Libro Lecturas 4º

Page 82

Libro de Lecturas Cuarto grado

Enero 2011

Si pudiéramos asomarnos dentro del cráneo, veríamos que el cerebro tiene un color extraño, entre gris y café claro, que se ve como una tela arrugadísima. Los cerebros de las ranas, los conejos o los gatos son menos arrugados que los de los seres humanos. Durante mucho tiempo nos preguntamos por qué los nuestros son arrugadísimos, aunque no sean viejos ni estén gastados. Ahora conocemos la respuesta: el cerebro humano necesita un espacio enorme para guardar toda la información que nos hace ser animales tan inteligentes. Una forma de tener mucha inteligencia es contar con una cabeza enorme, del tamaño de una almohada grande. Pero, ¿quién podría cargar una cabezota de ese tamaño sin cansarse? Moverse rápidamente o jugar a las escondidas con una cabeza así sería muy difícil. Para ser tan inteligente como lo eres tú, se necesita mucho cerebro y poca cabeza. Arrugar mucho, mucho, muchísimo el cerebro resulta una mejor solución. Los surcos que se forman en el cerebro son como montañitas, muy eficientes para aumentar el espacio. Aquí sucede lo mismo que cuando haces un abanico de papel. Imagina que tienes una hoja y la doblas muchas veces para hacer un abanico. Ocupa menos espacio que tu hoja de papel extendida, pero en realidad la hoja es la misma: no se hizo chiquita sino que al doblarla muchas veces, lograste reducir el espacio. Eso es lo que pasa con el cerebro: en realidad es muy grande, pero está muy bien guardado. Si pudiéramos estirar todas las arrugas del cerebro de un humano adulto, acabaríamos con un cuadrado de dos metros por lado. Toda esa superficie, perfectamente arrugada y llena de surcos y bultitos cabe dentro de nuestro cráneo. La corteza cerebral, la capa arrugada que cubre el cerebro, está dividida en dos partes que se llaman hemisferio izquierdo y hemisferio derecho. El ser humano usa diferentes partes de los hemisferios para dirigir cosas distintas. Por ejemplo, en el hemisferio izquierdo se organizan actividades como el lenguaje y la facilidad para las matemáticas, mientras que el derecho se ocupa de ubicarnos en el espacio. Nuestro cerebro está formado por unidades tan pequeñas que no se ven a simple vista. Ni siquiera podríamos verlas con una lupa; esas unidades o

82


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.