BIENVENIDO WEN JIABAO Orientar, la revista de comercio exterior para China y la Cámara Argentino - China dan la bienvenida a la Argentina a Wen Jiabao, Primer Ministro de la República Popular China.
La revista de Comercio Exterior para China
欢迎
Bienvenido a la Argentina
Wen Jiabao 访问阿根廷
中华人民共和国总理温家宝
Primer Ministro de la República Popular China
E
l Primer Ministro de la República Popular China, Wen Jiabao, llegará a la Argentina en visita oficial mañana. Permanecerá dos días en Buenos Aires para la firma de distintos acuerdos de cooperación, reuniones con representantes políticos de alto nivel y
sectores empresarios. Se trata de la primera visita aquí de un funcionario chino de este rango en 27 años. Esto lo convierte en un hecho casi tan significativo como las cuatro décadas de Relación Bilateral que se cumplen este año entre ambos países. Estas claras se-
ñales del compromiso que tanto China como la Argentina han realizado para profundizar sus vínculos a todo nivel, en un momento de redefiniciones en el escenario internacional, abre expectativas más que interesantes para los sectores productivos de ambos países.
中华人民共和国总理温家宝明天将抵达阿根廷进行正式访 问。将在布宜诺斯艾利斯停留两天时间，签署多项合作协 议，与政界高级代表和企业部门代表举行会晤。 这是27年来这一级别的中国官员首次访问。这一事实将同今 年满四十周年的两国关系变得同样重要。无论是中国和阿根 廷已经做出了深化各方面关系的承诺，这些明显的信号是在 国际舞台重新定义的时刻做出的，这将为两个国家的生产部 门开辟令人期待的前景。
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Viernes 22 de junio de 2012
LA RELACION ARGENTINA CHINA
Cuarenta años de un lazo que excede lo económico El intercambio comercial entre ambos países se multiplicó al igual que las muestras de amistad.
E
l intercambio comercial entre Argentina y la República Popular China en 1972 –año en que se establecieron oficialmente las relaciones diplomáticas entre ambas naciones- fue de tan solo tres millones de dólares. Cuatro décadas después, el vínculo atraviesa un momento histórico, con un intercambio de productos que llegó a 14.800 millones de dólares en 2011 y una alianza política sólida frente a temas coyunturales del mundo. El embajador chino en Argentina, Yin Hengmin, sostiene en la nota que acompaña este informe que la profundización de este lazo
bilateral se debe al “esfuerzo que los dos gobiernos y personalidades de diversos sectores” concretaron en los últimos 40 años. Existe además un compromiso internacional que incluye el respaldo del gigante asiático al reclamo argentino por la soberanía en las islas Malvinas. Pero la de Argentina y China no es una relación que se circunscriba o limite a lo económico y diplomático. También alcanza aspectos culturales como cierta fascinación que existe aquí por la tradición milenaria china y, en ese país, por el tango o el fútbol argentinos. Todo comenzó, como se dijo,
hace 40 años. Pero hubo una relación preexistente entre ambos países que se vio alterada por procesos locales e internacionales. El puntapié de la actual etapa fue un comunicado conjunto firmado el 19 de febrero de 1972. Ese documento selló la normalización de las relaciones diplomáticas entre ambos países. La anterior relación, “perdida” en el tiempo, había comenzado en 1945, durante el gobierno de facto de Edelmiro J. Farrell. Pero aquel hito de los 40 perdió entidad. Eduardo Oviedo, investigador del CONICET y profesor
titular de Historia de las Relaciones Internacionales Contemporáneas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), explica: “La República Popular China no reconoce los convenios mantenidos por anteriores administraciones, sino que entiende el comunicado de 1972, firmado en Bucarest, la capital de Rumania, como de establecimiento de relaciones diplomáticas. Para no entrar en controversia con China, los gobiernos argentinos han seguido esta posición”. ¿Cuál fue el primer objetivo para concretar el acercamiento mutuo? Sergio Cesarin, coordinador
Académico de la Especialización en Economía y Negocios con Asia del Pacífico e India de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF), resaltó que en 1972 se registró un “cambio en la ecuación de poder mundial” a partir del viaje que el entonces presidente estadounidense Richard Nixon realizó a Pekin para reunirse con su par Mao Tse-Tung. Este encuentro, explica Cesarín, “abrió la puerta de una nueva era en las relaciones” de Estado entre Argentina y China, que hoy, volviendo a palabras del embajador Yin Hengmin, “pasan por su mejor momento”.
Un encuentro clave para el vínculo bilateral y el multilateral La visita del Primer Ministro Wen Jiabao a la Argentina se da en un momento histórico y tiene gran significado tanto para repasar las relaciones bilaterales durante los últimos 40 años, como para planificar la relación en los años por venir. Con este objetivo la señora Presidente Cristina Fernández de Kirchner y el Primer Ministro Wen Jiabao van a llevar a cabo entrevistas y reuniones de trabajo donde se analizarán las relaciones bilaterales en todos los campos, se firmarán distintos acuerdos de cooperación, y también se intercambiarán opiniones sobre la situación internacional y otros temas de actualidad. Nuestros vínculos ya habían dado un giro decisivo en el año 2004, cuando se celebraron acuerdos de Relación Estratégica entre Argentina y China en ocasión de la visita de nuestro Presidente Hu Jintao. La presente comitiva reviste gran importancia ya que el primer ministro vendrá al frente de una delegación integrada por al menos nueve funcionarios con rango de ministro y viceministro -entre ellos el Canciller, el Ministro de Comercio, el de Desarrollo y el de Agricultura-. La categoría de los visitantes es una muestra de la importancia que el gobierno chino otorga a su relación con Argentina y estamos seguros de que la visita va a dar nuevo impulso al estrechamiento de los lazos bilaterales.
Este informe es una realización integral de Scanner Editorial S.A. no participando en el mismo personal de El Cronista Comercial. Por ende, el diario no se hace responsable de los contenidos publicados en sus páginas.
Por Yin Hengmin Embajador Extraordinario y Plenipotenciario de China en la República Argentina Tel: 4962-8228/4963-6776
Email: administracion@scannereditorial.com.ar
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Viernes 22 de junio de 2012
Una presencia que confirma el fortalecimiento de la relación
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a visita a la Argentina del primer ministro de la República Popular China, Wen Jiabao, es un acontecimiento que celebro en lo personal y como presidente de la Cámara Argentina China de Comercio, creada hace 28 años. También resalto la llegada de esta delegación oficial como representante de todas las empresas chinas que están establecidas en la Argentina, cuyas inversiones agradecemos. Del mismo modo que alentamos a venir al país y consideramos siempre bienvenidas a aquellas que seguramente madurarán en este nuevo encuentro bilateral. Tomamos con entusiasmo este nuevo paso hacia el fortalecimiento de las relaciones entre ambos países. Como cámara de comercio bilateral, hemos visto en estos 28 años avances progresivos con encuentros oficiales entre ambos países a un nivel cada vez más alto, como el que en 2004 encabezó el presidente de China, Hu Jintao, en su visita a la Argentina. En aquella oportunidad, el propio presidente Hu reconoció nuestra labor en la promoción del vínculo bilateral al ofrecerme un almuerzo en el Hotel Llao Llao, en la provincia de Río Negro.
Por Carlos Spadone Presidente de la Cámara Argentina China Por otro lado, debemos destacar que nuestras gestiones siempre tuvieron el apoyo del Partido Comunista Chino. Por todos estos gestos estoy agradecido como representante empresario pero también como argentino. Sucede que muchos son los episodios que me unen a China a lo largo de mi vida. Empecé a querer a China en 1972, cuando en París fui partícipe directo de las gestiones iniciadas por el entonces mandatario de aquel país, MaoTze Dong, con el exiliado general Juan Domingo Perón, para establecer vínculos entre el partido Justicialista y el PC de China. Luego, en 1983, en mi primer viaje al exterior como Secretario Político del PJ en el orden nacional, conocí China junto a una nutrida delegación de dirigentes empresarios y sindicales. De aquel viaje traje al país siete compañías de acróbatas de distintas regiones de china que se presentaron en toda la Argentina. Años después, en 2000, hice una importante inversión de varios millones de dólares y compré una bodega china. Desde ese año elaboro
vinos con uva china que se venden en un mercado en creciente expansión. En 2002 mi hijo Sergio se radicó con toda su familia en China. Fruto de aquella decisión, hoy tengo el orgullo de decir que tengo un nieto nacido en China, Luca Spadone. No fue el único símbolo –aunque sí el más importante- de la hospitalidad que ese país le mostró a mi familia: mi hijo creó allí en estos años otras dos empresas que hoy venden maquinaria vial y para la explotación minera desde “el gigante asiático” hacia todo el mundo. Por todo esto, cuando se decidía la realización de la Exposición Universal de 2010, personalmente abrí gestiones para que el voto de la Argentina fuese para Shangai, gesto que enfáticamente resaltó el embajador de China en la Argentina, Yin Hengmin, en la conferencia de prensa que anticipó la visita de Wen Jiabao. Pero desde ya, más allá de las satisfacciones personales, la relación con China me inspira –al igual que a todos los socios de la Cámara- a hacer nuestro aporta a este encuentro entre ambos países que excede lo comercial y tiene que ver con una dinámica cultural e histórica que indefectiblemente nos lleva al encuentro y la fraternidad, por encima de nuestras diferencias.
“La clave está en la complementación”
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Por Jorge C. Bacher Socio PwC Argentina
“El vínculo con China se enmarca en la complementación de las ventajas comparativas de ambas naciones.Argentina tiene amplios recursos naturales, por ejemplo en el sector energético y en el agrícola y China, por la gran transformación que ha encarado en las últimas décadas, tiene una alta demanda de este tipo de recursos”, sintetiza Bacher, socio de la Consultora PWC. “En las últimas tres décadas China produjo la revolución social más significativa de la historia de la humanidad, ya que millones y millones de personas y familias que tenían niveles de vida calificables de indigentes pasaron a formar parte de clases medias urbanas con mejores niveles de salud, educación y consumo. Por ello, inclusive actualmente, cada año un número de personas compatible con la población total de nuestro país pasa a integrar grupos de mayor consumo en China. Demandan bienes y servicios de mayor sofisticacion y tecnologia, en recursos primarios. De allí que la riqueza de nuestros territorios en América del Sur es apetecible para satisfacer la creciente demanda de los habitantes de China”, agregó el analista. Hacía el futuro, sostiene Bacher, esta tendencia habrá de intensificarse básicamente por dos motivos: el nivel de eficiencia de Argentina en los productos del agro es significativamente mayor al de otras geografías y el potencial energético de nuestro país a partir de los combustibles fósiles no convencionales es de enorme interés para el mundo todo y especialmente para China. Respecto de las expectativas de los directivos de empresas chinos que realizan negocios fuera de su país, persiguen los siguientes objetivos: Establecer organizaciones efectivas, lograr el crecimiento y la innovación, controlar los costos, administrar los riesgos y las regulaciones, desarrollar los recursos humanos, expandir el uso de la tecnología y lograr las adecuadas integraciones culturales y de procesos en las empresas donde participan. “Estos son los servicios que un país como Argentina puede ofrecer a China toda vez que se produzcan importaciones de capital y combinaciones empresarias. De hecho en los sectores arriba indicados se han producido inversiones cuantiosas y los desafíos señalados están presentes”.