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ios hizo todo lo que tú puedes ver. (¡E incluso las cosas que no puedes ver!) Dios hizo el mundo para que fuera su hogar… con esta afirmación es como empieza el libro La Historia del Rey Jesús. Una de nuestras mayores responsabilidades como padres es procurar que nuestros hijos se acerquen a Jesús. Sabemos que la salvación no se hereda y que ellos mismos tienen que reconocer la necesidad de un Salvador para poder tener vida eterna.
Muchas veces confiamos en que «alguien» les hablará en la escuela dominical, campamentos, iglesia o simplemente cuando sea más grande. Dejando pasar la oportunidad de ser nosotros su primer maestro y quién los acerque a Jesús. ¿Puedes recordar lo que Dios nos pide en su Palabra? «Grábate en el corazón estas palabras que hoy te mando. Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes» (Deuteronomio 6:6-7) NVI. Todos pasamos por la tarea de enseñar a nuestros hijos sobre el camino de Dios, tal como lo hicieron José y María al educar a Jesús, ¡imagínate! el creador del mundo estaba en manos de unos hombres tan sencillos y humildes prácticamente el formar el carácter de una persona. Seguramente como cualquier padre ellos ocuparon cualquier oportunidad para educarlo y enseñarle la historia del pueblo de Israel y sin duda alguna el propósito de su vida. En el libro de Lucas nos comenta lo siguiente: «El niño crecía y se fortalecía; progresaba en sabiduría, y la gracia de Dios lo acompañaba». (Lucas 2:40) NVI. ¿Sabes por qué es importante compartir la historia de Jesús a un niño? •Dios lo manda. «Cuando Jesús se dio cuenta, se indignó y les dijo: Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de Dios es de quienes son como ellos» (Marcos 10:14) NVI. •Los niños necesitan salvación. «Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios» (Juan 1:12) NVI.
•Los niños tienen promesas de Dios. «Y recibimos todo lo que le pedimos porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada» (1 Juan 3:22) NVI. Transmitir a los niños desde muy pequeños el evangelio traerá frutos a su vida que seguramente los verás con el paso del tiempo. No des por sentado que sólo porque nos reunimos en una iglesia o hacemos actividades bíblicas con ellos, van a ser salvos. Hay muchos papás o incluso instructores de niños que aún no saben cómo hablar con sus hijos o alumnos sobre Jesús, simplemente no saben presentarles el plan de salvación. ¿Cómo hacerlo? Es muy fácil, La Historia del Rey Jesús, está diseñado para leerse en cualquier momento, no tardarás más de una sesión en leerlo y explicarlo, se puede repasar una y otra vez, y al final dejar que ellos te cuenten la historia. Así como en Deuteronomio 6 vemos la importancia de compartir la historia de la creación y redención este recurso permitirá que tus hijos puedan entender el mensaje central de la Biblia en una sola historia. Es importante que alimentemos la curiosidad espiritual de nuestros hijos invitándolos a formar parte de la historia del Rey Jesús. El evangelio es más que una fórmula o un plan de salvación. Es la historia de cómo Dios vuelve a hacer el mundo justo y bueno.
La historia del REY Jesús
Editorial Desafío UNI7128
VEINTIUNO