El Cuaderno 39

Page 8

8

elcuaderno

EL TALLER DEL TRADUCTOR

Número 39 / Diciembre del 2012 / 1ª quincena

La cotraducción de poesía ¿Cómo trabajan de manera conjunta dos traductores de poesía cuyas lenguas nativas sean distintas? Nos serviremos de la poesía completa de Claudio Rodríguez con la intención de ilustrar el trabajo de una traducción conjunta, partiendo de la base de que el que aquí se presenta no es el único modo de llevar a cabo semejante tarea, sino un análisis, más o menos pormenorizado, de la labor que hemos llevado a cabo en los últimos años.

In memoriam Claudio Rodríguez • MICHAEL SMITH / LUIS INGELMO •

El idioma nativo de Smith es el inglés, mientras que el de Ingelmo es el español. En nuestra opinión, una traducción conjunta sólo podrá ser satisfactoria si ambos traductores, dejando al margen cualquier habilidad literaria que puedan además poseer, tienen un dominio por encima de la media del idioma nativo del otro. Esta competencia no tiene por qué ser equilibrada entre ambos traductores. Lo que de verdad importa en este sentido es el hecho de que los dos desplegamos durante el proceso unas habilidades lingüísticas propias de quien se muestra competente en una lengua que no sea la suya propia. También es destacable el hecho de que ambos le dedicamos a nuestra labor traductora una cantidad de tiempo notable, que contamos en nuestro haber con una estimable producción de traducciones y que, por fin, los integrantes del tándem traductor somos, a la vez, escritores. Una observación acaso de Perogrullo: Rodríguez hace un uso mínimo, por no decir inexistente, de la narrativa, lo cual resulta muy ventajoso para el traductor. En su lugar, influido por los románticos ingleses, los simbolistas y surrealistas franceses, por las intuiciones de Dylan Thomas, así como, hasta cierto punto, por algunos modernistas ingleses, como es el caso de T. S. Eliot, Claudio Rodríguez se siente en la necesidad de explorar las posibilidades de la trascendencia, mientras que, a un mismo tiempo, se involucra en una apreciación celebratoria y extasiada del mundo natural, en

Nota biobibliográfica Michael Smith reside en Dublín, ciudad en la que nació en 1942. Fundador de la editorial New Writers’ Press y de la influyente revista The Lace Curtain, ha publicado cinco poemarios propios, reunidos en el 2009 bajo el título Collected Poems. Sus traducciones del español incluyen, entre otros, libros de Pablo Neruda, Antonio Machado, Miguel Hernández, Quevedo, Góngora, César Vallejo y García

Claudio Rodríguez, por Ana Franco (carboncillo/pastel, 100 µ 70 cm)

Lorca. Como editor, produjo sendas antologías de J. C. Mangan y Thomas Wyatt. Es, asimismo, miembro de Aosdána, la Academia Nacional de Artistas Irlandeses. Luis Ingelmo (Palencia, 1970) reside en Zamora. Licenciado en filología inglesa (Universidad de Salamanca), filosofía (uned) y pedagogía (DePaul University, Chicago), ha traducido poemas de Charles Bukowski, William Wantling y Trevor Joyce para

revistas españolas, así como obras de Natasha Trethewey, Wole Soyinka, Derek Walcott, Larry Brown, Martin Carter y Thomas MacGreevy. De igual modo, tradujo el estudio de Michael Mudrovic Abrir nuevos caminos: la poética transgresiva de Claudio Rodríguez. Es editor de una antología bilingüe de J. A. Villacañas y autor de La métrica del olvido, libro de relatos. Juntos, Smith e Ingelmo han traducido del español al inglés poemas de

particular el territorio de su Zamora natal. A nadie le resulta ajeno que la obra de Vicente Aleixandre y las vicisitudes personales del poeta empujaron a Claudio Rodríguez a ir más allá del naturalismo (entendido éste como concepto pictórico o, incluso, filosófico) de un, pongamos por caso, Antonio Gamoneda, quien, por así decirlo, se instaló en una poesía de la naturaleza de fácil acceso e impecable factura comparable, por así decirlo, a una poesía de la naturaleza de fácil acceso e impecable factura que ocupa la obra temprana del irlandés Seamus Heaney. Cuando Rodríguez emplea un término como ebriedad para expresar su estado de embeleso con el mundo de la naturaleza, ¿cómo puede el traductor ir más allá de la palabra rapture, que implica algo más que el profundo disfrute de los fenómenos naturales que se nos revelan para nuestro asombro? Inebriation, que es la palabra inglesa por la cual optamos al final, nos parecía una elección preferible a la otra de intoxication, pues ésta acarrea consigo un exceso de equipaje relacionado con la embriaguez y el alcoholismo, incluso con el desvarío, algo que nos parecía del todo impropio. El vocablo euphoria, por otra parte, se nos antojaba en exceso delgado y provisional como para hacerle cargar con el peso de la «ebriedad» claudiana. Inebriation, en fin, se reveló como el término que mejor amalgamaba no sólo el más sencillo de rapture, sino que incluía en sí el sentido celebratorio de la vida, el ser consciente de que ésta es una aventura interminable, visión que permeó toda la obra de Rodríguez hasta su última colección. De igual modo, celebration es una palabra de la que se ha abusado en inglés y que tiene connotaciones de cumpleaños y actos similares. ¿Cómo darle, entonces, a la «celebración» de Rodríguez el calado que el poeta había planeado para ella? Nuestra respuesta en este caso concreto fue permitir que el contexto de la palabra le concediera al término celebración la profundidad

Pablo García Baena, José Carlos Llop, Ana Rosetti, Roberto Bolaño, Enrique Juncosa y Severo Sarduy para diversas publicaciones, la obra poética completa de G. A. Bécquer y Claudio Rodríguez, así como antologías de Elsa Cross, Verónica Volkow, Antonio Machado (padre) y poetas andalusíes. En la actualidad, ultiman una selección de la obra del salmantino Aníbal Núñez, mientras, además, preparan una antología de poemas de Fernando de Herrera.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.