Mundiales de Patinaje - En Ibagué, el Mundial no se luce por su profesionalismo organizativo

Artículo publicado el 11/11/2021 Derechos reservados - Toda reproducción está prohibida - ©Sportiva-Latina

Mundiales de patinaje

En Ibagué, el Mundial no se luce por su profesionalismo organizativo

Patinaje de pista y carretera. En Ibagué, se destacan los excelentes resultados y el profesionalismo de los deportistas. Al mismo tiempo ha quedado en evidencia la ausencia en la organización y calidad de acogida al público en general. Sportiva-latina, estuvo en las tribunas y lo que observó deja mucho que desear para un evento de talla internacional. Testimonio.

Por Redacción / Sportiva-latina del 11 de noviembre 2021 /

Proponer un evento internacional, como un Mundial, implica que haya presencia de la autoridad local y no sólo en el momento de la inauguración.

Que se vea armonía en el trabajo de varias administraciones, incluso el de los entes nacionales, puesto que se trata de la imagen de un país. En el caso del Mundial de Patinaje que tiene lugar en la ciudad tolimense de Ibagué, se observan grandes errores de organización y de bioseguridad que llevan a concluir que tanto la Federación Colombiana de Patinaje y la World Skate, han cumplido muy parcialmente con la cita internacional.

Sportiva-latina presenta una reseña de un fin de semana donde las medallas de oro fueron la cara visible de un evento que, al contrario, tiene muchos fallos, despropósitos e irrespeto para el público presente.

En cuanto a la organización deportiva: -El domingo 7 de noviembre, los organizadores prepararon el podio dando la espalda al público, prefiriendo la tribuna VIP e invitados. El público que pagó su entrada alcanzó a protestar, pero el personal técnico los hizo callar y con señales explicaron que la imagen era hacia el otro lado. A los asistentes no les quedó más remedio que ver la premiación en la pantalla gigante.

-Una vez terminada la premiación y mientras se desmontaba el podio y el gran tablero de patrocinadores, se dio la salida para el calentamiento general antes de la siguiente prueba. Pero los técnicos no habían terminado de salir. Los jueces tuvieron que intervenir, y frenar a los deportistas para que los trabajadores pudieran salir de la pista.

-Ese mismo domingo, en la prueba final de los 10.000 metros, el tablero electrónico se dañó. Una verdadera sorpresa. La jueza tuvo que seguir con el pequeño tablero manual y la campana para informar a los deportistas las vueltas que quedaban. En medio de la competencia, ingresó el ingeniero que, después de un buen momento y luego de acabada la serie, logró poner el sistema en funcionamiento.

-Se han presentado varias sanciones técnicas por parte de los jueces hacia los deportistas. Pero estas no se explican ni a través del locutor ni a través de las pantallas gigantes. El público se ha quedado con la duda de conocer los motivos. Entre el público se escucha con frecuencia: Pero ¿qué pasó? ¿A quién sancionaron? ¿Qué hizo?

En cuanto a las tribunas del público: Sportiva-latina constató muchos despropósitos a lo largo de las sesiones del sábado 6, domingo 7 y lunes 8 de noviembre: - Estructuras de mala calidad: asientos muy usados (a veces rotos, safos o atados con metal que terminaba en puntas peligrosas); imposibilidad de moverse entre los pasillos por lleno total hasta en las escaleras de acceso o evacuación; y ausencia total de medidas de seguridad en unas estructuras que se movían de manera inquietante. Incluso, la misma organización buscaba que se rellenaran los espacios vacíos, como ocurrió el lunes 7 de noviembre, cuando se desviaba y dirigía al público a un solo espacio “para llenar primero una tribuna”.

- En cuanto al aforo, es evidente que el público se ha interesado. Tanto que el domingo había largas filas de acceso. Y el staff que custodiaba el ingreso pedía si se tenía “reserva” porque no había más cupo. Los tiquetes no tienen sillas (butacas) demarcadas. ¿Hubo venta sin controlar la cantidad de público?

- Presencia de vendedores ambulantes en las mismas tribunas, que venden y promocionan bebidas y comida incluso durante las pruebas.

- En cuanto a las normas de bioseguridad, la ausencia también es total.

Ninguna recomendación por micrófonos ni señalización en cuanto al protocolo en el polideportivo. Ausencia total del distanciamiento seguro entre personas; público sin máscara. Y el locutor sólo hace uso del micrófono para recordar las nacionalidades de los deportistas presentes.

- Falta de control en el ingreso a la tribuna de invitados especiales. Se supo que la gente decía que ingresaban con acompañantes que al final terminaban en la misma pista de los deportistas. Tanto que se tuvo que anunciar por micrófono que a partir de esta semana sólo se permitiría el acceso a los deportistas y sus entrenadores, lo cual no tendría ni siquiera que haber ocurrido por la seguridad de los deportistas que este tipo de situaciones conllevan.

En cuanto al acceso del público al Parque Deportivo de Ibagué - Ausencia total sobre la señalización del ingreso al público.

- Los peatones tienen que recorrer una buena distancia antes de llegar al lugar de la compra de boletas, que sólo tiene dos ventanillas, ubicadas cerca al parqueadero y de las casetas de ventas de productos. También ausencia de señalización en este espacio.

- El ingreso o salida ha sido variado sin conocer los criterios del cambio: El sábado no se podía entrar por el lado de los parqueaderos, pero sí salir. El domingo no se podía ni salir ni ingresar por esta puerta principal, lo cual implicó que tampoco se podía ir al lugar de comidas, puesto que está en el mismo lado de la zona de parqueadero. Al contrario, el lunes si se debía ingresar y salir por parqueadero porque había obras en la puerta que un día antes era el ingreso peatonal.

- Ningún convenio con una empresa de taxis o de buses disponibles al momento de la salida masiva del público cuando terminan las competencias. Al medio día o en la noche se puede ver la fila de personas caminan-

do a lo largo de la avenida, en total oscuridad y con el peligro que esto implica.

Con estos argumentos, pagar $15.000 por boleta y por día de competencia en la tarde (es gratis en las mañanas), resulta una propuesta comercial bastante onerosa).

Redacción

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