Opinión Sábado 28 de Septiembre de 2013
DESARROLLO SUSTENTABLE POR RODRIGO NAVARRO
Los pasos de Paty conducen a Sierra Gorda
Y
a le he platicado querido lector que este proyecto de Comunicar para Conservar debe mucho al Fondo de Comunicación y Educación Ambiental, FCEA. En 2008 trabajando para el gobierno de Cozumel obtuve una tercera beca por parte del Fondo para un Curso de Cambio Climático en la UNAM y al año siguiente otro para deforestación en la Reserva de la Biósfera de Sierra Gorda. Al triunfo de la guerra de independencia mexicana, que no fue tal, tomó como modelo el esquema de organización del Virreinato, es decir un exportador de recursos y riquezas hacia el exterior, y de ahí para el real, así hemos continuado. Hemos dicho reiteradamente en este espacio sobre desarrollo sustentable que el problema ambiental viene del uso desmedido de los recursos naturales, el que exportamos nuestra riqueza natural, seguimos siendo una colonia. Sierra Gorda, proyecto que nace de la creación en 1987 del Grupo Ecológico Sierra Gorda I.A.P. (GESGIAP) brota para organizar a las comunidades en su territorio a realizar acciones de apropiación de la tierra a través de la capacitación (educación ambiental esencialmente), apoyo comunitario y conservación ambiental. En el más puro estilo del desarrollo sustentable, que la vida pueda sustentarse sin dañar a otras formas de vida. En 10 años de labor junto a científicos y técnicos de la UNAM que tenían trabajando ahí 10 años antes, logran la creación de la Reserva de la Biosfera de Sierra Gorda el 19 de mayo de 1997. Séptima en tamaño dentro de las áreas
naturales de este país (ocupa la cuarta parte del territorio de Querétaro), es la más rica en diversidad de Ecosistemas. Va desde el semidesierto a la sierra, pasando por una meseta y de nuevo la sierra que mira hacia el Golfo de México en la frontera con San Luis Potosí. Así tenemos desde matorral xerófilo (un mezquital, que es lo que va a quedar de este país si el Cambio Climático nos alcanza), bosque de galería, bosque mesófilo, bosque de encino, bosque de confieras (pino) y del lado de la sierra hacia el golfo, bosque tropical. Son más de 1,800 especies de plantas y 500 de vertebrados. Ha sido reconocido por Bird Life International como un sitio de importancia para la conservación de las aves en México (2004). En 2001 recibió el reconocimiento, junto con 1 millón de dólares al año durante 7 años, en coordinación con la CONANP, como Reserva Mundial de la Biosfera vigilada por la UNESCO. Ahora se han reorganizado al internacionalizar su acción y sus productos ambientales: la conservación de la biodiversidad en la reserva de la biosfera a través de la valorización y conservación de los servicios ambientales, la educación y el combate a la pobreza. Han tenido un éxito extraordinario. Contrataron a Price Waterhouse Coopers, empresa líder en la reorganización financiera de las grandes empresas a escala global. Internacionalizaron los productos y servicios del Grupo Ecológico Sierra Gorda, de Bosque Sustentable y de Productos y Servicios Turísticos Sierra Gorda (su empresa de ecoturismo y productos: artesanías, textiles,
ALGO MÁS QUE PALABRAS POR VÍCTOR CORCOBA HERRERO
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Los espejos del otoño
e gusta verme en los espejos del otoño bebiendo los silencios de las tardes con sabor a melancolía. Ciertamente, todo parece despoblarse en la fuente de los lenguajes. Atrás quedan tantas inquietudes, hoy terminadas en nostalgia. La vida se nos escapa más rápido de lo que pensamos y son los recuerdos los que permanecen en las pupilas de nuestras soledades. Tal vez, como el poeta, yo también teja abecedarios para la noche en que ya no seré. Ante semejante visión, que nos marca el pasar del tiempo, uno no puede permanecer indiferente, necesitamos trenzar pensamientos, cultivar sueños, injertar esperanzas, vivir como un sirviente por entre la arboleda caída, y hasta morir sintiendo los latidos tristes de nuestras miserias. Tras los espejos del entretiempo hay
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DIARIO EL QUINTANARROENSE
una lección, tan densa como andante, que nos prepara para el invierno de la vejez, para lo hora de la muerte. Claro que todo me conmueve, claro que tengo ganas de vivir, pero mi alma -como el otoño- está ya dispuesta a esa cercanía de diálogos que no pueden expresarse nada más que con la mirada. El paso del tiempo difumina los naufragios y suaviza sus aspectos dolorosos. Evidentemente, en la existencia de cada ser hay sobradas cruces y tribulaciones, pero también momentos de amor inolvidables. No obstante, la experiencia del camino enseña que, con los años, los mismos sinsabores cotidianos contribuyen con frecuencia a la madurez del ser, a templarnos por dentro y por fuera. Sin duda, en los cristales otoñales hay un espíritu de entendimiento, de sembrar concordia a pesar de tantos con-
verduras deshidratadas, conservas de frutas orgánicas, que obtuvo en 2006 el premio “Turismo para Mañana” del Consejo Mundial de Turismo). Estas tres empresas junto con otras tres, Joya de Hielo, Sierra Gorda Ecoturs y Viva Sierra Gorda conforman la Alianza para la Conservación Sierra Gorda. ¿Cómo han sido tan reconocidos y exitosos? El premio de la UNESCO, Reconocimiento de la Convención RAMSAR, Green Apple; premios de conservación de SEMARNAT, de las Fundaciones Ford, Rolex y Pfizer; el Premio Energy Globe de sustentabilidad, el de la Fundación BBVA; el premio Global Development Network; últimamente el premio a la Estrategia de desarrollo y mercado de Productos, y ahora el “Campeones de la Tierra” de la ONU para su directora Paty Ruiz Corso, solo por mencionar algunos. Primero porque metieron ciencia. Midieron la erosión del suelo y demostraron que sembrando se reduce en ocho veces el acarreo de sedimentos y suelo por el agua. Midieron la recarga al acuífero y la precipitación pluvial. Calcularon la producción de biomasa, y crearon índices que les dijeran cuánto podían cortar sin poner en riesgo a los escosistemas. Hicieron el inventario de carbono de los ecosistemas y crearon un mecanismo menos oneroso que los internacionales para los bonos de carbono. Y sobre todo se han ligado a organismos internacionales serios y que aportan recursos. Para el combate a la pobreza extrema (que por supuesto que existen en los 5 municipios que comparte la reserva) consiguen casi medio millón de dólares cada año. Han demostrado que conservar y hacer una explotación racional de los recursos naturales es un negocio rentable: cobran 14 millones de dólares al año por servicios ambientales: recarga al acuífero, secuestro de carbono y producción de oxígeno. El área de Sierra Gorda valorada en 66 millones de dólares produce millones cada año en productos financieros. Tienen mas de 1,100 millones de dólares en productos boscosos, si
los explotaran como se hizo en Chiapas por una ganancia monetaria, perderían los servicios ambientales, el dinero que producen y sobre todo la vida que generan de un jalón. Eso no lo entendieron los ganadores de la revolución mexicana que daban cañonazos de 50 mil pesos (en realidad explotaciones forestales que terminaron con el 75% de los bosques de este país). No están exentos de problemas. Crecimiento excesivo de la población, tala clandestina, incendios, etc. Pero han apostado a la educación, recibieron un premio español por su labor en educación, están asociados al SECADESU (el organismo de educación de la SEMARNAT) y sobre todo al desarrollo social. Muchos habitantes de la comunidad más de 35 mil familias se benefician directa o indirectamente de los productos de las empresas creadas por hombres y mujeres de comunidades campesinas. Treinta mujeres de la comunidad la Colgada crearon la empresa de bordados y textiles; cerca de mil apicultores comercian la miel y sus productos; 753 mujeres y 500 hombres se benefician del “oro verde”, el orégano con certificado orgánico que ya se está introduciendo a Europa. Ocho trabajadores comenzaron con el proyecto de cerámica y ahí está tomando vuelo. Con modernos esquemas de manejo intensivo y pastoreo ecológico la empresa Derivados del Campo emprendida por ganaderos de la región está demostrando su viabilidad y rentabilidad. Se basa más en la producción de derivados lácteos que en la producción de carne tan onerosa en términos de terreno, granos y agua. El premio a Paty Ruíz Corso es un premio a todos los habitantes de las 638 comunidades de 5 municipios que habitan en Sierra Gorda que demostraron que conservar y hacer una explotación racional de los recursos es un negocio muy rentable.
tratiempos vividos. Es el momento de la penetrante hondura, de abrir las puertas del alma, de explorar la poesía prendida en los rojos atardeceres, de examinar quién soy y por qué vivo, de reconocer que existo y que no puedo engañarme. La vida, al fin y al cabo, es un baúl de sorpresas por descubrir. A veces uno existe porque alguien te imagina así. Otras veces porque oigo en la brisa mi voz. Es cuestión de pensar, de sentir el pensamiento, de concebir el sentimiento, de abrigar la vida con la vida de unos y de otros. Esto es muy importante para hermanarse y poder construir una ciudad humana en medio de tanta deshumanización. Son las lunas de la madurez, pues, las notas de un pentagrama acorde con las cosechas, a las que hay que estimular en un desarrollo equitativo para frenar conflictos innecesarios. Para ello, tenemos que dejar fluir nuestro espíritu, entrar en sintonía con nuestras habitaciones interiores, escuchar lo que dicen las personas sabias curtidas según las estaciones cobijadas. Todos somos, individual y colectivamente, responsables de la inclusión generacional. Tenemos que aprender a vivir unidos para
forjar un futuro para todas las edades. Fuera muros y, en todo caso, sí hay algo que levantar que sea la esperanza y el anhelo de vivir, sabiendo que a un mortal sólo le puede emocionar otro mortal. Con razón, se dice que cada cual tiene la edad de sus emociones, y es en las añejas flamas donde se refleja mejor el envoltorio de las vivencias. Nuestra acción, cuando está inspirada y sustentada por el amor, hasta en el atardecer es un huerto florido. De este modo, también en días helados los destellos dan pie para discernir y proyectar de un modo nuevo el camino. No cabe, por consiguiente, la resignación. Esto significa que debemos ensanchar nuestro horizonte, dando espacio a la gratuidad como expresión de armonía. Ahí está el otoño, que aunque la rosa se deshoja, queda su armónico perfume injertado en nuestro corazón y sus pétalos en el recuerdo de lo que fue..., y de lo que volverá a ser..., porque las rosas que en verdad lo son, siempre retornan a un campo de vida.
Columnista
Escritor corcoba@telefonica.net