La adversidad nos descubre nuestro potencial escondido. Jeff Keller
76. Crear En el concepto indio del paraĂso, hay ĂĄrboles que conceden los deseos. Simplemente te sientas bajo uno de estos ĂĄrboles, deseas cualquier cosa e inmediatamente se cumple; no hay espacio alguno entre el deseo y su cumplimiento. Me contaron que una vez un hombre estaba viajando y entrĂł al paraĂso por error: El hombre estaba cansado, asĂ que se durmiĂł bajo un ĂĄrbol proveedor de deseos. Cuando despertĂł, tenĂa hambre, entonces dijo: ÂŤÂĄTengo tanta hambre! OjalĂĄ pudiera tener algo de comidaÂť. E inmediatamente apareciĂł la comida GH OD QDGD VLPSOHPHQWH Ă€RWDQGR HQ HO DLUH XQD FRPLGD GHOLFLRVD TenĂa tanta hambre que no prestĂł atenciĂłn de dĂłnde habĂa venido la FRPLGD &XDQGR WLHQHV KDPEUH QR HVWiV SDUD ÂżORVRItDV Inmediatamente empezĂł a comer y la comida estaba ÂĄtan deliciosa! Una vez que su hambre estuvo saciada, mirĂł a su alrededor. Ahora se sentĂa satisfecho. Otro pensamiento surgiĂł en ĂŠl: ÂŤÂĄSi tan solo pudiera tomar algo!Âť. Y por el momento no habĂa ninguna prohibiciĂłn en el paraĂso, de modo que de inmediato apareciĂł un vino estupendo. Mientras bebĂa este vino tranquilamente y soplaba una suave y fresca brisa bajo la sombra del ĂĄrbol, comenzĂł a preguntarse: ÂŤÂżQuĂŠ estĂĄ pasando? ÂżEstoy soĂąando o hay fantasmas que estĂĄn gastĂĄndome una broma?Âť. Y aparecieron fantasmas feroces, horribles, nauseabundos. ComenzĂł a temblar y pensĂł: ÂŤÂĄSeguro que me matan!Âť... Y lo mataron. Esta historia antigua la comparo con nuestra mente. Ella es como un ĂĄrbol proveedor de deseos: pensemos lo que pensemos, tarde o temprano se verĂĄ cumplido. A veces, la brecha es tan grande que nos olvidamos por completo 233