Cuadernos de Fotografías 01

YURI REALITIES YURI MANRIQUE 01 | CUADERNOS DE FOTOGRAFÍA

CUADERNOS DE FOTOGRAFÍA CENTRO CULTURAL TIJUANA

CUADERNOS DE FOTOGRAFÍA YURI REALITIES Yuri Manrique Coordinación: Roberto Córdova-Leyva Diseño: Luis Del Toro D.R. © 2010 Centro Cultural Tijuana Paseo de los Héroes 9350 Zona Urbana Río Tijuana, B.C. C.P.22010 Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra, sea cual fuere el medio, sin la anuencia por escrito del titular de los derechos.

ISBN: 978-607-455-415-1

YURI REALITIES YURI MANRIQUE

Presentaci贸n Virgilio Mu帽oz 03 Yuri Realities Roberto C贸rdova-Leyva 04 Tj Realities 07 A ver cuando tiras ese cochinero 14 Una historia para contar 22 La casa de los Manrique 28 Adicto al dektol 38 Llamar la atenci贸n 44

PRESENTACIÓN Mtro. Virgilio Muñoz Director Centro Cultural Tijuana Las artes visuales del noroeste de México han trascendido las fronteras nacionales y alcanzado reconocimiento internacional gracias al talento y la perseverancia de sus artistas. Este logro ha sido impulsado por diversas instituciones culturales del país. En ese proceso, destaca la centralidad de la fotografía de Baja California. Desde sus inicios, el Centro Cultural Tijuana ha promovido a los fotógrafos de la región a través de exposiciones, talleres, seminarios, conferencias y diversos apoyos con el propósito de estimular su búsqueda y dar a conocer los discursos que se revelan a través del lenguaje visual. En los archivos encontramos evidencias de este acompañamiento hacia su profesionalización que deseamos consolidar con esta serie de publicaciones. Los Cuadernos de Fotografía abren un nuevo espacio de exposición donde se reunirá el trabajo individual y colectivo de distintas generaciones que muestran la diversidad de interpretaciones que configuran el mundo de los artistas bajacalifornianos. Esta serie se dirige a quienes han encontrado en esta práctica una forma de vida, a los conocedores que han desarrollado la habilidad de la observación de este arte, y a los que están en formación. Sobre todo, a quienes tienen por primera vez en sus manos una publicación dedicada a la fotografía y a aquellos que no han tenido oportunidad de apreciar las imágenes que capturan los artistas de esta latitud. En cada Cuaderno el lector encontrará temas distintos, bordados con perspectivas y sensibilidades múltiples, que constituyen precisamente su riqueza. Sus imágenes quedarán impresas en libros de pequeño formato, con alta calidad y a un bajo precio, como testimonio tangible de su existencia. También, estarán disponibles en un sitio de Internet para que el trabajo de los fotógrafos de Baja California pueda apreciarse en cualquier lugar del mundo.

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YURI REALITIES Roberto Córdova-Leyva Blas Yuri Manrique Figueroa tiene claro en la vida tres cuestiones: andará a pie, siempre, los periódicos y revistas serán una herencia paternal afortunada al transformarse en libretos para proyectos futuros y su fiel compañera no es ni una mujer, ni un perro sino la fotografía. La vida pareciera simplificársele pero no. El dinero es un problema serio para quien vive entregadamente a su trabajo como él, ya sea construyendo sus imágenes o preparando alumnos que no alcanzan a visualizar las virtudes de la fotografía. Pero su tiempo de preocupación ya pasó con sus pupilos. Ahora “quien quiera aprender que aprenda”, y, si no, “que se vaya a la chingada”. La fotografía es un disciplina que se debe de tomar en serio. Y tan metida trae la disciplina de la luz que se da a la tarea de educar por cualquier medio a su alcance, incluido el Facebook, aunque sea “una pinche foto”, empero no debe ser una “imagen vacía”. Sabedores sus estudiantes de la rigurosidad de su maestro y de que suele traer lista su cámara digital lo aprovechan para que les tome fotos y se las remita para luego subirlas a sus redes sociales de moda. O sea, el arquitecto fugaz flaquea como inesperado fotógrafo de sociales. Fueron chicas de la entonces escuela de Diseño de la UIA, ubicada “allá en el Colegio La Paz” de la colonia Hipódromo, en 1982, quienes le infundieron y terminaron por pavimentar el gusto por el diseño gráfico, ya que en 1986 decide tomarla como materia optativa al estar matriculado en la carrera de Arquitectura. Este paso formará parte significativa en sus propuestas fotográficas y de actualización docente años más tarde. Al salir de la carrera solo le dedicó los primeros 10 años de su vida profesional a la arquitectura pero, salvo, y gracias a la necesidad de registrar los avances de obra en el centro comercial Pueblo Amigo, pudo combinar su profesión con su omnipresente debilidad por la foto. Por eso no es para nada extraño escuchar a Yuri sostener que “construye imágenes” mas no edificios, ni casas. 1988 fue un año muy importante en la vida del arquitecto de ejercicio profesional fugaz. Por un lado, el peso de la actividad política y la vida completamente entregada a ella de su padre Don Blas Manrique, lo lleva a ir con él a múltiples mítines realizados en la entidad en donde empieza a imprimir sus placas. Yuri recuerda especialmente los meses de mayo a junio de 1988 cuando el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, anduvo por Baja California en gira preparatoria para su lanzamiento como candidato a la presidencia por el Frente Democrático Nacional (FDN), un año después, siendo acompañado por su padre. Esta coyuntura le dio la oportunidad de registrar diversos actos políticos y privados e irle perdiendo el temor a fotografiar a la gente en la calle, ya fuera en una marcha o a personas asistentes. Las oportunidades de una foto buena eran muchas. La figura de su padre pesaba en el ámbito político estatal pues fue el primer comunista de la entidad. Eso le daba el picaporte idóneo para tener un contacto más cercano con grandes figuras políticas, principalmente, como Valentín Campa y Arnoldo Martínez Verdugo. Sin embargo, también le brindó el acceso para conocer los vínculos que tuvo don Blas con grandes creadores como Diego Rivera, Frida Kahlo, con quienes compartía la misma ideología política. Por otro lado, en ese mismo

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año Javier Heredia hijo le presenta a Yuri al profesor Manuel Bojorquez, responsable del Taller de Fotografía de la U.A.B.C. Se siembra la semilla que habría de consolidar su pasión por el arte del manejo de la luz, la ironía, la expresión personal sin ambages. Tarda tres años en tomar los cursos en donde transita del uso de rollos a color a blanco y negro, perfecciona su técnica de revelado, inicia su vicio por el Dektol (revelador de papel) y aprende a enmarcar sus imágenes. El Taller le brinda las posibilidades de participar en exposiciones colectivas en la universidad y en el Cecut.

Sus temas son variados como cualquier estudiante en formación, si bien en casa tenía un padre cuyo peso era de ineludible influencia política, resulta extraño que un tiempo se dedicara a realizar series de gatitos y perros, teniendo todo un mundo por comerse, fotográficamente hablando, ya que por aquellos años, no hay que olvidar, en el país se vivían episodios de cambios políticos. En 1996 el arq. Daniel Rubio, director del Departamento de Arquitectura y Diseño de la UIA, quien lo hace regresar a la universidad pero ahora como profesor de Fotografía I y II, en la carrera de Diseño Gráfico y, en el transcurso de los años, en la de Comunicación. Su retorno a la docencia le abre la puerta a otras oportunidades quizás impensables: sus alumnos lo retroalimentan con ideas para futuros proyectos propios. Pasado un año también ingresa a dar las mismas materias de la UIA en la Universidad Xochicalco en las carreras de Arquitectura y Diseño Gráfico. La exigencia de superación profesional en las universidades para mantener sus cátedras y ascender en el escalafón salarial lo obliga a actualizar sus conocimientos que, para efectos de su pasión fotográfica, decide apuntalarlos hacia la tecnología y diseño gráfico. Así mata dos pájaros de un tiro. Cumple con los requisitos establecidos por las autoridades universitarias y adquiere conocimientos que le servirán en su quehacer fotográfico. Gracias a la apertura de centros de capacitación en las artes como el CEHU, en 2001Yuri se inscribe en el curso “El cuerpo como obsesión”, ofrecido por Pedro Slim, en el que se “enfrenta a sí mismo, a conocer su cuerpo”. Les ponen de ejercicio “retratarse en parejas y desnudos”. No tenía contemplado desarrollar esta temática de los desnudos, sin embargo lo beneficia al lograr desinhibirlo y explorar otras formas de expresión. Una prueba de ello es un autorretrato en donde aparece desnudo en la regadera con un plástico en la cabeza y cubriéndose las partes nobles con una revista que trae de portada una mujer decapitada. El ciclo de tomar, revelar e imprimir sus fotos en blanco y negro, andar en la calle captando escenas espontáneas llegaba a su fin en noviembre del 2002 y evolucionaba a lo digital con su camarita Minolta. De agosto a diciembre de ese mismo año toma un diplomado sobre fotografía que constaba de cinco módulos, organizado por la U.A.B.C. Es el módulo V, titulado “Iniciación”, a cargo de Gerardo Montiel Klint que le “cambió todo”, pues en él debe “invertir el proceso del trabajo, simplemente ahora, yo ya había pensado qué es lo quería hacer, qué es lo que quería decir con los proyectos fotográficos. Bueno si lo haces cuando sales a la calle y lo traes prácticamente en la mente, ¿no?, pero ahora era más a partir de la idea, del concepto, de ponerte a escribir qué es lo que quieres hacer y después todo eso es pasarlo a construir una imagen fotográfica, que es lo que hace mucho la gente en diseño”. Los cursos anteriores y la irrupción de

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la era digital vinieron definitivamente a facilitarle el camino hacia nuevos horizontes en donde ya contaba con los elementos necesarios para expresar cualquier inquietud visual. Por ejemplo afirma: “en un sólo espacio de 4 x 5 metros puedes hacer tu trabajo. En el momento que quieras y en la comodidad de la casa”. Lo practicó, lo asumió pero el proceso de cambio tecnológico-cultural sigue pesando en él. Atado a su formación química admite que su trabajo: “ya no lo siento, no lo toco, no lo estás haciendo con tus manos”. Ya no es como antes cuando: “esta foto la hice. Es 100 % mía. La tomé, la revelé y la imprimí”.

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TJ REALITIES Yuri Realities La irrupción de los programas llamados “Realities” desató un boom televisivo, cuyo interés se centraba en enterarse en directo de la vida en encierro que por meses pasaban personalidades reconocidas de la farándula, provocó que el profesor Yuri adaptara esa idea a su realidad más cercana y violenta que insistentemente asolaba a la ciudad. Creó “Tijuana Realities”. Con extremo humor negro, una presentación colorida, creación de personajes (“ocupaba modelos” por eso a sus estudiantes (…) “les pedía su colaboración para hacer esto, les platicaba la foto, qué quería decir, dónde las íbamos a tomar, en interiores o exteriores”), víctimas de secuestro, golpeados; jóvenes en actitud retadora, de personas adultas y con detalles tipográficos cuidadosos, eran los elementos constitutivos que a manera de carteles, reportaba las diversas manifestaciones de criminalidad, de las tragedias de los migrantes con los polleros, se mofaba del menosprecio del pocho (mexicoamericano) hacia el español, exhibía a Saddam al implorarle ayuda a Al Qaeda, retomaba el nombre de una película taquillera para conjugarla con un presunto santo mexicano, patrono de los narcotraficantes, en pocas palabras, la versión narco del señor de los anillos (Yuri dixit), etc. Como anécdota, el día de la toma de fotografías en la ermita construida a Jesús Malverde en la carretera libre a Tecate, el maestro Manrique llevaba un modelo que por la forma en que iba vestido y “lleno de anillos”, semejaba un criminal verdadero, esto ocasionó que la gente que estaba esperando con la intención de dejar sus ofrendas no quisiera acercarse y menos aparecer en la imagen. Este conjunto de fotos era su irónica declaración de protesta, de repudio al estado de cosas que parecía no tener solución ni fin. Con este conjunto de fotos obtuvo su primera mención honorífica en la Bienal de Fotografía del Distrito Federal. Y con ella el inicio de una cadena de triunfos y satisfacciones que partieron, principalmente, de un par de cursos definitorios que dos años atrás desinhibieron su persona para desplegar su espíritu creador al ofrecerle las posibilidades de generar obra basada en situaciones elementales de formación y economía familiar, gusto por la música, digerir e interpretar noticias, con recursos técnicos a su disposición a cualquier hora, sin tener que andar esperando y/o correteando instantes irrepetibles, además de reducirle costos de producción. Un escenario inmejorable.

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FRONTERA MORTAL

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MEXICAN PRIDE

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PRISIONERAS DE LA IMAGEN

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T.J. FRIDA’S

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AL QAEDA... I NEED YOU

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EL SEﾃ前R DE LOS ANILLOS

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A VER CUANDO TIRAS TU COCHINERO “La Realidad se volvió un trabajo de Colección” De ver cómo los fotoperiodistas tomaban sus imágenes para publicarlas inmediatamente mientras que a él únicamente le quedaba la opción de difundir su obra cuando había una exposición, pasó a explorar otras estrategias como definir proyectos que incluso le favorecieran más en su carrera. Impactado por la tipografía, color y encabezados, desde 2001 compra sistemáticamente la segunda edición de El Mexicano. Con el tiempo comienzan a verse los frutos de la inversión hecha al grado que “la realidad se volvió un trabajo de colección”, pues presentan “un panorama, una radiografía de lo que en ese momento estaba sucediendo aquí en Tijuana”. En esta ocasión sería el autor mismo quien sería el personaje de la historia.

Un hombre enajenado, completamente absorto en la lectura interminable del vespertino, ya fuera a la hora de comer, de ir al baño, de dormirse y taparse con las portadas, que chorreaban la violencia insaciable que mantenía atrapada tanto a la ciudad como a su imagen. “Estoy tomando algo que se publica en los medios de comunicación. yo lo agarro, lo digiero como cualquier ciudadano, (…) o sea, lo estoy interpretando, (…) todo ese bombardeo; puede ser violencia, pueden ser temas sociales, puede ser cualquiera. Hoy me preguntaban en Hola California!: por qué El Mexicano?, por qué esas portadas?, porque me impactaba lo visual, no me interesaban las fotos de los muertos, (…) a mi me interesaba el impacto visual del color: amarillo y rojo, la tipografía y el mensaje: un texto que te dice en una frase qué final trágico pudo tener cierta persona,(…). Si veía ejecutado, entamalado, (…) dices, ay guey!, se echaron a otro cabrón, y a mí en qué me afecta. Se volvió trabajo de colección. La realidad se volvió un trabajo de colección”. (…) Con el tiempo la casa se convertía en “una gran bodega de puros recuerdos”, diría Yuri. El esfuerzo realizado y las negociaciones que debió enfrentar para mantener a salvo su capital de inspiración con su mamá Maria Asunción, quien le recriminaba “a ver cuándo tiras tu cochinero”, le redituaron dividendos muy halagadores, dado que obtuvo dos primeros lugares: uno en la categoría de color en la Cuarta Bienal de Fotografía de Baja California, organizada por el Instituto de Cultura de Baja California y el otro en la Octava Bienal Universitaria de la U.A.B.C., ambos en 2004, que resultó ser un año de varias satisfacciones y plenas para él, de afianzar ideas. Y vaya que lo hizo pues dejó de invitar a su hermana y mamá a sus exposiciones, de informarle sobre los cursos tomados y de compartir las gratas noticias de sus triunfos ya que implicaba recibir comentarios como: “¿en eso tiras tu dinero? ”, ¿ya terminaste el curso con Bojorquez? (debió contestarle que los cursos eran para toda la vida) y “¿cuánto nos vas a dar para la casa?”. Esa ya no fue una realidad coleccionable

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LA CIUDAD MALDITA

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A VER CUANDO TIRAS TU COCHINERO

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A VER CUANDO TIRAS ESE COCHINERO

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CENA MORTAL

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A VER CUANDO TIRAS ESE COCHINERO

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PROFE PERVERSO

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A VER CUANDO TIRAS ESE COCHINERO

LA CAMA DE LOS SACRIFICIOS

A VER CUANDO TIRAS ESE COCHINERO

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UNA HISTORIA PARA CONTAR Una Historia para Contar “Empezó cuando tu me dijiste, no sé si fue el 2001 o 2002, ¿cuándo le vas a hacer la exposición a tu papá? y no se me olvida, que: ¿se la vas a hacer cuándo esté vivo o cuando esté muerto?. “Muchas veces, cuando hago los proyectos tiene que haber algo así como un detonante, (…) algo que digas: es la hora de concretarlas, se atravesaba Fotoseptiembre 2005.

Ahorita, en caliente, mi papá todavía está vivo, presento el proyecto. Prácticamente lo comencé a hacer, sin querer, para la exposición de él en el 2001, cuando estaba llevando un taller con Elsa Medina aquí en Tijuana sobre Expresión Fotográfica”. A mi papá le acababan de cortar la pierna. Le pregunté a ella si podía registrar todo lo que era la enfermedad de mi papá. Me contestó: “no vas a ser el único fotógrafo que ha retratado a sus padres cuando están en su fase terminal”. Me habló del trabajo de Pedro Meyer sobre sus papás que murieron de cáncer. (…)Me pongo a desarrollar (…), incluso a grabar en parte con cámara digital algunos pequeños discursos que él se aventaba cuando tenía Alzheimer, (…) y como todo eso es con plazos, dije: (…) qué quiero contar de mi papá?. Era un proyecto muy largo de toda la vida de él. (…) Fue en función a lo que yo pude limpiar, escanear, mandar imprimir, inclusive estuve imprimiendo un día antes de la exposición. Agarré varias imágenes de lo que fue la historia política de él, y partir de lo que pude juntar, alrededor de 25 fotografías fue lo que expuse en el Lugar del Nopal. Me hubiera gustado tener mucho más tiempo para armar un mejor discurso en función de su vida política y separar lo que fueron sus retratos de estudio, de casa, del retrato familiar. El Jofras me ayuda, le entraba a los fotomontajes, trabajo que yo no sabía hacer. Me hizo la foto, la escaneamos, se metió, se injertó, se le puso la marialuisa. Ese jale, aunque ahora lo veo sencillo porque ya lo puedo hacer, en su momento fue difícil. Era una nueva forma de expresión. Estamos hablando de principios de 2002. Fueron mis primeras imágenes. Simplemente se trataba de construir una idea con las herramientas digitales. Mucha gente en esos años se dedicaba a meterle filtros para dar ciertos efectos. (…) Me di por bien servido y, cosas de la vida, mi papa murió dos meses después. Y cada vez me acuerdo de eso, porque me dijiste: “ cuándo le vas a hacer la exposición a tu jefe. Y pues se la hice dos meses antes de que él muriera. Fue oportuno”.

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AYER Y HOY

UNA HISTORIA PARA CONTAR

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MUNDO DE LOS SUEﾃ前S, TIJUANA 2001

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UNA HISTORIA PARA CONTAR

ยกVIVA DIOS! 2004

UNA HISTORIA PARA CONTAR

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UNA IMAGEN PARA UnaRECORDAR, imagen para2004 recordar, 2004

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UNA HISTORIA PARA CONTAR

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LA CASA DE LOS MANRIQUE La Casa de Los Manrique y la Cultura del Retrato “Hace 30 años, cuando yo entré al club de fotografía con el profesor Eliseo Hernández ahí empecé a hacer mis primeras imágenes fotográficas.

Pasan 30 años después cuando la hija de mi vecina Marisela entra a la Poli y le dije: yo estuve ahí en la Poli, en tal grupo, en la mañana, había un club de fotografía, entonces creo yo una historia ficción, donde la niña encuentra imágenes fotográficas mías olvidadas en los salones en cajas de la secundaria, en función a eso me visita a la casa con otra compañera y me dice: sabes que Yuri encontré unas fotos tuyas de la Poli, cuéntame que pasa con esa historia, en función a eso yo le saco fotos de mi álbum, desde la secundaria hasta la universidad y les voy mostrando parte de la historia de mi vida, esas imágenes que ella con su amiga están en la sala de mi casa, se iban a estar proyectando sobre las paredes, ellas no iban a estar viendo las imágenes, ¡ah mira!, como si fuera proyector de transparencias. A la hora que se quiere hacer el proyecto resulta que se vuelve un proyecto muy largo, tenía tantas imágenes fotográficas que al rato dije: van a ser 50, 60 fotos. (...) Viene el cambio cuando entro al taller de Javier Ramírez, le presento mi proyecto, vimos que se hacía un trabajo muy repetitivo. (…) Es cuando él me sugiere, sabes que mejor ve tomando fotografías o injertando fotografías tuyas pero en diferentes áreas de tu casa, (…) y le haces un recorrido visual. (…) Se me hizo más interesante. Hice unas pruebas en la casa, (…) se redujo la cantidad de imágenes, de 50 o 60 que yo había conceptualizado (…) a un proyecto como de 12 imágenes. (…) Empecé a ver todos mis álbumes fotográficos. Y lo que vi fue imágenes de todo lo que nos habían tomado de retratos a nosotros los fotógrafos. En la casa había la cultura del retrato, por lo tanto, cada año nos llevaban (…) al estudio. Cuando era nuestro cumpleaños y cuando bailábamos en la primaria. Se llegó a tener un gran acervo de fotografías. Mi mamá, en cierto momento, se enfada de las fotos, las quita, las mete en baúles o van a dar al closet. Esas imágenes yo las rescato a través de lo que es la imagen digital. Retrato mi espacio, mi casa y esas imágenes que en cierto momento y espacio ocuparon esas paredes, regresan en un formato mucho más grande y le doy vida a esas imágenes. Es, como que las fotos te lo agradecen: Oye, me sacaste del baúl de los recuerdos, más bien, del baúl de los olvidos”. Una de las imágenes presentadas no deja de ser elocuente por varias razones. Don Blas aparece serio a un lado de un cartel de los Rolling Stones en una foto y en otra sonriente junto a un mural con figuras políticas mexicanas y consignas de libertad. En el momento de la toma Yuri no tenía concebido este fotomontaje sin embargo exhibe el choque de mundos y contextos en que cada quien se siente mejor y muestra, a la vez, la libertad y apoyo que su padre le confería a su hijo, incluso para acompañarlo a las inauguraciones de las exposiciones en las que el comunicador Yuri participaba. Las alianzas intrafamiliares se volvieron de género impensablemente..

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MI HERMANA Y YO

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MI PADRE CON FRIDA Y DIEGO

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LA CASA DE LOS MANRIQUE

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CONSOLA DE DON BLAS

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LA CASA DE LOS MANRIQUE

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MI PADRE CON LOS STONES Y ZAPATA

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LA CASA DE LOS MANRIQUE

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YURI RECÁMARA

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LA CASA DE LOS MANRIQUE

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ADICTO AL DEKTOL Adicto al Dektol Es la muestra más reciente de su producción en el que deja atrás temas sacados de los periódicos, los reemplaza y actualiza por los de las revistas de moda y los usa, “a su estilo”, para criticar “a los directores académicos que jamás pasaron por un pinche cuarto oscuro y nomás dicen: se elimina. Y uno se pregunta: tu ni siquiera produces fotografía a nivel profesional”. Es sorprendente su amor por los laboratorios de fotografía y coraje por la desaparición de éstos y su sustitución por grandes estudios de imagen digital. Parte de la premisa de que “esa fotografía yo la hice. Es 100 % mía. La tomé, la revelé y la imprimí”. Pero a la vez, no deja de ser curioso y hasta cierto punto contradictorio que habiendo probado ya las ventajas de la era digital en trabajos que han sido merecedores de premios se moleste por ese cambio tecnológico-educativo. El planteamiento del tema exhibe nuevamente el tino y placer que le brinda manejar la ironía como medio para presentar a un potentado rodeado de mujeres jóvenes y hermosas que al saber que se ha retirado de la escuela, le informan sobre la tragedia de un caso nuevo de eliminación de un cuarto oscuro. La noticia le genera una gran depresión pues por años ha consumido y abusado del dektol. Afectado neurológicamente por tanta inhalación del químico, sus proyectos fotográficos quedan fuera de la realidad y, por lo visto, no se ha dado cuenta de la necesidad de cambiar los laboratorios por estudios digitales, que a su vez le provoca un paro cardiaco y una muerte súbita. Las mujeres, dedicadas al mundo de la moda, lo acompañan en sus últimos momentos de vida y no desaprovechan la oportunidad para posar. Cada quien se sirve de la oportunidad y/o adicción de una vida compleja y paradójica. Autobiográfica también.

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ADICTO AL DEKTOL I

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ADICTO AL DEKTOL II

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ADICTO AL DEKTOL III

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ADICTO AL DEKTOL

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Llamar la Atención Esta presentación no puede estar completa sino menciono la sorpresa que me causó las aficiones del hijo de un comunista leninista, de un comunicador convencido y de quien le apasiona el manejo de lo gráfico y los símbolos. No hay que perder de vista que no solamente por cuestiones de puntaje en su escalafón de docencia estudió la maestría de diseño gráfico sino también por satisfacción profesional. Por su tío don José y su primo Ramón, a Yuri le nació el placer de ir a los “showguns” en Pomona, California para ver la “disneylandia de armas y parque”, en donde podía apreciar desde armas usadas en la Primera Guerra Mundial como las pistolas que en su momento lo atrajeron: las usadas en la serie televisiva de “Starsky y Hutch”, unas pistolas 9 mm y una 357 Magnum, respectivamente o la Beretta 9mm que manejaba Mel Gibson en el filme de “Arma Letal”. Cuando le pregunté, la primera vez y sin haberlo grabado todavía, la razón por la cual le gustaban esas colecciones nacionalsocialistas, sigo quedándome en el asombro, era porque quería “llamar la atención”. “Tu sabes de las atrocidades que se cometieron, cuánta cantidad de judíos murieron. Mataron 20 millones de rusos, 6 millones creo que fueron de judíos, y a pesar de eso la suástica nazi te impresiona y a la hora que ves la bandera enorme, la SS, la suástica, dices, yo quiero tener una de esas en mi casa, me vale madre, me cai que si yo tuviera una pared grande, me cai que sí pondría una bandera nazi. O sea, no es porque sea yo fanático de Hitler, ni nada de eso. Pero, pos, el verlo, Roberto, tienes que verlo, tienes que ver esto. Tú entras a un área, a una sección de armas donde te encuentras de todo hasta ametralladoras de los cazas de los aviones norteamericanos de 25 cms de largo. (…) El que entra ahí le gustan las armas, está disfrutando todo el festín, los rifles AK 47, todos los rifles que encuentras y al que le gustan las armas pues es un festín, deleite estar viendo todo eso”. “(…) Un día se lo comenté al Páez, años después. Me dice: yo no iría porque ahí toda la gente queda fichada. Porque das tu nombre, tú domicilio y de donde vienes. Me dice: yo no iría porque después dicen: el Oscar Páez vino aquí y estuvo en un show de armas en Estados Unidos. Y más para la gente que ha sido de izquierda. Es una forma de, este guey anda viendo armas.

Quiéralo o no el FBI. Pero eso cuando yo estaba más morro yo no lo visualizaba”. Debo señalar que hasta ahora no se ha cumplido su sueño de tener una Beretta 9 mm debido a que no tiene “dónde ponerla y necesitas tener un permiso”..

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DIRECTORIO Consejo Nacional para la Cultura y las Artes Consuelo Sáizar Presidenta Centro Cultural Tijuana Virgilio Muñoz Director Claudia Basurto Subdirectora de Difusión y Relaciones Públicas Armando García Orso Subdirector de Exposiciones Illya Haro Gerente de Exposiciones Manuel Luis Escutia Coordinador de Exposiciones Carlos A. García Cortés Gerente de Registro y Colecciones Miriam G. García Aguirre Investigadora Juan Alfredo Valles Arzate Investigador Luis Del Toro Diseño Gráfico Cuadernos De Fotografía Roberto Córdova-Leyva Coordinador

CUADERNOS DE FOTOGRAFÍA YURI REALITIES Yuri Manrique Se terminó de imprimir en septiembre del 2010 en Tijuana, B.C. Impreso en papel couché 100lbs.

Para su distribución se tiraron 500 ejemplares

BLAS YURI MANRIQUE

Nacido en Tijuana B.C. México, el 18 de abril de 1961. Egresado de la carrera de la Arquitectura por la Universidad Iberoamericana Tijuana (UIA) 1986. Maestria en Diseño Gráfico Digital (UIA) 2010. Ingresó al Taller de Fotografía de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) plantel Tijuana (1991 –2010). Durante 19 años le ha tocado participar en todas las exposiciones que organiza el taller, dentro de las cuales se puede mencionar Atisbos y Signos e Imágenes. Por medio del taller ha podido participar en varias exposiciones fotográficas dentro del marco de los Congresos Latinoamericanos de Estudiantes de Comunicación Social, en los países de Venezuela, Perú, Uruguay y en el Museo de la Revolución en la ciudad de la Habana, Cuba.

En los últimos años ha participado en varios concursos de fotografía a nivel estatal y nacional. Desde el año 1996 ingresó a la docencia a la Universidad Iberoamericana Tijuana a impartir la asignatura de Fotografía a las carreras de Arquitectura, Diseño Gráfico y Comunicación. A partir de 1997, también ha impartido sus conocimientos de fotografía en las Universidades de Xochicalco, desde el 2002 a las carreras de Diseño Gráfico y Comunicación en Univer y por ultimo se incorpora a impartir Fotografía a la Escuela de Artes de la UABC. Dentro de los cursos de fotografía que ha llevado, cuenta con un diplomado de Fotografía por la UABC-Centro de la Imágen (2002). Talleres de fotografía impartidos en el Centro de Humanidades de B.C., con distinguidos fotógrafos como, Armando Cristeto, Francisco Mata, Elsa Medina, Pedro Slim, Missael Torres, Rogelio Cuéllar, Alicia Ahumada, John Mraz, Ireri de la Peña, Javier Ramírez Limón, Gerardo Montiel, Yvonne Venegas, Eduardo de Regules, Andrés Reyes Botello, entre otros. Además de asistir a varios Congresos de Diseño Gráfico y Bienal del Cartel dentro de B.C. y en estados del interior del país.

Como fotógrafo ha colaborado con sus imágenes, en diferentes medios de comunicación de la ciudad de Tijuana, entre los cuales están El Mexicano, Frontera, El Sol de Tijuana, Zeta, Diario 29(desaparecido) Arte de Vivir, Tijuana Metro. Las participaciones son en su mayoría para la sección de cultura y sus diferentes suplementos. También ha colaborado con sus imágenes en las diferentes publicaciones de la Universidad Iberoamericana Tijuana, como Desierto Mar, El Bordo, Ibero Plana. Ha participado en exposiciones en distintos espacios dentro y fuera del país