lamono #82 - Our Revolution

Page 91

lamono / núm. 82 / mayo ’12

Trabajaba en un café en el campus de la Universidad de Sydney cuando conocí a Sam Lockwood, que luego me presentó a Hayley Mary y Heather Shannon. Yo estudiaba Ciencias, Sam y Hayley Filología Inglesa y Heather piano clásico en el conservatorio. Tres semanas después de nuestro primer ensayo juntos participamos en un concurso de grupos musicales de la universidad, fue nuestro primer concierto.Quedamos segundos. Desde entonces, hemos evolucionado lenta y gradualmente. No creo que haya un momento en el que de repente nuestra popularidad estallase o que de golpe nos volviésemos buenos escribiendo canciones. Hemos ido sintiendo que todo se construía de forma firme y segura. El nombre del grupo hace referencia a la Princesa Jezebel del Antiguo Testamento, aunque es bastante decepcionante el significado que ha tomado su nombre en un contexto moderno. Todos los componentes tenemos un background musical diferente, así que ponemos ideas diferentes sobre la mesa. Nos gusta pensar que, como resultado de ello, hacemos música que suena diferente o interesante. Nuestro punto de encuentro es, simplemente, que somos cuatro personas buscando desesperadamente escribir canciones y tocar. Nunca decimos ‘vamos a escribir una canción que suene así o que consiga aquello’. Todos nuestros temas han empezado esencialmente con una idea lírica, una progresión armónica, una base de batería o una melodía. Entonces, sencillamente, la seguimos martilleando, moldeando, añadiéndole cosas hasta que tenemos algo que se parece a una canción, sea cual sea el género. Es difícil medir con exactitud qué aporta a un grupo aparecer en un anuncio (Under Armour, Foxtel). Evidentemente, incrementa tu exposición y te ayuda a financiar grabaciones y giras. Personalmente, no me gusta la idea de que me asocien a un anuncio. Es un lado divertido de la industria que a mí me hace retorcerme un poco. Los sellos independientes funcionan bastante como una gran discográfica, excepto por su mentalidad y actitud hacia la música. No están necesariamente interesados en hacer que tu grupo sea famoso de la noche a la mañana y gane millones de dólares. Están contentos con trabajar contigo para que crezcas más lentamente a lo largo de diversos álbumes. Nosotros nunca hemos trabajado con una gran compañía, así que de alguna forma esto son especulaciones, pero es la impresión que tengo tras aprender lo que he aprendido. Y ahí tenemos planeado quedarnos, por el momento. Ahora mismo estamos realmente ocupados. Y cuando más ocupados, mejor. Ser capaces de organizar conciertos y viajar por el mundo significa que, como mínimo, hay algunas personas que nos escuchan. Nos encanta, nos hace sentir que esto es de verdad y que el esfuerzo lo merece. Creo que a finales de año habremos acabado tocando en unos 140 conciertos. Hasta el momento, lo mejor que nos ha pasado es agotar las localidades por dos veces en el Enmore Theatre de Sydney, con capacidad para unas 5.000 personas. Nunca imaginamos que algo así pudiera suceder, nos dejó pasmados. La mayoría de fans de todo el mundo (estadounidenses, europeos, australianos…) son bastante similares. Todos vienen a los conciertos y, con suerte, aplauden cuando termina una canción. Aunque hay algunas diferencias sutiles. La gente en Escocia, por ejemplo, suele ser un poco más ruidosa cuando grita. Pero, al final del día, todo parece muy similar. A veces es difícil acordarte en qué país estás... La escena musical australiana es diversa y variada, como cualquier otra escena musical, imagino, aunque tal vez un poco más pequeña, dada nuestra población. Tenemos de todo: grandes bandas indies, electrónica, hip hop... Es comparable a cualquier otra y sin duda vale la pena fijarse en ella, porque hay algunos grandes talentos. thejezabels.com


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.