Misionero, la sana doctrina, edicion 3

¿Hacia dónde podemos poner nuestra fe?

En honor a la verdad. ¿Nunca te has sentido incomodo cuando algún grupo religioso te visita?, bueno, sea cual sea tu respuesta todos hemos pasado por esa incomodidad, y es que la mayoría de los grupos religiosos se basa “en sus creencias o lo que ellos quieren creer”, mas no en las sagradas escrituras y lo que su valioso contenido posee. Como dice la Biblia: En las muchas palabras no falta pecado; Más el que refrena sus labios es prudente. (Proverbios 10:19), y ese es uno de los mayores problemas de las religiones, sus palabrerías; que al fin y al cabo no llevan a ningún lugar, más bien aquellas personas que oyen siguen en lo mismo sin haber un cambio notorio y lo que es peor terminan más confundidos y optan por no creer en nada o en lo que más les conviene a ellos siguiendo con una vida desordenada y sin sentido.