Tratado de Fortificaciones o arte de confluir los edificios Militares y Civiles. Tomo II

278 TR A T A D O " ada lo interior del Edificio, y 10 refrante fe ,,; 'ha de igualar con Piedra tofcá y .mezcla de " betun, dandole [u pendiente 'acia los Di"ques para derramar las aguas. " Cada uno de los Eftribos debe tener el "proprio Cimiento que rus refpeél:ivos Mu,., ros, con quienes [e han,de trabar perf:él:a" mente.

"Las Piedras que forman el paramentc! "del Muro de Calda, como aft m ifmo las " que conftituyen los rincones de los Quicios, "los angulas de los encafamentos para las " Puertas, los Derramos y Coronamientos, fe n deben afegurar las· unas contra las otras con , "grapas de hierro y plomo, para la mejor fir" meza y duracion de la Obra. " Aíi los Muros de las Efi:luCas, como los "de la lla! Ca, fe han de fundar tres pies J}las " baxo que fus refpeaivos Suelos. La fuhda" cion de la BalCa debe ocupar toda fu longi. " tud y aRchu t.a , aCentando (us T1'av~Ceros de " 29 pies de longitud, y de diez a once pulga" da.s de gmeCo, feparados cinco pies de cen" tro a centr.o, retenidos con tres Efta.u9 Ca" da uno, y empalmados por los ex ere ¡¡n.o s "con Soleras que reciban la primera hita.da .. " de Piedra cortada, como Ce ha di(¡ho a:nt~ce" den~emente . Efu¡ f¡¡.ndacion fe ha de maci,,, zalt con m a¡mpÜlaet:~a, ha:fta enr;r,Ca.r los' Tra~) veferos, foore quienes fe aplica.fa Il!U1I Suelo" fen-