En un trabajo enorme y con una consistencia extraordinaria, Josef Newgarden se impuso en Barber e inscribió su nombre en la historia de la categoría más rápida del automovilismo deportivo... Me sentí feliz por el automovilismo, me sentí feliz por Sarah Fisher, una luchadora inclaudicable y me sentí feliz por Josef Newgarden. Por su padre que antes de yo nacer, era nuestro vecino, por su madre, que un día llegó de Europa con cualquier idea sobre el “sueño americano”, menos del que vería a su hijo allí, en lo más alto del podio de una clase del automovilismo diferente, porque la IndyCar, es nada menos que la categoría más rápida del mundo. Me vino a la memoria aquel debut de Esteban Guerrieri en St. Petersburg (Indy Light) con Sam Schmidt, que terminó con triunfo de su com-pañero Josef Newgarden y el abrazo espontáneo emocionado de su madre Tina con mi padre, el que se pasó horas aclarando que Josef no era su hijo y más tarde la llegada al equipo de Sarah Fisher en la clase mayor, un equipo hecho a fuerza de corazón y sacrificio como todo lo que hizo siempre la “gorda” querida por todos en el automovilismo. Fue un gran trabajo y triunfo de Newgarden en el GP de Alabama, el primero de su carrera y el primero del equipo en el que hoy milita. Segundo fue Graham Rahal que definió la posición en la última vuelta frente a Scott Dixon, todos sin excepción con el drama de si llegaban o no con el combustible. Luego se ubicaron Ryan Hunter Reay, Carlos Muñoz y James Hinchliffe. Los líderes de la temporada sufrieron todo el fin de semana por igual, ya que Tony Kanaan fue 13ro., Montoya 14to., Castroneves 15to y Gabby Chaves lejos de la pelea 16, aunque sigue siendo el mejor entre los novatos. Con este resultado Juan Pablo Montoya sigue mandando en el Campeonato con 136 puntos seguido por Helio Castroneves 133 y Scott Dixon con 123. La próxima será el 9 de mayo el Angie’s List en Indianápolis y luego el 24 de mayo, nada menos que las 500 Millas de Indianápolis…
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