BON VIVANT
Q
uizás ya no lo recuerde. Quizás estas líneas traigan a su memoria una promesa inconclusa que hoy paga su deuda. Porque hubo un tiempo en donde las cosas sucedían de forma diferente. Pero él se mantiene firme. Como perfecto anfitrión que quiere ejercer. Lastrando costumbres de otros tiempos que hoy solo perduran mientras que sus cortesanos sigan alagando sus formas. En el fondo hay mucha bondad que no siempre puede salvar el muñeco roto. Y yo pude disfrutar de todas esas bondades. Me hiciste volver a creer que aquí podría darse la dolce vita. Referirse a la vida o vita pero no acompañarla de dulce o dolce es imperdonable. Tanto como tener y no disfrutarlo. O no tenerlo y añorarlo. Para algunos la dolce vita continúa evocando un estilo de vida despreocupado y dedicado a los placeres mundanos. Quizás la tarea pendiente sea saber ordenarlos.
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