La Pajuela edición 01

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Zona ConPartida Alex Herrera

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STABA YO EN EL ANTRO COMO DE COSTUMBRE, joteando rico de la vida

con mis amigos y amigas, tapados y destapados… ya ven que hay tanta gente fuera del clóset que en veces me dan ganas de meterme de nuevo porque fuera hay demasiado jotito. Pero bueno, en pleno apogeo de antro y durante la madrugada llegan dos personas, un hombre y una mujer, ambos padres, ¡buscando a su hijo!

¿Pero qué creen que hizo? Nada más y nada menos que darse la vuelta sacudiéndose el cabello (lo tenía corto pero imaginemos que es largo, es más melodramático) poco le falto para decirles: “huele mi shampoo”. A los padres no les quedo más remedió que esperar. Le hablaron a la policía para sacar a su hijo, pero la policía le dijo a los pobres consternados padres que no podían hacer nada para sacarlo, puesto que el hijo es mayor de edad (poco le falto al policía decirle: “Señora no es mi culpa que a su hijo le gusta la jotería”), la madre le dijo al policía que su hijo era un buen chico, dedicado y estudioso y que no quería verlo pudrirse o que comenzara “sacándose las cejas, pintándose el pelo, planchándose las greñas”, entre otras joterías

que ocurren dentro del ambiente gay, que por cier to unas comadres escucharon esto que menciono la “ñora” y se pusieron bien locas puesto que parecía que las estaba describiendo al pie de la letra. Los padres mencionaron que él se había escapado durante la noche, así tipo Tatiana cuando se divorció del marido, ya ven que se escapo brincándose de una ventana. Total, a los padres no les quedo

remedio más que irse a casa y seguramente esperarlo para ponérselo como chancla.

Lo positivo de la historia es que “Junior” no tuvo miedo de seguir joteando, algo que a fin de cuentas no daña a nadie. Mientras que los padres tienen el derecho de preocuparse por su hijo, también los hijos tenemos el derecho a ser felices siendo nosotros mismos, lo cual no nos avergüenza, al menos a mí.

Sinaloa, la homofobia de 75.9 billones Alex Herrera

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IENTRAS QUE EL ESTADO DE SINALOA sufre una de sus peores crisis turísticas, agravada por el clima de inseguridad prevaleciente en sus 18 municipios, poniendo en jaque desde a grandes inversionistas y empresarios, hasta pequeños prestadores de servicios que solo viven de su trabajo sin diversificarlo, el aparato de desarrollo económico y turismo legitiman sus funciones en defenderse de la grilla política de grupos y tribus al interior y al exterior, que fijan sus posibilidades al apostarle al turismo tradicional y a lo sumo, al llamado ecoturismo, desdeñando una gran posibilidad que podría ser el salvavidas de la actual tensión del sector y redituaría en grandes derramas al comercio local y convertirse en contrapeso a la adversidad del ingreso por el sector.

De la belleza y del potencial de Sinaloa nadie duda, cuenta con premios, galardones y reconocimientos por escrito, en placas y preseas, pero en la realidad se queda como inerte espectador al ver cómo destinos turísticos como Vallarta y Cancún se quedan con el pastel del mercado gay mexicano valuado en 75.9 billones de dólares, según la compañía de marketing LGBT, líder en el mundo. Los resultados, según Ian Johnson, presidente de Out Now, en su presentación especial en la Segunda International Expo & Business LGBT que se lleva a cabo en Cancún, México, el total anual de ingresos antes de impuestos generados por los 4.9 millones de gays en México en 2012 es de 76 billones de dólares, mientras que en Estados Unidos hay 15 millones de viajeros gay, que se espera gasten 51.2 mil millones de dólares viajando en este 2012. Estados Unidos y Canadá son los países que mayor número de viajeros internacionales emiten anualmente. Por el perfil promedio y su derrama, este segmento ha sido denominado como Two Incomes, No Kids (dos salarios, sin niños) que representa un mercado de hasta 70 billones de

dólares al año, tan sólo considerando el gasto promedio de los 20 millones de personas con preferencias homosexuales que realizan viajes internacionales desde América del Norte. Sinaloa no figura significativamente en el escenario, ni en los planes de la comunidad arcoíris, debido a no existir condiciones que garanticen la seguridad, aceptación y amistad del lugar donde planean una estadía libre de discriminación, principalmente. Las distintas lecturas políticas, advierten que quizá Sinaloa no está preparado para fortalecer esta ramificación, sería como pedirle peras al olmo en el destino principal que está gobernado por ser y un partido que han dado muestras claras de oscurantismo y homofobia. Vale la pena recordar que en el festejo del Carnaval de Mazatlán pasado, el alcalde Alejandro Higuera amagó a quienes estuvieran repartiendo condones, con la amenaza de ser llevados a barandilla. Un puerto donde la comunidad gay se queja de constantes vejaciones al sector, salvo la protección a algunos empresarios que han vivido de la comunidad gay desde siempre, no es un lugar propiamente donde la comunidad quiera dejar parte de sus millonarios ingresos. Sin una política clara y decidida para abrir las puertas de Sinaloa al turismo LGBTTI, y adentrar en este sector, se debe aprender de las experiencias de los destinos como el Distrito Federal, Cancún o Vallarta, que dejaron atrás las marañas del prejuicio y entablaron diálogos entre concesionarios y prestadores de servicios turísticos y las demás fuerzas vivas, con representantes de la comunidad gay. Ser vínculos que garanticen que el turismo encuentre lo que esperan. Se haga o no en Sinaloa, tome la Secretaría de Turismo o no cartas en el asunto, hombres y mujeres homosexuales, bisexuales, y transgéneros seguirán viajando y gastando su dinero en otros destinos, mientras que Sinaloa seguirá como hasta hoy, como un desperdiciado espectador.

<< Sinaloa México << Del 27 de Octubre al 10 de Noviembre de 2012.

Total, se les negó la entrada y se les dijo que tenían que pagar cover como cualquier otro jotito, sin ofender a muchas de ustedes. Ante esto los

Perfil

Todo parecía como una emergencia, yo desde luego me mordía las uñas a través de mis guantes rosados de emperatriz (no me quité los guantes para no arruinarme el manicure). ¡Oh my god! Los dos padres exigieron entrar al antro para sacar a su hijo, seguramente de la trenza y salvarlo de tanta perversión de los antros gays, ya ven hijas con eso que somos todos unos pervertidos, los padres querían rescatarlo de las llamas del infierno.

preocupados padres se opusieron, alegando que no tenían que pagar nada para rescatar a su hijo de tanta perversión (estoy exagerando un poco). Consecuentemente, los guardias de seguridad de la corona real entran al antro para avisarle a “Junior” que sus padres lo esperan afuera, y este muy quitado de la pena se terminó su bebida y con la mano en la cintura, con la mano en la cintura (repetí lo mismo para darle más énfasis) caminó hacia la salida corroborando que sus padres estaban afuera.


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