contestaron mentalmente, exacto, es un lavadero de dinero sucio y que se convierte en limpio al depositarlo como producto de lo recolectado en las tragamonedas. Así es la cosa, por si no lo sabían. Con esos comentarios que ustedes han tenido la paciencia de escucharme, no les quitamos más tiempo, sí les vamos a agradecer que nos metan el hombro en lo del parque y si pueden, pónganle mente a los de los casinos, coméntenlo entre sus compañeros y vean que eso solo desgracias puede traer a un país como este. ¡Muchas gracias y que tengan muy buen día ! ************ - Mirá Eric, no se vos, pero yo veo a esos diputados medio hipócritas, cuidadito y si no nos meten diez con güeco, es que yo desconfío tanto de ellos, porque su manera de actuar, sus actitudes y como nos hablaron, parecía que se querían deshacer de nosotros pronto. Quién sabe que se traerán entre manos, recordá que la compañía esa es my fuerte y que comprar unas conciencias más no les hace mella. Mmm, no sé, pero ya veremos, hay que estar muy atentos y ojalá llamarlos todos los días a ver como va el asunto. - Pues sí, tenés razón, ese que fuimos a buscar primero yo lo conozco desde la campaña, supuestamente es representante de San Miguel y vos sos testigo de que allá nunca se ha arrimado y vos los oís que visitan a los pueblos y que no descansan y es puro cuento. Pero no creas, como es la municipalidad la que está interesada, no los vamos a soltar hasta que aprueben ese proyecto. - Mirá Eric, ese es uno de los lugares que le contaba yo al diputado, ve que no hay nadie jugando y ve que lujos, mirá como ponen publicidad afuera para que uno entre, vení metámonos para que veas. - ¡Ay no! ¿Cómo se te ocurre que vamos a entrar ahí? - Vení, no te van a comer, espérate para sacar un menudillo, es a veinticinco pesos el tiro. Una vez adentro del centro de máquinas tragamonedas, fueron abordados por personas del lugar quienes les enseñaron el funcionamiento del juego y les ofrecieron bocadillos y bebidas cortesía de la casa, comprobando Justino y Eric lo que les habían contado. A lo sumo había unas cinco personas incluyéndolos a ellos, aparte del personal y a no dudarlo, por la cantidad de gente cualquiera se daba cuenta de que no era una actividad rentable. El negocio andaba por otro lado. - ¿Qué te pareció la experiencia Eric? - Diay, ¿qué querés que te diga? Tenías razón, ahí hay gato encerrado, semejante montón de máquinas para solo cinco personas. Nosotros gastamos como doscientos pesos cada uno y nos comimos

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un bocadillo de jamón y un vaso de coca , o sea que con nosotros más bien perdieron y si es así con toda la gente, cualquiera diría que eso es un mal negocio y con el lujo que tiene. Si la verdad es que la vaina anda por otro lado. Tenías razón… - Mirá Eric, este país va a ser muy difícil de sanear, la única esperanza que tenemos es que la presión que hace el pueblo a través de las tertulias sea respetada y que estos cabrones, como esos que nos atendieron ahora, metan la barba en remojo y se den cuenta que si no lo hacen, va a pasar lo que dice Enrique, el del Centro, va a haber que fusilar a un montón de ellos ahí en la pasarela de don Pepe en la Plaza de la Democracia. Precisamente en junio, después de las elecciones y cuando el nuevo gobierno asuma, en la reunión que vamos a hacer de representantes de las cinco mil tertulias del país ahí en la Universidad, vamos a fijar una solo posición sobre los problemas que aquejan al país en general, anteponiendo los problemas locales, porque nos interesa llegar a un consenso en lo nacional. Cada representante va a tener cinco minutos para exponer lo que su tertulia considera son los problemas más importantes a nivel nacional y de ahí saldrá un pliego de peticiones a los supremos poderes, que si no hacen caso, estarían desoyendo la voz de un mínimo de doscientas mil personas, que representan a todo el país y que son de todos los partidos políticos. ¡Ah Mirá Eric! Ese que viene ahí, si es que ya no se muere, ese carajo pelón se llama Olman y es uno de las personas que más me tiene informado de lo que pasa en la ciudad y de todos esos asuntos de los casinos y de la deuda interna y esas vainas, vieras que hombre más bien informado, bueno con razón, si es que se dedica a manejar inversiones y a hacer negocios. A él lo conocí en un seminario de realidad nacional muy bueno, al que me invitaron el año pasado , ahí analizamos el asunto ese del estado de la nación, que hace una gente. Espérate y te lo presento. ¡Don Olman, que gusto de verlo ! - Hombre Justino ¿qué tal , cómo me le ha ido ? ¡Qué sorpresa verlo aquí en San José ! Estaba en estos días pensando en usted y en lo que habíamos hablado de las tertulias porque me invitaron a una que se hizo ahí en mi barrio. Era para analizar el asunto de la inseguridad y dije yo, diay eso es idea de Justino, de ahí salió esa semilla. Viera que bien estuvo y me contaron que después de las elecciones van a realizar una nacional para proponerle al nuevo gobierno el camino a seguir y me pareció muy bien, máxime como está esta vaina de peleado. Bueno pero solo yo hablo, cuénteme de usted y, el señor, ¡mucho gusto , Olman para servirle y perdóneme si soy muy franco ! - El señor es Eric Valverde, es regidor de San Miguel y gran compañero de luchas, precisamente ahoritica andábamos hablando con unos diputados y le dije a Eric, pasemos ahí a ese casino para ver qué hay de cierto en lo que me cuenta mi amigo Olman y viera usted que comprobamos lo que usted me dijo el otro día, eso es ni más ni menos que una lavadora de plata rara, porque de verdad, no hay nadie jugando y hasta lo invitan a uno a bocadillos y lo que quiera de tomar y eso que jugamos como quinientos pesos porque nos dio vergüenza que nos invitaran al refrigerio. - Bueno es para que vea usted, así son las cosas en este país, si ya no hay vuelta de hoja, o se compone o no se qué va a pasar, cada día queda menos de soberanía, la tal deuda interna es una fantasía con la que nos asustan para meternos cada vez más impuestos para poder pagar los intereses a los verdaderos y pocos ricos de este país que no hayan en qué gastar la plata. - ¿Cómo es eso ? - Muy sencillo, si a la tal deuda interna le quitamos lo que se le adeuda a los entes del estado porque ustedes saben que los han obligado a comprar títulos valores del gobierno con plata de sus superávits o de la plata para invertir en mejoras, lo que queda de ella no es gran cosa, pero eso que queda es la plata de los multimillonarios de aquí y de afuera que han invertido en esos certificados, porque no crean, los de afuera prefieren comprar esos títulos en dólares que ofrece ahora tan a menudo el gobierno, porque en sus países sí pagan impuestos de verdad por esos dineros, en cambio aquí a lo sumo un ocho por ciento. Así que amigos míos el gobierno nos asusta con el coco de la deuda, para

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obligarnos cada vez más a desprendernos de nuestro dinero para contribuir solidariamente a pagar esa deuda, que no es otra cosa que el pago oportuno de los réditos que les generan a aquellos sus inversiones y así nosotros nos arruinamos más, ya la clase media de este país va en declive hacia la baja y se está creando una nueva casta de ricos, pero ricos de verdad, que no hayan que hacer con la plata, imagínese que un día me contaba uno de ellos que se acababa de comprar una moto que le había costado como cuarenta o cincuenta millones, solo para darle gusto a un hobby y salir de vez en cuando a pasear disfrazado de pandillero con una querida menor de edad que tiene, o irse para Puntarenas adonde tiene un yate gigantesco, como con cinco dormitorios y hacer unas fiestas que no es jugando ahí mismo en el estero o en el Golfo ¿Ah ? ¿No creen ustedes que es un pecado y que estos señores le están jalando mucho el rabo a la ternera ?. - Pues diay sí, yo ya había oído eso de la deuda, es más ha sido de comentario constante en la tertulia y creo que es uno de los puntos que vamos a incluir en la agenda de la tertulia nacional y eso de los nuevos ricos que usted me cuenta no es nuevo y de verdad que le creo, es que es tanta plata que entra aquí de afuera, es que en Europa y en Estados Unidos sí hay que pagar impuestos por ella y diay, mejor se la traen para acá que es un lugar seguro para esconderla y además les pagan intereses buenos y seguros, porque hay todo un pueblo trabajando para eso. No me vengan a decir que es trabajando como la hacen, ¡no señores !, ya con trabajo por más grande que sea la empresa, no da para enriquecerse en esa forma y menos para botarla en la forma que la botan, si es que solo vasta pararse ahí en la Avenida Segunda y ver la cantidad y calidad de los carros que por ahí pasan para darse cuenta que algo huele mal en este país y no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, por algún lado se tiene que destapar la hediondez y desgraciadamente nos pringa a todos, porque eso va criando roncha y de tanto rascarla va a salir sangre algún día. Ojalá que no sea sangre inocente, que sea solo la de los malos, pero sobre eso no hay nada escrito, diay es que en una revoluta tienen que haber mártires y solo así este pueblo quizás despierte y se sacuda de estos cabrones vividores generacionales. - Como siempre, tiene usted razón y me gusta eso de vividores generacionales, pero nos estamos asoleando y yo con esta coca no aguanto el calor. ¿Por qué no nos tomamos un cafecito ? ¡Vamos yo invito ! Así podemos conversar un rato, si es que no andan muy de prisa, vean ahí hay una soda y puede uno repetir gratis el café. - ¿Vos que decís, vamos ? - Diay claro que sí, si es que con un señor como este aprende uno montones, ¡ah bárbaro para conocer de cosas ! - ¡Ah bueno ! Les decía pues que así está el asunto, los casinos , como ese que ustedes han visto abren las veinticuatro horas y nadie les pone coto, pagan, compran o construyen edificios para eso y son inversiones millonarias, que para un país como este con tan poco potencial turístico de ese tipo, deja dudas de que si realmente es un negocio, eso atrae a la prostitución porque a los escasos clientes de afuera que vienen, les ofrecen paquetes de turismo sexual, incluidas visitas a los casinos, más como mampara que como negocio, algo así como para que se vea que vienen a jugar, pero con lo que vienen a jugar es con la juventud nuestra a la que corrompen con la complicidad de mucha gente, inclusive de algunos funcionarios del gobierno, quienes se hacen de la vista gorda porque están en deuda con esos que se llaman inversionistas turísticos. No si Justino tiene razón en la exposición que hizo en el seminario donde estuvimos, este país ya está repartido con todo y gente, desgraciadamente fue repartido a la gente menos recomendable y en lo que están ahora es planeando en que van a utilizar esa nueva forma de esclavitud. Bueno ya se está dando en los sportbooks, en la prostitución, en el trabajo que se les da a nuestros jóvenes profesionales en las grandes corporaciones de microcomponentes, los que son sometidos a constante contaminación radiactiva con el anzuelo de un buen salario, el que obviamente no es comparable con el que le pagan a los suyos, en fin, ya se está dando. Aguárdense para tomarme un sorbo de café, humm ¡qué bueno ! Por ejemplo, instituciones que

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se encargan de capacitar a los técnicos medios, invierten y enfocan sus programas a darles inglés y cómputo a nuestro jóvenes quienes atraídos por los cantos de sirena de los sportbooks, casinos y otras alternativas dentro del sistema de explotación turística, dejan estudios, familias, salud y hasta su dignidad, con tal de pertenecer a ese selecto grupo de los servidores directos de la corrupción. Así está la cosa señores. Esta ciudad que ustedes ven aparentemente con gente despreocupada, es la fiel representante de lo que está sucediendo en este país, si no me creen, pongan atención como pasan por esta ventana centenares de muchachitas y muchachitos , la mayoría menores de edad, que van hasta ahí donde Chelles y se devuelven y en esas se las pasan hasta que consiguen clientes. Vean esos turistas en ese balcón de ese bar, ahí se sientan a explorar la oferta sexual y cuando les gusta alguna o alguno, esos carajos que están ahí afuera a su servicio, se los contactan y se los hacen llegar a sus habitaciones, donde son sometidos a los peores actos de barbarie sexual, actos por los que en sus países de origen se pudrirían en la cárcel. Esa es la mayoría de turismo que está viniendo aquí y la verdad es que mejor se quedaran en sus tierras y no se arrimaran a este país, porque se están cagando en lo más preciado de nuestra nación, en su juventud. - ¡Jueputa, qué barbaridad ! ¿Y qué se puede hacer Olman ? Si ve uno en la prensa, que salen los funcionarios públicos y dicen que se hacen ingentes esfuerzos para parar eso y que hay organizaciones privadas que ayudan al gobierno para parar eso y sigue la cosa. ¿ Cómo pararla ? - La pregunta del millón Eric, porque cuando los jóvenes prueban lo que es ganar dinero fácil que llaman ellos, el que les sirve para comprar drogas caras y ropa fina, el que les sirve para comer lo que nunca han comido e invitar a sus parejas a lo que nunca han podido hacer, es muy pero muy difícil que se salgan de eso , cada vez van a necesitar más, cada vez se van a degenerar más y cualquier esfuerzo que hagan las autoridades para ayudarles, es mientras se desintoxican del crack, al que terminan acudiendo cuando han tocado fondo, pero, una vez que salen de eso, vuelven a hacer su debut en las calles, hasta que terminan como esos que están ahí durmiendo en esos cartones a vista y paciencia de las autoridades que no pueden ofrecerles ninguna alternativa de rehabilitación plena y hasta que llega la noche para levantarse de esa vida miserable y dedicarse a asaltar borrachos en las madrugadas para complacer su vicio. Es un círculo vicioso al que son llevados por los corruptos quienes les ofrecen las primeras dosis de cocaína o éxtasis para hacerlos caer en sus asquerosos brazos, después los desechan como a esos que ustedes pueden ver. Esos son basura para ellos, esos en su mayoría son seropositivos o sea están contagiados de sida, ya son escoria de la sociedad a la que no le interesa invertir en su recuperación y así estimados amigos, se va a ir inundando nuestra ciudad, nuestros pueblos y nuestra nación de un gran porcentaje de gente escoria, producto de la ambición desmedida de muchos funcionarios públicos y sus amos. Ellos son los culpables y ya va haber un momento para que el pueblo haga justicia y castigue a los vampiros de nuestra patria. - Como dice el padre aquel que llega a San Fermín : ¡Amén hermano !. La verdad es que tiene usted mucha razón Olman y qué dicha que te encontramos, porque Eric tenía que conocerte y darse cuenta de como piensa una persona de la ciudad, tenía que saber por otra boca de lo que está pasando en nuestro país y de lo cual yo les mantengo bien informados en las tertulias que hacemos tanto en el Nuevo Alumbre como en San Miguel. Es bueno que oiga a otras personas porque él es regidor y debe tener muy buen criterio a la hora de representar al pueblo y es bueno que te haya oído a vos que de verdad sos tan franco. Bueno yo creo que es buena hora para ir tomando el rumbo hacía el pueblo. Ha sido un placer encontrarte amigo mío y que tus palabras hayan quedado bien anotadas en nuestras mentes y para la posteridad, porque personas como vos, va a necesitar y mucho la patria nueva, porque quien maneja la información tiene el poder y vos sos una fuente inagotable de buena información. Ojalá nos encontremos más a menudo y que en la tertulia nacional te arrimes, porque yo creo que ahí va empezar el cambio. El cambio que esta patria necesita, el cambio de mentalidad de un pueblo que ha estado y pretenden seguirlo sometiendo y es solo con la fuerza indisoluble de la unidad mental y de corazón que vamos a lograr la construcción de esa patria que se merecen nuestros hijos y

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las futuras generaciones. Si ese cambio se da en la urna electoral bienvenido sea y si es por otros medios, pues qué carajo, también bienvenido sea y si de aportar cuotas de sacrificio personal, diay, para eso estamos, porque prefiero ponerle el pecho a una bala, que el cuello a una cadena, la que terminaría atando también a mis hijos y ellos no se merecen eso. Ellos y esos que están ahí durmiendo sus desgracias, tienen derecho a soñar, tienen derecho a que esos sueños se cumplan y nosotros debemos procurar que eso sea así. Puta me salió como discurso de político, pero es la realidad. - No saben la alegría que me ha dado encontrarlos y en una que va y otra que viene voy a aceptar tu invitación y te voy a caer allá por tu casa, es que me he vuelto perezoso para viajar, pero en la de menos... - Mi casa es tu casa y si te avienes a un gallito pues ni me avisés, andate por allá que ahí vamos a conversar bastante y hasta armamos una buena tertulia, un abrazo amigo mío. Con un fuerte abrazo sellaron aquel encuentro y se encaminaron a tomar el autobús que les llevaría hasta San Miguel, una preocupación extra les acompañaba, habían comprobado in situ que la patria estaba más enferma de lo que se imaginaban y sabían que si la juventud que era su más preciado bien estaba siendo invadida por el flagelo de la corrupción, la tarea de sanidad y prevención sería muy grande. Sería una obra que llevaría muchos años porque se había descuidado por comisión u omisión la tarea preventiva y las medidas curativas serían de cirugía mayor. La patria de Justino estaba cada vez más enferma y eso dolía, eso preocupaba. Una amarga lágrima corrió por el yo interno de Justino, una lágrima que corroía el corazón pero que de paso servía de aliciente para seguir en esa lucha que ya llevaba más de veinte años en pro de una patria digna. Su salvación era cosa de todos y no de los profesionales de la política, quienes deberían hacerse a un lado ante la organización, disciplina y conocimiento, ahora sí, que tenía ese pueblo de sus actuaciones. La clave era la información a la que muy pocos habían tenido acceso a través de la historia, la clave era la discusión franca y amena de los problemas comunes y la búsqueda conjunta de soluciones, la clave en síntesis, era desenmascarar a quienes por generaciones se habían servido de ese adormecimiento de la memoria colectiva para tener a un pueblo subyugado, la clave era señalarlos, apuntarlos con el dedo acusador y sancionarlos como merecían de acuerdo a sus faltas y que así pagaran sus crímenes contra la patria; el ostracismo les esperaba. Los años siguientes serían cruciales y la elección por venir sería la última posibilidad que tendrían los profesionales de la política para enmendar sus errores, sino, el pueblo estaría listo para actuar. Una tercera fuerza emergía en el horizonte político - electoral y amenazaba seriamente la estabilidad de las fuerzas políticas tradicionales con un mensaje ético - moral y apegado a la reducción del gasto público, éste encabezado por un exmiembro relevante de una de esas fuerzas había logrado el milagro de despertar pasión en un gran porcentaje de la población, la que de por sí desencantada de lo tradicional y mentiroso, veía en esa opción una manera de canalizar su protesta. La elección del primer domingo de febrero sería su prueba de fuego y señalaría el derrotero para partidos de este tipo, partidos que sin contenido filosófico aparente pero sí con mucha fe y esperanza, aparecían en el espectro político nacional como posibles conductores del voto protesta. La situación del país no podía ser más angustiante, cada vez más endeudado y con los precios de los productos de agroexportación por el suelo, lo que le convertía en un pordiosero más de los organismos financieros internacionales que le ayudaban a mantener una aparente calma financiera en el país mas no corregían el rumbo de su economía, que seguía siendo de irresponsable incremento del gasto público amparado a la emisión de certificados de deuda, creándose el espejismo de una bonanza

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aparente por el incremento de reservas en el Banco Central. A no dudarlo el país no podría aguantar una situación así. Los discursos de los candidatos, en su mayoría no vislumbraban un cambio del rumbo y salvo una minoría de la minoría que no tenía ningún arrastre, se pronunciaba valientemente sobre las correcciones que había que hacer en economía, migración extranjera, educación y producción. Desgraciadamente los otros, los que representaban a la aparente mayoría eran muy cautos en poner el dedo sobre la llaga y lo eran más aún en tocar temas espinosos y que convenían a sus patrocinadores. *****************

- Bueno vienen las elecciones ahora el domingo y como ven ustedes la vaina anda por lo mismo, ese doctor que es candidato a mí me gusta, es que me da un aire a aquellos hombres de bien, sinceros, entradores y nada palanganas, bueno vean cuantos años estuvo en los programas esos de comentarios y diay como que se acostumbra uno a verlo y ya lo recibe como a alguno de la familia. Si voto tal vez vote por él. Muy respetable tu opinión Mamulón, la verdad es que sí, es una imagen amiga en nuestros hogares y puede que ayude a ese partido a ganar, pero me pregunto: ¿ Aguantará la presión de las personas que usualmente son los que manejan los gobiernos? Vean ustedes que una golondrina no hace verano y detrás de él están los mismos de siempre, las mismas personas que siempre se han servido de la política y que cuando no están de diputados, están de ministros o en las juntas directivas. Yo no, yo no caigo otra vez de maje, a mí no me la hacen buena esos candidatos de los mayoritarios, seguro que yo me voy por el de la tercera fuerza que llaman, es que me parece más comprometidos con la honradez y vean que nada de contribuciones raras, todo lo chequean, me parecen que son buenos y vean ustedes los candidatos a diputados, uno a uno son gente decente. Me parecen la mejor opción. - Está bien Miguelillo me parece que pensás bien y madurás tu voto, la verdad es que ustedes dos lo han madurado muy bien, uno por el doctor que parece ser un hombre no manipulable y el otro por ese que se salió del otro partido y que ha demostrado valentía para luchar por lo que cree, habrá que ver si logra el gobierno si es capaz de poder manejar la cosa pública con sus ideas que me parecen un tanto exageradas y veremos si es capaz también de manejar una fracción legislativa con esas ideas tan apegadas a la ético - moral y no me pongan esa cara de babiecas, pero es que yo dudo tanto de estos carajos que a veces ya no creo cuando alguien se me presenta como muy ético y si es así, ¡cómo me cuesta creer que los demás que están con él lo sean! Es que es tan difícil encontrar tanta gente así arrimados en un mismo partido que me pongo a pensar que en caso de que lleguen a la Asamblea si podrán soportar las ofertas y las tentaciones. - Bueno Justino, pero hay que creer en alguien, ya no es hora para aislarnos y hacer lo que hacíamos antes, no votar, hay que escoger y ojalá escoger bien, por eso debemos valorar todas las opciones, porque el voto es la única forma sin derramamiento de sangre. ¿Y de los otros? No hemos hablado de esos que todo lo quieren permitir y que dicen que no paguemos impuestos y tampoco hemos opinado de ese señor del otro partido. - Cierto don Rafael, no hemos hablado de los otros porque nadie aquí ha manifestado su intención de voto por alguno de ellos, pero es importante que les diga que nada nuevo nos ofrecen los candidatos de los partidos mayoritarios, su discurso es el mismo que nos han recetado a través de la historia, por eso es que yo si voto lo haga por un minoritario pero de los de verdad minoritarios, porque

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tampoco es que me gusta el de ese muchacho que es diputado, no dudo de su honestidad, pero sus ideas van más arrimadas a permitir todo con ese toque de liberalismo, lo que a nada bueno conduciría, ya que este país esta renco y lo empujan, ahí sí que nos lleva el diablo. Yo creo que ese partido ahí va estar porque ese muchacho tiene carisma, o sea atrae a cierta gente, sobre todo a las muchachas, velas como se ponen cuando lo ven o lo oyen, pero como ese otro, es un partido de una o dos personas y hasta ahí, se terminan muriendo con el tiempo. Por otro lado, el verde ese, no es que sea yo contrario, pero ya tiene agotada su historia, esa cantaleta que se anda echando ese hombre ni sus parientes se la creen, vas a ver el garrotazo que se van a llevar, aparte de que los que forman el otro partido en su mayoría eran de este. Es que cae en el error en que caen todos, el cuento de que nosotros los costarricenses tenemos flaca memoria y la verdad es que se equivocan, esa flaca memoria últimamente se ha engordado gracias a las tertulias y esa gordura nos va a bastar para decirles que ya no nos engañarán más y que si escogemos con nuestro voto a unos nuevos gobernantes, vamos a ser muy vigilantes de su accionar porque esta es la última oportunidad que les damos, sino vamos a pasar por la pena de asumir nosotros, el pueblo piso e' tierra el gobierno y demostrarles al mismo tiempo que los juzgamos por el engaño generacional a que nos han sometido, de como se maneja un gobierno cuando los dueños están pendientes de la gestión. ¡Qué va! No podemos seguir aguantando lo mismo y cualquiera que quede, va a tener que ponerle atención a los acuerdos de las tertulias. Así que mis amigos, votemos sí, pero votemos inteligentemente, cada cual de acuerdo a su conciencia…¿Sí Marta? - Escuchen señores, la verdad es que cuando uno conversa sobre estas cosas como que se le ilumina la mente, a mí se me vino una idea, bueno la verdad es que es vieja y la tenemos para discutirla en la tertulia nacional la representación de mujeres del Nuevo Alumbre y es que, bueno, como yo soy candidata a regidora por ese partido nuevo, todo lo que diga es para defenderlo, pero aunque una sea candidata o regidora, no debe permitir que le ordenen cosas que vayan en contra de lo que uno piense y eso es lo que ha pasado en los partidos políticos toda la vida, la gente para estar ahí y poder gozar de los privilegios se meten la lengua y sus ideas donde ustedes saben y pasan toda la vida arrastrando ese arrepentimiento interno por no haber actuado a tiempo. Estoy quemando el tema, porque era para la tertulia nacional, pero me parece que debemos exigir a las nuevas autoridades que mantengan su independencia pase lo que pase, porque no debe ser que cuando llegan al poder se olvidan de sus promesas y terminan aceptando las ideas de otras personas y no las suyas. Así que un compromiso que uno debe adquirir cuando asume un puesto de elección popular es mantener esa independencia que tiene todo ser humano para escoger lo mejor para sus pueblos y no seguir líneas de partido, las que siempre van en la dirección de favorecer a los dueños de siempre. ¿ No les parece? Es que digamos, por ejemplo, yo podría comprometerme con lo ético y moral, con el ahorro en el gasto público, pero en otras cosas no, porque para eso Dios me puso el libre albedrío y no soy ninguna chiquita para que desde San José me digan qué tengo que hacer. Que mientras no me salga de esos principios básicos, haré lo que tenga que hacer para mantener mi libertad de pensamiento en aras de contribuir con los intereses de los electores y de quienes confiaron en mí. - ¡Carajo, qué bueno eso que ha dicho Marta! La verdad es que sí, uno debe ser siempre independiente, es cierto que los partidos tienen líneas de pensamiento o filosofía que llaman los entendidos, pero eso no dice que uno debe siempre acatar todo lo que nos digan los dirigentes, porque ellos la mayoría de las veces hacen interpretaciones de eso pero echando pa' su propio saco. Uno debe escucharlos y escoger lo mejor de acuerdo a lo que uno crea y que ojalá haya estudiado aquí en la tertulia o en otro lado, informándose por ejemplo con gente que sepa pero que no lo vayan a engañar a uno. - Pues sí así debe ser y...usted doña Carmen. ¿Qué opina? - Yo estoy muy de acuerdo con Marta y con el grupo de mujeres de aquí, es el momento que

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hemos esperado por muchos años para decir ¡basta ya! y con el voto les vamos a mandar un mensaje que, señores les cuento un cuento, va a hacer una roncha que no es jugando en el país, porque el otro día que fuimos a la reunión de la liga de mujeres campesinas, oigan nos hemos encontrado con unas muchachas y señoras, así como yo, campesinas de esas que no le safan el lomo a la tierra, que vieran que bien ubicadas están, juemialma, es que tienen claritico el panorama y saben que hay que hacer en este país pa’ sacarlo adelante. Fíjense que una de ellas hasta ha participado en un montón de países del mundo representando a las mujeres de este país y uno la ve y no parece, si hasta se parece a mí, bien campesina, pero vieran ustedes que mujer, es de armas tomar. Así que mis amigos van a ver ustedes lo que aquí va a pasar, ya la gente no se va, como dicen los chiquillos, por un boli. ¡Qué va! Están bien espabilaos. - ¡Qué bueno! ¿Cuánto hemos esperado por esto, verdad, Justino ? - Sí don Ángel, bastante pero ya es la hora, como lo dije el otro día, o hacen algo por este pueblo o éste les va a pasar la factura y hasta con intereses. Pero bien, estamos claros que a diferencia de otros años, por lo menos hay alternativas para votar, por personas o partidos que representan un algo y podrían, viéndolo con optimismo, hacer algo por el país, así que adelante compañeros, votemos con convicción, votemos por Costa Rica y ojalá que nuestro voto contribuya a bajar el abstencionismo, el que gracias a unos pocos profesionales de la política ha ido creciendo. Ahora pienso que equivocamos el camino en el pasado y que el no votar, aunque fuera en protesta, contribuyó a fortalecer a esos políticos de carrera, porque ellos siempre tienen amarrados a un cierto número de la población y somos los indecisos y los abstencionistas los que podemos cambiarles la historia y hacer que la tortilla se vuelva. Así que adelante y nos vemos ahí en la escuela el domingo para comentar como va la vaina y si quieren en la noche se arriman a casa para ver los resultados. Aunque saben una cosa, hay quienes dicen que ninguno de los tres más fuertes va a sacar el mínimo y se van a tener que ir a una segunda ronda y eso sería algo nuevo y que por lo menos que yo me acuerde no ha pasado en los últimos años. Pero esperemos a ver que pasa. La elección se llevó a cabo y efectivamente, emergió, en apariencia, una tercera fuerza política en el país, el partido que tomó como bandera la ética y la moral y el alto al desenfreno en el gasto público, estuvo a punto de desplazar al partido madre y del cual salieron la mayoría de sus electores. Desnudó las deficiencias y vicios de este y del otro mayoritario también y obligó por la cantidad de votos que obtuvo a ir a una segunda ronda electoral la que se realizaría entre los dos mayoritarios de siempre. Después de una purga interna del candidato a la segunda vicepresidencia, por motivos aún hoy no muy claros y que esperemos algún día salgan sinceramente a la luz pública, el candidato plantado, como se denominó él mismo, ganó fácilmente al otro candidato que definitivamente se quedó en su desgastado discurso. Una llamada de atención a un partido históricamente mejor organizado y constituido por una gama más amplia de sectores en sus mandos altos y medios y que le ha tenido hoy día sumido en una reestructuración interna la que aún no ha concluido, pero que sin embargo el pueblo espera y desea de el un compromiso más apegado al espíritu que llevó a sus fundadores, los del Centro de Estudios para los Problemas Nacionales, a su creación. Su trayectoria, sus principales líderes históricos y su obra conjunta después de las garantías sociales, hacían presagiar que este partido estaba para más y que su desaparición traería épocas de oscurantismo en la política nacional nada convenientes para un país que les había servido para mostrar al mundo una organización político - electoral eficiente y que solo había perdido su derrotero por ambiciones espurias de algunos dirigentes de todos los niveles, quienes habían llegado a servirse y no ha servir como en un inicio fue la filosofía que inspiró a sus fundadores. Primera campanada de un pueblo que ya estaba despierto y seguro de que no sería engañado más y que cada vez más iba a exigir de sus gobernantes claridad y cuentas claras en le manejo de la cosa pública, sino, la fuerza del pulgar les haría recordar que ahí radicaba la fortaleza de un pueblo informado, todo ello en

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aras de no llegar a las medidas extremas, las que muchos aún pedían a lo largo y ancho de la patria de Justino. Los diputados que la tercera fuerza obtuvo y los que obtuvieron los liberales declarados, hacían presagiar una nueva manera de hacer las cosas en la Asamblea Legislativa, esa nueva forma sería el consenso, se debería estar muy claro en cuanto a lo que se proponía y como se proponía y si el proyecto había sido consensuado, porque de otra manera no pasaría. Por otra parte el ejecutivo debería saber qué enviaba y apoyaba en extraordinarias, porque correría igual suerte. La negociación, el pacto abierto y a los ojos de la ciudadanía vería la luz en este cuatrienio, algo que solo se soñó alguna vez y que desterraría de una vez por todas la confabulación y el amarre a cambio de partidas específicas o el pago secreto de favores o votos concedidos. La sociedad civil, conformada por organizaciones de todo tipo, entre ellos sindicatos, organizaciones no gubernamentales y un sector de la prensa ya más comprometido con las causas populares, estarían alerta para denunciar y/o participar en las reuniones a que fueren convocadas por las autoridades de gobierno para que mediante una nueva forma de hacer tertulia, se llegaran a acuerdos sobre los asuntos más espinosos de la patria. A no dudarlo, quizás aún había tiempo para variar el derrotero y con el acuerdo común salvar de la debacle a esta nación, la fuerza, como montones de veces se había dicho, radicaba en el mismo pueblo y en la atención respetuosa que las autoridades de gobierno le pusieran a sus gestiones e inquietudes.

- ¡Qué barbaridad! Siguen en las mismas vean que ya se inventaron desde hace un tiempo una carajada que se llama fondo de reconversión productiva y ello va a servir para que un montón de gente se robe los fondos de asignaciones familiares, si es que pareciera que tienen gente en la Asamblea dispuestos a colaborar con ellos para hacer leyes que les beneficien. Acuérdense de mí que ahoritica aparece un problema con esas platas y a cobrarle a picho, porque se van a desaparecer los responsables. - ¿De qué diablos estás hablando Justino? - Diay Toño, pues que hace un tiempo tiraron una ley que se llama de creación del fondo de reconversión productiva, que un principio tenía como un aire bueno porque vendría a canalizar una serie de fondos de la cajota chica que es asignaciones familiares, para incentivar la producción agrícola, pero por lo que he leído como que la cosa no anda bien y a las empresas o personas que les han dado fondos, se los han dado sin estudios de eficiencia y productividad que los respalden y tarde o temprano van a fracasar por que cuando eso ocurre la plata se gasta sin control y sabrá Dios en qué. Demos tiempo y no hablemos de ello pero ahí dejo la inquietud, porque estos fondos siempre se han prestado para eso, para malos manejos y son muy raras las personas o empresas que sí les sacan provecho. ¡Pa' verdades el tiempo…! - ¡Qué desgraciaos! Siempre es lo mismo, andan viendo que se inventan para seguir ordeñando las platas del pueblo, no te digo, si es que son como cortados con tijera, no viste en el gobierno pasado, ahí andaba un diputado con ganas de meterle mano a las tierras de las fronteras, con un proyectito que por dicha está desterrado en el archivo de la Asamblea, porque si lo logra pasar, ayúdeme señor, se hace cualquier cantidad de veces rico, porque ve vos como todo se junta, primero desalojan la gente de allá, de la frontera y después corren los mojones o al revés, bueno ya no me acuerdo y después que los han desalojado se aparece este proyecto. ¿Vos te acordás como andaba esa vaina Justino?

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- Claro que me acuerdo Toño. ¿Cómo no me voy a acordar si en esos sufrimientos estuvieron nuestros amigos y vecinos que sufrieron en carne propia las desgracias de esa movida, pero fue en la trasanterior administración cuando los desalojaron y los mandaron para aquellos suampos que el IDA compró a precios de oro y bueno, como todos sabemos esa ha sido la política de ese Instituto, hacer ricos a un montón de sinvergüenzas que tienen tierras botadas y se las logran meter al gobierno a buenos precios , con el cuento de desarrollar asentamientos agrícolas, total que la gente se va para esos lugares y se muere de hambre con sus familias. Eso se llama tapar el sol con un dedo, porque quienes ganan no son los pobres agricultores, sino los que lucran con esos peladeros vendiéndoselos al gobierno como si fueran fincones de vocación agrícola y ahora todavía más, se inventan ese programa de reconversión productiva para seguir sacando la plata de los pobres, porque a quienes menos llegan esas platas es a los que la necesitan, ya que se las dan a organizaciones o consorcios que llaman y que se han constituido con más de un vivillo adentro para llevarse esa plata. Pero acuérdense de mí para lo que va a servir eso, ahoritica se destapa ese tamal… - No les digo, se sigue dando el robo descarado de nuestros recursos. ¡Montón de cínicos…! Pero bueno hay un tema que me gustaría tocar y que no lo hemos conversado, ahora que estamos tan cerca del encuentro de tertulias y es ese de la reelección, me gustaría tocarlo porque eso se las trae y diay, si ese señor que anda de la seca a la meca trabajando pa' lograrlo y según se dice hasta tiene un equipo de trabajo encabezado por un hombre, ese que quiere ser alcalde de San José, que hasta le zumban las patas trabajando para eso y no me crean pero según se dice hasta a la Sala Cuarta está acomodándose, porque los magistrados que han ido nombrando en la Asamblea ya están palabreados pa' volase esa reforma que le impide a ese soberbio ser presidente de nuevo, a según él. Pa' no hablar más porque el tema ustedes lo conocen, me gustaría oír opiniones, diay pa' formanos una idea de cómo es esa vaina. - Muy bueno ese tema que plantea don Rafa, a ver, quién tiene algo que decir. - Yo lo que se es lo que oigo y veo en la tele, pero me parece que es una chanchada que alguien que ya tuvo una oportunidá, esté de necio pulseándola de nuevo pa' llegar a hacer lo que no hizo en aquella vez. Y es que ese señor que es el único de los expresidentes que ha dicho que quiere ya hasta agüeva con esa necedad. Acuérdense ustedes como sufrimos los agricultores cuando él fue presidente, nunca estuvimos tan mal, porque se interesó más en resolverle los problemas a los vecinos y en buscar el premio ese que tiene que ayudalo a uno, bueno Justino no me deja mentir si hasta él le dijo unas cositas en la inauguración de la escuela del Bajo. ¿Te acordás? Por cierto, qué jue lo que te dijo. - ¡Claro que me acuerdo Mamulón! Y sí, después y a los años le conté a Flor sobre lo que me dijo ese señor esa vez, lo que pasa es que vos estabas allá en el norte y no te enteraste y casi todos saben que lo que me dijo era eso, que él iba a estar pendiente de la marcha del país y que si de hacer un sacrificio extra se trataba, él lo haría para que los políticos malos y que llegaban a servirse y no a servir no se aprovecharan de nosotros para su beneficio. Algo así fue, es que no me acuerdo muy bien, ya que no le di importancia, pero ahora si vamos a tener que ponerle atención porque es una de las personas que más ha insistido en lo de la privatización de los servicios estratégicos y de la obra social, y, la pura verdad y viendo el ejemplo de otros países como Argentina por ejemplo, no es nada bueno, porque una empresa privada le interesa lo mejor del pastel, pero jamás le va a interesar darle servicio a clientes como nosotros, tan alejados del centro y si algo tienen nuestras instituciones es que han servido para eso, para extender la cobertura de los servicios básicos a cualquier rincón del país. Nada más imagínense ustedes si a una empresa de esas le interesaría un cliente de Sabogal de Los Chiles, donde vivían algunos del Bajo del Alumbre. ¿Ah? Jamás les interesaría porque el costo de instalación es muy elevado y el mantenimiento ni que decirlo, en cambio la empresa nacional, solidariamente nos carga a todos el costo de esos servicios, pa' que todos los reciban sin distinciones. - Bueno, pero, perdón Justino, no será bueno que personas con experiencia lleguen a la presidencia, así saben que no deben hacer y que hacer para beneficio de todos y máxime este hombre

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que acuérdense dijo que no necesitaba muletas pa' ser presidente y de verdá que no las necesitó. La puritica verdá es que a mí me gustan las personas así y repito, máxime si tienen experiencia en eso, porque ya no hacen tanta torta. Digo yo, no sé. - Puede que doña Carmen tenga razón, pero hay cosas que hay que valorar, me parece a mí y es averiguar cuáles son las intenciones de las personas que se lanzan de candidatos, porque a veces me pregunto, qué tendrá la presidencia que todos quieren llegar a ella y después andan hablando de que es un gran sacrificio, que no deja nada, que se pierde la salud, en fin, solo cuentos, pero no he conocido en los últimos tiempos uno que salga con una mano atrás y otra adelante como era antes. Mmm, quien sabe que será la cosa, pero a como uno oye y de los negocios que amarran desde ahí, quien quita y bien vale la pena ese gran sacrificio que dicen que hacen por llegar y estar en ella. - Cierto Miguelillo, hay algo de eso, es que se pone uno a ver cómo la pulsean y de que manera mueven cielo y tierra, bueno en este caso hasta el Olimpo del poder judicial, pagan abogados de renombre, otros prestan sus nombres como accionantes y coadyuvantes en las cuestiones de constitucionalidad, para lograr su objetivo. Acuérdense de mí que eso lo pasan, si la vez pasada no se pudo es porque había algunos magistrados plantados en que la reforma a la constitución era legal, pero ahora se están yendo por el lado de los derechos humanos y acuérdense de mí que se la vuelan. Todo lo han cocinado, como dice Justino, con madero negro y a fuego lento para no cometer los errores que cometieron la vez pasada. Bueno, pero dejen que me presente, mi nombre es Otto y soy amigo de Justino y de muchos de los antiguos habitantes del Bajo del Alumbre. Hay algunos que no me conocen y de casualidad y en vista de que tenían esta tertulia me invité solo y aquí estoy. Bueno pero sigan y gracias por permitirme escuchar sus comentarios y si me dejan meter la cuchara pues mucho mejor. - ¡Ah, es cierto! Algunos no conocen a nuestro amigo Otto, él fue el abogado que trabajaba en aquel tiempo con la confederación que dirigía don Manuel, que en paz descanse y que nos ayudó a lo de las parcelas del Bajo. Toda la vida viviremos agradecidos con ellos y en cuanto a don Manuel algún día se le hará justicia y por lo menos con una estatua al lado del doctor y de monseñor Sanabria, porque ellos tres son los que verdaderamente nos dieron las garantías sociales. Les decía que Otto es nuestro amigo y muy a menudo nos visita, ustedes lo deben haber visto en casa, pero hoy le dije que nos acompañara en la tertulia, ya que además de abogado es una persona muy preparada y con gran conocimiento de la situación del país. Ahora está en el centro y desde ahí sigue haciendo la buena obra de coordinar a nivel nacional las tertulias, por eso es que está aquí, para motivarnos a participar en el encuentro del mes entrante. Yo le he dicho que por supuesto ahí vamos a estar, como si no si nuestros problemas los hemos ido solucionando gracias a ellas y la verdad es que así ha sido siempre. Bueno pero Eric o don Ángel, qué opinan ustedes sobre ese tema de la reelección. - Al igual que Miguelillo, a veces uno anda con lo que ve en la tele o lee en los periódicos, pero allá en la unidad donde yo estoy y en la tertulia que armamos ahí algo hemos comentado sobre eso y con base en ello voy a decirles lo que pienso. A mí me parece que es un derecho humano el lanzarse cuantas veces uno quiera como candidato a cualquier puesto, aún y cuando ya haya ocupado, como en este caso, la presidencia. Lo que no me parece y me resulta sospechoso es que un hombre tan rico, con tantos galardones internacionales, ya mayorcito y con una vida aparentemente ordenada ya, quiera sacrificarse en aras de la patria, como dice él y entonces es donde uno se pregunta que qué tendrá entre manos y a quienes representa, porque si es cierto que es uno de los mayores impulsadores de la privatización de las instituciones o del abrir el mercado de los servicios públicos a las grandes empresas, pues que nos coja tatica Dios confesados porque si los servicios se venden, por lo menos algo le queda al país, aunque rápido lo gasten o se lo roben como en Argentina, pero si va a poner a competir al ICE, por ejemplo con una empresa gringa, como Bell o ITT, ahí sí que se la llevó puta, porque quién va a competir con esos monstruos, máxime con las amarras que le han impuesto a esa institución y que no le dejan crecer, aparte de las leyes de contratación y contraloría, así que señores, eso es lo que yo pienso, bienvenida la reelección, pero como un premio a una buena gestión y en eso somos soberanos gracias al voto, pero mucho ojo por quien vamos a votar, si es por ese señor, que se chupe el dedo y que los negocios a que

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se comprometió se los lleve el carajo. Acuérdense que él fue quien le dio a Millicon, esa empresa de Estados Unidos, en contubernio con ese muchacho que también quiere ser candidato la explotación de la telefonía celular y a cambio de nada, bueno por lo menos para el país… - ¡Puta Eric, que bien explicado todo eso! Muy atinado ese comentario y tengo que decir que yo estoy de acuerdo con Eric en casi todo, excepto en el modo en como se podría dar lo de la reelección, porque creo que es a la Asamblea Legislativa la que le corresponde hacer reformas parciales a la Constitución y en lo tocante a los derechos y garantías le tocaría a una asamblea constituyente y me parece que si la Sala Cuarta conoce y vota esas acciones, estaría asumiendo un poder que no le corresponde. Por lo demás y si el asunto pasa en esa Sala y quienes defienden la reelección se salen con la suya, creo que se debe iniciar una campaña de concientización al pueblo para que entiendan que el que se frota las manos con volver a ser presidente, no es la mejor opción para el país por sus ideas privatizadoras. Es cierto lo de Millicom y también es cierto que el Estado está o estuvo demandado por esa empresa por un cachimbal de millones de dólares ya que se sintieron perjudicados cuando se les quitó la concesión de explotación, la que habían obtenido a cambio de un plato de lentejas para el país, para los otros, quién sabe… Aparte de eso, también es cierto y ya hablando solo de ese señor, que cuando él fue presidente el sector agrícola de este país empezó su desgracia, de la cual no se ha levantado y dudo que lo haga máxime con los tratados de libre comercio que se oye se van a discutir y aprobar con los Estados Unidos de Norteamérica, ahí si que nos llevó la trampa, porque hasta las semillas tienen que ser aprobadas por la Organización Mundial de Comercio. ¿Y quién controla esa cosa? - Si me lo permiten me gustaría opinar sobre eso. - Por supuesto Otto, siempre tus comentarios serán bien recibidos y por favor no pidás permiso, estamos en confianza. - A lo que iba y para ampliar lo que ha dicho Justino en relación con los TLC, lo que tiene mucha relación con este señor que quiere reelegirse, es que lo que tratan de hacer las potencias económicas encabezadas por ya saben quien, es mantener un mercado cautivo para sus industrias multinacionales, controlar qué se siembra y cuanto se siembra para que no haya sobreproducción y deban venderse los productos a precios más baratos, en fin, establecer un control total del mercado mundial y la forma más práctica de controlar eso es mediante la firma de esos tratados que obligan a los firmantes a acatarlos, caso contrario se exponen a la quiebra, se expondrían a no ser sujetos de crédito, no podrán vender ni comprar, en fin se verían bloqueados económicamente y eso es catastrófico para un país dependiente como el nuestro. Así que señores, este señor, amplio conocedor de esas políticas económicas es quien quiere encabezar el pabellón nacional en esas negociaciones y gestiones de sometimiento total de nuestro país y sus vecinos, a las políticas económicas del siglo americano que han llamado los ricos norteamericanos, encabezados por el vicepresidente de ese país y que no es otra cosa que si somos obedientes y buenos amigos, ellos nos darán de sus migajas para sobrevivir, migajas como el turismo sexual, los sportbooks y el trabajo en multinacionales que se instalen en el país por sus condiciones pacifistas y culturales, con la certeza de que tendrán una mano de obra mucho más barata que de su propio país e igualmente preparada, por la inversión en educación que aquí se hace. Por otra parte, al firmar ese tratado nos comprometeríamos, como siempre lo hemos hecho por ejemplo con el narcotráfico, a cuidarles el patio trasero para que se respeten los derechos de autor, lo que les preocupa a sus multinacionales, por la cantidad de dinero que pierden con la piratería. En fin para que ustedes vean, es todo un negocio, a eso se reduce el asunto, a algo puramente comercial. Por ello en los próximos tiempos deberemos estar muy alertas, ya que si pasan ese tratado así como lo están planteando ellos, este país se convertirá en una colonia oficial del imperio y ahí si que no hay vuelta de hoja. Por ello es que he venido aquí hoy, para que en la tertulia nacional del otro mes se plantee este asunto y se discuta bastante para fijar una posición común y hacérsela llegar al gobierno. Es uno de los temas fundamentales, en mi criterio, ya que está inmerso todo lo que va a ser este país en el futuro y por dicha que está en nosotros revertir ese proceso. Disculpen que me haya extendido tanto,

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pero muchos me conocen aquí y cuando agarro el churuco me emociono y cuesta que lo suelte. Ese día la tertulia se extendió más de lo normal, ya que las intervenciones de Otto, Justino, Eric y los demás participantes, todos muy bien informados, hizo que esta adquiriera una importancia inusual, tanto por la cercanía de la tertulia nacional como por los temas que se tocaban, todos muy importantes y relacionados ya no con problemas locales, sino del país. A no dudarlo y si por la víspera se sacaba el día, la tertulia nacional estaría matizada por intervenciones muy bien tratadas en las tertulias locales, lo que daría un excelente producto final para exponerle al gobierno de turno, el que si dejaba pasar la oportunidad de escuchar la voz del pueblo, estaría sepultando la última oportunidad de enmendar su rumbo y encaminarlo por un derrotero de justicia social y dignidad para las mayorías, dejando de un lado los intereses espurios de quienes habían hecho de sus vidas una enorme boca para mamar del erario público y tomar los gobiernos de la nación como un instrumento para vender, venderse, comprar y comprarse. Este año era clave para lograr acuerdos concertados y llevar a la Asamblea Legislativa la mayor cantidad de proyectos que beneficiaran a las mayorías y de protección de los servicios estratégicos nacionales, haciéndoles más independientes, más competitivos y más solidarios con la población. Deberían terminarse las comisiones, las compras de tierras sin vocación agrícola, las granjerías logradas por sindicatos chupa - sangre de las instituciones, la explotación de las tragedias migratorias de otras naciones, los negocios con los fondos creados por ley parea los pobres y la apertura nacional de mentes y conciencias a los negocios con dineros sucios provenientes del exterior, manejados aquí a través de bancos, financieras, turismo, deportes, negocios de venta de tiliches y cuanta cosa se les ocurriera para lavar la sangre y el dolor causado por aquel dinero. Era este país reconocido en el mundo por ser una mampara financiera para que los delincuentes enviaran aquí el producto de su esfuerzo delictivo, donde encontraban mano de obra intelectual para su administración. Eran muy frecuentes los ajusticiamientos al puro estilo de los mafiosos a aquellos que mal les administraban los negocios y a los que les denunciaban y ya un periodista había pagado con su vida su valentía para denunciar los negocios oscuros de muchos ciudadanos, aparentemente respetables, de nuestra patria, quienes contrataron sicarios para eliminar esa voz cargada de amor por la nación adoptiva y así terminar con el verbo de denuncia valiente y no callada por puestos, prebendas o amenazas. Su vida había acabado al más puro estilo de la mafia y la forma en que fue ajusticiado, con balazos en su boca, denotaba que era ese el fin que se perseguía, callarlo. Parmenio Medina Pérez se convertía así en el primer periodista que pagaba con la vida su abierta cruzada contra la corrupción, contra el clientelismo y contra el cinismo de muchos costarricenses. En el pasado, otros periodistas debieron escoger la extradición o el asilo en otros países por cuanto las amenazas ya no les dejaban denunciar con valentía los negocios oscuros en que estaban cayendo algunos y cada vez más respetables ciudadanos, políticos y profesionales de nuestro país, por ello y en aras de proteger su integridad y la de sus allegados, prefirieron migrar a otras naciones. Mas nunca las amenazas se habían convertido en realidad, hasta que el mártir Parmenio inició la zaga, porque a no dudarlo eso continuará, a menos que aquellos permitan que controlen sus plumas o compren sus conciencias y se conviertan en prensa al servicio de esos oscuros intereses, como ha ocurrido y está ocurriendo en otros países.

EL CAMINO A SEGUIR: EL GOBIERNO LOCAL. 155

El Primer Encuentro Nacional de Tertulias, que organizaron los personeros del centro en la Universidad y al que acudieron representantes de las más de cinco mil tertulias que había en el país, tuvo a Justino y compañeros en un desasosiego y muy ocupados, por cuanto sabían que lo que se estaba gestando era el producto de veinte o más años de discusión de los problemas nacionales, veinte años de concientizar al pueblo costarricense de la importancia de la participación popular en la solución de los problemas nacionales, de muchos años de informar debidamente a la población de que si se mantenían alerta de los movimientos de los políticos de profesión y discutían abiertamente y con tolerancia de las opiniones ajenas, se llegaría a concertaciones en aras de buscarle solución a los problemas locales, regionales y nacionales. Habían quedado claros de que los problemas de San Miguel aunque se parecieran, no eran los mismos de Nandayure, Corredores, Los Chiles o Talamanca y que la misma receta era inaplicable para resolverlos y que por lo tanto, el gobierno debería dejar esa solución a los gobiernos locales quienes y gracias a las tertulias tenían el panorama bastante claro para su solución. Habían llegado a excelentes acuerdos en el encuentro y estaban seguros que serían muy bien escuchados por las autoridades nacionales en la cita que estarían pidiendo próximamente. Las propuestas que harían y que esperaban tuvieran eco era que el gobierno central debería convertirse en administrador de los asuntos macro. Cobrar en debida forma y sin miramientos y distribuir los impuestos nacionales eliminando la defraudación con cárcel para los evasores, atender la deuda pública, fijar el derrotero en las relaciones internacionales, manteniendo nuestra soberanía con dignidad, dirigir la política nacional en salud, la cual estaría desconcentrada a nivel cantonal y canalizar con los otros poderes de la república la solución de los grandes problemas nacionales, mediante la emisión de las leyes necesarias, si es que hacían falta o bien exigir su aplicación correcta y apegada al derecho y a la justicia. La seguridad interna y la protección del ambiente deberían estar en manos de los gobiernos locales ya debidamente preparados para asumir el reto, toda vez que ellos sí saben cuáles son sus necesidades en ese campo y cuál su problemática local, distrital y cantonal. Únicamente se debería contar a nivel nacional con una fuerza pública especializada en atacar de raíz los grandes problemas internacionales, como el narcotráfico y sus derivaciones, como el turismo sexual, los juegos, las inversiones dudosas, los aumentos de capital sospechosos tanto de nacionales como de extranjeros, la banca, las financieras, el comercio de mampara, algunas ventas de autos, etc., los movimientos migracionales, la trata de blancas y el terrorismo. Mediante el fortalecimiento de las instituciones y mecanismos de protección, debería garantizarse en el país la seguridad registral, o sea que cada cual y si los poseía, estuviera seguro de que sus bienes muebles e inmuebles serían intocables a menos que mediara su expresa voluntad escrita. Para ello la propuesta iría encaminada a que cada cual poseyera un título o certificado de propiedad de sus bienes, el que debería traspasar cuando traspasara el bien, así se evitaría que a través de notarios delincuentes se falsificaran firmas y se hicieran traspasos de bienes La educación debería seguir en manos del poder central, sin embargo debería trabajarse en programas regionales y acordes con el desarrollo local, manteniendo una estructura básica de conocimientos generales pero con la posibilidad de dar énfasis en la problemática local y con libertad de cátedra para hacer de los alumnos y profesores ciudadanos más críticos y conscientes de su entorno. Los programas rígidos y estrictos deberían desaparecer de la educación nacional y cambiarlos por programas vivos y atentos al cambio, fomentando la tertulia para llegar a acuerdos sobre lo que más conviene al educando y al profesor y por ende a la comunidad. Se debería instaurar un régimen de méritos y estímulos para los destacados no solo académicamente sino como personas preocupadas por su entorno, para los mejores profesores del circuito, elegidos por quienes reciben de ellos la instrucción y para los mejores centros educativos no solo por la calidad de su educación sino por la proyección comunal, con ello, mediante la competencia, se llegaría a la excelencia académica y comunal.

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El deporte se manejaría a nivel cantonal, gracias a los comités creados al afecto y en los cantones de mayor proyección y hasta donde las posibilidades lo ameritaran, deberían existir entidades educativas con énfasis en disciplinas deportivas, para que los talentos en ese campo, pudieran hacer ahí su educación primaria y secundaria, con énfasis en el área deportiva de su predilección; ello nos aseguraría unos juegos deportivos nacionales de excelencia y obviamente una generación de deportistas de alto rendimiento en todas las disciplinas deportivas que traería beneficios internacionales a mediano y largo plazo. Los fondos recaudados a través de las leyes sociales, como las de asignaciones familiares y otras, deberían distribuirse únicamente para los fines que persiguen y no destinar suma alguna para pago de personal o su administración, para ello los gobiernos locales tienen su plataforma administrativa debidamente montada y conocen mejor que nadie su problemática, de ahí que esos recursos deban ser traspasados porcentualmente a cada uno de ellos. En cuanto a los TLC, sobre todo el que se discutiría con los Estados Unidos, a la apertura del monopolio de los servicios estratégicos y a la protección de los derechos de autor, se solicitaría vehementemente que se saque de las conversaciones lo tocante a esos puntos a menos que se consiguieran garantías y subsidios agrícolas semejantes a las que se conceden en ese país a sus nacionales. O sea se pediría un trato recíproco, sin restricciones y de iguales, no de inferiores, logrando un tratado justo y equitativo, sin ataduras y con posibilidad de denuncia en caso de inconveniencia o violaciones. No debe atarse al país ni a las generaciones futuras con tratados colonialistas. ¡No es justo! Con esas propuestas, seguros estaban los presentes se estaría ayudando a la nación a encontrar su derrotero, corregir el rumbo y encontrar las soluciones con la amplia participación de la ciudadanía, pero una participación no limitada a la emisión del voto cada cuatro años sino una participación más comprometida y vigilante de las actuaciones de las autoridades temporales. Esa participación estaría también marcada por la posibilidad que ahora sí tenían todos de elegir y ser electos y era ahí donde entraba en juego la posibilidad de reelección a la que todos tienen derecho, ya que esta se daría si la gestión había sido buena y en aras de los mejores intereses comunales y nacionales.

- Bueno compañero Justino, creo que hemos llegado a buenos acuerdos, ahora todo está en que el gobierno las acepte y de verdad las implemente, porque si no lo hace y nos vacila, quién se aguanta a este pueblo. Es que vos no sabes como nos ha costado mantener a la gente en calma y con la esperanza de que de este encuentro el gobierno presente y los futuros corrijan el rumbo del país. Yo te conté el otro día, hay gente allá en los montes que nos han pedido armas, porque dicen que es mejor ponerle el pecho a una bala que ver a sus hijos aguantar hambre, ya que están perdiendo sus fincas en remates y la agricultura de por sí no les da, porque nadie les compra al precio justo. En fin crucemos los dedos para que todo salga bien. Me alegra mucho que hayás salido electo como miembro de la comisión que irá a la presidencia a presentar nuestras propuestas, porque sé muy bien que a vos no te bailan y podrás muy bien darte cuenta de si lo que nos ofrecen es un plato de babas. Recuerda Justino, amigo mío, que ya no es un asunto local, es un asunto de interés nacional, es la salvación de este país, son las propuestas que podrían eventualmente salvarnos de caer en lo que otros ya han vivido y eso no lo merecen nuestras familias, así que amigo y compañero, te dejo para que pongas de acuerdo con los otros cuatro representantes. Dame un abrazo para desearnos suerte. - ¡Claro, venga ese abrazo mi amigo y compañero! ¡Ah y gracias por proponerme! Vos sabés que pa' mí es un honor y diay, trataré de hacer y dar lo mejor, porque en eso tienes razón, está en juego la paz social de este país. Que te vaya bien Alberto y me ha dado mucho gusto saludarte y participar con vos en esta gran reunión, a no dudarlo es lo más grande que le ha pasado a este país desde las garantías

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sociales, ahora todo está en que de verdad nos escuchen y pongan interés en lo que vamos a proponerles, aunque ya deben saber por donde va la procesión. ¿Viste a esa gente de la presidencia que estaba atrás? - Sí, ahí los vi, es más conozco a dos de ellos, son asesores del presidente, les saludé y me alegré de que estuvieran interesados en nuestra reunión. Así que mi amigo, cuando lleguen ustedes por allá, ya van a estar sobre la jugada y no los van a tomar por sorpresa, lo que es mejor, ya que más rápido se podría llegar a algún acuerdo. Después de que se despidió de su amigo y compañero Alberto, Justino pasó a un aula cercana del salón y mientras comían algo que les sirvieron, se pusieron de acuerdo en tiempo y forma para presentarse a la presidencia y exponer ante las máximas autoridades del país los acuerdos a que habían llegado en el encuentro. Los otros cuatro representantes electos en esa oportunidad representaban a varias regiones del país, Diógenes representaba al sur, Fabián; representaba a la zona norte; Ana al sector del Pacífico; Marvin representaba al Atlántico y Justino por supuesto, representaba a la región central del país, todos ellos coordinados por Enrique, representante del Centro. De todos sólo Fabián tenía experiencia política, ya que había sido diputado en una oportunidad y había ocupado varias veces puestos importantes a nivel cantonal, siendo actualmente alcalde de su cantón y presidente de la liga de municipalidades de su provincia. Los demás, la experiencia que tenían era la de servicio comunal y la lucha en sus regiones por reeducar al pueblo y hacerlo más partícipe consciente y bien informado en la lucha por un mañana mejor. A lo más que habían llegado era a estar en organizaciones no gubernamentales, ambientalistas, de protección a los ciudadanos, de los consumidores, de desarrollo comunal y en cooperativas, pero esos años de experiencia les había valido para ser electos representantes de aquella gran asamblea del pueblo, representación que llevarían orgullosos.

- Buenas señores, me voy a permitir presentarles a un señor que es articulista y que a través de sus escritos llamados las chispas pretende de una u otra manera informar al pueblo de todo lo que sucede y de cómo unos vivillos se sirven de el para jalar agua a sus molinos. Don Ricardo hoy se va a referir a un tema del que hemos hablado en los últimos tiempos y es el de la reelección. Sus exposiciones son muy valientes y con un gran amor por este pueblo y ojalá todos aprendiéramos de él y que no nos dejáramos meter diez con güeco. En la reunión general de las tertulias Justino había conocido a un articulista y fiel a su deseo de que el pueblo conociera más de su triste realidad, le había invitado para que se presentara en una de las tertulias ampliada de San Miguel y que se refiriera a un tema que a todos interesaba, el de la reelección presidencial. - Con mucho placer he aceptado estar hoy aquí con ustedes y agradezco a Justino el que me haya incluido en este asunto de las tertulias, hace tiempo he estado esperando una oportunidad para dirigirme al pueblo y si este es el arranque, pues en buena hora inaugurarme aquí en San Miguel, una comunidad tan organizada y despierta, es un honor. Me voy a referir como dice mi amigo a un tema que se las trae y es el de la reelección presidencial que nos retrata de cuerpo entero en cuanto a lo que es ser latino. Mis comentarios escritos yo los llamo "chispas", porque pretendo que sean eso, desencadenantes del fuego que debe iluminar a estos pueblos para que no se dejen más de las clases políticas, porque considero que en la indolencia cívica del ciudadano, se fundamentan los abusos del poder.

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"En dos “Chispas” anteriores, nos hicimos la pregunta formal acerca de si hay razas inferiores. Y aunque esta pregunta retórica solo fue un pretexto para tocar otro tema relacionado, ahora la planteamos de manera directa y específica. ¿Qué pasa con los latinos? La conducta política colectiva de nuestros pueblos, parece ser menos (mucho menos) inteligente que la de las hormigas. Y no importa la mayor o mezcla de indio o europeo que tengamos, nuestra actitud política y la forma como encaramos los problemas nacionales, acusan una torpeza propia de animales (con perdón de estos) Aunque la verdad, jamás he visto a un animal o colectivo de estos, que incurran en las necedades incalificables a que llegamos los hombres. Un expresidente de Costa Rica dijo que este era un “pueblo domesticado”. Gran decir, que yo haría extensivo a todos los pueblos de la América Latina. ¿Qué es la política para el ciudadano de estas latitudes? ¿Una especie de lotería o ruleta rusa? Se dice que hay bestias y bestezuelas que nunca aprenden nada nuevo y que siempre hacen lo mismo. Entre ellos se señala a las termitas, abejas y hormigas. Pero aunque siempre siguen la misma rutina y no hacen innovaciones perceptibles en su trabajo, al menos lo ejecutan a la perfección. Jamás he sabido de una panal que se caiga porque estuviera mal construido. Pero ¿qué pasa con los latinos? Ni siquiera tenemos la categoría de las termitas o abejas en materia política. A los ojos de los europeos o gringos, nuestras parafernalias políticas de cada cuatro o cinco años, son un deplorable y patético espectáculo circense que a nada conduce. Innumerables payasos de todas las categorías participan en nuestras ridículas elecciones, y basta con que hagan gala de la más desaforada demagogia, para que millones de latinos voten por ellos y los lleven a la presidencia de sus respectivos países. Allí están los tristes ejemplos de Bucaram, Alan García, Alemán, el Hiroito peruano y tantos otros que, además de ineptos como políticos, resultaron ser unos ladrones descarados. Nada hemos aprendido en tantos años de independencia y vida democrática. En cada uno de nuestros países hay pequeñas camarillas de pillos que controlan la organización política de las masas, mediante los famosos PARTIDOS POLÍTICOS, los cuales constituyen la peor lacra de nuestras sociedades. Ellos son los que montan el circo electorero en el que, indefectiblemente, el pueblo como un manso, tonto y gigantesco animal, es conducido a dar su aprobación a un sistema político que es de unos pocos. Un sistema que es irresponsable y que no representa, en forma alguna, la voluntad popular. No importa los daños que hagan al país, no existen mecanismos legales para hacerlos pagar. Los gobiernos en la América Latina son UNA FARSA que nada tiene que ver con los ideales de la democracia auténtica. ¿Cuáles son las motivaciones internas de un latino cuando va a las urnas electorales? ¿Cree acaso que los cambios hacia la mejoría se producirán espontáneamente? ¿Es tan ingenuo nuestro elector que supone que las camarillas del Poder van a soltar las enormes tetas del gobierno, en beneficio de las clases populares? ¿Cree nuestra gente que los gobiernos van a arreglar los problemas de la sociedad? ¿Cree el elector que el sujeto que decide reelegirse lo hace por amor a su pueblo y porque tiene un profundo espíritu de sacrificio cívico? ¿Hasta allí llega su simpleza o indolencia? El conformismo del latino ante la fatalidad a que lo conducen sus gobiernos es enfermizo. Nuestra gente da por un hecho que es inevitable que las cosas caminen mal y que cada día estemos peor. No tenemos metas superiores en cuanto a los gobiernos, y una vez que ejercemos el voto, delegamos por completo toda responsabilidad política en las respectivas gavillas que forman el “gobierno democráticamente elegido”. Automáticamente, con la emisión del voto, renunciamos a nuestra sagrada obligación de velar cómo se manejan los asuntos del Estado, QUE SON NUESTROS ASUNTOS. Pareciera que una vez que hemos emitido el voto, le damos gracias al cielo de que otros se encarguen de la misteriosa labor de gobernar. No ejercemos nuestra obligación moral de contralores de los negocios del Estado, así como tampoco parece importarnos qué se hace con las finanzas públicas, QUE SON NUESTRAS FINANZAS. Impunemente permitimos que los hombres que forman el Gobierno, como si fueran dueños del Erario, dispongan de nuestro dinero en beneficio de camarillas privilegiadas que, casi siempre son los mismos que están en el gobierno. ¿Cómo permitimos tan

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tranquilamente la devaluación de nuestra moneda en beneficio de unas cuantas cámaras, y en perjuicio de toda la enorme masa trabajadora del país? ¿Cómo diablos es que a nadie parece importarle este vital asunto de nuestra economía? ¿Pueblos domesticados? ¿Por qué ningún gobierno da la menor explicación del porqué de la DEVALUACIÓN? Pero no una explicación en términos esotéricos para enredar a una población desconocedora de la terminología técnica. Que el gobierno le explique de qué manera le beneficia a usted una devaluación que le ha producido la siguiente situación: si usted ganaba (50,000) cincuenta mil colones en enero del año 1990, lo cual equivalía a $ 595 dólares con el tipo de cambio de 84 colones por un dólar, ahora con esos mismos cincuenta mil colones usted solo puede comprar $ 127 dólares. Que lo convenzan, SI PUEDEN, de que es mejor para su economía personal ganar $ 127 dólares en lugar de $ 595. Y por si fuera poco todo el daño que estos gobiernos ineptos y corruptos le hacen a sus respectivos pueblos, se inventan el asunto de la REELECCIÓN. A vista y paciencia de pueblos indolentes, a los cuales parece importarles un tacaco quiénes se encaraman en la maquinaria del poder. Y no solo es cuestión de indios brutos, lo cual sería una débil pero válida excusa, pues en países como Perú, México o Guatemala, bien sabemos que los indígenas no pintan nada desde el punto de vista político. Ese golpe bajo también se ha dado en Costa Rica, país europeizado, culto y, supuestamente, con grandes conocimientos y valores cívicos. ¿Cómo es posible que grupúsculos de sujetos, desde la penumbra o desde sus puestos públicos, se presten para allanarle el camino del retorno presidencial a individuos cuya función pública fue menos que nula? ¿A qué regresa un tipo de esos a la Presidencia de la República? Si nada hizo en su oportunidad, ¿por qué habríamos de creer que en la próxima sí lo hará bien? Se ha dado el caso de diputados, de esos que repiten curul, que durante el ejercicio de sus funciones, solo han abierto la boca para bostezar. Si un jugador de fútbol ha sido malo en su juventud en un equipo determinado, ¿por qué habría de ser bueno, cuando es más viejo? Y en el caso de los políticos no es solo el peligro de que sean malos para el pueblo, sino que hayan refinado sus mañas para amasar mayores fortunas personales desde la función pública. Algún negocio “tigre” que no se les ocurrió la vez anterior, ahora lo tienen maduro, bien medido y cuentan con todas tácticas que provee la experiencia política en el arte de engañar y beneficiarse de la Hacienda Pública, algo así como los CAT’s, que han llevado miles de millones a los bolsillos de unos cuantos privilegiados. La reelección solo debería ser permitida cuando un Presidente, en el ejercicio de sus funciones, ha demostrado ser un elemento valioso que ha conducido al país por la senda del progreso, la paz y la felicidad. A ese individuo sí se le debe premiar reeligiéndolo. Pero ¿por qué a uno de tantos sinvergüenzas buenos para nada, que han ocupado la silla presidencial por casualidades de la vida, y gracias al sistema politiquero que tenemos? En Costa Rica hemos tenido presidentes que lo han sido PORQUE EL PARTIDO YA NO TENÍA A QUIÉN PONER. O bien, porque después de “pulsearla” varias veces, el electorado le ha dado el voto por aburrimiento de tanto verlo. Y el caso más patético de la reelección, lo hemos visto ayer en la Argentina. Un pueblo depauperado por una pandilla de bandidos banqueros, que han contado con el contubernio del Estado para cometer todo tipo de fechorías. Un grupúsculo étnico ajeno a la familia argentina, en combinación con políticos corruptos de esa nación, han hecho de ese gran país, que tiene de todo para ser “primermundista”, una caricatura lastimosa de lo que otrora fue una nación orgullosa y rica. Y NO son indios, como los bolivianos o peruanos. La gente más bonita de América, europeizados, con gran nivel de escolaridad, con casi tres millones de kilómetros cuadrados de territorio que contiene hierro, uranio, plomo, cobre, manganeso y petróleo. Tienen una buena industria siderúrgica y las bases para todo tipo de industria liviana. Tierras de sembradío abundantes, ganadería pujante. El fútbol más bonito y el tango. La red ferroviaria más avanzada de América Latina, miles de kilómetros de carreteras y muchas ventajas más. Entonces, ¿qué pasa en Argentina?

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¿Es sintomático de una “raza” inferior, la reelección de un candidato que apenas hace unos años fue repudiado por corrupto? ¿Cómo es posible que la elección de presidente se haga en Argentina entre un sirio y un Kirchner? ¿No hay en ese país otros hombres, argentinos de nacimiento y sentimientos, capaces de enderezar el rumbo de tragedia que lleva esa nación? No puede ser que solo ese pequeño payaso cabezón con apellido de talco, sea la única alternativa que tengan los argentinos para salir de la debacle en que se encuentran. Sin embargo, la reelección de presidentes en nuestra maltrecha América Latina, es el retrato de cuerpo entero de lo que somos. Quiera Dios que no nos pase lo mismo en Costa Rica, y que no tengamos que salir a repetir los vivas tradicionales a figuras gastadas, que YA NO TIENEN NADA NUEVO QUE DECIRLE A UN PUEBLO QUE BIEN LOS CONOCE Y SABE LO QUE HICIERON." Bueno así pienso yo y de verdad estoy muy agradecido con todos ustedes por esta mágica oportunidad de poder exteriorizar mis pensamientos, compartiendo con tan selecto grupo de ciudadanos mis inquietudes. - ¡No qué va don Ricardo! Aquí los agradecidos somos nosotros por su presencia en esta reunión, no sabe cuanto aprendemos de personas como usted y si cualquier día desea volver a visitarnos, pues bienvenido sea que de verdad y como usted lo dice, la gente de aquí ya ha despertado y gracias Dios no se dejará engañar más y, como usted pudo apreciar en la tertulia nacional, me parece que es así en todo el país, ojalá no me equivoque, pero tal vez esto tenga arreglo, claro la principal arma va a ser la participación ciudadana y si no, como dijo Enrique ese día, pues es mejor ponerle el pecho a una bala que ver a nuestros hijos convertidos en esclavos, pero no en una esclavitud como la que conocemos en los libros o en las películas, es otro tipo, la del consumismo, la de la prostitución, la de los juegos virtuales, la de las drogas, la de los sportbooks; un tipo de esclavitud más dañino y encaminado a convertirnos en los serviles de ese imperio genocida, en lo que han llamado el siglo americano, pero entendido a como ellos lo entienden, americano de allá, no de aquí. Nuevamente muchas gracias de corazón don Ricardo y de verdad cuando quiera, como puede apreciar, todos los jueves nos reunimos las tertulias de todo el cantón aquí en la cabecera, así que cuando lo desee no necesita invitación, siempre será un placer escuchar o leer sus comentarios. *************** *****************

EL TIEMPO CONVERTIDO EN VERDAD A pesar de las buenas intenciones que pudieran tener los representantes de las tertulias y que en los próximos días serían recibidos por el Presidente de la República y sus asesores, ellos sabían que las condiciones actuales del país no permitían cifrarse grandes expectativas, toda vez que, los funcionarios de los organismos financieros internacionales le tenían cercenada a la administración su poder de decisión, salvo las medidas de apremio y cosméticas para parar la insurrección popular que ya se gestaba en el alma de la ciudadanía. Una huelga de funcionarios del Instituto Costarricense de Electricidad, convocada y comandada por el Frente Interno de Trabajadores de la Institución y que culminó con una gran marcha de la victoria, hizo temblar las estructuras presidenciales y aparte de dos ministros importantes para los organismos financieros, que renunciaron, logró que el Banco Central a regañadientes aceptara la emisión de bonos para el financiamiento y sostenibilidad de la empresa estatal y sus programas y proyectos solidarios con las mayorías. Posteriormente, una huelga de maestros concluyó después de más de un mes con una oferta de

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envío al Congreso de un proyecto de ley para socializar sus jubilaciones, lo que sin embargo, no les da la certeza de que se apruebe, pudiendo por ende volverse a decretar el paro de ese importante y neurálgico sector de la clase trabajadora. En síntesis, conscientes están Justino y compañeros de que el país está entrando en una escalada de protestas populares como llave de escape a la presión que por tantos años ha soportado el pueblo en sus bolsillos, anhelos e ilusiones. Se han sucedido los gobiernos uno tras otro y ninguno ha llegado a servir a las clases menos protegidas, por el contrario, la desaparición de la clase media ha traído consigo el creciente aumento de un sector de la población cada vez más descontento y desilusionado. Sentimientos que se manifiestan en sus conductas morales y sociales. El no compromiso y la escasa participación en la política electoral es una señal clara de la realidad del país, en el que el aumento de la violencia doméstica, aunada a la violencia en las calles, lleva a los dirigentes a pensar que la modificación de los tipos penales y las sanciones a su violación será la panacea para eliminarla, cuando la realidad es otra. Ese incremento en la violencia no es otra cosa que el fiel reflejo de un pueblo tremendamente desilusionado por los engaños a que ha sido sometido a través de décadas y por los "políticos de carrera" y por el pleno conocimiento de que su situación económica agravada por el consumismo a que es inmisericordemente inducido por la propaganda no tiene solución. - ¿Sabés una cosa, Justino? - Sí, Miguelillo – Respondíole aquel mientras terminaba de ajustar el alambre del portillo que acababa de abrir para encerrar a los terneros. - Que con lo del TLC, eso ya es compadre hablado y que de seguro a ustedes ahora el lunes cuando vayan a la Presidencia, les van a dar atolillo con el dedo, porque ese señor ya no es amigo del pueblo, es más, yo creo que nunca lo ha sido, todo ha sido, como dijo Otto el otro día, un cosmético para la publicidad del engaño y que les va a sobar la leva, los va a abrazar y les va a agradecer su interés por la solución de los problemas nacionales, les va a publicitar lo que se está haciendo y les dirá que el aporte de ustedes será tomado en cuenta para las acciones del gobierno. Acordate de mí que así será. -Pues sí, vos no sos maje y tenés toda la razón y es más, en las tres o cuatro reuniones que hemos tenido los representantes nacionales de las tertulias, ya lo hemos valorado, por ello es que lo que haremos con ese señor no es enseñarle nuestros acuerdos, sino exigirle una posición clara y pública de que tratará en la medida de lo posible de darle solución a los problemas señalados y de que trabajará para implementar las ideas que el pueblo le está señalando, como una última posibilidad de enmendar su rumbo y que si no lo hace, llamaremos a la sociedad civil a una huelga indefinida de no pago de impuestos, tasas y tarifas de servicios públicos, que es lo que hemos acordado a nivel de todo el país en las tertulias y de lo que hablamos el sábado en San Miguel, como vos pudiste haberte dado cuenta. Por otra parte, amigo mío, sobre el TLC, es cierto, ya eso está cocinado, si tomamos en cuenta que las personas que negocian por nuestro país son pro Estados Unidos y hasta pagados, como el caso de la jefa negociadora, con fondos de ese gobierno, la suerte esta echada, muchos empresarios pequeños creen que con eso ellos se salvarán y lo que menos piensan es que los van a comer con todo y zapatos y que los que se van a beneficiar son los grandotes y por supuesto los norteamericanos. ¿Cuándo has visto vos que un rico haga negocios con vos para tratar de salir tablas? Bueno, solo don Félix, que de Dios goce y después Felicillo, pero son casos muy raros. El fin de semana siguiente Justino debería reunirse en El Centro con los otros cuatro representantes nacionales de las tertulias para afinar detalles de su comparecencia ante las autoridades del ejecutivo, el siguiente lunes y desde ya, se aprestaba mentalmente para tan importante tarea. - Una cosa es importante, Justino, y es que cuando el lunes ustedes estén ante el presidente, tengan presente que ustedes son ciudadanos en el pleno ejercicio de sus derechos constitucionales y que están actuando en virtud de un mandato de una asamblea y que ello les da a ustedes la voz y representación de no menos doscientas mil personas, lo que ya es una fuerza respetable y que ustedes

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deben tener mucho cuidado de no salirse de sus casillas y mantener la coherencia y tranquilidad. Expongan y escuchen, no hagan comentarios extra y no cedan, esas son las propuestas de las tertulias y la tarea de ustedes es esa, exponerlas, explicarlas por si ese señor no las entiende. Recuerden que él es siquiatra y el otro señor no sé que será, pero es muy hábil y ha aprendido del arte de la política muy rápidamente. Les pueden meter una corta y otra gruesa, para tratar de enredarlos y manipularlos. Les voy a repetir lo que dice Enrique, este señor es una marioneta del triunvirato político-económico que gobierna este país y del que hemos hablado largo y tendido en los últimos tiempos. Por otra parte, la vida ha sido buena con ustedes, la verdad es esa, tener el honor de representar a un conglomerado como el que se reúne en las tertulias de todo el país, eso es motivo de orgullo. Esos eran los consejos que les daba uno de los funcionarios del Centro a los delegados de las tertulias y que el siguiente lunes estarían exponiendo ante el presidente y su ministro de la presidencia los planes y proyectos que consideraban los tertulianos de todo el país prioritarios para sacar al país del atolladero al que lo habían llevado los políticos y sus titiriteros. Sabían de antemano y con la eventual aprobación del tratado de libre comercio con los Estados Unidos de Norteamérica , que la suerte estaba echada para los pequeños agricultores, industriales y beneficiarios de la obra social. Este ya había sido negociado de previo y que las denominadas rondas de negociaciones, no eran más que una mampara cosmética para tratar de engañar al pueblo y a los ilusos de que se estaba tratando de sacar lo mejor para el país. Una campaña publicitaria que apareció un día después de que se suspendieron las negociaciones y cuando los demás países de Centroamérica ya habían firmado, nos mostraba cuán preparados estaban “los negociadores” para hacerle creer al pueblo que a “nuestro mejor socio comercial” podíamos perderlo si no firmábamos el tratado y que por ende, si eso sucedía, a este país se lo llevaría puta. A no dudarlo, el plazo que se habían dado “los negociadores” y esa campaña publicitaria, serviría, según ellos, para que el pueblo entendiera que el tratado sería la panacea para aliviar los grandes problemas socio-económicos de este país y que la no firma acarrearía que los gringos nos volvieran la espalda, condenando al ostracismo a nuestra nación. - De una cosa si estamos seguros y es que cuando el lunes lleguemos a la presidencia, vamos a ir monolíticamente y con las propuestas bien claras y les vamos a dar a entender que este pueblo ya no come cuento y que si no son aceptadas nuestras inquietudes, planes y proyectos, estamos en capacidad para hacer un llamado a la desobediencia civil, para que la gente no pague impuestos, tasas por servicios ni los servicios básicos y que las medidas se mantendrán hasta que sean aceptadas, ya que no son nada del otro mundo y su único fin es el de salvar a este país. Es que se pretende desmantelar la obra social, que costó hasta sangre en el pasado y para beneficio de unos pocos y muy pocos por cierto... - Cuánta razón hay en tus palabras, Diógenes, sin embargo les anticipo y sin ánimo de ser pesimista; les van a responder que nuestras propuestas serán ampliamente estudiadas por el equipo económico y social del gobierno y que si son viables van a ser incorporadas en el Plan de Desarrollo o bien se elaborarán los proyectos de ley y serán enviados en la próxima convocatoria de la Asamblea Legislativa a extraordinarias, eso sí, una vez que sea aprobado el Tratado de Libre Comercio, porque esa es la prioridad ahora y que cuando los proyectos estén en la Asamblea el pueblo deberá presionar a los diputados porque serán ellos los que deberán dar la aprobación a los mismos. Por ahí va a andar la vaina, se los apuesto. - Sí, Enrique, yo se que vos sos la voz centrada, dura y objetiva del Centro y que eso que estás diciendo no es más que una voz de alerta para que no nos desilusionemos, pero sin embargo, debemos cumplir con la obligación de poner en sus manos nuestros acuerdos y que si no les dan importancia y los tiran al mejor archivo del mundo, o sea al basurero, la historia les juzgará su inoperancia y les hará culpables de lo que suceda de aquí en adelante.

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- Tiene mucha razón, Fabián, pero lo que dice Enrique me pone a pensar; en caso de que nos den atolillo con el dedo, el pueblo debe estar preparado para tomar las decisiones que deban tomarse y, en nuestro caso, por lo menos, en la tertulia central de San Miguel y todos sus apéndices de los distritos y caseríos ya se ha hablado de las medidas a tomar, no sé si en los demás lugares se ha hablado algo al respecto, por lo que me gustaría escuchar sus opiniones. Por lo menos en San Miguel la gente está bien caliente y no sabemos qué podría pasar. - Mirá, Justino, una cosa sí tenemos clara los limonenses y es que si el país sigue como va y como lo hemos conversado sobradamente, allá en el puerto y sus cantones se está gestando todo un movimiento de protesta que llevará al cierre de los muelles y la refinadora por el tiempo y al costo que sea, entre otras medidas y ya no habrá pero que valga, porque el movimiento lo dirigirá el pueblo y no los sindicatos, a los que al final, con raras excepciones, siempre cuentean. - Bueno, eso que dice Marvin es alentador, es bastante para empezar a presionar y vos Ana, qué se ha hablado en el Pacífico al respecto? - Diay, hasta la pregunta estorba, no se dan cuenta ustedes que con la flota china llevándose nuestra riqueza pesquera y con los adelantos que ellos tienen, como ecosondas, radares conectados a satélites y hasta helicópteros, nuestros pescadores artesanales ya no tienen ni para comer. Da tristeza conversar con ellos y escuchar sus penurias, donde han perdido con los bancos sus casas y hasta los barcos. Algunos, según me han contado, a lo que se han dedicado para sobrevivir es a sacar el diesel a precio subsidiado e ir a venderlo en altamar a las cigarretas, esas lanchas rápidas, de esos raros que pasan por ahí cargados con quien sabe que cosas, otros, han tenido que tragarse su orgullo y dedicarse a trabajar para los chinos, quienes han hecho del puerto lo que les ha dado la gana, con excepciones por supuesto, porque hay algunos que son muy decentes. Además, yo me refiero a esos nuevos inversionistas orientales, no a la culta colonia china que ha vivido con nosotros por siempre. Por otra parte, ya los vicios y la prostitución alcanza índices alarmantes, si hasta dan ganas de llorar al ver esas niñas de escasos nueve o diez años vestidas de prostitutas vendiendo sus cuerpecitos para llevar algo de alimento a sus casas y cuando ya se han consumido en las drogas, terminan ahí en Las Playitas o por el mercado haciendo presa en las aceras y durmiendo en cartones, como ven ustedes también aquí en San José. Bueno y para no cansarlos con el cuento, mi gente estaría dispuesta a cerrar desde Caldera hasta la Interamericana y el Muelle Turístico que llaman, al costo que sea, de por sí como me dijo Marchena, es preferible morir en la calle luchando por lo que uno cree, que morir en la casa de hambre y viendo a los hijos llorar por falta de alimento y de oportunidades de estudio, ya que la tal educación gratuita es un mito. - Bueno, eso está muy bien, hay a la par de nuestra propuesta seria, un abanico de posibilidades para presionar a estos cabrones, la cosa es que no permitiremos que se salgan con la suya y, si creían que este pueblo estaba dormido y que lo habían enredado con la campaña publicitaria esa, tremenda sorpresa se van a llevar, los del triunvirato y sus acólitos y marionetas. Como aún nos queda el fin de semana, esperaremos a ver que pasa con la reacción por lo del TLC, así el lunes ustedes irán con esa información extra y a ver que hacen los sindicatos, ese es un asunto que estamos monitoreando, por ahora deberíamos ir a comernos un gallito y luego a reposar. -O.K., Enrique, nos vemos mañana para seguir poniéndole cabeza a esto. ¡Buenas noches! - ¡Buenas noches! Si en la antigüedad se velaban las armas antes de entrar al combate, ese fin de semana, Ana, Marvin, Fabián, Enrique, Diógenes y Justino, velarían sus conciencias, afinarían sus sentidos y se dispondrían a dar lo mejor de sí mismos, cuando el presidente les recibiera en audiencia de quince minutos. Era un fin de

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semana crucial, en Washington, capital del imperio se debatía la suerte del famoso tratado comercial y en cuartos adjuntos, industriales, políticos cruzaban dedos , consejos e ideas para que el mismo no fuera lo perjudicial para sus intereses como se presagiaba en las primeras de tanteo. En el país solo de ello se hablaba, como si fuera la tabla de salvación y nuestros líderes se temían que sus propuestas ante el presidente no tuvieran el eco que ellos soñaban, pero en fin, cumplirían con su papel dignamente. El sábado recibieron más instrucción y el domingo ya con el TLC a punto de parir sus resultados, frente a la pantalla de televisión en uno de los salones de capacitación del Centro, cada cual exteriorizó sus comentarios. Definitivamente y como siempre, los agricultores y todos los que efectuaban las actividades primarias y sin asistencia estatal, ni crediticia, salían menos favorecidos, con algunas excepciones. Había que esperar a la siguiente semana para conocer, si se podía el verdadero texto del tratado y de cómo se habían entregado a cambio de un puñado de azúcar, las obras sociales. El monopolio de los seguros, la telefonía celular y las bandas para operar internet, los servicios más rentables del INS y del ICE, habían caído primero, a pesar de la falsa promesa del presidente de que nada de eso se entregaría, paulatinamente se fue variando su discurso hasta que su palabra y el mismo fue cambiado a favor de una privatización de esos servicios, que aunque quedan en manos de esas instituciones, habrá una apertura para que las transnacionales también los puedan ofrecer y obviamente, en un mercado tan pequeño como el nuestro, quienes tienen las ataduras legales de la Contraloría, la Ley de Contratación Administrativa, etc., etc., tendrán las de perder hasta su total extinción y, lo que es más triste, cambiados por un dulce, nada más. Pírricas ganancias obtuvieron los industriales y exportadores y mucho menos los arroceros, quienes fueron condenados a desaparecer a un plazo agónico de veinte años en beneficio de los grandes importadores, quienes de por sí venían desde hace años importando el grano de terceros países y a mejores precios del producido aquí y gracias a salvaguardas complacientes, recordemos los cierres por los productores de muelles para evitar descargas de arroz, mientras en los silos del agricultor nacional el arroz se pudría. Nuestros negociadores se habían entregado con la amenaza de la pérdida de cuatrocientos mil empleos si no se firmaba el tratado, espejitos al fin, nuevamente ellos surtían efecto en la codicia de nuestros representantes. ¡Cuan equivocados estaban! Porque ese incremento en el empleo sería flor de un día y sería para endulzar el asunto mientras nos saqueaban lo poco que quedaba nuestro, convirtiéndonos en cautivos de sus productos y maquinaciones a través de los medios que sabemos utilizan para ello. - Bueno, señores, ahora sí que ustedes la tienen bonita, si no cambian las cosas, el hombre va a estar más pendiente de lo que suceda allá, así que sean cautos con las propuestas y traten de metérselas suavemente, sin presión, así lo van a lograr. Demuéstrenle humildad, que él sienta que priva en la comunidad un interés por la patria, antes que nada, que somos sinceros y en aras del bien común, porque solo así, el gran güevón les va a prestar atención. Caso contrario, las agarra, les da una palmadita en el hombro, le pregunta a Marvin de cuáles negros es, si es de Matina o del centro y a Diógenes que de adónde sacaron sus padres ese nombre, les habla de comidas tradicionales y hasta luego, lo hecha todo a la basura. Por ahora él va a estar más interesado a tomarle el pulso a nivel legislativo al tratado, de ahí que ustedes deben usar la malicia para hacerle entender que, una propuesta como la nuestra es viable y como contraparte a la acción estatal en pro de la negociación, ya que con ello se fortalece la acción local y el progreso común y así enrumbará su discurso por el lado que le estamos proponiendo. La pura verdad es que lo que le vamos a presentar no es nada del otro mundo, es viable y conduciría este país a la tercera república, con un sentido, eso sí, más social y comunal, en donde la participación popular va a ser eje principal de la nueva política estatal, con ello se estaría echando la gente al bolsillo e inclusive, haciendo el anuncio del viraje de timón en ese sentido, le van a responder cuando los convoque a una manifestación a favor del TLC, que seguro estoy estará convocando. Por ese lado es que ustedes deben venderle la idea de nuestras propuestas y ya verán, van a ser escuchados con mucha atención.

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Mucha suerte entonces, compañeros, mañana tempranito los estaremos dejando en las puertas de la presidencia. - Bueno, Tulio, muchas gracias por todas esas enseñanzas que nos has entregado, la verdad es que ello nos da valor, porque no creas, la responsabilidad no es jugando y bueno, de eso se trata, de aprovechar cualquier cosa para que nuestras propuestas tengan eco. - Saben ustedes que hace años deseábamos una oportunidad de estas, de poder tener en nuestras manos los acuerdos de una cantidad de ciudadanos como la que ustedes representan y poder exponérsela al presidente, como ustedes lo van a hacer? Porque este señor, si no les da la atención que se merecen se lo pierde y pierde el país, porque con lo que ustedes han planeado en sus comunidades, seguro que nuevamente va a haber derramamiento de sangre, por el contrario, si le da la debida atención a las propuestas, si es inteligente y muestra olfatillo de estadista, ténganlo por seguro que se va a echar una flor en el ojal. - Así es Tulio, no creas, todos estamos algo nerviosillos, porque la responsabilidad es mucha, pienso que quizás a las máximas autoridades no les interese y nos reciban para salir del paso, pero si piensan así, no se están imaginando del poder de las tertulias. Así que tal vez sería mejor que entierren nuestras propuestas, para ver esa reacción popular y de una vez por todas, que sirva de alerta a esos cabrones políticos y sus titiriteros, claro con excepciones, porque de todo hay en la viña del señor, que no se me resienta quien no debe. . ¡Eso Justino! Veo que estás afiladillo y, no creas, eso es bueno, debemos llegar con humildad pero con firmeza en nuestras posiciones, así que mañana sabremos si ha valido la pena tanta desvelada hablando una y otra vez sobre los problemas nacionales y sus posibles soluciones. ************************************************************************* La prensa daba cuenta ese lunes del acuerdo entre partes del tratado y en una esquina del centro de la ciudad los delegados se aprestaron a comprar, cada cual uno de los periódicos del día, para así tener sobre la marcha, un panorama más o menos claro de las primeras reacciones y de qué era lo que se había aprobado, porque seguros estaban de que el presidente y su ministro les indagarían sobre sus opiniones en cuanto al asunto. Así que lo mejor era llegarles medio informados porque sabían todos que no todo se pondría en el papel. Por ahí decía uno de los medios que el tratado era la gran salvada, que generaría o sostendría cuatrocientos mil empleos. Que el INS y el ICE soltarían monopolios de lo que nuestros campesinos llamaban “la postita”, que se exportaría un montón de miles de toneladas más de azúcar, etc., etc., bondades y más bondades. Que los exportadores y productores gringos trabajarían sin subsidios y competirían de tú a tú con los nuestros. Ilusos, cuán ilusos, ya que todos sabían, hasta los más ignorantes, que en el congreso norteamericano y en año electoral, lo que no convenía a sus nacionales, jamás lo aprobarían, sin embargo, ya nuestros dirigentes y sus representantes tenían claras las reglas del juego y solo faltaba leer la letra menuda del tratado, lo que aún no había sido hecho del conocimiento de la prensa y de la ciudadanía, sin embargo, las reglas básicas estaban presentadas y seguros estaban ellos que en la presidencia solo de ello se hablaría y por ende, se aprestaban a presentar unas propuestas matizadas y saborizadas con TLC. Una cuestión era importante y eso Justino lo sabía, la situación del país no era la más conveniente, el presidente angustiado por los reveses que tenía que enfrentar con la opinión pública por una política social reñida con los mejores intereses de la mayoría, quizás se cuestionaba que lo mejor hubiera sido no acceder a las pretensiones de aquel que le aconsejó ser candidato y luego, contra todos los pronósticos, presidente. Por ende daba vuelta al consejo de su médico de cabecera para tomarse un tiempo y en representación del país irse a recorrer ciudades y naciones, o sea oxigenarse y oxigenar su gestión, con un golpe de timón que de por sí le estaban pidiendo los sectores empresariales. En los

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últimos tiempos su figura se había desgastado y había pasado de un hombre querido, casi patriarcal, a un político más. Por ello, quizás sería más importante replantear la estrategia de la comparecencia en la presidencia y sin esperar a que llegaran a las puertas de palacio, Justino dijo: - Bueno señores, aquí vamos, de una cosa estoy seguro y quiero ser muy claro con ustedes, no creo, sinceramente no creo, que el hombre se comprometa con las tertulias, la verdad es que casi me imagino lo que va a decir, pero la pura verdad es que no va a decidir nada porque va a cerrar nuestra cita con un, debo consultar con mis asesores y ministros, etc., etc. Ahí es donde debemos estar preparados para decirle que nuestro pueblo ya ha deliberado y consultado sobradamente y que esta es la única oportunidad que tiene el país para retomar el rumbo social que ha perdido. Algo así, que cada quien meta la cuchara de la mejor forma posible para que vea el hombre que no solo vamos a hablarle de lo que va en el documento sino que estamos bien informados de la situación real del país y de que no necesitamos de TLCs para salir adelante, claro que sería bueno este tipo de tratados, siempre y cuando sean de igual a igual, pero como ustedes ven y hemos estudiado, este no es así. - Tenés razón, Justino, si bien es cierto que él es la máxima figura del país y es quien se supone debería decidir, también es cierto que de la forma oscura en que llegó a ese cargo, no oscura porque haya hecho fraude o algo así, pero en la forma en que lo hizo, que de por sí ni quería y que después que tenía problemas de salud y que luego que ya cuando se vio candidato se lo creyó, en fin, a eso me refiero con oscura, también es cierto que nuestros planteamientos son de avanzada y debe consultarlos no solo con la almohada, sino con quienes de verdad mandan en el país y que ustedes y yo sabemos quienes son, por ello, lleva razón Justino cuando nos dice que él no va a tomar ninguna decisión hoy mismo, pero en fin, demos tiempo y si no, pues tomamos las medidas que haya que tomar. - Está bien, Ana, si de lo que se trata esta reunión es de eso, es obvio que las decisiones que haya que tomar no van a ser de la noche al día, pero bueno, cumplamos con el mandato de nuestra asamblea, que es la asamblea del pueblo, entreguemos nuestras propuestas y ya. Lo que venga después, solo Dios lo sabrá, pero tranquilos, que ahí está el portón, ya casi llegamos. – Acotó Enrique. Los trámites para entrar a la casa de todos los costarricenses se cumplieron rigurosamente y comprobado que estaban entre los ciudadanos autorizados para ingresar, hicieron entrada triunfal a la presidencia. Un hormigueo carcomía sus entrañas, lo que por tantos años habían añorado estaba por cumplirse, estar frente a frente con la máxima representación nacional y poder decirle que el rumbo del país no era el más acertado para las mayorías, esos que casi nunca tiene posibilidad de decirlo porque históricamente han delegado en los políticos de oficio ese derecho, casi siempre en detrimento de su suprema voluntad y siendo víctimas del engaño y la traición. Ya no sería más así, de ahora en adelante mediante la participación popular y con los mecanismos constitucionales puestos a su disposición, hablarían claramente con las autoridades y les expondrían sus preocupaciones, planes, proyectos, sueños e ilusiones y estaba en ellas acatar la decisión de las mayorías o apechugar lo que se viniera, porque este pueblo había despertado y estaba en campaña permanente en pro de la dignificación de los derechos ciudadanos. Ellos eran el más vivo ejemplo de ello.

- Buenos días, señores, que gusto tenerlos por aquí, por su casa, la de todos los ticos, porque diay, es la verdad, esta es la casa de todos nosotros. ¿Verdad? - Buenos días y gracias por recibirnos, me voy a permitir presentar a mis compañeros. El que está a la par del señor ministro es Justino, representante de las tertulias de San Miguel y del centro del país, este señor, sí

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ese negrote, es Marvin, obviamente representa al Atlántico, doña Ana representa a la región del Pacífico, don Fabián que está a su lado, señor presidente, representa a Guanacaste y don Diógenes, quien está conmigo es representante del Sur y bueno, yo que soy miembro del Centro de Estudios y a quien conocen ustedes, porque hasta en la sopa les salgo. Ustedes saben que allá por donde yo me crié los viejos eran felices tertuliando, qué lástima que se haya perdido esa buena costumbre, yo le echo la culpa a la televisión, si es que ahora ya nadie conversa, ya nadie se saluda en los barrios, cada quien en lo suyo y hasta mala cara le hacen a uno, pa’ no saludarlo. Se han dado cuenta ustedes de eso? Y lo mejor es que uno carajillo ponía atención a lo que hablaban los viejos y bueno, algo se le pegaba, era una manera de instruirse. Recuerdo, como le encontraban solución a las cosas a pura conversación. Por eso, eso que hacen ustedes es muy importante, de ahí que cuando me pidieron la audiencia, inmediatamente girara instrucciones para hacerles un campito en la agenda y bueno a ver qué me traen. De acuerdo con lo pactado, Justino había sido el favorecido para iniciar la explicación y posteriormente los demás se irían uniendo en el diálogo y aquel ni lerdo ni perezoso introdujo el tema. - Pues muchas gracias, señor, por hacernos ese campito, si todo sale bien y nos entendemos, ese campito lo pondrá a usted en la historia de este país, porque la verdad es que si no nos unimos, esto se lo va a llevar el carajo. Nosotros hemos desarrollado un trabajo de hormiga desde hace muchos años y las tertulias son el reflejo de un pueblo cada vez más informado y preocupado por lo que sucede con su país. No quiero extenderme mucho, para que los demás compañeros puedan aclararle cualquier cosa, pero si deseo que algo quede muy claro, usted es nuestro máximo representante y quienes lo eligieron lo hicieron pensando en sus bondades de humanista y hombre de bien y quiera Dios que al final de su gestión, la gente de este generoso pueblo siga pensando lo mismo. Sabemos que una cosa es verla venir y otra montarse en ella, pero bueno, la verdad es que en este documento que le estamos entregando a usted y al señor ministro está nuestra propuesta para hacer de este país, un país más independiente y digno, elevando la cultura y la educación a la que todos tenemos derecho y haciéndonos más soberanos económicamente, sin esperar que los organismos financieros internacionales nos estén prestando plata cara, que quien sabe cuándo vamos a pagar. Estamos a su disposición para cualquier aclaración y cuando ustedes y su equipo de asesores estudien nuestras propuestas, pero una cosa si les digo y en representación de por lo menos doscientas mil gentes que acuden religiosamente a las tertulias, ya nuestro pueblo no aguanta más carga, señores, es injusto que nos estén cargando de impuestos cada año, cada cambio de administración y cada vez que hay que rellenar un hueco con los acreedores de la deuda interna y externa. Nuestra clase media no existe y la baja cada día está más cerca del despeñadero y a nosotros nos da miedo que vaya a aparecer un buen o mal líder y nos vaya a encender una mecha de insurrección, la cual no vamos a saber como apagar. Seguramente eso ustedes lo habrán conversado, pero nosotros que andamos de pueblo en pueblo, palpamos el sentir del costarricense desesperado y la verdad es que nos da miedo lo que pueda pasar. Muchas gracias nuevamente, por su tiempo y ahora mis compañeros les van a comentar otros asuntillos, ya más relacionados con el texto de este documento. Después de su discurso, Justino se encargó de poner en manos de los dos funcionarios el documento que contenía las máximas aspiraciones de nuestro pueblo y sus compañeros explicaron someramente su contenido y de cómo se había llegado a ese consenso. Enrique, por su parte se dedicó a observar los gestos de los gobernantes, quienes se cruzaron miradas de inquietud, tanto por lo que estaban poniendo en sus manos, como por las palabras de Justino, llenas de un muy puro amor por su patria y cargadas de una velada amenaza. Sí, una amenaza de un pueblo que ya no soportaba más castigo sin responder a el, de un pueblo que creían dormido y que por el contrario, se había despertado y estaba muy atento al devenir de los acontecimientos, para tomar las medidas de apremio que hubieran que tomarse. - Bueno pues, señores nos gustaría que nos acompañaran a un refrigerio que les hemos preparado, porque diay, comprendemos sus carreras y un gallito no cae mal, así andamos nosotros también con esa vaina del TLC, del que me imagino ustedes están ya informados. Por otra parte me gustaría que nos

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acompañaran a conversar con los periodistas que nos esperan allá abajo, diay porque los que saben del tema son ustedes, nosotros apenas vamos a leer el documento y ya cuando lo estudiemos, pues podremos referirnos a ello, pero por ahora, los periodistas son de ustedes. ¿Está bien? - Claro que sí y muchas gracias por convocar a esta rueda de prensa, así el país en general se va a enterar de qué se trata nuestra comparecencia a la presidencia y de cómo las tertulias están rindiendo sus frutos. Contestó ufano Marvin. Uno a uno fueron entrevistados y cada cual expresó el sentir popular plasmado en el documento entregado a los gobernantes, la prensa tuvo también su copia y por ende el país sabría que un gran porcentaje de costarricenses estaba comprometido con la salvación de la patria, que un gran porcentaje de compatriotas estaba proclamando la nueva república y que la desinformación ya no campearía en este bendito territorio. Sabría que soberanamente el pueblo se estaba arrogando la facultad de sugerir el nuevo derrotero de la patria y que si esos señalamientos eran desatendidos, la mecha de la insurrección sería encendida a muy corto plazo, porque ya no dábamos más. En fin, la patria con la que soñaron y defendieron Mora y Cañas, estaba hoy más madura que nunca y eso sí, tuvieron que pasar casi dos siglos para que ese pueblo se sacudiera los grilletes mentales que hacían abominable, para los políticos y corruptos de oficio, su participación en el poder. Ahora solo esperarían para que los gobernantes estudiaran, como se los habían prometido, el documento para hacer las aclaraciones pertinentes y por ello es que habían programado otra comparecencia a la presidencia para dentro de treinta días, momento en el cual discutirán con aquellos y sus asesores de la viabilidad de sus propuestas. - ¡Mamá, mamá! - ¿ Qué fue, Florcita? Nada, que venía del centro y dicen que en la tele están pasando en las noticias lo de la reunión de papá y los demás con el presidente, pongamos a ver si dicen algo más - Mmm, qué va, a eso no le dan mucho campo, no ves que es la reunión de un poco de gente de pueblo y tal vez lo pasaron porque no había algo de deportes o del TLC, acordate mi hija de lo que hemos hablado largo y tendido con tu papá y los demás, y bueno, lo que ustedes los chiquillos hablan en su tertulia allá en San Miguel, que la prensa de este país hasta que no tengan el agua al cuello no van a dejar de estar al servicio de los que nos han humillado por siglos, aparte de eso, ellos son de los mismos; no hay una prensa comprometida con nuestros ideales, claro con algunas excepciones, pero diay nadie los escucha, ni los lee. - Pues sí, mamá, pero diay, si lo pasaron por la tele, es porque seguro le dieron algo de importancia, habrá que ver las noticias de las siete o esperar a que venga papá y nos cuente, cómo le fue. - Pues sí. Dijo Flor, metiéndose las manos en el delantal como acostumbraba cuando terminaba un diálogo. -

Voy a ir donde Clara, a ver si ellos vieron la noticia, ya vengo a almorzar.

- Vea que no le coja muy tarde para el almuerzo, porque más tarde tiene que irse para Heredia, porque mañana entra muy temprano a la U. Dicho lo anterior, Flor se quedó ensimismada y dio rienda suelta a sus pensamientos, ya nutridos por más de veinte años de ser la esposa de un líder de las calidades de Justino y de luchar hombro a hombro con él por la consecución de los ideales comunes y mientras regaba las violetas, las loterías y las cara de mula del corredor

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Ah vida esta, cuando no teníamos nada, nos teníamos a nosotros mismos y ahí pasábamos las horas viendo los chiquillos crecer, trabajábamos de sol a sol por el pedacillo y bueno, cuando ya tuvimos esto, gracias a Felicillo, que Dios lo tenga con salú, Justino se me hace más importante y ya no para en la casa, el terreno y el trapiche lo trabajamos a puros peones, Florcita está en la U y la veo solo los fines de semana y si es Pedro, ese condenado muchacho no para en la casa, solo en San Miguel se pasa, si es que ya está en quinto y el año entrante, si Dios quiere, va pa la U también. ¿ Y yo qué? Diay, Flor, vos también podés hacer algo y así te entretenés, bueno con lo del Ebais, me entretengo, pero yo creo que ahora me puedo dedicar a dar más por nuestra tierra, si la verdad es que no solo cosas de la casa uno puede hacer. ¿ Por qué no empezar una empresita de algo? ¿ Ah? Por ejemplo, se me está ocurriendo que nos podemos asociar todas las mujeres y empezar una empresa para vender las cosas que sabemos hacer, que unas hagamos conservas, otras tejidos y bordados, que matas ornamentales, hay unas que tiene unas manos para las violetas, los geranios, las rosas, diay, qué se yo, todas las cosas que hacemos para las diferentes épocas, podríamos envasarlas, meterlas en bolsas y venderlas en un mercadito. Esas cajetas que hace doña Susana, los tamales de Anita, los chileros que hace Joaquina y los encurtidos que hace doña María, dónde me los deja. Vos sabes Flor, los ticos perdemos potencial, como dicen ahora, si es en nuestro interior en donde está la solución a los problemas. Vea lo dijo el otro día don José Miguel, aquel que fue Vicepresidente del gobierno de la dignidá, si es que algunos, nosotros no, por dicha, hasta el cerco han abandonado y ya no siembran ni flores de itabo, si es que es ahí donde está la despensa de uno, si no tiene plata, pues no se compra la camisa o el vestido, pero tiene los guineos, los bananos, la yuca, el maíz, los frijoles, los chayotes, la raíz, las naranjas, los limones, los rábanos, el culantro de castilla, el de coyote, el orégano, el chile picante, aguacates, plátanos, en fin, una feria del agricultor en el patio, ah, y los huevos, que me decís Flor. ¿ Qué cuesta tener unas gallinillas y un gallo ahí en el patio? Dan pa’ que el zorro coma y para que uno les coja los huevos, porque diay, el negocio que no da pa’ los otros animalillos, pues no es buen negocio. Si es que nos hemos hecho vagabundos y preferimos comprar las tortillas de paquete, que moler nuestro propio maíz, vea el colmo, compramos leche de caja en vez de ordeñar las vacas, ahí las deja uno pa’ que se las mamen los terneros. ¡No señora! Desde hoy eso no va a ser así, aunque se enoje el de la pulpería, lo que soy yo, voy a ir de casa en casa, lavándole el coco a las mujeres pa’ que molamos nuestro propio maíz y hagamos nuestras propias tortillas, ya con eso algo se gana el país y nos obligamos a regar el poquillo de maíz pa’l autoabasto y así, cada cual se va a ir dando cuenta que muchas de las cosas que estamos comprando, puede tenerlos en el patio de la casa, la verdad es que nada cuesta, con eso ahorramos los cinquillos pa’ los tiempos que se vienen, que no son nada buenos; a menos que cada cual ponga de su parte y se comprometa a hacer lo que debe por su país y sin esperar que le venga del papá gobierno todo. - ¡Mami! - ¡Ay, qué fue mija! - Diay, mami, que estabas como ida, si hasta las babas tenés afuera, te hablaba y no me contestabas, me asustaste, creí que estabas con un ataque o algo así. - Ataque, ataque, qué va, Florcita, estaba soñando y vas a ver qué sueño, cuando lo haga realidad y lo hablemos en las tertulias. Este país va a volver por el surco que ha perdido y como decía aquel poema mío, “... los árboles florecerán con flores de sonrisas, los pájaros tomarán su néctar y esparcirán por el mundo lo que será la vida...” ¡Ay, ese poema a tu papá le gusta mucho! ¿Y qué, ya vas a comer? - Diay, pues sí, si ya estás despierta, pero déjame que yo me sirvo, vos seguí soñando, que es del corazón y el pensamiento de las mujeres de donde saldrá la simiente para que este país retome el rumbo perdido, ya vas a ver. - ¿Qué, hablé mientras soñaba? Porque es más o menos lo que pensaba yo. - ¡Ay, mamacita, si te conozco desde que nací y querés que te diga una cosa, papi no hubiera llegado hasta donde está en la dirigencia nacional si no hubiera sido porque tiene a una gran mujer como vos apoyándole y así ha sido siempre con los grandes y pequeños hombres y eso él te lo reconoce, aunque no te lo haya dicho. A mí me lo dijo el otro día, dice que vos sos lo mejor que le puede haber pasado en su vida y que sin tu apoyo e inteligencia, jamás hubieran salido el Bajo del Alumbre y de peones hubieran muerto. Ya ves, las mujeres, mami, las mujeres vamos a enderezar este país. - ¡Ay hija, que ideas las tuyas. Pero de verdá, tu papá te dijo eso?

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- ¡Ah diay, seguro que lo voy a inventar, despertá, si es que todavía estás dormida! - No, no estaba dormida, nada más soñaba despierta y de verdá, estoy de acuerdo con vos en cuanto a que las mujeres como dignas hijas de Dios, con iguales derechos y deberes, debemos trabajar con nuestros hombres, para sacar adelante este país y la pura verdá sea dicha, no necesitamos de ayuda de afuera para eso. Quienes se soban las manos con las cuestiones de afuera, como ese TLC, son los que hacen y han hecho grandes negocios con nuestras necesidades, si no ve la desesperación porque se apruebe, si hasta anuncios en el radio y la tele sacan y quiénes pagamos todos esos anuncios, pues nosotros mija, nosotros. - Todo eso va a cambiar, mamá, tenga paciencia... Diciendo esto, Florcita se dirigió al corredor, allí donde le gustaba comer y contemplar las verdes montañas del Bajo. Su madre por otra parte siguió en sus sueños mientras escogía un puño de frijoles. - Diay, qué le vamos a hacer, a alguien tenía que salir esta chiquilla, con el tata tan pelotero, y más ahora que ella se puede preparar en la universidad, imagínense lo que será más adelante y con esas ideas de que las mujeres iniciaremos la revolución, la verdá es que puede que tenga la razón, si nosotras somos las que manejamos las casas. ¿Por qué no podemos manejar un país? Diay si, voy a ponele mente a eso de la empresita de cosas con las otras mujeres, ya va a ver este país que si se puede sobrevivir sin necesidá de TLCs. Que es de nuestra propia entraña de donde saldrá la solución a nuestros problemas y que juntos, como una sola garganta le diremos a los políticos de oficio que su papel está ya acabado, que ya no serán más actores de nuestro destino y que nosotros retomaremos el control de el. Cuando las generaciones como la de Florcita y Pedro, ya graduados en la universidad se dediquen a dar lo que han aprendido, vendrá el cambio y será un cambio para bien, sino, también estarán preparados para hacer lo que sea para terminar con esos casi dos siglos de abusos. No si que va, no vive uno para ver tanta sinvergüenzada y cochinada, pero ya basta, desde hoy, Flor, vecina del Nuevo Alumbre, proclama que ya este pueblo está bien despierto y que ya no lo engañarán más y que la revolución pacífica para establecer la nueva república será encabezada por la mujer de este país con el derecho que le da el ser coforjadora de la nueva alborada junto a los hombres y, que mientras pensemos así y nos mantengamos unidos, ya no nos comerán más los lobos que vestidos con piel de oveja nos visitan cada cuatro años. Diay, qué me pasa, si hasta me oigo importante pensando así? Pues la verdad es que sí, soy muy importante, porque sé tanto, porque al fin he despertado del letargo en que estaba o me tenían sumida, porque Dios me ha premiado con una gran familia y un gran país y no voy a permitir que nada malo les pase. Mis manos serán las tuyas y mi corazón que atesora tanto amor, estará al servicio de vos patria, para rescatarte, redimirte y llevarte por los caminos perdidos del bienestar para todos y no para unos pocos, como ha sido desde que me acuerdo. -

¡Mamá, mamá! Otra vez soñando, pero ahora hasta en voz alta, te he oído todo eso que dijiste y qué bárbara, que orgullo me da saberme hija tuya, bueno de papá también, pero es que sos una líder nata y cuánta verdad hay en tus palabras, sonabas como la voz de la patria haciendo esa proclama. Ves lo que te dije, que la revolución en este país saldrá del corazón de la mujer.

*************** Que ¿ Qué hay de Costa Rica? Costa Rica es lo que sus habitantes a través de la historia quisieron que fuera y será, lo que sus habitantes quieran que sea.

Vasconia, 8 de Abril de 2004.

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SUSCRIPTORES DE HONOR DE LA SEGUNDA EDICIÓN ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦ ♦

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Román Solís Z. Xinia Carmona V. Ileana Bolaños C. Mario Guzmán G. Fernando Casafont O. Mayela Ruiz M. Ronny Bassey F. Luis Chacón Carlos Espinioza S. Carlos Valverde Adriana Chacón C. Karol González Ch. Carlos Miranda Carlos Luis Sánchez Leda Carvajal O. Tatiana Sinclair Victor Castillo Julio Bustos

A todos ustedes muchas gracias, hicieron posible este sueño. EL AUTOR.

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Luis F. Madriz S. Ana Patricia Mc Rae R. Maritza Chavez C. José Antonio Hernández B. Gino Mario Blando V. Leonel Núñez A. Oscar Rojas J. Dulce Umanzor Oscar Hernández C. Mario Saborío V. Alfonso Carro S. Iván Vincenti R. María Hidalgo Q. Enrique Carreras J. Danilo Solano S. Lucía Díaz V. Manrique Jiménez

RUBÉN SOLANO JIMÉNEZ. Nació en San José en 1952. Estudios de Historia en la UNA, Derecho en la UCR y diversos Seminarios de Política, Realidad Nacional y Sindicalismo. Ha participado como dirigente en diversos grupos, asociaciones y federaciones deportivas, comunales y de desarrollo comunal.

Pa' Verdades el Tiempo hace un análisis de la realidad costarricense, desnuda nuestros defectos y el cinismo de los malos costarricenses que lucran con las necesidades del pueblo. Explica y en palabras entendibles para la mayoría, todos los problemas de nuestro país, señala culpables y marca el derrotero a seguir para superarlos. Esta novela son vivencias, es la historia viva de la patria.

Funcionario público por más de 30 años. Publicaciones de varios artículos en diferentes medios, autor de la primera edición de la novela "Pa' Verdades el Tiempo", novela de crítica sociopolítica, de la novela inédita " Lola, una Historia de Ciudad" , de los Poemarios "Filiberto es Poesía" y “Poesía...Solo eso”