Torrevieja entrañable
UN MARINERO DE TORREVIEJA EN EL PANTEÓN DE MARINOS ILUSTRES Hace unos años, en una de mis visitas al Archivo Municipal de Torrevieja, consultando la correspondencia del Ayuntamiento de los años 40, pude leer un escrito donde aparecían una relación nominal de ciudadanos, antiguos soldados y marineros domiciliados en esta ciudad, con la edad, profesión y domicilio que habían estado en las campañas de ultramar. Aquella relación tenía su origen en la petición realizada al Ayuntamiento por presidente la Delegación de Excombatientes de la Guerra de Cuba Filipinas y Puerto Rico de Valencia, con el fin reclamar al Estado algún tipo de reconocimiento. A partir de ese momento comencé a interesarme por todo lo relacionado las campañas de guerra de Cuba, principalmente la guerra hispano estadounidense del 1898, en la que escuadra del almirante Cervera fue derrotada por la americana en el combate naval de Santiago de Cuba el 3 de julio de aquel año. En un momento en que los Estados Unidos comenzaban a despertar como una gran nación con aspiraciones de expansión, el gobierno de España, a pesar de la inferioridad de la escuadra española destacada en Santiago de Cuba, tanto en número de unidades como en potencia y alcance de sus cañones, forzó al almirante D. Pascual Cervera Topete a enfrentarse en combate a la flota americana con el resultado de la destrucción total de la flota
española formada por los cruceros acorazados “Infanta María Teresa” (buque insignia), “Vizcaya”, “Almirante Oquendo” y “Cristobal Colón”, y los destructores Furor y Plutón, cuando se podría haber optado por otro tipo de estrategia con más posibilidades para las fuerzas españolas tanto navales como de tierra. Pero hoy quiero referirme exclusivamente lo que le ocurrió a crucero acorazado “Cristabal Colón” y al marinero segunda de su dotación natural de Torrevieja, Antonio Ferrándiz Grande. Aquel día el comandante del crucero “Cristóbal Colón”, el capitán de navío Paredes, a pesar de ser el barco más veloz de las dos escuadras, y al coraje y espíritu de sacrificio de su dotación, viendo la inferioridad de la artilleria de su barco en calibre y alcance con relación a los buque americanos, con el fin de evitar que el “Colón” cayera en manos del enemigo, decidió embarrancar el buque, prácticamente intacto, cerca de la playa, teniendo como bajas 1
Francisco Rebollo Ortega
muerto y tres heridos. Los oficiales, suboficiales, cabos y marineros del “Cristobal Colón”, al llegar a la playa fueron hechos prisioneros por los americanos. En el caso de los marineros llevados en un buque de la Armada americana al campo de prisioneros de Camp Long, en la Isla de Seavey, en Portsmouth, en el estado de New Hampshire en la costa del Atlántico norte de los Estados, entre ellos el marinero de Torrevieja Antonio Ferrándiz Grande, que según la partida de defunción firmada por el capellán de la Armada D. Matías Biesa falleció de malaria 23 de julio de 1898 y se le dio sepultura eterna después de ser bendecido el cadáver. Por los libros de la Iglesia por mi consultados, sabemos que
era hijo de Salvador Ferrándiz y de Concepción Grande y que nació en Torrevieja el 10 de enero de 1876, siendo bautizado en la iglesia de la Inmaculada Concepción el 21 del mismo mes a las 12 de la mañana por el vicario D. José Antonio Alberola, siendo testigos y padrinos Dña. Encarnación Ferrándiz, Ramón Sola6 SEMANARIO VISTA ALEGRE - SÁBADO 9 JULIO 2016