ZANDYREPORTAJES 3

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Se le confia la calavera a un equipo de científicos especializados en cristalografía de la sociedad Hewlett-Packard. Al cabo de seis meses de pruebas, las conclusiones caen: Pesa 5 kilos. Se compone de dos partes, la mandíbula inferior ajustándose perfectamente con la superior. Las propiedades ópticas de la calavera son sorprendentes: Alumbrada por debajo, la luz sale por las cuencas. Alcanzada por detrás por los rayos del sol, un intenso haz luminoso capaz de encender fuego, sale por las cuencas, la nariz y la boca. Está hecha con cuarzo natural sumamente puro, de dióxido de silicio piezoeléctrico, anisótropo, de gran estabilidad física, química y térmica. Posee una polaridad, reacciona con la luz y la electricidad, directa o por presión física, su eje piezoeléctrico es vertical y sus propiedades son diferentes en cada dirección. Similar al material utilizado como oscilador o resonador en electrónica e informática. Las dos partes están talladas en el mismo bloque de cristal de roca, según su eje de simetría molecular, lo que le otorga sus asombrosas propiedades ópticas. Ninguna huella de instrumentos de talla, ni siquiera un rastro microscópico. Se supone que los escultores pulimentaron el objeto con la mano, lenta y meticulosamente, con una mezcla de arena de río y agua, a partir de un gran bloque anguloso de cristal de roca aproximadamente tres veces mayor que su tamaño. Al suponer esto, se hubieran necesitado varias generaciones de obreros, la estimación emitida es de 300 años-hombre. Con una tecnología moderna de diamante, haría falta un año de trabajo para conseguir el aspecto exterior, dejando huellas de fabricación, mismas que no presenta la calavera. En cuanto a los efectos prismáticos, su reproductibilidad resulta aún más dificultosa. Sin señales de fabricación, resulta imposible fecharla, ya que el cristal no envejece. 227


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