ACTUALIDAD
EL
entusiasmo producido tras un mes de mayo lluvioso, se disipó rápidamente. La esperada llegada para junio del Fenómeno del Niño aún no se produce, lo que acarreó consigo precipitaciones normales, pero en ningún caso suficientes para paliar el déficit hídrico que por años azota al país.
Expectativas meteorológicas:
Un “Niño” que amenaza, pero que aún no llega Pese a los pronósticos optimistas que anunciaban un 2014 lluvioso, transcurrido más de la mitad del invierno la realidad es otra, si bien no ha sido un año seco, aún se mantiene el efecto residual de la sequía de los últimos años, impacto que se espera se revierta en parte en lo que queda de este año. Expertos advierten que hay un 80% de probabilidades de que el Niño se manifieste en su totalidad entre octubre y diciembre.
De acuerdo a una evaluación preliminar de la Dirección Meteorológica de Chile, durante junio se observaron precipitaciones por debajo de lo normal en la costa de la VIII región, mientras que julio mostró valores deficitarios en la precipitación en toda la zona central. En tanto, el informe de coyuntura agroclimática que mensualmente publica el Ministerio de Agricultura, detalla que “las condiciones actuales y los pronósticos tienen impactos diversos dependiendo de la región y el rubro. Las siembras de invierno de O’Higgins al Sur, por ejemplo, han transcurrido normalmente debido a la buena humedad de los suelos a causa de las precipitaciones, lo que ayudará a una buena germinación, a excepción de los anegamientos producto de las lluvias intensas que han causado algunos atrasos. El panorama de la temporada de riego
De acuerdo a la información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile, el resultado total en lo que va del invierno (junio - julio) indica una situación dividida, con déficit de 13%, en el tramo norte de la Zona Central (La Serena - Chillán) y un superávit de 4% en la zona centro-sur (Chillán- Puerto Montt).
REVISTA G&T - AGOSTO 2014
10
2014-2015 se mantiene incierto debido a lo exiguo de las reservas de la mayor parte de los embalses y a la falta de precipitaciones”. En lo inmediato, según detalla la Dirección Meteorológica del Chile, para el territorio que comprende las regiones VI, VII y VIII, se espera un período de ausencia de precipitaciones hasta la mitad de agosto y luego otro período de lluvias durante la segunda mitad del mismo mes, y extendiéndose hasta septiembre, lo que equivale a una reactivación de las precipitaciones hacia el último tercio del invierno. En tanto, la primavera augura precipitaciones sobre lo normal, ya que hacia esa estación se producirán anomalías de temperatura sobre + 0,5 ºC en el Pacífico Ecuatorial Central. Lo anterior tiene que ver con la eventual llegada del Fenómeno del Niño, condición que según los pronósticos tiene una probabilidad cercana al 80% de que ocurra durante la primavera o comienzo del verano. Además, se espera nevazones durante la última semana de agosto y primera de septiembre en la Precordillera de la zona Centro-Sur del país.
Pese a que no es posible proyectar con exactitud la ocurrencia de eventuales heladas, las temperaturas mínimas en promedio se situarán por sobre lo normal hasta septiembre, por lo que no se descarta la ocurrencia de dicho fenómeno climático, particularmente al final del mes de agosto o de septiembre.
REVISTA G&T - AGOSTO 2014
11