25 años de entrega Hace 25 años la vida trajo a Celina a FUSAL. Desde ese entonces, ella ha vivido con gran pasión y compromiso su trabajo el cual se ha convertido en una forma de vivir que ella misma describe como “un premio”. En 1987 Celina comenzó en FUSAL dirigiendo el Programa de Ayuda Médico Hospitalaria (PAMH) cuando eran tan solo tres colaboradores en toda la fundación. Su deseo de superación, su entrega y pasión por su trabajo le permitió crecer e innovar en el PAMH. Celina contó con la guía de Don Luis Poma, quien tenía una extraordinaria visión, experiencia y una profunda calidad humana. Juntos comenzaron a construir la base de FUSAL, bases sólidas y con un rumbo claro. Luego Don Ricardo Poma, con el apoyo de la Junta Directiva, fue elevando los estándares de calidad y convirtió a FUSAL en una organización sólida, transparente y eficiente. Celina se convirtió en Directora Ejecutiva y comenzó a conducir la fundación creando nuevos programas y modelos de intervención que aportaran a cerrar las brechas de nuestro país como: programas de capacitación y formación de promotores de salud rural; nutrición; educación y erradicación del trabajo infantil; el Centro de Capacitación Luis Poma como estrategia de sostenibilidad financiera de FUSAL, entre otros. Celina mantiene una tremenda accesibilidad y política de puertas abiertas que permite
que la comunicación sea fluida, que las ideas de todos sean escuchadas y que la construcción de un mejor El Salvador puede ser parte de todos a través de su trabajo. La fundación es parte de ella, de su visión, sus anhelos y sus metas. A través de estos años ella ha formado su familia y ha cumplido muchos proyectos y sueños profesionales y personales. Pero lo más importante, ha podido dedicar su vida a un trabajo que ama y que la llena plenamente. Celina inyecta y transmite constantemente una mística profunda a cada uno de los colaboradores, comparte su conocimiento e incentiva el desarrollo de cada uno de ellos. Su entrega es absoluta tanto a las comunidades como a la excelencia en los programas, constantemente buscando la innovación. Siempre está cercana de las comunidades, visitando constantemente los programas para identificar formas de hacer las cosas mejor y más eficientes, mejorar modelos de intervención y percibir de primera mano las necesidades de nuestra gente. También aprovecha esas visitas y espacios para compartir momentos de integración con los equipos técnicos, escucharlos y aprender de ellos. Durante 25 años Celina ha liderado el rumbo de la fundación, haciéndola parte de su vida y convirtiéndola en una de las más grandes motivaciones en su vida. 83