[Cap.18]
La fuga de Logan.
Músicos extremeños en el mundo exterior - Parte 2 [11] Marcos Deker dejó Extremadura en 2008. Según él mismo cuenta lo hizo con la idea de crecer como músico. Fijó residencia en la provincia de Barcelona, comenzó estudios de música moderna y jazz y a participar en proyectos como La Cia Grafton. En torno a 2009 firmó con su nombre 1024 Kms, un trabajo de aires sureños y autopistas y renegados que hay que escuchar al menos una vez al mes. Actualmente forma parte de Partido, un interesante proyecto que mezcla los aires folk a la americana con el sosiego pop. Antes de marcharse, desde Badajoz pisó los escenarios militando en Distrito Desperado. [12] Con ocho años, Gonzalo Prada comienza en el conservatorio cacereño con la indicación paterna de que abandonara las tardes de bicicletas en una ciudad que además no es muy amiga de ellas. Con 15 años forma parte de Pía Madre y su hogar son los garajes de la Casa de Cultura de Moctezuma. Como nadie quería tocar el bajo, el bajo sí le tocó a él. Durante un festival celebrado donde los toros se salió de madre con el Come together para que le viera su novia. Pronto descubrió que ella estaba de botellón mientras él entonaba la coplilla en un inglés de Cáceres. Abandonó Extremadura. Se dirigió a Madrid con la excusa de estudiar y olvidarse de la música. Aparecieron nombres como Chema o Manu y siempre Ariadna. Y eligieron uno de los nombres
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