N ú m e r o 1 0 5 - A ñ o 1 0 - A g o s t o 2 0 1 8 - B u e n o s A i r e s - ISS N : 2 3 1 3 9 7 2 2 - D N D A 5 3 4 5 4 6 0 - E j e m p l a r
g r at u i t o
29 de agosto DÍA DEL ÁRBOL Sumario Pág.2: No la despido / Martina Céspedes Pág.3 “Vivo en SanTelmo no por herencia sino por elección” Pág.4 El Británico, poema / Presentación del libro de Daniel Pady Pereyra: “Para intentar que un árbol baile” / Museo Histórico Nacional / Día de la Reconquista en la Feria de SanTelmo Pág.5 La importancia de la educación técnica / El muro de los lamentos Pág.8 Hasta siempre querido Peti Pág.9 “Soy un obrero del teatro” Pág.11 “A mis hijos les inculqué la lectura” Pág.12 Festejo del Día del Niño en la Feria de SanTelmo
“... Y, en cordial semejanza, buen árbol, quizá pronto te recuerde, cuando brote en mi vida una esperanza que se parezca un poco a tu hoja verde...” Antonio Machado FOTO ARCHIVO DE EL SOL DE SAN TELMO
2 - AGOSTO 2018
Nuestra Misión: El Sol de San Telmo es un periódico nopartidario dedicado a fortalecer y celebrar el barrio de San Telmo y el Casco Histórico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.. Definimos nuestra visión editorial como periodismo comunitario. Valoramos toda comunicación que genere un foro abierto de participación y diálogo para las muchas voces que constituyen la comunidad de San Telmo. Reconocemos que vivimos en una época en la cual los medios (tanto masivos como independientes) ocupan cada vez más el espacio de intercambio y comunicación que antes ocupaban nuestros espacios públicos-las plazas, parques y veredas donde nuestros abuelos se juntaban para conectarse con el mundo y con sus comunidades. Por eso queremos revalorar el intercambio y la conexión humana a través de un periódico cuya identidad, contenido, y espíritu se definen a través de la participación activa de sus lectores y colaboradores. Todos los que viven o trabajan en el barrio, o simplemente le tienen cariño, están invitados a formar parte del debate sobre San Telmo: su patrimonio tangible e intangible, su pueblo y su futuro.
w Propietario: Hugo M. Del Pozo Dirección/ Edición: Isabel Bláser Carlos Calvo 717 - CABA - Tel. 4307 9704 isabel.elsol@yahoo.com.ar Redacción: Isabel Bláser, Diana Rodríguez Diseño: Samanta Cardo Publicidad: Diana Rodríguez Administrador / web / facebook:
Hugo E. Lavorano Colaboraron en este número: Stella Maris Cambré / Omar Dianese / Mónica Seoane / Graciela Fernández / María Vázquez / Cecilia Calderón / Gonzalo Garcés / Efraín Cruz elsol.desantelmo@yahoo.com.ar www.elsoldesantelmo.com.ar Facebook: El Sol de San Telmo El arte de nuestro logo es un fileteado del maestro Martiniano Arce www.martinianoarce.com
w ISSN: 2313 9722 DNDA 5345460 Diseño: SBC - Tel. 4383 5889 Impresión: Editora del Plata S.R.L. Neyra 75 - Gualeguaychú - E2820DQA Entre Ríos - Argentina El Sol de San Telmo es una publicación cultural de carácter comunitario y distribución gratuita mensual de 3000 ejemplares, orientada a la difusión de la historia y actividades barriales del barrio de San Telmo y el Casco Histórico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Se autoriza la reproducción total o parcial de las notas citando la fuente. Los artículos firmados son de exclusiva responsabilidad de los autores. Fundadores: Catherine Mariko Black y Marcelo Ballvé
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No la despido
trario, la ayudarán y trasladarán donde corresponda para efectuar su denuncia. También sigue entregando los certificados habituales de supervivencia, domicilio etc. Como vecina debo decir que me duele no tener la antigua comisaría de barrio. Aquella donde llamé, desesperada, una noche de invierno porque no me podía comunicar con la ambulancia y la necesitaba con urgencia porque mi padre se moría. Aquella que, no sé cómo, logró que en un minuto la ambulancia estuviera en mi casa y que sus agentes -con el máximo respeto por la situación- nos brindaran su compañía silenciosa y apoyo, en tan difícil momento.
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os que caminamos habitualmente dríguez Larreta y fue difundida por todos por la calle Perú al 1000 notamos los medios. que desde hace ya un tiempo camSí, quiero compartir con mis vecinos albió su paisaje. gunas informaciones y sentimientos. Ya no están los patrulleros estacionados Que nuestra comisaría vecinal no podrá a la altura de la ex Comisaría Segunda, hoy Comisaría Vecinal 1B anexo. cumplir con todas sus antiguas funciones es cierto, pero si recurrimos a ella sin No entraré en explicaciones de cuá- duda podremos recibir respuesta a todas les han sido los cambios de las Comisa- nuestras inquietudes. Por ahora sigue rerías porteñas, ni por qué motivos se han cibiendo denuncias, con excepción de las hecho, puesto que la explicación la dio de violencia de género. Esto no significa el propio Jefe de Gobierno de la Ciudad que si alguna persona ingresa con ese tipo Autónoma de Buenos Aires, Horacio Ro- de problema no será atendida; todo lo con-
Esa, mi comisaría amiga, cuyos policías me acompañaron cuando por razones de trabajo, llegué a mi casa una madrugada y noté que alguien extraño -con actitud sospechosa- estaba en la puerta del edificio. A la que me dirigí una noche al notar que alguien me seguía y así dejó de hacerlo. La misma que, seguramente, ayudó a otros vecinos como lo hizo conmigo. La de siempre, en la que todos sus integrantes trabajaban como vecinos queridos a quienes me gustaba ver y saludar porque sabía que estaban dispuestos a protegernos. Mi Comisaría Segunda, digo mí porque está en mi querido barrio y porque solo le debo gratitud, por eso no la despido. Le digo hasta siempre. Stella Maris Cambré El Club Social Cultural y Deportivo Martina Céspedes, firmó un convenio con la Comuna 1 -a cargo de Roberto Salcedo- y la 4 -presidida por Carolina Romero-, por la tenencia de un espacio deportivo que beneficiará a chicos/as de San Telmo, Barracas y La Boca. El acto se realizó el 1 de agosto en la nueva sede de la Comuna 1, con las autoridades y los representantes del Club.
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ocurre, nuestra profesión cobra un sentido y una dimensión inconmensurables.
Noemí Morelli triunfa en la obra “Creo en un solo Dios”
“Vivo en San Telmo no por herencia sino por elección”
El Sol: ¿Cómo estás transitando el éxito de “Creo en un solo Dios”? N.M.: Con una gran emoción y alegría indescriptibles. Es la primera vez en 47 años de actriz que me siento tan expresada y consustanciada con la obra y el personaje que interpreto: una profesora de historia hebrea, educada, erudita y para nada fundamentalista, desprovista de fanatismo e intolerancia, que a partir de un hecho traumático se cuestiona toda su ideología. La respuesta del público y la crítica es impactante y conmovedora. Pocas veces los actores tenemos posibilidades de elegir y, cuando esto
Fotos: Cedidas por la actriz, de su archivo personal
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studió con grandes como Lito Cruz, Raúl Serrano, Inda Ledesma, Augusto Fernández y Lorenzo Quinteros. Actuó en numerosas obras de teatro (“Los hijos del silencio”, dirigida por Sergio Renán, protagonizó “Fuenteovejuna” con el elenco estable del Teatro General San Martín y fue nominada al premio Estrella de Mar por “La señorita de Tacna”, junto a Norma Aleandro; por citar solo algunas). Hizo televisión (“De fulanas y menganas”, “Alta comedia”, “Nueve lunas”, “Gasoleros”), cine (“Últimos días de la víctima”, dirigida por Adolfo Aristarain; “Sobredosis”, de Fernando Ayala, “Tacos altos, de Sergio Renán”) y varias publicidades. Paralelamente, Noemí Morelli realizó cursos de dramaturgia, guión, dirección, danza clásica y moderna, Taekwondo, Tai chi chuan y yoga, entre otras disciplinas. Actualmente brilla -junto a Antonia Bengoechea y Estela Garelli-, en la obra “Creo en un solo Dios”, escrita por Stéfano Massini y dirigida por Edgardo Millán. La pieza, que habla sobre el conflicto palestinoisraelí, se puede ver los jueves a las 20:30 en el teatro Payró.
CREO EN UN SOLO DIOS DE STEFANO MASSINI
Traducción: PATRICIA ZANGARO
Intérpretes: NOEMI MORELLI, ESTELA GARELLI Y ANTONIA BENGOECHEA
Dirección y puesta en escena: EDGARDO MILLAN
TEATRO PAYRÓ / San Martín 766, CABA
La obra está protagonizada por tres mujeres: ¿Cómo ves el auge que está teniendo el feminismo y las cuestiones de género en este momento? Es muy importante a su vez que la obra, basada en un doloroso conflicto hasta ahora sin solución posible, esté contada desde la visión de estas tres mujeres. Ya que, generalmente, la historia está contada por hombres y nuestra mirada ha permanecido -durante mucho tiempo- silenciada o desprestigiada. Veo con gran satisfacción esta actual búsqueda del poder femenino que no es para nada igual al masculino, es un poder que las mujeres estamos descubriendo de a poco, que nos rediseña y que no excluye a los hombres, como supo suceder en otros tiempos. Lo que no apruebo, de ninguna manera (al igual que mi personaje en la obra), son las agresiones de unos grupos contra otros, la intolerancia hacia el que piensa diferente, el fanatismo. Ese es un camino que todavía nos falta recorrer. ¿Cuáles fueron los momentos decisivos que marcaron tu vida? Al igual que mi personaje en la obra, hubo un hecho muy traumático que cambió para siempre mi rumbo a partir de los 12 años. Y, mucho más tarde, mi ingreso al Conservatorio de Arte Dramático, que me sacudió todo aquel dolor, me ayudó a superarlo y me permitió conocerme mucho más y descubrir la profesional que soy hoy. Actriz, directora, bailarina, docente: ¿Qué es lo que más te representa a la hora de trabajar? Mi tránsito por la docencia no ha sido tan significativo en mi carrera. Y si bien he bailado en varios espectáculos, tampoco es mi fuerte. Mi actriz pisa con fuerza desde mis comienzos hasta el día hoy (prueba de ello son las críticas y nominaciones a diferentes premios que atesoro) y la directora, por ahora principiante, se abre camino con mucha potencia, hasta el punto de intentar desalojar a la actriz ¿Lo logrará? Es una pregunta que todavía me formulo… ¿Qué cosas de nuestro barrio disfrutas particularmente? San Telmo es, hasta ahora, mi lugar en el mundo. Amo este barrio en el que vivo hace más de 40 años, no por herencia sino por elección. Heterodoxo y ecléctico, conviven en él el barrio más barrio de los barrios porteños, sus siglos de historia, sus vecinos en la vereda, sus anticuarios y mercados, junto a varios artistas consagrados en mayor o menor medida, plásticos, escritores, actores y bohemios de distintos pelajes. Lo que le da esa personalidad única en todo Buenos Aires. A la vez que se encuentra a pocos minutos del pleno centro de la ciudad. Para mí, ideal: la paz pueblerina de sus calles adoquinadas a pocas cuadras del frenesí de la avenida Corrientes, con sus teatros y su intensa vida nocturna. Diana Rodríguez
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CULTURALES
DANIEL PADY PEREYRA, quien -según sus propios dichos- mora “en la República de San Telmo”, presentó -el 26 de julio pasado- su primer libro: Para intentar que un árbol baile - Editorial Nueva Generación.
EL BRITÁNICO Cuando acepto la invitación de tus entrañas atravieso el umbral de la desidia. Me sumerjo en el ocio de tu tiempo abstracto. Así la vida transcurre entre las pinceladas que derraman en tus mesas el color de la poesía y la metáfora porteña. Todo eso me sucede al envolverme en el ritual de la tertulia inacabable de tus noches. Omar Dianese
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La importancia de la educación técnica E
mos y somos sede de los cursos prácticos que el COPIME (Consejo Profesional de Ingeniería Mecánica y Electricista) les exige a los profesionales del sector eléctrico para obtener su matrícula.
l Instituto de Educación Técnica y Formación Profesional 13 de Julio fue fundado en 1944 como escuela fábrica de la empresa CADE (Compañía Argentina de Electricidad) en la Ciudad de Buenos y Aires y, desde ese entonces, su historia está ligada al mundo de la generación y la transmisión de la electricidad.
Haciendo un recorrido por su sede de la calle Humberto I° 102 -CABAvemos los trabajos realizados por los alumnos; el espacio de la biblioteca ocupado por algunos de ellos frente a un tablero de ajedrez o a una pantalla de computación o atentos a la lectura de los libros que hay en ella; a los profesores, acompañando e induciendo al aprendizaje de las diferentes materias técnicas. Todo esto nos moviliza a querer interiorizarnos sobre las actividades del colegio y sus metas educativas, por lo que le preguntamos a su rectora Viviana Smith: ¿A qué se debe el nombre 13 de julio? El nombre lo toma a partir de 1992, dado que ese día se celebra el Día del Trabajador de la Energía Eléctrica para conmemorar la firma del primer convenio colectivo de trabajo. ¿Qué ofrece el Instituto como enseñanza, cuál es la orientación y el título que otorga? Actualmente es una escuela pública sin fines de lucro de Gestión Privada y, luego de 6 años de estudio, ofrece el título de Técnico Electromecánico.
Formamos parte del CIET (Consejo Inter-escuelas Técnicas) donde nos encontramos las 13 escuelas técnicas privadas de la Ciudad de Buenos Aires y resulta ser un espacio de análisis de las políticas educativas, de acompañamiento y complementariedad entre las instituciones que lo componen. La escuela tiene entre los lineamientos de su ideario institucional brindar a sus estudiantes una formación básica, sólida y versátil para que el joven que la reciba pueda insertarse fácilmente y con éxito en el mundo laboral y en el mundo de los estudios superiores. Para dar cumplimiento con ello estamos convencidos que la escuela no puede estar encerrada entre sus paredes. Debe traspasarla, encontrarse con el afuera, permitirse ser modificada y también modificar lo que encuentra.
El muro de los lamentos EL ESTADO ABRACADABRA Una vereda hecha a nuevo que es pisoteada, minutos después, por transeúntes impasibles a las cintas que la rodean. Miles de panes de césped puestos en canteros, plazas y parques, donde al toque se arman partidos de fútbol y se largan centenares de mascotas a que corran y caven pozos, amén de dejar olorosos recuerdos de su paso. Botellas, bolsas de basura, latas, que constantemente son arrojadas a la vía pública, así el cesto de basura esté al alcance de la mano y el contenedor a diez metros. Esculturas y placas que son pintadas -cuando no rotas- como si se tratara de un chiste. Ejemplo: la Diana Cazadora que por enésima vez, fue retirada del Parque Lezama para su restau-
ración (que, cuando la regresen, durará lo que un lirio). Sorprende la admirable consecuencia con que los ciudadanos -nuestro barrio no escapa al común- responden, munidos de fe religiosa, cuando se les llama la atención sobre sus fechorías. “QUE LO HAGAN DE NUEVO / QUE BARRAN DE NUEVO / QUE LO PLANTEN DE NUEVO”. Sería conveniente poner en su conocimiento que ese SEÑOR ESTADO que debe reponer, replantar, volver a limpiar, tiene nombre y apellido: el de todos los ciudadanos, inclusive aquellos que alegremente propalan su teoría. Tal vez también sería apropiado alertarlos que esos quehaceres cuestan plata. Mucha. Y para que tuvieran plena certeza de eso, invitarlos a que -cuando quieran
¿Tienen previstas salidas laborales concretas? Tenemos fuertes vínculos con el mundo laboral a través de convenios de cooperación con grandes empresas de servicios y de producción de bienes, a partir de los cuales recibimos, docentes y alumnos, capacitación, inserción laboral, prácticas para lograr la profesionalización, becas a estudiantes y actualización tecnológica. Recientemente firmamos -con la empresa ENEL- un convenio que nos permitió ubicar a 23 alumnos del último año de la carrera para la realización de dichas prácticas y la obtención de becas para 16 familias que atraviesan una situación socioeconómica que merece atención. Otro aspecto muy interesante es la capacitación que se brinda. Actualmente, se dictan cursos sobre Media Tensión, en una cámara de última generación que posee-
tener datos certeros- lean en el Boletín Oficial los informes correspondientes, ya que las licitaciones, compras, etc., de bienes y obras realizadas en la ciudad se ven reflejadas allí. Probablemente haya quien (algunos son absolutamente inmunes, hay que decirlo) cuando observe en letra impresa los costos que carga sobre sus espaldas el ESTADO ABRACADABRA o sea él mismo, cambie en algo su conducta. No es seguro, eh… somos algo duros para estos aprendizajes…. Graciela Fernández
DE BARRIO HISTÓRICO, CASI NADA Se me estruja el corazón cuando paso por el barrio donde nací -en pleno corazón de San Telmo-, “arrastrando” toda la historia de una familia que, hasta donde sé, comenzó allí con mis abuelos y veo de-
¿La idea de la educación es dar herramientas para que la persona se desenvuelva para trabajar o para que se desarrolle en su totalidad y sea capaz de elegir? El mundo cambia, ya lo sabemos, pero -ahora- vertiginosamente. Hoy los cambios que se producen en cinco años pueden compararse con los cambios que hace tres años atrás se producían en diez. Por esa razón la enseñanza debe anclarse en los conocimientos básicos, que son fundamentos de otros. Es un error correr detrás de las tecnologías, hay que apostar al aprendizaje significado. Aprender no es acumular información ni hacer asociaciones mecánicas, debemos enfrentar permanentemente al alumno con conflictos cognitivos que les permita poner a prueba sus conocimientos y eso se logra cuando se dan cuenta de lo que saben y saben cuándo aplicarlo. Para lograr todo esto la escuela cuenta con: laboratorios equipados; Planta de Biodiesel; Cámara de Media Tensión de última generación; Salas de computación (computadoras de última generación y computadoras 3D); CNC; Automatización; Salas de usos múltiples; Biblioteca; Sala de estudios. Texto y foto: Isabel Bláser
moliciones u obras en construcción que destruyen el paisaje del casco histórico de Buenos Aires, que debería ser mantenido, restaurado permanentemente acorde con el estilo y la arquitectura de sus orígenes, sin despersonalizarlo y convirtiéndolo en un barrio de tantos. Aún los países más desarrollados y ricos del planeta, que generalmente son los más antiguos, conservan POR LEY al menos un barrio histórico que es permanentemente mantenido en lo que hace a fachadas, alturas y estilos, por los gobiernos (ayuntamientos, municipalidades, etc.). Esto me hace recordar una frase creo que de San Martín, aunque no tiene que ver con el tema, que decía: “Serás lo que debas ser o no serás nada”. Y Buenos Aires, con estas ideas, va dejando de ser una ciudad con personalidad y admirada, para convertirse en una más de tantas que termina siendo nada. María E. Vázquez
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Feria de Antigüedades Plaza Dorrego Panadería Cosas Ricas Perú 1081/85 Restaurant Manolo Bolívar 1299 Librería Fedro Carlos Calvo 578 Ferretería San Juan Av. San Juan 574 Pizería La Moderna Humberto I° 699 Inmobiliaria Giesso Cochabamba 360 Di Mitrio Carlos Calvo 691 Mercado de San Telmo Puesto 54 y otros La Simbólica Carlos Calvo 708 Bar La Poesía Chile 502 Bar El Federal Carlos Calvo 599 Bar Hipopótamo Brasil y Defensa Pamela Biazzi Piedras 1055 Panadería y Confitería Europa Carlos Calvo 678 Club San Telmo Cochabamba 657 Peluquería Lito Cochabamba y Chacabuco Panadería Perú Perú 1217 Bicicletería Mila Av. Caseros 402 Defensoría del Pueblo Defensa esq. Cochabamba Emaus Cochabamba 466 Confitería Ronzino Perú 640 Caburé México 620 Espacio Espinosa Chacabuco esq. Cochabamba MAMBA San Juan 300 Museo Histórico Nacional Defensa 1600 Instituto Integral del Sud Defensa 1318 Escuela Nro. 4 Valentín Gómez Independencia 758 Escuela Guillermo Rawson Humberto Primo 343 Kioscos de Diarios: Carlos Calvo y Perú Piedras y Carlos Calvo Piedras y Chile Perú y México Defensa y Brasil Independencia y Piedras Carlos Calvo y Defensa Garay y Bolívar Humberto I y Bolívar Carlos Calvo y Chacabuco Brasil y Perú
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Hasta siempre querido Peti
Peti lo se lo extraña mucho en el barrio, algunas personas ya no pueden venir más desde que él no está. Hay una chica que venía siempre, que vive en Paseo Colón. Lo venía a visitar porque él la ayudaba mucho, había logrado retomar el secundario y todo. Desde lo que pasó, ya no puede venir más”. (Juan D´Ambrosio). “Una noche el Peti andaba inquieto -Mirá, nos dijo, ahí enfrente esta la abuela-. Sin entender preguntamos ¿La abuela de quién? Nos contestó -La abuela de mayo, está desde hace rato enfrente y yo la quiero saludar-. Nos sentamos al lado del ventanal haciendo guardia. Cuando Estela de Carlotto salió de la pizzería de enfrente el Peti, que entre amase y amase seguía atento, se nos arrimó y nos avisó -Ahí sale-. Cruzamos, Peti le contó que trabajaba en la pizzería desde hacía 40 años y que ahora la habían recuperado los trabajadores. Se sacó la foto y Estela le dijo: ¨No sabía nada de esta historia, ánimo muchachxs, a no bajar los brazos que la cooperativa va salir¨; con la mirada reconfortada, el beso en la mejilla de la abuela y el corazón agrandado de la emoción, nos volvimos. El Peti tuvo su foto y las ganas renovadas de seguir adelante. Ella tenía razón, la cooperativa salió y Peti está presente en cada rincón y en el corazón de todxs lxs que tuvimos la oportunidad de compartir aunque sea
un rato con él”. (Eva y Mauricio).
sentí en el alma cuando se fue” (Susù Blondde).
“A Peti era muy difícil ¨caretearle¨ algo, te sacaba la ficha enseguida. Cuando me separé del gallego, yo andaba como un alma en pena. Cada vez que me veía pasar hecha un trapo me hacía entrar, me miraba y me decía: ¨Ya va a pasar Bonita¨, me ponía un vaso de vino y me acompañaba en silencio mientras yo me lloraba la vida misma, hasta que se me pasaba y seguía viaje. No se bancaba que alguien sufriera y hacía lo imposible para mitigarte las penas”. (Cecilia Calderón). “Llegué un día a Mi Tío preguntando por algún plomero que pudiera arreglarme un problema en la ducha, se enteró Peti y me dijo: ¨Dejá que yo lo veo en una escapada¨. Al otro día, en medio del laburo, vino a casa con sus herramientas y la arregló. No me animé a ofrecerle plata, como era Peti sabía que ofendería su generosidad de vecino. Al día siguiente le llevé un rico vinito como atención, que -obviamente- terminamos compartiendo juntos”. (Gonzalo Garcés) Romerito (como Adri le llama a Peti) fue mi vecino y un amigo. Un amor de persona. Nos reíamos recordábamos que hace muchos años había tenido un papel actoral, apareció en un documental que me hicieron para la RAI en una escena conmigo en el bar. Me traía el pedido a
Así recordamos lxs vecinxs a Hermógenes “Peti” Romero, como un hombre noble, vecino nuestro durante 40 años. Cuando planeaba volver a su Corrientes querida, a la casita que estaba construyendo para cuando se jubilara, la vida lo hizo encarar con valentía una nueva etapa: la lucha por mantener su trabajo y el de sus compañeros, cuidar esa esquina que era su segundo hogar y el de muchos vecinos.
fotos: Gonzalo Garcés.
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la mesa, era muy joven. También en una película que hicimos con Eva Baratta, yo estaba viendo la novela y como no quería bajar le tiraba a Romerito un hilito y él me mandaba la comida para arriba. ¡Cómo me va a faltar!” (Adriana Pérez). “(…) Desde que se fue Peti no pude pisar más la pizzería. Fui a saludar a sus compañeros a los pocos días, pero cada vez que paso por la puerta se me hace un enorme nudo en la garganta, por la tristeza que
Lo recordamos así con su uniforme y su derrame de facha, amasando, atendiendo gente, arreglando caños, bailando chamamé, pispeando el ambiente, bacheando, haciendo delivery en bici, entregando viandas a lxs necesitadxs del barrio; siempre con su mano extendida a la comunidad. Eligió dejar su casa y su tiempo el 15 de junio pasado en la esquina de Defensa y EEUU. Nosotros, sus vecinos, honramos su vida, su generosidad y su ejemplo. Permanecerá en esa esquina del corazón de San Telmo y en los nuestros, como esos trazos indelebles que no tienen otro destino que grabarse a fuego en las fibras más hondas de la vida. Cecilia Calderón
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Michelangelo Tarditti
“Soy un obrero del teatro”
imann. Interpreté al Che durante dos temporadas. Hago mucho más teatro que cine. Intervine en “The Pope” (“El Papa”), una película para Netflix, que narra el pasaje de Ratzinger (interpretado por Antony Hopkings) a Bergoglio (que encarna Jonathan Price). Ahí interpreté a un periodista argentino que cuenta la crisis del Vaticano. ¿Qué proyecto tenés? Ahora salgo de gira con “La distancia…”. Voy a Santa Fé, San Luis y La Pampa. Cuando vuelva voy a hacer otra función en La Botica y estoy esperando el estreno de mi primer protagónico en cine y en inglés, que filmé en Salerno (al sur de Italia) en enero: “Las cosas como están”. No sé cuando se estrenará. Y el 15 de septiembre me vuelvo a Roma.
C
on el mismo nombre que el genio del Renacimiento italiano, Tarditti nació para ser artista. Actor, cantante y dramaturgo, acaba de protagonizar su obra “La lontananza é come il vento” (“La distancia es como el viento”) en La Botica del Ángel (Luis Sáenz Peña 543, CABA). El unipersonal autobiográfico es un homenaje a los italianos llegados a la Argentina a inicios del 1900, con canciones de Doménico Modugno, Gigliola Cinquetti, Nicola di Bari y Luigi Tenco. Con unos pocos elementos de escenografía -apenas una banqueta, una pequeña mesa, un teléfono, una valija y dos banderas-, Tarditti recorre la historia de su abuelo a través de las cartas que él enviara a principios del siglo pasado. Solo, en el mismo escenario en el que debutaron artistas de la talla de Susana Rinaldi, Nacha Guevara y Pepe Cibrián -entre otros-, Tarditti va hilvanando la obra con testimonios escritos y orales con las canciones que fueron famosas en los años sesenta y setenta. Michelangelo canta con los brazos abiertos, ensaya unos pasos de baile y agradece a todos los que aportaron algo a la pieza. Incluso, terminado el espectáculo, saluda uno a uno a los espectadores. El actor recibió a El Sol en su casa de Monserrat, porque con tantos días de frío y lluvia no sale de su departamento para cuidar su garganta. “Esta obra en realidad es una excepción en mi carrera, ya que normalmente trabajo con textos de Jorge Luis Borges. Soy un estudioso del gran autor argentino, hice una trilogía: “Borges y yo” (basado en “El Aleph”), “De tango y de suburbio” (inspirado en “El hombre de la esquina rosada”) y “Borges, mágico Borges” (cortometrajes, de 15 minutos cada uno, sobre siete cuentos del escritor)”, explica Tarditti, que estudió Filosofía en Italia y realizó dos tesis sobre Borges. Nació en La Pampa, hijo de padre ferroviario y madre ama de casa. Em-
pezó teatro en su adolescencia y a los 18 años vino a Buenos Aires, donde estudió con maestros como Roberto Durán, Hugo Marín y Alejandra Boero; entre otros. Paralelamente debutó como cantante en el Vittori Club Jazz, una orquesta de jazz de Venado Tuerto. “Desde chico tuve la vocación definida, llevo toda la vida dedicada al espectáculo”, cuenta Michelangelo. El Sol: ¿Cómo te repartís entre Buenos Aires y Roma? M.T.: Vivo allá desde hace 30 años y vengo a la Argentina dos o tres meses al año. Hice una publicidad para Aerolíneas Argentinas a fines de los años 80 y pedí un pasaje abierto por un año. Luego gané una beca de estudio para estudiar teatro en el Piccolo Teatro di Milano y, además, trabajé en publicidad; me fue bien y me quedé. Fui asistente del gran director Giorgio Strehler en Milán, pero como el cine se hacía en Roma, fui hasta Cinecittá a dejar mi currículum y al poco tiempo me llamó el asistente de Ettore Scola. Fue una emoción enorme: filmé 10 días con él “Il viaggio di Capitan Fracassa”. Y allá formaste “Teatro Argentino”… Hace 20 años adopté esa figura legal y con ella hicimos quince espectáculos, la mayoría de ellos dedicados a chicos de 3 a 6 años en escuelas romanas: con temáticas didácticas hablamos de los cuatro elementos de la Naturaleza, de los sentidos, de la estructura del cuerpo humano, del medio ambiente, de la alimentación, etc. Más tarde, con Susana Tedesco Gargiulo y Juan José Trejo, formamos la compañía “Los Tri Tre Tres”, con la que recorrimos toda la Argentina. Esa fue mi primera autogestión. En la obra “La distancia es como el viento” te definís como “un obrero del teatro”. Sí, en general todos mis trabajos son “autogestivos”. En Roma hice “Cuestiones con Ernesto Che Guevara”, basado en una obra escrita por José Pablo Fe-
¿Cómo te llevás con las nuevas tecnologías? No podemos negarnos a la evolución: hoy Netflix o Amazon, son plataformas que están bien, son necesarias. Me parece que Internet es un evento fundamental que marca un cambio de la historia. Es muy útil, como todo lo nuevo, pero también conlleva su lado negativo. Walter Benjamin, filósofo del “modernismo” habla de la técnica con respecto al arte, que permite la difusión por ejemplo de una obra, que puede llegar masivamente al público, que de otro modo no llegaría. Por supuesto no es lo mismo ver perso-
nalmente una obra de Da Vinci que verla en una foto a través de una pantalla. Pierde el “aura”. Pero la técnica debería estar en función del servicio. Ahora se dice que los celulares generan incomunicación. En realidad el teléfono es muy útil, ahora si estamos almorzando y cada uno está chateando por su lado, es otra cosa. Como decía Aristóteles todo tiene un punto de equilibrio, el “justo medio”. ¿Además sos corresponsal para un diario de Miami? Sí, escribo comentarios de teatro y cine para el diario “De Norte a Sur”, que sale en Miami en papel y en la web. Y también para un medio argentino, llamado “Desde el pie”. Así esté en Buenos Aires o Roma, hago una interpelación filosófica de lo que me gusta. No hablo de lo que no me gusta. ¿Cómo es tu relación con San Telmo? Voy todos los domingos, solo o con amigos, a tomar un café y a caminar. Tengo amigos en la feria. Creo que barrios como San Telmo y Monserrat deberían defender su estilo. Olvidarnos de las raíces no está bien. Hay ciudades con edificios hermosos que han sido destruidas, deberíamos respetar la fisonomía. Conservar la tradición es importante. Texto y foto: Diana Rodríguez
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EL SOL DE SAN TELMO
EL SOL DE SAN TELMO
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ábado lluvioso y frío. Voy al encuentro de Edgar Pereyra, que tiene un kiosco de diarios en Perú y México. Siempre llamó nuestra atención por su bonhomía, cuando todos los meses le entregamos El Sol para que puedan leerlo nuestros vecinos y ese fue el pretexto para conocerlo un poco más. Me recibe con la cordialidad de siempre y comienza la charla contándome que llegó a San Telmo “en el año 1981 desde La Toma -San Luis-. Tenía 25 años y vine con un par de amigos a pasear, porque una hermana mía vivía en Carlos Calvo 339 y otra frente al Parque Lezama. Me gustó, conseguí trabajo y me quedé, aunque los otros se volvieron”. ¿Le costó mucho conseguir trabajo? No, la situación del país era diferente, había opciones. Siempre trabajé en fábricas: en Pasta Mayore, que era de fideos, pasé por todos los puestos y fui aprendiendo. Lo más delicado es el secado, ya que la masa pasa por diferentes máquinas donde se le va dando formas y cortando hasta que entra en el secadero en masa cruda. Si no se seca muy bien, se hace harina en el agua. De allí pasé al Hogar Obrero, donde fui supervisor de Planta con personal a cargo y manejo de producción. Luego lo hice en Silvino Llaneza e Hijos, una de las principales cadenas de supermercados, que llegó a tener 85 sucursales. Después se llamó El Más Gauchito y Sumo, hasta que la compró Química Estrella. Esta era
AGOSTO 2018 - 11
“A mis hijos les inculqué la lectura” una gran empresa multinacional, tenían: en Barracas la arrocera Gallo, frente al Parque Lezama la yerba Cruz Malta, en Del Viso la marca Arlistan y compraron la marca Pan Dulce Musel y Marcolla. Siempre estuve en la parte de panificados, hasta el 2006 cuando presentaron la quiebra. ¿Cómo llegó a tener el kiosco de diarios? Lo compré con una indemnización, para mi señora -Olga Robledo, que había trabajado como supervisora en el Supermercado La Gran Provisión hasta tener a nuestros hijos- pero al poco tiempo enfermó y, en 2008, falleció. El kiosco quedó a cargo de mi hijo Darío que trabajaba en él mientras estudiaba traductorado de inglés en el Lenguas Vivas. Cuando se recibió, se fue a vivir a Australia por dos años y la posta la tomó mi hija Natalia, quien también está terminando la carrera de Letras en la Facultad de Filosofía y Letras. A mis hijos siempre les dije que debían estudiar y trabajar, pero sobre todo les inculqué la lectura. Cuando traigo El Sol, me lo recibe usted… Los fines de semana lo atiendo para que mi hija pueda descansar o hacer algo que necesite. En la semana hago el reparto con mi amiga Blanca (su perra) que se levanta
conmigo a las cinco de la mañana. Cuando llega mi hija se queda y entro a trabajar en la Cámara de Propiedad Horizontal, en la parte administrativa, como persona autorizada para hacer los trámites de la entidad. ¿Siempre vivió en el barrio? Sí. En Carlos Calvo 339, luego en Chile 545 y de ahí pasé a Chile 536. Mis hijos nacieron en San Telmo: Natalia hizo el jardín en el Instituto Integral del Sud -recuerda que en esa época, la fiesta de fin de curso la hacían cortando la calle Defensa- y luego fue al Inmaculada Concepción y Darío hizo hasta 4to. Grado en el Cnel. Suárez y después también en el Inmaculada. ¿Cómo ve a San Telmo? Cambió mucho. Con la gente amiga que vivió acá toda la vida, como Amalia -la dueña de la agencia de quiniela de Chacabuco y Chile, cuya familia vivía alrededor del mercado- comentamos que antes todos se conocían. Por ejemplo mi hermana vivió muchos años, luego se fue y una vez cuando vino se encontró con una persona que le dijo: “Cómo no me voy a acordar de usted… tiene dos hijos varones….” ¡Increíble, eso solo pasa en San Telmo! La mayoría tenemos la misma sensación de desagrado, porque se ha perdido el espíritu del barrio. ¿Son positivos esos cambios? Me encantaba ir a caminar los domingos al mercado para ver los puestos de fruta, verdura, almacén, etc. y ahora me encuentro con una panadería francesa, un local de comida mexicana y todo es así. No entiendo a los turistas que vienen a buscar cosas típicas a San Telmo, porque lo de aquél entonces ya casi no existe, se parece a Palermo que es totalmente comercial. Para conocerlo realmente hay que pasear durante la semana, cuando por sus calles andamos los vecinos. Si no, es imposible. ¿Cuál es la idiosincrasia de nuestro barrio? Conocernos y saber quiénes somos. Encontrarnos en la calle con un abrazo, saludarnos y ponernos contentos solo de vernos. Es un lugar formado por generaciones de familias. Por ejemplo un sábado fui con mi hijo al mercado a comprar carne en el puesto 54, hacía tiempo que no iba y uno de los carniceros le dio un caramelo y le dijo: “Yo te conozco de chico cuando te parabas en el banco para que te diera un caramelo” ¡Eso es! ¿Y en cuanto a su estructura? Veo el deterioro. No se han cuidado los empedrados y las reparaciones han sido mal hechas. En la calle Defensa se hicieron arreglos y está todo hundido y roto. Lo mismo en Chile o Perú donde se levantó el asfalto, se hizo nuevo y otra vez está deteriorado; además, no hay seguimiento. Lo mismo las veredas… una cosa que nunca vi es que se puso concreto, de un espesor bastante grande, para colocar arriba las baldosas. Al poco tiempo, se levantó todo para la fibra óptica. Se hacen inversiones y la plata cae “en saco roto”. Así todo… ¿La gente compra diarios y revistas?
Salvo este último mes, que notamos una merma, no tuvimos problemas. Se consume mucho La Nación, también Página 12 que -generalmente- lo lee la gente de la cultura quienes, incluso, vienen a buscarlo desde calles más lejanas. Crónica y Diario Popular, por acá casi no se venden. Al haber oficinas hay un cierto poder adquisitivo que consume las colecciones, pero a una o dos cuadras no es lo mismo, ya que -en general- vive gente mayor y eso casi no lo compra. ¿Qué personas conocidas viven en la zona? Un hombre muy serio y excelente cliente fue Juan Carlos Gene, gran actor y dramaturgo -Director del Teatro San Martin; Presidente de la Asociación Argentina de Actores- que vivía en Perú 635 y tenía su teatro cerca; el cantante de tangos Guillermo Fernández que está en Carlos Calvo al 600; el periodista Reynaldo Sietecase, a una cuadra de acá; el Arq. José María Peña -creador del Museo de la Ciudad y la Feria de San Telmo- vivía en el piso 4 de México 547 y era cliente nuestro. Una vez mi hermana -que vive en San Luis- estaba en una consulta odontológica y viendo una revista, mientras esperaba que la atendieran, se encontró con una foto de él comprándole a mi hijo Darío en el puesto ¡No lo podía creer! Martín Céspedes, realizador audiovisual y su padre muy vinculado a la literatura; la bailarina y coreógrafa Ana María Stekelman; otros nuevos, como Graciela Ocaña que vive en Perú al 600. Y hay muchos más, que ahora no recuerdo los nombres. ¿Cómo imagina el futuro del barrio? Como Palermo, porque está perdiendo todo lo que lo hizo popular. Cuando uno quiere hacer una mala comparación dice que se parece a Palermo y debo decir -sin ofender a nadie- que no es un halago, porque la gente que vive hace varias generaciones aquí no es lo que quiere para el barrio. Hay mucha gente en San Telmo que tiene otra visión social, lo único rescatable es que no hay tantas casas tomadas, ahora está lleno de hostels. ¿Si lo tuviera que definir? Lo que enamora es esa cosa que tiene de barrio. Es como la casa de uno. El otro día se accidentó un vecino a unas cuadras de acá y no querían decirle a la señora para no asustarla, entonces me dijeron que le avise a la hija, porque sé dónde vive. Los vecinos me conocen, saben que pueden contar conmigo para lo que necesiten porque son como mi gran familia. Texto y foto: Isabel Bláser
12 - AGOSTO 2018
EL SOL DE SAN TELMO