MARÍA AGUSTA PARADA

La docente tiene una familia que la respalda y apoya en cada paso que ha dado, tiene dos hijos, una de ellas estudiante de nuestra institución y quien recientemente culminó su formación secundaria y empezó su carrera en la universidad.

Cuando no está ejerciendo como maestra, María Agusta disfruta del tiempo libre realizando manualidades o leyendo algún libro, estas son dos de las actividades que más le gusta realizar. “Siempre estoy viendo videos o buscando ideas para hacer cambios en la decoración, es algo que disfruto mucho”, recordó.

Su familia también está conformada por sus tres mascotas, todas adoptadas. Max, una de sus mascotas está ciego, a Coral la encontró en terribles condiciones de salud y Sam ha encontrado una nueva oportunidad de vida con ella, todas han sido esterilizadas y viven dignamente. Desde que las adoptó aprendió que es un gran acto de amor brindarles una nueva oportunidad a las mascotitas que por una u otra razón fueron abandonadas. La profesora admitió que ama a los animales pero que no es muy fan de los gatitos, eso sí, siempre ha respetado su vida y procura su bienestar.

También recordó a los otros miembros de su familia; la profesora María Agusta tiene 3 hermanos, su padre falleció hace algún tiempo mientras que su madre aún es parte de su día a día. Docente emprendedora.

Algo que quizá es poco conocido, es que nuestra querida profesora es la mente detrás de un emprendimiento local llamada “Tabita Chocolates” que es una idea de negocio a través de la cual comercializan todo tipo de frutas cubiertas de chocolate. “Soy muy dulcera, me encanta el chocolate por eso iniciamos este negocio mi esposo y yo”

Entre sus deseos más grandes están: jubilarse en el Vigotsky porque confesó que ama a esta institución por lo que ha entregado todo lo mejor de sí misma a sus estudiantes. Que sus hijos Josué y Abigail se conviertan en profesionales y buenos seres humanos y que su esposo Marcel siempre tenga salud y una vida feliz.