"Id y haced discípulos en todas las naciones", no es un llamado o una invitación a ser parte de la obra de Dios, es un mandamiento dado para ser obedecido por todos los seguidores de Cristo dispuestos a darlo todo por Él. Nuestra misión: ¡Qué la tierra se llene de la gloria de Dios hasta lo último de la tierra, hasta el fin del mundo!