Tema central: El Deporte
¡A POR LA SIERRA! Pues ahora toca sobre el deporte y de eso voy a escribir. No voy a escribir de técnica, de planes de entrenamiento, de alimentación correcta ni de otras cosas por el estilo. No, voy a escribir sobre lo fácil y bonito que puede ser practicar deporte, incluso con un gran gasto energético (no de dinero) aprovechando los terrenos que tenemos cerca. Disponemos, al vivir en un pueblo, de campo muy próximo y podemos acceder a él sin necesidad de coche. El deporte que os propongo es el más fácil y barato de todos: que es correr (o andar el que no pueda) por la sierra de San Miguel. Para llegar arriba, hay que superar un desnivel de unos 300 metros en menos de tres kilómetros, un esfuerzo considerable pero muy llevadero por sus vistas y la satisfacción de ir superando las cuestas que parecen empujarnos para casita. Para intentar el asunto sólo hacen falta zapatillas de correr, pantalón corto y camiseta; nada que no se tenga en casa sin gastar un duro. El agua no será necesaria pues el recorrido que propongo son unos 11 Km. por lo que durará una hora, pero el que la necesite, puede llevar una botellita en la mano, aunque nada de tirarla al suelo cuando esté vacía, que viene el «hombre del saco» (o sea, Lola) y hace manteca con nosotros, por eso del cambio climático y tal. Bueno, nos ponemos en marcha y el primer kilómetro transcurre tranquilo por el «lejío» que es así como lo llamamos, un localismo como
A vuela pluma. Diciembre de 2011, nº 16
otros tantos (buscad «morgaño» en el diccionario a ver qué encontráis), y no el ejido, que eso son cosas de la Real Academia de la Lengua, ¡qué sabrán ellos! nunca se les ha visto por ahí. Vamos calentando, corremos lentamente y miramos hasta donde tenemos que llegar, allí, arriba del todo, «¡ay qué miedo mama!». Nos hemos acercado al pie de la sierra y ya empieza el suelo a desnivelarse. Parece que alguien nos está agarrando o que hemos puesto de repente 10 Kg. más; pero no, es la primera cuesta y una de las más empinadas Puede tener un desnivel aproximadamente del 25%, o sea, mucho, para que me entendáis.
Esta primera cuesta tiene una curva a la izquierda y otra a la derecha que es cuando más se empina Ya podemos ver (si vamos en primavera) los primeros espárragos de los muchos que habrá por el camino. Esta cuesta nos hace sufrir mucho por ser la primera y no tener el cuerpo todavía perfectamente adaptado a la actividad. Suele tardar unos 10 minutos en adaptarse; en ese tiempo, la sensación es de querer parar, de no poder, pero pasa (bueno, a algunos se os pasará). El problema es que ahora tenemos que adaptar el cuerpo no solo a correr sino a correr por cuestas, y eso tarda un poco más. De todas maneras, ahora hay un falso llano que nos hace adaptarnos mejor al esfuerzo y podemos ir apreciando como el pueblo empieza a alejarse y aparecen otros en el horizonte. Avanzamos prácticamente recto, Página 9