Resúmenes comunicaciones SEHL

Page 98

IX Congreso Internacional de la Sociedad Española de Historiografía Lingüística. Córdoba, 11-13 de septiembre de 2013.

LAS FÓRMULAS SUPERLATIVAS EN LOS DICCIONARIOS Y LAS GRAMÁTICAS DE LOS SIGLOS XVIII Y XIX WANG, Chao-Fang* Universidad Autónoma de Madrid

El objetivo de esta comunicación es analizar cómo las fórmulas superlativas se interpretan en los diccionarios y las gramáticas de los siglos XVIII y XIX. Para ello, en primer lugar, acudiré a diversos diccionarios y gramáticas de la época que reflejan diferentes interpretaciones sobre las fórmulas superlativas. Mi objetivo es componer un esquema en el que se muestren las ideas gramaticales de la época tanto en los diccionarios como en las gramáticas. Siguiendo esta dirección, he centrado mi análisis en los materiales siguientes: las gramáticas del siglo XVIII: Gramática de la lengua castellana de Benito Martínez Gómez Gayoso, fechada en 1743; el Arte del Romance Castellano de Benito de San Pedro, de 1769; y la Gramática de 1771. Y respecto al siglo XIX, analizaré la Gramática de la Lengua castellana según ahora se habla, de Vicente Salvá (1835) y la Gramática de la lengua castellana destinada al uso de los americanos, de Andrés Bello (1847). Por otro lado, averiguaremos las definiciones de dichas fórmulas en el primer Diccionario de Autoridades (1726-1739). Después de haber realizado un recorrido por los estudios gramaticales de los siglos XVIII y XIX, encontramos una discrepancia en la forma de tratar la lengua, actuando entre la gramática y el diccionario. Puesto que en el primer Diccionario de Autoridades (1726-1739) hemos hallado ejemplos de fórmulas superlativas tales como asaz, muy, bien, -ísimo, harto, demasiado, y verificamos que en él no han sido mencionados los prefijos superlativos, pero sí encontramos palabras rebueno, relindo, mostrando que en dicha época el prefijo re- ha sido utilizado como el superlativo mientras que no se hallan otros prefijos interpretados como superlativos sino con otros sentidos semánticos. Sin embargo, en las gramáticas de aquella época, las expresiones asaz, harto y demasiado se consideraron como adverbios de cantidad, y bien fue considerado adverbio de modo. Las únicas que entonces se habían establecido como fórmulas superlativas eran las expresiones muy e –ísimo. Estas fuentes nos confirman el lento desarrollo de los prefijos superlativos tanto en las gramáticas como en el primer diccionario, y el tardío reconocimiento de los intensificadores asaz, harto, bien y demasiado como superlativo en las gramáticas aunque en el primer Diccionario de Autoridades ya se registran como superlativo.

!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! *

!

chaofang_wang@hotmail.com


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.