de la República el general Lázaro Cárdenas y gobernador de Guanajuato Luis I. Rodríguez, con ellos, por primera vez en la historia, los obreros éramos tratados como personas; así que un hecho tan salvaje despertó la indignación, no sólo entre los trabajadores de todo el país, sino también en las esferas oficiales. A nuestros mártires se les hicieron honras fúnebres jamás vistas en la Ciudad de Guanajuato, el gobernador pronunció un discurso lleno de encendida fe revolucionaria, entre muchos otros; en el panteón municipal se levantó un monumento para perpetuar la memoria de quienes habían escri-
to con su sangre, sus anhelos de redención para los mineros. Hoy en 2021 han transcurrido ya 84 años y cada 22 de abril desde 1937, los mineros todos de Guanajuato realizan una manifestación luctuosa, llevan flores al monumento en que descansan los restos de los Mártires Mineros, su sacrificio no fue estéril y los patrones calcularon mal, pues el movimiento no fue sofocado con ese abominable crimen, sino todo lo contrario, su sangre encendió en las masas trabajadoras mayores ansias de redención y mejoramiento colectivo… Don Alejandro concluye su narrativa: Para terminar, quie-
A 84 años de su sacrificio, los compañeros mineros sindicalistas Juan Anguiano, Luis Fonseca, Antonio García, Reynaldo Ordaz, Simón Soto y Antonio Vargas, ¡Presente! ¢
Co. Juan Anguiano
Co. Luis Fonseca
Co. Antonio Garcia
Co. Reynaldo Ordaz
Co. Simón Soto
Co. Antonio Vargas
Yo sólo sé que no sé nada. Sócrates (470 AC-399 AC) Filósofo griego.
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ro agregar que en el episodio que he narrado, se cumplió fielmente la Ley del Talión, pues sólo unas cuantas semanas después, el gringo Max F. Qüin fue sacado de la mina “El tajo de Dolores” con la cabeza despedazada. Se dijo que se cayó del piso 4 al 5; en cuanto que el capataz Apolinar Valdez, más le valiera haberse matado también, pues terminó pidiendo limosna en las cantinas de Guanajuato.
