1 minute read

Museo

Belenes del Mundo… y de aquí

Un año más, durante todo el mes de diciembre y hasta el día 7 de enero, el Museo de Arte Sacro tiene abierta su exposición Belenes del mundo. Cuando leemos este título pensamos en belenes singulares, incluso exóticos. Llegados de otros países a veces muy lejanos, realizados con materiales inusuales, en ocasiones con personajes sorprendentes -la mula y el buey suelen transformarse en jaguares, llamas, jirafas, osos panda…-. Pero Euskadi también forma parte del Mundo. Así que en la exposición también tienen cabida nuestros belenes. Que encajan más fácilmente en nuestra imagen de lo que es un belén.

En el Museo de Arte Sacro puede verse también uno de esos belenes que podríamos llamar “tradicionales”. Este año está expuesto un belén especial que combina las figuras de dos belenes.

De la parroquia Santa María de Amorebieta

Los Reyes y pastores han llegado desde la parroquia de Santa María de Amorebieta (donde siguen estando el resto de las imágenes). Son parte de un belén de los años 50 del siglo XX, fabricado por solventes artesanos catalanes, una tierra donde los “pesebristas”, como allí les llaman, siguen manteniendo una importante actividad artesanal. Es un modelo clásico, espectacular por su detalle y colorido, y que fue tan popular que aún podemos verlo en otras parroquias, como la de Zeanuri. El misterio, de origen catalán

Pero el Misterio procede de otro belén. O, para ser exactos, de la recreación “belenista” que en 1971 se hizo de los momentos estelares del Antiguo Testamento. Patrocinado por Iberduero –hoy Iberdrola–, fue un montaje de luz y sonido que recorría a través de varios escenarios toda la “historia sagrada” desde Adán y Eva hasta el Nacimiento de Jesús. Y precisamente de la escena final de aquel viaje hemos tomado las piezas de San José, la Virgen y el Niño, con sus fieles acólitos el buey y la mula.

Estas piezas fueron diseñadas por el dibujante bilbaíno Emilio García Ergüin y realizadas por los barceloneses hermanos Castells, la tercera generación de una prestigiosa saga de “pesebristas” cuya obra está representada en varios museos. Aquel montaje fue expuesto en Bilbao en 1971, y en años sucesivos viajó por Donostia-San Sebastián, Pamplona, Madrid, Burgos, Logroño, Ávila, Valladolid, León, Zamora, Salamanca, Cáceres, Toledo, Alicante, Castellón… para terminar recalando de nuevo en Bilbao •