Buenas noches: Alegraos muchachos que ya nos llega el diecisiete de mayo Santa Quiteria.
Sean mis primera palabras de agradecimiento a Pablo y Pedro que me encomendaron que os dirigiera estas palabras como preludio a las fiestas de Santa Quiteria 2008. Gracias a todos vosotros por vuestra presencia aquí, momento que demuestra una vez más, el afecto, el amor, y la devoción que prestamos a nuestra Excelsa patrona Santa Quiteria. Y por supuesto agradecer a mis antecesores, el respeto, el amor y el fervor que me inculcaron hacia nuestra querida santa. Pues como dice la coplilla y en mi caso es así: Cuando yo era chiquitito mi abuelo me enseño a mi a decir Viva Quiteria la del Barrio de San Gil.
Los días de Abril pasan y estos hombres y jóvenes comienzan sus recorridos por las calles, pidiendo, colocando músicos, y demás preparativos, no menos hacen las mujeres con sus pinturas, limpiezas y demás preparativos, pues llega tu fiesta Quiteria y todo tiene que estar a punto, tiene que estar como tu eres una Maravilla de Dios.
Da comienzo el novenario en tu honor, tenemos que darte gracias por tu protección. Que madre no esta contenta con ver a tus hijos y familiares a su alrededor. Y cuando esta noche termine y aclare el nuevo día, los minutos se hacen horas, los nervios se nos alteran, pues han tenido que pasar trescientos sesenta y cinco días, para hacerse presente en esta Noble y Leal Ciudad y en este Barrio de San Gil la música de la Cruz Roja de Sevilla. Ya divisamos el autobús, ya ha llegado a la chopera. Calles engalanadas, gaitas y tamboril, cohetes, saludos y lágrimas, lágrimas de emoción compartida con familiares y amigos que nos acompañan y recuerdos por aquellos que por motivos de trabajo o enfermedad no lo están, pero si lo están contigo Madre y también con nosotros en el corazón y en el recuerdo. La música ya está formada y como dice la coplilla Tres cosas tiene mi Barrio que no las tiene Madrid, calle Nueva, la Chopera y la Ermita de San Gil. Así hace la entrada la música, hombres mujeres y niños todos al unísono mano sobre mano, formando la gran familia de este Barrio de San Gil.
Y a toque de cornetín Las Corsarias siendo estos los compases de nuestro primer galopeo, la Fiesta ya ha comenzado en la chopera, avanzamos por la calle nueva con parada en el Leis, para degustar nuestra rica limoná recuperando fuerzas para seguir galopeando hasta la presentación de la música a las autoridades y desde allí hasta la ermita para saludar a la mártir gloriosa pues a ella le debemos el honor de ser nuestra Santa y Protectora. Nuestro Barrio, nuestra ciudad esta en fiestas. La tarde va transcurriendo con galopeos y verbenas y al finalizar la tarde, el primer galopeillo de las gaitas y tamboril, que con sus primeros acordes hacen vibrar el corazón y los pies de cada quiterio y cada rincón del Barrio. La noche ha terminado, amanece el nuevo día, y el trinar de los pájaros nos anuncia la alegría.
Hoy es tu día Quiteria. Hoy el padre te aceptó como esposa y tú como ferviente cristiana entregaste al acero tu garganta y sufriste el martirio de tanta gente pagana, pero tú con tu corazón puro y el alma entregada a Cristo, pásate a la otra vida y el padre te proclamó Santa. Que sea Tu ejemplo santa mía, el que nos marque el camino que como devotos tuyos que somos, debemos recorrer para poder imitarte y que Tú día a día desde tu altar nos indiques cuales son los pasos que debemos de seguir. La dulzura de tu cara, el blanco vestido junto al lirio que acredita tu pureza, el manto rojo y la palma símbolo de tu martirio, por eso tú eres la virgen y mártir Quiteria, Espejo de los quiterios, Hermosura de la Pascua. A media mañana entre un devenir de quiterios en la plaza de la Ermita con repiques de campanas, entre sollozos y lágrimas sales de su casa esa Bella doncella, esa Flor sin espinas, camino de la parroquia, lugar donde según las crónicas de la época fue donde primero recibiste culto y adoración por los hermanos Templarios y el pueblo.
En medio de ese Jardín Florido que es tu carroza haces tu procesión anual Quiteria rodeada de hombres, mujeres, jóvenes y niños de este tu barrio, todos con sus mejores galas, no es para menos la ocasión. El transcurso de la procesión mista lleno de recuerdos, para cada uno el suyo y para todos uno en común, vivas que salen del corazón de los quiterios y quiterias. No tengo por menos recordar de mis años de infancia las vivas de la tía Ruperta, la Balbina, mi madre, mi tía Luisa, mi tía Ángeles y Ángeles la Tacola entre tantos y tantos otros. Y ahora entre otros jóvenes a Rosa, Noemí, Marta, Laura, y tantos muchos. Estamos en la parroquia, celebrando la eucaristía en tu honor, vuelves a estar en la calle, continuando la procesión y a pocos metros Quiteria, Mario te esta espera en el balcón, te recita su poesía todo llena de emoción y continúa con las vivas que le salen del corazón: Viva la mujer fuerte, viva mi Quiteria Amada.
Girando hacia la calle mayor aquí la calle engalanada con todo su esplendor, las banderas y las luces, tu corona y la palma son. En un punto de la calle la música se hace presente, las notas caen del cielo e invaden el corazón de los presentes. Paso a paso llegamos a la chopera, donde no se si os habéis dado cuenta que al paso de Quiteria las hojas han cambiado su color, el verde es más fino y más intenso está pasando la Rosa de Jericó, la Reina de los Ángeles, y aquí en la chopera en la plaza de San Sebastián se produce el más bello momento de toda la procesión, poner a tus pies Santa Mía a todos los nuevos Quiterios, para que los adoptes con tu manto protector, y en este mismo momento la foto que es toda una obligación, pues hay que tenerla en casa con muchísimo honor. Saliendo de la Chopera por las Monjas, Ranero y la Cruz la Josefa, la Jacinta, La Vita, Pilar, Isabel, Julia y tantas otras desde sus casas te van diciendo adiós, y en la plaza de la ermita repican ya las campanas, las gargantas casi secas siguen con incesantes vivas, todos nos atrevemos a tutearte, a agasajarte y despedirte con canciones y vivas
que entre sollozos gritan hasta el año que viene santa hermosa, protégenos un año más. Así termina la mañana, que no lo es, sino tarde y bien entrada. La tarde-noche continua con galopeos y verbena y al final del galopeo ya en la calle Mayor, con confetis y coplilla que muestran nuestra alegría. La gaita y el tamboril comienza ya nuestra danza y una cosa os voy a decir que no perdamos nuestras costumbres. Y como gran colofón a este gran día una explosión de luz y color para terminar el grandioso día. Llegamos al ecuador de la fiesta, que yo le daría otro nombre, día de puertas abiertas, que tanto se lleva ahora, pues el barrio de San Gil está abierto a familiares, vecino y amigos, no hay fronteras, aquí cave todo el mundo, esto nos lo enseño la Virgen y Mártir Quiteria. La mañana esta llena de actos, diana de gaita y tamboril y aquí llega a mi mente como una fotografía a Valero acompañando a los gaiteros, para mí un grato recuerdo de nuestros antecesores. La Diana de la Música me trae otros tantos recuerdos en las cuatro esquinas la Vitoriana, Nicasia Quiteria, María, Mercedes, Pilar, Josefa y otras tantas con sus pastas, limoná, café y copa, a todos y para todos. En la calle Mariano Pozo, Ángel y Amparo nos esperan con pastas , café y churros si los hace Alejandro, que algún año se le olvida, de aquí que yo diga día de las puertas abiertas.
A media mañana celebramos la Eucaristía de campaña en la plaza de San Gil, besamos la reliquia y ante tu presencia Quiteria, niños, jóvenes, hombres y mujeres con castañuelas, pañueletas esperamos los acordes de los gaiteros para comenzar la danza así lo hacemos en este gran corro que formamos todo el barrio, amigos e invitados, conocidos y desconocidos, todos mano sobre mano como signo de nuestra buena unión. Aquí todos tenemos presentes a nuestros padres y abuelos que por primera vez no llevaron a formar parte del hoy padres y abuelos lo hacen con los niños que te presentaron ayer. Este es el ejemplo de nuestros padres y antepasados para continuar la senada de los buenos quiterios. Los jóvenes con sus trajes de danzantes y al son de las castañuelas cogen el cuadro con tu imagen y seguidos por un gran grupo de quiterios, con pañueletas recorren el Caño, el Zacatín , Santa Ana, la Carrera hasta Santa Maria del Castejón para recordar que en otra época fue parroquia del barrio y desde allí a la chopera continuando el galopeillo al son de gaitas y tamboril, cantamos en tu presencia, los jóvenes danzan en tu honor el paloteo, y aquí otro grato recuerdo, en el corro Eduardo y Ángel Chicharra, Gervasio, Jesús Quintero, Mariano y Alejandro Justo, Santiago el espartero, Felipe, Manuel y Antonio Picón. Y como no, ver de nuevo a padres y abuelos con los niños y como se dice en términos taurinos están confirmando en la Chopera su paso a ser devotos de Nuestra Santa, Santa Quiteria. Bien entrada la tarde regresamos a la Ermita despidiéndonos de ella y terminar con galopeos, verbenas y como colofón fuegos artificiales que pondrán aún más colorido a esta larga jornada.
Hoy es el último día, la mañana es más tranquila, muchos de los que vinieron a acompañarnos y muchos nacidos aquí ya se han marchado, pues sus ocupaciones y el trabajo así lo requieren, pero aun en la distancia su corazón y su mente están aquí. A media mañana celebramos la Eucaristía por los difuntos del barrio, momentos de oración y honor por nuestros antecesores que sin duda fueron ellos los que nos inculcaron el amor y devoción a esta santa prodigiosa y aunque no están entre nosotros si la estarán celebrando en la gloria eterna. A continuación la Banda de la Cruz Roja de Sevilla nos ofrecerá el concierto de Música preparado con todo su esmero y cariño cerrándolo como es ya tradicional el Himno a Santa Quiteria. Y como de Quiterios y bien nacidos es ser agradecidos quiero junto a vosotros hacer una especial mención a los directores y músicos que han pasado a lo largo de los años por nuestra fiestas y como recuerdo de su paso por esta ciudad y este barrio nos han lejado las composiciones que ahora detallo: - Dº Jesús Cea, compone en 1957 un Himno a Santa Quiteria a 4 voces, y el mismo lo estrena el 22 de Mayo de 1960 con un coro compuesto de músicos y jóvenes del barrio siendo Teniente –Directos de la música de la academia de Artillería de Segovia. - Dº Salvador Roig, compone en 1964 la coplilla con la que finalizamos todos los galopeos, siendo Capitán – Director de la música de la academia de Infantería de Toledo.
Y como no tener una mención especial y un cariñoso recuerdo a Dº Antonio Iglesias que en 1986 compone el Himno que todos cantamos y que el mismo estrena ese mismo año como colofón al concierto siendo AlférezDirector de la Academia le Infantería de Toledo. En 1987 escribe un libreto de poesías bajo el título a Santa Quiteria. En 1988 compone la diana San Gil en fiestas siendo Teniente-Director de la Academia de Artillería de Segovia. Este año se cumple el octavo aniversario de su fallecimiento, de él nos queda el reconocimiento de un hombre que todo se le hizo poco con nuestra Santa y nuestro barrio. Dº Javier Calvo en 2006, músico de la Banda de la Cruz Roja de Sevilla, compone la 1º Marcha procesional bajo el título A Santa Quiteria de Huete que ese mismo año se entrena en el concierto.
Estas composiciones que han sido generosamente donadas demuestran una vez más como es nuestro barrio, como sin nuestras fiestas y os diré más, UN CONQUENSE QUE SE PRECIE HA DE SER QUITERIO Y OPTENSE. No menos reconocimiento a Dº Mariano Covisa, Dº Gregorio Madero, Manolo y Germán Leis, hermanos Quintero, Esteban, Eusebio, Elías, Ignacio y otros tantos, ellos no han compuesto nada pero si se las han tenido que componer en el transcurso de los años para en momentos difíciles solucionar los problemas que hubiera, dejando sus ocupaciones y otras muchas cosas como ahora lo hace la
actual comisión para conseguir que la fiesta sea todo un éxito. La tarde pasa y el galopeo de despedida hasta la chopera donde hace ya cuatro días comenzábamos, llega el momento de la despedida, abrazos, besos y lágrimas todo ello signo de alegría, amistad y buen hacer de músicos y quiterios donde un año más todos juntos hemos conseguido cumplir la tradición heredada de nuestros antepasados de festejar u honrar a la Patrona del barrio de San Gil, la mujer fuerte, Santa Quiteria. La Música ya se ha marchado nos vamos hacia San Gil y Postrados ante tus plantas los de San Gil te pedimos que traigas la paz al mundo para bien de nuestros hijos. Como pregonar es anunciar, yo os anuncio que en este mismo momento comienzan las fiestas en honor a Santa Quiteria 2008. De todo corazón os deseo que sean días de Paz, amor y alegría, y ahora decir conmigo. VIVA SANTA QUITERIA, VIVA EL BARRIO DE SAN GIL.
Huete, 15 de Mayo de 2008.
Gerardo Quintero