Revista ICOMA nº32, especial COVID-19

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Publicación del Colegio Oficial de Médicos de Araba/Álava - Arabako Sendagileen Elkargo Ofizialaren Aldizkaria

EN PRIMERA LÍNEA FRENTE A LA COVID-19 REVISTA ESPECIAL DEL COLEGIO DE MÉDICOS DE ARABA/ÁLAVA LOS TESTIMONIOS DE MÉDICOS Y MÉDICAS DE DISTINTOS SECTORES SOBRE CÓMO ESTÁ VIVIENDO LA PROFESIÓN ESTA CRISIS SANITARIA

Nº 32 JULIO 2020 32.ZK 2020.KO UZTAILA



sumario nº 32 Julio 2020 / 32.zk 2020ko Uztaila

Opinión Editorial 4/5

Artículos de los Colegios profesionales sanitarios de Álava 40/41/42/43

Reportajes

En primera línea frente a la Covid 6 El ICOMA, siempre cerca de las colegiadas y colegiados 7/8 La Covid-19 como accidente laboral para los profesionales sanitarios

9 Ansiedad, estrés e insomnio: principales secuelas de la pandemia en el colectivo

médico 10/11 Campaña “Siempre a tu lado” para poner en valor la dedicación de los profesionales sanitarios 39

Experiencias COVID

Unidad de Cuidados Intensivos 12/13 Servicio de Medicina Interna 14/15 Hospitalización a Domicilio 16/17 Servicio

18/19 Servicio de Urgencias 20 Atención Primaria 21/22 Atención Primaria Rural 23 Residentes 24 Sanidad penitenciaria 25 Médicos voluntarios: jubilados y R0 26/27 Medicina privada 28/29 Salud pública 30 de Neumología

Protagonistas

Laboratorio de bioseguridad nivel 3 en HUA Txagorritxu para hacer autopsias coronavirus 31/32/33 Red de vigilancia epi-

demiológica 34/35 La iniciativa solidaria Eutsi Goiari recaudó más 180.000 euros en plena pandemia para adquirir material

sanitario de protección 36/37/38

Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Araba/Álava. Avda. de Santiago nº 7, bajo CP: 01002. Vitoria-Gasteiz. Teléfono: 945 258 233 icoma@icoma.eus www.icoma.eus

Edita: ILUSTRE COLEGIO OFICIAL DE MÉDICOS DE ARABA/ÁLAVA. Redacción: LOURDES LORENZO. Diseño: La consulta creativa www.laconsultacreativa.com Tirada: 2.400 ejemplares. Imprime: Gráficas Dosbi, S.L. / D.L.: SS-1492/06.

Nuestra revista on line

Ejemplar gratuito para distribuir a los colegiados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos publicados en este ejemplar sin autorización expresa de la Junta Directiva del Colegio. El Colegio no comparte necesariamente las opiniones vertidas en los artículos publicados, siendo responsabilidad exclusiva de quienes las suscriben.


editorial Ejemplo de profesionalismo y compromiso social Dr. Kepa Urigoitia

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a actual pandemia por coronavirus comenzó en la República Popular China con un brote epidémico detectado en diciembre de 2019 en Wuhan (Hubei), vinculado a un mercado mayorista de marisco, pescado y animales vivos, que fue diagnosticado en un primer momento como una neumonía de origen no determinado. El agente causante, en un principio desconocido, fue identificado como un nuevo coronavirus denominado SARS-CoV-2. Su rápida propagación, favorecida por la globalización, trajo como consecuencia que, a lo largo del mes de enero, apareciera algún caso en 26 países más, incluida España, donde se detectó el primero en la persona de un alemán en la isla de La Gomera.

Presidente del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Araba/Álava

Ese mismo mes la OMS emite una declaración en la que afirma que se ha comprobado la transmisión entre seres humanos y, a finales del mismo, el Comité de Emergencias creado a tal efecto declara que el brote constituye una emergencia de salud pública de importancia internacional. El día 11 de marzo, la OMS, preocupada por la gran propagación de la enfermedad y por su gravedad, la declara como una pandemia. El ICOMA se siente orgulloso del trabajo de todos y cada uno de los profesionales médicos alaveses y les expresa su reconocimiento por un trabajo que ha demostrado su vocación, más allá del mero cumplimiento del deber

A partir del primer brote, el incremento de los casos y su expansión a gran escala se produjo con una

rapidez inesperada en los primeros momentos, hasta alcanzar a la práctica totalidad de los países del mundo, superando ya a día de hoy los 12 millones de personas afectadas por la COVID19 y el medio millón de fallecidos. En Euskadi, el primer brote hizo su aparición en Vitoria-Gasteiz a finales del mes de febrero. El 13 de marzo el Lehendakari decretó el estado de alerta sanitaria en la Comunidad Autónoma Vasca y, al día siguiente, el presidente del Gobierno de España decretó el estado de alarma sanitaria en todo el Estado. Su rápida expansión, unida al desconocimiento del nuevo virus y a la falta de las medidas de protección adecuadas para enfrentarse a él, puso al descubierto las debilidades del sistema sanitario, que vivió mo-

mentos en los que estuvo al borde del colapso y en el que destacaron como principal activo sus profesionales sanitarios. Unos sanitarios en general y unos médicos en particular que, a pesar de la presión que supone afrontar una enfermedad desconocida y letal, del cansancio provocado por largas jornadas de trabajo, de los cambiantes protocolos, de la falta en muchos momentos de los medios de protección individual adecuados y de las pruebas necesarias para conocer su estado de salud con respecto al nuevo coronavirus, han antepuesto la salud de los pacientes a la suya, aún a riesgo de su vida, su salud y la de sus familiares, en un encomiable ejemplo de profesionalismo y compromiso social.


editorial

Que la llamada primera oleada haya pasado no significa que el virus haya desaparecido. Sigue entre nosotros, como lo prueban los nuevos brotes que están apareciendo tras el confinamiento, y existe una gran posibilidad de que puedan producirse nuevas oleadas, por lo que, sabedores de que aún estamos lejos de la inmunidad de grupo y de la falta de la vacuna adecuada, debemos estar preparados. La Junta Directiva del ICOMA ha estado en todo momento al lado de todos sus colegiados y seguirá estando, gestionando, asesorando, defendiendo, representando a la profesión médica del Territorio Histórico de Álava ante las administraciones correspondientes y respondiendo en lo que está en su mano a las sugerencias y solicitudes recibidas.

Dedicamos esta revista de manera monográfica a recoger testimonios de compañeros que, desde distintos puestos de trabajo y distintas especialidades han estado en la primera línea de la lucha contra esta pandemia e incluimos también los de los presidentes de otros Colegios Sanitarios 5 Alaveses. El ICOMA se siente orgulloso del trabajo de todos y cada uno de los profesionales médicos alaveses y les expresa su reconocimiento por un trabajo que ha demostrado su vocación, más allá del mero cumplimiento del deber, haciendo suya la máxima atribuida al médico francés del siglo XIX, Claude Bernard: curar a veces, aliviar a menudo y consolar siempre.


reportaje

En primera línea frente a la Covid

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as cifras son de por sí demoledoras: más de 1.560 fallecidos en el País Vasco y más de 13.800 contagiados. Unos números que se disparan si extendemos la visión al territorio nacional que ya alcanza las 28.400 defunciones y 253.000 contagiados a primeros de julio. Detrás de estos dígitos se encuentra el coronavirus, ese virus llegado de oriente que trae la Covid-19 a quien se acerca demasiado y que ha provocado una crisis sanitaria mundial sin precedentes. Una pandemia que ha tenido siempre de frente a los profesionales de la medicina y a todo el colectivo sanitario en general. Los médicos y médicas han hecho gala de su compromiso, vocación y esfuerzo por liderar este reto sanitario en condiciones de incertidumbre, con duras jornadas de trabajo y una alta presión profesional y personal. Estos profesionales han pagando en ocasiones un alto precio por situarse en la primera línea frente a

la Covid19. Más de 80 médicos y médicas han fallecido desde marzo en el ejercicio de sus funciones. Mientras, más de 52.000 profesionales sanitarios han estado contagiados según cifras del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad. Y es que en marzo cerca del 20% de los casos registrados pertenecían al colectivo sanitario, 10 puntos más que Italia y muy por encima de otros países especialmente afectados.

Situación en el País Vasco En País Vasco, a fecha 3 de julio, ascendían a 2.243 los profesio-

nales sanitarios con PCR positiva, 543 médicos

Profesionales con PCR positiva

Médicos con PCR positiva

OSI Araba

463

107

OSI Arabako Errioxa

17

2

Red Salud Mental Araba

35

1

Total

515 110

Centros Álava

Los 515 profesionales sanitarios infectados en Álava, suponen el 23% del total del País Vasco. Los médicos y médicas son el 20% del total de 110 profesionales sanitarios contagiados en Álava. Dentro de la OSI Araba, el mayor número de positivos se registraba entre especialistas de Medicina Familiar y Comunitaria (25), Médico de Urgencias Hospital (10), Cardiología (7) y Pediatría (6).


El ICOMA, siempre cerca de las colegiadas y colegiados

reportaje

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l Colegio de Médicos de Araba/Álava representa y defiende los intereses del colegiado, vela por el cumplimiento de los principios

deontológicos de la profesión y protege la salud de la ciudadanía garantizando una correcta práctica profesional. Siguiendo sus principios y valores, el ICOMA ha permanecido al lado de

los profesionales médicos desde el inicio de la pandemia. Las puertas de su oficina se cerraron de forma física el 16 de marzo, tras el estado de alarma sanitaria decretado por el Gobierno cen-

tral. Sin embargo, semanas antes, el Colegio de Médicos de Álava empezó a trabajar en distintas medidas e iniciativas para paliar los efectos de esta crisis y no descansó en su actividad, tanto


reportaje representativa como de atención colegial, en ningún momento durante todo este tiempo.

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El Colegio no solo no dejó de funcionar durante este periodo sino que redobló sus esfuerzos, concentrando sus acciones en facilitar unas mejores condiciones a los colegiados y reforzando la comunicación electrónica con el continuo envío de boletines informativos y circulares. Recogemos algunas de las iniciativas realizadas: • ICOMA aplaza los cursos de formación y actividades colectivas previstas en su sede colegial hasta nuevo aviso. 3 de marzo de 2020. • Comunicado en defensa de la profesionalidad de los médicos en la gestión de la Covid-19, con especial mención al Servicio de Medicina Interna del HUA. 4 de marzo de 2020. • Cierre de la oficina del Colegio. Atención telemática. 16 de marzo de 2020.

• Creación de un registro de médicos voluntarios para colaborar ante el aumento de la carga asistencial en la provincia. Colegiación gratuita. 16 de marzo de 2020 • ICOMA se suma al comunicado del CGCOM: “Ni un día más, ni un test de menos”. 29 de marzo de 2020 • Puesta en marcha del Programa de Apoyo Psicológico en la Crisis del Coronavirus (PAPCC). 2 de abril de 2020. • ICOMA rechaza la prórroga de contratación de residentes de último año. 3 de abril de 2020. • ICOMA contra la medida de reincorporar a toda prisa a los profesionales sanitarios infectados o con sospechas de estarlo. 5 de abril de 2020. • La Obra Social ICOMA pone a disposición de los colegiados en activo la Ayuda de apoyo familiar en el hogar. 5 de abril de 2020.

• Petición a las compañías aseguradoras de medidas de compensación por la situación de los profesionales médicos de ejercicio libre. 24 de abril de 2020. • Aplazamiento de la cuota colegial a los colegiados por cuenta propia o autónomos de la provincia. 25 de abril de 2020. • Justificante para asistencia de paciente a consulta privada. 25 de abril de 2020. • Resumen de medidas para reducir los costes de pymes y autónomos. 25 de abril de 2020. • La consejería de Salud del Gobierno vasco confirma al Colegio de Médicos de Araba/Álava que es posible abrir las consultas privadas. 4 de mayo de 2020. • Bandera a media asta en el Colegio por los profesionales médicos fallecidos. Mayo 2020. • Dos minutos de silencio en homenaje a los compañeros falleci-

dos en la lucha contra el coronavirus. 5 de mayo de 2020. • ICOMA ofrece a sus colegiados y familiares de primer grado condiciones económicas ventajosas en la realización de test serológicos y/o PCR de detección de COVID-19. 15 de mayo de 2020. • Médicos, enfermeras, dentistas, farmacéuticos y veterinarios de Álava impulsan la campaña “Siempre a tu lado” que pone en valor la dedicación de los profesionales sanitarios por una atención de calidad al paciente. 26 de mayo de 2020. • Cobro fraccionado del seguro RCP 2020 a los colegiados de actividad privada acogidos a la póliza colectiva que el ICOMA tiene concertada con la Mutua AMA. 5 de junio de 2020. • ICOMA propone al Ayuntamiento cambiar la denominación de la Plaza del Hospital en reconocimiento a los profesionales sanitarios. 3 de julio de 2020.


La Covid-19 como accidente laboral para los profesionales sanitarios

A vueltas sobre el accidente de trabajo y la enfermedad profesional derivado de la Covid-19

El Consejo de Ministros acordó a finales de mayo que los contagios y muertes por Covid-19 en los profesionales que prestan atención en centros sanitarios o sociosanitarios cuenten como accidente laboral. La medida supone un aumento de las prestaciones para los afectados ya que hasta ese momento era posible recibir la prestación económica por incapacidad temporal derivada de accidente de trabajo por aislamiento o contagio si disponía de un parte de baja médica.

Julio Vázquez, asesor jurídico del ICOMA

La nueva medida permite ahora al personal sanitario beneficiarse, si cuentan con un parte de accidente de trabajo y lo acreditan los Servicios de Prevención de Riesgos Laborales y Salud Laboral, de beneficios como la incapacidad permanente, orfandad o viudedad por accidente de trabajo si han resultado afectados por la Covid-19.

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ada la situación de carácter excepcional que nos ha tocado vivir, como consecuencia de la pandemia, la urgencia de publicación de disposición legales, su complejidad regulatoria y su diversidad interpretativa, la cuestión planteada presenta una serie

de interrogantes que se intentan resumir, partiendo del reconocimiento hasta finales del mes pasado con carácter de excepcional, de las personas contagiadas o en periodo de aislamiento, asimilándolo al accidente de trabajo, con los efectos económicos de la prestación de Incapacidad temporal. Nuestro ordenamiento jurídico parte de un sistema de lista cerrada de enfermedades profesionales, pudiendo ser calificadas como tales, las contraídas como consecuencia del trabajo ejecutado por cuenta ajena, siempre que se encuentran incluidas en los cuadros comprensivos de las mismas, lo que no debe confundirse, con otra categoría diferente pero muy próxima a las enfermedades profesionales, y que son las enfermedades derivadas del trabajo. Las primeras cuentan con la presunción legal de “iure et de iure”, o lo que es lo mismo, no admite

reportaje prueba en contrario, ya que corresponden a una lista cerrada establecida. Las segundas proceden de la interpretación expansiva del origen laboral del concreto padecimiento, aun cuando no se encuentra en dicha lista, necesitando de la prueba de origen directo y exclusivo en el trabajo. En concreto, este Colegio man- 9 tiene que se deba considerar la COVID-19 como una enfermedad profesional de los profesionales sanitarios, entendiéndose como tal la que cumple los requisitos expuestos anteriormente. En ese supuesto se ha pronunciado la sala de lo social, sección primera del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que dice: Para saber entonces, si nos encontramos ante una enfermedad profesional, habrá que analizar si


reportaje el causante reúne los tres requisitos que la citada norma exige para ello: 1.- Que la enfermedad sea contraída a consecuencia del trabajo realizado por cuenta ajena. 2.- Que se trate de alguna de las actividades que reglamentariamente se determinan.

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3.- Que esté provocada por la acción de elementos y sustancias que se terminen para cada enfermedad. Estos postulados son los que este Tribunal Superior de Justicia ha venido aplicando desde su sentencia de 4 de octubre de 2011 en la que se fijó criterio de interpretación armónico para el futuro. Esos requisitos son los mismos que se exigen en cualquier otro supuesto de enfermedad profesional, lo que supone que la COVID-19 se encontraría en la misma situación que el resto de enfermedades siempre que cumpla los expuestos anteriormente.

Para finalizar la discusión acerca de la consideración o no de contingencia profesional derivada de accidente de trabajo, que se encontraba reducida a asimilar a enfermedad común con prestaciones de las derivadas del accidente de trabajo, el Real Decreto Ley 19/2020 publicado en el BOE de 27 de Mayo, ha modificado esa consideración, aceptando tratarlo como contingencia profesional derivada de accidente de trabajo. El establecimiento de una serie de plazos de aplicación, hasta el mes posterior a la finalización del estado de alarma, así como los fallecimientos dentro de los cinco primeros años desde la infección, es muy discutible, y en cada caso se deberá analizar. Naturalmente esta temporalidad se eliminaría con la expresa consideración de enfermedad profesional y su inclusión en el cuadro correspondiente de la Seguridad Social.

Ansiedad, estrés e insomnio: principales secuelas de la pandemia en el colectivo médico

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a labor que desarrollan los profesionales sanitarios es uno de los pilares fundamentales para frenar la pandemia. El esfuerzo del colectivo médico es de tal magnitud que puede llevar en muchas ocasiones a un desgaste tanto físico como emocional muy importante. La ansiedad, el estrés y el insomnio son las principales secuelas a nivel salud mental que empiezan a confirmarse. Después de la adrenalina inicial necesaria para afrontar semejante reto, la aparente calma empieza a hacer brotar algunas señales de alarma. Por ello, el Colegio de Médicos de Araba/Álava desde el Programa de Atención Integral del Médico Enfermo (PAIME) del País Vasco, puso en marcha al inicio de la pandemia el programa de apoyo psicológico en la crisis del coronavirus (PAPCC). Una iniciativa que continúa en marcha y que ofrece al colectivo médico el tratamiento necesario para poder desarrollar su trabajo en óptimas

condiciones y prevenir el Trastorno de Estrés Postraumático. Dr. Joseba Atxutegi. Coordinador del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo, (PAIME) del Consejo de Colegios de Médicos del País Vasco.

• ¿Qué diferencia existe entre el Programa de apoyo psicológico en la crisis del coronavirus y el


reportaje programa habitual del PAIME? El PAPCC no trata enfermos como tal sino que es un apoyo en esta situación excepcional, que creemos que ha podido causar unas alteraciones emocionales en los profesionales por las situaciones estresantes de angustia e incertidumbre que han podido vivir. Es un programa para tratamientos agudos, a corto plazo y sin patologías de fondo. • Para acceder a estos recursos, hay que ponerse en contacto con el PAIME. Aunque este programa no es PAIME como tal, preferimos recurrir al mismo número para simplificar el proceso y no añadir un nuevo número que dificultase el acceso al mismo. Así, el profesional que quiera contactar, debe llamar al teléfono 646.581.200 y como coordinador del programa, me pongo en contacto con los terapeutas colaboradores. De forma que derivamos al profesional al Centro TADI, colaborador del programa PAIME, pero en este caso le atenderían unos terapeutas específicos, ya que el PAPCC contempla el apoyo psicológico,

no la atención psiquiátrica. • Por el momento apenas han atendido tres casos entre Álava y Bizkaia ¿Es posible que esas necesidades de atención empiecen a surgir ahora, con posterioridad a los picos más alto de trabajo y estrés? Creemos que sí. Existen programas similares de atención psicológica a profesionales por toda España y la experiencia de escasa demanda en estos momentos es similar en todos, incluso en sitios más excepcionales como Madrid o Barcelona. No sabemos si es por la resilencia y capacidad de adaptación de los profesionales de la medicina, que tenemos recursos validos para salir de situaciones como ésta. Los terapeutas con los que hemos tratado piensan que puede haber un rebrote en cuanto a demanda de atención en esta época de relajo, de duelo de lo vivido y por eso el programa sigue activo para quien lo pueda necesitar. • Estrés, ansiedad e insomnio son las principales secuelas en profesionales médicos.

Lo más destacado es el estrés laboral porque hablamos de una situación de conflicto. También está el miedo a enfermar y a contagiar sobre todo a los allegados, que te lleva a unas condiciones que puedes acabar no soportando. En estos momentos, están surgiendo problemas de cobertura de compañeros, de elección de vacaciones,… que puede redundar en esta crisis emocional provocando una saturación añadida. en estos compañeros saturados. • Si estas secuelas no se tratan a tiempo, ¿hay riesgo de que se cronifiquen? Se trata de un iniciativa de atención al agudo que pretende que un profesional en un momento determinado recurra a este programa antes de que vaya a más. Son dos consultas con un psicólogo y una terapia telemática grupal, de acceso rápido, que busca herramientas para poder luchar contra ese caída en un proceso más serio como puede ser depresión o en algún tipo de patología. • ¿Sería devastador los efectos que produciría un nuevo rebrote

descontrolado? Creo que sí, porque los profesionales que han estado en primera línea están al límite. Sería muy difícil volver a enfrentarse de nuevo a una situación similar a la que han vivido. También es verdad que en lo momentos más duros hemos visto a compañeros de baja que querían incorporase cuanto antes para seguir colaborando, eso dice mucho de su profesionalidad. • Los buenos resultados del PAIME suponen una garantía para 11 este programa. Así es. Mas del 80% de los profesionales que han pasado por el PAIME y que han estado de baja con enfermedades o adicciones serias se han reincorporado en menos de un año y eso es sin duda una garantía. Accede al Programa de Apoyo Psicológico en la Crisis del Coronavirus (PAPCC) del Consejo de Colegios de Médicos del País Vasco

Teléfono del PAIME: 646.581.200


Unidad de Cuidados Intensivos

Experiencias Covid La llegada de la pandemia de coronavirus supuso un antes y un después en la profesión médica, tanto a nivel organizativo como personal. Todos los profesionales han tenido que hacer frente a esta crisis sanitaria desde su respectivo sector o reubicados en otros donde resultaban más necesarios. Recopilamos las vivencias perso12 nales y profesionales de los médicos y médicas de distintas áreas para conocer cómo han vivido la lucha contra la Covid19. La Revista ICOMA invitó a responsables del Departamento de Salud y de la OSI Araba a participar en este número pero declinaron la invitación. El Colegio, además, abrió un periodo para que los colegiados colaborasen con la revista enviando su testimonio.

Dr. Sebastián Iribarren Diarasarri, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos de la OSI Araba

EXPERIENCIAS

“El esfuerzo de mucha gente permitió que ningún paciente con criterios de ingreso se quedara sin cama UCI”

“S

iendo sinceros ni de lejos pensábamos que nos iba a pasar lo que nos pasó. Pensábamos que habría casos puntuales, que podía ser parecido a la gripe A, pero nunca así”. Así comienza su relato el Dr. Sebastián Iribarren Diarasarri, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos de la OSI Araba. “Tuvimos el primer ingreso en la UCI el 4 de marzo y desde entonces fue subiendo a una velocidad exponencial. Cinco días después teníamos siete enfermos y una semana más tarde, la Unidad de 20 camas estaba llena. Esto fue lo que nos desbordó las primeras semanas, fue improvisar e ir aprendiendo sobre la marcha” Álava cuenta con 33 camas de críticos, que subieron a 71 en apenas tres semanas. Pasaron de


Unidad de Cuidados Intensivos

COVID-19

20 a 42 camas en el HUA Txagorritxu (se habilitaron 8 en quirófanos y 14 en cardiología) y de 13 a 29 en Santiago. La máxima ocupación fueron 41 pacientes Covid entre el 28 marzo y el 3 de abril y a partir de entonces empezó a descender poco a poco el número de ingresados. Según el Dr. Iribarren, a partir del 9 de marzo era una batalla todos los dias por buscar los respiradores, ir rotando las camas, gestionar al personal, EPIs, etc. “Montar camas de críticos es complejo porque hay que dotar la unidad de monitores, respiradores,…Los servicios de mantenimiento trabajaron día y noche durante días, Osakidetza hizo un esfuerzo ingente por la compra de dispositivos,… El esfuerzo de mucha gente permitió que ningún paciente con criterios de ingreso se quedara sin cama. Aquí no hemos vivido esas

experiencias, como ha pasado en otros sitios”. Pero además de camas, era necesario personal formado para atenderlas. “Todo el mundo nos echó una mano. Recuperamos a intensivistas que estaban en urgencias o emergencias, conseguimos que todo el personal de enfermería con experiencia en críticos trabajase con nosotros; hubo profesionales que se brindaron a trabajar aquí, por ejemplo anestesia fue fundamental, también cardiólogos que por su vida profesional tenían experiencia con críticos…” “Hubo momentos de angustia, de miedo, hasta que la situación se fue estabilizando y fuimos aprendiendo”

Un reconocimiento que va desde sus compañeros del Servicio al personal de limpieza y mantenimiento. “No ha habido fines de

semana, teníamos turnos rotatorios. La gente lo pasó mal y ven aquello como un sueño, lo ven lejano. Hubo momentos de angustia, de miedo, hasta que la situación se fue estabilizando y fuimos aprendiendo”. Y menciona el apoyo del servicio de Medina Interna o Respiratorio “que hicieron un esfuerzo grande en las unidades de hospitalización convencionales para no recurrir a nosotros salvo que no quedara más solución”. Sobre los criterios de derivación y la adecuación del tratamiento de soporte vital, el Dr. Iribarren recuerda la existencia desde hace años en Álava de protocolos que permiten que todo el mundo tenga razonablemente claro qué pacientes pueden beneficiarse del ingreso en la UCI. “Ingresan en la UCI aquellos pacientes graves

pero con una posibilidad razonable de recuperación. Porque los recursos son limitados, no todo el mundo que fallece en un hospital debería haber tenido una cama de críticos. Honestamente creo que aquí no hubo pacientes que se quedaran sin cama teniendo esperanzas de recuperación”. En cuanto al futuro más cercano, no espera que se repita la situación anterior. “Estamos pre- 13 parados a todos los niveles para enfrentarnos a esto: hay una detección más precoz de los casos, medidas de aislamiento efectivas, dotación de camas que no teníamos antes, planes de contingencia para el próximo otoño y partimos de una dotación básica de 75 camas para empezar pero con capacidad de superar las 100 camas en OSI Araba. Eso sí, el problema será disponer de personal para dar esa asistencia”.


Servicio de Medicina Interna

Dra. Julia Barroso Niso, jefa del Servicio de Medicina Interna de OSI Araba

“Había que tirar hacia delante, la responsabilidad era muy importante y teníamos que pelear por ello”

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EXPERIENCIAS

edicina Interna ha sido la especialidad médica que ha tomado las riendas en la gestión sanitaria y asistencial de la pandemia de coronavirus a nivel nacional. Lo ha hecho en primera línea apoyada en equipos multidisciplinares compuestos por médicos de todas las ramas y profesionales sanitarios de muy distintas áreas. Todos a una han luchado y siguen luchando para frenar al virus. Y eso que el coronavirus entró en Álava por la puerta grande, directo al hospital de referencia de la provincia para abordar su tratamiento, afectando directamente a gran parte del personal de Medicina Interna. “Fue una sensación de irrealidad. Nos estábamos preparando para tratar a los posibles afectados y precisamente fuimos los que caí-

mos, todo el servicio estuvo en aislamiento. Enseguida se organizó un gabinete de crisis a nivel hospitalario y los profesionales del servicio que estábamos en casa empezamos a organizarnos a través del teléfono principalmente, correos electrónicos con el hospital, fuimos los primeros en Osakidetza en trabajar con control remoto”. La Dra. Julia Barroso Niso, jefa del Servicio de Medicina Interna de OSI Araba, también estuvo en aislamiento y recuerda como tuvieron que contar con compañeros de otros servicios e internistas de otras OSIs. En ese momento, el exceso de atención mediático recibido por registrarse ese primer caso en una profesional internista incomodaba a todo el Servicio: “Lo vivimos mal como servicio. Esa culpa sobre todo en los medios de comunicación, de que había sido el primer caso una médica. Yo le doy la vuelta, pienso que el virus estaba


Servicio de Medicina Interna

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allí, nos tocó ser los primeros y gracias a eso se puso en marcha el proceso, si no hubiera sido la semana siguiente con otros tantos casos más”. Poco a poco el personal del Servicio de Medicina Interna se fue incorporando de nuevo al hospital, pero ya nada era como antes. No es posible atender las consultas externas y hay que estar para asistencia de hospitalización, porque el número de casos se dispara. “El mes de marzo fue muy duro, metíamos muchas horas y no llegábamos, los pacientes se ponían muy malos muy rápido y fallecían y veíamos que no tenían camas en las UCIs, que se empiezan a llenar. Vemos que igual en otros momentos podían ir a UCI y ahora no es posible. Eso son los momentos más críticos para un médico, cuando tienes que tomar decisiones duras”. En cuanto al estado del personal,

lo tiene claro: “Estamos cansados, sin duda, necesitamos vacaciones. Emocionalmente la sensación es de montaña rusa: con momentos más eufóricos o más bajos de ánimos. Pero teníamos que tirar hacia delante, la responsabilidad era muy importante y teníamos que pelear por ello. Hemos tenido las sensaciones muy a flor de piel, sobre todo al principio. El miedo a contagiarte, a contagiar a la familia, el estrés continuo ante una situación de incertidumbre que exigía estar pendiente de protocolos cambiantes…” Se crea la figura de coordinadora Covid, que recae en la Dra. Barroso, como figura intermedia entre la Dirección y los servicios clínicos para ir organizando miniequipos con un internista y médicos de otros servicios (urólogos, traumatólogos, oftalmólogos, residentes de especialidades médicas y quirúrgicas…) para atender

a los pacientes que van ocupando todo el hospital. La responsable del Servicio de Medicina Interna se pronuncia sobre los equipos de protección. “Había pocos y tuvimos que aprender a organizarnos sobre cómo pasar visita para poder realmente hacer que esos equipos duraran. Los equipos se repartían por plantas y en una planta pasaba un equipo de tal manera que utilizaba un solo EPI aunque luego se cambiara la mascarilla o los guantes. Tuvimos que aprender a economizar ese tipo de recursos. Pero yo no he tenido la sensación de decir que pido una mascarilla adecuada y no me la dan”. “El mes de marzo fue muy duro, metíamos muchas horas y no llegábamos, los pacientes se ponían muy malos muy rápido y fallecían”

Después de los duros momentos vividos, en la actualidad apenas

hay casos Covid en el hospital, se va recuperando el trabajo habitual antes de la pandemia, aunque el Servicio permanece alerta aplicando todas las medidas, como por ejemplo PCR a los pacientes cada poco tiempo para estar pendientes. “Casos vamos a seguir teniendo, el virus está en la calle, y la gente se está relajando, pero esperemos que sean brotes controlados… En octubre, con la gripe y el frio, prevemos un au- 15 mento de casos con sintomatología respiratoria. Pero no sabemos lo que va a ocurrir. Solo espero que sea menor que lo que hemos vivido.Si fuera igual, aunque no lo creo, el escenario sería distinto, la capacidad de reacción será mayor y no partimos de cero. El hospital estará preparado para lo que haya que hacer, tenemos más información sobre determinados medicamentos, sobre cómo se comporta el virus, etc. Seguro que los pacientes van a llegar menos a la uci”.


Servicio de Hospitalización a Domicilio

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Dr. José Regalado de los Cobos, jefe del Servicio de Hospitalización a Domicilio de OSI Araba

EXPERIENCIAS

“El sufrimiento ha estado en los profesionales que atienden Covid y en los que teóricamente no, por esa incertidumbre de saber si estaré suficientemente protegido”

Cómo vivieron la irrupción del primer caso en Álava? Fue como una explosión porque no hubo tiempo de organizar gradualmente las cosas porque la primera semana ya hubo muchos casos. La Dirección había acordado traer un médico para reforzarnos justo antes. Pero enseguida vimos que necesitábamos más refuerzos. Yo viví la primera semana con mucho agobio porque con 16 el personal médico en ese momento disponible no llegábamos a todo lo que teníamos que hacer. Tuvimos en poco tiempo mucha demanda de trabajo y menos personal por la propia infección. Sí hubo refuerzo de enfermería porque al principio se nos designó la labor de hacer pruebas de PCR a los domicilios y los controles telefónicos de los primeros casos, que eran leves. Pero esta última desbordó y veíamos que no llegábamos a todo. • ¿Cómo ha ido variando la organización del servicio a medida que avanzaba la pandemia?

Entendimos desde el principio que había que separar la atención Covid del resto de Atención a Domicilio. Había un médico que coordinaba las tomas con las enfermeras y los dos hacíamos los controles telefónicos, pero el volumen de pacientes

fue aumentando tanto que al final de la primera semana no dábamos abasto. Recibimos refuerzos de Atención Primaria y a la segunda o tercera semana dejamos de hacerlo y nos dedicamos más a visitar en las casas a los más afectados. Costaba encontrar

personal para colaborar con nuestro servicio. Ya a la cuarta semana llegó el refuerzo con profesionales de otros servicios y nos tranquilizó mucho. A finales de marzo había 10 médicos más trabajando con nosotros. Había diez médicos para visita domiciliaria


Servicio de Hospitalización a Domicilio

COVID-19

Covid y Hotel Lakua y uno para el resto de visitas. • ¿Cuál es el periodo que recuerda como más crítico durante esa etapa? Cuando más volumen de trabajo ha habido es a finales de marzo y primeros de abril. A mediados de marzo teníamos muchos pacientes y teníamos cierta sensación de agobio por no saber cuántos refuerzos tendríamos. Hemos llegado a tener 95 pacientes con infección Covid atendidos a diario por Atención a Domicilio, pero ya en en ese momento teníamos a 10 médicos más con nosotros. Ya a finales de marzo teníamos un agotamiento físico importante por toda la carga de trabajo. Además del impacto emocional, nos ha tocado vivir mucha incertidumbre, dudas, miedo,... Cuando ves a compañeros que caen enfermos de forma leve o grave, con cierta severidad, te deja tocado y preocupado. • El miedo al contagio ha sido importante... Toda la sociedad ha vivido esto con

mucha incertidumbre. Cuando te diagnostican gripe ya sabes a lo que te enfrentas, pero con la Covid no sabes si va a ser grave, si vas a morir y todo el mundo ha pasado miedo. Como profesionales nos gusta poder tranquilizar al paciente pero tampoco podíamos transmitir ninguna certeza porque no la teníamos. Y convivir con eso ha sido difícil. Además, cuando acudes al domicilio de un paciente Covid ya vas preparado porque sabes el riesgo que tienes, pero en la atención no Covid no ocurre esto. Atendemos pacientes con infecciones agudas, crónicos y paliativos y no sabemos si tienen Covid o no, y eso ha sido fuente de infección de muchos profesionales. En nuestro servicio han acabado infectados cuatro de nueve médicos y nueve de trece enfermeras y eso nos ha provocado malestar y sensación de que a lo mejor no nos hemos protegido lo suficientemente bien o que las infecciones pasaban desapercibidas y eso genera más miedo e incertidumbre. Así que el sufrimiento ha estado en los profesionales que atienden covid

y en los que teóricamente no por esa incertidumbre de saber si estaré suficientemente protegido o no. “Cuando ves a compañeros que caen enfermos de forma leve o grave con cierta severidad, te deja tocado y preocupado”

• ¿Han contado con los medios materiales de protección y de personal suficiente? En general sí. Medios materiales hemos tenido, necesitábamos sobre todo coches y dispusimos del parque móvil sin limitación. Y medidas de protección, hemos tenido que hacer en algunos momentos un uso muy racional, estirar los recursos, pero en general creo que hemos sido afortunados respecto a lo que se oye por ahí. Suficientes. Salvo momentos puntuales de desabastecimiento podemos decir que hemos estado bien. En cuanto al personal, ha sido una experiencia muy enriquecedora colaborar con profesionales de otros servicios. Era sorprendente la entre-

ga, ilusión, energía y disposición de los compañeros. Si les preguntas si están satisfechos con lo que han hecho te dirán que sí. • ¿Cuál es la situación actual en su servicio? La situación se ha normalizado bastante, seguimos manteniendo las precauciones que hay que mantener. A todos los pacientes que atendemos se les hace una PCR antes 17 de ser atendidos y tenemos más certeza. Sigue habiendo un equipo para los casos infección covid que pueda haber y hemos recuperado la actividad normal. Ahora más relajados, el personal está cansado pero más tranquilo. Nosotros echamos de menos que se recupere más la actividad de algunos servicios. Tenemos la sensación de que algunas consultas a las que queremos derivar a nuestros pacientes, en Atención Primaria en particular, no acaban de retomar su nivel habitual de consulta, se mantiene la no presencial, y hay ciertas limitaciones.


Servicio de Urgencias

“N

Dra. Laura Tomás López, jefa de Sección del Servicio de Neumología de la OSI Araba

EXPERIENCIAS

“Fue una gestión muy política y poco práctica para los que estábamos en el día a día de los pacientes. Nos tenían que haber consultado”

os sentimos un poco abandonados por Osakidetza, porque no contó con Neumología para poner en marcha esto, se centro mucho en cuál iba a ser el tratamiento médico que iba a poner a los pacientes y contó con los especialistas de Interna, de enfermedades infecciosas,… y no contó con nosotros.”. Siendo el sistema 18 respiratorio el blanco principal del coronavirus, la Dra. Laura Tomás, jefa de Sección del Servicio de Neumología de la OSI Araba y presidenta de la Sociedad Vasco-Navarra de Patología Respiratoria, lamenta además que su especialidad no haya tenido representación en el Comité Director de expertos que la consejería de Salud puso en marcha con el objeto de asesorarse sobre la gestión del virus. “Si no preguntas a quien va a estar directamente con el enfermo sobre cuáles son las ne-


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cesidades, no puedes gestionar ese área. Fue una gestión muy política y poco práctica para los que estábamos en el día a día de los pacientes. Nos tenían que haber consultado”. Pese a todo, el servicio de Neumología estuvo al pie del cañón desde el principio; de hecho tuvieron que atender a los primeros pacientes diagnosticados, tras el aislamiento del Servicio de Medicina Interna. “Vimos que el número de casos que ingresaban era exponencial cada día y que un porcentaje de ellos eran casos muy graves que ingresaban con una insuficiencia respiratoria y habían hecho un distres respiratorio en las siguientes 24-48h. Veíamos que esto iba a colapsar el sistema y teníamos que ofrecer algo al hospital para evitarlo”. Así fue como la primera semana de marzo apostaron por la creación de una Unidad de Cuidados Respira-

Servicio de Neumología

torios Intermedios. “A pesar de que todas las guías nacionales e internacionales decían que los sistemas no invasivos, como los sistemas de presión positiva, la ventilación mecánica no invasiva o la oxigenoterapia de alto flujo, no deberían usarse por el riesgo de aerosolización al ambiente del virus, nosotros vimos que lo teníamos que hacer siempre y cuando tuviésemos una unidad segura donde ponerla”. Así, plantearon blindar su planta con doble puerta, declarando “sucia” su área y haciendo que el personal trabajase con el EPI completo durante todo el turno, un equipo completo que había que ponerse al entrar en la unidad y quitárselo al salir. Con muy buenos resultados. “Evita las sedaciones, la intubación, los pacientes están conscientes y pueden comer, moverse… Hemos tenido 80 pacientes y solo el 30% tuvieron que ir a intensivos, ya con

una mortalidad muy alta”, comenta la Dra. Tomás. Una apuesta que desean mantener en el hospital. De hecho, se encuentran de obras para aumentar las habitaciones con presión negativa, pasando de las dos existentes a ocho, una de ellas destinada a la broncoscopia de pacientes Covid, una técnica con un índice de contagiosidad muy alto por lo que se está adaptando la zona. “La Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios evita la intubación y los pacientes están conscientes y pueden comer, moverse…”

En cuanto a las medidas de protección apunta: “Ha habido mucho desconcierto, falsa seguridad. Nosotros tuvimos claro que había que blindar las unidades pero no en todas las áreas tenían ese concepto. El no tener la conciencia de que todo el hospital es un área sucia y relajar-

se en determinadas zonas en cuanto a las medidas de batas, gorros y demás en zonas como puestos de control, por ejemplo”. En la actualidad, los esfuerzos del Servicio de Neumología se centran en preparar el hospital para tener un área más segura para lo que pueda venir, rescatar a esos pacientes crónicos que hubo que desatender durante esos meses por la demanda de 19 paciente Covid y revisar qué ha sido de estos últimos pacientes. Sobre el futuro, la Dra. Laura Tomás lanza un apunte optimista. “Nos da la sensación de que el virus ha perdido virulencia, que es un virus debilitado, aunque nadie sabe lo que pasará. Me parece una buena opción de la consejería de Salud adelantar la campaña de la gripe. Es mejor que nos pille preparados, porque no sabemos qué pasará si confluyen los dos virus”.


Servicio de Urgencias

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“Pienso en quienes me dijeron en febrero que me quitara la mascarilla, que no era necesario, que crearía alarma entre los pacientes y compañeras”

ntre los ecos de un naufragio, con resonancias de epitafio, no hay motivos para el optimismo. Tampoco para la desespe-

ración. Cuando se ven las cosas mordidas, como carne cruda sobre la mesa, ya no hay razones para perder el tiempo.

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EXPERIENCIAS

Artículo del Dr. Imanol Alcalde Ciganda, Servicio de Urgencias del HUA

Hemos ido a esta guerra como los pilotos de Ataque Especial, con un hachimaki. Sin titubear, sin rodeos, todos llegamos a vivir la ley de La Peste, más eficaz cuanto más mediocre, redactada con palabras de serenidad hueca entre declaraciones amargas de indignación neutralizadas por el miedo. Ante la tempestad, guardad la calma, aún sin rumbo, sin saber dónde abarloar. En La Peste, al principio, no faltaba la memoria de los seres queridos, faltaba imaginación. Luego, también, nos faltará la memoria. No caigamos en redes de sol, caña y

croqueta, en el infierno de Le Guin, en su ciclo de Ekumene, en el planeta Aka, donde rige la dictadura del estado-empresa, síntesis de neoliberalismo y polpotismo, que trataría siempre de destruir todas las historias. Dharma sin Karma, capitalismo enfermo de futurofobia, en nombre de un eterno presente para producir, que impide la transmisión de la memoria.

meraria…la mía. No sólo están los testimonios. Hay que reconquistar la vida. Con respeto.

“Si no se declaran los accidentes de trabajo y no se investigan sus causas, no se identifican en las evaluaciones de riesgos y no se adoptarán medidas preventivas eficientes”

Debemos aprender a saber cometer errores. Pienso en los embriones de los actos, en la fatalidad y el descaro, en los portavoces de La Verdad: cualquiera, todos, ninguno… En quienes me dijeron, embrutecidos de verdades, a finales de febrero, que me quitara la mascarilla, que no pasaba nada, que no era necesario, que lo único que iba a conseguir era sembrar alarma social entre pacientes y compañeras. Imprudencia te-

guien le pasara algo, no será a mí. Ensordece cruelmente la palabra locura esgrimida como un arma al intentar aleccionar a mis compañeras/ os en la limpieza de teclados, como delegado de prevención del SME. Hay que ser paciente…para entenderlo bien. Los iluminados quedan expuestos, se saben ridículos, se defienden a dentelladas. Si no se declaran los accidentes de trabajo, si no se declaran las enfermedades profesionales, no se investigan sus causas, no se reconocen los riesgos en el puesto de trabajo, no se identifican en las evaluaciones de riesgos, no se adoptarán medidas preventivas eficientes mantenidas en el tiempo y, entonces, los trabajadores seguirán enfermando y accidentando.

Agradezco mucho más la honestidad desnuda de quien afirma o niega sin esconder mucho. Sé que no soportaré estrategias basadas en “esto no puede estar pasando”, en que la propiedad de la culpa siempre es de otro o en que, si a al-

Con todo esto, hay quien acabará aplicando directrices Bolkestein para la telemedicina. Tiempo al tiempo. Pensar duele.


COVID-19

Dra. Marisol Pérez de San Roman López de Munain, Médica de Familia en el Centro de Salud Aranbizkarra l

Atención Primaria

“Echaba de menos abrazar a mi familia y, por otra parte, me alegraba de no tener que quedarme en casa y de poder colaborar” Cómo recuerda esas semanas previas al estado de alarma? ¿Qué sensaciones tenía? A finales de febrero e inicios de marzo estábamos en los centros de salud sorprendidos por la aparición de frecuentes cuadros respiratorios y neumonías en pacientes ambulatorios, muchos de ellos previamente sanos. No obstante a muchos el coronavirus aún nos parecía algo lejano, que les pasaba a otros. No sospechamos lo que estaba llegando.

• Estuvo en primera línea, en uno de los tres centros de salud específicos para la Covid. Coincidió con el inicio de la pandemia. En ese momento ya sabíamos lo que era, pero nos faltaba organización, porque estábamos empezando algo nuevo, y nos faltaba también material de protección. Y nos sorprendía la importante proporción de casos graves (neumonías bilaterales en la mayoría de las radiografías que solicitábamos, cuadros de disnea e hipoxemia que derivábamos direc-

tamente al hospital), así como que hubiera familias con varios de sus miembros muy afectados. El sistema de ambulancias para traslados al hospital estaba saturado por el número de casos y por los plazos de limpieza de las mismas tras cada uso. Y los teléfonos de información a la ciudadanía estaban totalmente colapsados.

querían…. Nuestros MIR, que habían vuelto a los centros y además seguían con las guardias hospitalarias, tuvieron que asumir cargas de trabajo y responsabilidades importantes ante esta situación tan crítica. Estoy segura de que esta experiencia, tan dura en muchos momentos, les ha hecho madurar más rápido.

• ¿Cuál es el periodo más crítico que recuerda? A pesar del esfuerzo de los profesionales de primaria para intentar atender telefónicamente a todos, del trabajo creciente en los centros COVID, de la incertidumbre por la falta de seguridad en el manejo de esta patología, con protocolos nuevos casi a diario, del miedo a contagiarnos y/o contagiar a los nuestros… Para mí lo más duro era saber que las urgencias hospitalarias se colapsaban cada día un poco más, el hospital se saturaba y buscaba salidas de emergencia, la UCI entraba en zona roja, y los tanatorios estaban saturados. Y la bola no paraba de crecer. Y atendíamos a pacientes, ellos también enfermos, cuyo padre, o esposa, o hermano…habían fallecido solos, y ni siquiera los podían despedir como

• También estuvo atendiendo a los pacientes en el Hotel Lakua. ¿Qué valoración hace de esta experiencia? Yo llegué al hotel cuando ya todo 21 estaba muy bien organizado por mis compañeros, y con un flujo de pacientes a la baja. Teníamos ya entonces suficiente material de protección, circuitos para solicitud de pruebas y los pacientes estaban en general en situación clínica estable y agradecidos por la posibilidad de hacer allí el aislamiento. Con lo que la experiencia fue buena. Los R0 además hicieron allí un buen trabajo, nos facilitaban mucho la labor. • ¿Qué es lo que más echó en falta en los momentos más complicados? Echaba de menos abrazar con libertad a mis hijas y a mi marido, visitar a mi madre. Como todos, supongo. Por


EXPERIENCIAS

Atención Primaria otra parte me alegraba de no tener que quedarme en casa, y de poder colaborar. Es contradictorio, pero es así. • El papel de Atención Primaria se ha confirmado fundamental en el tratamiento de esta pandemia. A nivel País Vasco, ¿se supo identificar a tiempo su importancia en la gestión de esta pandemia? He leído que se nos compara con la parte oculta del iceberg. Somos los que estamos sumergidos, se suele ver normalmente solo el 20% que flota sobre el agua. Pero si nosotros nos deshacemos la parte flotante se 22 va hundiendo. En atención primaria tenemos el privilegio de la longitudinalidad en la atención de nuestros pacientes, lo que es una ventaja indudable a la hora de valorarlos. Lamentablemente esto se pierde de vista muy a menudo cuando se organizan nuevos servicios, rutas asistenciales, protocolos…Se diseñan desde el punto de vista de la atención hospitalaria, que es más puntual. En la pandemia, supongo que por eficiencia, se nos colocó en los teléfonos, pero también se nos ha desplazado a los centros específicos, ha habido compañeros de baja por el virus o en aislamiento, …¡y se nos ha llegado a acusar incluso en algún medio de

“escondernos” en los centros de salud detrás de los teléfonos!. Pero esos teléfonos han sido una importante herramienta para filtrar los casos en lo peor de la pandemia, y también lo fueron, están siendo y probablemente lo serán después para acompañar, aliviar, orientar a muchas personas que han pasado el virus y aún tienen síntomas, o que han pasado mucho miedo, o que están muy tristes porque han perdido a alguien querido…y también hemos descubierto que sirve para filtrar muchos motivos de consulta banales, que pueden resolverse parcial o totalmente sin una consulta presencial.

crónicas, a los frecuentes síntomas y malestares mal definidos tan característicos de nuestro día a día previo, acompañados de las ansiedades y miedos generados por el virus, sus secuelas físicas de dolor, disnea, pérdida de funcionalidad, los duelos, los problemas de convivencia en las casas agudizados por el confinamiento, las consecuencias socioeconómicas de la crisis en la vida de las personas, el “tsunami” sufrido en las residencias de mayores. Y la progresiva puesta en marcha de las consultas del segundo nivel asistencial tras meses relacionándonos con interconsultas no presenciales…. Todo mezclado.

“Pediría que los políticos se abstengan de hacer promesas imposibles de cumplir y se centren en la realidad. Y que dejen de decir que somos el eje del sistema e inviertan un poco más y mejor en Atención Primaria”

• Ahora que la situación está más relajada, ¿cómo ve el futuro? Quisiera pensar que todos hemos aprendido de esta experiencia también algo positivo: que se puede trabajar de muchas formas, y que a lo mejor parte de lo que nos satura es lo que A. Montaño y otros llaman la “ilusión terapéutica” de expectativas desmesuradas por parte de la población, que generan gran presión y en ocasiones despilfarros del sistema: porque la muerte, la enfermedad y el dolor son parte de la vida; la medicina tiene poderes limitados sobre todo en los síntomas y síndromes más frecuentes y en los problemas sociales, y

• ¿En qué situación se encuentran ahora las consultas de AP? Máxime cuando llevaban tiempo, antes de la pandemia, llamando la atención sobre sus condiciones, agendas,… Las consultas están “raras”. Todos las consultas que habían desaparecido durante la época de confinamiento van poco a poco reapareciendo: desde el control de las patologías

además tiene riesgos. Porque pacientes y profesionales estamos juntos en esto, pero no pueden “dejarnos” sus problemas en nuestras manos, y deberíamos podernos permitir reconocer nuestras limitaciones. Yo pediría que los políticos se abstengan de hacer promesas imposibles de cumplir y se centren en la realidad. Y, ya puestos, que dejen de decir que somos el eje del sistema y bla-bla-bla, sólo que inviertan un poco más (y mejor) en atención primaria. • ¿Cuál será o debería ser el papel de la Atención Primaria? Debemos seguir buscando entre todos las mejores formas de convivir con esta nueva enfermedad, porque parece que no vamos a volver a lo de antes. Debemos poder diagnosticar pronto los nuevos casos, garantizar un adecuado estudio de contactos y una correcta aplicación de las medidas de aislamiento. Aprovechemos la oportunidad para cambiar lo que no nos gusta. ¿Qué tal si pasamos del “coger cita” al “solicitar consulta”, aprovechando el sistema de las llamadas telefónicas previas, u otros formas implicando a todos los profesionales de atención primaria, y garantizando la accesibilidad para lo realmente importante?


COVID-19

Dr. Fernando López de Lacalle Ortiz de Landaluce, especialista de MFyC en el Centro de Salud Campezo

Atención Primaria Rural

“Mi teléfono ha estado siempre abierto para la atención o para solventar las dudas, se ha convertido en un elemento indispensable”

“L

a zona rural tiene la desventaja del aislamiento, pero en este caso ha sido una ventaja para nosotros”. Eso sí, en Santa Cruz de Campezo los inicios de la pandemia entraron a la localidad por uno de los blancos más vulnerables, según relata el Dr. Fernando López de Lacalle. “Nada más empezar en el pueblo tuvimos dos pacientes en la vivienda comunitaria (residencia de gente válida) que fueron a urgencias por caídas y allí les hicieron la prueba y dieron positivo. De hecho, fallecieron a los pocos dias… Hubo más casos entre residentes y trabajadoras (la mitad resultaron contagiadas) pero lo pasaron en aislamiento sin problemas”. Con la irrupción de la pandemia, la atención a los pacientes en el

centro de salud cambió radicalmente. “El teléfono se ha convertido en el elemento fundamental e indispensable. No hacíamos nada presencial, incluso nos mandaban fotos en algunos casos para algunas incidencias en la piel, por ejemplo. Es el arma con la que hemos

trabajado, con los impedimentos que tiene por otro lado. No es lo mismo interpretar algo sin verlo, sin la atención directa”. Sobre todo lo que más atendían eran consultas de las trabajadoras o pacientes de la vivienda comunitaria. “Mi teléfono ha estado siempre abierto para

la atención o para solventar las dudas”. Una vez superado ese periodo, la atención primaria rural va recuperando poco a poco la normalidad. “La rural tiene menos presión asistencial que la urbana, menos demanda. Pero todavía mucha gestión se hace por teléfono. Ahora ya estamos empezando con el control 23 del paciente crónico que hasta ahora estaba parado salvo lo urgente que no podía dejarse”. Sobre el futuro, el López de Lacalle lo tiene claro. “Ahora está más o menos controlado, pero yo no estoy tranquilo. Si no ponemos todas las medidas posibles de prevención, una recaída puede ser complicada. Mejor vivir día a día y no pensar en el otoño”


Residentes

L 24

EXPERIENCIAS

Dra. Anais Cruz Núñez, residente de MFyC

“Los residentes nos fuimos adaptando a los cambios para contribuir a que el sistema funcionara”

os residentes se han convertido en un elemento fundamental en la lucha contra la pandemia, asumiendo en muchos casos funciones más allá de su programa formativo y colaborando todo aquello que estuviese en su mano. La Dra. Anais Cruz era R3 de Medicina Familiar y Comunitaria cuando irrumpieron los primeros casos en la provincia. “Nos fuimos adaptando a los cambios. Estábamos todavía haciendo las rotaciones como marca el plan formativo de nuestra residencia, veíamos que los servicios se iban adaptando a la nueva realidad, se transformaban las consultas,… Una de las medidas adoptadas fue que todos los residentes, de forma escalonada tuvimos que volver a nuestros destinos de referencia y contribuir a que el sistema funcionara”. El colectivo de residentes también se fue organizando por su cuenta

para colaborar dentro de sus posibilidades. “Acordamos entre nosotros asumir más guardias de la Urgencia y que cada día uno de

los compañeros pudiera reforzar la asistencia de las guardias de plantas, dado el volumen de trabajo que había en ese momento”. “Empezamos a trabajar de forma más autónoma que como habíamos trabajado hasta ese momento”

Y es que la pandemia supuso un cambio en todos los sentidos, tal y como nos cuenta la Dra. Cruz. “Empezamos a trabajar de forma más autónoma que como habíamos trabajado hasta ese momento, pero nuestra jefa de estudios se preocupó mucho de garantizar que tuviéramos una supervisión como nos corresponde. Durante las semanas que nuestros tutores tuvieron que rotar en los equipo Covid, los residentes asumimos la carga de esas agendas, siempre teniendo la opción de consultar al resto de médicos del centro en caso de duda, aunque con pequeñas adap-

taciones; en mi caso no tenía que hacer las visitas a domicilio ni me citaban urgentes”. El volumen de trabajo era tal que las autoridades de plantearon inicialmente alargar los contratos de los residentes de último año más allá de su periodo formativo, que finalizaba en mayo, pero sin reconocer las labores de adjunto que ya estaban realizando. Para la Dra. Cruz, “era una falta de reconocimiento al trabajo que estaban realizando. A lo que se añaden las limitaciones legales, ya que como residentes tienen que tener esa supervisión de la que hablamos. Nos parecía que tenía más sentido haber acortado la residencia, dar la titulación antes y que pudieran volar solos y cubrir los puestos que estaban cubriendo, con el reconocimiento y capacidad autónoma. Afortunadamente esta medida se echó para atrás”.


COVID-19

Dr. Asier López de Arcaute Trincado, JUAP CS Zaballa Centro Penitenciario de Álava

“La sanidad penitenciaria es muy importante para la salud pública y es la gran olvidada por la Administración Central”

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estionar una pandemia como la generada por el coronavirus en el interior de un centro penitenciaria es una labor que no se plantea sencilla a priori. El objetivo es claro: evitar que entre el virus. Y, salvo alguna excepción, de momento lo han conseguido. “Dadas las características de nuestro centro, con 650 internos, vivimos con preocupación la detección de los primeros casos en Álava. No sabíamos cómo podía afectar si se extendía entre la población penitenciaria donde hay muchos pacientes inmunodeprimidos”. Así narra su experiencia el Dr. Asier López de Arcaute Trincado, JUAP del CS Zaballa Centro Penitenciario de Álava. “A nivel de afectados ha sido tranquilo porque hemos tenido un único interno con coronavirus. Pero lo hemos vivido con mucha intranquilidad, por mantener herméti-

ca la prisión, lo que nos han llevado a tomar muchas decisiones duras para los internos, a los que hay que felicitar porque en su mayoría se lo han tomado muy bien pese a tener que haber retrasado permisos, vis a vis, suspender la escuela o las actividades deportivas… También hemos tenido que hacer aislamientos sanitarios a los internos si habían salido al hospital, por ejemplo. Eso sí, hemos estado encima de ellos, íbamos a verlos y hacérselo lo más fácil posible dentro de lo complicado que ha sido”. “Lo hemos vivido con mucha intranquilidad, por mantener hermética la prisión, lo que nos han llevado a tomar muchas decisiones duras para los internos”

La normalidad en las consultas si han vuelto, no así la del centro penitenciario, ya que siguen los aislamientos sanitarios y algunas restricciones que poco a poco se van

suavizando. El Dr. López de Arcaute agradece la coordinación que ha existido entre el equipo de Osakidetza y de Instituciones penitenciarias y se enorgullece de su equipo porque “todo el mundo ha dado todo, han arrimado el hombro y han dado el 200%”.

Sanidad penitenciaria

Eso sí, lanza un mensaje claro: “la sanidad penitenciaria es la gran olvidada por la Administración Central, es muy importante para la salud pública. Con más de 600 internos que tenemos, si entra el virus y se contagian 200 y de éstos una cuarta parte agrava su situación, se colapsa la UCI”.

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Médicos voluntarios

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Nada más decretarse el estado de alarma, El Colegio de Médicos de Araba/ Álava puso en marcha un registro de médicos y médicas que voluntariamente estuviesen dispuestos a colaborar en la atención sanitaria ante el aumento de la carga asistencial que soportaba la provincia. El objetivo era facilitar al Departamento de Salud del Gobierno Vasco los datos de profesionales voluntarios para que pudieran ser requeridos si fuese necesario para apoyar a las unidades en las que pudieran aportar su experiencia y trabajo. Casi un centenar de profesionales de apuntaron a ese registro y muchos materializaron su colaboración desarrollando una labor fundamental en la lucha contra la Covid.

EXPERIENCIAS Dr. Jesus Ortueta Martínez de Arbulo, médico jubilado

“Es importante que la población vea la vulnerabilidad del colectivo sanitario y la necesidad de tenerlo protegidos”

E

l Dr. Jesús Ortueta trabajó hasta 2016 en el Centro de Salud Aranbizkarra aunque su carrera profesional ha transcurrido principalmente en la Administración, sobre todo en Salud Pública. Y no dudó ni en segundo en colaborar con la causa. Pese a estar dispuesto a ponerse de nuevo la bata y pasar consulta, Osakidetza destinó a los médicos jubilados a la atención telemática para evitar riesgos. En su

caso, en la aplicación móvil COVID-19.eus, que el Gobierno vasco puso en marcha a finales de marzo como refuerzo del trabajo de prevención, seguimiento e identificación de los casos en la Comunidad. Permite hacer mapas de riesgo en función de la magnitud de los infectados por ese diagnóstico precoz y gestiona el consejo sanitario. “Hemos tenido un papel complicado porque no era fácil hacer entender al ciudadano que no podían hacerle la prueba de detección”

“En ese momento no había recursos para hacer un diagnóstico con un PCR como se hace ahora. Nuestra labor era asesorar a estas personas con síntomas y darles las medidas preventivas como higiene personal, distancia social, mascarilla… En ese primer momento no había mascarillas en el mercado así que había que ser muy cauteloso en recomendar acciones o conductas que luego

no son realizables, porque generaría angustia al no poder acceder a ellas”, relata el Dr. Ortueta. ”Un papel complicado porque no era fácil hacer entender al ciudadano que no podían hacerle la prueba” En la actualidad, la afluencia de consultas ha descendido a algo residual, apenas con dos o tres al día, cuando desde mediados de marzo atendían 40 o 50 diarias. Una labor que los médicos jubilados han realizado de forma voluntaria y no retribuida aunque sin faltar su correspondiente seguro de Responsabilidad Civil Profesional, que el Colegio de Médicos de Álava les facilitó de forma gratuita. “Al trabajo sanitario no se le ha dado el valor que socialmente merece, ni siquiera económico. Es importante que la población vea la vulnerabilidad del colectivo sanitario y la necesidad de tenerlo protegidos”, sentencia el Dr Ortueta.


COVID-19 Dra. Ainara Martín Ugarte, R0

“Los primeros días eran de incertidumbre pero nos mentalizamos y ha estado bastante bien organizado”

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a pandemia sorprendió a los recién examinados del MIR 2020 a la espera de conocer las listas definitivas, por lo que la incertidumbre se adueñó de los más de 35.000 aspirantes a una de las casi 8.000 plazas disponibles. En esa situación se encontraba la Dra. Ainara Martín cuando recibió un correo de Osakidetza preguntando por su disponibilidad para prestar servicio en Atención Primaria u Hospitalaria en cualquiera de los tres territorios vascos y en dos días, formación para la colocación de EPIs incluida, ya se encontraba en el Gran Hotel Lakua, que acogió a 187 pacientes con sintomatología leve pero con necesidad de aislamiento, atendidos por 46 profesionales de Osakidetza. “Hubo buena organización pero

nunca se había hecho un hospital medicalizado y había que ir sobre la marcha. Había un equipo de dos persona por planta, que nos encargábamos de lo que necesitasen los pacientes si contactaban con nosotros, les hacíamos los controles, toma de constantes… Cuando venían del Servicio de Hospitalización a Domicilio estábamos de apoyo si necesitaban algo. Atendíamos 30-36 pacientes de media a la semana”, relata. “De cara al futuro, habrá que amoldarse y ser lo más productivos que podamos”

Una vez que el reciento hotelero cerró sus puertas, la Dra. Martín empezó a prestar servicio en el Centro de Salud Habana haciendo el estudio de seroprevalencia, has-

ta finales de junio cuando terminó su contrato de tres meses. Sobre su experiencia, resume que “los primeros días eran de incertidumbre pero nos mentalizamos y ha estado bastante bien organi-

Médicos voluntarios

zado. Ha sido complicado pero dentro de lo que cabe no nos ha tocado la zona más dura”. Una capacidad de adaptación de la que hace gala también para el futuro, aún pendiente debido al retraso en el proceso de elección de plazas MIR que finalmente tiene lugar de forma presencial del 13 al 31 de julio. “Hemos vivido los continuos cambios en el siste- 27 ma de elección de plaza con impotencia y agobio, porque no puedes hacer planes. Reconozco que trabajar estos tres meses ha hecho esta situación más llevadera. Me encantaría optar a una especialidad oncológica en Pais Vasco pero no descarto irme fuera. De cara al futuro, habrá que amoldarse y ser lo más productivos que podamos”.


Medicina privada Sanidad pública y privada han trabajado de la mano durante la pandemia. El Real Decreto-ley 8/2020, de 17 de marzo de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente al impacto económico y social del COVID-19, suspendía la actividad de los centros sanitarios privados no hospitalarios, limitando su actividad a la atención médica de procesos agudos, urgentes o no demorables con el fin de evitar que las consultas se convirtieran en foco de contagio.

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Una situación que ha provocado una enorme repercusión en el ámbito económico de los médicos autónomos de ejercicio privado. Mientras sus ingresos casi desaparecen por la casi nula prestación de servicios profesionales a los pacientes, se mantienen todos sus gastos ordinarios: local o alquiler de consulta, cuota de autónomos o asimilada, leasing de aparataje, personal a su cargo (enfermería, auxiliares, limpieza…). Por este motivo, la Vocalía de Medicina Privada del ICOMA se ha volcado en ofrece la mayor cantidad de información posible a este colectivo para dar a conocer las ayudas existentes, normativas a cumplir y plazos de reapertura. Conocemos la experiencia y el impacto que ha supuesto la pandemia en el sector privado de la mano del Dr. Mikel Sánchez Álvarez

EXPERIENCIAS

Artículo firmado por Mikel Sánchez Álvarez

Impacto de la pandemia de Covid-19 en la actividad la Unidad de Cirugía Artroscópica

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arece que esto pasó hace tiempo y resulta algo extraño recordar el inicio de la pandemia. La preocupación en el Hospital VITHAS San José y en concreto en nuestra Unidad de Cirugía Artroscópica (UCA) comenzó durante la segunda quincena del mes de febrero cuando vimos el cariz que tomaban los acontecimientos en Italia. Durante la última semana de febrero comenzó la explosión de contagios en Vitoria y en la primera semana de marzo, nos adelantamos a los acontecimientos y en UCA, comenzamos a tomar precauciones con los pacientes durante nuestra actividad asistencial. El viernes 12 nos reunimos con representantes de Osakidetza para valorar las instalaciones de nuestro Hospital y planificar y coordinar la actividad asistencial en previsión del empeoramiento de la situación sanitaria en Vitoria. Ese mismo día ya paramos toda actividad asistencial privada y el Hospital

VITHAS San Jose fue puesto a disposición de la sanidad pública siendo declarado como hospital limpio donde serían derivados los casos urgentes no COVID-19, pero asistidos por los Especialistas de la Sanidad Pública. Fue una situación nueva y desconcertante para todos nosotros porque era la primera vez de mi vida en que teníamos que parar toda nuestra actividad asistencial traumatológica. Tuvimos una gran preocupación por el futuro de nuestra empresa y de sus trabajadores. Éramos 41 trabajadores, y afortunadamente seguimos siendo, y no sabíamos cuánto iba a durar esta situación de cierre de actividad. Dentro de UCA hay tres secciones con actividad diferentes. Una parte asistencial de Cirugía Ortopédica (UCA), una parte de Rehabilitación (UFA) y la parte de Investigación (UTBA). Durante los primeros días nos turnamos los Medicos y el resto de personal asisten-

cial para atender a los pacientes intervenidos los días anteriores, pero enseguida paró toda la actividad. La sección de Investigación siguió trabajando y conseguimos durante el confinamiento finalizar diferentes artículos científicos, así como preparar un ensayo clínico para uti-


COVID-19

lizar el plasma rico en factores de crecimiento de donantes jóvenes, nebulizándolo para intentar paliar las consecuencias respiratorias de la infección por el SARS-COV2. Finalmente y viendo que el problema se prolongaba, tuvimos que solicitar un ERTE parcial y disponer de las reservas económicas previstas para inversiones del siguiente año. Durante el confinamiento tuvimos un desconcierto importante. Se derivaron muy pocos pacientes a nuestro Hospital desde el HUA, a pesar de los problemas que tenían allí. La información que teníamos era muy escasa, principalmente a finales de abril cuando nuestros pacientes, ya nerviosos, solicitaban nuestra asistencia y no podíamos atenderles. Todo eran consultas telefónicas desde casa a las que todavía nadie estaba acostumbrado. Los días previos a retomar nuestra actividad, tuvimos que adecuar nuestras instalaciones deprisa y corriendo para cumplir los requisitos imprescindibles para poder atender a nuestros pacientes con

Medicina privada

las mayores garantías de seguridad y disminuir los riesgos de contagios. Tuvimos que hacer acopio de todo el material de protección necesario y no fue, ni sigue siendo, una tarea fácil. Esto conllevó un gasto económico importante que ni las instituciones públicas ni las compañías de aseguramiento privado han tenido en cuenta. “Todavía estamos a tiempo de evitar males futuros y organizar mejor, tanto la Sanidad Pública como la Privada”

Francamente hemos echado de menos alguna coordinación, aunque fuese mínima, con los responsables de la Sanidad Pública. En estos momentos de alarma sanitaria, no deberían haber existido diferencias entre el sector público y privado. Los pacientes enfermaban y algunos morían sin existir diferencias en su procedencia social ni su pertenencia a un sector u otro. La vuelta a nuestra actividad asistencial no está siendo fácil, desde un

punto de vista asistencial acostumbrarnos a una nueva manera, algo más triste, de ejercer la Medicina, sin vernos las caras ni saludarnos. Es complicado conseguir equipos de protección por los cupos de venta que existen en las casas comerciales. Sería deseable que los responsables de la organización sanitaria organizaran este aspecto de la actividad médica, controlando su venta y distribución, tanto en volumen como en precios. Por otro lado el cumplimiento de todos los requisitos necesarios para preservar la seguridad de los pacientes hace que el enlentecimiento asistencial sea muy importante. Prevemos que la capacidad asistencial, en cuanto al número de pacientes que podremos ver en el año 2020, disminuirá en un 30% y esta disminución seguirá durante el próximo año. Por todo ello las perspectivas económicas en la Sanidad Privada son algo oscuras. No sabemos cómo va a evolucionar la pandemia en los próximos meses, ni cuándo tendremos una vacuna y ni siquiera si será eficaz. Como

siempre en época de crisis, siempre hay alguien que puede salir beneficiado. En esta situación de crisis sanitaria, el beneficio podrá ser para las compañías de aseguramiento privado. Sus gastos bajarán de forma muy importante por el parón asistencial durante el confinamiento y por la imposibilidad de retomar el ritmo asistencial previo a la pandemia. Creo que debería haber un gran acuerdo entre todas las partes implicadas en el tratamiento de los enfermos. Se deberían reunir el 29 ente público, las compañías de aseguramiento privado, los hospitales privados y responsables de grupos médicos para llegar a un consenso y paliar el gran perjuicio que esta situación ha provocado. Creo que no es momento de criticar las actuaciones de unos y otros durante los momentos críticos de esta pandemia, ya que si pudiésemos volver al mes de enero, todos nosotros haríamos las cosas de una manera diferente. Todavía estamos a tiempo de evitar males futuros y organizar mejor, tanto la Sanidad Pública como la Privada.


EXPERIENCIAS

Salud Pública

Dr. Enrique Peiró Callizo, Presidente de la Sociedad Norte de Medicina Preventiva y Salud Pública (SOCINORTE)

“A pesar de los esfuerzos para estar preparados, los escenarios nunca son idénticos, no todo se puede tener contemplado”

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uando el coronavirus da sus primeros coletazos más allá de nuestras fronteras, los primeros en reparar en las señales son los responsables de Salud Pública. “A primeros de año estábamos ante un situación potencialmente importante pero nadie se podía imaginar la repercusión en los próximos meses, y sobre todo la tragedia humana”. Dr. Enrique Peiró Callizo es presidente de la Sociedad Norte de Medicina Preventiva y Salud Pública (SOCINORTE), y coordinador de Programas de Salud Pública y de Seguridad del Paciente. También es presidente del Consejo Asesor de Enfermedades Emergentes del País Vasco y recuerda cómo este órgano se reunió a finales de enero para trasladar el mensaje de que había que estar muy vigilantes y preparados.

documentos y actuaciones sobre enfermedades infeccionas emergentes, ocasionadas por microorganismos con un enfoque genérico, no específicamente orientadas a un coronavirus. Y se ponen en marcha. “El protocolo de vigilancia epidemiológica es responsabilidad de los servicios de Vigilancia Epidemiológica, que dependen de la Direccion de Salud Pública. Un protocolo define claramente el caso, fija los criterios para reconocer lo antes posible y con precisión posibles casos y así detener la cadena de transmisión. Para definir un caso hay que combinar criterios epidemiológicos y criterios clínicos”.

Precisamente este Consejo había sido el encargado de elaborar en años anteriores diversos protocolos,

Para el Dr. Peiró, la parte más dura de la pandemia está en la tragedia humana... ya que la mortalidad ha

“Lo más trágico es el conocimiento de que muchos han marchado sin estar acompañados como a todos nos gustaría”

sido muy elevada y ha afectado a nuestros mayores, muchos residentes en instituciones. “Lo más trágico es el conocimiento de que muchos han marchado sin estar acompañados como a todos nos gustaría”.

Alaba la labor de los médicos asistenciales que “han tenido un comportamiento heroico” así como el de “otros profesionales sanitarios que nos dedicamos a otras facetas ya que han sido tiempos complicados para todos”. “Ojalá esa gratitud hacia los sanitarios se mantenga en el tiempo y sea algo consolidado, auténtico y mantenido, porque el esfuerzo y las condiciones han sido muy difíciles”. Y recuerda: “Lo más complicado es el de la reflexión posterior. No tanto el momento en el que se está volcando el esfuerzo sino después cuando se hace un análisis más propio del campo de lo humano.” Sobre el futuro y lo que nos espero en las próximas semanas, el Dr. Peiró advierte: “a pesar de los esfuerzos que se puedan realizar para estar preparados, los escenarios nunca son idénticos, no todo se pude tener contemplado”.


Dra. Isabel Guerra, jefa de Unidad de Anatomía Patológica OSI Araba

“Nosotros estábamos dispuestos a hacer autopsias desde el primer momento porque estábamos preparados para el riesgo”

entrevista

Txagorritxu es el único hospital vasco con sala de bioseguridad nivel 3 para hacer autopsias coronavirus

E

l Hospital Universitario Araba es uno de los diez centros a nivel nacional preparados para realizar autopsias a los fallecidos por Covid-19 y se encuentra en Txagorritxu. Es la única sala de bioseguridad de nivel tres disponible en el País Vasco, dotada con unos sistemas de ventilación y desinfección muy estrictos. Desde mayo han realizado tres disecciones con algunas conclusiones muy interesantes. Profundizamos en los detalles de esta sala con su responsable, la Dra. Isabel Guerra, jefa de Unidad de Anatomía Patológica de la OSI Araba ¿Cómo recuerda las primeras semanas tras detectarse los primeros casos en Álava? Lo vivimos con mucho desconcierto porque veíamos que las camas del hospital se estaban transformando en camas Covid, desaparecían

los ingresos por otras patologías. Nuestro servicio no está en contacto directo con el paciente Covid así que empezamos a dejar de tener muestras de quirófano porque se dejaron de hacer cirugías. Empezamos a pensar en el teletrabajo para disminuir el riesgo al estar menos en contacto, así que se suministró un microscopio y acceso a los programas del hospital a algunos patólogos y citotécnicos. Seguimos trabajando, con menos trabajo pero estuvimos allí todo el tiempo. ¿Cómo vivió esa etapa a nivel organizativo y a nivel profesional? Cuando dijeron que era una pandemia lo primero fue buscar mascarillas, que escaseaban y guardar bajo llave nuestros EPIs. Nosotros tenemos nuestro propio equipamiento porque hacemos autopsias y lo teníamos muy bien guardado porque nos lo quitaban de otros servicios. Yo repartí una mascarilla a los 40 integrantes del Anatomía Patológica. Los patólogos trabajamos muy cerca entre nosotros porque mira-

mos al microscopio de doble cabezal y también muy estrechamente con los técnicos. Yo insistí mucho

en que todo el mundo se pusiese la mascarilla aunque en ese momento las indicaciones no lo marcaban,

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entrevista pero así no hemos tenido ningún contagio. Ha sido un éxito en ese sentido. Txagorritxu es el único hospital vasco con sala de bioseguridad nivel 3 para hacer autopsias coronavirus En Txagorritxu y Santiago siempre ha habido mucha tradición de hacer autopsias. Aquí hemos mantenido un alto nivel de autopsias mientras que en otros hospitales ha ido bajando. En 97-98, con la crisis de las vacas locas, hubo que buscar un centro en el País Vasco que qui32 siera hacer las autopsias, necesarias para diagnosticar las enfermedades por priones. El Dr. Bautista, jefe de servicio en ese momento, nos preguntó si queríamos y yo que estaba al frente de autopsias le dije que sí. Fue en ese momento cuando se montó en Txagorritxu una sala de bioseguridad nivel 3, con ayuda de Salud Pública. ¿Qué características tienen que cumplir un laboratorio y una sala de autopsias como los que dirige? El laboratoio reúne unas medidas de bioseguridad estándar para muestras quirúrgicas. La sala de autopsias cuenta con ventilación

forzada con filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air). El aire tiene una entrada dirigida a la sala y una salida independiente, con una renovación del aire de entre 20 y 30 ventilaciones de toda la sala por hora. Tiene además una filtración de las partículas y no vuelven a la circulación. La sala también tiene puertas estancas, para que en ningún momento salga aire fuera; doble puerta; mesas de autopsias con una ventilación especial, campanas de bioseguridad en la sala, etc.

Durante las primeras semanas de la pandemia, se desaconsejaba la realización de autopsias por el riesgo de contagio. En Araba hubo que esperar hasta el 4 de mayo para realizar la primera. Nosotros estábamos dispuestos a hacer autopsias desde el primer momento porque estábamos preparados para no tener riesgo. Pero no íbamos a contravenir las órdenes del Ministerio de Sanidad, aconsejado por la Sociedad Española de Anatomía Patológica (SEAP) que lo desaconsejó al ver que en otros

países no se hacían. Cuando empezaron a hacer estudios postmortem con aguja en China y autopsias abiertas en Italia, la SEAP se planteó la posibilidad de estudiar pacientes Covid-19, al ser un agente entonces considerado de nivel de bioseguridad 2, y más tarde de nivel 3, no de nivel 4. Fue entonces cuando convocaron a las diez salas de seguridad 3 en España y nos propusieron hacer un estudio piloto de autopsias Covid a nivel nacional. “Tenemos autopsias de pacientes que fallecieron en enero y febrero con una patología muy semejante a la que tienen los pacientes Covid. Necesitamos saber si algunos de esos casos eran por el virus. Aún no tenemos evidencia”

¿Se trata de ver por qué a unos pacientes les afecta de forma tan agresiva y a otros no? Probablemente sea una cuestión de disposición genética a reaccionar de forma exagerada ante un virus. No todos reaccionamos igual ante un virus. Pero este ha sido un gran desconocido para nuestro organismo, no tenemos una inmunidad establecida ni una manera de combatirlo. Hay personas con una hiperreactividad que le produce


entrevista una tormenta de citoquinas que origina lesiones en el organismo. A través de las autopsias queremos ver por qué la enfermad se perpetúa en los pacientes que se ponen muy enfermos. Cuando empieza la enfermedad se produce el daño alveolar difuso. Hay pacientes en que ese daño remite, mejoran y se van a casa. Pero hay otros en que ese daño mejora pero al cabo de unos días vuelve a empeorar. Al principio se pensaba que era una reinfección del virus, pero hoy se sabe que es una reacción contra el tejido pulmonar. Todos estos pacientes tienen daño alveolar difuso o distres respiratorio, primero en estadio exudativo y pasa a un estadio proliferativo, que es el estadio más complicado, y el pulmón se hace más consistente, más firme, con menos capacidad de ventilación. En algunos casos se le añade neumonía organizada de tipo aguda fibrinoide y en otros casos un cuadro de bronquilitis obliterante neumonía organizada. ¿Qué novedades están encontrando en esas primeras autopsias? Todas estas lesiones que vemos en la histología del pulmón, se veían también en las TAC de alta reso-

lución. Pero nosotros a nivel histológico además hemos visto una inflamación del endotelio, llamada endotelitis, que se acompaña de microangiopatía trombótica y eso complica las cosas mucho más. En nuestros casos la microangiopatía trombótica la hemos encontrado en el pulmón, alrededor de las lesiones más graves, y en el riñón. Todos estos hallazgos en las autopsias nos pueden ayudar a que se haga un tratamiento dirigido para evitar esos cambios vasculares que complican la enfermedad pulmonar. Además, estudiamos otros órganos, entre ellos, el bulbo olfativo para entender porque los pacientes tienen anosmia. Aún no tenemos resultados pero esperamos llegar a conclusiones. “Cuando dijeron que era una pandemia guardamos bajo llave nuestros EPIs. porque nos lo quitaban de otros servicios”

Realizan autopsias siguiendo el protocolo recomendado por la SEAP. En efecto. Lo que se ha decidido es hacer, como mínimo, una autopsia parcial de tórax y con un protocolo común. Abrimos la caja torácica, extraemos el paquete torácico e

inmediatamente lo dejamos unos días en formol para que inactive al virus y podamos seguir disecando. Tomamos muestras de pulmón y corazón, del hígado, del bazo, médula ósea, piel, músculo, etc. para su estudio histológico. Además tomamos muestras muy pequeñas, en congelación y en un conservador especial para estudios moleculares o para microscopía electrónica. Todo esto nos sirve para estudiar lesiones de varios tipos. Con la autopsia estudiamos los detalles macroscópicos, que se ven a simple vista (si el pulmón está condensado, si pesa más de la cuenta, si tiene neumonía,..), los hallazgos al microscopio óptico convencional. Esperamos también poder estudiar el Covid 19 y sus lesiones en las muestras con microscopía electrónica y hacer estudios moleculares inmunohistoquímicos, porque es muy importante intentar identificar el virus en el tejido. Normalmente el virus se estudia en los exudados nasofaríngeos o mediante anticuerpos en sangre. Pero en un cadáver en que han pasado 20 días desde que está infectado no sabemos si el virus persiste y nos gustaría saber si sigue teniendo el virus en el tejido. Estos estudios que estamos

realizando a nivel nacional nos van a permitir saberlo y es importante porque el estado de alarma empezó el 13 de marzo pero nosotros tenemos autopsias de pacientes que fallecieron en enero y febrero con una patología muy semejante a la que tienen los pacientes Covid. Es una hipótesis, aún sin evidencia, que alguno de esos pacientes ya tuviera el virus, y fueran anteriores a esa fecha. Lo mismo se están planteando otros anatomopatólogos en hospitales de otras comunidades. ¿Cuál es la situación actual en su Unidad? 33 La actividad se está recobrando. Los quirófanos de los que dependemos por las muestras que nos mandan ya están casi a pleno rendimiento. Eso sí, ahora vamos con mascarilla, nos lavamos mucho más, estamos más distanciados. Estamos viendo algunas muestras de pacientes con patologías avanzadas, probablemente porque no han contactado con antelación con el hospital por la situación de confinamiento. En el laboratorio se han puesto campanas de bioseguridad para el estudio de muestras de quirófano y se han ampliado el equipamiento para la protección del trabajador.


entrevista

Dr. Ignacio Garitano Gutiérrez. Coordinador del Plan Vasco de Control y Vigilancia de Desescalada del Coronavirus.

“Yo pensaba que el verano iba a ser tranquilo pero ahora veo que la guerra se puede producir en cualquier momento”

E

stá al frente de la red de vigilancia, compuesta por 34 enfermeras y 149 sanitarios que forman el equipo inicial ¿En qué consiste? Es una red construida sobre las tres unidades de vigilancia epidemiológica, que hemos extendido a Atención Primaria, porque es determinante en el tratamiento y conten34 ción de casos leves para que no lleguen al hospital. Cada vez que sale un caso positivo diagnosticado, se le hace una entrevista centrado en los contactos estrechos de ese caso. En el confinamiento se limitaba a la unidad familiar pero a medida que se ha ampliado la libertad de movimientos, han crecido esos contactos, que se consideran cuando se está más de 15 minutos a menos de 2 metros sin protección ni epi y mascarilla. Una vez elaborada la lista de contactos estrechos, le metemos en una base de datos única para todo el País Vasco, con un software libre de la OMS que se llama GoData. Hemos sido pioneros.

¿Y qué es exactamente el GoData? Todos los actores que participamos en esta vigilancia trabajamos sobre la misma base que nos permite meter sus datos y sus contactos. Y programar un seguimiento a esos contactos, que consisten hoy en día (van variando los protocolos) en seguirles diez días que deben estar aislados en sus casas y les hacemos una PCR de inicio, al descubrirse el caso, y otra el día 10. Si las dos dan negativo y han estado asintomáticos, se les levanta el aislamiento y se les da el alta porque se estima que no se han contagiado. Esto te permite saber cuántos casos tienes y cortar la transmisión porque haces una intervención a modo de aislamiento y aunque enferme ese contacto ya está aislado. Pensamos que es lo más recomendable, encontrar los casos rápido, aislarlos, encontrar sus contactos y aislarlos y hacer una prueba serológica al inicio y al final del proceso. ¿Han aumentado notablemente los círculos de vida social en los casos que detectan?

Sí, se nota muchísimo. Semana a semana, nosotros analizamos con cuántos contactos estrechos ha estado en caso positivo y al principio eran dos o tres y ahora la media ha subido a 25 contactos estrechos. Y eso aumenta mucho el trabajo. Cuanta más gente haya, más posibilidades de que no se cumpla el aislamiento. Se han registrado algunos focos que han puesto en alerta a todo el

sistema por temor a dar un paso atrás respecto a esa nueva normalidad ¿El sistema aplicado ha conseguido controlarlo? Pensamos que es el mejor sistema que se ha pensado para cortar la transmisión y haya menos posibilidades de que un foco se descontrole. Si hay pocos casos, es más fácil mantener pocos casos, pero estamos viendo cada vez más importaciones de vuelos de origen africano, sudamericano,… Junto con los cír-


entrevista culos sociales que van creciendo, es un reto y cada día necesitamos más fuerza de trabajo dedicada a esto. También hay que centrarse en los colectivos más vulnerables, en la gente que vive más hacinada. En ese sentido hemos comenzado a realizar un screening en temporeros de Rioja Alavesa o Tolosaladea. Esto es lo que se ve en otros lugares, que hay brotes tan importantes que han provocado el cierre de comarcas enteras en Aragon. No queremos llegar a esto y estamos buscando hacer algo más preventivo. La vendimia va a ser un objetivo también, haremos alguna intervención al inicio para prevenir este tipo de eventos. ¿Qué circunstancias deberían darse para dar ese paso atrás y regresar a la fase 2 o realizar aislamientos localizados? ¿Depende más de algo cuantitativo que cualitativo? Efectivamente, no depende del número de casos. Si yo tengo ahora 50 casos en Euskadi -que ahora parece mucho pero que en el pico máximo hubo 700 en un día- y todos salen entre contactos que están aislados y se han contagiado de un caso conocido, no me preocupa. Me asusta mucho tener quince casos sin nexo conocido porque significa que el virus está circulando por la calle

por lugares geográficos distintos y no tenemos un control de la situación. Está más vinculado al tipo de transmisión, a casos inconexos, que a pequeños brotes que en general y con un buen sistema se pueden controlar. “La muy manida falta de equipos, que ha existido, no tengo claro que sea la mayor responsable del alto porcentaje de médicos afectados”

En estos momentos dirige el Plan vasco de Control pero ha pasado por distintas ubicaciones durante la pandemia Yo soy ginecólogo y me presenté voluntario a lo que hiciera falta en la respuesta al Covid. Empecé tomando muestras en domicilios con EPIs con los enfermeros y utilizábamos la estructura de hospitalización a domicilio. Después pasé ya como médico al servicio de HaD con casos de teleasistencia y visitas en casa o derivaciones a hospital. También estuve en el Hotel Lakua haciendo de médico con casos relativamente leves. Viví la pandemia desde dentro como médico asistencial pero no dentro del hospital, por lo que no he visto lo más dramático. El colectivo de los profesionales

sanitarios ha sido uno de los más afectados en cuanto a contagios ¿Cómo valora esta circunstancia? La muy manida falta de equipos, que ha existido, no tengo claro que sea la mayor responsable del alto porcentaje de médicos afectados. Compañeros que no han visto un paciente resultaron altamente contagiados, como altos directivos de hospitales. Lo que se ha comprobado es que el virus circulaba por la calle en personas con escasa sintomatología y en un momento determinado había mucha gente enferma y en un momento tienen contacto con el sistema sanitario y su personal. Seguro que hemos estado viendo enfermos de Covid sin pedirles las pruebas y sin equipos de protección, siguiendo el protocolo de cada momento. Ahora es impensable reunir a mucha gente en una sala durante horas sin mascarilla, pero las reuniones extenuantemente largas para responder a la epidemia han sido así. ¿En qué momento se encuentra el personal física y mentalmente? El personal tiene muy claro cuál es su papel y su responsabilidad y lo ha demostrado. Pero estamos en julio y hay gente que no ha cogido vacaciones y tienen una mochila muy potente de lo que ha vivido,

porque a todos nos ha tocado hacer algo extra. Hay personal que está pasando desapercibido pero, por ejemplo, los epidemiólogos del Gobierno Vasco han doblado jornadas, fines de semana, personal que sus estatus de funcionario no les permite cobrar esas jornadas extra, frustración, cansancio, emociones contenidas, falta de descanso… Yo tengo la esperanza de que no haya demasiado movimiento y que la gente pueda coger vacaciones en julio y agosto y vengan renovados para lo que pueda pasar. Yo pensaba que el verano iba a ser tranquilo pero ahora veo que la guerra se puede producir en cualquier mo- 35 mento. ¿Cuáles son sus recomendaciones para postergar ese temido rebrote? Cada uno de nosotros podemos hacer algo para que esto avance que es aplicar las medidas archiconocidas: lavado de manos, distancia y mascarilla, mascarilla, mascarilla. Creo que los sanitarios hemos cambiado mucho en este sentido y si bien al principio del todo ver una mascarilla era “No alarmes a la gente”, ahora ha pasado a ser como la bata blanca de la que no puedes prescindir. Cuando todo esto pase, si mantenemos esta costumbre, reduciremos catarros, gripes y demás.


entrevista

La plataforma Eutsi Goiari recaudó más 180.000 euros en plena pandemia para adquirir material sanitario de protección

Dr. Jorge Guadilla y Dr. Orlando Pompei están al frente de esta iniciativa solidaria en la que colaboraron más de un centenar de personas para entregar material a centros sanitarios y residencias

“H

emos decidido promover una campaña de movilización y colecta ciudadana para ayudar en la protección y aislamiento del personal sanitario que está en primera línea de asistencia en la OSI Araba”. Este es el llamamiento que los impulsores de la plataforma Eutsi Goiari decidieron lanzar en su vídeo de presentación de esta iniciativa solidaria que bus36 caba cubrir un vacío que ponía en riesgo cada día a muchos compañeros y compañeras. Hablamos con los impulsores de esta plataforma para conocer cómo se gestó esta campaña que ha permitido poner a salvo a muchos alaveses: Dr. Jorge Guadilla y Dr. Orlando Pompei, del Servicio de Traumatología y Ortopedia y Servicio de Reumatología respectivamente en el HUA y ambos pertenecientes a la Unidad de Cirugía Artroscopia del Hospital Vithas San José. Esta iniciativa arranca a finales de marzo, ¿Cómo surge? ¿Qué objeti-

vo inicial se marcaron? Jorge Guadilla: Surge de la inquietud y preocupación de un grupo de compañeros de trabajo (médicos, enfermera, fisioterapuetas, administrativos, biólogos,…) y la dificultad real de disponer de material de protección directo (EPIs) e indirecto (material que tenia que compartirse

entre pacientes y lavarse-esterilizarse entre cada paciente). El 22 de marzo decidimos abrir una cuenta de donación en la plataforma Gofundme con el objetivo inicial de 30000€. Orlando Pompei: Surge desde el confinamiento, desde la impoten-

cia de ver a compañeros de profesión exponiéndose ante el virus por no disponer de material suficiente. Era necesario hacer algo y surgió la idea de recaudar fondos para la compra del mismo. Inicialmente nos marcamos como objetivo suministrar a los hospitales pero enseguida nos dimos cuenta de que a este necesidad se sumaban residencias geriátricas, centros de discapacitados entre otras instituciones sociales, todas relacionadas con colectivos susceptibles a mayor exposición de la enfermedad. Realizaron una subasta, hubo donaciones directas,… ¿Se pusieron a llamar a todas las puertas? JG: Una cosa llevó a la otra tras una sucesión de casualidades. Primero nos planteamos la plataforma de donaciones porque era rápido y fácil. Enseguida empezó a superarse el objetivo inicial gracias en parte a lo mediático y a la participación individual de la plantilla y del equipo técnico del Alavés. Representantes de la cultura realizaron varios vídeos animando a la donación y


entrevista pensamos que podíamos extender esta petición a deportistas para incentivar la colaboración. Uno de ellos, Pablo Gómez, ex futbolista del Alavés, nos donó una camiseta emblemática firmada por toda la plantilla de la temporada en la que el Deportivo Alavés consiguió la clasificación para la UEFA. A partir de aquí se nos ocurrió la idea de pedir objetos para donar y en tan solo siete dias habíamos conseguido 130 objetos para subastar, con los que se obtuvieron 60000€. Tuvimos que constituirnos como asociación para tener todo regularizado. OP: Fueron más de 1100 donantes, entre particulares con donativos económicos, empresas con donativos materiales e incluso recibimos donaciones de otras campañas en paralelo. Consiguieron recaudar 185.000 euros. ¿Cómo se dispuso el reparto de material? OP: Se contacto tanto a sanitarios como a jefes de departamento o de distintas áreas, que considerábamos con mayores requerimientos en el ámbito hospitalario, y toda la red que pudimos identificar en apoyo

del mismo. Se llamó una por una a todas las residencias e incluso a organismos encargados de las mismas, principalmente de Alava para informarles de nuestra campaña; y así darles el enlace de nuestra web, a través del cual podían hacer la solicitud del material requerido, y nosotros llevar un registro de necesidades. A partir de ahí, se crearon subgrupos con todos los colaboradores para mayor efectividad, siendo unos los encargados de conocer las necesidades de hospitales, centros de salud, centros de apoyo COVID19, ambulancias, etc; y otros en residencias e instituciones sociales, para así poder conocer en primera instancia necesidades no cubiertas y ejecutar el reparto en función de lo que nos íbamos dotando. Los destinatarios en consecuencia fueron en total de forma resumida: 13 Centro Sanitarios (Hospitales, centros de salud, servicios médicos penitenciarios) y Recursos de apoyo de Osiaraba (centros de apoyo para hospitalización, ambulancias, centros de manejo de desechos sanitarios, etc); 72 residencias geriátricas o viviendas comunitarias y 17 centros, recursos e instituciones sociales.

JG: El material se distribuía directamente por una red de transportistas voluntarios que teníamos y en las fases más duras alguien de los centros destino venía a nuestro centro de operaciones a recoger lo encargado. Nos consta que en muchos casos el material entregado ha supuesto un alivio y ayuda capital sin el cual la situación hubiera sido dramática. El feed back de los receptores ha sido muy gratificante. Hay que destacar la labor de la red de costureras (61) que consiguieron confeccionar casi 3000 batas desechables y reutilizables que han hecho a nuestros sanitarios estar más protegidos. Uno de los principales problemas para la adquisición de material era el desabastecimiento. ¿Cómo han conseguido un material que tanto costaba conseguir a las instituciones? JG: En la primera fase la compra se ha producido en el mercado nacional, a través de ortopedias y tiendas de material médico que en cantidades “pequeñas” como si de un uso particular se tratara, nos vendían desde fonendos, pulsioxímetros, tensiómetros hasta buzos

de plástico, guantes de caña larga, calzas. Hay que destacar que recibimos donaciones de material (Gel, mascarillas quirúrgicas y FFP2) de diversas empresas como Lea, Unilever, Kliner, Leroy Merlin entre otras. La clave ha sido recurrir a canales no habituales. La administración está más encorsetada en canales normalizados y regulados de compra e incluso centralizados. OSI Araba no pudo comprar a partir de un momento determinados elementos muy demandados y se centralizó la compra para toda Osakidetza. 37 ¿Qué canales de compra han seguido, con el riesgo que existía de material falsificado? OP: Estábamos expuestos a los mismos riesgos que incluso el mismo gobierno, pero también conocíamos empresas con licencia de importación de material sanitario, incluso para Osakidetza. Recibíamos feedback de todo el material entregado, y estábamos constantemente verificando posibles problemas en cuanto al material. Sin embargo como es el caso de las mascarillas, por citar un ejemplo, hicimos a través de la Universidad


entrevista

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de Navarra, test de laboratorio para corroborar la protección, que los certificados alegaban. Es importante recalcar que no todo el material entregado fue comprado, también una parte de él, fue suministrado sin ánimos de lucro por diversas empresas que confiaron en nosotros, en hacerlo llegar, donde tenía que llegar, ya que contaban previamente con el material, pero también tenían el miedo o inquietud de que cayera en manos de gente inescrupulosa con ganas de comercializarlo o hacer un uso inadecuado del mismo. ¿Cómo es posible sacar tiempo para poner en marcha este proyecto dada la carga de trabajo que soportaban en el hospital? OP: No hemos sido conscientes de todas las horas que hemos estado trabajando hasta que todo ha pasado. Cuando acababa el trabajo en el hospital seguíamos con la campaña hasta altas horas de la madrugada y así durante todo el confinamiento. También hay que reconocer que otros compañeros estuvieron sometidos a un estrés laboral mayor, al estar implicado más directamente

en servicios como Urgencias, UCIs, Medicina interna y Neumología. La satisfacción que generaba la ayuda que proporcionábamos era tan grande que nos hacía enfocar el objetivo sin titubear. Los días de las subastas también fueron muy emocionantes al ver a tanta gente implicada para un mismo fin. Ahora que la situación está más relajada ¿en qué situación física y psicológica se encuentran como profesionales sanitarios? JG: Nosotros no hemos estado en primera línea. Nos ha afectado la dinámica de trabajo, ahora la situación y el mantenimiento de las normas de distanciamiento social que en las consultas se traduce en menor densidad de pacientes, nos impide ser tan eficientes en términos de número de pacientes vistos, las demoras irremediablemente se van a aumentar. Los/las compañeros/as que han estado en primera línea han trabajado de manera intensísima, no solo en número de hora sino con la necesidad de dar salida a un número ingente de pacientes a un ritmo supranormal. Físicamente están can-

sados y claro que psicológicamente están afectados. Han sido meses muy intensos. Al cansancio propio del trabajo se suma el hartazgo propio de cualquier ciudadano de la falta de sintonía muchas veces con los que toman decisiones. La distancia de la situación con la que viven a veces los líderes políticos. Yo he echado de menos liderazgo con mayúsculas. OP: En general de incertidumbre en cuanto al desenlace de todo esto o si nos extralimitará a otras situaciones, pero sí con la reflexión acerca de la repercusión que ha podido y tiene, toda esta situación de pandemia. Lo que sí está claro es, que sin el compromiso individual y colectivo, por mucho más que se doten hospitales será una guerra constante e incesante. Ha sido una etapa dura y satisfactoria a la vez, hemos corroborado la importancia del trabajo en equipo, y hemos conocido diversos sectores de la sociedad que desconocíamos. ¿Cómo ven la situación sanitaria los próximos meses? JG: Creo y espero que hayamos

aprendido de la situación. Me consta que a nivel hospitalario se tiene en cuenta la posibilidad de un nuevo escenario de crisis y confío en que no nos pille en fuera de juego y con exceso de confianza una situación similar. OP: Esperamos que hayamos aprendido una lección. Probablemente nos encontremos con nuevos retos ya que estamos ante un enemigo nuevo y desconocido, solo nos queda aprender de los errores de nosotros mismos y los cometidos en otros lugares; pero se debe minimizar el factor sorpresa que nos ha sacudido durante este tiempo y cerciorarnos de que tengamos disponibles los medios, recursos e incluso el personal necesario para enfrentarlo, porque el coste de esta situación se ha pagado con vidas también. Sería muy negativo si dado el riesgo latente que existe no se actúe con prudencia y se tomen medidas tardías, y sobre todo, no enfatizar el compromiso personal y como ciudadano que mencionábamos anteriormente, para así evitar cometer los mismos errores, que tanto nos han costado.


Médicos, enfermeras, dentistas, farmacéuticos y veterinarios de Álava ponen en marcha la campaña “Siempre a tu lado” para poner en valor la dedicación de los profesionales sanitarios

reportaje

Un cartel, presente en centros de salud, hospitales, consultas, farmacias y en las marquesinas de VitoriaGasteiz, reconoce el compromiso continuado del personal sanitario

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l Colegios de Médicos, de Enfermería, de Dentistas, de Farmacéuticos y de Veterinarios de Araba/Álava decidieron unir fuerzas y poner en marcha en mayo una campaña para poner en valor la figura

de los profesionales sanitarios. Su dedicación absoluta, que ha alcanzado su máximo exponente estas semanas con la lucha en primera línea del personal sanitario contra la Covid-19, refleja el compromiso que han tenido y

seguirán teniendo estos profesionales con la sociedad. Por este motivo, los colegios de la provincia quisieron ensalzar el papel fundamental del personal sanitario, destacar su trabajo en

equipo por una atención de calidad de los pacientes que coloca a las personas en el centro del sistema y afianzar la confianza de la ciudadanía en las profesiones sanitarias. Bajo el lema “Siempre a tu lado – Beti zure ondoan”, editaron un cartel que se instaló en los postes y marquesinas cercanas a los centros sanitarios, en el interior 39 de centros de salud y hospitales, en todas las oficinas de farmacia de Araba/Álava, así como en las consultas de dentistas y veterinarios y en las sedes las cinco entidades colegiales impulsoras de este proyecto. Una iniciativa que busca reconocer a todas las médicas y médicos, así como al resto profesionales sanitarios, su esfuerzo y completa dedicación por una atención sanitaria centrada en las personas y poner el valor la importancia de proteger y respetar a los responsables del cuidado de nuestra salud.


Colegios Colegios sanitarios Álava

COLEGIO DE VETERINARIOS DE ÁLAVA

Hygia pecoris salus populi

Artículo firmado por Fernando Pérez Aguirre, presidente del Colegio de Veterinarios de Álava

Campaña “Siempre a tu lado” La Revista ICOMA abre un espacio a los Colegios profesionales sanitarios de la provincia. Sus máximos responsables nos cuentan cómo ha vivido su profesión esta crisis sanitaria.

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s el lema de la profesión veterinaria (higiene animal, salud del pueblo). La prevención y el tratamiento de la salud animal conllevan un control en la salud humana. Muchas enfermedades infecciosas emergentes provienen de gérmenes de origen animal y esta pandemia es un ejemplo de ello. La colaboración interdisciplinar de las profesiones sanitarias en el cuidado de la salud de las personas, los animales y el medio ambiente, acelera los avances biomédicos y mejora la salud pública. Es el concepto “One health” (Una salud).

que podamos y mientras tanto reivindicar que las administraciones se den cuenta de la importancia de la prevención de zoonosis en este mundo global.

cados de bienestar y salud animal. Y además llueve sobre mojado. En los últimos años han aparecido episodios zoonóticos como la gripe porcina, gripe aviar, MERS y SARS-COV-1.

Pero en esta pandemia quisiera disculparme con mis compañeros sanitarios por no haber podido aportar más, pero quiero que sepáis que no nos dejaron.

Todo esto tiene que obligar a las administraciones a tomar decisiones importantes: detener la globalización o jugar todos con las mismas reglas de juego. Espero que el poder económico lo entienda.

Existen en el mundo mercados de animales vivos en donde un veterinario no firmaría nunca certifi-

A nuestro colectivo, esta crisis sanitaria nos está enseñando a apoyar al colectivo médico en todo lo

Nuestra labor en estos momentos está centrada en seguir el comportamiento del virus SARS-COV2 en diferentes especies animales y de esta manera aportar nuestro granito de arena en la búsqueda de la inmunidad y la prevención de recombinaciones víricas. “En esta pandemia quisiera disculparme con mis compañeros sanitarios por no haber podido aportar más, pero quiero que sepáis que no nos dejaron”.

Nos sentimos muy orgullosos de vosotros y muy agradecidos de teneros como compañeros sanitarios. Un abrazo fuerte y gracias ICOMA por darme la oportunidad de poder agradeceros el trabajo del colectivo médico alavés.


COLEGIO DE FARMACEÚTICOS DE ÁLAVA

Farmacias: la cruz que nunca se apaga

Colegios sanitarios Álava

Artículo firmado por Milagros López de Ocáriz, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Álava

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a Covid-19 ha revolucionado el mundo y, por supuesto la farmacia. Desde el primer momento, nuestro objetivo fue garantizar la continuidad de la prestación farmacéutica, con la máxima seguridad y calidad. No podíamos fallar a los ciudadanos, para lo cual teníamos que seguir ejerciendo nuestra labor asistencial desde la responsabilidad como profesionales sanitarios. Farmacéuticos de todas las modalidades de ejercicio hemos estado al pie del cañón contribuyendo a que las estrategias puestas en marcha funcionasen. Desde la Organización Farmacéutica Colegial nos pusimos a trabajar de inmediato apoyándonos en la red de establecimientos sanitarios más cercanos y accesibles: las farmacias comunitarias. Ya el 13 de marzo solicitamos al Ministerio de Sanidad y a las comunidades autónomas medidas excepcionales

y digital, lo que nos ha permitido poner en marcha las estrategias necesarias y adaptarnos a las circunstancias de cada momento. Hemos puesto en marcha sistemas de contingencia en colaboración con otros colegios sanitarios para garantizar las prescripciones y dispensaciones a los pacientes, así como con asociaciones sin ánimo de lucro, para entregar la medicación a personas vulnerables en sus domicilios, además de impulsar la iniciativa Mascarilla 19 para la detección de la violencia machista durante el confinamiento.

para asegurar la continuidad de la prestación farmacéutica a toda la población, que avalamos con protocolos para su implantación. Nuestro trabajo se ha cimentado en tres pilares: asistencial, social

El paciente es el eje sobre el que pivotamos todos los sanitarios, su atención y su cuidado

Los farmacéuticos seguiremos trabajando en la reconstrucción del sistema sanitario y colaborando en las iniciativas de salud pública imprescindibles para garanti-

zar nuestro Estado de Bienestar. Y reivindicamos la integración de la farmacia comunitaria en la atención primaria, en las políticas de salud pública y en la transformación digital de la Sanidad, todo ello en colaboración con el resto de profesiones sanitarias. El paciente es el eje sobre el que pivotamos todos los sanitarios, su atención y su cuidado, y ha sido 41 más que evidente en esta pandemia. La campaña “siempre a tu lado”, promovida por los Colegios sanitarios de Álava, ha querido poner en valor estos principios. Además, quiero expresar mi máximo reconocimiento al magnífico trabajo de todos los profesionales sanitarios y mi agradecimiento a los equipos técnicos de los Colegios profesionales y de la Administración pública por su capacidad de innovación y adaptación. Y sobre todo, no olvidemos a las víctimas.


Colegios sanitarios Álava

COLEGIO DE DENTISTAS DE ÁLAVA

Volvamos a sonreír

Artículo firmado por Carmen Mozas, presidenta del Colegio de Dentistas de Álava

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esde el inicio de la crisis sanitaria, los dentistas alaveses nos hemos visto rodeados de incertidumbres ante la falta de claridad en cuanto a cómo podíamos ejercer nuestro trabajo sanitario. Pero, lejos de que las ambiguas decisiones nos paralizasen, y conscientes de la gravedad de la situación, desde el minuto 1 nos pusimos al servicio de las autoridades sanitarias. Si debíamos limitar nuestra actividad clínica, al menos que nuestro material pudiera ser utilizado por otros profesionales sanitarios. Entregamos la mayoría de EPI de nuestras clínicas y nos ceñimos a las indicaciones establecidas: atender exclusivamente las urgencias. Desde nuestras consultas hemos podido contribuir a evitar colapsos en servicios de urgencia de la Sanidad Pública, atendiendo

Y todo ello sin perder de vista que nuestra situación económica se ha visto muy afectada por esta pandemia. Como autónomos, hemos tenido que realizar un gran esfuerzo para poder mantener a nuestros empleados, a pesar de estar un largo tiempo sin ingresos y habernos tenido que volver a proveer de EPI.

aquellas situaciones extremas relativas a la salud bucodental. Cuando hemos llegado a una situación más controlada, los dentistas alaveses hemos ido recuperando la atención a nuestros pacientes, que han entendido perfectamente nuestra experiencia y conocimiento para trabajar en un entorno donde la bioseguridad es una constante. A pesar de las vidas que se ha cobrado este virus y de que nuestro trabajo no va a ser igual, tenemos que intentar volver a sonreír.

Los dentistas somos de los sanitarios más expuestos a infecciones cruzadas, debido a nuestra proximidad con el paciente, por lo que la esterilización y la protección son nuestra prioridad, si bien, hemos reforzado aún más las medidas de cara a la seguridad y tranquilidad de los pacientes. Así,

hemos distanciado las visitas para asegurar la puntualidad y poder desinfectar y airear el gabinete entre cada paciente. Los dentistas alaveses además hemos adoptado el protocolo del Consejo General de Dentistas con las líneas maestras de protección y reducción de riesgos de transmisión.

Aunque también me gustaría extraer algo positivo de esta crisis sin precedentes, que ha puesto de manifiesto la fortaleza de las organizaciones colegiales. El compañerismo entre los propios dentistas y también la buena sintonía con otras profesiones sanitarias han sido fundamentales para convencernos de que unidos, somos mejores. Y a pesar de las vidas que se ha cobrado este virus y de que nuestro trabajo no va a ser igual, tenemos que intentar volver a sonreír.


COLEGIO DE ENFERMERÍA DE ÁLAVA

Las enfermeras alavesas, en primera línea contra el coronavirus

Colegios sanitarios Álava

Artículo firmado por Hosanna Parra, presidenta del Colegio de Enfermería de Álava

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020 comenzó siendo proclamado por la OMS como el Año Internacional de Enfermeras y Matronas a nivel mundial, dada la función que desempeñamos en los servicios de salud. Al inicio del año se emprendieron acciones en este sentido y, también, en el de cuestionar el ratio de enfermeras y matronas, con el fin de promover una mayor inversión en personal de enfermería. Los actos previstos quedaron acallados por la emergencia sociosanitaria más grave de la historia de nuestro tiempo, la COVID-19; hecho que ha puesto en el punto de mira la resistencia, solidez y capacidad de afrontamiento ante situaciones de esta magnitud, tanto desde los sistemas de salud, como desde cada persona. Son muchos los colectivos que han demostrado su buen hacer y, entre ellos, nuestro colectivo merece una mención especial. Las enfermeras hemos estado y permanecido en

se estaba poniendo en riesgo a las personas más allegadas. Aun así, se ha superado cualquier expectativa en atención, coordinación y cuidado, dando una respuesta de una profesionalidad encomiable. Se han vivido muchas “historias”, muchas difíciles de olvidar, pasando por momentos de alegría, también de cansancio, pero, también, de una profunda tristeza por todos los corazones que han dejado de latir y por no haber podido “hacer un poco más”. primera línea de atención, demostrando una vez más nuestra profesionalidad. En muchas ocasiones, se ha atendido a la ciudadanía sin materiales de protección necesarios y adecuados; además, se ha sostenido una elevada sobrecarga asistencial, con el consecuente cansancio físico y psíquico; y, asimismo, se ha carecido de las pruebas de salud necesarias para conocer la situación personal, aspecto que ha conllevado la duda de si

En muchas ocasiones, se ha atendido a la ciudadanía sin materiales de protección necesarios y adecuados

Las enfermeras estamos y seguiremos estando en primera línea de actuación sanitaria. Nuestro trabajo se basa en atender, cuidar, acompañar y orientar. Socialmente ha habido un reconocimiento al esfuerzo y trabajo realizado, aspecto que agradecemos sinceramente. Por ello, consideramos que es un

momento óptimo para que las autoridades sanitarias pongan en valor nuestra profesión, revisen los campos de actuación enfermeros y chequeen los ratios de enfermeras que serían deseables. Así, se podrían garantizar mejoras tanto en la seguridad de pacientes, como en la atención a la ciudadanía, o en la práctica clínica. Si se toman las medidas necesarias, podremos trabajar mejor, mejorar la calidad de 43 vida y salvar más vidas. Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Álava queremos transmitir nuestro más sincero agradecimiento y reconocimiento a todas vosotras, enfermeras y enfermeros alaveses, por el extraordinario trabajo que estáis realizando en cualquiera de los ámbitos. No podemos sentirnos más orgullosas. Estos últimos meses han servido para comprobar que no hacen falta campañas de reconocimiento, vuestra labor lo dice todo. Eskerrik asko, benetan!



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