Es justamente durante este período cuando los Estados del llamado “Primer Mundo” consolidaron un sistema que ha establecido una jerarquía en el tránsito internacional con la distinción entre un “buen pasaporte” y uno “malo”. Paralelamente, han impuesto tratados de supuesto libre comercio, expandiendo sus multinacionales de manera global, extrayendo con escasas dificultades e indiscriminadamente recursos naturales —con su consecuente daño ecológico—, además de otras acciones que son causa significativa del empobrecimiento del antes llamado “Tercer Mundo”. Paradójicamente, son estos mismos centros de poder quienes levantan muros, controlan cuerpos y se “protegen de la amenaza migrante”. Una mirada crítica sobre lo anterior y sus respectivos aparatos de control revela de manera dramática la urgencia de repensar de forma transversal la cuestión migrante. Un punto de partida posible es la noción de ciudadanía. El derecho a la ciudad (1968), que reclamaba el sociólogo francés Henri Lefebvre como proyecto político de transformación radical de la vida cotidiana, resuena cuando nos preguntamos por el estatuto que define al sujeto migrante en cuanto ciudadana de tercera clase o, incluso, como no sujeto de derecho. El derecho a la ciudad implica el “derecho de todos los ciudadanos a figurar en todas las redes y circuitos de comunicación, de información, de intercambios”3; aunque se formule como un derecho fundamental, en la práctica éste no se extiende a todas quienes habitan la ciudad, sino sólo a aquellas que el Estado considera como ciudadanas. Sin embargo, si bien a nivel institucional existe un ocultamiento de ciertas subjetividades, el espacio de la vida cotidiana puede ser pensado como lugar y sujeto de praxis política colectiva. En este espacio no regulado por el aparato estatal, el papel de prácticas como el arte se entienden como un “trabajo productor liberado de los caracteres de la alienación”4 para transformar críticamente lo contemporáneo.
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Ana Nuñez, “De la alienación, al derecho a la ciudad. Una lectura (posible) sobre Henri Lefebvre”,
Revista THEOMAI, n.º 20, 2009, p. 43. 4
Henri Lefebvre, Materialismo dialéctico, Buenos Aires, elaleph, 1999, p. 122.
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