CRÍTICAS
‘Little Voice’: “wonder of wonders”
Rosa S.
N
o llevaba ni la mitad de la primera temporada de ‘Little Voice’ cuando algo me empujó a twittear lo siguiente: “qué bonitas las historias que te hacen sonreír”. Paradójicamente, terminé el visionado llorando hasta el sofoco y con una enorme nostalgia invadiendo mi pecho. Mientras escribo estas líneas, sigo sin comprender por qué la serie de Apple TV+ ha generado en mí nostalgia hacia algo que no he vivido. Hacia una ciudad que sí he pisado, pero como una turista más. Y hacia unos sueños que ni siquiera son los míos. Aún procesando el huracán de sensaciones y sentimientos que ha provocado en mí la historia o, mejor dicho, la vida de Bess King, sí hay algo que tengo claro. Esta es una de esas ficciones que, sin dejar de tocar realidades duras y complejas, transmiten tantas cosas buenas que se convierten en algo más. En una especie de comodín al que acudir cuando estamos perdidos, vacíos y tristes. Lo es por su música, una maravilla digna de ser escuchada una y otra vez. Por la belleza con la que se acerca a Nueva York. Y por unos
104 JULIO 2020
personajes tan bien construidos y tan humanos que se cuelan dentro del espectador sin que este se dé cuenta. Personalmente, he encontrado especialmente encantador a Louie King, así como a Kevin Valdez, el joven actor con autismo que lo interpreta. Y quiero detenerme aquí para aplaudir con fuerza a Jessie Nelson, Sara Bareilles, a J.J. Abrams y a todo el equipo de la serie, por apostar por una ficción en la que la diversidad está presente de principio a fin. Una diversidad real, no maquillada. Bravo por quienes dan oportunidades a personas que, por el mero hecho de ser diferentes, se encuentran con demasiadas puertas cerradas. Es una apuesta arriesgada, claro, pero necesaria. Y es una apuesta que, además, en el caso de ‘Little Voice’, tiene un resultado magnífico. Nada habría sido igual sin Louie y sus compañeros. Magnífico trabajo, a nivel de interpretación y a nivel de representación de una realidad por desgracia poco conocida. También me han cautivado la generosidad de Samuel, la transparencia de Ethan y la fuerza de una Bess que sólo desprende sentimientos positivos.
Incluso cuando está en el túnel. Me ha fascinado la capacidad de acoger tantas vidas, tantos temas tabú y tantas situaciones complejas en una misma historia. Todas ellas desde la óptica del respeto y la honestidad. No es la mejor serie que he visto. Pero me han llegado la angustia de Bess, su infranqueable lucha por un sueño y por quienes quiere, su amor ciego y su necesidad de atarse a él, aunque le provoque un dolor insoportable. Me han llegado la reflexión y el miedo de una Prisha que nunca se ha atrevido a ser quien es. La ansiedad de un Ethan que ve cómo tiene delante lo que quiere, pero no es capaz de tomarlo. El cariño y la confianza de Samuel y Ben y su incansable apoyo a Bess. Y, por encima de todo esto, me han llegado el amor por la música y el poder de Broadway y de la misma. ‘Little Voice’ se estrena en Apple TV+ el próximo 10 de julio. ‘Little Voice’ es una serie bella, emocional y emocionante, con la que sonreír mucho. Y también con la que reflexionar, con la que llorar y con la que añorar. Incluso las vidas que nunca hemos vivido.