Revista PlanetarioAbril 2012

Page 42

reflexiones

salud

de visita, al médico En la sala de espera, juguetes desperdigados por el suelo, chicos que se trepan por los sillones, padres hastiados, madres agotadas. En el consultorio, revisación veloz: oídos, garganta, peso, altura y llantos que interrumpen el diálogo. Entre un espacio y otro, las dudas y las indicaciones. La prescripción del antibiótico, las vacunas, el vínculo pediatra-familia-paciente y otros temas que rondan en la sala de espera. Opiniones desde la medicina tradicional y homeopática. Por Gabriela Baby

El pediatra, como la maestra, como la familia, cumple un rol de peso en el crecimiento de los chicos. El vínculo se establece desde que el bebé nace y –según lo que dice la doctrina médica- hasta que se transforma en adulto. En la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), una institución que acaba de cumplir 100 años y nuclea a 15 mil profesionales (casi la totalidad de los matriculados en el país) la doctora María Luisa Ageitos, ex directora de la Asociación y también Licenciada en Salud Pública define el rol del pediatra: “Los pediatras hacemos la medicina general de niños y adolescentes. Trabajamos en esta etapa de la vida donde los cambios son constantes”. Pero no sólo se trata del niño o adolescente en cuestión: “Nunca se debe hablar de un niño solo sino de un niño en un nido familiar, en el que habrá un entramado de distintos lazos: hermanos, padres, abuelos o quienes estén a cargo de los chicos”, dice Ageitos. Y agrega: “también es importante darle voz al niño en la consulta. Porque es el protagonista y como tal debe ser atendido, no sólo interrogado. Es decir, es fundamental que el chico diga qué piensa de sus dolencias y tratamientos”. No muy distinto es lo que se propone como punto de partida en el campo de la homeopatía, otra variante en la oferta médica actual, en donde la primera consulta constituye un momento de conocimiento profundo del otro. “La primera consulta puede durar dos horas: preguntamos a los pacientes de todo: cómo duerme, si está contento, si se levanta cansado, si va bien al baño, si algo lo pone de mal humor. Todos los síntomas interesan”, dice Viviana Suttin, médica clínica, homeópata de chicos y adultos y especialista en medicina china. Humanización de la práctica médica o intercambio paciente-médico-familia son saberes y prácticas que no se estudian en los libros e inauguran un espacio en el que la ciencia médica cede espacio al arte de la medicina. • 42

¿Qué es la salud?

“El concepto de salud en niños/as y adolescentes no sólo involucra los aspectos físicos, psicológicos y sociales, sino también la habilidad de realizar actividades apropiadas para su edad, como el juego o la escuela. Las dimensiones que generalmente se tienen en cuenta para definir a un niño saludable están relacionadas con su capacidad para realizar actividades diarias (movilidad y cuidado personal), las adquisiciones cognitivas (memoria, habilidad para concentrarse y aprender), las emociones (positivas y negativas), la percepción de sí mismo, las relaciones interpersonales (con los amigos y familiares) y con el medio que los rodea (cohesión familiar, apoyo social)”, sostiene la SAP en uno de sus artículos publicados en su sitio web (www.sap.org.ar), donde también presenta interesantes documentos para todo público sobre enfermedades y molestias frecuentes. Desde la bibliografía homeopática, Suttin define: “Un chico puede estar enfermo aunque no tenga ninguna dolencia física o enfermedad. Quizá no duerme bien, o no tiene apetito, o tiene problemas para evacuar o para orinar, o tose, o tiene mocos, o tiene eccemas, o está desganado: síntomas que indican un desequilibrio. Porque la salud no es solo no tener fiebre: la fiebre baja por añadidura, cuando el paciente esté bien”, argumenta la doctora. A su consultorio llegan chicos que sufren por miedos nocturnos, otitis a repetición, asma, constipación, diarrea, mal comportamiento, déficit atencional. “Hay chicos que desobedecen a los padres, chicos que insultan y tienen conductas tremendas. Esto es sin duda parte de algún desequilibrio que se puede tratar, siempre que la familia participe, ponga límites, esté atenta, colabore. Porque si no, por más remedio que les recete a los chicos, si la familia no escucha al médico, no hay manera de estar sano”, dispara la especialista.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.