Veinte años de ilusión progresista

Parafraseando a Joan Manuel Serrat, “hace veinte años que tengo veinte años, veinte años y aún tengo fuerza, y no tengo el alma muerta, y me siento hervir la sangre”.

Veinte años de alcalde de Benabarre donde, después de una legislatura sin candidatura socialista, un grupo de personas ilusionadas asumimos la mejor tradición progresista de Benabarre. Tradición que, en nuestra vida municipal alcanzó su período más brillante en los años 80. Y por eso nos presentamos en 2003 a las elecciones municipales bajo las siglas del PSOE.

Ilusión progresista, como eslogan de campaña, por el desarrollo de Benabarre, por sus grandes posibilidades de futuro, proponiendo como herramientas para conseguir este objetivo el trabajo en equipo, la participación, la transparencia y la planificación.

No sabíamos si se podría hacer todo lo que proponíamos, no teníamos experiencia en gestión municipal; lo único que sabíamos era que nos hacía mucha ilusión que Benabarre progresara

Durante veinte años hemos recorrido ese camino de la mano de los benabarrenses. La mayor parte de las ideas que durante este tiempo hemos propuesto se han hecho realidad y hemos conseguido transformar Benabarre, localidad que se ha modernizado, que ha cambiado sustancialmente en todos los ámbitos con más y mejores infraestructuras, equipamientos y servicios. Mejoras con el sentido progresista que queríamos.

Mi condición de diputado ha significado una oportunidad incuestionable al poder estar donde se toman decisiones clave para el futuro de Benabarre y de nuestro país.

Y desde ese convencimiento y con la misma ilusión progresista de siempre, vuelvo a encabezar la candidatura municipal. Porque tenemos que continuar el trabajo, porque no nos basta lo conseguido, porque queremos seguir avanzando e impulsar todas nuestras posibilidades para garantizar un futuro estable, próspero y sostenible para Benabarre.