De
•
uevesa ENRD
Una celda para la Barbie nisia ya habia pasado por la rutina -que en ella nunca es tal- de acomodarse por segunda vez frente a su improvisada coqueta, ahora compuesta de un espejo de razonables dimensiones, ovalado, apoyado en una superficie con toda la utileria que reclama el cuido de su imagen, que aun en el rigor carcelario no pierde compostura, como cuando asorno una de sus amigas, que al verla encerrada estallo en llantos, pero ella, energica, la pare en seco: -j No llore. No me 110re, que yo no he muerto! Era una media tarde de diciembre. Fresca y suave, hasta que llego esa mujer que provoco la interrupcion del dialogo que Anisia Risi de Mercedes sostenia con un ejecutivo de medios, que se define como amigo personal, en el que ella aparecia fuerte y decidida. Firme, aunque la expresion penosa de su amiga visitante no pudo evitar que sus ojos se volvieran vidriosos. Ahf esta Anisia, en la preventiva de Najayo, aunque no sola ni en una solitaria, donde el dia extrafiamente puede pasar rapido por la abundante cantidad de personas que debe recibir y las cuales se acomodan en el escenario que ella misma se ha ido construyendo, con la delicadeza de una dama de su c1ase, consciente de 10 que significa mantener la apariencia, y no solo de animo, sino y sobre todo del cuerpo. ~Se acostumbra Anisia a la prision, 0 las cuatro paredes, limitadas por cuatro metros cuadrados se adecuan a su ocupante? Solo ella tendra la respuesta definitiva, pero el que descubre aquella habitacion que Anisia se ha preparado en muy poco tiempo, porque tal y como ella proc1ama nada de 10 que hay ahf se 10 han concedido: -Todo esto es mfo, 10 traje 0 me 10 trajeron, porque aquf solo encontre
las cuatro paredes y el piso-, sabra que se esta dando una simbiosis, una adecuacion de tal para cual, un cuarto donde se concretiza la prision, pero que se ha convertido en escenario propio de esta mujer. Este es su espacio vital, con el que habita, y se acomoda a la personalidad de su huesped. Concebido originalmente como area para el laboratorio de deteccion bacteriologica de la prision luce recien pintado, color arena y techo blanco hueso, con su limitada dimension de cuatro por cuatro, pero con bafio separado, brillosarnente higienizado. Allf han sido cuidadosamente colocados un box spring de una plaza, flanqueado al fondo por el tocador, bien nutrido de utilerias y cosmeticos. Variadisimos detalles para realzar la belleza femenina, prenda singular en Anisia. Un abanico de pedestal y otro abanico-aire-portatil contribuyen a afirmar la percepcion de que la temperatura es bastante fresca, al menos para el perfodo en que fue visto el escenario, una tarde de diciembre, cuando las brisas se vuelven suaves, y para muchos, romanticas.
30
DE 1995
A
0
Rumbo
0
DEL 4 AL 10 DE ENERO
Colocados en tramos laterales, a por 10 menos tres pies del nivel de la cama, se improvisa 10 que vendrfa a ser la miruiscula cocina de Anisia. Una greca, una tostadora y una licuadora ... Todo se complementa con una neverita ejecutiva, marron, tipo "japonesa", en la que hay jugos, dulces y otros alimentos refrigerables, y en la misma direccion, pero un tanto separados, un microtelevisor, y un toea cassette-compacto. A estas dimensiones carcelarias ha sido Iimitada Anisia, pero no 10 que a todas luces parece su voluntad. Firme, como toda batalladora. Aquella tarde 10 reflejo de nuevo cuando mando a callar la que pretendio brindarle solidaridad con llantos. Su glamour, su look, su feeling altos, en verdad no parece una prisionera. La compafiia permanente de cuatro personas, generalmente mujeres, que no la dejan sola para nada, atentas a cuanto desee, no deja espacio para la soledad. Anisia, en medio de su drama, esta aferrada aDios. Encima de uno de los tramos que les sirven de "comodas" se acompafia de dos imageries de aproximadamente doce pulgadas, del Gran Poder de Dios, full color. Y frente a sus acusadores, esta armada de un folleto fotocopiado de la ley 3489 que regula el regimen aduanal en la Republica Dominicana. Allf recibe a amigos y relacionados, con la altivez de siempre, con la misma cali dad de vestido y calzados que se le ve rumbo a la justicia 0 de retorno a prision o en la firmeza de su silencio cuando la abordan los medios de comunicacion.
EI momento de las lagrimas
C
uentan que las lagrinas solo estuvieron presentes cuando definitivamente se convencio de que no tendrfa 24 de diciembre en casa, con sus farniliares. Aque-