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a vida da muchas vueltas y la de José Manuel Gualda no es una excepción. En su etapa de formación académica no estaba en su cabeza dirigir una empresa de comunicación que ha crecido paso a paso desde hace casi 15 años, los que cumple en febrero de 2019. Se trata de Gualda Comunicaciones, un negocio con sello vallisoletano que ha ido expandiéndose poco a poco por Castilla y León hasta llegar a Cantabria, La Rioja y Navarra. José Manuel se formó en las categorías inferiores del VRAC, uno de los equipos de rugby más importantes de Valladolid y de España. Su paso por este deporte le dejó huella y lo considera fundamental en su crecimiento como persona y empresario, ya que ha aplicado los valores adquiridos en los campos, vestuarios y con los compañeros y entrenadores para crear una empresa en auge. Gualda Comunicaciones, que comenzó dando servicio de Vodafone, ha ido diversificando su trabajo en tres sociedades para poder dedicarse de forma exclusiva a particulares, microempresas y empresas. Una labor que le ha llevado de tener una sola tienda en la calle Cigüeña de Valladolid a 38 puntos de venta en diferentes puntos de la geografía española. Así lo cuenta el propio José Manuel, quien explica en esta entrevista cada paso hasta la actualidad, en la que se ha convertido en el gestor de un grupo de 180 profesionales que trabajan en proyectos innovadores. ¿Cómo fueron sus inicios? Mi padre tenía un taller mecánico y yo hice la FP de Automoción por tratar de ayudarle de alguna manera. Jugué 12 años en las categorías
“Los valores adquiridos en el rugby me han ayudado a gestionar grupos de personas, y ahora somos más de 180 profesionales trabajando en proyectos innovadores”
inferiores del VRAC y eso ha sido fundamental para mí. Empecé a buscar patrocinadores para mi equipo y toqué la puerta de Vodafone. Entablando relación, una persona me dijo que por qué no abría una tienda. Cogí una en la calle Cigüeña y desde ahí empezamos a crecer. O sea que el rugby tiene buena parte de culpa. Sí (risas). Y no solo por ese contacto. Miguelón y Canas me marcaron mucho por cómo gestionaban los grupos de personas; igual que Miguel Pérez y Álvaro Abril. ¿Cómo ha sido el camino hasta ahora? Yo no estudié para ese tipo de gestión y ahora somos más de 180 personas