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RD Rostros invisibles, pero con bandera AQ
REPORTAJE UI
Ellos son algunas de las caras dominicanas, aquellas que no se han hecho famosas pero representan su patria con todo el honor en tierras extranjeras. POR: VERÓNICA LORA
“Para bien o para mal, Santo Domingo es mi casa”
Mariel Backman OFICINA DE PROMOCIÓN TURÍSTICA (OPT) DE LA REPÚBLICA DOMINICANA EN LOS PAÍSES NÓRDICOS. ESTOCOLMO, SUECIA
¿Qué tiene de bueno vivir fuera de RD? Vivir en este país me ha dado la oportunidad de experimentar otras culturas, aprender otros idiomas y de viajar, pues en Europa es fácil irse de fin de semana a cualquier otro país porque las distancias no son muy largas. ¿Y de malo? La ambigüedad de que al volver a mi país no siempre se me considera dominicana, como que estoy entre “no soy de aquí ni de allá”. Extranjera en mi país y extranjera en el extranjero. Una vez hasta me dijeron “tú no suenas como una dominicana”.
mbutsu-ji, en Kyoto.
Templo Adashino Ne
(Otoño, 2010)
“Sin dudas, no hay nada mejor que vivir en la tierra que nos vio nacer”
Arismendy Ramos MAESTRO DE ESPAÑOL Y JAPONÉS. TOKYO, JAPÓN AUTOR DEL BLOG: HTTP://GAIJINDOMINICANO.BLOGSPOT.COM
¿Qué tienen en común Japón y RD? La cultura japonesa es muy diferente de la dominicana, pero compartimos el fanatismo y la fiebre por el béisbol. Como en RD, el béisbol es el deporte favorito de las mayorías. Por cierto, hay muchos dominicanos con un extraordinario desempeño en las ligas japonesas. En la temporada que acaba de finalizar, uno de los jugadores más valiosos fue el dominicano Tony Blanco, del equipo Chunichi Dragons, quien con su fuerte bateo puso en alto a nuestro país. ¿La parte más difícil de vivir en ese país? La vida aquí es costosísima. En todo momento, se exigen altos de niveles perfección y la irresponsabilidad es imperdonable. Las jornadas laborales son largas y tensas. Aquellos que venimos de países donde el ambiente laboral es un poco más relajado, el sistema laboral japonés se convierte en la faceta más difícil y estresante de todos. ¿Qué extrañas República Dominicana? El calor, la actitud receptiva y la solidaridad de los dominicanos. Extraño esa sensación de sentirme realmente en casa. Añoro los carnavales. Suspiro por comer un helado mientras camino por la calle el Conde y daría hasta la vida por un jugo de zapote. 48
ı mujer única ı febrero 2011
Saltando en la Marin
a de Estocolmo