Grabado medieval plagado de simbolos celestes y c6smicos. En ál, Nicolás de Cusa, que vivi6 de 1401 a 1464, atraviesa la imagen medieval del universo y descubre, entre otros simbolos familiares, el de las dos ruedas engarzadas, slmbolo que aflora en el relato blblico de Ezequiel y que aqul podemos apreciar en el ángulo superior izquierdo del grabado que reproducimos.
do en principio por la observación- de que el objeto celeste posee la virtud de aparecer y desaparecer en forma repentina. "Se los puede captar con radar -escribe Jung-, pero permanecen invisibles alojo y viceversa, pueden verse a simple vista, pero no captarse con el radar. Se sostiene que los OVNI pueden hacerse visibles o invisibles a voluntad y que por lo tanto deben estar hechos de una materia que es ya visible, ya invisible. Por eso la analogfa
más próxima es la de un liquido evaporable, que del estado de invisibilidad se condensa en forma de gota." Es evidente que el carácter del objeto celeste, a pesar de los miles de testimonios confiables que hasta cierto punto tienden a limitarle en un aspecto determinado, se revela esencialmente como un fenómeno inasible, para cuya interpretación resulta insuficiente la aplicación de los principios racionalistas. Por eso,
MUNDO DESCONOCIDO
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